Jinrou E No Tensei Maou no Fukukan (NL)

Volumen 11: El Hijo del Héroe

Capitulo 11: Estilo Japonés

Parte 4

En cambio, Zagar había lanzado un asalto completo y Karfal cayó casi de inmediato. Sin embargo, la mayoría de los soldados de Karfal todavía se encontraban en la zona y la guarnición de Wajar se encontraba en perfectas condiciones. Si añadiéramos los guardias locales que tenían las aldeas, podríamos reunir una fuerza de unas 3000 tropas para presionar a Zagar.

El problema era que faltaba el rey de Kuwol, un hecho sin precedentes en la historia del país. Si algún soldado cerca de la capital hiciera un movimiento, tanto los ciudadanos como los nobles circundantes sospecharían que alguien estaba intentando un golpe. La falta de transmisiones de televisión y periódicos facilitaba la difusión de información errónea, incluso entre las personas bien informadas. La velocidad a la que habían proliferado los rumores de Zagar lo demostraba. No tenía que pensar en las ramificaciones políticas que tendrían sus acciones, pero teníamos que sopesar cuidadosamente todas y cada una de las acciones. Afortunadamente, Parker había vuelto para que yo pudiera utilizarlo.

“Parker, quiero asegurarme de que la persona que mató Zagar realmente era el rey. Nuestros planes futuros dependen de esa información.”

Ya estaba bastante seguro de que era él, ya que la familia real estaba manteniendo el silencio, pero necesitaba la confirmación. También necesitaba averiguar qué estaba haciendo la familia real.

***

Esperé a que cayera la noche y luego fui con Parker a las ruinas donde había ocurrido el asesinato. Amani solicitó acompañarnos, así que ella también estaba con nosotros. Pasar por la red de vigilancia de los mercenarios llevó algún tiempo, pero logramos llegar a salvo a las ruinas.

“Huele a muerte.”

“El hedor se pegará a mi ropa.”

Mis guardias hombres lobo se quejaron de la acritud en el aire, así que decidí usar magia para embotar el sentido del olfato de Amani antes de que pudiera percibirlo ella misma. Apenas podía soportar el olor a carne cocida, la podredumbre de los cadáveres sería demasiado para ella.

“Discúlpame.”

Toqué la nariz de Amani y lancé el hechizo de debilitamiento. Saber fortalecer un sentido o un músculo significaba saber cómo debilitarlo también, ya que eran dos caras de la misma moneda.

“Deberías estar bien ahora.”

“¿Eh? Bueno…”

Confundida, Amani se dio unas palmaditas en la nariz. Sus gestos realmente eran similares a los de Airia. Ya veo por qué Parker sintió que no podía dejarla sola. Cuando llegamos al pozo, Parker asintió.

“Puedo sentir un fuerte odio persistente aquí. Será difícil persuadir al espíritu de que regrese.”

“Pero puedes hacerlo, ¿verdad?”

“Por supuesto.” Parker sonrió. “Mi comedia es tan divina que incluso los espíritus estallan en carcajadas.”

“Por favor, no le digas juegos de palabras a este espíritu.”

“Solo bromeaba.”

¿De verdad lo estabas? Parker encendió una barra de incienso y sacó una ofrenda de hidromiel. Solo en momentos como estos parecía un verdadero nigromante.

“No te alarmes por mi voz. Mi nombre es Parker y soy un nigromante de la lejana tierra de Meraldia.”

La voz de Parker era más suave de lo habitual. Cuando el incienso se extendió por el claro, el olor a muerte comenzó a desvanecerse. Parker luego descorchó la botella de hidromiel y vertió su contenido en el pozo.

“Puedo decir que tu rabia por la injusticia de tu muerte está comenzando a desvanecerse, pero veo tus persistentes lamentos y te suplico que escuches mi llamado. Soy Parker, el oyente de los muertos.”

Podía sentir un cambio en el aire. Los métodos de persuasión compasiva de Parker eran casi idénticos a los de la Maestra. Había madurado mucho desde la última vez que lo vi.

Una niebla levemente resplandeciente comenzó a salir del viejo pozo. La figura de un joven apareció y desapareció entre la niebla.

“¡¿Su Alteza?!” Amani gritó y la niebla se hizo más fina.

Me volví apresuradamente hacia ella y le susurré, “Lo siento, olvidé mencionar esto, pero aunque los espíritus no tienen forma física, los ruidos fuertes emitidos por los vivos pueden dañarlos.”

“Ya veo, mis disculpas. Pero esa figura es, sin duda, Su Majestad, el Rey Pajam II.”

La forma de un espíritu estaba compuesta de recuerdos. Si bien las personas ocasionalmente se embellecían mentalmente, la mayoría al menos veía su propia apariencia como una versión aproximada de como los veían los demás. Esto probaba que era de hecho Pajam II quien había sido asesinado.

La expresión de Parker se volvió grave y preguntó en kuwolese fluido, “Soy Parker, discípulo de la gran Emperatriz Demoníaco que gobierna Meraldia. Me disculpo por llamarte tan de repente.”

La niebla débilmente reluciente respondió con voz suave, “No… no me importa… pero… ¿dónde estoy…? ¿Qué me pasó?”

Los muertos veían un mundo completamente diferente al nuestro. El espíritu de Pajam actualmente vagaba en la oscuridad entre esta vida y la siguiente.

“He oído que el capitán mercenario Zagar te mató. ¿Es esto cierto?”

Durante todo el tiempo, la voz de Parker se mantuvo suave. Después de un largo y frustrante silencio, la voz volvió a hablar.

“Sí… yo… recuerdo ahora… fui asesinado por un rufián llamado Zagar. Pensé que me encontraría con lord Veight… pero me engañaron…”

Un lodo negro comenzó a invadir la niebla blanca. Mierda, a este paso, se convertirá en un espíritu maligno. Me paré protectoramente frente a Amani, pero Parker tranquilizó con calma el espíritu de Pajam.

“He traído al verdadero lord Veight conmigo. Su Majestad, por favor dígale lo que le sucedió.”

¿Decirme? Parker ignoró mi confusión y continuó pacificando el espíritu de Pajam.

“Lord Veight es un héroe entre los héroes que no ha perdido una sola batalla en el continente norte. Posee gran conocimiento, sabiduría y coraje. No tengo ninguna duda de que puede despejar cualquier arrepentimiento persistente que puedas tener.”

Un momento. Las palabras de Parker lograron detener la propagación del lodo negro y la niebla se volvió gris una vez más.

“No puedo ver… dónde… ¿Dónde está lord Veight?”

Supongo que no puedo quedarme al margen de esto por más tiempo. Me arrodillé frente al espíritu de Pajam.

“Su Majestad, Pajam II. Soy el vicecomandante de la Señora Demonio de Meraldia, Veight Von Aindorf.”

Aprendí un poco sobre cómo conversar con los espíritus de la Maestra. Mientras el espíritu estuviera bajo el control de un nigromante, podría hablar con él.

Las facciones del rey se hicieron más claras y dijo, “Quería reunirme contigo, vicecomandante. Este complot para asesinarme no fue obra tuya, ¿verdad?”

“Nunca soñaría con hacer algo así. La razón por la que vine a Karfal fue para mediar una solución pacífica. Solo pretendía reunirme para advertirle de que no hiciera ninguna tontería.”

El rey ladeó la cabeza.

“…¿Advertirme?”

Realmente no quería molestar a un espíritu, pero sabía por experiencia que era mejor no mentir cuando se hablaba con uno. La honestidad era la mejor política, ya que los espíritus ya no tenían nada que perder.

Reiteré y dije, “Aumentar los impuestos en sus puertos solo perjudicará a sus nobles y ciudadanos. El dinero no crece en los árboles, Su Majestad. No puedes simplemente llevarte la recompensa que tu pueblo ha trabajado tan duro para ganar.”

Me di cuenta por su olor que Amani se estaba poniendo nerviosa. Probablemente estaba aterrorizada de que le respondiera a su rey. Sin embargo, yo era de Meraldia y, además, un famoso general del ejército demoníaco. No tenía nada que temer de un rey extranjero, sin importar si estaba vivo o muerto.

***

Sonreí con malicia, como corresponde a un general hombre lobo y dije, “He derrotado a innumerables hombres como usted, Su Alteza. Originalmente, planeaba enseñarle una lección dolorosa por cualquier medio necesario, sin embargo…” Suspiré, lamentándome por el hecho de que ya no era posible. “…Mi objetivo final era estabilizar la situación política de Kuwol para que las rutas comerciales de Meraldia no se vieran dañadas. Tomar tu vida solo provocaría más inestabilidad en el país, que es lo último que quiero.”

El rey reflexionó sobre mis palabras durante unos minutos.

“Ya veo… Así que mi muerte fue el resultado de mi propia estupidez…”

Asentí, ya que esa era la verdad.

“…Creí que, si hablaba contigo, esta crisis se resolvería”, murmuró Pajam en voz baja. Después de una breve pausa, comenzó a hablar de sí mismo.

***

Pajam II era el único hijo de su padre. No era un líder muy talentoso, por lo que Pajam I hizo todo lo posible para eliminar a los rivales potenciales de su hijo.

Como solo los hombres podían heredar el trono, obligó a todos sus parientes varones a convertirse en sacerdotes, eliminándolos así de la línea de sucesión. Viendo que no los asesinó a todos, al menos había sido más misericordioso que muchos de los nobles de Rolmund. De hecho, los miembros de la familia real que se integraban en la iglesia solían recibir un trato preferencial.

El problema era que Pajam II no tenía conocimientos de política o economía y no tenía interés en aprender a gobernar. Aparentemente, sin embargo, era un gran poeta y artista, pero esas habilidades no servían de nada en la esfera política. Cuando el padre de Pajam se dio cuenta de que era demasiado tarde, Pajam II era el único hombre disponible para heredar el trono. Pajam II se convirtió a regañadientes en rey y, durante un tiempo, las cosas funcionaron bien, ya que su padre se encargó de la mayor parte de los asuntos cotidianos del gobierno. Sin embargo, las cosas empezaron a empeorar después de la muerte de Pajam I.

“Quería dejar algo de valor para las generaciones de gobernantes que vendrían después de mí. Sabía que carecía de la habilidad para gobernar, así que esperaba usar mi talento artístico para dejar mi huella en su lugar…”

Hombre, ¿por qué todo el mundo está tan obsesionado con ayudar a las generaciones futuras? Bueno, supongo que no puedo hablar, ya que estoy financiando las universidades de Meraldia exactamente por la misma razón. Me tragué el sermón que estaba a punto de dar y seguí escuchando.

Pajam II fue un gran arquitecto y diseñó numerosos edificios para la capital. Desafortunadamente, no prestó atención a cuánto costaría construirlos.

“Me hizo feliz imaginar cómo los parques y palacios que diseñé conmoverían a la gente durante los próximos… siglos…”

Sé que esto no es asunto mío, pero realmente no puedo dejar pasar más esto.

“…Su Majestad, habría sido mejor dejar cosas que costaran menos de crear.”

Podrías haber compuesto algunas canciones o poemas, tal vez bailes o algo así. Era una regla férrea del universo que, si se gastaba más de lo que se ganaba, eventualmente se iría a la quiebra. No importaba si se trataba de una persona, una organización o una nación.

El rey bajó apologéticamente la mirada ante mi reprimenda. Parecía que al menos lamentaba sus acciones.

“Es demasiado tarde para lamentarse ahora… pero tienes toda la razón. En retrospectiva… ¿por qué estaba tan desesperado por construir tantas cosas?” La expresión de Pajam se volvió distante. “Solía ​​creer que un rey no era más que una figura decorativa vacía… No importaba quién se sentara en el trono, ya que eran solo una decoración simbólica que adornaba… la nación conocida como Kuwol…”

Parker inclinó la cabeza hacia mí. “Oye, Veight, ¿entiendes lo que el rey está tratando de decir?”

“No puedo estar seguro, pero me parece que la familia real tiene un sistema simplificado, lo que significa que el país puede funcionar bien independientemente de quién sea el rey, siempre y cuando no hagan nada estúpido.”

Honestamente, la familia real era principalmente un mediador entre los distintos nobles, por lo que en su mayor parte, no necesitaban hacer nada en absoluto. No era sorprendente que algunos reyes comenzaran a cuestionar cuál era el sentido de su posición. El hecho de que Pajam II fuera uno de ellos demostraba que no había sido tan estúpido como todos pensaban.

Si hubiera sido más un simplón, podría haber disfrutado de una vida fácil y aburrida y nada de esto habría sucedido. Desafortunadamente, debido a que había sido lo suficientemente inteligente como para cuestionar su propósito, terminó gastando el presupuesto del país en lo único en lo que era experto, el arte. Y por eso estamos ahora en este lío.

El antiguo emperador de Rolmund, Bahazoff IV, había sido similar. Había sido un gobernante mediocre, pero cuando se dio cuenta de que su muerte estaba cerca, ordenó la invasión de Meraldia para poder tener al menos un logro a su nombre. Todo el mundo está tan obsesionado con dejar su huella en la historia, eh. Sin darse cuenta de mis pensamientos internos, el espíritu del rey continuó hablando.

“Me asusté cuando los nobles costeros llegaron a reunir un ejército, pero no podía revocar mi edicto… Mi padre me inculcó que un rey nunca debería incumplir su palabra…”

¿Te preocupaba dañar la dignidad del trono o algo así? En ese caso, probablemente deberías elegir tus decretos con más cuidado… No quería seguir señalando las faltas del rey, así que decidí guardarme esta queja en particular.

“Pero entonces… escuché que vendrías a Kuwol, lord Veight… El esposo de la Señora Demonio había llegado personalmente a mi orilla… pensé que alguien de tu noble estatura podría… entenderme…”

No entendía del todo por qué estaba tan obsesionado, pero entendí que tenía sus razones para ser tan terco. Por lo que parece, Pajam probablemente sintió que admitir la derrota sería aceptar las demandas de los nobles y parecía pensar que un rey nunca podía admitir la derrota. Si ese orgullo era algo que la gente kuwolese consideraba una virtud, no cambiaba el hecho de que había sido asesinado como resultado de ello.

Ahora que lo pienso, las personas que pueden disculparse por sus errores y agradecer a los demás cuando reciben ayuda son probablemente las que perdurarán más tiempo. Tengo que asegurarme de que nuestro hijo crezca siendo alguien así. Además, tengo que esforzarme más en hacerlo yo mismo. Reverentemente incliné mi cabeza hacia Pajam.

“Su Majestad, el hecho de que buscó el diálogo y trató de evitar el derramamiento de sangre hasta el final demuestra que fue un rey digno. Juro que cumpliré su voluntad y protegeré su honor.”

Los delgados labios de Pajam se curvaron en una sonrisa. “Eso… me hace más feliz de lo que puedes imaginar… lord Veight… que las bendiciones del Mejire estén contigo…”

Pajam hizo una especie de gesto dentro de la niebla; probablemente era una bendición kuwolese. Si hubiera podido hablar con él mientras aún estaba vivo, probablemente hubiéramos podido frustrar las ambiciones de Zagar desde el principio. Sin embargo, ya era demasiado tarde para eso y teníamos que detener a Zagar sin un rey. En cualquier caso, probablemente sea mejor exorcizar al rey para que pueda pasar a la otra vida. Justo cuando pensaba eso, Pajam comenzó a hablar de nuevo.

“Creo que eres un verdadero amigo y por eso te confiaré mis dos secretos más importantes…”

¿Hm? Por la forma en que lo expresó, parecían secretos de estado terriblemente importantes, pero conociendo a Pajam, era posible que también fueran completamente triviales. De cualquier manera, decidí escucharlo y le indiqué que continuara.

“Tengo un sucesor… aunque aún no ha nacido. Una de mis esposas está embarazada de mi hijo.”

“Imposible…” murmuró Amani.

En la actualidad, casi no quedaban sucesores legítimos en la familia real. No había un solo pariente masculino del rey elegible para tomar el trono, así que si lo que dijo Pajam era cierto, eso era enorme. Pero, ¿un país mágicamente subdesarrollado como Kuwol tiene algún mago capaz de discernir el género de un niño antes de que nazca?

“¿Está absolutamente seguro de que su hijo por nacer es un niño, Su Majestad?” pregunté.

“Estoy seguro… El médico real usó una magia de inmersión que se ha transmitido de generación en generación…”

Esa magia probablemente era un amuleto simplificado como el amuleto desinfectante en la tabla de cortar de Paga. Sus aplicaciones serían limitadas, pero probablemente era un hechizo confiable. Después de todo, la familia real no había sido erradicada.

“Mi esposa, Fasleen, fue evacuada a uno de los palacios que aún estaban en construcción cuando comenzó la guerra. Es el Palacio Fasleen, que bauticé en honor a su embarazo.”

¿En serio encargaste un palacio completamente nuevo para celebrar el nacimiento de tu hijo? Supongo que eso prueba que eres un padre cariñoso al menos.

Los ojos del espíritu se llenaron de pesar. “Mi única preocupación terrenal ahora es por la seguridad de mi esposa y mi hijo… me temo que los rufianes que me mataron irán a por ellos después… Por favor, lord Veight…”

“No tema, Su Majestad. Mi esposa también está esperando nuestro primer hijo pronto, así que entiendo cómo se siente. Protegeré a su esposa e hijo como si fueran míos”, respondí resueltamente.

“Ah… me tranquiliza escuchar eso… Tu sinceridad me alegra el corazón… Tienes mi agradecimiento…”

La niebla blanca comenzó a parpadear. Se podría decir que fue la forma en que Pajam mostró su alivio. Era el equivalente a que una persona viva dijera “¡Oh, gracias a Dios!”.

“Necesitarás la contraseña que acordamos… Cuando te encuentres con Fasleen, dile: ‘La flor carmesí florece en la luna brumosa’. Haz eso y podrás ver su expresión más hermosa…”

Pajam II sonrió para sí mismo al recordar los gratos recuerdos de su esposa.

“Hay un secreto más que deseo decirte lord Veight… Consagrado en el Monte Kayankaka, la fuente del Mejire… hay un tesoro conocido como el Orbe Valkaan… Tiene el poder de transformar a los humanos en Valkaan… La biblioteca real… contiene registros de él…”

Valkaan, ¿eh? Reconocí esa palabra. Significaba “Dios de la Guerra” y se usaba para referirse a lo que llamábamos Héroes y Señores Demonio en Meraldia. En otras palabras, este Orbe Valkaan era otro de esos artefactos antiguos que nos habían causado tantos problemas en Meraldia y Wa. Supuse que también tenía que haber uno en Kuwol y parecía que mi corazonada había sido correcta. No podemos permitirnos dejar solo algo tan peligroso.