Maou no Ore ga Dorei Elf wo Yome ni Shitanda ga

Volumen 12

Capitulo 3: Algunas Cosas Cambian, Pero El Destino De Un Villano Está Escrito En Piedra

Parte 1

“Hmph. El destino de un traidor sin duda es lamentable”.

Valjakka miró hacia una ciudad desolada y se burló mientras se burlaba de sí mismo en voz baja. Era uno de los Arcángeles, pero había sido degradado al sabueso de Shere Khan. Al enterarse de eso, el Archidemonio Zagan le había dado una advertencia que le puso los pelos de punta. Eso en sí mismo lo dejó atrapado entre la espada y la pared, pero después del ataque al tesoro de Raziel el otro día, estaba bajo sospecha de traicionar a la iglesia y guiar a los hechiceros a las áreas ocultas.

¡¿Por qué?! ¡¿Por qué soy el único que está pasando por todo esto?!

En realidad, no había participado en la intrusión de Zagan y Bifrons, por lo que en realidad no se merecía todo el peso de las sospechas de la iglesia.

Si elijo a las personas equivocadas para trabajar aquí, todo habrá terminado.

Tenía que hacer todas sus apuestas en el caballo correcto en esta carrera… o de lo contrario.

“Hola, señor caballero. Entonces, ¿qué tenemos que hacer?”

Un chico lo llamó desde atrás. Al igual que el ex ayudante de Valjakka y la hermana menor de su ayudante, el chico tenía el pelo y los ojos escarlata. Mirar su rostro hizo que Valjakka sintiera como si el mundo estuviera arrojando sus pecados ante él. El chico también parecía estar en su adolescencia, lo que le recordaba a Valjakka aún más a Chastille.

Un joven alto y larguirucho estaba junto al chico. Este también estaba sonriendo, pero Valjakka no podía leerlo en absoluto. Estos dos eran los subordinados que Shere Khan le había otorgado para ayudarlo con su tarea.

Probablemente estén aquí para vigilarme. Necesito ganarme su confianza a través de ellos si espero sobrevivir.

Por lo tanto, Valjakka adoptó la imagen de una sonrisa de caballero y se dio la vuelta para mirarlos.

“La misión que Lord Shere Khan nos ha confiado es capturar a un traidor”, les dijo.

“¿Qué clase de persona es este traidor?” preguntó el chico.

“Parece ser una chica de unos catorce o quince años, pero no te dejes engañar por su apariencia. Ella es una poderosa hechicera. Aparentemente, es un espécimen bastante valioso, así que aunque no importa si la matan, asegúrate de recoger el cadáver. Cuanto menos dañada, mejor”.

En verdad, a Valjakka le habían dicho que era prácticamente incapaz de practicar la hechicería en la actualidad. Sin embargo, uno nunca sabía qué trucos había escondido un hechicero bajo la manga. Era mejor ir a matar asumiendo que resistirían. Después de todo, esto era todo lo que le quedaba a Valjakka.

“Wow. ¿Así que vamos a apresurar a una niña con tres chicos?” escupió el chico, luciendo como si estuviera reprimiendo las ganas de vomitar. “¿No se avergüenza de sí mismo la persona que ordenó eso?”

“Cuida tu lengua. Lord Shere Khan simplemente está siendo cauteloso”.

Esa fue una mentira descarada. Shere Khan estaba siendo arrinconado. Bifrons había roto su alianza, así que una vez que Zagan encontrara su escondite, todo terminaría. Con tantos problemas acechando sobre él, uno de sus criados de confianza terminó desertando, uno de esos gemelos. Ese lamentable Archidemonio estaba más abajo al final de su cuerda que Valjakka, pero el caballero aún había apostado por él.

No tengo más remedio que creer en él después de que me lo hayan mostrado.

Shere Khan estaba seriamente decidido a dominar el mundo. O quizás sería mejor decir que iba a rehacer el mundo. En cualquier caso, una vez que Archidemonio tomara acción, Zagan y la iglesia no tendrían forma de ganar. Además, Shere Khan había prometido disipar finalmente la hechicería en Valjakka. Sin embargo, una condición para cumplir esa promesa fue la recuperación absoluta del gemelo perdido.

Aun así, tener estos dos perros guardianes es una completa molestia.

“Por supuesto, no hay necesidad de perseguir a una sola chica con estos números”, agregó Valjakka con firmeza. “Sin embargo, los perros de alguien se encuentran actualmente en esa ciudad, así que ustedes dos los mantendrán confinados”.

Los perros eran subordinados de Zagan. El escondite actual de Shere Khan estaba cerca, por lo que, desafortunadamente, la mano del aterrador Archidemonio prácticamente ya estaba agarrando la garganta de Shere Khan.

“¿Mantenerlos confinados?” preguntó el hombre larguirucho con un gesto de la cabeza. “Y aquí pensé que nos dirías que los matáramos”.

Eso era, por supuesto, lo que realmente quería Valjakka.

¡Ese maldito Zagan! ¡Incluso está usando gente de la iglesia!

Matar a esas personas sería una mala elección. La advertencia de Zagan surtiría efecto y el cuchillo implantado en la cabeza de Valjakka se manifestaría.

Valjakka se aclaró la garganta, luego negó con la cabeza y respondió: “Ya es un trabajo sucio. No es necesario robar más vidas de las necesarias”.

“Mmm…”

Ambos subordinados de Valjakka murmuraron incomprensiblemente, miradas de desconfianza en sus rostros todo el tiempo. Casi lo había tenido con estos dos.

“Estas son las órdenes de Lord Shere Khan, ¿sabes?” añadió con voz ronca.

“Sí, sí… No desobedeceremos. No es que podamos, de todos modos”, dijo el chico.

Con eso, los dos desaparecieron. Valjakka echó otro vistazo a la ciudad. Vio a una chica lastimosa con túnica corriendo. Al igual que él, estaba rodeada de enemigos y no podía pedir ayuda a nadie. Qué lamentable era. Valjakka vio algo de sí mismo en ella, lo que lo irritó aún más.

“Vas a tener que dejarme desahogarme al contenido de mi corazón”.

Al ver a alguien tan debilitado y arrinconado como él, Valjakka no sintió simpatía ni compasión. Esto simplemente estimuló su corazón sádico.

***

“Esa es la esencia, jefe. Shere Khan está definitivamente en las cercanías de Feo”.

El día después de que Zagan y Nephy se enteraran de los cumpleaños del otro, Shax dio su informe usando hechicería telepática. Había pasado aproximadamente una semana desde que Zagan los envió a él y a Kuroka para encontrar el escondite de Shere Khan. Este hombre, que era verdaderamente talentoso además de su habilidad para leer la habitación, finalmente lo había logrado.

“Bien hecho”, dijo Zagan. “Puedes terminar las cosas allí y regresar. Hay algo que me gustaría que hicieras aquí. Tu fuerza es una necesidad”.

“Seguro que eres un esclavista, jefe”, respondió Shax en un tono exhausto. “Realmente no me importa, porque soy un hechicero y todo eso, pero Kurosuke es una chica normal, ¿sabes?”

“Intenta decirle eso… Pero tienes razón. Una vez que termine su próxima misión, puede llevar a Kuroka de vacaciones o algo así. Te prepararé una excusa. Escuché que hay bonitas aguas termales en Raziel”.

“¡¿Bwah?! ¡Espera un segundo! ¡Eso no es lo que estoy tratando de decir!”

“Quieres mostrarle a Kuroka algo de gratitud, ¿verdad?” Zagan respondió con frialdad. “Entonces esto debería ser apropiado”.

“¡Tienes que estar bromeando!”

Zagan suspiró y respondió: “Ríndete, Shax. No quiero decir nada sobre tu relación con ella, pero permíteme darte una advertencia como hombre. Se honesto con ella. Depende de usted aceptarla o rechazarla, pero es lamentable dejarla en el apuro durante tanto tiempo. Esto es lo que más ha estado ofendiendo Raphael”.

Quizás Zagan estaba ladrando al árbol equivocado al tratar de instar a Shax a seguir. Sin embargo, a pesar de que no se lo había dicho directamente a Shax, habían pasado tres meses desde que Kuroka comenzó a mostrar un claro afecto por él.

Durante ese tiempo, Kuroka había tenido sus ojos tratados, y Shax la había cuidado valientemente. Había subtexto más que suficiente en su comportamiento para sugerir que él estaba en su mente. Y, sin embargo, continuó fingiendo que no notaba sus sentimientos en absoluto. Francamente, en este punto, era demasiado lamentable de ver.

Por supuesto, existía ese caso con la ropa interior, pero a los ojos de Zagan, esta negligencia era en realidad lo que había enfurecido tanto a Raphael.

Si Shax inclinaba seriamente la cabeza y le pedía la mano, Raphael probablemente no se enojaría. Bueno, todavía se enojaría, pero al menos dejaría de blandir su espada cada vez que se encontraran. En cualquier caso, Shax no parecía esperar una conferencia inmediatamente después de su informe. Estaba claramente nervioso por este giro de los acontecimientos.

“E-Eso dices, jefe, pero Kurosuke todavía es menor de edad, ¿sabes?”

Esta única declaración fue suficiente para dejar en claro que había notado los sentimientos de Kuroka y que no la encontraba desagradable.

“Eso es solo una excusa”, le dijo Zagan. “Si vas a usar eso como una razón para aplazar tu decisión, entonces es apropiado que le digas que espere”.

“Ugh… T-Tienes… un punto ahí…”

Zagan dio la impresión de ser algo prepotente, pero eso fue lo que se necesitó para convencer a este hombre de que no podía dejar que las cosas fueran. Shax no se opuso más.

En realidad, ¿significa esto que las cosas se han desarrollado hasta el punto en que ni siquiera puede objetar?

Zagan había decidido enviarlos juntos porque Raphael siempre estallaba cuando estaban en el castillo. Quizás había salido bastante bien. Aun así, entendía los sentimientos de Raphael en un grado doloroso, por lo que realmente no podía culpar a su mayordomo por su comportamiento. Independientemente, tal vez había ido demasiado lejos.

“Bueno, tal vez estoy proyectando demasiado”, dijo Zagan. “Puedes olvidarte de eso. Cuidar de Shere Khan es una prioridad en este momento. En cualquier caso, planeo darle unas vacaciones por su distinguido servicio cuando las cosas terminen”.

“Entendido, jefe”.

Shax también era un hombre. Estaba seguro de que haría algo de buena fe después de que le dijeran tanto. Zagan había planeado darle un descanso incluso si este asunto con Kuroka no era un problema de todos modos. Si no lo hacía, no estaba claro cuándo Shax tendría un descanso.

Ahora que conocía la ubicación de Shere Khan, era el turno de Zagan de actuar. Alshiera le había dicho que le dejara a Nephteros, pero no estaba seguro de cuánto podía confiar en la vampira. Además, tenía que estar atento a los movimientos de Bifrons y no sabía cuándo volvería a aparecer Azazel. Sin embargo, por encima de todo, estaba la cuestión del cumpleaños de Nephy.

Zagan había tenido las manos ocupadas con el caso de Nephteros ayer, por lo que todavía no había elegido un regalo. Había una montaña de problemas ante él sin espacio para respirar.

¿Qué debo hacer? Quiero aferrarme a Nephy ahora mismo y frotar su cabeza…

Había estado corriendo todo el día, y aparentemente Nephy también estaba ocupada con algo, por lo que no habían tenido tiempo para abrazarse. Sin embargo, estaban en los pensamientos del otro todo el tiempo, por lo que su amor mutuo se había acumulado interminablemente.

“Está bien, entonces, regresaremos ahora”, informó Shax. “Adelante con la Transferencia”.

Tal como su nombre lo indicaba, Transferencia era una hechicería que podía transferir instantáneamente cosas de un lugar a otro. Desafortunadamente, no podía ir a ninguna parte y a todas partes como lo hacía Barbatos, pero Zagan podía al menos conectar su castillo a una ubicación fija como, por ejemplo, el lugar donde Shax se había estado quedando. Sin embargo, solo un puñado de personas, incluido Zagan, podían usar esto libremente.

Ayer, solo pude sentar a Nephy en mi regazo una vez. No voy a poder calmarme a menos que al menos consiga frotar sus mejillas.

La mente de Zagan estaba llena de deseos mundanos, pero aun así logró hacer una declaración con toda la majestad de un Archidemonio.

“No, regresa como estás. No habrá Transferencia”.

“¿No Transferencia? Pero nos llevará un día entero. Pensé que tenías prisa. ¿Está bien?”

“Una vez que regreses, te hare trabajar hasta los huesos, así que aprovecha el viaje para tomarte un respiro”.

Zagan no creía que su subordinado hiciera un buen trabajo sin que le dieran un descanso. Además, a juzgar por su reacción anterior, Zagan podía suponer que Shax había hecho algún tipo de progreso con Kuroka. Si sabían que las cosas se iban a complicar, los dos seguramente cambiarían la forma en que pasaban el tiempo. Si las frustraciones de Kuroka pudieran mitigarse, terminaría aliviando algunas de las ansiedades de Shax y también lo haría más eficiente en el trabajo.

Después de transmitir esa orden, Zagan ya no tenía nada que hacer en la sala del trono. Parecía que ya era hora de que se fijara en Nephteros. Además, tuvo que ir a buscar el regalo de cumpleaños de Nephy.

¡Pero primero, necesito abrazar a Nephy!

Sentía que diría algo descuidado si abría la boca, pero aún quería estar con ella. Y justo cuando abrió la puerta del salón del trono para irse…

“¡Hyah!”

Alguien cayó al otro lado, dejando escapar un lindo grito. Zagan lo atrapó por reflejo.

“¿Eh? ¿Nephy?

Zagan tenía a su amada en sus brazos. Al parecer, se había apoyado contra la puerta, lo que le hizo perder el equilibrio cuando él la abrió.

¿Eh? ¿Qué pasa? ¿Quería tanto verla que estoy alucinando?

En el momento en que pensó que quería abrazar, ella terminó volando a sus brazos. Las cosas se habían desarrollado tan convenientemente que dudaba de su propia cognición. En cuanto a Nephy, estaba mirando a Zagan como si no tuviera idea de lo que acababa de suceder.

Los dos se miraron el uno al otro mientras un suave aroma le hacía cosquillas en la nariz. Era un aroma dulce, pero tenía un aire refrescante como la vegetación fresca. Hacía que pareciera que la primavera había llegado temprano. Parecía que Nephy había cambiado su perfume con el próximo cambio de estaciones. Era propio de ella poner tanta atención a los detalles. Y mientras Zagan disfrutaba del aroma ligeramente diferente, Nephy finalmente volvió a sus sentidos.

“¡¿H-Hawawawa?!”

“¡¿E-E-E-E-Estás bien?!”

Sus orejas se pusieron de un rojo brillante hasta las puntas puntiagudas.

“U-Ummm, no es que realmente necesite nada, pero, um…” comenzó Nephy, sus ojos azules moviéndose rápidamente. “No pudimos pasar mucho tiempo juntos ayer, ¡así que me siento un poco sola!”

“¡¿Huuuh?!”

Su adorable queja golpeó el corazón de Zagan con una fuerza significativa. Al verlo tan conmovido por esto, Nephy miró a Zagan con una pizca de resignación en sus ojos.

“Maestro Zagan”.

“¿S-Sí?”

“Solo por ahora… Solo por un momento… Me gustaría… estar contigo”.

Zagan no tenía forma de saber que Nephy estaba preocupada por qué hacer para su cumpleaños, al igual que él para el de ella. Es más, tenía mucho menos tiempo, por lo que la dejó mucho más inquieta que él.

“¡Muy bien!”

“¡¿Hyah?!”

Zagan tomó a Nephy en brazos y regresó a su trono. Por supuesto, se aseguró de sellar la puerta con hechicería. Nephy se puso rígida ante el repentino evento, pero ahora había construido una resistencia a esas cosas, principalmente debido a Zagan.

“E-Eheh heh heh…”

Dejó escapar una risa descuidada mientras disfrutaba ser llevada como una princesa, frotando su cabeza contra el pecho de Zagan. Sus puntiagudas orejas temblaron de alegría.

¡Hnnngh! ¡Tan rápido para actuar!

Además, a pesar de que parecía que estaba actuando con valentía, sus brazos no estaban envueltos alrededor de él, sino que estaban agarrando tímidamente la ropa en su pecho. Su tímida contención casi lo hace desmayar. Zagan estuvo a punto de caer de rodillas, pero se mantuvo firme con determinación. Usó la tremenda fuerza de sus brazos para levantar a Nephy un poco más.

“¡Ack!”

Mientras Nephy parpadeaba repetidamente en confusión, frotó su mejilla contra su frente.

“¡Ah…!”

Nephy soltó un ligero chillido ante la desconcertante acción. Sus orejas se agitaron salvajemente contra el pecho de Zagan, haciéndole cosquillas en el proceso. Su corazón latía con tanta fuerza que se sentía como si fuera a salirse de su boca. Esta fue una verdadera dicha.

¡Mmm! ¡Con esto, ciento que al menos puedo seguir adelante hasta que termine de lidiar con Shere Khan!

Zagan entonces se dio cuenta de que Nephy lo estaba mirando, su rostro estaba tan rojo que parecía que podría estallar en llamas en cualquier momento. Frotar su mejilla contra su frente había ido mucho más allá de sus expectativas, por lo que sus pensamientos no podían seguir el ritmo de la situación.

“Uhhh, ya sabes… también quería pasar más tiempo contigo. Estaba tan feliz de que vinieras a mí, así que me mudé sin pensar y…”

Zagan expresó sus sentimientos con toda honestidad. Los labios de Nephy temblaron, ya sea por timidez incontrolable o por placer. Aun así, reunió lo último de sus fuerzas para devolverle la sonrisa.

“Maestro Zagan. Siento que esta es la primera vez que me has consentido de esta manera”.

“¿E-En serio?”

“Sí. Así que estoy… realmente satisfecha… ”

Solo habían pasado unos segundos, y solo habían dado unos pocos pasos hacia la sala del trono, pero con esas últimas palabras, Nephy había agotado todas sus fuerzas, lo que la hizo perder el control de la conciencia.

“¡Nephy!”

A pesar de que había acumulado una resistencia a lo inesperado, no podía soportar el impacto de que sus deseos reprimidos se cumplieran tan rápidamente, lo cual tenía mucho sentido, ya que Zagan incluso había usado la hechicería para resistir el impacto de lo adorable que era Nephy a veces. Incluso el Archidemonio Orias había pensado en dejar el castillo atrás después de experimentar algo similar.

Y ahora, la reacción inocente de Nephy asaltó el corazón de Zagan en un contraataque. Al contemplar su tranquilo rostro dormido, volvió a caer de rodillas.

***

“Hombre, el jefe seguro que a veces puede ser un problema”.

Sin embargo, el verdadero problema era que el Archidemonio estaba al borde de colapsar solo por aferrarse a Nephy, pero para bien o para mal, Kuroka y Shax no tenían forma de saber ese hecho.

Actualmente estaban atrapados en la ciudad fortaleza, Feo. Tenía un gran título, pero en realidad era una ciudad desolada rodeada por las ruinas de la muralla de una fortaleza.

Según los rumores, las paredes se levantaron hace más de mil años. Pero ahora, en el mejor de los casos, la población local ni siquiera habitaba una cuarta parte del pueblo, e incluso la vegetación de la zona era esporádica y marchita.

A pesar de todo esto, a juzgar por cómo se había construido sobre un lecho de roca y se habían cavado pozos en su lugar, claramente había sido una vez una próspera escala en medio de una ruta terrestre a través del continente. Aparentemente, cuando el concepto de países se desvaneció, los muros perdieron su propósito, lo que provocó la rápida desaparición de la fortaleza. Ahora pocos pasaban, y la mayoría de los que venían eran rufianes y vagabundos que vivían en la indigencia.

Esta desolada ciudad era donde Kuroka y Shax los había llevado a perseguir a Shere Khan. Al buscar en el área, encontraron a su presa. El escondite del Archidemonio estaba en la ciudad o sus alrededores.

Al ver a Shax murmurar para sí mismo con una mueca después de terminar su informe regular, Kuroka lo miró confundida. Zagan no era de los que daban a la gente un trabajo irracional. Shax había estado viajando para completar sus tareas los últimos días, por lo que su rastrojo estaba más desenfrenado de lo habitual.

Su cabello también era aproximadamente un tercio más largo y bastante descuidado. A pesar de su altura, parecía poco confiable debido a su espalda encorvada. Aun así, era el hechicero en el que Zagan confiaba más justo después de sus dos sirvientes inmediatos.

Se queja mucho, pero siempre termina haciendo algo al respecto.

Kuroka miró a Shax, las orejas triangulares encima de su cabeza temblaban. Ella era una cait sith, por lo que poseía orejas tanto de gato como de humano, así como dos colas. Llevaba ropa inspirada en un vestido nativo de Liucaon, pero en marcado contraste, tenía un bastón de la iglesia en sus manos.

Durante los últimos días, finalmente habían rastreado los productos que Shere Khan había pedido hasta su destino final.

“¿Hay algún tipo de problema?” Kuroka preguntó con una inclinación de cabeza.

“Oh no. Nada tan serio. Simplemente dijo que un nuevo trabajo me espera cuando regrese”.

“Eso solo demuestra cuánto confía en ti”, respondió Kuroka con una sonrisa. “No es el tipo de persona que confía en los demás a menos que realmente confíe en ellos”.

Rastrear el paradero de Shere Khan también era una tarea de alta prioridad. Ver a este hechicero, que ni siquiera tenía un segundo nombre, siendo considerado tan bien hizo que Kuroka se sintiera tan feliz como si la hubiera involucrado directamente.

“Entonces, si hay otro trabajo esperando, ¿eso significa que ya regresaremos?” Preguntó Kuroka.

Con la teletransportación, podrían regresar al castillo en un instante. Kuroka y Shax se habían ido durante una semana, por lo que había sido una larga ausencia. Hablando honestamente, sin embargo, estaba muy feliz de tener tiempo a solas con él. Fue un poco desafortunado tener que regresar tan pronto.