Kono Yuusha (NL)

Volumen 7

Capitulo 23: El Valor De Una Teta

El entrenamiento semi-abusivo de Rosalie continúa durante las próximas horas mientras los despiadados ataques de Seiya destrozan su ropa. Pero no importa cuántas veces sea derribada o caiga al suelo, de alguna manera se las arregla para levantarse.

“¿C-Cuánto tiempo más van a hacer esto?”

Rosalie jadea patéticamente con una mirada amorosa en sus ojos, y empiezo a sentirme incómoda por un momento hasta que Cerceus de repente murmura:

“Rosalie ya no está perdiendo el conocimiento, ¿eh?”

“¿Eh…?”

Ahí es cuando me doy cuenta: Seiya le arrojaba agua para despertarla cada vez que la dejaba inconsciente, pero no lo había visto hacer eso en un tiempo.

“¿Eso significa…?” Utilizo Scan en Rosalie.

Rosalie Roseguard

LV: 70

HP: 141,493

MP: 9,900

ATK: 179,144

DEF: 186,574

VELOCIDAD: 168,169

MAG: 860

GRW: 78

Resistencia: Fuego, Agua, Hielo, Oscuridad, Veneno, Parálisis Habilidades especiales: Bendición de la Oscuridad (LV: 9) Habilidades: Dark Thrust

Personalidad: Impulsiva

Recuerdo vagamente que ni siquiera estaba en el nivel 70 la última vez que verifiqué, y parece que su HP y Defensa están aumentando bastante rápido.

¡No puedo creer que haya ganado tantos niveles en tan poco tiempo! Parecía que Seiya la estaba torturando, ¡pero supongo que el entrenamiento fue realmente efectivo!

Apuesto a que incluso Rosalie puede decir de primera mano cuánto más resistente se está volviendo. Mientras el héroe continúa azotando su cuerpo, ella murmura en voz baja para sí misma:

“¡Entrenar con el héroe es increíble! ¡Puedo sentir que gradualmente me hago más fuerte!”

Su ojo está inyectado en sangre.

“¡Ahn! ¡Más! ¡Dámelo!” Rosalie insiste mientras jadea como un perro.

Espera, ¿qué…? ¡Definitivamente hay algo extraño en esto! Pero a pesar de la emoción de Rosalie, Seiya le pasa su espada de madera a Cerceus con una mirada fría en su rostro.

“Es suficiente entrenamiento por hoy”.

“¡Yo… todavía puedo entrenar! ¡Dame más! … ¡Golpéame más fuerte!”

“¡¿Rosalie?!”

“No puedo entrenarte todo el día. Todavía tengo mi propio entrenamiento que hacer”.

“Oh…”

Rosalie parece estar desanimada después de volver en sí, pero parece que su entrenamiento finalmente terminó por hoy. Seiya saca una pila de papeles del bolsillo del pecho y comienza a mirarlos.

“Oye, ¿Seiya? ¿Qué estás haciendo?”

“Encontré algunos habitantes del inframundo dignos de ser entrenados y escribí sus nombres. Espera. Necesito examinar la lista un poco más,” responde Seiya antes de comenzar a mirar uno de los nombres en la lista. Si bien no me sorprende en lo más mínimo que esté haciendo esto, Rosalie parece estar perdida en admiración.

“¡Increíble! ¡El héroe es tan meticuloso en todo lo que hace!”

Ahí es cuando de repente me doy cuenta de que Cerceus me está mirando. “… ¿Cuál es tu problema?”

“Rista, se supone que eres su diosa, pero no haces nada, ¿eh? Seiya incluso ha decidido por sí mismo dónde va a entrenar a continuación”.

“¡Yo… estoy investigando cosas que podrían ayudarlo a él también!”

“¿Cómo que…?”

“¡Bueno, aparentemente hay alguien en el inframundo que puede controlar las tormentas! ¡Apuesto a que aprender su movimiento especial haría a Seiya aún más poderoso!”

Uno me contó un poco sobre este individuo durante nuestra charla. Seiya, sin embargo, niega con la cabeza.

“Tienes tus prioridades al revés. Primero, debes pensar qué tipo de movimiento quieres aprender en función de tus futuros oponentes. Solo después de hacer eso, comienzas a buscar seres del inframundo que te ayuden”.

“E-Entonces, ¿qué tipo de movimientos quieres aprender?”

“Bien. Te mostrare.”

Seiya deja escapar un “hmph” antes de sacar otra pila de papeles de su bolsillo. Rosalie y Cerceus gimen:

“¡Siempre está un paso por delante de la Diosa en todo lo que hace! ¡Es el epítome de un verdadero héroe!”

“Está preparado de manera eficiente para ganar. No es de extrañar que la Gran Diosa Ishtar y Aria lo consideren un héroe de primera clase”.

¡Ack! ¡No puedo discutir con eso! ¡Seiya es realmente un héroe increíble!

Con eso, volteo mi mirada hacia el pedazo de papel que me dio Seiya. Es una lista de movimientos que quiere aprender.

Un movimiento que enferma sigilosamente al enemigo. Un movimiento que envenena la comida.

Un movimiento que coloca una bomba mientras el enemigo está dormido. Un movimiento que maldice en secreto al enemigo.

Un movimiento para escabullirse detrás del enemigo y degollarlo sin que nadie se dé cuenta.

“¡No hay nada heroico en ninguno de estos!”

“¿A quién le importa? Derrotar con seguridad al Señor Dragón es todo lo que importa”.

“Pero estos movimientos son sucios… Como trucos baratos…” Rosalie, por otro lado, grita con una voz cargada de emoción: “¡Simplemente asombroso! ¡Impresionante, incluso!”

“¡¿Qué?! ¿Son ‘impresionantes’? Um… Bueno, supongo que estarán bien siempre que pueda derrotar al Señor Dragón con esos movimientos, pero…”

Después de mirar hacia adelante y hacia atrás entre sus dos listas por unos momentos, Seiya de repente asiente profundamente como si estuviera satisfecho.

“Está bien. Aquí será donde entrene a continuación”.

“Parece que te decidiste. ¿Entonces? ¿Quién te va a enseñar qué?”

“Si tuviera que describir el movimiento usando la lista que les acabo de mostrar, caería debajo de ‘escabullirse detrás del enemigo y degollarlos’. Ahora que no puedo usar a Lucifer, degollar al Señor Dragón antes de que él se dé cuenta es mi única opción tanto para derrotarlo como para evitar a Igzasion”.

“¡Estoy… estoy bastante segura de que hay muchas otras opciones…!”

“Escuché que hay un habitante del inframundo que vive cerca del manantial llamado Slauri que puede volverse invisible”.

“¡¿Vas a aprender a volverte invisible?!”

“Exactamente. Cuando Rasti me enseñó cómo volver a transformarme en el mundo espiritual, me dijo que era imposible volverse invisible, pero que parece posible en el inframundo”.

Seiya usó la técnica de Transformación de Rasti para derrotar a Grandleon en Ixphoria convirtiéndose en un beastkin.

También me convertí en una persona pez, ahora que lo pienso… Pero recuerdo que todo fue porque volverse invisible no era posible.

“Me volveré invisible, me acercaré a Mash por detrás y le cortaré la garganta”.

“¡E-Ese es el plan perfecto! ¡Qué idea tan increíble, héroe! ”

“…”

Me callo. Seiya comienza a caminar solo, pero   después  de unos momentos, nos mira.

“Sígueme. Quiero que Rista, Cerceus y, si es posible, Rosalie dominen este movimiento”.

Seguimos a Seiya hasta que nos encontramos en un espeso bosque. Ahora estamos lejos del Santuario de los Seis Reinos en el centro del inframundo, donde reside Hathies. El bosque es increíblemente inquietante. Hay plantas carnívoras y árboles con troncos en forma de rostros humanos dondequiera que mire. Sin embargo, Seiya lo atraviesa rápidamente con su habitual expresión indiferente.

“Hff… Hff… ¿Cuánto más lejos está este lugar?” jadea Cerceus mientras el sudor gotea por su cuerpo. Se estaba quedando atrás del resto de nosotros porque llevaba dos enormes cubos llenos de algún tipo de líquido azul, a diferencia de Rosalie y yo, que llegamos con las manos vacías. Me acerco a Seiya y le pregunto:

“Oye, Seiya. ¿Qué hay en los cubos que lleva Cerceus?

“No obtuve mucha información sobre Slauri cuando pregunté, pero es posible que ni siquiera podamos verlo desde el principio si puede volverse invisible. Cuando lleguemos allí, incluso podría decir algo como: ‘Debes encontrarme primero si alguna vez deseas aprender mi movimiento’. Por eso traigo esta pintura conmigo por si acaso”.

Seiya parece estar mirando hacia el futuro como siempre lo hace. Eso sí suena como algo que podría suceder, pero cuando le digo a Cerceus, su expresión se convierte en un ceño fruncido y se queja en un susurro:

“¿De verdad crees que va a pasar algo así? Tsk. Maldita sea, esto es pesado”.

“¡Cerceus! ¡Deberíamos creer en el héroe y confiar en su juicio!”

Rosalie lo anima antes de quitarle uno de los cubos de las manos. No pasa mucho tiempo después de eso hasta que finalmente encontramos un área abierta dentro del bosque con un hermoso manantial cristalino ante nosotros.

“¡¿… ?! ¡Es hermoso!”

La mayoría de los lugares del inframundo han sido espeluznantes y espantosos, pero el aire aquí es fresco y claro. Hay una cabaña de madera cerca del manantial, que supongo que debe ser donde vive Slauri.

“Mmm. Alguien está allí”.

Sigo la mirada de Seiya para encontrar a un anciano sentado junto al manantial mientras pescaba. Tiene el pelo largo y blanco que le cubre la mitad de la cara. También tiene una barba blanca a juego y viste una túnica como si fuera una especie de ermitaño. Pero incluso entonces, sigue siendo obvio que es un habitante del inframundo, lo que queda claro por su cola negra enroscada en el suelo detrás de él. Tímidamente lo llamo.

“Perdóneme. Estamos buscando a un hombre llamado Slauri… ”

“¡Heh-heh-heh! Slauri, ¿dices? Si lo estás buscando, lo has encontrado. Él ya está a tu lado”.

¡Parece que Seiya tiene razón! ¡Ya es invisible!

Miro frenéticamente detrás de mí, pero ni siquiera siento otra alma cerca. Después de pasar unos momentos más, el anciano finalmente deja su caña de pescar y vuelve su mirada hacia nosotros.

“Soy Slauri”.

Cerceus responde de inmediato:

“¡¿Que…?! ¡Puedo verte claramente!”

“Por supuesto que puedes. No puedo vivir una vida invisible todo el tiempo”.

“¡S-Seiya! ¡¿Significa esto que llevé toda esta pintura aquí para nada?!”

“Para nada.”

Seiya deja caer un pesado cubo de pintura frente a Slauri.

“Te traje un regalo. Esta pintura es toda tuya. Puedes usarlo para pintar esa cabaña de azul”.

“¡W-Wow! ¡Hay un significado detrás de todo lo que hace el héroe!”

Los ojos de Rosalie se iluminan con admiración, pero Slauri parece estar algo desconcertado.

“Uh… no necesito pintura… ¿Por qué de repente pintaría mi casa de azul después de todos estos años?”

¡Así que todo fue en vano! ¡Odia admitir cuando está equivocado!

Seiya, sin embargo, parece haberse olvidado de la pintura y Cerceus mientras simplemente mira a Slauri con una mirada dudosa.

“¿De verdad eres Slauri? Vuélvete invisible y pruébalo”.

“Bueno, ¿no eres ya el escéptico? Está bien, compruébalo por ti mismo”.

Después de respirar profundamente, el anciano junta lentamente sus manos arrugadas antes de desaparecer instantáneamente en el aire.

“¡D-Desapareció! ¡Realmente lo hizo!”

“Sin embargo, todavía puedes oír mi voz, ¿eh? Este es mi movimiento especial: Invisibilidad”.

Miro en la dirección de su voz, pero no se encuentra por ninguna parte. Ni siquiera puedo sentir su presencia, a pesar de tener mejores sentidos que cualquier humano. Ni siquiera hubiera sabido que estaba allí si no hubiera dicho nada.

“Hmph. Es tan bueno como imaginaba. Tengo que aprender este movimiento”.

“Heh. Mi movimiento es impecable. Soy completamente invisible a simple vista. Estoy seguro de que te será útil en tu aventura”.

“Veo lo útil que es. Vuélvete visible”.

Pero Slauri no se muestra. Se jacta con orgullo:

“Heh-heh-heh. No tienen ni idea de dónde estoy ahora, ¿verdad? … ¡Ow, ow, ow! ¡Eso está caliente!”

¡El aire de repente comienza a humear y aparece Slauri! ¡Su túnica está en llamas con humo saliendo de su pecho!

“¡¿Que…?! ¡¿Por qué estás en llamas?!” Grito de asombro, pero casi de inmediato me doy cuenta de por qué… porque una salamandra ardiente salta del bolsillo de su pecho, luego trepa por la pierna de Seiya y se sienta en su hombro.

“Es una salamandra de fuego que hice usando magia de fuego. Lo hice deslizarse en el bolsillo del pecho de Slauri en el momento en que nos conocimos”.

“¿Por-por qué hiciste eso?”

“No quería que dijera: ‘Pensándolo bien, no te enseñare nada’, antes de desvanecerse en la oscuridad”.

“¡¿No crees que eso fue un poco excesivo?! Nuestro Señor nos dijo que no podíamos rechazar sus solicitudes, pero… Mn… Eso fue realmente bueno…”

Parece llevar una vida aislada en el bosque y, sin embargo, aparentemente ya ha oído hablar de nosotros. Después de cepillarse el pecho, abre mucho los ojos bajo su largo cabello blanco.

“¡Sin embargo, tendremos que hacer un trato!”

“Hmph. Ya sé lo que quieren los habitantes del inframundo. Quieres HP divino: Puntos de Humillación de una deidad, ¿verdad?”

“Hee-hee-hee. Ahora estamos hablando. Pero no voy a aceptar cualquier HP”.

Seiya luego se acerca a mí y me mira a los ojos con una mirada seria. “Rista, aquí es donde entras tú”.

“¡¿Q-Qué quieres que haga?!”

“Voy a darle a Slauri algo de tu HP”.

Coloca sus manos sobre mis hombros y me hace girar para que mi espalda quede frente a Cerceus y Slauri, ¡luego se pone en cuclillas y agarra el dobladillo de mi vestido!

¡¿Eek?! ¡¿No me digas que les va a mostrar mi ropa interior?! Y tal como temía, ¡Seiya me levanta la falda sin piedad! “¡Ahn!”

Intento chillar tiernamente como lo hacen en los comics románticos que solía leer para aprender sobre Japón, pero…

…¡Deslizar!

Es una sensación extraña, casi como si sintiera una corriente de aire abajo. “¿Eh…?”

Bajé la mirada… ¡solo para darme cuenta de que Seiya me bajó la ropa interior hasta los tobillos sin dejar de levantarme el vestido!

“¡¡Esto no es algo de lo que pueda sonrojarme ligeramente y jugar como si fuera lindo!! ¡¿Qué diablos crees que estás haciendo?!” Grito mientras me subía las bragas. Cerceus silba.

“¡Estoy impresionado, Seiya! ¡Le bajaste los calzoncillos a una diosa como si nada!”

“¡Sí, no hubo ni una pizca de vacilación! ¡Qué héroe extraordinario!”

“¡¡Un criminal extraordinario es más parecido!!”

Incluso Slauri tiene una expresión de asombro y murmura:

“E-Eso fue… definitivamente inesperado. Pensé que me ibas a mostrar una pequeña teta, o sus bragas, pero ¿su trasero desnudo? Vaya, vaya, vaya…”

¡Yo — yo — honestamente no puedo creerlo! ¿Cerceus y Slauri vieron mi trasero?

“¡Pide disculpas! ¡Di que lo sientes! ¡¡Seiyaaaaaa!!”

Me acerco a Seiya como un volcán a punto de entrar en erupción, pero él no se inmuta. Luego se vuelve hacia Slauri y le pregunta:

“¿Entonces? Tienes suficiente HP, ¿verdad?”

“Hmm… recibí una repentina oleada de HP, pero eso fue un poco… deficiente para un anciano como yo. No es mi tipo de HP, si sabes a qué me refiero”.

¡¿Qué?! ¡¿Eso significa que le mostré mi divino trasero desnudo por nada?!

¡No voy a dejar pasar esto! ¡Hay muchas cosas que no voy a dejar pasar!

“Suspiro… No pierdas mi tiempo. Solo dime qué tipo de HP quieres”.

“Muy bien… ¿Qué tal algo lo suficiente para despertar la imaginación, algo en lo que crees que vas a ver algo pero que no puedes verlo del todo?”

“Sé más específico.”

Los labios de Slauri se curvan vilmente.

“¡Heh-heh-heh! ¡Me gusta cuando su ropa se moja lo suficiente para que puedas ver sus senos a través de la camisa! ¡El solo hecho de imaginar su vergüenza realmente me excita! ¡Solo un pequeño vistazo es lo que me gusta!”

“¡E-Eres un verdadero asqueroso, arrugado saco de huesos!”

Mientras estoy completamente disgustado y enojado, Cerceus asiente con la cabeza.

“¡Yo sé lo que quieres decir! ¡Prefiero la emoción de echar un vistazo, en lugar de ver algo en realidad!”

“¡¿… ?! ¡¿Estás de acuerdo en serio con él?!”

Incapaz de controlar mi rabia, agarro el cuello de Cerceus y lo sacudo violentamente hasta que de repente escucho un chapoteo cerca.

“… ¿Eh?”

¡Cuando miro, Rosalie está completamente empapada de haber saltado al manantial y camina de esta manera! Su ropa es básicamente transparente,

¡definiendo claramente sus pechos bien formados! “¡¿Rosalie?! ¡Puedo ver claramente tus pechos!”

“¡Estoy haciendo esto para salvar a Gaeabrande! ¡¿Qué son tres o cuatro senos para salvar el mundo?!”

“¡¿… ?! ¡¿’Tres o cuatro’?! ¡Los humanos solo tenemos dos!” Pero Slauri niega con la cabeza con decepción.

“No hay mucho HP cuando no estás avergonzado. Además, jovencita, eres humana, ¿verdad? Tu HP palidece en comparación con lo que emite una deidad”.

Rosalie aprieta los dientes por la frustración, sin importarle ni siquiera que sus pechos estén a la vista. Luego se acerca corriendo hacia mí con una expresión de pura locura.

“¡Diosa! ¡Tenías que ser tú! ¡Date prisa y moja ese vestido!”

“¡¿Qué?! ¡N-No!”

“¡Hmph! ¡¿Qué son cinco o seis senos para salvar el mundo?! ¿Por qué dudas?”

“¡¿Por qué el número de senos está aumentando de repente?! ¡S-Seiya, di algo!”

Seiya deja escapar un breve suspiro.

“Esto es ridículo, pero… debo aprender cómo volverme invisible para salvar estos mundos deformados. Es esencial.”

“¡P-Pero…!”

“Rosalie, hazlo.”

“¡Como desees, héroe!”

“¡E-Espera! ¡Esperar! ¡N-No…! Noooooo— ¡¿pfff?!”

Siguiendo las órdenes de Seiya, Rosalie me apresura y me tira al manantial.