Saikyou Mahoushi (NL)

Volumen 1

Capitulo 2: La Diferencia Entre Ideal y Realidad

Parte 2

Por supuesto, Alus era uno de esos. Pero en sus manos no había un arma, sino un libro completamente ajeno al propósito de este ejercicio.

“Eso es la nobleza para ti.”

De repente, una voz de admiración surgió de alguien en uno de los rincones de los campos de entrenamiento.

Mirando por encima, Alus vio a Tesfia en el centro de un grupo de estudiantes, con una katana colgando de su delgada cintura.

Una katana, que pasada de moda…

Incluso Alus, que había visto todo tipo de armas en el ejército, solo conocía a unos pocos Maestros Mágicos que usaban una katana como su AAR. Cuando se trataba de AAR, una espada de doble filo era más utilizable que una katana de un solo filo, y se estaba volviendo más común.

“Esta arma ha sido transmitida en mi familia por generaciones. Como siempre he usado esto, es a lo que estoy más acostumbrada.” Tesfia fue probablemente la única en el campo de entrenamiento que tenía su propio AAR. La única en su clase, y tal vez incluso la única en su año.

-La discrepancia entre el nombre corto y el acrónimo es debido a la traducción ya que incluso en la versión japonesa estoy bien seguro habrán usado palabras inglesas.

Los estudiantes que iban a convertirse en Maestros Mágicos hechos y derechos tendrían que descubrir sus propias características mágicas a medida que seguían estudiando, al mismo tiempo que descubrían qué tipo de arma funcionaba mejor para aprovechar todo su potencial. Por eso era común obtener solo un AAR personal al graduarse del Instituto.

Por el contrario, eso significaba que casi todos los Maestros Mágicos de pleno derecho tenían su propio AAR. El papel de un AAR era ayudar con la conducción de mana. Se mejoró la conductividad.

En lugar de crear fuego o agua directamente, pasar mana a través de tu AAR reduce las fugas. Tampoco necesitabas usar un conjuro que hiciese de disparador.

De hecho, el desarrollo del AAR comenzó antes de la sistematización de la magia. Las armas tradicionales que la humanidad había usado, armas de fuego y armas blancas, resultaron completamente inútiles contra los Fiends. A pesar de que podrían ser capaces de atravesar sus duras cubiertas externas, no podían hacer una herida fatal.

Los AAR se crearon al trabajar bajo el principio de cómo romper las capas externas de los Fiends y matarlos.

En ese momento, un AAR simplemente consistía en un arma dura e inquebrantable, con su letalidad aumentada al dotarla de mana, pero los AAR de hoy en día se habían desarrollado mucho más allá de los originales.

Al grabar una hoja por todas partes con fórmulas mágicas que se crearon a través de una combinación de caracteres olvidados e ininteligibles, también llamados Hechizos Perdidos, fue posible usar magia con el arma como catalizador.

A través de ese proceso, la humanidad logró omitir el paso del canto y ganó suficiente poder para enfrentar a los Fiends.

Por eso, aunque eran Maestros Mágicos, no había ninguno que utilizara varitas de madera como las que se veían en los cuentos de hadas, ya que no eran prácticas para usarlas como armas. AARs priorizaron la asistencia mágica. Era difícil grabar varitas con fórmulas mágicas, lo que las hacía aún más inadecuadas.

Mientras la admiración caía sobre Tesfia, miró a Alus y agitó su espada con un silbido. La hoja que sobresalía de su vaina estaba llena de Hechizos Perdidos grabados.

Parecía estar provocando a Alus, pero él también estaba planeando atravesar pacíficamente este período. No quería dejar de lado el libro que estaba leyendo ni siquiera por un momento durante los descansos.

Finalmente, la confusión terminó y los nombres de sus compañeros que él no conocía uno tras otro aparecieron en la pantalla. Primer campo de entrenamiento, segundo campo de entrenamiento, fue en el tercer campo de entrenamiento que apareció el nombre de Alus.

El nombre de Tesfia fue incluido en el octavo campo de entrenamiento. Afortunadamente, no estaban en el mismo campo de entrenamiento, pero como estaban cerca, estaba claro que los espectadores acabarían comparándola con ella.

Al mirarlo, podrían tranquilizarse con sus propias posibilidades. La formación de rangos permitió a todos llegar a un entendimiento acerca de quién era superior.

Sin agarrar un arma, Alus se dirigió al tercer campo de entrenamiento, mientras hojeaba las páginas de su libro.

Su oponente era un chico que no conocía. Era un compañero de clase, pero Alus no tenía ningún interés en él.

El cabello corto y crudo del chico era un distintivo de color marrón rojizo, y como era de esperar, sus ojos rasgados se llenaron de desprecio mientras miraba a Alus. En su mano estaba un AAR tipo espada prestado por el Instituto.

Los 20 estudiantes que no estaban en un enfrentamiento se convirtieron en espectadores, y fue justo como Alus había esperado. La mitad de ellos eligió ver el duelo de Tesfia en el octavo campo de entrenamiento, mientras que la otra mitad vio el duelo de Alus. Esperaban que él mordiese el polvo.

Por lo general, los espectadores estarían llenos de expectativas y análisis, tratando de adivinar quién ganaría, pero los ojos dirigidos a Alus se estaban burlando de él. Era como un ansia desagradable que buscaba burlarse de los débiles.

¿Qué hago…?

La razón por la que Alus se preguntaba qué hacer era porque sentía una mirada particularmente aguda en él. Alice estaba entre los estudiantes que miraban su duelo, pero él no la sintió de ella.

Esa mirada dudosa estaba pegada a él, siguiendo de cerca todos sus movimientos. Si bien era extraño, las preocupaciones de Alus estaban en otra parte.

En realidad ya había renunciado a este duelo. En todo caso, quería perder a propósito para poder terminar con esto rápidamente. Aunque ocultar su rango era parte de eso, realmente no quería perder su tiempo.

Dicho esto, aunque quería perder, no tenía intención de sufrir ningún daño.

Estaba pensando en una forma de perder sin atacar, y sin dejar que los espectadores alcanzaran su verdadero objetivo… Engañar a los espectadores y al profesor era fácil para Alus, incluyendo a Alice y Tesfia.

El único que pesaba en su mente era el dueño de esa aguda mirada.

No sabía quién era, pero su habilidad era probablemente de nivel de tres dígitos. Si ese fuera el caso, no deberían ser capaces de darse cuenta de lo que estaba haciendo Alus… pero suspiró por lo incómodo que era ser observado.

“Hablemos de suerte. Esto es perfecto para mí, para probar los frutos de mis esfuerzos diarios al contenido de mi corazón. Ja, esto es como enfrentarse a un saco de boxeo.” Dijo el oponente de Alus con una burla.

Un participante tenía una espada AAR, mientras que el otro participante solo tenía un libro.

Para los espectadores, el resultado ya estaba determinado.

La alarma sonó para indicar el inicio del duelo, sin darles tiempo a ninguno de los dos para confirmar el arma del otro.

El estudiante comenzó a correr. Sus movimientos de aficionado eran insoportables para que Alus los viera. Estaba impresionado de que su oponente no se avergonzara de hacer eso frente a los espectadores.

Parecía que estaba impregnando mana a su espada AAR, pero el mana que cubría la espada era terriblemente lento. Ni siquiera las funciones de asistencia podrían ayudarlo.

Alus igualó la velocidad de la espada demasiado lenta e hizo que pareciera que apenas la había esquivado en el último segundo. Entre los ataques, sus ojos recorrieron las páginas de su libro mientras continuaba leyendo. De hecho, ni siquiera tenía que seguir la espada con los ojos.

Su oponente retrocedió, poniendo distancia entre ellos, y vertió una gran cantidad de mana en su espada. En respuesta a eso, la fórmula mágica grabada en la hoja comenzó a brillar de color rojo.

“‹‹ Fuego Filoso››”

Siguiendo esa voz, las llamas se envolvieron alrededor de la hoja.

Normalmente, era posible omitir el conjuro, pero como el oponente de Alus había seguido adelante y de todos modos usaba un encantamiento, estaba en el nivel de cinco dígitos o simplemente era un idiota.

Por supuesto, aunque podría omitirse, el uso del nombre tuvo el efecto de ayudar a establecer el fenómeno; pero la sonrisa satisfecha en el rostro del estudiante dejó en claro que no entendía lo que estaba haciendo. Su poder para ejercer el poder con solo el nombre mágico fue gracias a la asistencia del AAR.

Hacer eso sin ayuda te pone en el nivel de un Triple Dígito. Para empezar, probablemente ni siquiera sabía que Fuego Filoso era un hechizo inferior. Era una versión simplificada del hechizo avanzado Espada de Fuego, con varios niveles de poder por debajo.

Ver a su oponente verse tan satisfecho al usar algo como eso era patético para Alus, y casi se sintió avergonzado por él. Los espectadores no estaban particularmente sorprendidos, pero contuvieron el aliento pensando que la conclusión estaba cerca.

Apasionados aplausos llegaban desde el octavo campo de entrenamiento donde Tesfia luchaba.

Mientras tanto, en el tercer campo de entrenamiento, los espectadores murmuraban cosas como “casi lo tenía” cada vez que Alus apenas esquivaba un ataque.

No había tensión aquí, lo que creaba una gran brecha entre los dos campos de entrenamiento.

Ni esa gran brecha ni sus voces se registraron como ruido para Alus.

Solo Alice vigilaba inquieta la pelea. La fuerza se vertió en sus dedos, y sus manos firmemente unidas parecían estar orando para que Alus se mantuviese a salvo. Eso fue un vistazo de su natural amabilidad.

La espada del estudiante que alberga magia se acercó.

Como nada bueno vendría de prolongar la batalla, Alus cerró su libro de golpe, listo para terminar las cosas. A propósito, tomó la espada que se balanceaba diagonalmente hacia él, pero al mismo tiempo, colocó el libro entre su cuerpo y la hoja.

La onda de choque resultante levantó una nube de polvo. Cuando se aclaró, Alus estaba tumbado boca arriba en el suelo, y la respiración pesada estudiante estaba perturbando su postura.

Sonó el zumbador que señalaba el final del duelo.

“¡¡…!! Señor Alus…” Alice expresó su preocupación. Ya que ella creía que él había tomado el ataque de frente, era natural que ella sonara tan angustiada.

Incluso viendo a una chica encantadora tan preocupada por el derrotado, los otros estudiantes que habían estado mirando no pudieron contenerse de ridiculizar al desgraciado perdedor. Sus expresiones cambiaron a las de desprecio por los débiles.

Pero en contraste con la preocupación Alice…

“¡¡…!!”

Alus se levantó como si nada hubiera pasado, para sorpresa de todos los presentes. Luego volvió a abrir su libro y abandonó el área de entrenamiento, sin apartar la vista de las páginas.

Cualquiera que se haya encontrado con esa visión se habría preguntado quién era realmente el ganador.

Al darse cuenta de las expresiones de asombro de los espectadores, Alus se dio cuenta de que había cometido un error al terminar el duelo demasiado rápido. La verdad era que los estudiantes estaban asombrados por la compostura de Alus, pero él no lo entendió.

Alus pensó para sí mismo, ¿cómo alguien sería dañado por un ataque mágico de ese nivel? La mejor opción fue tomar el ataque. Si la pelea hubiera continuado, podría haber terminado contraatacando por reflejo. Tratar de igualar el nivel inferior del oponente fue inesperadamente difícil. El impulso de continuar leyendo también había jugado un papel en su apuro por terminar la pelea.

Bueno, aunque actué como si hubiera sido derrotado, es cierto que no presté atención a los detalles y lo realicé perfectamente. Después de todo, este duelo fue una completa pérdida de tiempo.

Mientras tanto, la mirada dudosa que había estado en Alus se desvaneció tan pronto como terminó la batalla.

“¿Estás bien, señor Alus? ¿Estás herido en algún lugar?” Tan pronto como Alus llegó al borde exterior del campo de entrenamiento, Alice corrió hacia él, examinando cuidadosamente su cuerpo.

“No recibes ningún daño físico en estos campos de entrenamiento.”

“… ¡Ah! Tienes razón.” La mirada sospechosa en el rostro de Alice le dijo que algo todavía estaba mal.

Mirando su cuerpo, Alus se dio cuenta de que había cometido un error trivial. Por supuesto, él fue el que creó la onda de choque justo antes de que terminara la batalla. Con el fin de evitar que la gente se diera cuenta de que estaba se estaba dejando atacar a propósito, pero como no había querido ensuciarse la ropa con una farsa como esta, inconscientemente había cubierto su cuerpo con mana.

Dicho esto, no era nada extraño que un Maestro Mágico hiciera esto. Siempre que estaba en una misión en el Mundo Exterior, siempre había emitido suficiente mana para cubrir su cuerpo.

Como resultado, a pesar de haber estado cubierto por una nube de polvo, Alus no tenía ni una mancha en él. En el impulso del momento: “Más importante aún, ¿no tienes que cuidar de tu amiga?”

“Fia estará bien. Ella es muy fuerte.”

¿Fia? Alus pensó que era un apodo, pero como no tenía interés en la batalla en curso en el octavo campo de entrenamiento, se volvió a mirar su libro. Como lo había usado para bloquear la espada en la batalla simulada, revisó la cubierta en busca de daños. Aunque lo había cubierto en mana, el papel era papel. Afortunadamente no tenía ningún corte, ni siquiera suciedad.

Aliviado de verlo en buen estado, Alus cambió de marcha. “Alice, ¿verdad? Debería ser tu turno pronto, ¿verdad?”

“Sí.”

Como Alus quería volver a su libro lo antes posible, había cambiado hábilmente el tema. “Puede que haya perdido, pero buena suerte. Espero que ganes.”

“¡Por supuesto! No me voy a contener. No tienes muchas oportunidades como estudiante de primer año. Y, señor Alus, aunque no estuviera herido, cuídese.” Alice le sonrió ampliamente y se subió las mangas, como diciendo: ‘Déjamelo a mí’.

Él había dicho cosas que no quería decirle a ella durante el flujo de su conversación, pero no quería alargarlo más. Se separó de Alice y se apoyó contra una pared cerca de la puerta. Parecía que se estaba sintiendo un poco fatigado por haber hablado más de lo habitual.

Para los Maestros Mágicos, las batallas simuladas fueron una de las lecciones más emocionantes. Como el uso de la magia estaba prohibido fuera de los campos de entrenamiento, era el lugar perfecto para poner a prueba tu crecimiento. Es por eso que el estudiante de primer año Alus, que ya había perdido interés, al no unirse con el resto de los espectadores, debe haber sido visto por los demás como un perdedor que se resigna a su destino.

La batalla de Tesfia parecía haber terminado, y los aplausos de antes se habían convertido en elogios para el vencedor. Cuando Tesfia abandonó el campo de entrenamiento con gran ánimo, Alice corrió hacia ella y comenzó a hablar sobre algo. Al mismo tiempo, los bordes de sus labios se alzaron, y ella lanzó una mirada hacia Alus, sonriéndole.

Luego Alice entró en el octavo campo de entrenamiento. Su oponente era un estudiante, pero el género no importaba en una batalla entre Maestros Mágicos. Eso se debió a que las habilidades mágicas desempeñaron un papel mucho más importante en el resultado que la fuerza física total.

A diferencia de los estudiantes que habían visto la batalla de Alus para reírse de él, Alice era la definición de seriedad. Teniendo en cuenta que la gratitud por su preocupación por él se sentía un poco extraña, Alus dedicó algo de su precioso tiempo a verla.

Alice sostenía una naginata en sus manos.

Esa es otra arma pasada de moda.

Sin embargo, el manejo de la naginata de Alice era algo digno de contemplar. No era que sus ataques fueran rápidos o sus habilidades pulidas, sino que sus movimientos eran muy fluidos. Todavía tenía mucho espacio para mejorar, pero sus cambios entre ataque y defensa fueron brillantes. Parecía hacer acrobacias, pero ella había refinado sus movimientos para reducir sus aperturas tanto como fuera posible.

La naginata era algo que había tomado prestado del Instituto, pero no sería capaz de manejar su arma de esa manera si no estuviera acostumbrada a ello. Al parecer, ella sobresalía en el uso de armas largas como lanzas.

Las artes marciales a este nivel valían la pena, pero eso no decidiría el resultado de una batalla entre Maestros Mágicos. La magia era lo que determinaría eso.

Contra los Fiends en una batalla real, usar una técnica para imbuir tu arma con mana, también conocido como encantamiento, fue efectivo, pero fundamentalmente, no se compara con un golpe directo de un hechizo.

También había muchos Fiends que podían reducir el daño de cortes y heridas, o incluso regenerarse de tales heridas

Cuando luchas contra Fiends, necesitas golpear con precisión su punto débil, su núcleo o destruirlo por completo a través de un ataque con gran potencia. En ese sentido, el uso de la magia fue efectivo tanto en poder como en extensión. La posición del núcleo varía según el Fiend, por lo que obtener una comprensión precisa de su ubicación era difícil.

El oponente de Alice estaba usando nudilleras. Fue una de las principales armas utilizadas por los Maestros Mágicos que preferían el combate cuerpo a cuerpo. Una ‹‹Flecha de Hielo›› se creó en la punta, luego la punta de la flecha salió volando.

Fue un hechizo de primer rango que los Maestros Mágicos principiantes usaban a menudo: Maestro Mágicos que solo habían recibido una educación primaria. Fue el primer hechizo que se enseñó, y se podía usar con cualquiera de los atributos básicos: fuego, agua, hielo, viento, rayos o tierra.

Alice giró su naginata. Mientras lo hacía, la hoja comenzó a brillar débilmente.

“¡…!”

En el momento en que la Flecha de Hielo tocó la naginata, se rompió en pedazos. Pero eso no fue todo. Los fragmentos de hielo se recuperaron y asaltaron al estudiante que había lanzado el ataque.

Él recibió un golpe directo.

Cerró los ojos y se desplomó en el suelo, incapaz de detener su caída. El duelo se había resuelto en un instante.

Al igual que con Tesfia, los aplausos estallaron ante la destreza de las dos clasificadas con cuatro dígitos.

Alice salió del campo de entrenamiento con un resorte en su paso, Tesfia, como si lo hubieran decidido de antemano.

Eso fue ‹‹Reflexión››… No, fue ‹‹Reducción››, ¿verdad?

La reflexión, comúnmente conocida como contra-ataque, era un hechizo de nivel intermedio. La reducción, que estaba un paso más arriba, no era el tipo de hechizo que los estudiantes podían usar. Ambos pertenecían al atributo de luz.

Sin embargo, fueron pocos los que pudieron usar magia de atributo de luz. La idoneidad de una persona para la mayoría de los atributos mágicos se adquirió después del nacimiento, pero el atributo de luz requería una calidad innata. Como tal, había pocos Maestros Mágicos que pudieran usarla.

En cuanto a los atributos mágicos, aparte de la tierra, el agua, el fuego, el viento, el hielo y los rayos, también hubo luz y oscuridad, que también se llamaron elementos.

También había naturalezas que no pertenecían a ninguno de los anteriores. Como lo que tenía Alus…

Cuando el entrenamiento entró en la segunda mitad, cambió casi completamente al autoestudio. Era tiempo reservado para aprender nuevos hechizos o pulir los que ya conocías. No importa cuánto practiques la magia, nada de eso se perdería.

Si bien hubo diferencias entre las personas, el mero acto de usar mana repetidamente incrementaba la capacidad máxima de tus hechizos.

Podías crear mana sin cesar dentro de tu cuerpo, pero solo podrías hacerlo hasta alcanzar el límite superior de tu capacidad. Una vez lleno, el límite superior detendría cualquier creación adicional de mana. Pero era posible expandir tus limites gastando y recuperando mana.

Si bien el límite superior de uno quedaba determinado al nacer debido a las diferencias individuales, la capacidad de mana podría incrementarse debido a que podía expandirse a través del entrenamiento.

Era normal que los estudiantes de primer año no tuvieran suficientes temas vistos para poder estudiar por su cuenta, por lo que continuaron con sus apasionadas batallas simuladas incluso en el período de autoestudio.

Entre ellos, Alus se estaba complaciendo descaradamente con la lectura.

Los campos de entrenamiento eran bastante uniformes, con una abundante cantidad de tierra esparcida en el suelo. Esto estaba fuera de consideración para el atributo de los Maestros de la Tierra. Entonces, aunque estaba un poco polvoriento, no era nada que un poco de mana no pudiera resolver.

En este momento, no debería haber nadie que lo molestara. Todos deberían estar demasiado ocupados viendo duelos o encontrando oponentes, por lo que el perdedor que se había distanciado de ellos debería estar fuera de la vista, fuera de la mente.

… O al menos eso es lo que pensó Alus.

“¡Déjalo ser!”

“Esta será la medicina perfecta para él. Hey, ven conmigo un minuto.”

De repente, voces. Alus levantó la vista para ver a Tesfia mirándolo, con Alice tratando de detenerla.

Alus ni siquiera trató de ocultar su expresión harta. Puso su dedo entre las páginas y suspiró. “Realmente eres persistente. Ojalá te hubieras puesto en mis zapatos.”

“No descartes a la ligera lo que hiciste.”

“¿Hm? ¿De qué estás hablando?”

“¿¡Qué!? ¡No te dejaré decir que te has olvidado que insultaste a la familia Fable!”

Supongo que algo así sucedió. Solo habían pasado unas pocas horas, pero había sido algo tan pequeño que todavía hacía falta que Tesfia lo mencionara para que Alus lo recordara.

“¿Qué pasa con eso?”

“¡¡…!! ¿Pero qué…? ¡No vengas con esas! No tienes idea de lo que significa llevar ese apellido. ¡¡Me insultaste, eso no es algo de lo que podrás escaparte!!”

Incluso cuando ella dijo eso, era la verdadera opinión de Alus, y en realidad era solo una cosa menor para él. En todo caso, estaba más molesto porque ella se interpuso en su lectura a causa de algo como eso.

Alus estaba empezando a quedarse sin paciencia. Hoy es un muy mal día. Él se levantó de mala gana, y debido a su diferencia de altura, terminó mirándola hacia abajo. “Admito mi error. Así que deja de molestarme.”

Después de toser esa disculpa vacía, sus ojos volvieron a su libro.

“¡No me ignores!” Ella arrojo el libro de su mano y lo envió volando.

Los espectadores se giraron para mirar en su dirección, mientras escuchaban la voz enojada de Tesfia. Se preguntaban qué estaba pasando, sorprendidos por su mirada amenazadora y la gravedad de la situación.

Todos se callaron. Incluso los estudiantes encerrados en una batalla simulada detuvieron lo que estaban haciendo. Interrumpir su concentración por algo como esto, a pesar de que estaban en medio del entrenamiento, era una señal de su inexperiencia.

Las páginas del libro que había estado leyendo revolotearon antes de rodar por el suelo, recogiendo tierra.

“¡¡Fia!!” Alice gritó, advirtiendo que Tesfia había cruzado la línea y había ido demasiado lejos.

Tesfia sintió la ira seria en la voz aguda de su mejor amiga, y dio un paso atrás. Pero sus ojos aún ardían con furioso resentimiento hacia Alus.

Ya que la pelirroja Tesfia se estaba enfureciendo tanto con Alus, ella debía tener mucho orgullo. Solo había sido una cosa trivial para él, por lo que sintió que estaba siendo presumida. Sin embargo, era diferente para ella… aun así, eso solo mostraba lo inmadura que era.

Ella nunca había visto a un Fiend y estaba completamente complacida con vivir en paz, ignorante de los nobles Maestros Mágicos que impidieron que los Fiends invadieran. Ella no sabía cuán valiosa y significativa era la barrera que los mantenía a raya. Ella era sólo una niña. Su nobleza era inmadura e incompleta, ya que no tenía idea de cuán dura era la realidad.

Después de ingresar al ejército, Alus había sido sometido a novatadas por adultos que eran una o dos veces su tamaño. Estos adultos se habían sentido celosos o inferiores e hicieron que Alus pasara una prueba de fuego. Como tal, había adquirido la fortaleza mental para ignorar la mayoría de las cosas. Ciertamente no había sido fácil para él superar esas cosas.

Pero incluso con su autocontrol, su disgusto con la conducta de Tesfia se impuso.

“¡¡Enfréntame!!”

Alus sintió que la situación había avanzado hasta el punto en que ninguna de las partes iba a retroceder. Caminó lentamente hacia donde había caído su libro y lo recogió, limpiándole la suciedad.

Esto no iba a resolverse renunciando a la victoria como lo había hecho contra el estudiante. De cualquier manera, él no tenía la intención de perder. Necesitaría aclarar las cosas de una vez por todas para que ella no se metiera más con él.

En el ejército había métodos de dominación mediante la fuerza o el miedo. Esos métodos, tendían a evocar la antipatía, por no mencionar lo bárbaro que eran.

Hubo una tendencia entre los Maestros Mágicos a usar su clasificación para determinar quién era superior y menospreciar a los de abajo. Como tal, la antigüedad fue desprestigiada por todos para asegurar que no hubiera ningún efecto en el comando.

Eso era algo que Alus también podía hacer. Y aunque no era algo digno de elogio, podía esperar tener éxito. Pensó que al menos podría ir tan lejos.

De hecho, si no lo hiciera, terminaría desperdiciando muchos de los próximos tres años lidiando con problemas y molestias innecesarias.

Parecía que esta chica que había tratado estas preciosas páginas de manera tan cruel necesitaría que se le enseñara el valor del poder que nace de la sabiduría de la investigación mágica.

Alus acarició la portada del libro con cuidado, mientras miraba a la chica que todavía lo miraba con hostilidad. “Después del colegio. Me encargaré de reservar un campo de entrenamiento, así que no puedes huir esto.”

“Está bien.”

“Fia. No usted, señor Alus…”

“Pongamos algunas condiciones ante un testigo. Sólo serás tú contra mí. No traigas a tu grupo de fanáticos. Lo siento, pero, Alice, ¿verdad…? serás nuestro testigo.”

“No me importa eso, pero…” Aunque estaba claro a partir de la expresión de Alice que quería detenerlos, se abstuvo de decir algo más.

Al final, esto era lo que ambos querían. Independientemente de cómo comenzó, Alus aceptó las demandas unilaterales de Tesfia por lo que su enfrentamiento fue decidido por el consentimiento de ambas partes. Y por eso, Alice solo podía vigilarlos.

La opción de evitarlo por completo había disminuido. La ira de Tesfia no iba a disminuir. Alus tampoco desistiría… Las situaciones difíciles como estas a menudo conducen a problemas más grandes.

“Acepto un duelo después de la escuela en estos campos de entrenamiento. Sólo los tres que estamos aquí estaremos presentes…”

Todavía faltaba una hora para el almuerzo, pero Alus se cambió rápidamente de ropa y abandonó el terreno. Su destino era la oficina de la directora.