Saikyou Mahoushi (NL)

Volumen 1

Capitulo 2: La Diferencia Entre Ideal y Realidad

Parte 1

Alus se encontró dentro de una habitación en un edificio recién acomodado para realizar experimentos, miraba alrededor con su equipaje recién llegado.

La sala era diferente del laboratorio de los profesores. No importaba cómo lo miraras, era más grande que el cuarto que usaban los maestros. De hecho, era un piso entero. Y el hecho de que fue diseñado para ser utilizado por uno de sus estudiantes de primer año no les sentó bien a los maestros.

Para empezar, las regulaciones establecían que todos los estudiantes sin excepción debían ser asignados a los dormitorios. Dado que el país es el órgano rector del Instituto, esa fue una de las medidas tomadas para evitar que ocurrieran escándalos.

Debido a sus mentes aún inmaduras los Maestros Mágicos novatos tenían la tendencia de ver la magia como algo que debían usar por sí mismos. Incluso las cosas menores de baja dificultad tenían la posibilidad de convertirse en una catástrofe, eso había ocurrido varias veces. Si los civiles quedaran atrapados en el fuego cruzado, ni siquiera el país podría pasar eso por alto.

“Todo el equipo aquí es de vanguardia. Huh, no puedo decir que quisiera ingresar a este Instituto, pero no puedo quejarme de esto.” Murmuró Alus.

Al ser una instalación para entrenar Maestros Mágicos, el Instituto naturalmente tenía conexiones secretas con los militares. Al final, Alus no pudo escapar de su influencia. Como alguien que había sido educado como Maestro Mágico desde la infancia y que se había unido al ejército a la edad de seis años, todavía se sentía relativamente libre.

Después de poner su poco equipaje en su habitación, comenzó a hurgar en las estanterías. Allí encontró los libros que había ordenado cuidadosamente colocados en su lugar. Todos ellos eran libros que trataban de magia, eran bastante avanzados, y ninguno de ellos cubría las aplicaciones prácticas del campo.

La mayoría de ellos eran libros antiguos. Algunos cubrían teorías completamente imprácticas o cuestionables que ni siquiera captarían una segunda mirada de los profesionales.

Ahora, las posibilidades de la magia se dividían en muchas ramas diferentes. Por eso Alus iba a comenzar por aprender de sus antecesores. Cualquier teoría, sin importar cuán absurda o estúpida pueda ser, podría tener un indicio de genio en ella que no iba a pasar por alto.

Alus creía con seriedad que estos conceptos peculiares podrían llevar al siguiente nivel de magia. La investigación que había hecho él mismo había obtenido resultados.

El más extremo de esos libros absurdos en los estantes fueron tres de los Cuatro Libros de Fegel. Se rumoreaba que el último de los cuatro libros ni siquiera existía. Eran reproducciones, pero incluso eso fue suficiente para que Alus se sintiera en deuda con el Gobernador General. Y si había algún libro que necesitara para su investigación que no tenía, podía usar la biblioteca.

Cuando se trataba de investigar el campo de la magia, no había un lugar mejor adaptado que este.

Cuando Alus comenzó a entusiasmarse con sus planes futuros, podía sentir más y más ideas surgiendo como un manantial de su mente inquisitiva.

Todos los libros que hojeó contenían grandes artículos. Normalmente, el preparar todo esto para una sola persona estaría fuera de cuestión. Pero Alus había presentado varias tesis y sus investigaciones dieron resultados, por lo que esta fue una hospitalidad que se le brindó por sus logros en el campo de la magia.

Mientras que Alus pensó para sí mismo, parece que puedo llevar una vida satisfactoria aquí, tal como dijo el Gobernador General… El sonido de varios golpes leves en la puerta producidos por un visitante inesperado hizo eco a través de la habitación, interrumpiendo sus pensamientos.

“Adelante.”

Inmediatamente después de que él dijo eso, una joven con ropa formal entró. “¿Cómo estás? Soy la directora del instituto, Sisty Nexophia. Encantada de conocerte, Alus.”

Alus también conocía de su nombre. Ella era una Maestra Mágica famosa a la cual se le conocía por el alias “Bruja”. Supuestamente ella se había retirado del servicio activo, pero el mana que se filtró de ella estaba tan afilado como siempre.

“Sé de ti, señora Bruja Sisty. Soy Alus Reigin. Estaba pensando en visitarte después de haber ordenado.”

Se había retirado del servicio activo y ahora se desempeñaba como directora del Instituto. No había manera de que fuera tan joven, pero el hecho de que ella aparentaba estar en sus veinticinco años era la razón por la que todavía se le llamaba Bruja. Su lustroso cabello castaño claro se agitaba con gracia y se extendía hasta la cintura.

Tenía un buen pecho, que su estrecha cintura solo ayudaba a resaltar. Su apariencia y edad real no coincidían en lo más mínimo.

La directora sonrió al afectado Alus. Al mismo tiempo, el mana flotando desapareció. “Eso es un Maestro Mágico de un Dígito Único para ti. Supongo que esto no es suficiente para desconcertarte. Además, mi título no es Bruja sino directora.”

“Perdóneme. Pero aun así, dices cosas bastante extrañas, directora. También recuerdo que eras de un solo dígito cuando estabas en servicio activo.”

“Eso fue hace mucho tiempo. Y yo era la novena. Solo fui un Dígito Único durante un breve período de tiempo.” Se encogió de hombros con modestia mientras sonreía, pero en Alpha no había nadie que no supiera su nombre.

Cuando estaba activa, era una de los Maestros Mágicos más destacadas en Alpha, y con sus muchos contactos en el ejército, naturalmente fue elegida como Directora del Segundo Instituto Mágico después de su retiro. Ella había producido una gran cantidad de excelentes Maestros Mágicos.

“Más importante, ¿estás seguro de que deberías estar aquí? La ceremonia de ingreso se está llevando a cabo en este momento.”

“Mi turno en el escenario ha terminado, ya ves.”

Alus no creía que fuera una buena idea que la directora que dejara la ceremonia de ingreso a mitad de camino, pero a él tampoco le había interesado mucho, así que decidió no decir nada.

El solo hecho de haber sido un Dígito Único fue suficiente para ganar la admiración de los estudiantes. Ella debe haberse bañado en sus intensas miradas. Gracias por tu duro trabajo.

Ahora que él lo pensaba, ella se veía mentalmente fatigada. Tal vez algunas palabras de aprecio serían adecuadas, pero mostrar cuidado la haría menos reservada la próxima vez. Al percibir ese riesgo, Alus decidió fingir que no notaba la expresión de la directora.

“Si vas a señalar eso, también notaré que estás ausente de la ceremonia, Alus.” Dijo Sisty, algo decepcionada por no obtener los resultados que quería, tal como Alus había esperado.

“Sólo quiero avanzar en mi propia investigación. No tengo la intención de asistir a las mismas clases que los otros estudiantes, ni tengo tiempo para hacer amigos.”

“No podemos permitirte eso. Tengo instrucciones del Gobernador General de que debes reincorporarte a las líneas del frente en caso de que te saltes tus estudios.”

“¡¡…!! Viejo tirano.” Se suponía que retirarse del ejército era la libertad de Alus. Dicho esto, sabía muy bien cuánto significaban sus contribuciones para los militares, así como para toda la humanidad. Era natural que el gobernador general no lo dejara retirarse. Es exactamente por eso que habían llegado a un compromiso.

Hasta ahora, había estado trabajando de misión en misión sin tener siquiera un descanso. Al parecer, una grieta se había alzado en su fugaz plan para pasar el resto de su vida en paz.

La directora se tapó la boca con la mano y se rio seductoramente. “Por favor, no te preocupes. Todo lo que necesitas hacer para obtener los créditos necesarios es asistir al mínimo de clases y completar las tareas e informes. Y en cuanto a tu clasificación… me gustaría que mantuvieras eso en secreto, para evitar cualquier confusión innecesaria.”

Las clasificaciones eran una forma de mostrar el poder de un Maestro Mágico… y las identidades de los Dígitos Únicos normalmente se mantenían en secreto para el público.

Por eso, a pesar de que era la orden de la directora, Alus no tenía objeciones. “Por supuesto. No soy quien para presumir de mi clasificación. Nada malo puede venir de evitar problemas.”

“Jaja… Eso es cierto. Entonces te deseo una maravillosa vida estudiantil.”

Después de decirle a Alus que fuera a la oficina del director en caso de que algo sucediera, Sisty se fue con una sonrisa en su rostro.

En poco tiempo, mientras se preocupaba por sus perspectivas futuras, una sensación de vacío llenó la habitación. Alus dejó escapar un profundo suspiro. “Mi tiempo…”

***

El Instituto requirió que aproximadamente 400 estudiantes de primer año asistieran a conferencias sobre cursos en su currículo. En su mayor parte las clases estaban divididas, y solo se unirían para los temas prácticos, como el entrenamiento simulado.

Habían pasado tres semanas desde que comenzaron las clases. Hoy era la primera vez que Alus asistía a su clase.

Ni un solo tema atrajo su interés, él se la pasaba encerrado en su laboratorio, pero la semana pasada pensó que si no asistía a algo pronto, no tendría suficientes días de asistencia.

Hoy ha sido un día de muchos temas prácticos. El primer período fue sobre los fundamentos de la magia.

A estas alturas, Alus estaba más allá de la necesidad de estudiar lo básico. Desde que tenía seis años había recibido educación especial para niños dotados en el ejército; Además de eso, había avanzado rápidamente en el campo de la magia a través del autoestudio. Aunque eso fue principalmente en el departamento militar, centrándose en la letalidad y la agresión.

Cuando entró en el aula, ya se habían formado círculos de amigos.

La configuración básica para las clases en el primer año fue tener 10 clases, con 40 estudiantes en cada clase. La clase ni siquiera había comenzado, pero la sala ya estaba llena de discusiones sobre la magia de las clases del día anterior.

Alus tomó un asiento al azar en la parte posterior y comenzó a leer un libro grueso.

Sus compañeros de clase, que lo estaban viendo por primera vez, le lanzaron miradas sospechosas, pero a Alus no le importó. Nunca había tenido la intención de llevarse bien con ellos.

Fue entonces cuando una chica con el cabello castaño se le acercó con movimientos llenos de gracia. “Buenos días. Es un placer conocerte… otra vez. Permíteme volverme a presentar. Soy Alice Tilake. Eres el señor Alus, ¿verdad?”

“¿Hm? Sí.” Al no darse cuenta que ella estaba hablando con él, Alus tardo demasiado en responder mientras hacía una muesca, con los ojos todavía fijos en su libro.

El uso por parte de la chica de las palabras “otra vez” y “eres” sugería que antes se habían encontrado en algún lugar, pero como no pudo recordarlo de inmediato, volvió a concentrarse en su libro.

Alice parecía no estar segura de cómo reaccionar a eso. Ella cambió el tema para sacudirse su abatimiento. “¿Te sentías mal? De cualquier manera, me alegro de que te hayas recuperado.”

“No, solo estaba faltando a clase. No parecía haber clases decentes. De todos modos, lo siento pero me distraes. Te agradecerías que no me molestaras.”

“¡¡…!! Lo siento.”

Esas palabras contundentes no prestaron atención a la atmósfera, haciéndolas sonar más como si fueran sus verdaderos sentimientos.

El estado de ánimo de Alice cayó como una roca, y ella rápidamente bajó la cabeza. Cuando se dio la vuelta con una expresión todavía sombría en su rostro, de repente sonó otra voz.

“¿¡Quién demonios te crees que eres!?” Una estudiante de cabello rojo brillante se levantó con el impulso suficiente para hacer que su silla cayera hacia atrás.

Inmediatamente la clase miró hacia ellos. Todos los ojos estaban enfocados en los dos.

Una pelirroja de voluntad fuerte estaba dando a conocer su ira. Tenía un claro refinamiento en ella, mientras daba a Alus una mirada inquebrantable. A pesar de que carecía de un poco de impacto debido a que ella no era lo suficientemente alta.

“¿Qué…?” Dijo Alus. Esto lo estaba cansando.

“Se mas consiente. Alice estaba preocupada por ti, ¡así que no la trates así!”

Después de pensarlo por un momento, Alus decidió que si no hacía algo esto luego volvería para morderle el culo. No tenía intención de llevarse bien con los demás, pero involucrarse en un desacuerdo acabaría con su precioso tiempo.

Se levantó de su asiento y se enfrentó a Alice, que estaba congelada a cierta distancia. Miró de un lado a otro entre Alus y la pelirroja que lo estaba mirando.

“Lo siento. Solo… en el futuro, no tienes que preocuparte por mí.”

“¡Por supuesto! Lamento haberme acercado a ti de repente.”

La pelirroja se dirigió inmediatamente a una Alice que se disculpaba. “¡No tienes que disculparte, Alice!”

Habiendo escuchado la respuesta de la chica aliviada, Alus se sentó de nuevo y retomo su lectura. Pero…

“Soy Tesfia Fable.” Continuó la chica pelirroja. Su tono aún era peligroso.

“…”

Qué fastidio, pensó Alus, chasqueando la lengua en su mente. Ya le había dicho a la primera chica que no se preocupara por él y ahora esto.

Viendo que no podía obtener una respuesta, la chica se sacudió de ira y se acercó a Alus.

Ella tomó el libro de sus manos.

Esto es lo peor. El enfoque que había tenido ahora fue cortado como un hilo frágil. Alus instintivamente sintió que esta chica pelirroja… era probablemente el tipo de persona que más odiaba. El tipo que forzaba su propia voluntad en los demás, exigía la obediencia de los demás.

“¿Puedo recuperar mi libro?”

“Yo, una noble, he pasado por la molestia de darte mi nombre. ¿No es solo cortés que hagas lo mismo?”

“Forzar tu cortesía hacia los demás… la nobleza es, sin duda, tiránica. No, creo que eso es lo que te hace ‘noble’.”

“¡¡…!!”

Las páginas del libro que la chica había tomado aleteaban mientras el libro volaba hacia Alus. Pero él cogió el libro sin ningún problema. “Gracias por devolverme el libro. Soy Alus Reigin. Ya me presenté. ¿Ya estas feliz? Ya no tengo ningún interés en ti, ¿podrías irte?”

“¿¡N-No tienes interés!? ¿Y me llamaste… tiránica? ¿Cómo te atreves a hacer tales comentarios abusivos hacia mí?”

Alus se había presentado con amabilidad, pero la chica estaba cada vez más enojada. En ese momento, sonó el timbre que indicaba el inicio de la clase.

Los estudiantes que habían estado observando a los dos se acomodaron a pesar del final decepcionante, y volvieron a sus asientos.

La pelirroja, Tesfia, era extremadamente renuente a hacerlo, pero cedió cuando Alice se movió para calmarla. Sin embargo, incluso después de sentarse en su asiento, ella continuó enviando miradas de enojo a Alus.

Habiendo recuperado su libro, Alus ya había sacado a Tesfia de su cabeza.

El maestro de la primera clase los hizo abrir sus libros de texto, pero Alus no los había traído. Solo había traído este libro grueso dado que él suele estudiar por su cuenta. Para él, una lección rudimentaria como esta era tediosa.

Desafortunadamente, no pudo bloquear completamente la voz del profesor.

“Al ingresar, recibieron su licencia de Maestros Mágicos. Estas licencias son las mismas que las utilizadas por los Maestros Mágicos al servicio del país, pero si pasan mana a través de ellas… muestran lo más importante para los Maestros Mágicos: su clasificación. Esto se calcula por la fuerza de su mana y su disposición, lo que da como resultado un número que indica su fuerza de combate.”

El maestro vertió mana en la licencia en su mano. La luz distintiva del mana fue emitida, creando una proyección tridimensional en el aire que mostraba las cifras 778/119550. Sin embargo, el profesor no era un soldado, por lo que técnicamente se le adjuntó un número “Anterior”. En otras palabras, era el número que había tenido al retirarse del ejército.

Como prueba de ello, el color del ranking era diferente del color de los estudiantes. Ahora solo eran datos los que mostraban que era un ex Maestro Mágico. El color se usó para diferenciar entre los Maestros Mágico de los estudiantes, los Maestros Mágicos retirados y los Maestros Mágicos en servicio activo.

“Por supuesto, la clasificación siempre está cambiando de acuerdo con sus resultados en la capacitación y en las misiones. Me gustaría que todos ustedes aspiren a estar siempre elevando su rango.”

Las clasificaciones de los Maestros Mágicos dependían de eso.

Debido a eso, los futuros y las posibilidades de los estudiantes dependían en gran medida de su rango. Su rango era tanto su boleta de calificaciones como su estatus social.

La verdad era que luchar contra los Fiends no era todo lo que era ser un Maestro Mágico.

Aquellos que habían alcanzado el Triple Dígito como este maestro tenían la capacidad de retirarse del ejército para servir como maestros. Un rango más bajo a menudo significaba un salario más bajo y más dificultad para ser asignado a puestos importantes.

En ese sentido, el rango de Triple Dígito del maestro fue suficiente para asombrar a la clase. Si bien fue un poco inmaduro mostrarlo, era un rango del que vale la pena hablar con orgullo.

Muy pronto, la clase se llenó de estudiantes que con ansia tenían sus licencias en la mano para verificar sus propias clasificaciones.

Pero un área en la clase era particularmente ruidosa.

“¡¡Puesto 8867!!”

“¡¡Puesto 4521!!”

Las voces de sorpresa se levantaron cuando descubrieron clasificaciones de cuatro dígitos entre los estudiantes de primer año, quienes usualmente tenían clasificaciones de cinco o seis dígitos.

“¡¡Alice y Tesfia tienen cuatro dígitos!!”

Alice se rascó la mejilla de manera avergonzada, mientras que Tesfia lucía una expresión triunfante.

Entonces el maestro las llamó. “Esto también es una sorpresa. Recuerdo que sobresaliste durante el examen de ingreso, Alice. Y tú eres de la familia Fable, ¿verdad, Tesfia? Eso explica tu rango. Escuché que el examinador afronto un desafío al tratar con ustedes dos. Continúen puliendo sus talentos sin llegar a ser presumidas.”

“Muchas gracias.”

“Pero recuerden que su clasificación solo se decidió en base a sus exámenes de ingreso. Incluso si está en el rango de seis dígitos, no hay necesidad de sentirse decepcionados. Después de todo, podrán elevar su rango dependiendo de sus esfuerzos. Quiero que continúen por el camino de los Maestros Mágicos, conscientes de que son la luz guía de la humanidad.”

El profesor miró la clase con una sonrisa satisfecha, luego lanzó una mirada sospechosa a Alus. “¿Hm? Tú, el de allí, ¿qué pasó con tu licencia?”

Al ser el único que no confirmó su rango en la clase, Alus se destacó, le gustara o no. Casi todos los estudiantes del Instituto fueron talentos sobresalientes que trabajaron para la supervivencia de la raza humana. Eran Maestros Mágicos en ascenso. Es por eso que todos, sin excepción, eran estudiantes de honor muy ambiciosos.

Por lo tanto, era natural que alguien que estaba sentado en silencio leyendo un libro se destaque de una mala manera.

Todos los ojos en el aula se centraron en Alus.

“Lo siento. La perdí.” Esa era la verdad. La licencia también sirvió fundamentalmente como una tarjeta de débito en lugar de una billetera. En esta época, era una necesidad.

Pero en el caso de Alus, no tenerlo no le hizo daño en lo más mínimo. Si había algo que necesitaba, solo tenía que solicitarlo y el ejército se lo proporcionaría; y con su salario extremadamente alto, Alus tenía más dinero del que podía gastar en toda su vida.

En cuanto a su clasificación, la directora ya le había dicho que lo mantuviera confidencial. Y como planeaba pasar el resto de su vida en el Instituto, no tenía que preocuparse por su clasificación.

“Apuesto a que estás demasiado avergonzado para mostrarla. Incluso si tiene un rango de seis dígitos, no hay nada de qué avergonzarse en este momento.” Declaró Tesfia en voz alta con desdén. Ella se rio con desprecio.

Alentados por ella, los otros compañeros comenzaron a mirar a Alus. Esto fue el resultado del hecho de que los círculos de amigos ya se habían formado en la clase.

Cuando se enfrentaron con la elección de ponerse del lado de alguien que estaba alejado de todos, y de alguien con quien al menos estaban familiarizados, su elección fue clara. Además, como todos ellos eran estudiantes tan serios y excelentes, no encontraban divertida la actitud de Alus.

“Ridículo.”

“¿Eres un mal perdedor? Si estás tan molesto, ¿por qué no nos muestra su clasificación?” Dijo Tesfia con vehemencia, siguiendo la declaración del alusivo Alus.

Sin embargo, Alus sabía que un rango más alto solo significaba que te asignarían misiones más peligrosas. Dado que los otros vieron que esa era su razón de ser como Maestros Mágicos, él y ellos, fundamentalmente, nunca se verían cara a cara.

Los nuevos Maestros Mágicos aquí no habían visto a Fiends y Monstruos caminando en el Mundo Exterior. Los dígitos dobles o triples eran una cosa, pero las clasificaciones de cuatro dígitos e inferiores eran impotentes en cualquier lugar, excepto en los terrenos del Instituto.

No importa cuán fuertes fueran, una vez que salieran, los que morirían simplemente lo harían.

Eso fue todo.

Un pesado suspiro escapó de los labios de Alus. Ahora había perdido completamente su enfoque.

Él podía manejar al maestro solo, sin problemas, y una vez terminada, la clase podía continuar sin interrupciones, pero parecía que estaba en la naturaleza de esta chica, Tesfia, buscarle conversación a la gente.

Alus cerró de golpe su libro, se levantó y comenzó a abandonar el aula.

“¡Espera, tú!”

En contraste con el nervioso maestro, Tesfia le dio la espalda a Alus y le habló al maestro con una expresión triunfante. “Señor, tratar con un perdedor desmotivado como él solo será un obstáculo para la clase. Así que por favor continúe.”

Dejando atrás el aula, Alus se dirigió a la biblioteca en lugar de a su laboratorio. Estando en el mismo edificio del aula, él podría pasar su tiempo allí y regresar a tiempo para el segundo período.

Como era de esperar, la biblioteca estaba llena de libros dondequiera que miraba. Todos estos libros fueron sobre magia, sin un solo volumen innecesario presente. Para Alus, era una habitación llena de tesoros.

Por supuesto, la desafortunada realidad era que la mayoría de ellos no le serían útiles. De hecho, era muy posible que ya hubiera memorizado todos los conocimientos registrados en estos libros. Dicho esto, podría ser divertido intentar y ver si se encontraba aquí algunos hallazgos excelentes.

Y debido a que eso sería un tesoro, hubo un verdadero sentido de excavar para obtener el conocimiento de estos libros.

Este era el lugar perfecto para que él resolviera la frustración que había acumulado en clase.

Pero al final, Alus no logró encontrar nada bueno.

El tiempo pasó volando y el timbre que indicaba el fin del primer período sonó sin piedad antes de que lo supiera.

“Supongo que volveré más tarde.” Aunque insatisfecho, de mala gana dejó la biblioteca.

***

El segundo período fue el entrenamiento en forma de simulacro de batalla.

Todos se estaban cambiando a los uniformes de entrenamiento especificados por el Instituto en el vestuario… pero el vestuario de los hombres estaba lleno de miradas agudas dirigidas a Alus.

“Tsk, si no quieres estar aquí, entonces vete ya.”

Alus podía escuchar comentarios groseros como ese, pero no sentía la más mínima incomodidad. Habiendo servido en el ejército desde la infancia y logrando más que nadie, las miradas hostiles como estas habían sido un hecho cotidiano para él.

Por supuesto, a medida que sus logros seguían acumulándose, y su clasificación entre ellos, el ridículo y el desprecio fueron silenciados.

En el pasado, él había fingido serenidad, pero ahora eso ni siquiera era parte de su plan. Simplemente no tenía ningún interés. Incluso se sintió un poco nostálgico cuando se bañó en esa hostilidad y desdén. Cambiando rápidamente su ropa, salió del vestuario con un libro más pequeño debajo del brazo.

En los campos de entrenamiento con forma de cúpula, cualquier daño físico se sustituyó con daño mental a través de la magia, por lo que si bien era posible que se desmayara, no se haría ningún daño físico.

Las batallas simuladas eran batallas que utilizaban artes marciales, armas o magia. Tu oponente en estas batallas fue mostrado en un panel en el medio de la cúpula.

Había un profesor presente, pero con los estudiantes del Instituto tan serios y dedicados, las posibilidades de que alguien usara movimientos prohibidos o trampas eran muy bajas; y como estas eran simplemente batallas simuladas, el profesor prestaba solo el mínimo de atención.

El profesor apretó el botón de barajar. La pantalla mostraba los nombres de todos los participantes que se emparejarían al azar.

Se formaron diez grupos para realizar batallas simuladas. Para evitar que los grupos entren en contacto entre sí, las barreras mágicas dividieron los campos de entrenamiento.

Por cierto, se permitieron armas en los campos de entrenamiento. Por supuesto, estos estaban restringidos a armas con mana aplicada a las mismas. Estas armas de asistencia tenían su eficiencia en la conducción de mana mejorada, y estaban destinadas a resaltar el rendimiento original de la magia. Estas armas se llamaban AAR (Armas de Asistencia para Recuperación) o Aura¹, para abreviar.

Las espadas y lanzas hechas de material cuya única propiedad era su dureza eran inútiles contra los Fiends con conchas externas súper duras, por lo que ningún Maestro Mágico las favorecía. Ese tipo de armas eran para uso exclusivo de las personas, y llevar una era como anunciar que eran simplemente civiles normales.

En los campos de entrenamiento se encontraban todo tipo de armas preparadas por el Instituto. Al ser estudiantes de primer año, muy pocos estudiantes tenían su propia Aura personal. Quienes la tenían, fueron aquellos que habían sido entrenados para convertirse en Maestros Mágicos antes de su admisión en el Instituto.