Haken no Kouki Altina (NL)

Volumen 11

Capitulo 3: Regis y Bastian

Parte 2

Las cuchillas estaban ensangrentadas.

Bourgine los amonestó severamente:

“¡Todos ustedes! ¿¡Han reducido a la gente de aquí!?”

“¡Hah! Me he enterado de los rebeldes reunidos en este bar. Simplemente estoy haciendo mi parte para mantener la paz dentro de la capital”.

“¿Cómo podría ser esto… sin ni siquiera una prueba?”

“¡Yo soy la ley! ¡Si no te gusta, presenta una queja! ¡Sin embargo, eso es solo si todavía estás viva mañana!”

Un soldado con armadura negra le informó a Becker: “¡Comandante de brigada, señor, esa es Bourgine!”

“¡Con que es así, mátala!”

“¿¡Eh!? Pero… El ministro dice que tenemos que aprehender…”

“¿¡No oíste lo que dije!? ¿Cómo podemos dejar que vaya a juicio? ¡Los muertos no se quejarán, ni correrán, ni me reprenderán! ¿¡No es eso un ciudadano modelo!?”

“¡S-sí señor!”

“¡Bien, conviértela en una ciudadana modelo!”

Los soldados rugieron. Como si este fuera un campo de batalla. Sin embargo, Regis no tenía tropas con él.

Claude se apresuró a proteger a Bourgine.

“¡Corra! ¡No puede morir en un lugar como este, professeur!” Becker ordenó:

“¡No la dejen escapar! ¡Si ella escapa, todos ustedes serán azotados!”

Los soldados cargaron. Este lugar estaba abarrotado sin ningún lugar para correr. Ni siquiera una ventana para saltar.

— ¡Moriremos si esto continúa! 

Regis gritó:

“¡Vamos a hacer un trato!”

Si él se estancara por el tiempo…

Becker rugió: “¡Ignóralo!”

Parecía que la misma táctica no funcionaría de nuevo.

Pero los soldados eran diferentes. Estaban un poco indecisos. Regis no se rindió.

“¿¡Están seguros sobre esto!? El Comandante de la Brigada podría ser un noble, ¿pero creen que puede proteger a sus subordinados? ¿¡Por qué creen que el Ministro emitió la orden directamente en su presencia!? ¿¡De verdad creen que ignorar la orden de aprehender a Madame Bourgine es una buena idea!?”

“¡No hables tonterías! ¡Te ordené matar, así que ve a matarla! ¡Quien me desafíe también es un rebelde! ¡Ejecútenlos también!”

Quizás Becker realmente mató a sus subordinados antes. Los soldados solo dudaron momentáneamente.

Y luego siguieron sus órdenes y levantaron sus espadas.

— No está bien eh. 

La situación era demasiado terrible. No había ninguna táctica que pudiera usar para ganar tiempo. Después de que los soldados escucharon las palabras de Becker, ni siquiera había espacio para la negociación.

Chink– El suave sonido metálico de una ballesta interrumpió.

Un perno disparado desde tan cerca perforó el cuello de un soldado de armadura negra.

“¿¡Guahh!?”

“¡La única forma es luchar entonces!”

Franziska gritó.

Disparó en rápida sucesión como si acabara de despertar de su sueño, derribando a tres hombres de inmediato. Como se esperaba de un mercenario de Renard Pendu.

Pero la cantidad de soldados que cargaban era demasiada. Estuvieron ante ellos en poco tiempo.

Una espada fue empujada hacia adelante. Ella esquivó el primer ataque.

“¿¡Ugh…!? ¡No me derribará una espada tan lenta!”

“¡Hyaaahhhhh–!”

Tres soldados la atacaron al mismo tiempo. Parecían estar bien entrenados, sin dejar espacio para evadir.

Franziska bloqueó un ataque con su pequeña ballesta. Con el sonido del metal retorciéndose, la cuerda de la ballesta se rompió. El delicado marco se rompió.

Ni siquiera podría usarse para bloquear ahora.

Sus pies golpearon el sofá. Fue demasiado calamitoso.

Un corte por un soldado… Cortó en el flanco de Franziska. “¿¡Ugh!?”

Su delgado cuerpo voló en el aire. Y rodó en el piso.

“~~~ !? ¡¡Ugh… Bweahhh…!!”

Ella escupió el fluido rojo que brotaba desde su garganta. El suelo estaba teñido de rojo por la sangre.

Pero Regis permaneció rígido en el sofá.

Los soldados levantaron sus espadas otra vez. Esta vez, se acercaron a Claude y Bourgine. “¡Ugh!”

Con solo su daga, probablemente ni siquiera podría detenerlos. Becker ordenó:

“¡Maten a ese hombre también! ¡Es probable que sea una escoria rebelde de todos modos!”

“¡Bastardo!”

“¡B-basta! ¡Te equivocaste de persona!” Regis abrió sus brazos.

Pero los soldados no se detendrían.

Las hojas cortaron hacia Bourgine y Claude. Algo saltó sobre las cabezas de los soldados.

Por un instante, pareció ser una bestia de algún tipo. La sombra que aterrizó movió su espada corta al mismo tiempo.

Sangre salpicó.

La espada del soldado acorazado negro… cayó al suelo, con su mano todavía sosteniendo la espada.

Un joven con cabello castaño aterrizó ante Claude y Bourgine.

“Phew ~… ¿Qué está pasando? Dejando la aprensión a un lado, ¿no es extraño que esto se convierta en asesinato?”

Tenía gafas hechas con cristales polarizados… Gafas de sol. Y una espada corta en la mano.

La hoja entera parecía un triángulo alargado. Tenía unos 4 Pa (30 cm) de longitud. Era de doble hoja, pero tan delgada como el papel.

Regis no vio el artículo real antes, pero vio bocetos de él.

— ¿Esa es Vite Espace Trois?

 En ese caso, esta persona es…

Bourgine dijo:

“Eres confiable como de costumbre, Bastian”.

“Debería disculparme por llegar tarde. Si me hubiera dado cuenta de la conmoción anterior… Ehh… ¿¡Eso es!?”

Bastian abrió los ojos de par en par mientras miraba a Franziska quien yacía en el suelo.

“¿¡Tú eres Fran!?”

“Ugh…”

Ella levantó la cabeza con un gemido. Con solo un ojo abierto.

“… ¿Ah? ¿Bastian…?”

“¿¡Qué estás haciendo aquí!? ¡Ah, no, deja eso para más tarde! ¡Resolveré esto ahora mismo, aguanta! ¡No te mueras ahora!”

Dijo mientras se quitaba las gafas de sol. Miró a los soldados con sus ojos carmesí.

Con sus ojos carmesí, que solo la realeza de Belgaria poseía a la vista, dijo:

“¡Soy el tercer príncipe de Belgaria, Heinrich Trois Bastian de Belgaria! ¿Por qué apuntan sus hojas contra Professeur Bourgine? ¿Y hasta lastimaron a mi amiga?”

Los soldados negros acorazados dieron un paso atrás. Becker rugió hacia ellos:

“¡Imbéciles! ¿Por qué aparecería un Príncipe en un lugar como este? ¡Impostor! ¡Ese impostor definitivamente está interrumpiendo la paz en el Imperio! ¡Mátenlo!¡Asegúrense de que esté muerto! ¡Si no quieren morir, mátenlo!”

(Pero que weon más desagradable, lo pueden masacrar de una puta vez!?)

“¿Ah? Escuché al abuelo decir que se estaba formando el Cuerpo de Seguridad Pública. Pensé que tomaría algo de tiempo, pero ya pueden ser implementados eh”.

Los soldados dudaron, pero al igual que ese momento con Regis en este momento… estaban presionados por las palabras de Becker y se acercaron con sus espadas.

Bastian tomó un ligero aliento.

“Lo siento, pero cuando es hora de proteger… no me contendré”.

Su cuerpo se movió por un momento. Regis no entendió lo que estaba haciendo. Los tres soldados atacantes cayeron al mismo tiempo.

La sangre brotó desde los huecos de la armadura en sus cinturas. Los soldados detrás de ellos jadearon.

Bastian cepilló la espada corta que estaba manchada de sangre.

“… Hermano… es más rápido que esto. Entonces, yo… tengo que ser aún más rápido. Necesito ser más rápido”.

“¿¡U-Ughh…!?”

Becker pateó la espalda de un soldado tembloroso. “¡Por qué te retiras sin órdenes, basura!”

“¿¡C-comandante de Brigada!?” Los soldados lloraron.

Becker sostenía una pistola. La señaló a Bastian.

“¡Incluso si eres un realeza… es lo mismo si estás muerto!”

“… ¿Hablas en serio sobre eso?”

¡Ha! La sonrisa de Becker era tan amplia que casi le rompió la cara en dos. Él fulminó con sus ojos inyectados en sangre.

Apretó el gatillo con el dedo índice de su mano derecha. Splat, un trozo de carne cayó al suelo.

El arma permaneció en silencio. “¿Eh?”

Becker miró hacia abajo, y luego gritó de inmediato. Lo que estaba en el piso era su dedo índice.

“¿¡Hyaaahh~~!? ¿¡De ~~~~ do ~~~!? ¿¡Mi… Dedo~!?” (Como me encantaría ver esta parte animada, viendo retorcerse de dolor a este pedazo de mierda…)

“Es mejor escuchar tu declaración en la corte. Déjame decir esto primero… Ni siquiera pienses en hacer algo estúpido. Terminarás peor que esa herida. Si recoges cualquier arma o cuchilla, apuntaré a tu corazón después”.

“¿¡Ahhhh~~!?”

Bastian parecía haber arrojado un cuchillo con la otra mano.

Regis ni siquiera pudo ver su movimiento de lanzamiento, y mucho menos arrojarlo.

Solo sabía que un cuchillo golpeó la mano de Becker. Y su dedo se cayó.

A juzgar por estos hechos, Bastian fue quien lo arrojó, solo pudo concluir eso. Bastian les dijo a los soldados del Cuerpo de Seguridad Pública:

“Creo que todos los problemas hasta ahora han sido causados por el comandante. Pero si quieren continuar luchando, no les perdonaré. ¿Qué dicen ustedes?”

“……”

Clank, un soldado con armadura negra arrojó su espada al suelo. Los otros soldados siguieron al unísono uno por uno.

Se arrodillaron con los cascos puestos, y bajaron sus cabezas. “¡Su Alteza, perdónanos! N-nosotros…”

“Está bien si lo entienden. Tiren al idiota a una celda de aislamiento en el Ministerio de Asuntos Militares. Dejen que mi hermano y el Ministro determinen sus crímenes. Tratar de asesinar a ciudadanos inocentes es burlarse de la ley”.

“Esa… esa persona, Bourgine, podría ser un rebelde…”

“¿Hay alguna prueba? ¿Solo porque ella es liberal? ¿Porque dio un discurso en la plaza frente al palacio? Nada de esto es contra la ley”.

“T-tampoco estamos seguros de los detalles…”

“Si no quieren que la nación se desmorone, entonces hagan su propia investigación y formen sus propias opiniones. Suficiente, vayan. Estoy ocupado aquí”.

Los soldados se inclinaron profundamente, y luego llevaron a Becker, que estaba gritando “Duele, duele” y se fue.

Franziska fue colocada en el sofá y le quitaron la ropa.

Su ropa estaba desgarrada en la cintura, pero la cota de malla aún se sostenía. Debido a que saltó para suavizar el impacto del golpe, logró minimizar su lesión. Regis tocó los lados de Franziska.

Había un gran hematoma extendido sobre él.

Su rostro se retorció por el dolor. “Ughh…”

“Respóndeme asintiendo o sacudiendo la cabeza. ¿Te duele cuando respiras?¿Sientes náuseas, algún zumbido en tus oídos? Bien entonces, ¿duele el interior de tu abdomen? ¿Aquí? ¿Aquí? ¿Qué tal aquí?”

“¿¡!?”

“Ah, parece que esta es la parte que duele”. Hmm… Dos costillas rotas. Tendrás que ver a un médico, pero vivirás. Tú vomitaste sangre porque el impacto dañó tu estómago. Necesitarás tiempo para recuperarte. Solo bebe sopa por ahora”.

“… Ugh… ese es mi problema…”

“Es genial que hayas sobrevivido. Muchas gracias por protegerme”. Regis le tomó la mano con fuerza.

Franziska chasqueó la lengua. Pero ella no sacudió su mano. “… ¿Es eso cierto?”

“¿Eh?”

“¿Fui… de uso? ¿Hermano mayor… me alabará…?”

“No sé lo que él piensa, pero los dos todavía estamos vivos. Esto es definitivamente un beneficio del Rey Mercenario”.

“… Es así. Eso es bueno, entonces…”

“Sería difícil dormir debido al dolor, pero aun así intenta acostarte y descansar. Voy a buscar al doctor”.

“Sí.”

Asintiendo ligeramente, cerró los ojos y apretó los dientes para soportar el dolor.

El dueño de la tienda pidió un carruaje, y el grupo de Regis dejó el bar.

***

La casa de Bourgine–

Era un edificio barato de dos pisos en una condición que hacía sorprendente que la gente realmente viviera allí.

Ellos subieron por la mitad de las escaleras rotas hasta la entrada de un pequeño apartamento y, al asomarse al interior, se podían ver cuatro sillas rodeadas de montañas de libros.

Ya era tarde en la noche, pero el médico con el que estaba familiarizado Bourgine llegó y trató la herida de Franziska espléndidamente.

Él aseguró sus lados a una mesa con vendas. Su lesión fue tal como Regis diagnosticó. Tomaría un mes o dos antes de hacer una completa recuperación.

No estaba claro cómo estaban sus órganos internos, pero deberían llamarlo si volvía a vomitar sangre, les indicó el médico antes de irse.

Después de dejar a Franziska para dormir en el dormitorio, Regis y los demás se reunieron en la sala de estar.

“Phew…”

Regis se sentó en la silla y exhaló. “Gracias por tu duro trabajo.”

Una chica rubia con ojos azules les sirvió café.

Ella tenía un aire suave pero digno sobre ella. Incluso Regis, quien le prestaba poca atención al atractivo de las mujeres, quedó hipnotizado por un momento.

Su nombre era Elise Archibald, una amiga de Bastian.

No era muy alta y parecía tener 13 años, pero en realidad tenía 16 años, como Bastian. Afortunadamente, Regis no mencionó el tema de su edad.

Regis recibió la taza llena de líquido marrón. “Gracias– hmm, delicioso”.

“Fufu, estoy contenta”.

Además de Regis y Elise, la propietaria de la casa, Bourgine, el periodista Claude y Bastian también estaban presentes.

Regis se inclinó ante Bastian y se presentó nuevamente.

“Muchas gracias por tu ayuda antes. Soy Regis d’Auric, el estratega de la Cuarta Princesa”.

“¿¡Ehh!?”

Bastian inclinó la cabeza.

“Ja, jaja… Hay una buena razón… sobre por qué estoy vestido así”. Claude y Bourgine también garantizaron su identidad.

La cara de Bastian se asombró aún más.

“¿No es Regis d’Auric el estratega que derrotó a la ‘Armada de la Reina’ de High Britannia?”

Él escuchó esta noticia cuando se estaba escondiendo anónimamente en la mansión de un noble en High Britannia.

Regis se rascó la cabeza.

“… Mantuve el comando como Almirante de la Flota en aquel entonces”.

“¿¡No eres el héroe que condujo al Imperio de Belgaria hacia la victoria en esta guerra!?”

“… No lo hice solo”.

“¡Qué tipo tan débil!”

“… Lo siento por eso”.

“Pensé que serías un hombre tan grande como un oso, pero en realidad eres una mujer”.

“¡No!”

Esto ya había pasado varias veces, por lo que estaba acostumbrado.

Regis explicó que debido a que Latreille estaba detrás de su vida, tenía que disfrazarse así.

Bastian pareció impresionado mientras miraba a Regis.

“De hecho, ahora que lo mencionas, ¿tu cabello está un poco torcido…?”

“Ah… Bueno, eso es porque mis acciones fueron demasiado intensas. Tal vez debería volver a mi apariencia original por ahora”.

Regis se quitó la peluca.