Death March kara Hajimaru Isekai Kyusoukyoku (NL)

Volumen 15

Capítulo 4: El Trabajo Duro Tiene su Recompensa

Parte 4

Empecé a lanzar magia de apoyo a todas para preparar la batalla.

“¿Alerta rojaaaaaa?”

“La mantis hambrienta está mirando hacia nosotros, sir.”

Tama y Pochi nos avisaron.

Por suerte, ya estaba en el último hechizo de apoyo.

“…… ■ Armadura de Viento Fuugai.”

Un resplandor verde rodeó a Lou, indicando que la magia de apoyo defensiva estaba en efecto.

Bebí una poción de recuperación de magia y utilicé mi habilidad “Meditación” para recuperar un tercio de la magia que había perdido.

“Obviamente sus brazos de espada y hacha son peligrosos, pero si te atrapa con las guadañas más pequeñas, intentará morderte con un veneno paralizante. Todas, además de Lou, deben intentar evitar quedarse quietas lo más posible mientras luchan.”

Tomé nota mentalmente de las tranquilas precauciones de Satou. Algún día me tocaría aprender más sobre estos monstruos y compartir esa información con mis compañeros.

“… ¿Qué…?”

Exclamó Lilio, y yo abrí los ojos de la meditación para ver una luz blanca que nos rodeaba.

“Es un encantamiento de protección física con Magia Práctica. Es sólo de un pergamino, así que no será tan efectivo como el real, pero es mejor que no tenerlo.”

Satou explicó con indiferencia mientras sostenía el pergamino, pero si recordaba bien, los pergaminos mágicos eran aún más valiosos que las pociones, y además eran de un solo uso.

Puede que nunca sea capaz de pagar a Satou todo lo que ha hecho por nosotros.

“Amo, ya viene.”

Al oír la advertencia de Liza, Lou se adelantó de un salto.

“¡Por aquí, fea mantis!”

Su habilidad “Burla” dirigió la hostilidad de la mantis hacia ella.

“Yo empezaría el canto de Martillo de Aire.” Me sugirió Satou.

“¡El que golpea primero ríe el último!”

Lady Karina giró su espada, dejando una estela de luz roja en el aire mientras cargaba hacia las patas delanteras de la mantis.

… Ah.

Su pie quedó atrapado en un bache del suelo rocoso.

“¡Toma esto, por favor!”

Lady Karina apenas logró salvarse de la caída y aprovechó el impulso para golpear a la mantis con un poderoso golpe de su ataque especial “Hoja de Molino de Viento”.

Su espada ancha cortó una de sus patas delanteras de un solo tajo, y luego siguió avanzando hasta que se estrelló contra el suelo.

“¡Muy bien, Karinaaa!”

“¡Gran recuperación, sir!”

Tama y Pochi animaron a Karina, ambos agitando un objeto llamado “abanico plegable”.

Por desgracia para Lady Karina, su impulso la hizo caer por el suelo, dejando atrás su espada.

Como siempre, fue notablemente dura. Estaría preocupado por ella si fuera cualquier otra persona, pero con la protección de Raka, Lady Karina debería estar bien.

“¿Eso ni siquiera frenó esta cosa?”

Lou se apresuró a sujetar su escudo mientras la mantis avanzaba con una nube de polvo.

Supongo que perder una de sus ocho extremidades no le importó mucho.

Pero eso estaba bien.

“¡Ahora, Zena!”

A la señal de Satou, pronuncié la última sílaba del canto de Martillo de Aire que había estado sosteniendo, y lo envié volando hacia la mantis.

No parecía hacer mucho daño, pero sí consiguió ralentizar al monstruo.

“¡RAAAAA!”

La mirada de la mantis giró hacia mí, pero Lou se dio cuenta de ello y volvió a bramar con la habilidad “Burla”, para luego embestir con su escudo el torso de la mantis gigante.

KWWWAAAAMUWA.

La mantis bajó uno de sus brazos con hacha, y Lou levantó su escudo para bloquearlo.

Entonces una de las patas delanteras de la mantis se estiró hacia el torso indefenso de Lou.

“¡Cuidado!”

Iona golpeó la pierna justo a tiempo con su espada.

A diferencia de la “Hoja de Molino de Viento” de Lady Karina, este ataque no lo cortó de una sola vez, sino que la cuchilla se clavó lo suficiente como para destrozar su articulación.

“¡Toma esto también!”

Con un comienzo de carrera, Lady Karina dio una patada voladora a la parte posterior de la cabeza de la mantis hacha, desviando sus brazos de espada para que se clavaran en el suelo delante de Lou.

“Karinaaa, ¿nombre de ataqueeeeee?”

“¡Hay que gritar un nombre de ataque con una patada voladora, sir!”

Mientras Lady Karina aterrizaba, Tama y Pochi gritaron algunos consejos (¿creo?).

Karina jadeó y empezó a murmurar para sí misma. ‘Patada Magnífica’… No, ¿quizás ‘Espiral Dorada’ sería mejor…?

“¡Lady Karina, cuidado!”

“… ¿Zena?”

Lady Karina parpadeó confundida justo antes de que la pata trasera de la mantis le diera una patada en el suelo.

“Novata, ¡tenemos que cubrir la pifia de Lady Karina!”

“¡Sí, Lady Erina!”

Las dos guardias de Karina clavaron sus espadas cortas en el par de patas centrales de la mantis hacha.

Su ataque derribó a la mantis justo cuando intentaba recuperar su postura.

“…… ■■■ ¡Retención de Viento! ¡Kaze Shibaru!”

Utilicé un hechizo de obstrucción para frenar los movimientos del monstruo.

Eso debería impedir que se levante durante un tiempo.

“¡Lou, la articulación del brazo derecho que parece una espada!”

“¡Lo tengo!”

Iona aplastó la articulación del brazo izquierdo de la espada con su espada ancha, y la espada roja de Lou flameó al hacer un corte en el derecho.

Como estaba bloqueando un brazo de hacha con su escudo al mismo tiempo, no fue capaz de poner todo su peso en el ataque.

“¡Ahora!”

Lilio utilizó la pistola vara de fuego para atacar la articulación que Lou había dañado.

La bola de fuego del rifle dio de lleno en la articulación, y el aire turbulento de la Retención de Viento propagó las llamas, quemando el caparazón de la mantis hacha.

GWWAABBUWWA.

Por primera vez, la mantis soltó un aullido de dolor.

“¡Iona, Lilio! ¡No se preocupen por mí, denle con todo lo que tengan! ¡Ustedes también, chicas de la guardia!”

Todas gritaron su acuerdo al grito de Lou, y comenzó una ola de poderosos ataques.

Pensé en unirme con Martillo de Aire o incluso con Martillo Huracán Pesado, pero decidí apoyar a Lou con hechizos como Armadura de Viento y Retención de Viento.

El feroz choque de ataque y defensa continuó, hasta que…

“¡Maldición, está volando!”

Una vez que la mantis hacha voló en el aire, teníamos opciones limitadas para atacarla.

Teníamos que bajarla de alguna manera, y rápido.

“… ■ ¡Turbulencia! ¡Rankiryuu!”

Usé Magia de Viento para crear ráfagas de viento, dificultando el vuelo de la mantis.

Lilio disparó otra bola de fuego con la Pistola de Vara de Fuego, que se expandió con el viento y chamuscó las alas de la mantis hacha.

Incluso entonces, el insecto gigante no bajó.

¿Entonces qué tal esto?

“… ■■■ ■■■ ¡Martillo Caído! ¡Rakkitsui!”

Utilicé un ataque aéreo de empuje hacia abajo para estrellar la mantis hacha contra el suelo.

Sin embargo, antes de que pudiéramos correr hacia ella, la mantis extendió sus alas y se preparó para despegar de nuevo.

Pero entonces…

“Patadaaaa… ¡Kariiiiiina!”

La patada voladora de Karina impidió la huida de la mantis hacha, dejando a su paso destellos de luz azul y dorada.

Comencé mi siguiente canto de inmediato.

“¡Vamos, Novata!”

“Sí, Srta. Erina—‘Perforación Doble’.”

Las dos guardias de Karina la siguieron de cerca, utilizando su ataque especial con sus lanzas cortas.

KWWWAAAAMUWA.

De la boca de la mantis comenzó a brotar una niebla verde oscura.

“¡Es un ataque de veneno! ¡Atrás!”

“¡Suficiente!”

La pistola vara de fuego de Lilio disparó a la mantis justo en la cabeza, quemando la niebla venenosa de inmediato.

GWWAABBUWWA.

“¡Yaaaa! ¡‘Golpe de Escudo’!”

Lou se acercó a la carga y golpeó con su escudo el delgado cuello de la mantis hacha, haciéndola retroceder.

La espada ancha de Iona no tardó en llegar, atravesando la mandíbula de la mantis con el movimiento especial “Estratos Ascendentes”.

Si su espada hubiera seguido avanzando, la vida del monstruo probablemente habría terminado allí mismo.

Pero agarró los hombros de Iona con sus delgados brazos en forma de guadaña, impidiéndole hacer más daño.

“Zena…”

Asentí a Satou, que inmediatamente sopló una flauta de madera para indicar a todas que retrocedieran.

El extraño y estridente sonido resonó, y todas se apresuraron a retroceder.

Pochi y Tama apartaron de una patada los brazos de guadaña para liberar a Iona de sus garras.

Perfecto. Ahora no tengo que contenerme.

Envié toda la magia que había acumulado a mi bastón para ayudar a lanzar mi hechizo.

“…… ■ ¡Martillo Huracán Pesado! ¡Omosen Yari!”

Dejé volar el hechizo intermedio de Magia de Viento que había aprendido del libro de hechizos de Satou.

Un viento feroz aulló en la zona, levantando un tornado de arena.

El martillo giratorio de viento golpeó el largo torso de la mantis, atravesando fácilmente la luz roja que representaba su protección mágica, y destruyó el cuerpo desprotegido bajo el caparazón roto.

Cuesta el triple de magia que Martillo de Viento, pero su efecto es mucho más potente.

“¡Zena!” Escuché a Satou llamar. “¡Todavía no está terminado!”

“■■■ ■■■■■■■ ¡Ráfaga de Fuego! ¡Kakou Bakuryuu!”

Utilicé el otro hechizo que aprendí recientemente junto con el Martillo Huracán Pesado, y la mantis hacha que apenas sobrevivía fue aplastada por completo.

***

“Eso fue notable, Lady Zena.”

“¿Felicitacioneeeeeessss ?”

“¡Gran trabajo, sir!”

Liza, Pochi y Tama celebraron nuestra victoria.

Elogié a mis compañeras por su duro trabajo y agradecí a Liza y a los demás su ayuda.

Llevo un tiempo confiando en Satou, pero después de este entrenamiento, creo que también podemos luchar por nuestra cuenta.

Al darme cuenta de repente de que no oía la voz de Satou, miré a mi alrededor y lo vi mirando la pared adyacente a la caverna gigante, con aspecto grave.

“Todas, beban algunas pociones y retírense a la pared del fondo, por favor.”

Todas hicimos lo que nos indicó.

Reactivé la magia de detección de enemigos que había dejado de usar durante la batalla contra la mantis hacha.

Tama, Pochi y Lilio tenían las orejas pegadas al suelo, escuchando sonidos lejanos.

“Esta viniendooooo…”

“Ya viene, sir.”

Poco después de que Tama y Pochi hablaran, escuché gritos y el sonido de árboles cayendo.

Mi magia de detección de enemigos también estaba captando algo.

Tres bestias—un mono, una rata y una comadreja—entraron corriendo por el agujero de la pared.

En ese momento, la pared junto al agujero explotó, enviando fragmentos de roca por todas partes.

“¡Wah!”

Lilio y yo sacamos los escudos de nuestros guanteletes para proteger a todos.

Los escudos transparentes se rompieron tras unos cuantos impactos de los escombros, pero Lou tenía su escudo gigante preparado para protegernos después.

Había un nuevo agujero en la pared, y atravesándolo hasta el techo había una flecha más gruesa que varias lanzas juntas.

“No puede ser…”

“Sí, parece que intentaban atraer a una presa con sus monstruos domesticados, pero fallaron y terminaron atrayendo a la mantis cazadora en su lugar.”

¡¿Mantis Cazadora?!

La imagen de la enorme flecha disparada desde la niebla pasó por mi mente.

… Imposible.

No teníamos ninguna posibilidad.

Ese no era el tipo de monstruo al que cualquier individuo podría enfrentarse.

Tendrías que tener un ejército, una base y una tonelada de suministros y equipo para luchar contra algo así.

Ni siquiera Satou y su grupo podrían derrotar a un monstruo tan poderoso sin ninguna preparación.

Y sin embargo…

“Espera aquí, por favor.”

Satou nos sonrió y se dirigió hacia el agujero.

Apenas miró a las chicas bestia que estaban encogidas detrás de un peñasco, y no dijo nada para culparlas de haber traído a la mantis cazadora.

“¿Nosotras tambiénnnnn?”

“Por supuesto, sir.”

“Sí, apoyemos al Amo lo mejor que podamos.”

Liza, Tama y Pochi se adelantaron para seguir a Satou, al igual que cuando nos encontramos por primera vez con la mantis hacha.

No parecían más preocupadas que Satou.

“¡Entonces yo también!”

“¡No, no puedes!”

“¡Ella tiene razón! ¡Por favor, contrólese, Lady Karina!”

Lady Karina intentó seguirlos, pero sus dos guardias la detuvieron con todas sus fuerzas.

La enorme mantis cazadora asomó por el gigantesco agujero, lo suficientemente grande como para que la mantis hacha pareciera un niño.

… Aterrador.

Sólo con mirarle se me enfriaron las manos y se me escurrió la sangre de la cara.

HWUNTZWEEERRR.

La mantis cazadora emitió un chillido como si se riera despectivamente de nosotros.

Era como una campana que tocaba la hora de nuestra ejecución.

Ante la muerte encarnada, un cobarde no puede hacer otra cosa que temblar de miedo.

… No.

No puedo luchar si estoy congelada por el miedo.

Apreté mis manos temblorosas en puños y respiré profundamente.

Mi visión oscurecida y estrecha mejoró un poco.

Me di una palmada en las mejillas para controlarme y calmar los nervios.

No pasa nada.

Todavía estaba temblando, pero al menos podía usar la magia de apoyo.

“…… ■ Armadura de Viento Fuugai.”

“Gracias, Zena.”

Conseguí lanzar la protección de viento sobre Satou y las chicas.

“Bueno, ahora que nos han dado un hechizo de apoyo y todo, vamos a derribar esta cosa.”

Satou desenfundó una espada de impresionante belleza, asintió levemente a Liza y a las demás, y corrió hacia adelante.

Subiendo a toda velocidad por una roca gigante cercana al enorme agujero, Satou saltó ágilmente hasta situarse justo delante de los ojos de la mantis cazadora.

La mantis cazadora movió su enorme brazo con forma de arco hacia un lado y utilizó una pata delantera más pequeña, parecida a una espada, para dar un tajo a Satou.

“¿Saltó en el aire?”

Satou tomó velocidad en el aire y pasó por debajo de la cabeza de la mantis cazadora.

“¿‘Corte de Cuelloooo’?”

Siguiendo a Satou como una sombra, Tama pasó revoloteando al otro lado del cuello de la enorme mantis.

Justo después de que Tama pasara, la sangre brotó del cuello de la mantis cazadora.

“Cazador Aquiles, Pochi, sir.”

Pochi se apresuró a cortar las seis patas inferiores de la mantis cazadora.

“Draco Bus—”

Corriendo al frente, Liza atravesó fácilmente el caparazón extra duro del pecho de la mantis con su Lanza Mágica.

“—No, supongo que eso no será necesario para un enemigo como éste.”

La luz roja que rodeaba el cuerpo de Liza se desvaneció.

Cuando retiró su lanza y se alejó hacia el agujero que conducía a la gran caverna, la cabeza cortada de la mantis cazadora cayó al suelo tras ella.

Derrotaron a ese monstruo increíblemente poderoso en cuestión de segundos.

La visión que tenía ante mí era tan irreal que mi mente se quedó en blanco.

“… ¿Se fijó en nosotros?”

Mientras miraba aturdida, oí la voz de Satou llegar a mis oídos.

Al mirar a mi alrededor, vi que Satou y compañía no miraban a la mantis que habían derrotado, sino a otro lugar.

Sus ojos estaban al otro lado del agujero en la pared: la gran caverna.

“¿Va a salirrrrr?”

“Ese debe ser el jefe de área, sir.”

Contemplando la caverna con Satou, Tama y Pochi murmuraron algo aterrador.

Si recuerdo bien, el jefe de área era un monstruo poderoso a la altura incluso de un demonio intermedio.

Estaba claro que no conocía los límites de la fuerza de Satou y su grupo, pero sin todos sus miembros ni el equipo adecuado, no podía imaginar cómo podrían derrotar algo así.

Luché contra el miedo y el cansancio, intentando levantarme para sugerir que nos retiráramos a la zona segura.

“¿Debemos ir a derrotarlo?”

… ¿Eh?

“No, está bien. No tenemos que hacer nada.”

Poco después de las palabras de Satou, la caverna ardió con fuego carmesí.

¡El calor nos va a alcanzar!

Empecé a recitar el hechizo Cojín de Aire mientras me apresuraba a ir al lado de Satou.

Ante mis ojos, una ráfaga de viento dorado tomó forma, y contuvo las furiosas llamas con sus brazos.

Un pájaro dorado gigante flotaba en el aire.

¿Qué es eso?

“¿Garuuudaaa?”

“¡Es el Sr. Espíritu de Mia, sir!”

Tama y Pochi señalaron a la criatura dorada.

Una mantis gigante se tambaleó entre las llamas, ennegrecida y quemada.

Era difícil de distinguir desde esta distancia, pero parecía que podía incluso empequeñecer a la mantis cazadora.

“¡Whoopeeee!”

“¡Hurraaaa, sir!”

Centelleantes destellos de luz se estrellaron contra la gigantesca mantis, y finalmente la criatura dorada le cortó la cabeza.

… ¿Un monstruo al nivel de un demonio intermedio, abatido en segundos?

“Satou, ¿eso fue…?”

“Son sólo Arisa y las otras. Dijeron que vendrían a visitarnos y a traernos provisiones el último día.”

Satou respondió a mi pregunta con indiferencia.

Eso no es lo que estaba preguntando…

Cerré la boca sin hacer más preguntas.

Satou y su grupo estaban claramente en otro nivel, incluso más de lo que yo creía. La mera diferencia de nuestras fuerzas amenazaba con activar mi complejo de inferioridad, pero me abofeteé las mejillas para alejar esos pensamientos infantiles.

Había algo más importante que había que decir ahora mismo.

“Satou, gracias.”

Todavía estaba muy lejos, pero algún día juro que me haré lo suficientemente fuerte para devolverle a Satou todo lo que ha hecho.

El trío de chicas bestia que había provocado el caos fue apresado por Lou y algunas compañeras, y Arisa y las demás las llevaron al gremio de exploradores después de darnos los suministros que traían.

Así, nuestra pequeña—o más bien, completamente inolvidable—aventura de entrenamiento y desarrollo de un coto de caza en el laberinto llegó a su fin sin que se perdiera una sola vida.

Cuando volvimos del laberinto y nos metimos en la cama del barracón esa noche, el agotamiento físico y mental de la expedición se impuso por completo, y no nos despertamos hasta el atardecer del día siguiente.