Nihon E Youkoso Elf-san (NL)

Volumen 2: Capítulo de la Dragona Mágica

Prologo: Acostarse y Olvidarse del Calor

Thunk, thunk, thu-thunk.

Caminábamos a través de un pueblo en el País Desértico de Arilai con el sonido ligero de los tambores resonando a nuestro alrededor. Algo que sonaba como una ocarina se unió a la melodía, haciendo que el ambiente fuera más relajado y alegre.

Este país se había desarrollado tallando espacios en las montañas rocosas a lo largo de su pendiente. En tierras desérticas como estas, el agua era crucial para la supervivencia y también lo era resistir el calor infernal de los rayos del sol. Por esta razón, la gente bombeaba agua del río de color arena que fluía desde la parte trasera de este lugar.

Le expliqué esto a la chica elfa mientras saludábamos a las personas con turbantes en sus cabezas a nuestro alrededor y ella simplemente respondió con un “Eh” ligeramente desinteresada. Sus pálidos ojos púrpuras mostraron un atisbo de curiosidad intelectual, pero estaban nublados por el sol encima de nosotros.

“Entonces, ¿cómo lidian con este calor? Eso es más importante que su historia o cultura en este momento.”

Sus ojos me miraron mientras levantaba levemente la capucha de la túnica que cubría su cabeza. La luz del sol acentuó el contraste entre el color de su piel y la sombra, haciendo que su piel blanca pareciera demasiado brillante.

Mis intentos de despertar su curiosidad con la conversación se vieron frustrados por su absoluto odio al calor abrumador. Deseé que no hiciera tanto calor, pero fui yo quien la invitó a esta región desértica, así que no había mucho que pudiera decir al respecto.

El nombre de la chica era Marie. Ella era mitad hada, mitad elfo. Su nombre completo era Mariabelle y era una especie bastante rara por estos lugares. Sin embargo, nadie se atrevió a molestarla por la forma en que sostenía su bastón de hechicera con ambas manos, con una expresión obviamente irritada en su rostro.

Aquellos que buscaban desentrañar los misterios de las antiguas formas, conocidos como hechiceros, eran valiosos y poderosos en este país, incluso en todo el mundo. Marie era de una clase aún más rara conocida como Hechicera Espiritual y me había mostrado lo valiosas que eran sus habilidades hace solo unos días.

Ella estaba mirando a la ciudad con una expresión neutral cuando luego dirigió sus ojos púrpuras hacia mí.

“Este lugar seguro es extraño. Nunca había visto a tanta gente tomar siestas en la calle de esta manera.”

“Es porque el sol está directamente encima. Una de las cosas interesantes acerca de estos países desérticos es que tienen diferentes horarios de operación, creo.”

“No pareces muy interesado con esa cara somnolienta tuya. Además, no puedo creer que esté más fresco en ese edificio.”

Me reí entre dientes y gesticulé, diciendo, “¿Quién sabe?” y luego extendí mi mano hacia la de ella.

Incluso en estos entornos tan duros, la gente sigue viviendo. Durante todo el tiempo que habían persistido, seguramente también habían desarrollado una cultura de entretenimiento y alegría. ¿No sería interesante ver qué tipo de cultura han producido?

“¿Qué pasa con esa mirada de complicidad? Si estás tratando de engañarme otra vez, no va a funcionar.”

“No te preocupes, no estoy tratando de engañarte. Escuché que puedes disfrutar un delicioso té en ese edificio. Vamos, echemos un vistazo a la cultura Arilai. Yo invito.”

Marie estaba de mal humor debido al calor, como era de esperarse, y volvió la cabeza arrogantemente. Aunque parecía que ella prefería tomar un poco de té a la sombra que estar al sol, ya que colocó las puntas de sus dedos en mi mano extendida.

Nos recibieron con un “¡Bienvenidos!” cuando entramos en el área de descanso. El piso empedrado estaba pulido suavemente y forrado con múltiples alfombras de tamaño humano. Había gente sentada en estas alfombras, disfrutando de un poco de té y comida.

El olor en el aire era incienso… No, debe haber sido algún tipo de especia. Hizo que mi nariz hormigueara, pero fue una sensación refrescante e interesante que me recordó a las hierbas aromáticas.

Había un ambiente exótico en el lugar, pero la chica estaba sorprendida por algo completamente distinto: una ligera brisa estaba soplando, enfriando el calor en nuestra piel.

“¡Oh, es un poco más fresco aquí! ¿Cómo es que la temperatura es diferente aquí que en el exterior?”

Ya, ya, lo descubrirás muy pronto…

Pedí dos tazas de té junto con un poco de fruta y pollo al vapor, luego nos llevaron hacia algunos asientos vacíos.

Las paredes, de color arena quemada, parecían estar hechas de piedra esculpida. Había una ventana algo más alta de lo normal, donde el aire caliente parecía estar saliendo.

Marie seguía mirando a su alrededor con curiosidad, así que levanté una alfombra y la invité a que se sentara conmigo.

“Ven, toma asiento. Así podremos vislumbrar su cultura.”

“No veo qué podemos aprender con solo sentarnos…” murmuró para sí misma mientras se quitaba las botas y se sentaba en la alfombra. Parecía que sus pies estaban calientes y cansados ​​de tanto caminar, porque dejó escapar un gran suspiro. “Nnh, ¡se siente tan bien! Espera un minuto… ¿qué está pasando aquí? Nunca imaginé que el piso fuera tan frío al tacto.”

Como también me quité los zapatos y estaba descalzo, casi no podía creer cómo el calor desaparecía casi instantáneamente. El sudor pareció retirarse de mi cuerpo y era agradable y fresco tal como lo había mencionado Marie.

En realidad, no era como si un aire acondicionado estuviera encendido. El suave sonido del agua fluyendo provenía de alrededor y debajo del edificio, lo que ayudó a aliviar un poco el calor. Logré que los ojos de la chica se abrieran de par en par al decirle eso, lo que hizo que invitarla aquí valiera la pena después de todo.

“Me sorprende que este lugar tenga tanta agua a pesar de estar en el desierto.”

“Hay arroyos llenos de agua en las capas superiores. La gente usa el agua que fluye aquí abajo.”

Marie parecía impresionada mientras bajaba la capucha de la túnica que cubría su rostro. Su lustroso cabello blanco y sus largas orejas aparecieron y su resplandor llamó la atención de quienes nos rodeaban. Incluso las gotas de sudor en su piel eran accesorios que realzaban su belleza natural.

Escuché suspiros a nuestro alrededor mientras la gente la admiraba desde lejos.

Quería que se relajara y disfrutara, así que le coloqué un cojín detrás de la espalda y la acosté. Las miradas que recibía eran más fáciles de ignorar de esta manera y le permitía estirar sus miembros con comodidad.

“Ahh, me siento tan rejuvenecida… Así que este es el secreto para pasar el tiempo en el desierto. Aprendí algo útil hoy.”

“Es parecido a como estar a la sombra de un árbol se siente más fresco. Los árboles también prefieren temperaturas más frías, por lo que absorben el agua del suelo, que se disipa a través de sus hojas. Simplemente nos beneficiamos de este proceso natural también.”

“Hmm… no lo sabía. Disipación… Mencionaste algo sobre eso antes. Si es tan efectivo para enfriar las cosas, me gustaría encontrar una manera de ponerlo en uso con los espíritus.”

Esa no era una mala idea. Le dije que debía intentarlo, ya que tenía la capacidad de usar Hechicería Espiritual.

Mientras hablábamos, nuestro té y nuestra comida fueron llevados a donde estábamos sentados.

“Entonces, la cultura de este país es acostarse y olvidarse del calor disfrutando de algo de comida. Esa es la forma correcta de pasar el tiempo si me preguntas… Oh, probablemente no deberías usar esa salsa roja.”

Marie la olió un par de veces, hizo una mueca que me dijo que prestaría atención a mi advertencia y luego apartó el tazón de salsa. Luego tomó un trozo de carne blanca de pollo y lo arrojó en su pequeña boca.

“Me encantaría que al menos pudieras introducirles la sal. Ah, pero las hierbas que usan le dan a los platos un sabor refrescante.”

La sal era bastante valiosa. Ahora que lo pienso, ¿cómo harían sal en las regiones desérticas? Debería investigar eso en algún momento…

Parecía que Marie se había acostumbrado a la práctica de comer alimentos con las manos desnudas. Al principio se quejaba de que terminaba con los dedos engrasados, pero ahora comía pollo sin utensilios ni dudas.

Las hierbas servían para eliminar cualquier olor, por lo que parecía que la comida era sabrosa incluso para el paladar sensible de un elfo. El pollo era justo lo que necesitábamos para nuestros cuerpos cansados.

El té que quedaba en las tazas era de color ámbar y un aroma fragante llegó a mi nariz. Apreciando el olor, me alegré de haber elegido el que era un poco más caro.

Ante mí había una elfa relajándose y disfrutando y las fragantes hojas de té que solo se podían encontrar en países desérticos como este. Era un día bastante lujoso.

Disfruté el ambiente de otro mundo mientras miraba alrededor del área de descanso.

Como se esperaba, el laberinto parecía ser un tema candente entre la gente. No podía culparlos, considerando que un antiguo laberinto había aparecido repentinamente dentro de un sitio de excavación olvidado hace mucho tiempo.

Lo que me sorprendió fue que no había ningún indicio de miedo en sus caras mientras lo discutían. Pensé que la mayoría de la gente se asustaría si una mazmorra apareciera tan cerca de sus hogares.

Seguí escuchando y la razón pronto quedó clara:

Ese sitio aparentemente se había utilizado para las excavaciones de piedra mágica en el pasado y habían pasado unos 200 años desde que se había cortado esa gran fuente de ingresos. Había un sentimiento de fervor en los ciudadanos cuando hablaban de historias de aquellos tiempos de gran riqueza.

Marie también estaba escuchando con sus largas orejas. Ella se inclinó para susurrarme.

“Así que es algo grande que el laberinto haya sido descubierto. Somos forasteros aquí, pero se supone que tenemos que conseguir un permiso especial para explorarlo, ¿verdad?”

“Por lo general, sí. Si nos rechazan porque esta tierra es suya, tendrían menos aventureros en su región.”

Aunque, con los aventureros que estaban asociados con algún gremio, había habido casos en los que se les rechazaba con algún tipo de pago por los inconvenientes. En cuanto a nosotros, la señorita Elfa estaba en el Gremio de Hechiceros, así que dudaba que eso sucediera.

Reflexioné sobre ello mientras tomaba un poco de té.

Sí, está bueno…

Había un aroma floral que venía con el sabor.

“Una vez que obtengamos ese permiso, informemos al gremio de inmediato. Envié un pájaro mensajero, pero he estado fuera por un tiempo, así que pueden estar preocupados.”

“Sí, deberíamos hacerles saber que estás bien. Podemos ir al antiguo laberinto después de eso. Estoy esperándolo con ganas.”

Después de decirle esto, Marie volvió su mirada tranquila hacia mí.

“Sobre eso… Todavía no sabemos si puedo participar en la exploración. Escuché que el laberinto tiene un alto nivel de dificultad, así que es probable que mi rango no sea lo suficientemente alto para obtener la aprobación.”

Ese… era un factor que no había considerado.

Crucé las piernas y escuché sus explicaciones. Según Marie, el Gremio de Hechiceros inspecciona un nuevo laberinto para determinar su nivel de dificultad y luego asigna a las personas que están adecuadamente calificadas. Incluso si fuimos nosotros los que lo descubrimos, se nos puede prohibir la participación si no pensaban que podíamos manejarlo.

“Por supuesto, no se limitarían a dejar pasar la oportunidad de desvelar los secretos de la sabiduría antigua. En ese caso, normalmente eligen a un sustituto para que lo investigue. De esa forma, no desperdiciarían tiempo ni recursos.”

“Espera, ¿quieres decir que podrían elegir a alguien además de ti? No quiero ir a explorar con algún extraño. Si eso sucede, yo también voy a pasar.”

“No se puede hacer mucho al respecto. El descubrimiento de un laberinto que ha existido desde tiempos antiguos es casi inédito. Todavía no sabemos qué van a decidir.”

Así que prepárate, añadió ella.

En otras palabras, existía la posibilidad de que tuviéramos que renunciar a explorar el laberinto por completo.

Bueno, supongo que tendremos que aceptar lo que venga. Si protestara demasiado fuerte, podría impactar negativamente el futuro de Marie en el gremio.

Los ciudadanos continuaron murmurando acerca de cómo la familia real había enviado un grupo de exploradores y cómo se había descubierto el método de refinamiento de las piedras mágicas. En su mayoría eran solo conjeturas, pero como las personas que sabían los hechos de lo que estaba sucediendo, todo lo que podíamos decir era “Los rumores son bastante locos”.

“El método de refinamiento de las piedras mágicas… ¿Crees que están hablando de Mewi?” susurró Marie en mi oído.

Asentí. “Probablemente.”

No esperaba que la gente común lo supiera, pero de todos modos escuché su conversación.

Mewi era un niño de la tribu Neko que habíamos rescatado de un grupo de bandidos hace unos días. Por alguna razón, era capaz de controlar los objetos conocidos como las piedras mágicas.

Creo que los rumores son interesantes porque cuanto más se habla de ellos, más convincentes parecen. De las diversas ideas que se le ocurren a las personas, se elige primero la que sea más probable cierta. Ese se convierte en el punto de partida, que luego se convierte en una línea y se comparan con otros puntos de la historia para comprobar si todo tiene sentido. Entonces, eventualmente, estas vagas ideas comienzan a tomar forma.

Continuamos escuchando con interés, pero no nos dimos cuenta de que había otro oído escuchando.

Olvidado en mi bolsa estaba el regalo que nos dio la Dragona Mágica. Seres legendarios cuyos niveles superaban los 1000, capaces de usar magia que ni siquiera podíamos comprender. La escama de dragón, que brillaba discretamente con un tono blanco azulado, estaba conectada a las profundidades de las Ruinas Nazul-Nazul. Solo los hombres lagarto vivían en la ciudad subterránea ahora vacía, y solo nosotros conocíamos a la dragona mágica que residía más adentro, más allá de un pasadizo secreto.

La dragona respiró hondo y luego se dijo a sí misma mientras examinaba los alrededores.

“Así que, han abierto la puerta al laberinto. Qué despreocupados son, ignorantes de la tierra maldita que se encuentra dentro.” Ella dejó escapar un suspiro.

Entonces, otra imagen entró en su visión. Era el grupo que estaba realizando una inspección preliminar del laberinto. Entre ellos había una piedra radiante que brillaba intensamente.

“Jajaja, supongo que dejaré que se queden con su cebo y que regresen a su país por ahora. Parece que ellos ya se han vuelto bastante hábiles en la batalla.”

Nadie sabía aún a quién se refería con “ellos”. Pero su alegre sonrisa parecía anticiparse a cualquier cambio que estaba por venir.

La mirada en los ojos de la Dragona Mágica luego pareció tomar una sonrisa de otra naturaleza. Se giró y dirigió su mirada a sus pies, luego estiró sus alas y cubrió sus alrededores.

De esta manera, nadie podría interferir. Ella quería mantener la hermosa vista que estaba a punto de ocurrir para sí misma.

Se habían empezado a formar grietas audibles en los huevos que había estado calentando durante tanto tiempo. La eclosión que ocurre una vez cada milenio era un espectáculo fantástico para contemplar.

Los huevos de obsidiana parecían diamantes con líneas geométricas cortadas mientras emitían un grandioso esplendor. Los cascarones se habían vuelto lo suficientemente transparentes como para revelar las crías en el interior. Cada uno de ellos se posó en diferentes posturas, algunos abrieron la boca hacia el cielo y otros se acurrucaron como si quisieran dormir más.

Había un claro amor maternal en los ojos de la Dragona Mágica cuando ella sonrió, cuidando a sus adorables hijos.

“Jajaja, un espectáculo que solo se ve una vez cada 1000 años… Tal vez debería habérselos mostrado a ellos también.”

Seguramente, las miradas en sus caras habrían sido bastante entretenidas. Habrían alzado sus voces con asombro y tal vez habrían pensado en su propio futuro mientras se miraban el uno al otro, enrojeciéndose.

Como una dragona mágica y una madre, habría sido un error imperdonable mostrar el nacimiento de sus propios hijos a otros. Pero al mismo tiempo, tenía la sensación de que habría sido una experiencia inolvidable y placentera.

“No importa. Si lo desean, seguramente nos volveremos a encontrar algún día. Ahora, hijos míos, es hora de que despierten.”

La dragona mágica soltó un respiro por su nariz, luego acercó su cara a los huevos. Mientras lo hacía, sabía que ella también estaba cambiando.

El resonante crujido fue el sonido de una nueva vida viniendo al mundo. Al mismo tiempo, era el sonido del oscuro futuro que les esperaba que ni siquiera ella había previsto…