Isekai Ryouridou (NL)

Volumen 7

Capitulo 2: Otra Perturbación

Parte 4

Mi corazón latía con fuerza en mi pecho como una alarma.

La calidez y el aroma de Ai Fa habían robado mis facultades mentales normales. Cuando se inclinó sobre mí… extendió su brazo más allá de mi cuerpo, hacia la pared.

“No te muevas… Si lo haces, creará una perturbación en el aire”, susurró en voz baja, volviendo a su posición original. Sin embargo, su única mano permaneció sobre mi boca. En cuanto a su otra mano, estaba agarrando su espada, que había estado apoyada contra la pared. “Hasta hace un momento, alguien estaba mirando esta habitación a través de la ventana. Ahora, han dado la vuelta a la parte trasera de la casa”.

Ah, eso fue todo. Podía sentir la fuerza drenarse de todo mi cuerpo cuando mi estúpido concepto erróneo fue aclarado.

Sin embargo, este no era momento para relajarse. Hace solo unos días nos habían atacado mientras dormíamos y terminamos de espaldas contra la pared.

¿Quién estaba tratando de hacer qué esta vez? Ni siquiera podía sentir a nadie, así que no tenía idea.

“Están en el otro extremo de la habitación a la izquierda. Ahí es exactamente donde está la ventana… Hace dos años, el hijo mayor del Suun rompió el enrejado de esa ventana y entró en la casa”.

Esa fue una coincidencia increíblemente siniestra.

Sin embargo, Diga había sido llevada al clan Dom en el extremo norte del borde del bosque, junto a Doddo y Tei. Además, hasta ahora se los consideraba peligrosos debido a sus acciones, por lo que seguramente se les concedía incluso menos libertad que Mida.

“Voy a salir para ver qué está pasando. Espera aquí en la casa. Una vez que me vaya, cierra la puerta con cuidado de no hacer ruido.” No podía hablar ahora, así que sacudí la cabeza y agarré suavemente la muñeca de Ai Fa. A cambio, ella parpadeó y parecía un poco molesta. “Nuestras vidas podrían estar en peligro si vuelven a usar una hierba extraña o intentan incendiar la casa. No te preocupes A lo sumo, hay dos de ellos. Y no estoy tan indefensa como para que se apoderen de mí”.

Le devolví la mirada a Ai Fa con una mirada tan firme como pude. Esta vez, ella me devolvió un poco de una sonrisa forzada.

“Incluso si resultan ser más hábiles que yo, los atraeré hacia el río Lanto y los golpearé. Además, no podría moverme libremente contigo a mi lado. Solo espera aquí y reza para que las cosas me salgan bien”.

Silenciosamente la miré.

“Está bien. Te lo juro, no arriesgaré mi vida sin sentido”.

Con eso, Ai Fa finalmente quitó su mano de mi boca. Luego, con sus dedos ahora libres, señaló el centro de su pecho.

“Estoy seguro de que sus oraciones evitarán todo posible desastre”. La piedra azul que le había dado debe haber estado colgando allí.

Agarrando la muñeca de Ai Fa, finalmente me puse de pie.

“Me dirijo afuera… No hagas ningún sonido, ¿de acuerdo?” Ai Fa dijo con la sonrisa atrevida de un cazador mientras ella también se levantaba. Sus movimientos realmente no eran tanto como agitar el aire. Sin embargo, no era un cazador, así que tuve que moverme tan lenta y cuidadosamente como pude para no crujir las tablas del piso.

Después de que ella se deslizó suavemente hacia la puerta como una especie de animal salvaje, Ai Fa me entregó el cerrojo suelto, luego acercó su rostro de nuevo.

“Cerraré la puerta y luego tendrás que cerrarla. Pase lo que pase, no pongas un pie afuera hasta que te llame, ¿de acuerdo?”

Con eso, Ai Fa abrió cuidadosamente la puerta, miró alrededor de la oscuridad y luego salió. La puerta se cerró una vez más y me pregunté: ¿qué está pasando? mientras lo cerraba.

La amenaza del clan Suun había desaparecido ahora, entonces, ¿por qué la casa del Fa estaba recibiendo invitados no invitados? ¿Podría ser uno de esos hombres de los Ratsu y Gaaz que le propusieron matrimonio a Ai Fa?

Independientemente de quién fuera, no podrían estar haciendo nada apropiado si se asomaban a la casa de otra persona tan tarde en la noche. En cualquier caso, después de cerrar la puerta, me acerqué sigilosamente a la estufa, confiando en la luz de la luna para guiarme.

Encima de una tabla se sentaban mis cuchillos de cocina, vegetales y cotidianos. Agarré la hoja que el padre de Ai Fa había dejado atrás y la colgué de mi cintura.

Está bien… No importa quién sea, no obtendrán lo mejor de Ai Fa tan fácilmente.

Justo cuando ese pensamiento pasó por mi cabeza, un hombre gritó: “¡Gyah!” Detrás de la casa. Eso fue seguido por el golpe sordo de algo golpeando la pared, luego un gemido que recordó a un animal siendo estrangulado.

Después de eso, se quedó en silencio.

Me puse nervioso y encendí un candelabro con hojas de lana, luego me dirigí hacia una puerta más adentro de la casa. Naturalmente, elegí la más a la izquierda de las tres.

La habitación era un área de almacenamiento de leña que  se estaba  secando, madera,  sierras y otras cosas que no usábamos con tanta frecuencia. Abrí la puerta lentamente para no hacer ruido, y entré.

La ventana estaba completamente adentro, en la pared opuesta. Me acerqué y levanté el candelabro, solo para ver el lado de la cara de Ai Fa inesperadamente cerca, un resplandor cazador brillando en sus ojos.

“Entonces viniste, Asuta… Bueno, está bien. En ese caso, pásame esa vela.” Siguiendo sus instrucciones, se lo pasé a Ai Fa a través de la red. Su mirada estaba fija en un punto en la oscuridad y sostuvo su espada lista, así que tomó el candelabro con la mano libre. “No vengas aquí sin importar qué, Asuta. No hay garantía de que estos tontos estuvieran actuando solos”.

“C-Claro. ¿Pero estas bien? Y ¿qué tontos son ustedes…?” Comencé a preguntar mientras me agarraba a la celosía de madera, cuando mi mirada fue atraída para seguir la de Ai Fa.

En la oscuridad, pude ver a alguien encogido. Era un hombre, y parecía estar bastante bien formado. No tenía una capa de piel, pero los patrones de remolino en su ropa lo marcaban como un hombre del borde del bosque.

“Ustedes tontos desvergonzados. Nunca imaginé que incluso tú irías y harías algo tan estúpido. Te has ido y pisoteado toda tu última oportunidad de expiación”.

“No, ¡lo has entendido todo mal! ¡No queríamos hacerte daño en absoluto!” gritó la voz de un joven, claramente habiendo perdido toda moderación. La voz era más ronca de lo que recordaba, haciendo que pareciera que provenía de una persona completamente diferente… pero no había forma de que la confundiera.

“¿Qué… qué estás haciendo aquí?” Grité, mi voz salió aún más enojada de lo que esperaba.

En la oscuridad, pude ver al hombre acurrucado temblar de sorpresa, y luego respondió en un tono triste, “P-Por favor, créeme. Sinceramente, no huimos con eso en mente… V-Vinimos a salvarte… ¡Y a que nos salves a nosotros también!”

Aunque estaba de rodillas, levantó la vista hacia Ai Fa e intentó arrastrarse hacia ella. Sin dudarlo, Ai Fa empujó la punta de su espada justo en frente de su nariz, haciendo que el hombre grande se lamentara, “¡Gyah!” y retroceder

Con eso, la pálida luz de la luna iluminó su rostro… Era notablemente más demacrado de lo que recordaba y estaba cubierto de tierra y lágrimas, pero ese era sin duda el rostro del antiguo hijo mayor de la casa principal de Suun.

“Tontos… No hay razón para que merezca la salvación. Si ni siquiera puedes llevar a cabo tu trabajo como cazadores, entonces simplemente debes morir en el bosque”.

“No, te lo digo, ¡te has equivocado! No huimos del clan Dom… Bueno, supongo que lo hicimos, pero aun así, ¡no es lo que piensas! ¡Te lo ruego!

¡Por favor sálvanos!”

“No entiendo lo que estás diciendo. Asuta, debería haber un paquete de vides en esa habitación. Pásamelo. Ataré sus extremidades y luego las entregaré al clan Dom”.

“¡Espera! ¡Si nos envías de vuelta al clan Dom así, realmente se llevarán nuestros cueros cabelludos!” Gritó aterrorizado, sus ojos hacían que pareciera que estaba a punto de perder la cordura mientras miraba alrededor de la oscuridad. “¡P-Pero bien! Si quieres atarnos, ¡adelante! ¡No nos resistiremos! ¡Y tampoco huiremos del Dom otra vez! ¡Absolutamente tienes mi palabra! Pero antes de eso, solo escucha lo que tenemos que decir… ¡Y déjanos entrar en tu casa lo antes posible! ¡Si nos siguió, también puede matarte, Ai Fa!”

“¿Quién es él’? Ustedes deberían ser los únicos aquí en el borde del bosque que intentarían hacernos daño”.

“¡E-Eso no es cierto! ¡Debe odiarlos a los dos por destruir el clan Suun! Entonces, si no quieres morir, ¡date prisa y déjanos entrar! Él es realmente un monstruo… ¡No importa lo fuerte que seas, no hay forma de que puedas detenerlo!”

“Dime a quién te refieres, ya. Tus palabras han sido completamente incoherentes.”

El ex hijo mayor de la casa principal de Suun, Diga, finalmente estalló en una sonrisa mientras sollozaba, y con voz débil y temblorosa respondió: “Zattsu Suun… ¡El ex jefe del clan, Zattsu Suun! ¡Nos escapamos de él! ¡Te lo ruego! ¡Por favor, déjenos entrar a su casa antes de que nos alcance!”

***

Finalmente, terminamos dando la bienvenida a nuestros invitados no invitados a la casa.

Había dos en total: Diga y Doddo. No había podido ver desde donde estaba parado, pero aparentemente Ai Fa golpeó a Doddo con un golpe desde el plano de su espada, y luego le pisó la espalda.

De todos modos, nuestros invitados no invitados estaban sentados en el suelo, colgando de la cabeza. Naturalmente, sus brazos estaban atados detrás de sus espaldas y sus piernas estaban atadas de manera similar, con solo treinta centímetros de elasticidad. Con eso, podrían caminar, pero no podrían correr.

Además de eso, estaban desarmados desde el principio. Habían huido del clan Dom sin cuchillas ni vestimenta de cazador, solo la ropa en la espalda.

“Zattsu Suun estaba retenido por el clan Jeen como prisionero, ¿no? Entonces, ¿qué quieres decir con decir que quieres ser salvado de él?” Ai Fa cuestionó, mirando a Diga y Doddo mientras estaba sentado con una rodilla en el aire.

“Z-Zattsu Suun es quien nos alejó del Dom. Él prendió fuego a su asentamiento, y mientras corrían en pánico, vino a salvarnos… Y entonces huimos del clan Dom junto con él y Tei Suun… ”

“Oh, ¿entonces escapaste por tu propia voluntad, entonces?”

“¡N-No teníamos elección! ¡Nos dijo que nos fuéramos con él o nos quedáramos allí y muriéramos! Si lo desafiamos, ¡nos habría matado allí mismo! Ese es el tipo de bastardo que Zattsu Suun es… ”

Sin embargo, ese “bastardo” era su propio abuelo. Sería una cosa para alguien como Tei Suun de las familias filiales, pero era extraño referirse a alguien tan estrechamente relacionado contigo.

“Pero ese hombre Zattsu Suun estaba terriblemente enfermo, ¿no? Por lo que escuché, era poco más que un montón de piel y huesos secos, y nadie estaba seguro de si sobreviviría o no al viaje al asentamiento de Jeen.”

“Sí, durante los últimos años, se había debilitado tanto que ni siquiera podía caminar solo… Pero cuando se enteró de que el clan Suun había caído, eso debe haberlo resucitado… Todavía parece piel y huesos, pero esos ojos… E-Esos ojos eran como solían ser, antes de que cayera enfermo. Habría muerto en poco tiempo, pero ahora ha recuperado toda la fuerza que solía tener…” dijo Diga, su cuerpo comenzó a temblar una vez más.

Junto a él, Doddo miraba en silencio el suelo.

Ambos tenían las mejillas demacradas, sus caras estaban sucias, y la suciedad y las hojas se aferraban a sus cuerpos por todas partes. Ni siquiera quedaba una mota del orgullo altivo que solían exudar en ellos.

¿Se habían desgastado sus espíritus en el transcurso de solo tres días, o tenían miedo de Zattsu Suun…? Honestamente, probablemente fueron ambos.

“Zattsu Suun dijo que volvería a colocar al clan Suun a cargo. Que traería juicio sobre los tontos que nos traicionaron, y que nos convertiría en los líderes del borde del bosque otra vez…” Doddo intervino. Parecía apagado y sombrío. ¿Era realmente su voz? Ese tono lo hizo parecer una persona completamente diferente, incluso más que su aspecto demacrado.

“¡E-Eso es correcto! Estaba seguro de que estaba pensando en salvar al resto de la familia y dejar el borde del bosque… P-Pero luego comenzó a hablar sobre esa locura… ”

“Si pensabas que era una locura, ¿no deberías haberle dicho eso cuando vino a ti?”

“¡D-Dijimos todo lo que pudimos! Le dijimos que la gente del clan Ruu todavía estaba en el asentamiento de Suun, y que todos los clanes debajo de nosotros se habían unido con ellos, ¡y que no podríamos luchar contra ellos ahora!”

“Y luego… se echó a reír”, agregó Doddo, su voz temblando impotente. Sus ojos azul oscuro una vez se habían parecido a los de un perro loco mientras nos miraba, pero ahora se estaba aferrando a nosotros en busca de ayuda.

“Dijo que los cuatro éramos muchos, luego se rio como una especie de demonio. Se rio como un loco, diciendo que podríamos rescatar al jefe del clan Zuuro y a todos los demás una vez que retomáramos nuestro derecho a liderar y restableciéramos el orden correcto al borde del bosque…”

“Y-Y así, ¡escapamos mientras él dormía!”

“Parece que la mente de ese hombre también se ha mezclado con la enfermedad. ¿Qué podría hacer con solo cuatro hombres?”

“E-Él no pudo hacer nada, ¿verdad? Todo lo que se nos ocurrió fue atacarlos a todos o al jefe del clan Ruu,” dijo Diga, mirando de un lado a otro a mí y a Ai Fa con una mirada verdaderamente patética en sus ojos. “S-Si él supo cómo cayó el clan Suun, entonces seguramente querrá vengarse del clan Fa sobre todo por revelar nuestros crímenes, ¿verdad? Por eso es que… ”

“Entonces, ¿estás diciendo que viniste a advertirnos de este peligro? En ese caso, ¿por qué no tocaste la puerta para empezar?”

“U-Ustedes dos nos odian, ¿no? Pensamos que no se abriría si hiciéramos eso, así que decidimos buscar una forma de colarse… ”

“¿Realmente creías que podrías ganar la confianza de alguien así?” Ai Fa replicó en un tono más severo, causando que Diga se acurrucara en una bola y gritara.

“¡Eek!”

Era completamente absurdo, pero en este punto se sentía más patético que cualquier otra cosa. Al menos, esa fue la impresión que tuve.

Ai Fa agitó su cabello, que todavía estaba suelto, y me lanzó una mirada irritada.

“¿Qué piensas, Asuta?”

“¿Huh? Bueno, veamos… Hay una cosa que me gustaría confirmar primero. ¿Qué le pasó a Tei?”

“T-Tei Suun dijo que su destino estaba ligado al de Zattsu Suun. Así que lo dejamos atrás…”

“¿Es eso cierto?”

“¡R-Realmente lo es! Incluso cuando Zattsu Suun se reía como un loco, solo miraba con esa misma mirada vacía como siempre. En este punto, probablemente ni siquiera sea capaz de formar sus propios pensamientos…”

Me enojé un poco al escuchar eso, ya que fueron los miembros de la casa principal quienes empujaron a las familias de la rama hasta ese punto.

Y todavía no había tenido la oportunidad de preguntarle a Tei sobre ese asunto con Ai Fa todavía. ¿Fue él quien la salvó la noche de la reunión del jefe del clan?

¿Se había convertido nuevamente en una amenaza para el borde del bosque a pesar de eso?

Con emociones tan complejas girando dentro de mí, continué: “En ese caso, ¿cómo escapó Zattsu Suun del clan Jeen? Él y Zuuro Suun estaban siendo tratados como delincuentes y constantemente vigilados, ¿verdad?”

“No tengo idea de todo eso, pero… la cara y la ropa de Z-Zattsu Suun estaban teñidas de rojo con la sangre de otra persona, y él tenía una espada. No hay forma de que uno o dos hombres puedan detener a ese monstruo…”

El esqueleto de un hombre parado en medio de un asentamiento ardiente, cubierto con la sangre de la gente del borde del bosque… El solo pensamiento fue suficiente para enviar un escalofrío por mi columna vertebral. En cuanto a Diga, le castañeteaban los dientes y se había puesto pálido.

“P-Por la noche, nos ataron los brazos y nos ataron a un pilar. Pero la casa en la que estábamos también se incendió, y las mujeres Dom nos quitaron las ataduras. Salimos corriendo en pánico, y fue entonces cuando apareció Zattsu Suun… ”

“Nos dijo que fuéramos con él  o que muriéramos  donde estábamos parados, luego nos lanzó espadas. Todo el asentamiento estaba en llamas, así que eso atrajo toda la atención de los hombres, pero creo que varias mujeres deben haberlo visto… ”

Doddo parecía tener un poco más de ingenio sobre él que Diga. Di un profundo suspiro, luego me volví hacia Ai Fa.

“Bueno… me imagino que probablemente estén más o menos diciendo la verdad. Si quisieran atacarnos, habrían traído a Tei, ¿verdad?”

Diga y Doddo completamente desarmados nunca serían rival para Ai Fa. Pero si Tei hubiera venido y tuviera una espada, ¿cómo resultaría eso…? No quería imaginarlo.

En cuanto a Ai Fa, parecía completamente y absolutamente tranquila. Incluso diría que estaría contenta de descubrir que Zattsu y Tei Suun realmente los siguieron después de estos zoquetes y se presentaron aquí.

Ella estaba segura de sí misma. Sin embargo, no pude evitar pensar que no quería ver a Ai Fa derribando a alguien.