Maou-sama Retry! (NL)

Volumen 1

Capitulo 1: Entra El Señor Demonio

Parte 1

Medianoche del Comienzo

—Inmersión en el juego—

El año es 2XXX en el calendario del Imperio.

La nación conocida como el Imperio, que ahora mantenía la mayor parte del mundo bajo su control, comenzó un juego atroz. Para solidificar su opresión de las naciones que había conquistado, y para detener cualquier posibilidad de revoluciones, el Imperio organizó grandiosamente un espectáculo cruel.

El espectáculo, que solo podía describirse como pura locura, era una lucha a muerte compuesta por jugadores seleccionados al azar de cada nación bajo el control del Imperio, con un solo sobreviviente.

El Imperio transmitió este juego en todo el mundo, organizando un grupo de muerte oficial. ¿Quién sobreviviría hasta el final? ¿Quién sería el último asesino? ¿Quién sería asesinado primero? El espectáculo cruel, pero vibrantemente real, había trascendido el cine y otras formas de ficción. Capturó los corazones de los ciudadanos del Imperio (el pueblo de Dios).

El juego, transmitido en todo el mundo, representaba innumerables dramas y tragedias. Los espectadores fueron testigos de la humanidad en su esencia: participantes matando extraños solo para sobrevivir.

El juego recibió muchos nombres: La raza humana, El juego de la vida, La fábula de la cebolla… La cantidad exorbitante de apuestas vertidas en el juego por el aburrido 1% del mundo eventualmente se convirtió en un ingreso vital para el Imperio. Los ciudadanos del mundo esperaban el proceso de selección con miedo, y el pueblo de Dios se entretenía en un estupor de locura. El juego infinito. El único sobreviviente de cada juego fue galardonado con una riqueza inconmensurable… Y el privilegio de unirse a las filas del pueblo de Dios. Todos los demás concursantes, sin embargo, fueron premiados con la muerte. Sin excepción.

***

Japón, 2016 CE…

“Recuerdo este evento…”

Ahora, un hombre participaba en el mismo juego aterrador. Solo sin un rastro de cobardía o miedo en su rostro. Se llamaba Akira Ono… Un Joe perfectamente normal y trabajador. Akira conocía este lugar como el dorso de su mano: él era el hombre que dirigía el juego. No había nada que temer cuando conocía cada centímetro de la arena. Además, todo estaba dentro de una pantalla de computadora. Nada de eso afectaría la realidad.

“Este pasatiempo duró más de lo que pensaba”, se dijo en un susurro débil. Este videojuego comenzó en 2001, al inicio del renacimiento de Internet. El año actual era 2016. El paso de quince años había calificado este juego como una antigüedad. Y hoy, las cortinas estaban a punto de cerrarse. Escribiendo el teclado o moviendo su mouse de vez en cuando, Akira hojeó varias pantallas. No parecía tener un propósito particular para hacer esto, excepto tratar de guardar todo lo que tenía a la vista en la memoria.

(…Es casi medianoche.)

Normalmente, eso era cuando el Juego comenzaría. Pero Akira era el único en la arena en este momento. A medianoche, los servidores expirarían, destruyendo la arena. Había elegido una despedida solitaria, en lugar de una festiva.

(Quince años fue demasiado tiempo…)

Un juego que sobrevivió a la educación K-12 de algunos niños fue extravagante. De hecho, los niños que estaban en la escuela secundaria en el lanzamiento del juego ahora eran miembros orgullosos de la fuerza laboral. Algunos ahora estaban casados. Algunos ahora eran padres. Algunos se han mudado al extranjero. Cada uno de ellos había perdido tiempo libre a medida que adquirían responsabilidades… En cierto sentido, habían vivido vidas saludables.

Akira tampoco fue la excepción. Solía perderse modificando el juego como quisiera, y se quedaba despierto toda la noche para ejecutarlo. A través de los años, Akira subió la escalera, hasta que la mayor parte de su vida fue ocupada por su trabajo.

“¿A dónde ir después…?”

Se conectó como el personaje que podría considerarse el jefe final del juego, y paseó por varios mapas hasta que casi se le acabó el tiempo. Un área residencial, un templo remoto, un estanque profundo y oscuro, y más… Cada lugar tenía un significado especial para él.

23:58:20

“Gracias por todo, Kunai”.

Akira habló con su personaje en la pantalla. Si alguien estaba mirando, podrían haber estado un poco asustados. En su pantalla, había un hombre con el pelo lo suficientemente largo como para tocar sus hombros. Aunque en sus cuarenta años, el hombre fue construido y tonificado al máximo.

Afilado, sin fin. Un oficial de alto rango del Imperio, y el hombre detrás del infame Juego en sí mismo… De acuerdo con su historia de fondo, de todos modos. Su nombre era Hakuto Kunai, El Señor Demonio del Imperio, el hombre responsable de derramar la sangre y cosechar la tragedia de 4, 143,792 participantes del Juego.

Incluso al borde del día del juicio final, sus ojos brillaban de crueldad por encima de su vieja sonrisa helada. Akira sintió un ligero escalofrío al mirar a Kunai.

“Nunca lo habría adivinado… pasaría los últimos momentos contigo”.

Dijo Akira, como para desviar la mirada penetrante de Kunai. Aun así, la expresión de Kunai se mantuvo sin cambios. Lo cual no fue una sorpresa.

Era simplemente un PNJ, que nunca volvería a la vida a menos que alguien tirara de sus hilos. A pesar de ese hecho, Akira continuó nervioso, como si estuviera tratando de escapar de algo.

“¿Qué? ¿Estás de mal humor? Para que lo sepas, no importa un poco que seas el jefe final o que seas el Señor Demonio. La vida real siempre gana. Si no has terminado de jugar, todo depende de ti… Me voy a la cama. Tengo una madrugada”.

23:59:50

“Te veo, Kunai. Y, buenas noches… XXXXXXXXX” 00:00:00

Hiroshi cerró los ojos con mil pensamientos girando detrás de ellos. Cuando los abrió de nuevo… vio el Gran Bosque frente a él.

Un mundo abandonado por Dios, donde los ángeles se desesperan. No te sorprendas

Y escucha.

Escuche atentamente y debería escucharlo.

La campana de la medianoche siempre canta nuevos comienzos.