Sekai Saikou no Ansatsusha (NL)

Volumen 2

Interludio: El Asesino Hace Una Promesa Al Héroe

Nuestras clases habían terminado temprano hoy. Me parecía que a todos les costaba prestar atención durante las lecciones. Una vez cada dos meses, se llevó a cabo un evento especial para ayudar a los estudiantes a repostar. Uno de ellos estaba sucediendo ahora.

Llamé a Epona, que parecía notablemente insegura de qué hacer consigo misma.

“¿Has decidido qué vas a comprar hoy?” Yo consulté.

“No tengo idea. No sé demasiado sobre los nombres de las tiendas y cosas así. Pero tengo muchas ganas de ir de compras. El salario de héroe me está pagando bien”.

Epona levantó una bolsa de cuero para monedas.

“Parece que el Mercado de la Academia va a estar muy animado. Estoy seguro de que encontrarás algo que te llame la atención”, le aseguré.

El Mercado de la Academia fue el evento destinado a ayudar a los estudiantes a relajarse.

Nuestra escuela estaba al norte de la capital real, que era la única opción que tenían los estudiantes para divertirse fuera de la academia. El problema era que la ciudad era cara, no importaba lo que hiciera. Solo los elegidos podían vivir allí, y las tiendas estaban hechas a la medida de la clientela más adinerada.

Eso no era un problema para aquellos en el extremo superior de la aristocracia, pero los nobles menores no eran realmente capaces de disfrutar de la capital al máximo.

El Mercado de la Academia se había establecido para lidiar con eso. La escuela se acercó a varias compañías populares de todo el país y las invitó a operar puestos de mercado en los terrenos de la academia durante tres días. Los productos se establecieron al mismo precio que las tiendas principales, por lo que incluso los estudiantes menos ricos podrían pasar un buen rato sin preocuparse por los costos de viaje. Muchas empresas participantes incluso proporcionaron artículos limitados y presentaron productos nuevos.

Muchos de mis compañeros apenas pudieron contener su entusiasmo, sabiendo que las tiendas populares de todo el Reino de Alvanian e incluso algunos proveedores internacionales iban a asistir.

“¿Hay algo que ustedes dos quieran, Dia y Tarte?” Cuestioné.

“No me viene nada a la mente, así que creo que voy a caminar primero y ver si algo me llama la atención”, respondió Tarte.

“Hmm, no quiero nada, así que voy a regresar al dormitorio”, respondió Dia.

Eso parecía un comportamiento poco característico de Dia. Ella siempre había sido del tipo curioso. Pensé que estaría ansiosa por tener una oportunidad como esta.

Mientras lo meditaba más, me di cuenta de que había estado inquieta los últimos días. Definitivamente algo estaba mal. La había visto contando su dinero esta mañana. Parecía probable que ya supiera lo que quería comprar y no quisiera decirnos qué era.

Tengo curiosidad por saber lo que esconde Dia, pero lo dejo por ahora.

“Parece que todos están teniendo una pequeña charla divertida. ¿Te importa si me uno?” Un joven rubio se acercaba a nosotros.

“Oye, Naoise. Estamos hablando de lo que vamos a comprar en el Mercado de la Academia. Estoy seguro de que no tiene ningún interés en este evento”, comenté.

Era hijo de uno de los cuatro ducados principales. Podía permitirse comprar todo lo que quisiera, incluso en la capital real. También me enteré de que regularmente invitaba a personas a la capital real para convencerlas de que se unieran al pequeño grupo que había estado formando.

“¿Qué estás diciendo? Amo el Mercado de la Academia. Hay cosas que el dinero por sí solo no puede comprar. Por ejemplo, la principal atracción esta vez es una empresa llamada Natural You. Se rumorea que hoy van a presentar un nuevo producto aquí. Como fan, no puedo dejar pasar esta oportunidad”, explicó Naoise.

“… ¿Estás interesado en Natural You?” Pregunté algo sorprendido.

“Las mujeres no son las únicas personas que usan maquillaje. Su crema hidratante me ha sido de gran ayuda”.

De hecho, es mejor que los hombres también se humedezcan, pero no esperaba que dijera eso.

Como había dicho Naoise, la marca de cosméticos que había fundado como Illig Balor, Natural You, también tenía un puesto durante el evento escolar. Planeaba ir allí más tarde para recoger el informe de la investigación de seguimiento que le había pedido a Maha.

“Ah, está empezando”, dijo Tarte. El anuncio de la apertura del mercado resonó en toda la escuela.

Todos corrieron lo más rápido posible a la plaza.

El Mercado de la Academia estuvo disponible solo para estudiantes en su primer día. Estaría abierto al público los dos días restantes. Por eso todos los estudiantes se apresuraron a comprar cosas hoy. Una vez que el evento estuviera disponible para los clientes externos, solo sería más difícil encontrar lo que buscaba.

“Deberíamos ponernos en movimiento, o todos los artículos buenos desaparecerán”, insté.

“¡Okay! Um, ¿de verdad estás bien si no vas, Lady Dia?” Tarte presionó. “Si estoy bien. No te preocupes por mí”, respondió Dia.

“Vamos, Tarte. Te traeremos un regalo a casa, Dia”, dije.

Dia no quería que estuviéramos cerca para sus compras secretas. Parecía bien dejarla hacer lo que quería esta vez.

Tarte y yo nos sumergimos en la franja de adolescentes.

***

A pesar de que acababa de empezar, el Mercado de la Academia estaba en pleno apogeo.

“Hay tanta gente aquí”, observó Tarte.

“Casi toda la escuela está asistiendo”, respondí.

Aproximadamente doscientos estudiantes estaban en nuestra escuela, pero todos los profesores residentes aumentaron ese número aún más.

Debido a que la academia también funcionaba como un bastión, también había personal aquí para ese propósito.

Tarte abrió un mapa que detallaba la ubicación del stand de cada tienda. A cada estudiante se le había dado uno antes de que comenzara el evento. El folleto también proporcionó descripciones simples de cada empresa participante.

“Hay tantas tiendas famosas. No sé dónde empezar. ¿Por qué todas estas tiendas famosas se están tomando la molestia de venir hasta aquí de todos modos?” preguntó Tarte.

“Buena pregunta. No obtendrán ganancias con esto. La academia les permite montar los stands sólo con la condición de que establezcan los precios al mismo nivel que sus principales tiendas minoristas, después de todo… Lo que estas empresas están apostando es convertirnos en clientes duraderos y difundir el boca a boca. La mayoría de los estudiantes aquí pertenecen a familias nobles. Promocionar a los estudiantes es una buena manera de ganar clientes a largo plazo”, expliqué.

El costo del transporte por sí solo seguramente significaba que muchas empresas estaban sufriendo pérdidas. Sin embargo, a los ojos de un astuto empresario, perder dinero era como pagar por publicidad.

Sin duda, muchas empresas tenían grandes esperanzas en los visitantes que llegarían mañana y también al día siguiente. Fue difícil obtener el permiso para abrir una tienda en la capital real, por lo que cualquier oportunidad de vender a los clientes de la ciudad era valiosa.

“Eso no se me ocurrió en absoluto. El negocio es realmente complicado”, afirmó Tarte.

“Lo es. Es un mundo difícil “, respondí. “Ohhh, suena demasiado difícil para mí”.

Para convertirse en un empresario de primer nivel, necesitaba algo más que ética laboral. También se requería perspicacia mercantil. Sin esas cosas, estabas condenado antes de empezar. Un buen ojo para la empresa contaba mucho.

“Um, ¿estás seguro de que está bien que vaya con ustedes dos?” Preguntó Epona.

“Por supuesto. No me importa. Eres un compañero de clase y esto será más divertido en compañía”, le aseguré.

“¡Si! Esta es la primera vez que voy de compras con gente como esta”, agregó Tarte.

Juntos, los tres recorrimos el área y examinamos los puestos. Había toneladas de productos interesantes, pero eso era de esperar de minoristas tan populares.

Si estuvieras atento, podrías ver al personal de todas las tiendas mirando los puestos rivales. En cierto modo, ese era otro mérito del Mercado de la Academia: las tiendas populares podían aprender unas de otras.

Mientras nos atiborrábamos de raros dulces al vapor envueltos en masa transparente, Tarte, Epona y yo caminamos hasta cada puesto, comprando cualquier cosa que nos interesara. Incluso pasear era agradable.

Los ojos de Tarte se iluminaron cuando  pasamos por un puesto en particular. “Wow. Esta tela es tan hermosa y de un tono rosa tan claro. Me pregunto cómo lograron teñirlo de este color. ¡Este es azul cielo!” Ella exclamo.

“Este color es el de Mireille…”, murmuró Epona.

Tarte se había detenido en el puesto de una tienda de ropa. También vendía materias primas.

“Sí, no ves colores brillantes como este muy a menudo”, comenté.

Las telas estaban teñidas de rosa y celeste. Los colores vibrantes en sí mismos eran el producto estrella de la tienda. Su material era de alta calidad, pero producir textiles en colores tan vivos fue el mayor atractivo.

Recordé que los tintes rosa y azul eran productos especiales que solo se producían en una región empobrecida de Alvanian. Después de que los pigmentos llamaron la atención de esta empresa, negociaron un contrato que les daba uso exclusivo de los colorantes, lo que le permitió venderlos a gran escala.

“¡Esta tela es preciosa y barata también! Sé que a Lady Esri le encantaría recibir algunos como regalo”, comentó Tarte.

A mi mamá le gustaba hacer trajes nuevos. Tarte tenía razón al pensar que querría material de tan alta calidad.

“Yo me ocupo de los recuerdos, así que no tienes que preocuparte por eso. Solo concéntrate en lo que quieres comprar”, le recordé.

“Pero ella ha hecho mucho por mí”, protestó Tarte.

“De hecho, yo también quiero conseguir algo para ella. Así que sí, puedes elegirlo y yo lo pagaré. Hagámoslo un regalo de nosotros dos”, dije.

“O-Okay. Gracias…”

“No te preocupes por eso. Ahora mismo, tienes una mejor idea de los gustos de mi madre que yo. No tengo más remedio que dejarlo en sus manos. Al menos déjame pagar por ello”, dije.

“¡Está bien, lo entiendo!”

Tarte comenzó a inspeccionar las diferentes telas con una expresión severa en su rostro. Ella se estaba tomando esto demasiado en serio.

Esto podría tomar un tiempo…

Miré a Epona. Curiosamente, estaba mirando algunos de los artículos en exhibición con una mirada melancólica en sus ojos.

Si me hubiera dicho que era una chica, podría haberle comprado algo como regalo, pero por lo que ella sabía, todavía pensaba que era un niño. Darle ropa femenina a un supuesto estudiante masculino me habría hecho parecer un pervertido.

“Elegí uno, mi señor. Voy a conseguir este extraño color rosa claro”.

La voz de Tarte me sacó de mi contemplación. En sus manos había un rollo de tela rosa. Este color me recordó a los cerezos en flor de mi hogar en mi vida anterior. Quizás Tarte encontró la sombra inusual porque nunca había visto flores de cerezo.

“La textura se siente bien y creo que a mi madre le gustará este tono. Estoy seguro de que a ti también te quedará bien, Tarte” observé.

“Eso no tiene nada que ver con eso”, respondió.

“Yo diría que sí. Después de todo, eres tú quien usa la ropa que hace mi madre” le recordé.

“E-Eso es cierto.”

A mi madre le gustaba tratar a Tarte como si fuera su propia muñeca personal de disfraces.

“Epona”.

Llamé al héroe, pero ella no respondió. Su mirada estaba paralizada en un vestido celeste. Parecía un comportamiento inusual, incluso para la frívola joven.

“¡Epona!”

“¿S-Sí?”

“Vamos a ir a ver otros puestos, pero si hay algo que quieras comprar aquí, podemos separarnos”.

“Está bien, hagámoslo. Lo siento.”

“No, está bien.”

Epona se había criado de niño. Quizás por eso había encontrado la ropa de chica tan cautivadora. Si ese era el caso, decidí que era mejor que Tarte y yo no estuviéramos cerca. El héroe no podría comprar un atuendo destinado a una chica si hubiera gente que se suponía que pensaba que ella era un hombre cerca.

***

Después de tres horas, Tarte y yo habíamos terminado de hacer nuestras rondas en el Mercado de la Academia.

“Terminamos con muchas cosas”, dije.

“Podría haberme excedido un poco. Pero eso fue realmente satisfactorio”, respondió Tarte, cargando una bolsa y luciendo satisfecha consigo misma. Tarte era decentemente rico. Mi familia le había estado pagando el salario de un anticipo desde que llegó a Tuatha Dé, y no había tenido muchos gastos de manutención.

“Lo siento, Tarte, pero ¿te importaría regresar sin mí?” Yo pregunté. “Te vas a reunir con Maha, ¿verdad?”

“No, solo voy a recoger los resultados de una investigación. Maha está ocupada, así que dudo que haya venido hasta aquí”.

Un viaje de ida y vuelta desde Milteu tomó varios días. Como representante de proxy de la marca Natural You, Maha estaba muy ocupada y su tiempo era valioso.

“No, definitivamente está aquí. ¡No hay forma de que Maha desaproveche la oportunidad de verte, mi señor!” dijo Tarte con confianza.

No me importaría si ella tiene razón.

“Si ella está aquí, ¿también querrías venir?” Cuestioné.

“No, volveré. Maha indudablemente quiere que sean solo ustedes dos. Puedo estar contigo todo el tiempo, pero no se puede decir lo mismo de ella. Me sentiría mal si no le di algo de tiempo a solas contigo”.

“¿Eso es lo que ella quiere?”

“Eso es lo que ella quiere”.

Tarte y Maha eran cercanas, así que hubiera pensado que Maha también quería verla, pero si Tarte decía lo contrario, probablemente ese no era el caso.

***

Tarte y yo fuimos por caminos separados, y yo me dirigí al puesto de Natural You.

A pesar de ser solo el primer día del evento, ya había una fila que salía del stand de mi empresa. El mercado aún no estaba abierto al público y ya había tanta gente. Solo podía adivinar cómo serían las cosas mañana. Fue un buen recordatorio de lo popular que era Natural You.

Está bien, ¿qué debo hacer? Mi plan había sido que me llevaran a la parte trasera del puesto después de dar una excusa para querer probar algunos productos. Sin embargo, esta larga fila iba a dificultar las cosas.

Creí sentir una presencia familiar detrás de mí, y luego alguien puso un brazo alrededor de uno de los míos.

“Oye, guapo, ¿te gustaría tener una cita conmigo?” invitó a una joven que me miró amorosamente.

Su elegante cabello azul estaba oculto hoy debajo de un sombrero, y había usado maquillaje para disfrazarse un poco. En lugar de su atuendo habitual, llevaba algo dulce y elegante.

Incluso con tales diferencias, no había forma de que no reconociera a la chica. Ella no era solo una amiga; ella era familia.

“Eso  suena  genial.  Cerca  hay  una  agradable  cafetería  emergente. ¿Quieres ir allí y comprar algunos dulces?” Yo propuse. “Eso sería encantador. ¿Nos vamos?”

“Okay.”

La joven, Maha, sonrió.

Tarte había leído la situación correctamente. Parecía que Maha se había tomado muchas molestias solo para venir aquí y pasar tiempo conmigo.

Fue sorprendente verla disfrazada, pero eso tenía un propósito práctico. Como rostro de Natural You, Maha se había convertido en una especie de celebridad. Contaba a muchos nobles entre sus conocidos. Si alguien la reconocía, probablemente causaría una conmoción.

***

Entramos juntos al café. Afortunadamente, no estaba demasiado lleno cuando pasamos.

El lugar era famoso por su té de hierbas de alta calidad y sus postres únicos. De hecho, me había interesado la empresa que dirigía el pequeño restaurante porque supuestamente prevalecían en una ciudad del este. El café emergente que habían instalado utilizaba las instalaciones de la academia, que ofrecían habitaciones apartadas perfectas para conversaciones privadas.

“… Maha, ¿de verdad estamos ordenando esto?” Yo pregunté.

“Sí, estamos fingiendo ser una pareja, así que no levantamos sospechas. Tenemos que pedir algo que nos haga parecer la parte”, respondió Maha con una sonrisa animada.

Ambos pedimos el exclusivo té de hierbas, así como un parfait extra grande. Se llamaba Super Lovey Dovey Parfait, por lo que, comprensiblemente, pedirlo requirió algo de coraje.

Nuestro té llegó primero.

“Esto huele tan bien”, comentó Maha.

“Sí, es relajante. Veo por qué este restaurante es tan popular”, agregué.

“… Pero el té de Natural You es mejor. Si este restaurante lo está haciendo tan bien, deberíamos poder hacerlo mejor. ¿Quizás no deberíamos solo vender hojas de té, sino también abrir un negocio de café?” Propuso Maha.

El té del que hablaba Maha estaba hecho de hojas de té importadas mediante una ruta comercial en la que Maha misma había sido pionera. Había ideado una forma de prepararlos utilizando técnicas de mi vida anterior. Mi método resultó en una fragancia más potente y un sabor más crujiente que el estilo local.

Natural You había estado buscando hojas de té de alta calidad porque atraían a nuestro público objetivo de mujeres adineradas. Tenía grandes esperanzas de que expandirnos a las bebidas nos traería otro producto exitoso.

“Abrir un café sería interesante. Pero necesitaríamos ayuda. Operar cualquier tipo de restaurante requiere un modelo comercial completamente diferente al que hemos estado operando. Es posible que tengamos que buscar un poco en la oscuridad hasta que averigüemos qué estamos haciendo. No estoy seguro de que haya nadie a quien podamos confiarle ese trabajo”, expliqué.

“Sí lo hay, querido hermano. Desde que regresó a Tuatha Dé, he estado entrenando a algunos niños prometedores. Serían perfectos para el café”, explicó Maha.

“Oh, ¿crees que esos niños están a la altura?” Yo pregunté.

“Sí… te debo mi agradecimiento, querido hermano. Me dijiste que no mantuviera mis sentimientos personales fuera de las operaciones comerciales y me animaste a seguir mi corazón. Fueron tus palabras las que me animaron a hacerlas realidad. Puede que haya sido motivado por mi propio interés, pero estoy seguro de que la empresa se beneficiará de todos modos”.

Los niños a los que se refería Maha eran los huérfanos con los que hacía negocios cuando vivía en las calles. Habían sido secuestrados y separados por diferentes orfanatos con la esperanza de recaudar subsidios del gobierno, pero Maha había trabajado para que volvieran a estar juntos. Estaba segura de que serían una maravillosa bendición para mi empresa.

Después de adoptar a los niños, Maha los entrenó haciéndolos trabajar en una serie de tiendas propiedad de la Compañía Balor.

Dudaba de su plan, pero todas las ramas que habían acogido a los viejos amigos de Maha hablaban muy bien de ellos. Muchas tiendas han dudado en dejar que los niños se vayan debido a su excelente desempeño. Algunos incluso llegaron a decir que pagarían una tarifa para mantenerlos puestos permanentemente.

Al igual que Maha, los huérfanos habían aprendido a usar su ingenio para sobrevivir y administrar un negocio a pesar de la enorme desventaja de ser jóvenes huérfanos. Fueron persistentes, aprendieron rápidamente y siempre estaban llenos de ideas.

Los amigos de Maha resultaron ser un tesoro de empleados talentosos para Natural You. Por lo general, las empresas no podían reunir una oferta tan abundante de personal competente. Maha había hecho un trabajo espléndido al lograr su objetivo personal de salvar a sus viejos amigos y asegurar el éxito de Natural You.

“Dije eso porque confío en ti, Maha. No hay razón para agradecerme”, dije.

“Escucharte decir eso me hace querer trabajar aún más duro. Solo mira. Natural You, todavía tienes espacio para crecer”, respondió ella.

Maha realmente era confiable. Con ella cerca, no tenía que preocuparme por mis empresas y podía vivir mi vida como Lugh Tuatha Dé.

Finalmente llegó el parfait. Era un parfait de gran tamaño hecho para ser comido por una pareja. El Super Lovey Dovey Parfait era una monstruosidad con un nombre vergonzoso.

“… Esto es demasiado para que coman dos personas”, observé.

“No te preocupes. Soy una gran fanática de los dulces”, respondió Maha.

El postre montañoso se había amasado en una taza gigante en lugar de una taza de tamaño normal. La jarra estaba hecha de cristal claro y valioso.

Bizcocho, gelatina de fresa, bizcocho, crema de fresa, bizcocho y mermelada de fresa. El parfait estaba compuesto por capas de bizcocho con varios dulces en el medio, y encima había una gran porción de crema batida y fresas en rodajas. Había caramelos de azúcar rojos en forma de corazón enterrados por todas partes.

… Solo mirarlo me produce acidez estomacal.

También habían metido dos cucharas en la taza. Cada uno era absurdamente largo.

“Será difícil comer con utensilios tan largos. ¿Qué estaban pensando con estos?” Dije.

“La razón por la que las cucharas son así es para que puedas hacer esto”.

Con una sonrisa en su rostro, Maha tomó una cucharada de crema y luego sostuvo su cuchara frente a mi boca.

“Ya veo. La longitud es para que puedas alimentar a tu pareja. Este parfait realmente está hecho para parejas”.

“Así es. ¿Puedes darte prisa y comer eso por mí? Yo también quiero comer.” Maha agitó su cuchara frente a mi cara.

“Sin embargo, esto es bastante vergonzoso”, admití.

“… Eres demasiado cruel. No sabes cuántas noches pasé para poder venir aquí, y ni siquiera me complacerás con esta única cosa”, hizo un puchero Maha.

Ella comenzó a fingir un llanto descaradamente. Dejando a un lado las lágrimas falsas, no podía negar que había trabajado muy duro para verme.

Gracias a Dios, esta es una habitación privada. Si estos hubieran sido asientos abiertos, me habría sentido demasiado avergonzado para hacer esto.

Tomé la cuchara de Maha en mi boca. La nata montada estaba muy ligera. Era aireado y moderadamente dulce, pero poseía un sabor robusto.

Después de darse cuenta de lo bien que sabía el parfait, de repente no pareció imposible terminarlo.

“Tú eres el siguiente, querido hermano”.

“¿Yo también tengo que darte de comer?”

“… Hice todo lo posible para reunir toda la información que solicitaste.

¿Seguramente eso es suficiente para ganar este pequeño acto de bondad?”

Maha trazó sus labios con un dedo. Fue un gesto bastante sugerente.

Sonreí con ironía, recogí un poco de la pila de dulces con mi cuchara y la acerqué a los labios de Maha. Felizmente lo comió, saboreando el sabor de su boca.

… Esto es aún más vergonzoso de lo que pensé que sería.

“Es tan bueno. Confío en nuestro té, pero no podremos tener éxito si no hago una investigación exhaustiva sobre el postre”, dijo Maha.

“Me impresiona que puedas pensar en los negocios en estas circunstancias. La vergüenza me está volviendo loco”, respondí.

“Esto tampoco es fácil para mí. Precisamente por eso estoy tratando de ocultar mi vergüenza. Bien, lo siguiente es la capa de mermelada de fresa y bizcocho. Avancemos. Descubrir nuevos sabores mientras comemos es emocionante. A pesar de ser tan grande, los diferentes sabores a medida que avanza realmente lo mantienen comiendo. Ésta es una información valiosa”, observó Maha.

Después de darle de comer a Maha, ahora le tocaba a ella darme un poco.

Esto sigue siendo vergonzoso, pero tengo que seguir adelante.

Seguimos alimentándonos el uno al otro.

***

Nos tomó treinta minutos, pero de alguna manera logramos tomar una porción notable del parfait.

Estoy cansado. Mental y físicamente.

“Esa fue tanta comida”, dije, exhausto.

“Si. Apenas lo superamos… El artículo debe tener un impacto, pero cuando sirvo este tipo de postre en mi restaurante, creo que reduciré un poco el tamaño”, señaló Maha.

Maha parecía bastante incómoda. Por lo general, no era del tipo que comía mucho.

“… Está bien, obtuve mi recompensa. Sigamos con el trabajo”.

“Sí, eso sería de gran ayuda. Estoy listo.”

Usé un hechizo para sondear el área y asegurarme de que nadie nos espiaba. Al mismo tiempo, creé una jaula de viento para evitar que el sonido se filtrara fuera de nuestra habitación. Ahora podríamos hablar de asuntos confidenciales sin ningún riesgo.

“Primero, repasemos lo que aprendí sobre Epona Rhiannon. No fue fácil, pero obtuve información interesante de la Real Orden… Está atrapada entre una promesa y un evento traumático. Esa podría ser su mayor debilidad”.

Maha me entregó una carpeta de papeles y rápidamente los hojeé. Allí contenía muchas teorías sobre el héroe, junto con pruebas que las respaldaban.

Por la forma en que Epona había actuado durante el simulacro de batalla, pensé que era una entusiasta de la lucha, pero estaba equivocado. Fue más complicado que eso. Una obsesión se había abierto camino en su mente.

“Me impresiona que hayas podido reunir tanta información”, alabé. “Me dijiste que fuera escrupulosa”, respondió Maha.

Lo hizo sonar simple, pero no se trataba de un informe ordinario. Era información detallada que podría arruinar a Epona si alguna vez salía a la luz.

“Esta información será la clave para llegar a su corazón”, dijo Maha.

“Con tu informe y lo que sé sobre la personalidad de Epona, estoy seguro de que ella está allí ahora mismo”, le dije.

“Estoy de acuerdo. Deberías irte, querido hermano”.

Maha me había entregado documentos adicionales que contenían información sobre un evento traumático en la historia de Epona y la persona en el centro. Esta información fue el arma definitiva en mi lucha para que Epona se abriera conmigo.

Leer la información de Maha también me hizo darme cuenta de otro error mío. En el puesto de ropa, Epona no había estado mirando un vestido porque nunca había tenido la oportunidad de vestirse como una chica. Ella había estado recordando.

Fue entonces cuando recordé que los vívidos tintes de los que se había enriquecido la empresa de ropa eran el producto especial de un determinado dominio rural en el Reino de Alvanian. Y esa región era…

“¿No te importa si me voy?” Lo comprobé.

“Para nada. Me has invitado a una cita agradable. Estoy satisfecha… No, eso es mentira. Quiero estar contigo más tiempo. Pero Tarte y yo vivimos para ti, querido hermano. Así que vete”, instó Maha.

“…Lo siento. No gracias.”

“Eres bienvenido. Me alegro de haber podido venir aquí hoy. Así que aquí es donde tú y Tarte habéis estado viviendo. Hay tantos estudiantes y todos se ven tan radiantes”.

“¿Desearías asistir?” Cuestioné.

Cualquier mago de catorce años en Alvanian podría asistir a la academia si se aplica. Maha era tan elegible como cualquier otra persona.

“Sí. Estoy celosa de Tarte. Ser estudiante suena interesante, pero más que eso, tengo mucha, mucha envidia de que pase todo su tiempo contigo… Mi deseo de ir a la escuela contigo se ve superado por mi felicidad por ser útil desde mi casa en Milteu. . Quería venir y estoy celosa, pero es mejor como están las cosas ahora. No me arrepiento de nada”.

Maha sonrió. Su sonrisa siempre fue hermosa.

“…Gracias. Tendré que hacer algo para agradecerte la próxima vez que nos veamos”.

“Sí, como sé ahora que me complacerás hasta este punto, la próxima vez tendré que pedir algo aún más atrevido. Pero eso no es importante en este momento. Realmente no tienes tiempo. Necesitas irte.”

“Hasta la próxima vez.” “Adiós, querido hermano”.

Dejando a Maha y el café atrás, me dirigí a buscar a Epona.

***

Las excavaciones de Maha habían descubierto el incidente decisivo en la vida de Epona. Evidentemente, una persona clave en su vida estaba descansando en la ciudad que rodea la academia.

Armado con ese conocimiento, compré un artículo en particular y me dirigí al cementerio público.

El cementerio era para los caballeros que habían servido en la capital. Estaba ubicada en la misma ciudad que la escuela. Un grupo de aristócratas se había opuesto a la construcción de un cementerio en la capital real, por lo que se había construido aquí.

Diferentes ofrendas adornaban las numerosas tumbas.

Epona estaba arrodillada ante un monumento dedicado a varias personas. Se había comprado ese vestido azul cielo que había estado mirando antes y que se había puesto frente a ella.

Me acerqué a ella, coloqué un ramo de flores frente a la estructura y junté las manos.

Epona me miró con sorpresa en su rostro. Fingiendo no darme cuenta, me arrodillé, ofrecí una oración en silencio y me levanté.

“No esperaba verte aquí, Epona”, dije una vez que hube terminado.

“Sí, qué coincidencia. ¿Hay alguien que conociste enterrado aquí?” Preguntó Epona.

“Sí, una mujer que era amada entre los caballeros de la Real Orden. Sé que le gustaron mucho las flores como estas, y después de verlas en el Mercado de la Academia, quise comprar algunas para ella”.

“Es una coincidencia asombrosa. A mí me pasó lo mismo con este vestido celeste. Una vez tuvo un atuendo como este y dijo que quería que lo usara algún día. Ah, espera, eso no es lo que quise decir. No me gusta vestirme con ropa femenina ni nada por el estilo”.

Una de las personas sepultadas debajo del monumento era alguien importante para Epona. Había nacido en la región rural de Alvanian que produjo el colorido tinte. Es por eso que Epona había respondido de una manera tan inusual al ver el vestido de colores vivos.

“Ja, ja, suena como una persona extraña. A mi conocido también le gustaban los tonos brillantes. A ella le gustaba especialmente una flor llamada flaura. Ella siempre dijo que eran del mismo color que su ciudad natal”.

“Del mismo color que su ciudad natal… flaura… Tu conocida no es Mireille,

¿verdad?”

“Lo es. ¿Tú también la conocías?” Pregunté, fingiendo sorpresa.

Todo lo que le decía a Epona era mentira. Solo conocía a Mireille por los documentos que Maha me había reunido. Todo fue una artimaña para ganarse la confianza de Epona.

“De hecho, también estoy aquí para visitar su tumba. Vaya, nunca me hubiera imaginado que fueras amigo de ella. Realmente es un mundo pequeño… Entonces hay algo que necesito decirte. Si fueras amigo de Mireille, necesito disculparme contigo. Yo soy quien la mató”. Epona inclinó la cabeza hacia mí, con lágrimas en los ojos.

“¿La mataste? ¿Te importaría decirme a qué te refieres con eso? Escuché que murió en una pelea contra algunos monstruos”.

Cambié mi fachada exterior a una de ira y duda.

“Eso está mal… Antes de convertirme en héroe, era un debilucho sin maná. Todos me llamaron un fracaso. No podía hacer nada y nadie me quería. Pero entonces, un día, cuando una manada de monstruos  atacó mi dominio, el poder comenzó a brotar dentro de mí. Antes de darme cuenta, los había matado a todos. Después de eso, llegó la Real Orden. Mireille fue la primera en bajar de ese carruaje. Me dijo que soy el héroe y me llevó a la capital real”.

Eso se había descrito en el informe de Maha.

“En la capital, fui proclamado oficialmente héroe. Mireille se hizo cargo de mi instrucción. Ella era muy agradable y bonita. Antes de convertirme en héroe, no había recibido mucha educación, así que aprendí mucho de ella. Ella me valoró y elogió. Con el tiempo, comencé a pensar en Mireille como mi hermana mayor”.

Epona apretó los puños con fuerza mientras continuaba.

“Todo iba tan bien. Cada día me hacía más fuerte e inteligente. Mireille me elogiaba cada vez que derribaba a un monstruo. Nunca antes había sido de ayuda para nadie, pero ahora estaba apoyando a todos. Fue reconfortante saber qué tanta gente me necesitaba”.

El rostro de Epona se estaba volviendo más angustiado mientras continuaba. La tristeza y el arrepentimiento estaban escritos en todo su rostro.

“Me permití montar esa ola de logros y elogios… Y fue entonces cuando sucedió. Fue el ataque de monstruos más grande hasta ahora, y no eran simplemente grandes en número. Ellos también eran fuertes. La Real Orden y yo luchamos lo mejor que pudimos. Mientras luchábamos, noté que me sentía cada vez más acalorada. Finalmente, una extraña sensación comenzó a acumularse dentro de mí. Entonces mi visión se puso roja y me perdí. Atacar con mi poder se volvió demasiado agradable para que me resistiera. Entré en  un alboroto, y antes de darme cuenta, todos los monstruos se habían ido”.

Esa batalla fue el logro más elogiado de Epona. Los monstruos que había derrotado eran lo suficientemente fuertes como para acabar con toda la Real Orden, pero, según los informes, los había repelido con “bajas mínimas”.

“No fue hasta que recuperé mis sentidos que me di cuenta de lo que realmente había hecho. No acababa de destruir a los monstruos. También había atacado a los caballeros. Todo el mundo se había lastimado por mi culpa, incluso Mireille. Después de buscar por un tiempo, finalmente la encontré fría y cubierta de sangre. Verla me trajo la necesidad de golpear algo en mi mente. En el momento siguiente, ya lo había hecho. Ella todavía respiraba y traté de salvarla, pero era demasiado tarde…”

Las palabras de Epona fueron tanto un lamento como una confesión.

El héroe tuvo la desgracia de ser una persona normal dotada de un poder increíble. No se dio cuenta de que tenía una bomba atada a la espalda que podía explotar en cualquier momento.

“¿Qué crees que fue lo último que me dijo Mireille, Lugh? ¿Crees que dijo que no quería morir? ¿Qué me odiaba?” Preguntó Epona.

“Dudo que fuera alguno de esos. La Mireille que conozco no habría dicho ese tipo de cosas”, respondí.

“Ja, ja, ja, tienes razón. Mireille me agradeció por derrotar a los monstruos y me dijo que había salvado a muchas personas. Lo último que me dijo fue ‘Protege el Reino de Alvanian en mi lugar’.”

Una gran lágrima rodó por la mejilla de Epona.

“…Tengo miedo. Cuanto más serio me pongo en la batalla, más me enfurezco. Si termino en otra pelea como esa, podría irme y matar a alguien nuevamente. No quiero pelear… Pero no puedo escapar. Se lo debo a Mireille. ‘Protege el Reino de Alvanian en mi lugar’. ¡¡No hay forma de que pueda romper ese juramento!!”

Esa era la debilidad de Epona. Estaba atrapada entre una promesa y un incidente traumático.

El combate aterrorizó a Epona, pero no fue su propia muerte lo que la llenó de pavor. En cambio, era la preocupación de que ella matara a otra persona que era querida para ella. Había amado a Mireille como a una hermana mayor.

Desafortunadamente, Epona también sintió la obligación de ver cumplido el último deseo de Mireille. Fue tanto una súplica como una maldición. Epona no tuvo más remedio que luchar.

Mireille probablemente le había preguntado eso a Epona mientras comprendía completamente la implicación. Sabía que si no lo hacía, el héroe nunca volvería a pisar el campo de batalla. Para evitar eso, Mireille había usado lo último de su poder para mantener a Epona en la lucha.

Esa mujer había sido un caballero de pies a cabeza. Hasta el final, trabajó para garantizar la seguridad de su reino.

Respetaba su inquebrantable sentido del deber.

“¿Me desprecias por ser el que mató a Mireille? ¿Tienes miedo de mí? Si te quedas demasiado tiempo a mi alrededor, podrías terminar muerto también”.

“No, no te desprecio. A pesar de que estás asustado, sigues tratando de mantener tu promesa a Mireille… Finalmente entiendo por qué estabas tan feliz cuando dijiste que pensabas que no saldría lastimada luchando contigo. Fue porque no quieres que nadie termine como Mireille nunca más”.

Epona quería un compañero de entrenamiento. Había estado buscando a alguien lo suficientemente capaz para sobrevivir a su aprendizaje de cómo usar su inmenso poder sin volverse loca.

Y ella me había encontrado.

“Si. Te estoy muy, muy agradecido. Quiero volverme lo suficientemente fuerte como para resistir perderme cuando peleo. La idea de matar a otra persona que amo es demasiado. No sé qué haré si algo así vuelve a suceder… aunque supongo que ya no querrás ayudarme. Maté a tu amiga, después de todo”.

Esta era la verdad del corazón de Epona. Sin la llave que era Mireille, nunca la habría abierto.

“Te apoyaré como amigo de Mireille. Mireille te dio las gracias, ¿no? Ella te pidió que protejas a Alvanian. No es mi lugar condenarte. Para cumplir su deseo… Para ayudarte a ser lo suficientemente fuerte para proteger este país, te prestaré mi poder. No necesitas preocuparte. Soy lo suficientemente fuerte como para sobrevivir unas cuantas rondas contigo. Siéntete libre de entrenar conmigo al contenido de tu corazón. Si vuelves a caer en la sed de sangre en el campo de batalla, te detendré”, declaré.

“¿Puedo confiar en ti en eso?”

“Sí. Sabes de lo que soy capaz”.

“Sí lo sé. Um, hay algo que siempre quise decir pero no pude hacerlo… Por favor, sé mi amigo. Nunca me atreví a decirle eso a Mireille. Si estás de acuerdo con alguien como yo, y no te asusto, entonces sé mi amigo… Me siento solo”.

Un poder abrumador significaba un aislamiento abrumador. Eso fue algo que nunca podría haber predicho.

“Suena bien para mí. Somos amigos “, estuve de acuerdo.

Extendí mi mano derecha para un apretón de manos. Epona lo agarró con fuerza y sonrió mientras se secaba las lágrimas.

“Ah-ha-ha, estoy avergonzado, pero feliz también. Gracias, Lugh”.

“Por supuesto, Epona”.

Y así, me convertí en el amigo del héroe.

Fue una relación construida sobre múltiples mentiras calculadas. No obstante, todavía tenía la intención de ser un aliado genuino. Así era como planeaba expiarme por engañar a Epona y usar el nombre de Mireille. Yo compensaría mis falsedades salvando al héroe.

… Había sido difícil simpatizar con el héroe antes. Sin embargo, después de oírla desnudar su corazón para mí, realmente no quería matarla.

Ya no asesinaba a la gente como si fuera una herramienta sin sentido. Prometí vivir mi vida por mí mismo. Con ese fin, necesitaba buscar lo mejor que pudiera una forma de salvar el mundo sin matar a Epona.

Usaría todos los métodos disponibles para evitar que las cosas lleguen a un punto en el que me vería obligado a elegir entre Epona y el resto del mundo.