Hai to Gensou no Grimgar

Volumen 6: Hacia una Gloria que No Vale la Pena Tomar

Capitulo 8: Cruza la Línea

Parte 5

¿Esto era realmente algo que podían lograr a través de la repetición? Era difícil de aceptar al pie de la letra, pero Akira-san no parecía del tipo que inventaba cosas para engañar a los que eran más jóvenes y menos experimentados.

“Todo se trata de lo que acumulas con el tiempo.” Akira-san devolvió su espada a su vaina una vez más. “Es experiencia. Siente las cosas por ti mismo y construye sobre eso. Si todo lo que has hecho es aprenderla, una habilidad es solo una habilidad y nada más. La verdadera fuerza se encuentra en algún lugar más allá de eso. Ahora, cuando se trata de cómo se tiene sentido para eso, en realidad, la repetición en el campo es la única manera.”

“Hmm,” Gogh resopló. “Bueno, no pareces importante.”

La hermosa maga Miho estaba ahí también. Si bien la situación estaba a su favor, todavía era una batalla caótica, entonces ¿por qué estas personas se tomaban las cosas con calma como si estuvieran dando un paseo en su propio jardín?

“Dar conferencias no te sienta bien, Akira-san,” dijo Gogh. “Ni siquiera eres del tipo que sigue la teoría. De cualquier manera, el hecho de que quieras contarles esto a los más jóvenes puede ser una prueba de que has envejecido.”

“Bueno, sí.” Akira-san se encogió de hombros. “Soy consciente de eso.”

“Todavía es joven,” dijo Miho con una risita.

“¡Bwuh!” Ranta pudo haber imaginado algo extraño.

“¡M-Magia!” Shihoru se inclinó, apretando fuertemente su bastón. “¿Qué… qué tal la… magia? ¿Hay un truco para ello?”

“Quiero saber.” Mimorin asintió.

“Oigan, esperen.” Anna-san miró alrededor con inquietud.” ¡¿Está bien farfullar?! ¡Todavía hay muchos enemigos alrededor, ¿sí?!”

“Bueno, entonces es hora de trabajar un poco,” dijo Gogh con una mirada a Shihoru y Mimorin. “Responderé a su pregunta mientras estoy en ello. Solo están en la línea de inicio de la magia una vez que han aprendido correctamente todos los sigilos elementales que pueden pagar para que el gremio les enseñe. A partir de ahí, depende de ustedes. Miho.”

“De acuerdo.”

“Lo estamos haciendo.”

Gogh y Miho se alejaron. Akira-san los siguió sin hacer ruido. Si algún enemigo los atacaba, Akira-san los cortaría inmediatamente.

Los tres pronto se detuvieron. Miraban hacia el gigante blanco de ocho metros.

Gogh y Miho comenzaron a dibujar lo que parecían sigilos elementales con las puntas de sus bastones.

“De, he, lu, en, ba, zea, ruv, dag, na, mitoh, la, we, swa, va.”

“Ne, ve, lu, shia, rass, fe, de, ge, hi, mina, sheh, kweh, du, il.”

“Nunca había visto eso antes,” susurró Shihoru.

Eso era cierto. Haruhiro no había visto sigilos elementales como esos antes, y era un canto desconocido. Parecía que, tal vez, la entonación también era diferente de los encantamientos que Shihoru o Mimorin usaban.

El clase de ocho metros, que parecía haber notado a Gogh y Miho, los miró. Justo después de que lo hizo, hubo un sonido de: Thuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuun.

“…Un disparo.” Mary se quedó boquiabierta.

“Miau…” Yume parpadeó repetidamente.

“Y, bueno, hay innumerables puntos que podría cubrir, pero…” Gogh se volvió para mirarlos, poniendo su cabello detrás de la oreja con un estilo artístico. “Incluso después de cambiar de trabajo para convertirme en sacerdote, pude manejar todo esto con suficiente estudio. Sin embargo, no podría haber hecho lo que acabamos de hacer por mi cuenta. Liberamos un elemental y luego activamos un poder alternativo. No te enseñarán estas cosas en el gremio. Tienen que estudiarlo por ustedes mismas, hacer descubrimientos y refinar sus habilidades…. Vaya, estoy agotado.”

Gogh de repente bajó la cabeza y se llevó una mano a la frente. Parecía que podría desplomarse en el suelo en cualquier momento.

“Oh, cielos.” Miho entrecerró los ojos y se cubrió la boca con las manos.

“Ambos estamos envejeciendo.” Akira-san le ofreció algo de apoyo a Gogh. “Aunque, en tu caso, tu cuerpo ya era débil para empezar.”

“…Oh, cállate,” gruñó Gogh. “Déjame solo.”

“¡Cariñoooooo…!” Kayo se apresuró, dejando una fina niebla de sangre en su estela. “¡¿Qué pasa?! ¡¿Estás bien?! ¡¿Cariño?! ¡Nunca te perdonaré si mueres antes que yo!”

“¡¿Papá?! ¡¿Te pasó algo, papá?! ¡No mueras!” Taro también se precipitó, su rostro retorcido por la angustia.

“¡Escuchen! ¡No me voy a morir así de fácil!” Gogh les gritó, pero el sonido estaba cubierto por el estruendoso estrépito del gigante blanco de ocho metros que caía con fuerza al suelo.

Y pensar que el gigante blanco de ocho metros, que había sido un problema, sería asesinado tan fácilmente.

Los soldados voluntarios soltaron una ovación.

“¡Gwajajajaja!” Con una risa aterradora, Branken apuntó su hacha hacia el otro problema. “¡Ahora es tu turno! ¡Prepárate para morir!”

Haruhiro trató de tragar su saliva, pero su boca estaba seca, por lo que su manzana de Adán se movió sin sentido.

La hidra también debió sentir algo, porque se quedó donde estaba, sus tentáculos se retorcieron. No, no solo se retorcieron. Sus tentáculos se extendieron ampliamente, como si tratara de hacer que su ya enorme cuerpo pareciera aún más grande.

“Bueno, ahora.” Akira-san se alejó de Gogh y desenvainó su espada. “Primero, veamos de qué es capaz.”

Iron Knuckle. Berserkers. Orion. Todos estaban entre la primera línea de soldados voluntarios y, sin embargo, no se movieron ni se podían mover. Akira-san, Kayo y Branken fueron los únicos que se acercaron a la hidra.

Todos los cinco tentáculos arremetieron contra ellos a la vez. Tres en Akira-san, y uno en Kayo y otro en Branken.

Son rápidos. Incluso con ese tamaño, ¿son tan rápidos?

Para los ojos de Haruhiro, parecía que se movían a una velocidad similar a la de una persona que blandía una espada. No hay forma de eludir eso, pensó por un momento.

Pero Akira-san dio dos rápidos pasos, Kayo se adelantó, y Branken rodó hacia un lado, cada uno evitando los tentáculos a su manera.

Akira-san fue a la derecha de la hidra, mientras que Branken fue hacia la izquierda. Kayo fue por el centro y acercándose.

La hidra agitó sus tentáculos. Parecía tener dos tipos de ataques que podría hacer con ellos. Cortes como una espada y puñaladas hacia abajo.

Las puñaladas parecían evitables, pero los cortes serían más fuertes. Tenían más de dos metros de diámetro. Si algo como eso, que era demasiado grueso, y demasiado largo, les llegaba a esas intensas velocidades, ¿no había ningún tipo de lugar a donde huir? ¿Por qué Akira-san y los otros podían evitarlos? Haruhiro ni siquiera podía imaginarlo.

Tal vez puedan predecirlos, pensó. Deben saber dónde los tentáculos no pueden alcanzarlos. Probablemente. Pero ¿cómo lo descubrieron? Eso es un misterio. Demasiado misterioso. Sin pasar mucho tiempo observándolo de cerca y estudiándolo, ¿no es imposible?

“No, a menos que seas del tipo de genio que este mundo rara vez ha visto,” dijo Gogh, pareciendo haber visto a través del proceso de pensamiento actual de Haruhiro. “Al final, la experiencia lo dice todo. Cuando nos enfrentamos a un enemigo que nunca hemos visto antes, por supuesto que tampoco conoceremos esas cosas. Sin embargo, siempre habrá algunas similitudes, puntos en común con enemigos a los que nos hemos enfrentado anteriormente. ¿Qué es similar? ¿Qué es igual? No puedes lidiar con ellos si estás agonizando por esas cosas. ¿Qué hago aquí? ¿Qué me da las mejores probabilidades? Tu cuerpo necesita moverse por sí mismo antes de que comiences a discutir contigo mismo sobre qué hacer.”

“E-Esa cosa…” Ranta gimió. “¿Han peleado con muchas cosas así? ¿Es por eso que son capaces de luchar como si no fuera gran cosa?”

“Tengo la impresión de que es bastante difícil.” Gogh se encogió de hombros. “La pasarán mal con esa cosa. Sin acceso a la magia de luz, estarán menos dispuestos a tentar su suerte.”

“Dices que de esta manera esto no te concierne.” Miho frunció el ceño, pero Haruhiro no pudo evitar pensar que también parecía completamente a gusto con la situación.

“No hay ningún lugar a donde apuntar.” Taro bajó su arco, frunciendo el ceño distorsionando su hermoso rostro. “Odio a los enemigos grandes. Desearía poder ayudar a mamá…”

Taro parecía más joven que Haruhiro y su grupo, pero debía tener una experiencia considerable. Dado que viajaba con Akira-san y su grupo, eso era natural.

“¿Te importa si hago una pregunta?” Kuzaku preguntó vacilante.

Gogh miró a Kuzaku, indicando con su expresión que continuara.

“Dijiste ‘a menos que fueran genios,’ pero…” Kuzaku preguntó lo qué había querido Haruhiro. “Es un poco demasiado tratar de reclamar que Akira-san y los demás no son genios, ¿no crees?”

Aunque esto era igual para Branken y Kayo, era increíblemente difícil de creer las cosas que Akira-san estaba haciendo. Al principio se había centrado en evadir los tentáculos de ataque, pero ahora estaba haciendo más que eso. Después de esquivarlos, los atacó con su espada. Además de eso, ¿no se estaba acercando lentamente a la hidra? Probablemente eso era. No, no solo probablemente, definitivamente estaba acercándose más.

“Akira no es un genio,” dijo definitivamente Gogh, y luego soltó una risita maliciosa.

Él tiene que estar mintiendo, pensó Haruhiro con incredulidad. ¿Su relación está coloreando su perspectiva?

“Tienes razón,” dijo Miho al instante.

Haruhiro comenzó a pensar que tal vez ese no era el caso.

Ella dijo: “Cuando nos conocimos, ese tipo era un cobarde sin esperanza.”

“De hecho, todavía es bastante tímido, ¿sabes?” Estuvo de acuerdo Gogh.

“Podrías tener razón.”

“Incluso en nuestra generación, había muchos tipos más fuertes que él.”

“Yo diría que Kayo era mucho más valiente.”

“No es que eso haya cambiado.”

“Mi madre es la más valiente del mundo, y mi papá es el más sabio,” declaró Taro con una mirada tan seria que daba miedo. “Y en cuanto a mí, soy el más afortunado.”

“Seguro que los amas, eh,” dijo Yume con seriedad.

“¡Por supuesto que sí!” Taro gritó, con los ojos muy abiertos. “¡Mi amor por mamá y papá no perderá ante nada! ¡Nunca! ¡Nunca!”

“Sin embargo, no estoy seguro de que sea una cuestión de ganar o perder.” Gogh le dio una palmadita en la cabeza a Taro con una sonrisa irónica. “Aparte de eso, lo único que puedo decir con certeza es que Akira no es un genio. Pero él sobrevivió. Eso es gracias a mí, a Kayo, a Branken, a Taro, y a los muchos amigos y camaradas que hemos perdido en el camino. Muchos talentosos guerreros y paladines que fueron bendecidos con talento cayeron, mientras él se quedó. No sobrevivió porque era fuerte. ¿Qué fue lo que funcionó a su favor? Si resumieras en una palabra, sería suerte, supongo. Debido a que tuvo suerte, sobrevivió y pudo ser fuerte.”

No habían sido solo una o dos instancias: se habían acumulado más de dos décadas de buena suerte. Eso era lo que había creado a Akira-san.

¿Cuán afortunado era él? Incluso un solo caso de mala suerte pudo haber sido suficiente para matarlo como Manato o Moguzo.

Dando la vuelta, si Manato o Moguzo no hubieran muerto cuando lo hicieron, tendrían la oportunidad de parecerse a Akira-san. De hecho, Manato y Moguzo tenían más aptitudes que Haruhiro. Lo que significaba que no había garantía de éxito. Si la suerte de un soldado voluntario era mala, incluso un poco mala, se acabaría. Morirían.

De cualquier manera, Akira-san era uno de los pocos elegidos.

“…No soy así,” murmuró Haruhiro.

Akira-san, Branken y Kayo casi tocaban la hidra. Los cinco tentáculos no parecían atraparlos en absoluto.

Entonces, de repente, los cuatro tentáculos que utilizaba para moverse atacaron a Akira-san y los demás. Mientras Haruhiro fue sorprendido, Akira-san y los otros parecían haberse anticipado. Esquivando y tejiendo entre los tentáculos, Branken y Kayo retrocedieron, pero… Akira-san apuñaló su espada en la raíz de un tentáculo

Con eso como agarre, subió. Era el mismo estilo de escalada, como si subiera una colina. Corrió a lo largo de la parte superior del tentáculo.

“Ohh.” Gogh chasqueó los dedos. “Había una fortaleza que Akira siempre tuvo. Su sentido del equilibrio. Esa es la única cosa en la que estaba por encima del promedio.”

“También le gustaban los lugares altos,” Miho rió.

“Debe ser un idiota.” Las esquinas de los labios de Gogh se volvieron hacia arriba. “Ya casi es hora, ¿eh?”

“Sí. Tienes razón.”

¿Casi es hora para qué?

El tentáculo intentó tirar a Akira-san. Akira-san saltó. Dio un puntapié a otro tentáculo, y luego a otro tentáculo. Akira-san desapareció detrás de los tentáculos.

“¡¿-E-E-E-E-Estará bien?!” Kikkawa gritó.

Todo el cuerpo de la hidra se estremeció.

“¡Gyahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!” Soltó un tremendo grito.

Si una mujer que tuviera más de diez metros de altura soltaba un grito, podría haber sido tan fuerte. Ese sonido fue liberado de la parte inferior de la hidra junto con una ráfaga de aire, agitando los tentáculos y haciendo que se batieran alrededor.

Akira-san salió de entre un espacio en los tentáculos.

Gogh y Miho dibujaron sigilos elementales con sus bastones y cantaron sus hechizos.

“Ea, zu, fa, nwe, meu, hoa, rahi, kweh, ba, ju, sai, le, cthu.”

“Ni, fau, shin, dza, wao, iki, le, vu, duma, gis, qua, zu.”

“¡¿Está caliente?!” Haruhiro se cubrió la cara sin querer y dobló las rodillas. La ráfaga de viento caliente sopló en él. O podría haber sido más exacto decir que barrió violentamente sobre él.

La hidra estaba en el centro de eso. La hidra se estaba quemando, no, no era eso. No se elevaban llamas de ella. Pero estaba caliente. Había un increíble vórtice de aire caliente atormentando los tentáculos de la hidra. Ese vórtice parecía dirigirse hacia el centro de la hidra. Haruhiro y los demás solo estaban siendo atrapados en el camino. Aun así, era caliente y aterrador.

¿Qué estaba pasando? ¿Qué iba a pasar aquí? El viento de repente cambió de dirección. Ya no soplaba hacia ellos. Estaba succionando.

Estaban siendo arrastrados.

“¡¿Uwahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh?!” Ranta gritó.

“¡¿Yahooooooooooooooooooooooooooo?!” Kikkawa gritó.

Ranta, Kikkawa, dejen de gritar.

Aunque sé cómo se sienten.

“¡¿Hyaaaaaaaaa?!” Shihoru gritó.

“¡¿Funyooooooooo?!” Yume gritó.

“¡¿Kyaaaaaaa?!” Mary gritó.

Shihoru, Yume y Mary se abrazaban una a la otra.

“¡¿Qué diablos?!” Kuzaku se tiró al suelo.

“¡¿What the hell?!” Anna-san gritó.

Mimorin se aferró en pánico de Anna-san, y, por alguna razón, también se apoderó de Haruhiro.

“No, estaré bien, ¿de acuerdo?” Le dijo.

“¡Por si acaso!”

Realmente estaré bien y, en realidad, es más difícil para mí cuando me abrazas así. Ahora que lo pienso, ¿están bien Tokimune y Tada? Además, ¿dónde está Inui?

“¡Oh!”

El viento cambió de dirección otra vez. Esta vez, ni los empujaba ni los atraía. Soplaba hacia abajo desde arriba. La masa de aire caliente los estaba presionando y aplastando.

Haruhiro y su grupo solo recibían la presión suficiente como para obligarlos a agacharse, pero, para la hidra en el centro de la tormenta, era mucho peor.

¿En serio?

La hidra estaba siendo aplastada.

Los nueve tentáculos estaban pegados al suelo, revelando la parte central, ¿su cuerpo principal, tal vez? ¿O el torso? Fuera lo que fuera, la parte que parecía una enorme planta carnosa blanca había sido expuesta, y la parte superior estaba crujiendo y hundiéndose cada vez más a cada segundo.

¿Qué es esta magia? ¿Magia Arve? No puede ser Magia Kanon, ¿verdad? Tampoco parece que sea Magia Falz o Magia Darsh. Bueno, ¿entonces qué es? Recuerdo que Gogh dijo algo sobre liberar elementales y luego activar un poder alternativo. ¿Esa es la verdadera naturaleza de este hechizo de torbellino supercaliente y aplastante?

Finalmente, el viento caliente disminuyó.

La masiva mancha blanca carnosa como planta parecía haberse encogido a la mitad de su tamaño original. No era posible confirmarlo desde aquí, pero en el medio probablemente se derrumbó bastante.

La hidra no se movía en absoluto.

“¿Está… muerta?” Ranta cayó de espaldas, con la mente solo a la mitad.

“Estoy agotado…” Gogh se tambaleó.

“¡Papá! ¡Aquí!” Taro movió su arco y su carcaj de flechas bajo su brazo, luego se agachó frente a Gogh y le ofreció su espalda.

“Ahora, escucha… soy tu padre, ¿entendido?” Incluso mientras pronunciaba lo que sonaba como una queja, Gogh descansaba sobre la espalda de Taro. Él podría haber estado teniendo un momento bastante difícil.

“Jeje.” La sonriente Miho parecía no tener tantos problemas. ¿Ella era resistente, además de ser una belleza increíble? ¿O Gogh era demasiado débil?

“¿Se… termino..?” Shihoru se aferró a Yume, temblando.

“¿Tal vez?” Yume frotó la espalda de Shihoru tranquilizadoramente.

“Eso espero.” Mary se unió a Yume acariciando a Shihoru.

“Uff…” Kuzaku miró tímidamente.

“¿Es seguro ahora?” Mimorin preguntó.

Anna-san, que estaba jugando con el demasiado amplio pecho de Mimorin por alguna razón, inclinó la cabeza hacia un lado inquisitivamente.

¿Está bien cuando las chicas se hacen eso una a la otra? Haruhiro se preguntó. No es que estuviera celoso ni nada por el estilo. “Q-Quién sabe…”

Pero ¿lo era realmente?

Haruhiro no podía decirlo con certeza, pero podría haberlo apreciado si Mimorin lo dejaba ir, ¿sabes? Sintiendo los pechos de Mimorin pegados a él, estaba a punto de decirle todo cuando, no muy lejos, Tada comenzó a gritar.

“¡No, esto no es divertido! ¡Me niego a dejar que termine así de fácil! ¡Ni siquiera he hecho nada todavía! ¡No te quedes muerta, ya vuelve a la vida!”

¡Gyahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh!

“¡Iaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!” Mimorin dejó escapar un grito inusual y apretó a Haruhiro y Anna-san con fuerza. O más bien, ella lo estaba estrangulando. No podía respirar.

Ayuda, Haruhiro rogó en silencio. Pero, bueno, no podía culparla por sorprenderse. Él estaba sorprendido también.

La hidraz, que había asumido que estaba muerta, de repente dejó escapar otro estallido de sonido desde el fondo de esa gran parte blanca que era como una planta carnosa. Más que eso, el sonido era más fuerte y más violento que la primera vez. Entonces, los tentáculos comenzaron a agitarse violentamente.

Akira-san, Branken y Kayo estaban retrocediendo. Bueno, no era una sorpresa. Parecía bastante peligroso, ¿sabes? Los otros soldados voluntarios entraron en pánico, al igual que Haruhiro y su grupo.

“¡Jajajajajajajajajajaja!” Sin embargo, Tada parecía emocionado. “¡Bueno! ¡Así es como yo lo quería! ¡Diviérteme más!”

“¡Bien! ¡Aquí es donde comienza la segunda ronda, eh!” Tokimune parecía estar divirtiéndose.

¿Son estúpidos…?

“Kwa, do, roh, wo, su, eck, lue, rah, va, le.” Mientras tanto, Miho lanzó un hechizo.

Si lo describiera con un color, era púrpura. Esta cosa púrpura que no era ni una llama ni un relámpago explotó en la gigantesca y carnosa porción vegetal blanca de la hidra con un sonido desgarrador. Fue cortada y desgarrada, salpicando una especie de sustancia similar a la mucosidad alrededor, y la hidra comenzó a convulsionar, pero se podría decir que eso fue todo lo que hizo. Aún así, Miho se mantuvo confiada. No solo no retrocedió, sino que avanzó.

“Ah, lua, de , muo, su, vi, gwa, pa, le, tu, kia.”

Esta vez era un verde negruzco. La luz verde oscura brilló repetidas veces y golpeó la enorme, blanca y carnosa parte como planta. La atravesó. La rasgó. Los tentáculos se retorcieron. La hidra se retorció, la mucosidad salpicó por todas partes, y luego…

“Ta, tu, rua, fa, yek, nie, she, la, stoa, ryu, kweh, wana.”

¿Eh? ¿Aún más? ¿Vas por más?

Un punto rosa se formó sobre la porción masiva, blanca y carnosa como planta de la hidra. Luego cayó.

Shishishishishishishishishishishishishishishishishishishishi…

Espera, ¿qué tipo de sonido era ese? ¿Qué era? Eso no estaba claro, pero aparentemente provenía de donde el punto de color rosa se ponía en contacto con la enorme, blanca y carnosa cosa como planta. ¿Qué era ese punto de color rosa de todos modos? Se estaba haciendo más grande.

El punto ya no era un punto. Era un bola ahora. Cada vez más grande.

Los tentáculos se agitaron frenéticamente. Sus tentáculos golpeaban el suelo. Como si dijera: “Espera, espera, en serio, espera,” e intentara pedir un descanso.

Naturalmente, los soldados voluntarios no iban a esperar. Darle un descanso era impensable.

La esfera de color rosa estaba borrando la parte enorme, blanca y carnosa como planta. Como si se estuviera derritiendo. La esfera de color rosa finalmente se hundió dentro de la enorme, blanca y carnosa planta.

Los nueve tentáculos quedaron flojos. La enorme, blanca y carnosa planta parecía que también se había quedado flácida.

Miho se detuvo y dejó escapar un suspiro. Entonces soltó una risita. “Fue terca y descarada, así que la castigué un poco.”

Haruhiro se sorprendió y se aferró a Mimorin sin querer. ¿Es una sádica total?

“¡Vamoooooos!” Tada gritó en la cara de Miho. “¡Justo cuando finalmente iba a ser bueno, tenías que arruinarlo!”

“Oh, querido. Lo siento.”

“¡Disculparse no lo va a arreglar! Ahora, escucha, aquí—¡¿Murgh?!”

…Vaya. Haruhiro sabía que no podía permitirse el lujo de estar sorprendido por cada pequeña cosa, pero esto era realmente sorprendente.

Los tentáculos de la hidra se llenaron de repente de fuerza. Los nueve tentáculos se levantaron del suelo, y la hidra saltó al aire.

Saltó.

¿Eh, puede saltar?

“¡Oh, mierda! ¡Retrocedan!” Akira-san gritó.

Esta era la primera vez que escuchaba una urgencia en la voz de Akira-san. Akira-san, Branken, Kayo, Miho y Taro, que llevaba a Gogh, ninguno de ellos vaciló cuando llegó el momento de huir. Increíblemente era casi una pena que escaparan.

La hidra saltó. Voló en el aire, agitando sus tentáculos.

Tokimune y Tada retrocedieron también.

“¡Mimorin, déjame ir!” Haruhiro se liberó de la mano de confinamiento de Mimorin. “¡-D-D-D-Debemos darnos prisa y salir de aquí!”

“¡Debemos, sí!” Anna-san gritó.

“¡Sip!” Mimorin se fue lentamente cargando a Anna-san.

El resto de sus camaradas también huyeron. Era como una competencia para ver quién podía correr más rápido. Necesitaban alejarse de la hidra.

Hombre. No, simplemente no. Haruhiro siguió moviendo sus piernas mientras expresaba todos los sentimientos que no podía convertir en palabras dentro de su cabeza. Ranta, Mary, Kuzaku, Yume, Shihoru. Todos están bien. Kikkawa, Tokimune y Tada también. Inui todavía está perdido, pero ¿a quién le importa un comino? ¿Qué hay de Iron Knuckle, Berserkers y Orion? Parece que se han dispersado, ¿tal vez?

Haruhiro, por su parte, aún seguía a Akira-san y los demás. ¿Estaba bien? ¿No era así? No tenía idea. No podía decidir.

De repente, la hidra dejó de saltar.

Está viniendo.

Golpeó los nueve tentáculos en el suelo con fuerza, cargando en un alboroto salvaje.

“¡¿Wawawawawawawaaaaa?!” Haruhiro corrió y balbuceó incomprensiblemente en pánico.

¿Esto es malo? Es malo, ¿verdad? ¿Eh? ¿Lo arruiné? ¿Hice algo mal? Quiero decir, parece que la hidra viene hacia aquí. ¿Está apuntando a Akira-san y su grupo? Si es así, ¿deberíamos separarnos de ellos? ¿Tal vez?

“¡De, el, lu, en, ba, zea, ruv, ah, tu, la!” Gogh se dio vuelta mientras Taro todavía lo cargaba y comenzó a cantar mientras dibujaba lo que parecían sigilos elementales con su bastón.

¡Kabuuuuuuuuuum!

Hubo una explosión directamente debajo de la hidra, lanzando una gran cantidad de hierba y tierra al aire.

La hidra perdió su equilibrio. Eso fue porque su equilibrio había sido destruido con magia. Necesitaban ganar tanta distancia como fuera posible ahora. Pero ¿de qué serviría esa distancia? ¿Qué iba a pasar? ¿No los alcanzarían eventualmente? ¿Qué harían si lo hiciera?

Por ahora, todo lo que podemos hacer es correr lo más rápido que podamos, pensó Haruhiro. Si la hidra está apuntando a Akira-san y su grupo, eso no es bueno. No sé cómo decirlo, pero, ya sabes, hay mejores maneras para que podamos manejar esto. Como, si estoy buscando nuestra seguridad, podrías decir que solo hay una opción.

Si Haruhiro fuera franco, pensaba que era mejor no seguir al grupo de Akira-san. Tal como estaban las cosas ahora, estaban de pie en la línea recta entre la hidra y el grupo de Akira-san, y no querían estar ahí. Tal bez sería mejor para ellos cambiar de rumbo y actuar de forma independiente.

Sin embargo, me sentiría culpable por hacerlo. Además, no es absolutamente seguro que Akira-san y los demás sean su objetivo. ¿Qué pasa si no lo son? Si se vuelve y nos sigue cuando nos separemos de Akira-san y los demás, sería un desastre total. Akira-san y su grupo no podrían ayudar, y, bueno, ese sería nuestro final.

Dicho eso, estoy bastante seguro de que la hidra debe ir tras Akira-san y su grupo.

¿Tomamos esa apuesta?

No parece una mala apuesta, pero no puedo comprometerme con ella. Debo decidir más pronto que tarde. Soy tan indeciso. Odio eso de mí.

Al final, ¿Akira-san y su grupo no manejarán las cosas de alguna manera? ¿Es eso lo que estoy pensando? Al menos no puedo decir que no sea parte de eso. ¿Eso es solo dejar mis problemas a otra persona, no es así? Creo que hay algo mal con eso. ¿Está bien? No puedo decir que lo esté, ¿verdad?

Incluso en su indecisión, continuaba moviendo diligentemente sus piernas cuando corrió más allá de algo que estaba yendo en la otra dirección.

“¿Eh?” Se dio cuenta Haruhiro. ¿La otra… dirección?

Sí. No había dudas al respecto. Algo había corrido hacia él, luego corrió justo más allá de Haruhiro.

Haruhiro se volvió y miró.

Ese algo estaba cubierto con una armadura negra.

Era ajustada, lucía liviana, y toda negra, pero ¿qué era con esa luz anaranjada que salía de aquí y allá? ¿Cómo funcionaba eso? Había una espada corta y curva, o más bien una katana, en una de las caderas de la figura, y una katana bastante larga sobre su espalda.