Maou no Ore ga Dorei Elf wo Yome ni Shitanda ga

Volumen 1

Capitulo 1: El Primer Amor Es Una Enfermedad Desagradable Que Todo El Mundo Sufre

Parte 3

El más famoso era probablemente el segundo nombre del archidemonio Marchosias, que era el “Mayor”. Incluso a Barbatos se le conocía con el nombre de “Purgatorio”.

Zagan también era un hechicero bastante conocido, pero aún no se le había otorgado un segundo nombre.

Probablemente en parte debido al hecho de que todavía era joven a los dieciocho años, pero la razón más importante era que el que supervisaba a todos los que se encontraban en el área, el archidemonio Marchosias, había fallecido. Era el rol del archidemonio otorgar un segundo nombre, pero él había perecido antes de otorgarle uno a Zagan.

En resumen, un segundo nombre era una prueba de su poder.

Aunque eran extraños, Zagan estaba ligeramente interesado en los hechiceros que tenían un segundo nombre.

“¿Son fuertes?”

“Extremadamente. Al igual que tú y yo, todos son nombres que se presentan como candidatos para ser el próximo Archdemon.” Actualmente, debido a la desaparición de Marchosias, había un solo asiento abierto entre los Archdemons.

Hubo una conferencia entre los Archidemons restantes sobre cómo ocupar ese asiento, pero probablemente sería uno de los hechiceros recomendados que poseían el poder.

“Hombre, si incluso ese lote llegó, entonces parece que hablar del legado es el verdadero problema, ¿eh?”

“Claro que sí.” Si no fuera el caso, no tenía sentido deshacerse de su sueño.

E incluso mientras todo eso sucedía, la subasta se estaba llevando a cabo.

“A todos ustedes que se han reunido aquí hoy. El siguiente ítem es el ítem final del día, ¡y también es nuestro más grande!” Escuchando la voz del anfitrión, Barbatos se inclinó hacia adelante con entusiasmo.

“Bueno, parece que ya es hora, Zagan”.

“Sí”. Aún no sabía con certeza si realmente había algo como el legado de un Archdemon aquí, pero ahora era el momento en el que la pieza principal estaba en el centro del escenario.

Y lo que finalmente subió al escenario… fue una persona de baja estatura con una capucha que les cubría la cabeza. Un manto se extendía hasta los pies, por lo que incluso su raza era desconocida. No eran tan pequeños como un enano, pero si fueran de cualquier otra raza, sería del tamaño de un niño.

Ahora bien, en cuanto al legado en cuestión, ¿la persona encapuchada se aferraba a él? Como todos los presentes en el lugar centraron su atención en esa figura, el anfitrión comenzó a explicar.

“Lo que tenemos aquí es una mercancía que originalmente se entregaría a Archdemon Marchosias. Sin embargo, antes de que llegara, Marchosias pereció y, por lo tanto, nos han enviado las mercancías no entregadas en cuestión, dadas las circunstancias”. Al oír esas palabras, Barbatos hizo una mueca.

“Entonces, ¿no es el legado?”

“Es probablemente uno de sus catalizadores, entonces”.

Había más en invocar a la brujería que simplemente dibujar un círculo mágico o cantar un hechizo. De hecho, hubo numerosas ocasiones en que se usaron herramientas también. Desde la tinta que se usa para dibujar el círculo mágico, hasta los adornos que usa el hechicero, o incluso usar sacrificios para reforzar el poder de la hechicería.

Tales herramientas se llamaban catalizadores, pero la calidad diferente de ellos demostró una diferencia en el poder.

Fue desafortunado que no fuera el legado, pero el interés de Zagan se vio afectado por el hecho de que fue un catalizador elegido por el mismo “Archidemon”.

Poco después, el manto fue retirado de la figura a su vista. Y lo que se reveló… fue una chica encantadora con orejas puntiagudas.

Lo supo a simple vista. Era de la raza legendaria que vivía en Norden, una tierra en la que nadie podría pisar un pie. Sí, un elfo.

Tenía el pelo blanco como la nieve que se extendía hasta su cintura, y una profunda cinta carmesí que lo adornaba. Tenía una cara pequeña y grandes ojos azules que parecían el cielo de verano, y sus labios eran de un rosa moderadamente pálido. Un vestido blanco estaba envuelto alrededor de sus delicadas extremidades, y tenía una apariencia que le hacía a uno pensar en la hija de un noble.

Sin embargo, tenía grilletes alrededor de sus manos y pies, y un collar que sellaba mana alrededor de su cuello.

Mirando a los ojos de esa chica, Zagan sintió que su corazón temblaba. Sintió la sensación de que algo corría desde la punta de sus dedos hasta la parte superior de su cabeza.

Oscuro… y ojos vacíos.

Eran ojos que no reflejaban nada, no pensaban en nada. Eran los que pertenecían a alguien que había renunciado a todo en el futuro.

Y, sin embargo, por alguna razón, Zagan no pudo apartar su mirada de ellos.

“¡Este es un miembro de la legendaria raza, un elfo que fue capturado en Norden! No solo eso, como puedes ver, tiene el pelo blanco como la nieve. No se ha teñido. ¡Este es un elfo con cabello naturalmente blanco!” En lugar de personas, se decía que los elfos estaban más cerca de un tipo de dios o espíritu.

Y, independientemente de la especie, los individuos con cabello blanco eran ejemplares deshonestos, muchos de los cuales poseían cantidades extraordinarias de maná.

El uso de un elfo de pelo blanco como un sacrificio haría que fuera realmente posible alcanzar el poder adecuado para un “archidemonio”.

Cuando el anfitrión rodeó al elfo, él recogió su cabello fluidamente con su dedo.

“No solo eso, sino que incluso como mujer es bastante vista, por lo que además de ser utilizada como un sacrificio para la brujería, tiene un valor extremadamente alto como mascota. ¡Ya sea que la atormentes o la mates, todo depende de tu criterio, mis queridos clientes!”. El anfitrión hizo una fuerte declaración.

“Sin más preámbulos, la oferta comenzará con diez mil…”

“Un millón”. Cuando se dio cuenta, Zagan hizo esa proclamación.

¿Qué es esta violenta pulsación en mi pecho? Encantador… ¿Estaba bien usar esa expresión?

Quería salvar a la chica elfa que estaba parada allí. Quería verla sonreír. Y entonces, quiso tocar su piel.

Tales impulsos que Zagan nunca había sentido antes se agitaban dentro de él.

El lugar había quedado completamente en silencio. Y luego, con un crujido, Barbatos tuvo un espasmo mientras miraba a Zagan.

“¿Qu-demonios, Zagan…?”

“Eso es un millón de monedas de oro de Curiothes”. Esa fue toda la fortuna de Zagan.

Finalmente, el desconcertado anfitrión superó su sorpresa y levantó la voz mientras se limpiaba el sudor de la frente con un pañuelo.

“¡Muchas gracias! ¡Esa es una suma de dinero bastante magnífica! ¡Un millón! ¿Hay alguien que quiera continuar? ¿Alguien en absoluto?” Desde que los brujos se sumergieron completamente en la investigación de la brujería, tenían una fuerte tendencia a acumular riqueza.

Sin embargo, no importa cuánto hayan acumulado, un millón no era una cantidad que apareciera con demasiada frecuencia. Si llegara a la posesión de esa cantidad, hubo varios que lo hicieron, pero si la agotaran, no podrían continuar con su investigación. Era un número tan alto.

“Mira, Zagan, ¿qué estás pensando? Incluso si es para un elfo, tirar tanto dinero es un poco… ”

“Hay algo que siempre he querido, pero nunca supe lo que era. Y finalmente, siento que lo he encontrado”. Sin saber cómo explicar esa sensación, Zagan estaba murmurando con delirio.

Sin embargo, mirando a sus ojos que brillaban con un fuego ardiente en el costado, parecía extremadamente malvado. Aunque era de esperarse cuando estaba siendo impulsado por su deseo.

Y como si estuviera asustado por eso, Barbatos abrió mucho los ojos.

“Tú… ¿Qué clase de hechicería estás planeando usar…?” Barbatos parecía tener un malentendido.

Sin embargo, Zagan despejó el aire sacudiendo la cabeza.

“Eso no es. Puede que la haya comprado por algo más que la brujería. Realmente no puedo describirlo, pero es algo así”.

“¿Estás diciendo que captarás un poder en un nivel diferente al de la brujería…?” Parecía que Zagan explicara que estaba un poco mal, y Barbatos comenzó a temblar de miedo.

Se dio cuenta de que si continuaba hablando, los conceptos erróneos de Barbatos solo crecerían. Y así, Zagan sonrió como si dijera que había un significado diferente, pero incluso eso parecía asustar a Barbatos. Solo se parecía a la sonrisa del diablo.

Con un ruido sordo, Barbatos se dejó caer al suelo. Era como si le hubieran quitado la columna.

¿No lo entendió de nuevo? A medida que la racionalización de su amigo indeseable se iba alejando gradualmente, eventualmente, el sonido del martillo de madera que declaraba la oferta ganadora sonó en el lugar.

“¡Felicidades! ¡La oferta ganadora para la elfa de cabellos blancos se dirige al hechicero, Zagan!” Zagan no recordaba haberse nombrado a sí mismo, pero el anfitrión había adivinado correctamente su nombre al ver su rostro. Simplemente mostró cuán conocido era en esos círculos, pero nada de eso importaba.

Cuando Zagan se levantó de su asiento, dejó atrás a Barbatos, que se había hundido en el suelo, e invocó la brujería de vuelo.

Saltando sobre los asientos de los espectadores, aterrizó suavemente sobre el escenario.

Se paró frente a la niña, pero ella solo siguió mirando hacia abajo sin levantar la cara.

¿Qué debo hacer? ¿Cómo debo llamar a ella? Estaba bien saltar tan vigorosamente, pero no había escatimado un solo pensamiento sobre qué hacer a continuación.

Y como estaba repentinamente perplejo, el anfitrión comenzó a hablarle con una voz persuasiva.

“Por favor, entregar el pago. Ella es una elfa con la suerte de que la candidata ganadora vaya al renombrado hechicero Zagan, ¿verdad? Por cierto, el vestido y el cuello de sellado de maná son regalos gratis. Si alguna vez se quita el collar, existe el riesgo de que ella se escape, así que tenga cuidado”.

“Sí”. Zagan en realidad no estaba escuchando lo que el anfitrión tenía que decir, pero dio una respuesta agradable sin compromiso.

¿Al menos me mirará? No, supongo que ella está asustada después de todo. Más bien, ella no ha pasado por una experiencia amarga ni nada,

¿verdad? Desde que era una chica tan hermosa, probablemente hubo muchas experiencias repulsivas por las que pudo haber pasado. También estaba el caso de la niña en la mañana, lo que llevó el pensamiento de Zagan a lugares bastante horrendos.

Lleno de ansiedad, Zagan extendió su mano hacia la barbilla de la niña.

Tenía una piel que era suave como la seda. Zagan ahora entendió la inquietud de si dejaría una herida con solo tocarla.

Sin embargo, trató de tocarla lo más suavemente que pudo, e inclinó la cara de la niña ligeramente hacia arriba.

Esos ojos huecos miraron a Zagan.

Un suspiro se escapó involuntariamente de los labios de Zagan. Como era de esperar, ella era una niña encantadora.

Sin embargo, ella no parecía estar enfocada. Era sospechoso si ella podía ver a Zagan o no. No, antes de eso, ni siquiera podía sentir nada como una voluntad dentro de ella.

¿Está ella bien? Ella no está siendo manipulada o algo así, ¿verdad? La brujería que arrancó y robó la voluntad de uno no era tan extraña.

Y cuando Zagan se puso pálido, el anfitrión dejó escapar una voz nerviosa.

“¿Maestro Zagan? ¿Hay algo… con lo que encuentres faltas?”

“… Bueno, ¿tiene ella su propia voluntad?” Lo que se filtró de su garganta temblorosa, en lugar de una voz ansiosa, era de mal humor. Fue hasta el punto en el que tuvo ganas de preguntarse qué le enfureció tanto.

Sin embargo, el anfitrión asintió como si llegara a un acuerdo.

“Por favor, estar a gusto. Esta elfa era dócil tras su captura, y fue mantenida en custodia en su estado natural. En primer lugar, el maná del espécimen es tremendamente alto, y cualquier hechicería ordinaria sería inútil para ella. Como tal, yo mismo puedo garantizar su frescura”.

En el caso de usarla como sacrificio, si le lavaran el cerebro con hechicería, causaría una impureza en el ritual y disminuiría su potencia. El anfitrión probablemente pensó que este era el punto que a Zagan le preocupaba.

Sin embargo, mirando a la elfa que estaba vestida de manera llamativa como una dama noble, no parecía tener ninguna herida. Incluso si la trataban como a una esclava, la gerencia detrás de la subasta no era tan tonta como para dejar una herida en una “mercancía” tan valiosa. Parecía que estaba bien confiar en su palabra.

Zagan finalmente dejó escapar un suspiro de alivio.

“Confiaré en ti. Me preocuparía si ella no pudiera al menos emitir un chirrido con buena voz”. Por el momento, trató de hablar de forma que sus intenciones quedaran claras… pero se presentó de manera bastante pretenciosa y francamente peligrosa, manera.

El anfitrión se encogió con una cara pálida.

También sintió que la chica elfa se movía mientras ella temblaba de miedo.

Ah bueno. Parece que ella puede escuchar lo que estoy diciendo, al menos.

Al encontrar paz mental en ese hecho, Zagan era incapaz de entender cuán engañoso era lo que había estado diciendo.

Este fue el primer amor del hombre que pensaba hace apenas unas horas que “las mujeres son simplemente aburridas”.