Death March kara Hajimaru Isekai Kyusoukyoku (NL)

Volumen 13

Capítulo 7: Preparativos

Parte 5

“Gracias por reunirte con nosotros, Satou.”

Mientras esperaba junto a la puerta sur de la Ciudad Laberinto, vi a uno de los elfos profesores emerger del mar de plantas vería fuera de los caminos trillados, con algunos guerreros troll a cuestas.

Los trolls eran una gentil raza de hadas de pequeños y robustos gigantes de piel teñida de verde.

Era difícil distinguir su apariencia desde la distancia, ya que todos vestían capas con capucha. “¿Los demás no están con usted, Sr. Hishirotoya?”

“No, están esperando en las montañas. Pensé que podría causar un escándalo si todos entramos a la vez, así que pensamos que vendríamos en grupos de cinco o más, liderados por aquellos de nosotros que podemos hablar el idioma Shigan.”

Eso ni siquiera se me había ocurrido; agradecí la previsión de los elfos.

Usé Luz Mágica para lanzar una ilusión sobre los trolls y hacerlos parecer pequeños gigantes, una raza más común.

El Sr. Hiya llevaba un Amuleto de Humanidad como el que llevaba Nana, disfrazándose de humano.

Ya les había dicho a los guardias en la puerta sur que tenía invitados de visita, así que dejaron pasar a todos con solo una verificación rápida del tamaño del grupo y sus razas, que por supuesto habíamos disfrazado.

“¿Qué demonios?”

“¿Son esos los pequeños gigantes que viven en el este?”

“Maldita sea, son enormes. Incluso más grande que el ogro que vi en el norte una vez.”

Mientras guiaba a Hiya y compañía hacia el gremio del oeste, mi habilidad “Audición Aguda” captó el parloteo de la gente del pueblo. Probablemente nunca antes habían visto trolls.

“Oye, ¿no es ese el joven maestro Pendragon quien está liderando el camino?”

“¿Qué está haciendo ahora? No veo a las chicas pequeñas ni a la chica de las tetas enormes que normalmente están con él.”

“Bueno, escuché que la señorita Liza de la Lanza Negra y la señorita Lulu la Reina Doncella entraron al laberinto hace unos días.”

Parecía que nos habíamos vuelto relativamente famosos entre los jóvenes exploradores de la ciudad, tal vez debido a actividades como el comedor de beneficencia y cosas por el estilo.

“¿Crees que traerá a esos pequeños gigantes con él para vencer al Amo de Piso?”

“¿Así que va a dejar que el dinero hacer hable por él…? Me pregunto si también nos contrataría a nosotros.”

“Ni siquiera lo pienses. Si un grupo que puede derribar a un jefe de área sin un rasguño está contratando ayuda para esto, entonces ni siquiera seríamos útiles como escudos de carne.”

Perfecto. Había logrado mi objetivo de que una gran multitud me viera caminando con peleadores contratados.

Cuando llegamos al gremio del oeste, había muchos testigos.

“Parece que los trolls deberían poder entrar sin problemas.”

La entrada al gremio era enorme, por lo que incluso los trolls de tres metros de altura podrían entrar.

“Soy  Hishirotoya,  un  explorador  con  insignia  de  bronce.  Me  gustaría  registrar  algunos miembros del grupo.”

Hiya levantó una placa de bronce oxidada mientras hablaba con la recepcionista.

“Por supuesto. ¿Se registrarán como insignias de madera?”

“Está bien. Estaré llenando el papeleo en su nombre, si está bien para usted.” La recepcionista asintió y Hiya se puso a registrar a los trolls.

Entramos en el laberinto y pronto teletransporté a todos donde las aguas termales del laberinto con Retorno.

Ya habían completado su papel, pero no quería simplemente enviarlos de regreso, así que planeé dejarlos disfrutar de las aguas termales con un banquete y una bebida.

“Señor Satou, ¡¿has traído primero a los trolls?! ¡No me extraña que quisieras mi ayuda!”

Lelillil, a quien le había pedido ayuda en la Mansión Ivy, parecía muy emocionada de recibir a los invitados.

“Avísame si nos estamos quedando sin suministros.”

“No te preocupes… ¡hay mucho vino y aguamiel!”

“Entonces dejaré que te ocupes de la fiesta de bienvenida.”

“¡Sí, señor! ¡Puede contar conmigo, señor!”

Dejando el resto en las hábiles manos de Lelillil y sus muñecas vivientes, llevé al Sr. Hiya a la casa de vacaciones donde el grupo lo estaba esperando.

Después de Hiya, traje al resto de los profesores junto con spriggans, leprechauns y otras razas variadas que los escoltaban. El total fue de cerca de cien personas.

Afortunadamente, el abuelo de Lelillil, Gillil, y algunos otros brownies también vinieron como refuerzos, así que logramos gestionar todo sin demasiados problemas.

Agradecí a Gillil y a los demás y traje a los dos últimos elfos profesores a nuestra casa de vacaciones original con Retorno.

“¡Yaaay, es la señorita Poa, sir!”

“Señor Shiya, ¿holaaaaaaaa?”

Pochi y Tama nos vieron primero y agitaron los brazos con entusiasmo.

“¡Oye, Pochi! ¡¿Has estado entrenando o qué?! ¡Más tarde practiquemos un poco! ¡Prepara tu espada de madera!”

“¡Aye, sir!”

La profesora de Pochi, la señorita Portomea, sonrió mientras levantaba la espada mágica Rosa Azul que le había dado.

Pochi corrió hacia su habitación, luego regresó corriendo con dos espadas mágicas de madera sostenidas sobre su cabeza triunfalmente. Parecía que estaba lista para comenzar a practicar en este mismo segundo.

“Tama, estás bien, ya veo.”

“¡Estoy muy bien, ¿por supuestooooooo?! ¡Nin-nin!”

El profesor de Tama, el Sr. Shishitouya, era un elfo parecido a un samurái. Hablaba y se comportaba como un noble guerrero, pero como parecía un niño, me recordaba a un lindo y pequeño estudiante de escuela media que intentaba parecer genial.

Estos dos no parecían tener prisa por comenzar su propio entrenamiento, así que los llevé a la parte de la casa de vacaciones donde algunos de los otros, como los profesores de Liza, el Sr. Gurgapoya y el Sr. Yusek; los profesores de Nana, el Sr. Keriul y la Srta. Gimasarua; y el profesor de defensa personal de Lulu, el Sr. Hishirotoya, estaban esperando.

“¡Oye, Shiya! ¿Poa no está contigo?”

“Ella ya corrió al jardín para entrenar con Pochi.”

“Hay que ver. Ella es una maníaca de la batalla.”

“Vamos, vamos.”

Siendo la voz del pacifismo, sentí un parentesco con estos seis profesores.

“Parece que no puedo sostenerte una vela, señorita Liza.”

“No, nunca me he enfrentado a un oponente tan fuerte como usted, Sir Keriul.2

“¿Eso sin contar a Satou?”

“Oh, el Amo está en una liga propia.”

Liza y Keriul el enano estaban charlando después de su enfrentamiento, aunque fue uno que no había involucrado espadas.

Los dos estaban teniendo menos “degustación de vinos” y más “degustación de carne” en un rincón de la sala de estar.

Liza estaba cantando mis alabanzas, pero yo no consideraba mi paladar como algo especial. Podía percibir incluso pequeñas diferencias de sabor porque mi habilidad de “cocinar” era muy alta, pero ciertamente no podía distinguir la fuente o el sexo del animal de un solo bocado como esos dos.

Aunque es cierto que podría obtener esa información de mi pantalla AR.

Liza y Keriul no eran la única pareja que estaba en su propio pequeño mundo.

“¡Ya me lo imaginaba! Así que las mayores amenazas a las que hay que prestar atención son la neutralización de magia y el modo de alboroto al que entran cuando su HP es bajo.”

El hombre sombra, el Sr. Seoru, le estaba enseñando a Arisa sobre algunos de los peligros de luchar contra los Amos de Piso.

Aparentemente, había estado en el grupo del elfo sabio, el Sr. Trazayuya, en la Ciudad Laberinto como explorador.

Lo invité cuando escuché que él también tenía experiencia en derrotar a un Amo de Piso.

“Señorita Arisa, es usted muy fuerte. Pero un Amo de Piso es único en su clase. Incluso nuestro amo, que una vez ahuyentó a un dragón, falló dos de las tres veces que desafió a uno. Si determina que no puede ganar, es mejor retirarse con la mayor prisa y esperar la próxima oportunidad.”

“¡Gracias, señor Seoru! No se preocupe… ¡estaremos bien! Tenemos más trucos bajo la manga de los que pueda imaginar. ¡Mañana arrasaremos! ¡Y después, haremos un banquete como nunca lo ha visto para celebrar!”

De alguna manera, las advertencias del Sr. Seoru parecían haber avivado aún más las llamas de la emoción de Arisa.

Eso está muy bien, pero soy yo quien va a tener que hacer ese festín, ¿verdad?

 Deseaba que no me subiera el listón de esa manera. Honestamente, sentí que mi repertorio comenzaba a agotarse un poco.

Sabía mucha cocina de hadas que el grupo de investigación culinaria de elfos me había enseñado, pero estos elfos probablemente ya estaban hartos de eso.

Últimamente he estado haciendo principalmente platos occidentales y japoneses, así que tal vez debería centrarme en la comida china o en platos de mi propia creación.

“¿Están todas listas?”

A la mañana siguiente, llamé a mi grupo blindado.

La vanguardia estaba ataviada con la brillante armadura de aleación de oricalco que se había convertido en su estándar reciente, y la retaguardia resplandecía de manera similar con su armadura de vestir de fibra de oricalco que aumentaba la magia.

También hice un traje de sirvienta de batalla de fibra de oricalco para Lulu, pero el dorado brillante no se sentía bien para una sirvienta, así que lo cubrí con una capa lisa de negro en el exterior. El traje que llevaba debajo estaba hecho con piel plateada.

Como Lulu también estaba a cargo de proteger a Arisa y Mia en caso de emergencias, estaba casi tan fuertemente blindada como Nana, a pesar de estar en la retaguardia.

“¡S-Sí, Amo!” Liza respondió con voz rígida.

Todas parecían nerviosas por la próxima batalla contra el Amo de Piso, pero la líder de combate Liza y la comandante Arisa parecían particularmente alarmadas debido a sus responsabilidades adicionales.

“¡Sí, Amo! ¡Tenemos muchos almuerzos y refrigerios, sir!”

“¿También bananassssss…?”

“¡Por supuesto sir! ¡Las bananas pertenecen a su propia categoría, sir!” Pochi y Tama posaron con bananas en cada mano.

Mi mirada se volvió hacia Arisa inmediatamente, pero estaba tan nerviosa que ni siquiera notó la mirada acusadora.

“La inspección del equipo también está completa. La caja de almuerzo que Lulu me preparó contiene un diseño de pollito, informo.”

Completamente armada, Nana sacó la bolsa que contenía su caja bento de su Paquete de Hadas y me la mostró.

Ustedes tres realmente no deberían priorizar sus almuerzos sobre su armadura.

 “Amo, quiero abrir la puerta a la Sala de Pruebas.”

“Está bien. Entonces te ayudaré a ‘verla’.”

Proyecté en el aire una imagen de la Sala de Pruebas, el sitio donde pelearíamos contra el Amo de Piso.

Mirándolo para confirmar su destino, Arisa usó Puerta Portal para crear una puerta que conducía allí.

Los hechizos de Magia Espacial como Teleportación y Puerta Portal requerían pizarras de sello, pero a cambio, el usuario tenía que conocer muy bien el destino o poder confirmarlo visualmente.

“Muy bien, entonces vayamos a la Sala de Pruebas.” Pasamos juntos por la puerta de la Sala de Pruebas.

Las chicas ya habían despejado la habitación de monstruos el día anterior. Gracias a ello, ahora no había puntos rojos en mi radar.

Esperé a que el grupo terminara de prepararse con hechizos mágicos de apoyo.

“¿Entonces qué quieres hacer? ¿Debería ser yo quien llame al Amo de Piso?”

“¡Está bien! ¡Lo haré!”

Era el papel más peligroso, así que me ofrecí, pero los ojos de Arisa brillaron cuando insistió en hacerlo ella misma.

“Ayer el Señor Seoru dijo que no puedes moverte durante unos diez segundos después de la invocación.”

“Ya veo. Sin embargo, asegúrate de activar algo de magia defensiva primero, ¿de acuerdo? Y no bajes la guardia.”

“Sí, lo sé. Te preocupas demasiado.”

Recargué la magia de Arisa con Transferencia de Maná mientras le di una advertencia.

El grupo se puso en formación de batalla alrededor de los bordes del centro vacío de la habitación. El tipo de magia que usaban dependería del tipo de Amo de Piso que apareciera, por lo que Mia estaba en una posición en la que Nana y Lulu podrían protegerla.

También instalamos áreas de campamento, trincheras y pozos el día anterior.

“¡Okey! ¿Todas en posición? ¡Empecemos!”

Usé mi Magia de Viento para transmitir la voz de Arisa a todas, ya que de otra manera resonaría en toda la gran habitación.

Arisa colocó el núcleo que causaría la invocación en el frasco misteriosamente estampado en el altar.

“¡Soy alguien que desafiaría lo imposible! Por muy mortal que sea, desafío a dioses y demonios por igual, ¡incluso a la estructura misma del mundo!”

En respuesta al encantamiento melodramático de Arisa, la luz roja inundó la habitación y formó un patrón de invocación similar a un círculo.

“¡He venido a desafiar a un Amo de Piso aquí y ahora, como prueba de esa determinación!” El círculo de invocación comenzó a parpadear lentamente, casi como un pulso.

“¡Pronto vendré a ti con tres pruebas en la mano!”

Un retumbar bajo comenzó al mismo tiempo que el pulso de la luz, así como un ruido agudo como un zumbido en mis oídos.

“¡Soy el retador! ¡Oh prueba, compadece ante mí ahora!”

El círculo de invocación se iluminó tan intensamente que era casi doloroso mirarlo. Y luego…

Una figura humanoide se elevó del círculo de invocación.