Tatoeba Last Dungeon Mae no Mura no Shōnen ga Joban no Machi de Kurasu Yō na Monogatari (NL)

Volumen 3

Capítulo 2: Arrepentimiento Instantáneo: Suponga Que Pasa El Rato En El Trabajo En Su Día Libre Y Se Ve Obligado A Trabajar Gratis

Parte 4

Pero el padre de Selen no pudo ocultar su sorpresa. Un momento antes, su hija apenas se había permitido sentarse, y ahora se lanzaba a los brazos del hombre. Como resultado, no había rastro de su compostura anterior.

“… Mírala como vuela…”

Ciertamente lo confundió ver a este chico de aspecto serio en lugar del hombre más guapo de las fotos, pero estaba mucho más preocupado por la repentina propensión de su hija a los movimientos extraños.

“Em… ¿tu comida?” preguntó un camarero, sin saber cuándo empezar a servir.

Parecía que aquí había algo completamente diferente en el menú.

“¡¿A quién le importa la comida?! ¡Deja a los jóvenes!”

Eso no era algo que se suponía que los jóvenes debían decir ellos mismos.

No queriendo que se descubriese el cambio de hijo, Threonine dirigió la conversación hacia adelante con una sonrisa tensa.

“Bueno, vamos a discutir… cosas…”, comenzó.

Puso las manos sobre la mesa como un policía en un interrogatorio, miró al padre de Selen con una mirada penetrante y se inclinó hacia él. Tenía que atrapar la cola del cultivador de treant, y esta era su única oportunidad.

El padre de Selen percibió la intensidad y se ajustó el cuello.

“Sí, yo también tengo asuntos que discutir”.

Una vibra siniestra resonó entre ellos.

Mientras tanto, Selen se estaba comportando de una manera absolutamente absurda, y antes de que Lloyd pudiera llegar a un acuerdo con la situación, lo arrastró a la habitación lateral.

Dentro de un armario de ropa blanca de hotel, rodeado de sábanas blancas y el aroma de suavizante de telas, la criatura salvaje jadeaba ruidosamente, Lloyd en sus garras. La desesperación de Selen un momento antes había sido completamente olvidada.

“¡Dios ha respondido a mis oraciones! ¡Nunca pensé que estaban organizando una reunión para discutir el matrimonio entre nosotros!”

No había sido una gran reunión. Solo un rápido agarre y luego un arrastre de esta manera. Más bien un secuestro matrimonial.

“¡Pero no voy a desperdiciar este regalo de Dios! ¡Hora de cenar, Sir Lloyd!”

Lloyd todavía estaba totalmente perdido en cuanto a lo que Selen estaba haciendo aquí, pero se las arregló para liberarse de sus garras y preguntar:

“¿Por qué estás aquí, Selen?”

A lo que su respuesta fue obvia: “¡Por amor!”

… Aparentemente, ella no estaba en condiciones de tener una conversación real.

“¡Bueno, estamos en un hotel! ¡Hagamos lo que hace la gente en los hoteles!”

Selen actuaba por puro deseo sin pensar en por qué había aparecido Lloyd. Rápidamente se quitó el cinturón de la cintura y comenzó a levantar el dobladillo de su vestido.

Un instante después, el brazo de mithril de Riho agarró un puñado de la cara de Selen. Riho vestía una blusa blanca, como  un miembro del personal de limpieza.

“¿Qué demonios estás haciendo? ¡Este no es ese tipo de hotel! ¡Este es un establecimiento familiar!”

El cráneo de Selen crujió, pero en su detrimento, se había quitado el cinturón.

“Owww… ¿de dónde vienes, Riho? ¿Qué estás haciendo aquí?”

“¡Los caballos me trajeron, maldita sea!”

“¿Y eso que significa? ¿Por qué estás vestida de sirvienta?”

“¡Eso es lo que quiero saber! ¡¿Por qué me obligan a trabajar para este hotel?!”

Lloyd intentó intervenir.

“Um, ¿podemos evaluar la situación? Estoy tan perdido.”

Comenzaron las explicaciones. Por favor espere.

“Ya veo… ¿Entonces Allan ha sido víctima de estos incidentes? Pobre Allan”.

Dijo la chica que había estado lista para matarlo hace un minuto.

“Me gustaría detener lo que sea que esté causando esto”, dijo Lloyd.

“Tanto para Allan como para evitar que más clientes sean víctimas”.

“Entonces tengo una idea excelente”.

“¿Tú la tienes?”

Selen sonrió. Pero no había luz en sus ojos.

“Sir Lloyd y yo estamos actualmente en medio de una reunión matrimonial. Extendamos eso a una fecha e investiguemos las atracciones turísticas locales, buscando al culpable”.

“Tus ‘ideas’ siempre parecen ser formas de cambiar la situación en tu beneficio…”

Riho había dado en el clavo, pero Selen fingió no darse cuenta.

“Si acaba de ocurrir un incidente, el culpable no puede haber ido muy lejos… Tenemos que registrar el área. Riho, te haces pasar por un miembro del personal del hotel y revisas el interior del edificio. Nos ocuparemos del exterior. De esa manera, no quedará piedra sin remover”.

“¡Incluso encontraste una excusa para sacarme de tu camino!” El grito de Riho resonó en el armario de la ropa blanca.

Pero Lloyd claramente pensó que era una excelente idea.

“Creo que podría funcionar: una pareja puede moverse sin llamar la atención”.

“¡¿De verdad?!”

En este punto, Coba asomó la cabeza por la puerta para ver de qué se trataban todos los gritos.

“¿Ahora qué?” preguntó.

“¿Más problemas? ¿Hmm? Lloyd… ¿con esmoquin? ¿Y los invitados de la suite? ¿Qué está pasando?”

Los tres formaban un grupo extraño si no sabías que estaban en la misma clase. Coba parecía convenientemente desconcertado.

“Oh, la cosa es…” Lloyd comenzó a presentarlos y explicó la situación de la propuesta de poder.

Una vez informado, Coba se dio una palmada en la cabeza calva.

“¡Buen señor!” gritó.

“¿Así que el invitado de la suite, el chico que se derrumbó y el posible cónyuge son todos amigos suyos?”

Sin embargo, su sorpresa pronto se desvaneció y frunció el ceño.

“Hmm… pero… ¿un suplente para una reunión para discutir un compromiso?”

Coba había asumido que Threonine se iría de la ciudad; no tenía ni idea de por qué el señor estaría tan desesperado por asistir a la reunión que traería un timbre. Por supuesto, esto se debió en gran parte a que Coba malinterpretó por completo las motivaciones de Threonine.

Riho tomó esto como su oportunidad para quejarse.

“No tiene sentido, ¿verdad? ¿Por qué el personal del hotel se hace pasar por su hijo? Espera… se supone que debo quedarme aquí, así que tenerme trabajando para ti tiene aún menos sentido”.

“Dejemos eso a un lado por ahora. Threonine… ¿por qué demonios…?”

“Y este tipo es el que está a cargo”.

Aparentemente, los problemas de Riho palidecieron en comparación con el enigma de Threonine. Ella todavía no estaba contenta de verse obligada a trabajar aquí, pero claramente no iba a ninguna parte discutiendo el punto.

“Así que Riho se hará pasar por personal del hotel, y nosotros nos haremos pasar por pareja en una cita, investigando… ¡El culpable aún puede estar cerca! Como miembro del personal, no toleraré más daños a la reputación del hotel y, como soldado de Azami, toda esta situación es completamente inaceptable”.

“Sí, vamos a tener una cita… Espera, no, como soldado, debo tomar medidas”.

Selen parecía tan motivada como Lloyd, por razones completamente diferentes.

“Lloyd”, dijo el viejo veterano, con los ojos llenos de lágrimas.

“Ustedes tres son el futuro de nuestro ejército. Como ex miembro de la guardia real, estoy muy orgulloso de verlos a todos tomar una posición por lo que es correcto”.

“Sí, yo y la tonta acosadora no estamos haciendo eso…”, protestó Riho. Pero Coba seguía sin escuchar.

“Hmm, mientras sus intenciones estén envueltas en misterio, es mejor mantener el engaño. ¡Lloyd, haz bien tu parte y ten cuidado!”

“¿Intenciones? ¿De quién son las intenciones? ¿Las intenciones del propietario de un hotel que obliga a sus huéspedes a trabajar para él mientras el empleado real tienen una cita?”

Coba pasó junto al último grito desesperado de Riho, mientras Selen la miraba con una sonrisa de suficiencia.

“¡Oh, es casi como si te opones a esta cita y compromiso en ciernes, Riho!

¿Estás celosa?”

La reacción de Riho no podría haber sido más transparente.

“¡N-No seas ridículo! No estoy… no estoy celosa. Estoy…”

Coba estaba ocupado asintiendo para sí mismo, ajeno a la conversación.

“¡Tengo fe absoluta en Lloyd! Cualquier acción que tome será integral para resolver todo esto. ¡Tienes mi permiso para actuar como mejor te parezca!

¡Ve, disfruta tu cita! ¡Y reporta todo lo que suceda después!”

“Escuchaste al hombre. El dueño del hotel ha tomado una decisión acertada”, dijo Selen.

“Hngg…”

Si el propietario lo aprobaba, su nuevo empleado Riho difícilmente podría discutir si ella tenía la intención de trabajar aquí o no.

“Lo siento mucho, pero… Riho, ¿verdad? Hay algo en lo que me vendría bien tu ayuda. ¿Puedes venir a los establos?”

“¿Los establos?”

“Sí, por… razones, la persona a cargo no está disponible… así que nadie ha barrido el lugar”.

Lo único que sacas de un establo es caca de caballo. Riho parecía adecuadamente horrorizado. Selen se tapó la boca con las manos, sonriendo victoriosa.

“¡Snerk! Los caballos te llevaron hasta aquí… ¡y ahora tienes que investigarlos! Asegúrate de ser minucioso”.

“¡Asegúrate de estar ‘investigando’ también! ¿Entendido? ¡Estás investigando!”

Golpeando ese punto por última vez, Riho se dirigió hacia los establos.

…… Pobre, pobrecita.

Los establos del hotel. Se alinearon varios carros de reparto y los caballos tenían la nariz hundida en bolsas de alimento. Los establos estaban limpios cuando los había visto antes, pero ahora había excrementos esparcidos por todas partes.

“El mozo de cuadra no está cerca… así que el lugar necesita una revisión adecuada”.

“…Sí, puedo ver eso.”

“¿No eres fanática de los caballos?”

“Los amé esta mañana”.

Coba no entendió lo que quería decir, pero le dio las gracias y volvió a entrar.

Riho suspiró y tomó una escoba. Mientras limpiaba, trató de pensar en su situación actual.

“Gané en las carreras, vine para quedarme en una suite de hotel de lujo y ahora estoy barriendo estiércol de caballo. ¡¿Cómo?! ¡Argh!”

Después de descargar su rabia en los contenedores de basura, un trozo de estiércol rebotó hacia ella y apenas logró esquivarlo.

Esto mató el poco entusiasmo que le quedaba. Ella bajó la cabeza.

“Esto es karma… nunca debí haber considerado dejar que Lloyd me masajeara. Esa no era yo… ”

Lamentando su momento de tentación, Riho se dedicó a limpiar, como si fuera el castigo que se merecía. Había hecho muchas cosas en su época como mercenaria y, naturalmente, cuidar de los caballos era una de ellas. Se dedicó a la tarea que tenía delante.

Una vez que se acabó el estiércol, cambió las bolsas de alimento de los caballos y les dio agua fresca. Inicialmente habían sido un poco cautelosos con su brazo de mithril, pero ver su trabajo pareció calmarlos.

“Están todos relajados ahora, ¿eh? Hay muchos inteligentes aquí. Y formas tan hermosas… Si fueras caballos de carreras, definitivamente apostaría por ti”.

Estaba hablando con el caballo de color beige que estaba arreglando. Parecía estar disfrutando de la experiencia y cerró los ojos.

“No te duermas conmigo aquí… ¡Uy, no, no hagas eso, ha-ha-ha!”

El caballo había vuelto la cabeza, frotando su mejilla contra ella. Entonces sus orejas se movieron y miró hacia otro lado.

“¿Mm? ¿Qué?” Riho siguió su mirada y escuchó voces.

“Sí, ese invitado es siempre…”

“Ew, qué horrible.”

Parecía un par del personal de limpieza del hotel quejándose por la espalda. Una vista familiar.

Lo mismo sucede en cualquier trabajo… Las chicas pueden dar miedo.

¡Pero ella también era una chica! El tono de sus quejas solo empeoraba.

“Y esa chica nueva, Kikyou, siempre está flojeando”.

“¿Verdad, la pelirroja? Siempre husmeando. Muy sospechoso.”

¿Es culpa suya que yo esté cuidando los caballos? Recordaré eso.

¡Las chicas pueden dar tanto miedo!

Archivando otro rencor, Riho mantuvo un oído en la conversación de las criadas.

“¿Escuchaste por qué ese hombre canceló su reserva de suite?”

“¿No porque?”

“Aparentemente, simplemente no le gustó el nombre de la suite”.

“¿Qué? Eso es lo más ridículo que he oído en mi vida”.

Oh, por eso tenían una suite abierta los fines de semana festivos.

Riho recordó que el botones le había dicho el nombre de la suite, pero ella había estado demasiado distraída para escuchar.

“Pero eso es sospechoso, ¿verdad? ¿Exigir que cambiemos su habitación así?”

Creo que parecía una especie de comerciante. ¿Quizás un repartidor?

“Terminaron moviéndolo a 102. Definitivamente no está aquí para las vistas. ¿Por qué él está aquí?”

Habitación 102, ¿eh? Entendido.

Sin embargo, aún no habían terminado.

“No sé si son turistas o no, pero la pareja del 201 también es rara. No han hecho más que pedir servicio de habitaciones”.

“Y cuando lo mencioné, había un montón de platos vacíos apilados en su habitación. ¿Están alimentando algo? ”

“Por favor.”

Habitación 201 también…

Totalmente satisfechas con esta ronda de chismes, las criadas volvieron a entrar.

Riho los vio irse, luego murmuró para sí misma, cepillando al caballo.

“Dos pistas prometedoras, al menos. Un huésped con un motivo inventado para cancelar la reserva de su suite y un par que podría estar alimentando algo que se supone que no deben tener”.

El caballo relinchó como si estuviera de acuerdo con ella.

“Bien, será mejor que termine este trabajo, encuentre al culpable y obligue a Selen a terminar su encantadora cita, pronto”.

Esa acosadora tenía un tornillo suelto. La dejó con sus propios dispositivos, no había manera de saber dónde terminaría arrastrando a Lloyd. Riho centró su atención en limpiar el resto de los establos lo más rápido posible.