86 [Eighty Six]

Volumen 4: Bajo Presión

Capítulo 4: Triage

Parte 7

Y a pesar de esto, Shin, y los 86 en su conjunto, a veces olvidaban que el dolor y el miedo debían estar presentes por derecho, convirtiéndolos en seres que solo conocían la guerra.

Y eso hacía que Lena se sintiera terriblemente sola y asustada. Le hacía temer que se estuvieran volviendo igual a los fantasmas mecánicos con los que luchaban. Como si estuvieran perdiendo su humanidad y algún día no pudieran volver a ser como antes.

Eso… la asustaba.

—… Te lo ruego, vuelve por favor.

Esa oración escapó de sus labios antes de que ella se diera cuenta. Pero no llegaba hasta él. Como estaba ahora, Shin no podía percibir que la chica estuviera allí. Aun así.

— Por favor, vuelve a mí. Como sea necesario.

Un golpe inevitable cayó sobre él y su cuchilla derecha de alta frecuencia se partió en la base, incapaz de soportar la carga.

— ¡Tch…!

Ahora sus dos espadas estaban destrozadas, así como la armadura de sus patas delanteras, con sus cables de anclaje que no le respondían. Si otra cuchilla cayera sobre él, Shin no tendría forma de bloquearla. Aun así, ignoraba las innumerables advertencias que resonaban desde su sistema de propulsión y obligó a Undertaker a saltar. La pierna delantera derecha de Undertaker quedaba expuesta al corte y los esfuerzos de Shin por evadir terminaron en vano cuando la pierna fue cortada, con una lluvia de chispas emanando de ella como un chorro de sangre.

La mitad de su pierna segmentada se elevó por el aire, y el Undertaker perdió el equilibrio, cayendo al suelo patéticamente. Con su campo de visión volviéndose rojo y sesgado por la sangre, Shin vio como la sombra metálica de la Unidad de Alta Movilidad avanzaba para perseguirlo.

Fue entonces cuando escuchó la voz de alguien, como la vibración de una campana de plata en sus oídos.

Te lo ruego, vuelve por favor.

— Por favor, vuelve a mí.

Lena.

— ¿¡…?!

Le tomó un momento darse cuenta, pero cuando lo hizo, su garganta se quedó sin aliento.

¿Él acababa de… Lena… Y de la orden que se le había confiado…?

¿Él acababa de olvidarse por completo de ella…?

A pesar del impacto que acababa de experimentar, su cuerpo movió casi automáticamente su torreta de 88 mm en la dirección de la unidad de alta movilidad que se acercaba. En el momento exacto en que Shin apretó el gatillo, la unidad de alta movilidad canceló su movimiento y saltó fuera de la línea de fuego, lanzándose al aire para evitar la explosión.

Mientras lo hacía, Shin arrastró la pierna mutilada de Undertaker, retirándose. Como el oponente no podía atacarlo desde el aire, Shin se cubrió entre los escombros debajo del entrepiso. Como un insecto impotente, se escondió en el espacio entre el entrepiso y la escalera de caracol que se cruzaba con él. Y mientras dejaba a un lado sus dudas y aprensiones, dirigió su atención una vez más al enemigo. Ahora no era el momento para que cayera en viejos hábitos.

Después de todo, le habían dicho que regresara a toda costa.

Pero la situación era demasiado desfavorable en este momento. Había perdido todo su armamento además del principal. Su movilidad había sido reducida drásticamente. El Undertaker estaba dañado por completo y su torreta solo tenía tres cartuchos de munición.

… Si quiero tener alguna oportunidad de salir de aquí, tendré que confiar en el azar.

La batalla de Lena estaba en curso.

—¡Coronel! ¡Aquí están los resultados de la inspección del mapa! ¡Confirmándolos ahora mismo!

Ella estuvo a punto de decirle que lo dejara para más tarde, pero se detuvo. El escuadrón Phalanx probablemente había sido emboscado y destruido debido a una discrepancia en el mapa. No podían permitirse el lujo de quedar atrapados en el mismo peligro de nuevo.

—Envíalo a mi tercera ventana secundaria— ¿¡Qué!?

Una gran discrepancia que se podía detectar de inmediato resaltó en el mapa en rojo. De todos los lugares, el área directamente debajo del eje principal que conecta el tercer y cuarto nivel, el mismo lugar donde Shin se enfrentaba a la unidad de alta movilidad, tenía un espacio abierto que no se reflejaba en el mapa.

Los siete ejes que atravesaban el espacio subterráneo de la estación central de Charité se construyeron para canalizar la luz del sol hacia el piso inferior. Junto a los ejes que se cruzaban para formar una suave espiral, las partes superiores, inferiores y secciones inclinadas de sus interiores había paneles de espejos. La luz del sol se refractaría entre los espejos, opuestos a los de los ejes adyacentes, y al repetir eso, la luz se canalizaría hacia abajo a través de cada eje.

Este era el espacio destinado a instalar los paneles de espejo. Claramente, no era un panel grande, sino varios, suficientes para llenar el eje principal y su diámetro de veinte metros, así como su espacio en el piso. Este espacio estaba destinado a instalar a todos estos en diagonal. Probablemente era muy grande tanto en diámetro como por supuesto en altura. Incluso un Dinosauria podría atravesarlo, aunque con algunas dificultades. Y, por supuesto, dado que fue construido para permitir el paso del personal de mantenimiento, también podrían hacerlo las minas autopropulsadas.

— ¡…!

¿Ella debería enviar fuerzas allí? No. Era como ya le había dicho a Raiden. Ninguna de las unidades podía permitirse seguir dividiendo sus fuerzas. Y el área que conducía al espacio de los paneles todavía estaba al alcance de la Legión. Incluso si se apresuraran hasta allí, tomaría tiempo controlar el lugar…

Solo entonces su pensamiento errático se calmó de repente.

Pero si ese era el caso, ¿por qué la Legión mantenía ese eje intacto? Todas sus fuerzas estaban actualmente desplegadas alrededor del eje, y si la Legión lo derribara ahora, no solo atraparía a Shin, que todavía estaba luchando adentro, atrapado en el colapso; todas las fuerzas estacionadas a su alrededor podrían terminar enterradas bajo el sedimento.

Entonces, ¿por qué no lo hacían? ¿Por qué la lucha se prolongó tanto? El Almirante y el Weisel en el cuarto y quinto piso ya estaban enterrados bajo tierra y arena, y las únicas unidades de la Legión que todavía atacaban a las fuerzas de Lena eran las minas autopropulsadas expandibles y las viejas unidades de peso ligero, junto a los pesados que habían completado sus reparaciones y los Pastores producidos en masa que en su mayoría habían huido de la instalación.

La Legión nunca se vio obligada a vengarse, sin importar cuántas de sus consortes fueran destruidas. Una vez que sus pérdidas pasaban un cierto umbral, cesaba el combate y se retiraba. La retaguardia había completado su tarea de mantener oculta la información confidencial, y su tasa de bajas solo estaba aumentando, y aún más y más unidades de la Legión seguían atacando el eje.

¿¡Por qué…!?

Y pronto, Lena obtuvo la respuesta.

Es por Shin.

La Legión realizaba Cacerías de Cabezas para seguir operando más allá de las fechas de vencimiento designadas por sus procesadores centrales y para mejorar sus capacidades como armas. Buscaban asertivamente las cabezas de los recién muertos y los que aún vivían.

Y ahora que se habían abastecido de cerebros más que suficientes para reforzar sus tropas de base, si buscaran algo más, sería la cabeza de alguien de élite capaz de cambiar el rumbo de la batalla sin ayuda de nadie.

No sabía si la Legión era consciente de su capacidad para escuchar sus voces, pero sus fenomenales habilidades de combate habrían sido suficientes para hacer que lo buscaran. Y aunque esto podía haber sido una coincidencia, la nueva unidad de la Legión que habían producido era de Alta Movilidad. Shin, que se especializaba en el combate cuerpo a cuerpo al igual que eso, sería el componente perfecto para completarlo.

Si su conjetura era correcta…

— Teniente Segunda Oriya, Teniente segunda Abandonen temporalmente el punto 47 en la séptima ruta y el punto 23 en el cuarto piso.

— ¿¡Eh!?

— ¿Dice que abandon—? ¿¡Pero no estábamos defendiendo este lugar para que no se autodestruyeran y nos derribaran todo el lugar, Su Majestad!?

— Es poco probable que las minas autopropulsadas se autodestruyan en esas posiciones, así que apúrense.

Si su especulación era incorrecta, esos puntos por sí solos no causarían un derrumbe. Pasaron unos segundos después de sus reacias respuestas, y luego llegaron nuevos informes más sorprendidos. Las minas autopropulsadas en esas posiciones no se autodestruyeron en grupo. Ni siquiera estaban priorizando esas posiciones, sino que iban tras los Juggernauts.

— El objetivo de las fuerzas restantes de la Legión no es destruir el eje principal, sino entrar y destruir todas las fuerzas En ese caso, deberíamos usar esto en su contra. Fortalezcan las defensas alrededor de las entradas al eje principal, y que todas las fuerzas restantes monten una contraofensiva.

Echando un vistazo a un lado, vio a Frederica asintiendo levemente hacia ella. Ahora que Shin estaba concentrado en luchar contra la unidad de alta movilidad, tenían que depender de su capacidad para rastrear al enemigo, por muy limitado que fuera.

Las unidades de la Legión cazaban cabezas, pero solo cuando la situación lo permitía. En el momento en que la situación se volviera desfavorable para ellas, se atendrían a los instintos inquebrantables que se les había inculcado y pasaban a la ofensiva para destruir al enemigo a toda costa. Entonces, antes de que eso sucediera…

Tenemos que cambiar nuestro enfoque antes de que puedan reaccionar, ¡acaben con todas las fuerzas restantes de la Legión!

***

En el momento en que eso descendió al piso del eje principal en persecución del enemigo que se escondía en la sombra de la escalera, el sensor óptico del tipo de alta movilidad captó un destello de fuego. El enemigo esperó el momento en que aterrizaría y disparó un tiro verdaderamente perfecto. Tres disparos de ojivas antitanque altamente explosivas se dirigieron a tres puntos diferentes, cada uno destinado a destruir decisivamente su objetivo, y explotaron consecutivamente con una brecha de fracciones de segundo. Se convirtieron en tres líneas de fuego y un chorro de metal que atravesaba la oscuridad, moviéndose a una velocidad extremadamente alta que ni siquiera la unidad de alta movilidad podía seguir.

Sin embargo…

Este era un patrón que ya se había repetido varias veces en esta batalla. Tiempo suficiente para que la unidad de alta movilidad, un nuevo diseño de la Legión con capacidades de aprendizaje avanzadas, lo predijera. La unidad de alta movilidad rápidamente se hizo a un lado mientras aterrizaba, evadiendo el fuego enemigo que siguió un momento después con ese pequeño movimiento. El rápido rastro del chorro de metal pasó patéticamente por encima de la unidad de alta movilidad, con los fragmentos de las ojivas apenas rasgando a través de su armadura.

Irónicamente, el fuego y el humo negro resultantes solo sirvieron para ocultar su silueta del enemigo. Por eso lo había esquivado con un movimiento tan mínimo. Si hubiera saltado demasiado lejos, el enemigo habría visto inmediatamente que estaba ileso, pero debido a que lo había evadido para que las llamas lo ocultaran, el enemigo no tendría forma de saber que no estaba dañado.

El humo se expandió rápidamente para llenar el campo de batalla subterráneo. Atrapado por el viento generado por las instalaciones de aire acondicionado que aún permanecían activas en la estructura, se dispersaba en pequeños remolinos. Antes de que pudiera despejarse, la unidad de alta movilidad se dirigió a través de la suave cortina de humo negro, saltando hacia adelante.

No era una velocidad que el tiempo de reacción humano pudiera esperar igualar.

El sensor óptico rojo del objetivo se apuntó hacia la unidad de alta movilidad. Pero eso era todo lo que pudo hacer. Una cuchilla negra afilada se clavó en una armadura nacarada con forma de hueso.

***

Habiendo recibido la orden de contraatacar, los Juggernauts eran como perros de caza liberados de sus cadenas, desgarrando con precisión y sin piedad al enjambre de la Legión.

— Segundo Teniente Crow, haga que el segundo y tercer pelotón del escuadrón Thunderbolt avancen y eliminen a todos los enemigos en la posición.

— Entendido, coronel Milizé.

— Aquí ¡La posición es nuestra! ¿A dónde vamos ahora, Lena?

— Tenemos diez segundos más o Podemos ver la próxima unidad enemiga, así que no necesitamos direcciones.

— Teniente Primero Shuga, desvíese al punto 12 y ataque a la siguiente unidad enemiga por detr…

En ese momento, se desconectó un objetivo de resonancia sensorial. No era de ninguno de los escuadrones bajo su mando. Solo faltaba una persona.

— ¿Shin…?

***

La unidad de alta movilidad destruyó la parte inferior del fuselaje de la unidad. A juzgar por sus sensores, era la fuente del calor de la máquina: su paquete de energía. Deteniendo la vibración de las cuchillas en la cadena, la sacó cuando la máquina cayó pesadamente al suelo.

La unidad de alta movilidad se acercó al Reginleif, que yacía inmóvil, con el foco del sensor inmóvil, con pasos cautelosos. Sin cuerpos en movimiento. Sin reacciones eléctricas. La temperatura de su fuente de energía estaba cayendo. Había alcanzado una temperatura que aseguraba que no pudiera activarse de inmediato, pero seguía cayendo en picado.

<Confirmando el desarme de la unidad con indicativo Báleygr>

La unidad de alta movilidad no tenía sentido de personalidad, por lo cual no expresaba alegría por haber derrotado a su oponente. Todo lo que hizo fue informar claramente de su éxito al derribar a un enemigo hostil de gran valor en la Red Amplia de Área.

<Entendido. ¿Es posible la incautación de Báleygr?>

<Se presume posible>

Había evitado el bloqueo de la cabina del enemigo y, en cambio, había dañado su sistema de propulsión. El interior del cuerpo humano puede haber sido frágil, pero sus elementos vitales deberían seguir funcionando. La unidad de alta movilidad era capaz de tener en cuenta tales peculiaridades.

<Comenzando recuperación.>

Giró su sensor óptico a una protuberancia que probablemente era la palanca de apertura de la cabina y bajó la punta de la cuchilla de su cadena para tirar de ella… Pero no se abrió. El mecanismo de bloqueo estaba funcionando. Al activar las vibraciones de las cuchillas de la cadena, cortó la cerradura, lo que obligó a que a la cubierta se abriera.

***

Mirando hacia abajo, vio que la cubierta del Undertaker se abrió después de haber sido cortada.

Te tengo.

Yaciendo escondido bajo los escombros, Shin alineó la mira de su rifle de asalto con la armadura trasera de la unidad de Alta Movilidad mientras miraba dentro de la cabina. Con la excepción de un Ameise, con sus capacidades sensoriales especializadas, los sensores del resto de unidades de la Legión eran débiles. Apostando por ese hecho, Shin había escapado de la cabina al amparo de la explosión y el humo del proyectil de alto explosivo, cubriéndose entre los escombros del entrepiso. La unidad de alta movilidad no tenía ninguna parte que pareciera una unidad compleja de sensor. Era una apuesta a favor de Shin.

A los pilotos de los Field-dress se les proporcionaba un rifle de 7,62 mm para la autodefensa en caso de que sus unidades se perdieran. No tenía mira láser, solo dos miras primitivas: una sobre el cañón y otra sobre el cuerpo del arma. Y era precisamente por esta razón que el sistema de control de fuego de la Legión, que normalmente detectaba y alertaba en presencia de una mira láser, no podía detectar este rifle de asalto. El selector estaba en modo totalmente automático y la primera ronda ya estaba en su recámara.

Shin apretó el gatillo.