Arifureta Shokugyou de Sekai Saikyou (NL)

Volumen 11

Bonus 3: El Ejército Demoníaco de Myu (Prólogo)

Había pasado medio día desde que Hajime fue a su taller y activó el Cristal de Hora, lo que significaba que habían pasado unos cinco días para él. Actualmente estaba tomando un descanso y almorzando con Myu y Remia.

“¡Y por eso hay un montón de gente más que quiere casarse con mamá ahora!”

Myu dijo emocionada, con migajas de comida saliendo de su boca. Estaba contando a Hajime lo que había pasado en Erisen después de que se fuera. Escuchar sus historias era el mejor descanso que podía pedir. Remia parecía menos contenta con las historias de Myu, ya que en su mayoría implicaban revelar sus embarazosos secretos.

“U-Umm, ¿Myu? ¿Te importaría contar historias sobre alguien que no sea yo?”

“Ahora que lo pienso, había un montón de tipos coqueteando contigo mientras estábamos por aquí, también. Probablemente hay incluso más que pensaron que podrían tener una oportunidad después de que me fui. Lo siento, supongo que mi partida te causó muchos problemas, ¿no?”

“O-oh no, para nada. De hecho…”

“¡Eso no es verdad! ¡Había toneladas de tipos que querían casarse con mamá antes también! En aquel entonces, le costaba mucho decir que no, pero ahora sólo dice: “Lo siento, pero estoy esperando que mi marido regrese a mí, ufufu, y todos se rendirán”.

“Myuuuuuuuuuuuuuuuuuuu, ¿no acabo de decir que dejes de contar historias sobre mí?”

Remia puso una mano sobre la boca de Myu, y la obligó a callarse.

“No tienes que ocultarme estas cosas, ¿sabes? En todo caso, me alegra que uses mi nombre para hacerte la vida más fácil.”

“Lo-lo siento. Si no hubiera ido tan lejos, los hombres del pueblo me habrían forzado a una reunión de matrimonio en grupo…”

“¿Una reunión de matrimonio grupal? ¿Quieres decir que un montón de ellos quieren casarse contigo a la vez?”

“Para ser precisos, hay una veintena de ellos. Aparentemente, solía haber 100, pero tuvieron una especie de torneo y redujeron los números a 20. No quería verme acorralada en algo así, así que terminé diciendo que te estaba esperando. Lo siento mucho”.

Hajime pudo ver por qué Remia había querido una razón concreta para rechazarlos a todos. Al mismo tiempo, se sorprendió de lo popular que era Remia en su pueblo.

Sonrojándose un poco, Remia quitó su mano de la boca de Myu y dijo, “Myu, ¿por qué no cuentas algunas historias sobre tus amigos?”

Claramente intentaba cambiar de tema, pero Myu felizmente mordió el anzuelo.

“Hey, Papi. ¿Sabías que hice un nuevo amigo?”

“¿Oh? Pensaba que todos en Erisen ya eran tus amigos.”

“¡No son de Erisen! ¡Conocí a Seaman! ¡Dijo que también es tu amigo, papá!”

“¿¡Quieres decir Sea-san!? Supongo que no debería sorprenderme, ya que él vive por ahí.”

En un extraño giro del destino, parecía que Myu se había hecho amiga del mismo pez con cara humana que Hajime había conocido en Fuhren, y luego otra vez en las Ruinas Hundidas de Melusine. Los dos eran amigos jurados que se llamaban el uno al otro por los apodos de Sea-san y Young Haj.

“Dijo que su esposa lo regañó y le dijo que fuera a jugar con sus hijos”, Remia mencionó casualmente.

“¿En serio?”

“Personalmente, preferiría que se fuera a otro lugar, ya que le enseña a Myu un montón de cosas extrañas.”

Remia tomó su mejilla con una mano y sacudió su cabeza. Hajime pensó que el consejo de Sea-san sería bueno para una chica en crecimiento como Myu, pero Remia parecía creer lo contrario.

“¡Papá, Sea me dijo que un hombre siempre debe elegir una esposa mayor que él, pero no una que sea dom-i-naan-te! ¡Él realmente sabe mucho!”

“¿¡Qué demonios le está enseñando a los niños pequeños!?”

“¡No te preocupes, papá! ¡Mamá es una mujer mayor, pero no es dom-i-naan-te en absoluto! ¿verdad, mami?”

“Oh vaya. Por supuesto que no lo soy, Myu. Pero te dije que te olvidaras de eso, ¿no es así?”

La sonrisa de Remia era aterradora. Myu miró hacia abajo disculpándose y Hajime pensó ociosamente,

Honestamente la mayoría de los chicos probablemente terminarían siendo golpeados por…

“Hajime-san, ¿hay algo en tu mente?” Remia preguntó dulcemente. Su sexto sentido era asombroso.

“Eh… no, nada”, tartamudeó Hajime, desviando la mirada. Terminó mirando a Myu, y ambos compartieron un guiño de comprensión.

“Ara, ¿me están excluyendo ahora? Eso no es muy agradable.”

“Myu, ¿tienes alguna otra historia? ¡Me gustaría mucho escucharla!”

“¡Sí, tengo montones y montones!”

Padre e hija estaban en perfecta sincronía. Evitaron deliberadamente encontrarse con la mirada aguda de Remia mientras Myu continuaba hablando de sus amigos.

“¡Umm, yo también conocí a D-kun!”

“¿D-kun? Espera, ¿esta persona es un chico? Preguntó Hajime, temblando todo el tiempo.

¿¡Los chicos ya están acosando a mi preciosa hija!? ¡No voy a dejar que un cualquiera sea el novio de Myu!

Finalmente se giró hacia Remia, pero ella sonrió torpemente y sacudió la cabeza.

“Me temo que tampoco sé quién es este D-kun. Nunca los he visto. La descripción de Myu es difícil de entender, y según ella, tienen miedo de todos los que no son ella.”

“Eso es muy sospechoso. Hey, Myu, ¿quién es este D-kun?”

“Mmm, ¡él es blandito!”

“¿Blandito?”

“¡Oh, y cuando le das de comer, hace ‘brrr’ y se hace grande!”

“¡Eso no suena como una forma de vida normal!”

“¡Al principio era tan grande como mi mano, pero en diez días se hizo tan grande como yo!”

“¡Muy bien, ahora sólo suena peligroso!”

¿¡No le estás dando a tu hija demasiada libertad!? pensó Hajime, girando de nuevo hacia Remia.

“Al principio también pensé que podría ser peligroso, pero hablé con Seaman-san hace un tiempo y me dijo que aunque este D-kun es de hecho un monstruo, se ha encariñado mucho con Myu. Incluso actúa como su guardaespaldas cuando sale a nadar.”

Hajime trató de sugerir suavemente que buscara otros amigos, pero eso causó que Myu inmediatamente se pusiera a llorar y gritara, “¡D-kun es un buen chico!”, así que se rindió. Parecía que Myu era capaz de comunicarse con D-kun también, lo que significaba que probablemente no había ningún peligro.

“La verdad es que, cuando la apóstol vino a secuestrarnos, vi que intentaba proteger a Myu. El mar se puso tormentoso de repente y disparó un tentáculo translúcido hacia la apóstol.”

“¿En serio? Espera, aguarda. El mar se puso tormentoso, su tentáculo era translúcido, y Myu lo llama D-kun?”

La expresión de Hajime se hizo añicos mientras pensaba en qué más compartía todas esas características y murmuró, “No puede ser… ¿M-Myu? ¿Tiene D-kun un nombre propio?”

“¿Hm? ¡Sip! ¡Dice que es Devorador!”

“¡Oh my goooood!” Hajime gritó en inglés, cubriéndose la cara con las manos y mirando al techo.

Devorador era el nombre del antiguo monstruo que había atacado a Hajime y a los otros después de que terminaran de abrirse camino a través de las Ruinas Hundidas de Melusine. Hajime pensó que lo había quemado hasta las cenizas, pero aparentemente, un fragmento del monstruo había sobrevivido. Además, había sido traumatizado por Hajime y ahora tenía miedo de la gente.

¿Cómo es que todos los amigos de Myu terminan siendo tan raros? ¿Primero mis gólems, luego Sea-san, y ahora el maldito Devorador de todas las cosas? Ahora que lo pienso, cuando Myu escapó por primera vez a las alcantarillas, de alguna manera terminó justo debajo de mí y de Shea… Tal vez tenga un don para atraer seres raros hacia ella.

“Supongo que eso significa que no fue una coincidencia que termináramos encontrándola. Su misterioso poder nos atrajo”.

Aún sonriendo incómodamente, Remia dijo en un susurro conspirativo, “Ella ha sido así desde que tengo memoria. No es sólo la gente, ella atrajo a las criaturas marinas incluso cuando era bebé. Ella tiene más que unos pocos amigos que nunca he visto, también…”

“Ya veo…”

Hajime y Remia miraron a Myu, que ladeó la cabeza y les miró fijamente.

“¡Bueno, supongo que es bueno que nuestra hija sea especial!”

“¡Sí, en efecto! ¡Mi hija es muy especial! ¡Ufufu!”

Al final, ambos decidieron que no importaba realmente cuál era el rasgo especial de Myu mientras no le hiciera daño.

“¡Yay, mami y papi se están acercando!”

De hecho, un nuevo vínculo se había forjado entre los dos ese día. Ese vínculo no era exactamente romántico, pero se veían como una familia. Las excentricidades de Myu los habían acercado más como padres. Aunque sólo fuera eso, estaban decididos a compartir las luchas únicas de criar a una chica como Myu.

“Cuento contigo de ahora en adelante, Remia.”

“Igualmente, Hajime-san. Necesito que me cubras la espalda.”

Por supuesto, sonaban más como guerreros intercambiando juramentos en el campo de batalla que como padres, pero a pesar de eso, Myu estaba feliz de ver que se llevaban bien.