Danmachi: Sword Oratoria (NL)

Volumen 4

Capítulo 1: Y El Chico…….

Parte 4

 

 

—¡Sabes, tú teoría con el dinero era acertada, Finn!

Esto pasaba en la calle principal, con el sol brillando y el cielo despejado, donde una voz sin prisas — casi perezosa — anunciaba su opinión.

Publicidad G-AR



Era casi al mismo tiempo en que Riveria y compañía estaban teniendo su propia conversación en el salón de la mansión. Carruajes y semi-humanos bulliciosos resonaron sobre los adoquines, mientras que el Hobbit Finn miraba a la figura junto a él.

—¿Y eso por qué, Loki?

Caminando junto a él no era otro que la diosa con cabello color de jengibre y ojos de color bermellón, Loki.

La deidad en cuestión miró a su seguidor, con las manos atadas detrás de la cabeza.

—¡Cuando nos fuimos sobre todo con Gareth y Riveria! Tú mismo lo dijiste ¿No es así?

Publicidad M-M3

Ya habían pasado seis días desde que Aiz los había involucrado en ese incidente en el piso 24.

Loki había estado discutiendo junto con los tres líderes de la facción en la oficina de su hogar, y fue entonces que Finn lo había dicho. Aún no sabían nada de Levis, y aún estaban en la oscuridad con respecto a esa nueva especie de monstruo y sus extrañas y coloridas piedras mágicas.

—Simplemente no tenemos el conocimiento para calmar a muchos monstruos. Hacerlo—

—No es más que una fantasía, fue cómo Finn finalmente había completado su oración en un intento de enmascarar sus verdaderos sentimientos.

—Pero en realidad querías terminar esa frase así, ¿no?; Loki lo trajo de nuevo, negándose a dejar que los perros durmientes mientan. Y luego, en una perfecta imitación de Finn, — Hacerlo nos pondría a la par con esos monstruos habitantes subterráneos.

Publicidad M-M2

Los hombros del Hobbit se desplomaron visiblemente. Loki había visto a través de él.

—Parece que incluso un dios como tú podría apuntar a dónde se dirigía eso.

— ¡Por supuesto!

Publicidad G-M2



Loki bromeó, una sonrisa juguetona adornaba sus labios, —Lo que queda de The Evils—no son personas ni monstruos. Son fantasmas. Por eso todo ese asunto del orbe de cristal se convirtió en algo grande que hacer. Finn, ¿Crees que está en el piso 59, ¿huh?

Durante su encuentro en el piso 24, Levis le había dicho a Aiz:

—Ve al piso 59, ahí deberías encontrar las respuestas a muchas de tus preguntas.

Y ahí es donde iban en su expedición. A las nuevas profundidades jamás pisadas antes –el piso 59.

¿Qué es lo que exactamente les esperaba allí?

—Dudo que alguien como yo podría incluso arriesgarme por una suposición; Respondió Finn, su respuesta fue vaga como una especie de réplica. Él le dio una pequeña lamida a su pulgar, con la intención de mantener sus pensamientos firmemente a sí mismo.

—Aunque diría que finalmente podría haber encontrado nuestra pelea.

Y no era sólo una sola entidad, tampoco. Era una sombra gigantesca formada por innumerables líneas que se solapaban erráticamente.

Una presencia enredada en las expectativas de muchos… o algo por el estilo, Finn creía en eso.

—No es tan cierto; Murmuró Loki en su aliento.

Finn la vio fuera de la esquina de su ojo, su pulgar comenzando a latir.

—Hey, Finn… ¿Te importa si hablo libremente?; Loki preguntó bruscamente.

— ¿Qué sucede?; Finn levanto la mirada para verla de pie a unos metros delante de él.

Ella se dio la vuelta.

En ese momento, el aire entre ellos cambió, casi como si ella se hubiera quitado algún tipo de máscara. Las esquinas de su boca se curvaron hacia arriba.

—Es por eso que no puedo dejar este mundo solo.

—…





—Los híbridos no son humanos o monstruos. Incluso para nosotros, todos los dioses, las cosas completamente inesperadas están sucediendo—como un “desconocido” que las deidades no pueden predecir.

Los ojos de Loki se ensancharon levemente, revelando un centelleo de placer. Era casi como si estuviera borracha con una especie de vino de alta calidad.

Ella podía sentir lo desconocido que había ansiado después de tanto tiempo. La sensación de premonición fue suficiente para hacer que su estómago se revolviera, incluso cuando el sol cálido brillaba en los tranquilos adoquines bajo sus pies. Y aun así eso no fue suficiente para detener la insaciable euforia que se construía en su vientre.

Loki dejo salir una risa de alegría pura, sin adulterar.

Finn respondió con una débil sonrisa propia del él, observando a su diosa en silencio.

—Por supuesto, estoy muy preocupada por ustedes, ¿Si? ¡Estoy en shock! ¡Asegúrense de volver vivos, oíste!; Volviendo de nuevo a su actitud indiferente habitual, Loki rodeó por detrás a Finn y le dio a sus hombros un pequeño apretón.

Ellos estaban atrayendo la atención ahora. Finn forzó una sonrisa un tanto sarcástica.

—No hay de qué preocuparse Loki. Soy un aventurero, después de todo; Él respondió en medio de las burlas. —Sé muy bien la sensación de desafiar a lo desconocido.

Loki se encontró con la mirada hacia arriba de Finn, haciendo una pausa antes de lanzarle una sonrisa.

De hecho, la diosa y el Hobbit compartieron una larga historia. En poco tiempo, ellos volvieron a caminar.

El camino que siguieron fue la calle principal noreste. Este limitaba el distrito industria, el pabellón número dos de la ciudad y el corazón de la industria de fabricación y producción de piedras mágicas, y estaba constantemente obstruido por trabajadores independientes de varios gremios y artesanos de las familias.

Siendo una zona tan centrada en la fabricación, la mayoría de los transeúntes eran obreros en atuendos de trabajo. Fornidos seres humanos de mediana edad cargando herramientas y materiales a este lugar o eso mientras que los semi-humanos estudiaban las órdenes de producción y se gritaban entre ellos. A lo largo del bullicio se hizo eco el estruendoso golpe de metal contra metal, interpuesto con las canciones de los enanos trabajando.

Era seguro decir que las mujeres y niños eran una visión extranjera en el mundo de un hombre tal como esto. Buscando decididamente fuera de lugar, el pequeño Finn y Loki seguían su camino desde la calle principal hasta el corazón del distrito.

Todavía charlando de brazos cruzados, los dos llegaron a un pequeño bungaló de un taller.

—Estamos aquí.

En frente del taller, el edificio en si con la necesidad desesperada de una buena limpieza de hollín, se encontraba una diosa con el cabello bermellón ardiente.

Ella dirigió su ojo izquierdo, de la misma tonalidad brillante que su cabello, hacia Loki y Finn. Su ojo derecho estaba escondido bajo un parche de ojo grande que cubría la mitad de su rostro.

—Buen día, Phai-Phai. ¿O debería decir “buenas tardes”?

La mujer delante de ellos no era otra que Hephaistos, una diosa mundialmente renombrada de la fragua y líder eterna de la familia Hephaistos.

‘’Phai-Phai’’, como Loki la llamó, levantó su mano en saludo.

Incluso con el impresionante parche de ojo negro, su divina belleza no dejó dudas sobre si era una diosa o no. Su conjunto de túnica blanca emparejada con pantalones y guantes negros daba un aire de masculinidad rústica, que, cuando se juntaba con su imponente rostro, sin duda la marcaba como el tipo de persona dispuesta a cuidar de los demás.

Hephaistos respondió a Loki con un saludo propio de ella, con el cabello rojo balanceándose un poco mientras sus labios formaron una débil sonrisa.

—Perdón por llamarte así, Loki.

— ¡No pienses eso! Nosotros somos los que arrastramos a tus chicos a lo largo de nuestra expedición para mantener nuestras armas todas bonitas y brillantes, después de todo.

La Familia Loki había buscado la ayuda de La familia Hephaistos en su próxima expedición.

Finn había llegado a Hephaistos (A través de Loki) para solicitar la provisión de un herrero de clase alta con la esperanza de evitar desgaste y el desgarro de sus armas durante su expedición.

Hephaistos había accedido, siempre y cuando sus seguidores se quedaran con el botin obtenido del calabozo. Así, se había forjado una alianza entre las dos familias.

—Su aceptación a nuestra propuesta significa mucho para nosotros, Lady Hephaistos.

— ¿Oh? Tal gratitud de un Hobbit de valor como usted es una distinción propia. No me trae más que honor ayudarte a ti y a tú familia en tu caminata por el calabozo; El ojo de Hephaistos se arrugo en respuesta a la profunda reverencia de Finn.

—Sus palabras son muy amables, Milady; Los ojos de Finn se cerraron ante el porte digno de la diosa.

—Es la primera vez que nos conocemos ¿Cierto?

—Sí. Aunque nos hemos saludado muchas veces en el pasado, está es la primera vez que hablamos cara a cara, creo; Dijo Finn.

—Continuemos con esta conversación a dentro, ¿Sí? Hephaistos sugirió esto antes de guiar a Loki y Finn hacia su taller. Los dos la siguieron hasta el edificio, rodeados por el estruendoso ruido del metal contra metal.

—Le hemos estado preguntando una y otra vez para tener una reunión antes de la expedición… Finalmente tuvimos que venir nosotros mismos. Ella realmente nunca sale de su taller, ¿Verdad?

Loki sólo se rio. — ¡Ella es igual a ti, Phai-Phai! Un verdadero artesano de corazón. Parece que la manzana no cae lejos del árbol después de todo, ¿Eh?

—Supongo que algunas cosas nunca cambian.

Publicidad G-M1



Hephaistos dejo salir un suspiro, que suscitó otra risa de Loki y una peculiaridad en los labios de Finn.

Inmediatamente después de entrar en la puerta, ellos fueron recibidos con un fuerte olor a hierro, que impregnaba el aire del taller y la herrería de tamaño considerable conectada a ella. Careciendo de suficientes lámparas de piedra mágica, el espacio estaba envuelto en una sombra tenue, con la principal fuente de luz proveniente de las brillantes llamas rojas del rugiente horno.

Ahora que habían entrado en el edificio, el ruido metálico, el sonido del metal sobre el metal que habían podido oír en el exterior les asediaba los tímpanos aún más. Fue allí, más adentro del taller, donde la vieron.

Ella estaba mirando lejos de ellos, rodeada de los lados por algunas de las herramientas más grandes que habían visto nunca y golpeando animadamente un lingote en su yunque con un martillo.

Brasa tras brasa del horno cercano chamuscó la piel de cobre de sus mejillas. El sudor se derramaba de su cara en arroyos, añadiendo aún más a su aura de caballerosidad. Mientras que sus rasgos disciplinados carecían del encanto femenino de una mujer, había un tipo diferente de belleza acerca de ella—feroz, como una hoguera ardiente: la personificación de un artesano.

Ella no hizo caso de Hephaistos y los otros, con los ojos pegados a su yunque mientras el martillo descendía con un golpe poderoso tras otro.

Finn y Loki se detuvieron a pocos pasos de la fragua. Hephaistos hizo gestos silenciosamente para que esperen, y ellos cumplieron con un guiño, simplemente vigilando al solitario herrero en el trabajo.

La coleta de la mujer se estremeció, y con un estruendo final del martillo, su mano se detuvo. Sin perder un segundo, ella levanto el cuerpo de la espada completa de su yunque con un par de pinzas.

Hubo un silbido, seguido por una columna de vapor. Una hoja afilada y pulida salió a la vista. Un novato mirando esto no podía tener manera de saber cuánto tiempo ella había gastado en el arma que ella hizo. En un instante la espada estaba completa.

Ella pasó un momento escudriñando la espada carmesí en la mano antes de finalmente dejar escapar un suspiro.

—Tsubaki; Hephaistos hizo señas a la mujer con el cabello largo y negro que fluía por la espalda.

Tsubaki se dio la vuelta.

—¿Oh?; Como si se diera cuenta ahora mismo, su ojo derecho se amplió con sorpresa.

Casi al instante, su rostro se rompió en una amplia sonrisa.

—¿Cuántas semanas han pasado, mi diosa? ¿Necesitas algo? ¡No, espera! Echa un vistazo a esta espada mágica que acabo de forjar. Estoy bastante conforme en como lo hice.

Tan vieja como la mirada de la mujer, casi pensarías que era una niña por la forma en que alegremente tendió su espada, toda sonriente.

—Estuve aquí hace dos días…; Dijo Hephaistos. Respondiendo a la interminable corriente de palabras de la mujer con un suspiro. —Necesitamos discutir tú próxima expedición con el equipo de Loki. Te lo dije, ¿Verdad?

—¡Oh!; Tsubaki gritó en lo que parecía ser un reconocimiento. Ella se acercó a ellos con una sonrisa — ¡Es cierto, es cierto!

—Me alegra verte de nuevo, Tsubaki.

—¡Bueno, si es Finn! ¡Minúsculo como siempre! Cuando estás encerrado en una tienda todo el día, empiezas a extrañar el calor de otras Ven y dame un abrazo, ¿Si?; Tsubaki exclamo antes de acercarse al Hobbit con los brazos extendidos.

—Me temo que voy a tener que declinar; Dijo Finn con una sonrisa irónica. —Tione iría por mi cabeza si se enterara.

La mujer dejo salir un bufido de la risa.

Tsubaki Collbrande era la líder de La familia Hephaistos.

No sólo comandaba el ejército de los altos herreros que conformaban la familia de Forge Work, ella misma fue la más experta en todo Orario.

Danmachi: Sword Oratoria Volumen 4 Capítulo 1 Parte 4 Novela Ligera

 

Ella era media enana, sus padres, un humano del lejano oriente y un enano del continente; ella se jactaba de un conjunto de rasgos elegantes que recuerda a sus orígenes orientales. De pie media 170 de alto, ella era bastante alta, con brazos y piernas largas, sin duda gracias a su sangre humana—una cualidad que al parecer le hizo la envidia de sus hermanos enanos de extremidades cortas.

Su desgaste del trabajo se jactaba el estilo del este de la patria de su madre, la parte de abajo consistía en un hakama rojo brillante y la parte de arriba en nada más que un paño blanqueado tirado firmemente alrededor de su amplio pecho. En cuanto por qué ella mantuvo su estómago de color cobre y hombros desnudos, a pesar del salto constante de las brasas, bueno, Finn había oído una vez explicar que la fragua daba un ‘’ ¡maldito calor!’’

Tenía un ojo rojo derecho y, sobre todo, un parche de ojo negro azabache — casi idéntico al de Hephaistos — la única diferencia es que cubría el ojo izquierdo de Tsubaki en lugar del derecho.

—Por lo que parece, ya hizo algo ridículo otra vez, ¿Verdad, Ciclope?

— ¡Sabes que no me gusta ese nombre, Loki! ¡Me hace sentir como un monstruo! Qué te parece, ¿Eh?; La cara Tsubaki se agrio cuando Loki se rio burlonamente de la espada recién acabada en sus manos.

“Ciclope” era el titulo dado a Tsubaki por los otros dioses.

Ser un herrero y un aventurero de nivel 5, con las habilidades de combate para probarlo, la hizo ver como una rareza y un demonio absoluto.

Las habilidades de combate sin igual de los artesanos casi excesivamente únicos (Tsubaki incluida) fue solo una de las muchas razones por las que otras facciones raramente atacaron a La Familia Hephaistos —eso y su establecimiento como una familia inestimable de herreros.


Loki hizo una sonrisa lasciva.

—Diré que te ves tan tetona como siempre. ¡Mira! ¡Prácticamente están cayendo fuera de esa cosa que haces llamar camisa!

—¿Los quieres? ¡Puedes tenerlos! Estos dos bultos de grasa no hacen nada más que interponerse en mi camino con la fragua. ¡No los necesito!

¡Guh-hah!; Loki casi se ahoga.

Ella no esperaba que su comentario obsceno fuera devuelto de una forma tan mordaz.

Tsubaki solo río, con los montículos gemelos en cuestión rebotando un poco rígidamente dentro de su tela.

—¿Procedemos al tema en cuestión?

—Claro. El tiempo es esencial, después de todo.

Ignorando a Loki en su difícil situación, Finn y Hephaistos trataron de dirigir la conversación de nuevo al tema principal.

Publicidad M-M4

—¡Si, señora!; Tsubaki asintió con la cabeza entre bocados, comiendo un trozo de carne cubierto de hollín que había estado puesto en su escritorio desde quien sabe cuánto tiempo alrededor de la fragua.

Y con eso, una vez que Loki se había recuperado, las deidades y los capitanes de ambas familias, envueltas en la penumbra de ese taller tenue, fueron directo al punto con respecto a su próxima expedición.

—Mira, se los voy a preguntar directamente— ¿Cuántos herreros de clase alta nos das?

—Hmm… mirando a los herreros que no sólo son artesanos experimentados, sino aventureros capaces, también… Yo diría que unos veinte, con Tsubaki incluida. Cada uno de ellos es al menos de nivel tres, por lo que puedes tener fe en sus habilidades; Respondió Hephaistos.

No se sabe lo que podría suceder al entrar en el calabozo. Seria ventajoso para ellos tener miembros del grupo que no sólo pudieran dar mantenimiento a sus armas sino cuidarse a sí mismos en un apuro.

—Eso será un alivio. Aunque tengo que preguntar — ¿Vas a unirte a nosotros, también, Tsubaki?; Finn pregunto.

—¡Seguro! Quiero ver esas profundidades por mí misma. Eso y, si es posible, me gustaría ser la que encuentre cualquier material nuevo; respondió Tsubaki, rebosante de curiosidad en cuanto a lo que les esperaba más allá de los pisos que su propia facción había atravesado. Ella les lanzo una sonrisa carente de preocupación. — ¡Sera una gran oportunidad!

—¿Y qué hay de nuestras armas Durandal?

—¡A—OK Allí! ¡Cinco de ellos, cada uno preparado personalmente!

—Bien, Tsubaki. Gracias.

—¿Puedo pedirles a ustedes dos que le den a Bete Loga un sermón de mi parte? ¡Con su casi imposible petición que me dio! ¡Viniendo a mí llorando que su pobre Frosvirt que estaba en pedazos – me llevo una eternidad reconstruirlo! ¡Maldito hombre lobo!

Sabiendo que tendrían esos monstruos oruga para lidiar desde el piso 15 en adelante — criaturas repugnantes que secretaban fluidos corrosivos, destructores de armas –Finn y los otros habían dejado a sus superiores Durandal con Hephaistos y su grupo. Esto incluía las armas para cada uno de sus aventureros de primera clase, excluyendo a Aiz, que ya tenía a Desperate, y Riveria, que era simplemente una usuaria mágica.

Tsubaki ya había terminado todas las armas Durandal, así que cuando Bete había llegado a ella con su superior, Frosvit, completamente destruida después de su pelea con Levis en el piso 24, que había sido apagado, por decirlo menos. Al parecer él había venido corriendo inmediatamente después del incidente, exigiendo personalmente a ella ‘’¡Arreglalo antes de la expedición!’’

Tsubaki había estado trabajando día y noche sin dormir preparando el equipo para su grupo principal. Finn y Loki se aseguraron de ofrecer sus palabras adicionales de agradecimiento.

—Sin embargo, en realidad, no estoy segura de que las espadas mágicas fueran necesarias…

—Sí, ya pedimos un montón y superiores de todos ustedes, y estas cosas no son exactamente, uhh, baratas…

—Vamos. Sin duda una familia como la suya no debería tener ningún problema para obtener un préstamo; El ojo izquierdo de Hephaistos se arrugo en alegría.

Era cierto que una espada mágica, con sus capacidades instantáneas de largo alcance, sería un buen candidato para tomar esas orugas. Pero las espadas mágicas ya eran bastante caras, y mucho más un modelo de primer nivel de la Familia Hephaistos.

—S-Se considerada ahí…; Loki respondió con una risa forzada.

—Aunque tengo que decir, cuando se trata de crear espadas mágicas… él podría hacerlas mejor que yo; Murmuro Tsubaki para sí misma.

—¿Qué? ¿Quieres decir que hay alguien mejor que tú en tu familia?; Finn pregunto, a lo que Tsubaki asintió felizmente.

—¡Alguien mucho mejor que yo forjando espadas mágicas! El hecho es que no creo que haya nadie que sepa más sobre espadas mágicas que esa persona en todo el mundo.

Tanto los ojos de Finn y Loki se abrieron con sorpresa. Tsubaki Collbrande fue la mejor herrera de todos en Orario.

Escuchando que había alguien mejor que ella, la maestra herrera, fue sorprendente, para decirlo menos.

—Para que hables así de él, debe ser alguien fabuloso, de hecho. ¿Quién es?

Como si esperara a que Finn preguntara eso, Tsubaki se rio entre dientes alegremente.

—¡Escucha y asómbrate! No es otra cosa que esa vieja sangre azul—

—Es suficiente, Tsubaki; Hephaistos interrumpió. —Sabes tan bien como yo que nuestro colega preferiría que su linaje se guardase en secreto;


El ojo con el parche izquierdo se quejó malhumoradamente en respuesta a la amonestación severa del ojo con el parche derecho.

—¡Vamooooos! ¡No tienes nada que perder! ¡Déjame contárselos!

—¡Que problema! Es este tipo de descuido egocéntrico que ya ha enviado a muchas personas a preguntar por espadas mágicas. ¿Recuerdas lo enojado que estaba?

Estaba claro para Finn y Loki que las cosas eran un poco complicadas entre los miembros de la Familia Hephaistos.

Tsubaki, sin embargo, no mostro signos de que en realidad había tomado enserio el regaño de Hephaistos.

— ¡Que desperdicio! Todo ese talento y ni siquiera lo está usando. No tiene sentido para mí; Tsubaki suspiro, su mirada caía en la espada roja en su mano — la espada mágica fresca de la fragua.

Entonces, en ese momento…

El aire a su alrededor se endureció.

—Ya sea sangre o algo más, si no invertimos todo lo que tenemos, la gente pequeña nunca se acercara al dominio de los dioses. Cosas como armas todopoderosas no son más que sueños; Concluyó Tsubaki, en voz baja. El destello voraz en su ojo derecho fue suficiente para avergonzar incluso al horno cercano.

Era el mismo destello que Loki y los otros habían visto tantas veces en los ojos de aventureros como Aiz, que constantemente apuntaban cada vez más alto.

Una mirada de orgullo, una sed de más, y la perseverancia insaciable de un artesano.

Tsubaki sabía que si no apostaba todo, nunca sería capaz de forjar una pieza digna de los dioses, y mucho menos una que los superase. Era algo que solo ella podía saber, después de haber alcanzado el pináculo más alto que uno podía como artesano.

Rasgando su mirada lejos de su creación, Tsubaki echó un vistazo a Hephaistos y dejo escapar un audaz repique de risa.

Hephaistos solo alzo los hombros con un suspiro a la agresión de su seguidor.

—Esos son los artesanos para ti. Debe ser duro, Phai-Phai.

—Mmn… en todo caso, ¿Volvemos al tema en cuestión?

Dirigiendo la conversación de nuevo al tema principal, el cuarteto pasó a esbozar la expedición.

—Es el plan para reunirse frente a Babel, ¿Entonces? ¿Y entrar allí juntos?

Publicidad M-AB

—Sí. Una vez dentro del calabozo, mi equipo y yo haremos todo lo posible para proteger al resto del grupo. Si bien esto puede cambiar en situaciones de emergencia, en su mayor parte todo el combate debe ser dejado a nosotros.

—Vamos a ayudar con la mitad de los suministros. Ya hemos llegado hasta aquí, así que compartamos la carga.

—Gracias, Phai-phai. Lo aprecio.

Los cuatro fueron a través de sus respectivas listas de comprobación final antes de llevar la reunión a un fin, y luego Finn y Loki se despidieron de los otros dejando el taller detrás de ellos.

Los preparativos para la expedición de la Familia Loki estaban en orden y en marcha.

Mantente Enterado
Notificarme
guest
This site uses User Verification plugin to reduce spam. See how your comment data is processed.

INSTRUCCIONES PARA LA ZONA DE COMENTARIOS

1- No Puedo Comentar: Toca los botones que estan debajo del recuadro de comentarios, aquellos que le cambian el estilo a Negrita, Cursiva, etc. (B, I, U, S)

2- No Aparece Mi Comentario: Es por nuestro sistema de moderación, luego de revisar y aprobar tu comentario, este aparecera. NOTA: Usa un correo real o no se aprobara tu comentario.

3- ¿Como Escribo un Spoiler?: Toca [ + ] (es el botón spoiler) y aparecera una ventana, ahí debes poner el TITULO de tu spoiler (recomendamos poner simplemente SPOILER), luego en el codigo que aparecera en el recuadro del comentario debes escribir dentro de los simbolos ] [

[spoiler title="Titulo de tu spoiler"]Aqui va tu spoiler[/spoiler]

Nota: Todo el texto que coloques antes o despues del codigo del spoiler sera visible para todos.

2 Comentarios
Mas Votados
Mas Recientes Mas Antiguos
Respuestas en el Interior del Texto
Ver todos los comentarios