Gakusen Toshi Asterisk (NL)

Volumen 3

Capítulo 6: Poder y Precio

Parte 1

“E-E-E-Es terrible ¡Presidente!”

Mientras Kashimaru Corona saltaba hacia la habitación del presidente del consejo estudiantil con una expresión pálida. A continuación, enredó sus pies y cayó sobre su rostro.

La habitación del presidente del consejo estudiantil de Le Wolfe se encontraba en la parte más profunda del edificio central de la escuela; sin embargo, ya que no había ninguna ventana, no había casi ningún tipo de adornos o bien, sólo el mínimo indispensable. Pero no sólo no estaba en mal estado en lo más mínimo, sino también el escaso mobiliario se hizo sólido, y había sólo las cosas correctas, que permitían a uno sentir la altura y la dignidad del estilo.

“… ¿Cuál es el problema?”, preguntó Dirk en mal tono.

Dirk, que estaba sentado en una silla demasiado grande para su tamaño, ni siquiera la miró fijamente. Corona, mientras en tal desorden, estaba ansiosamente poniendo en orden los documentos electrónicos a la mano.

“E-Eso es… Urzaiz-san de repente dice que quiere hablar con usted…”

En el lugar donde Corona dijo eso, mientras sostenía la punta de su nariz, la puerta de la sala de presidente del consejo estudiantil fue mandada a volar con un rugido atronador.

“¿¡Hya!?” Corona se fue al suelo.

“… Hey Dirk, perdón por la intromisión.”

Cuando Corona tímidamente dio la vuelta, Irene, que llevaba a Gravi-Sheath en la mano, estaba allí de pie con una sonrisa sin miedo.

Además de todo esto, cuando miró detrás de ella, las figuras de los guardias que protegían esta habitación estaban amontonadas en el suelo.

“¡Awawawawa…!” Corona chilló mientras se arrastraba a cuatro patas.

Corona finalmente llegó a donde estaba Dirk y se escondió detrás de su espalda.

“Irene, puede que no lo parezca, pero estoy muy ocupado, ¿sabes?”

Aunque Dirk apoyó sus manos, que estaban procesando los documentos, aun así no se inmutó en absoluto.

“¿Es así? Pues bien, vamos a resolverlo rápidamente.”

Cuando Irene dijo eso, casualmente balanceó a Gravi-Sheath abajo.

“¿¡Kyaa!?” Corona dio un salto y gritó.

El mostrador de la oficina delante de Dirk fue cortado en dos.

Sin embargo,… como se esperaba, Dirk ni siquiera pestañeó.

“… ¿Qué crees que estás haciendo?”

“Oh, esa es mi línea. Había pensado que eras un hombre, que siempre cumplía sus promesas.” Irene reclamó.

“Por supuesto, siempre cumplo mis promesas. Si no fuera así, habría sido enterrado en una tumba hace mucho tiempo.”

“¡Con qué boca dices eso!”

Ante esas palabras, una violenta sed de sangre fue liberada del cuerpo de Irene, y Gravi-Sheath levantó un gruñido.

Pero, al momento siguiente, Irene saltó enormemente hacia atrás; bajó su cuerpo y puso una mirada cautelosa en sus alrededores.

“Tsk, por lo que también dejaste un ‘gato’ escondido aquí, ¡huh!”

“A diferencia de ti, yo soy una débil persona común y corriente, ¿sabes? Esta tanta precaución es natural.”

‘Gato’ es el nombre en clave de los estudiantes vinculados a la “Organización de Gato Negro”, que llevaba a cabo tareas secretas bajo el control directo del consejo estudiantil. Dicho esto, incluso Corona nunca había conocido a sus miembros, y ni siquiera sabía realmente qué tipo de organización era. Ella, al menos, había oído que se dividía en ‘ojos plateados’, que apenas actuaban dentro de la escuela, y ‘ojos dorados’, que consistían principalmente de las actividades de inteligencia o trabajos fuera del campus.

Mientras Corona, quien estaba petrificada por el terror justo antes, miró a su alrededor sin descanso dentro de la habitación, ninguna figura de otra persona que no fuera Dirk e Irene podía ser encontrada. En primer lugar, no había lugar en esta sala en la que alguien pudiera esconderse.

Aun así, ya que Irene sin duda había sentido la presencia de alguien, no se movió, mientras que con cautela levantaba la guardia.

“Entonces, vamos a escuchar lo que te hizo escupir una falsa acusación.”

“… Hoy, Priscilla fue atacada. No voy a permitir que digas que no lo sabías.”

“Oh, ese asunto, huh.”

“¿Ha ocurrido una cosa así?” Dijo Dirk en un tono ligero.

“No me digas que estas sospechando de mí. En primer lugar, había gente del distrito de entretenimiento, ¿verdad? Originalmente, fue la semilla que tú sembraste.”

“Estoy al tanto. Pero… en los términos del contrato que hice contigo, debería haber estado la protección de Priscilla incluida. ¡No digas que lo has olvidado!”

“Por supuesto, lo recuerdo. Ya he avisado de no poner un dedo en ustedes hermanas, y también dije que castigaran adecuadamente a los chicos, que te atacaron el otro día. Sin embargo, aún hay muchas personas en Le Wolfe, que no escuchan lo que digo. También eres consciente de eso, ¿no?”

“Entonces… ¿Por qué dejas a esos tipos fugitivos? Deberías encargarte rápidamente de ellos.”

Cuando Irene se calmó un poco. Se sentó, con un ruido agudo, en el sofá, mientras miraba a Dirk.

“Incluso esas personas pueden ser útiles a su manera.”

“¿Útiles…? Hmph, bueno está bien. Pero sabes Dirk. ¿No estaba un ‘gato’ adjunto a la protección de Priscilla cuando no estoy a su lado? ¿Qué estaba haciendo ese hombre en ese momento?”

“Un ‘gato’ se unió a ella. Bien. Parece que fue un poco tarde esta vez.”

Dirk resopló como aburrido.

“Un poco tarde… ¿dices?”

Una luz peligrosa brilló una vez más en los ojos de Irene.

“Ella es una Regenerative de todos modos. Todavía va a estar bien si sólo sufre rasguños leves, ¿verdad?”

“…”

Mientras Irene se levantaba lentamente, mientras miraba hacia abajo, ella casualmente blandió a Gravi-Sheath.

La guadaña púrpura retumbó en su mano con un sonido de traqueteo.

Para Corona, parecía como si se estuviera riendo.

“… ¡Vete al infierno!”

Una voz fría y sin emociones.

Sin embargo, contrariamente a la aparente indiferencia de Irene, el corte ejercido era tan inesperadamente rápido como si rasgara el viento en sí.

La punta de Gravi-Sheath, se dirigió a la garganta de Dirk con una gran precisión, cambió su trayectoria en el último momento como si fuera bloqueada por un muro invisible.

Aún así la hoja, que rozó ligeramente la mejilla de Dirk, dejó una línea roja.

Irene dio un paso atrás para volver a ajustar la distancia, y re-estableció a Gravi- Sheath mientras todavía miraba hacia abajo.

“Hmm, pensar que la corrosión continuaría hasta aquí…”

Dirk frunció el ceño desagradablemente… era como de costumbre sin embargo… y secamente estiró su voz.

“Hey… Irene. ¿Quién estaría en problemas si fuera a morir?”

“…Tch.”

Ante esas palabras, Irene levantó la cara cuando se sorprendió.

La fosforescencia púrpura liberada por Gravi-Sheath calmadamente se debilitaba.

“También sobre ese asunto, aunque tarde, lo hizo a tiempo en el sitio. El ‘gato’ no podía salir porque ese chico de Seidoukan innecesariamente se entrometió. Él no podía permitirse el lujo de ser visto por esos tipos. También sabes eso. ¿Cierto?”

“Pero… Es un hecho de que fue salvada por ese tipo.”

“Entiendo. Entiendo. Entonces… ¿Qué demonios quieres?”, Dirk casualmente dijo.

Mientras se recostó en su silla.

“A este paso va a ser inevitablemente difícil de combatir. Voy a proceder lógicamente a partir de ahora, no te atrevas a interferir.”

“… Haz lo que quieras.”

Dirk, con una cara harta, hizo un gesto con la mano como si ahuyentara a un perro callejero.

“Sí… Lo siento por la perturbación”, dijo Irene brevemente.

Mientras salía de la habitación tambaleándose.

Poco después la atmósfera de la habitación se aflojó.

“Haa…” Corona dejó escapar un largo suspiro. “F-Fue realmente aterrador.”

Sin embargo, un momento después de que se sintió aliviada, la aguda voz de Dirk inmediatamente voló.

“Oye. Corona. ¿Qué hora es?”

“¡S-S-Sí! Errr, ¡Es pasado las 18:00!”

Mientras Corona apresuradamente se puso de pie, ella inmediatamente miró la hora y respondió así.

“Es un buen momento… Muy bien. Predice.”

“¿Eh? ¿E-En este momento?”

Corona sorprendida miró a Dirk.

“¿No es mejor hacerlo después de limpiar la habitación por el momento…?”

Gracias al alboroto de Irene, el cuarto del presidente del consejo estudiantil estaba desordenado. El escritorio de la oficina estaba cortado en dos, la alfombra estaba hecha jirones y el sofá estaba al revés. Aunque no mucho, no era un ambiente relajante.

Sin embargo.

“… No me hagas repetirlo a mí mismo.”

“S-Sí, ¡Lo siento! ¡Voy a prepararme inmediatamente!”

Ante la voz de Dirk, que estaba llena de ira, Corona sacó las cartas del tarot de la bolsa dentro de su uniforme y las alineó en el suelo.

“… Entonces, ¿qué debería predecir?” Ella preguntó tímidamente.

Mientras Dirk cruzaba los brazos, contestó secamente mientras miraba hacia abajo a Corona.

“Como siempre. Hazlo libremente.”

“Sí…”

Aunque perpleja, Corona ordenó las cartas del tarot de acuerdo a un procedimiento.

La adivinación era una de las muchas aficiones de Corona. Era algo que se le enseñó adecuadamente, pero la mayor parte de sus conocimientos sobre el tema era de auto-estudio. A nivel de estar loca por ello, y sin embargo no calificada en ello, no es gran cosa, más bien, casi nunca ha acertado. Aun así, Dirk, de esta manera, ordenaba a Corona predecir casi a diario.

Estaba bien en su propio derecho. Pero lo que la preocupaba era que Dirk no dijo ‘¿Qué quieres predecir?’. Ya que la adivinación era generalmente sobre algo que era solicitado, estaba preocupada por esto cada vez.

“Ah, entonces, ya que es una rara ocasión, ¡voy a predecir el riesgo de éxito de Urzaiz-san y su hermana en el Phoenix!”

Corona aplaudió ante la buena idea.

Aunque en el pasado después de estar por lo general tan preocupada, ella predecía algo que ella misma pensaba que era inútil, como el plato para la cena de esta noche o el clima de mañana, se encontró sólo el material adecuado para adivinación hoy.

“Entonces, voy a empezar…” Corona cerró los ojos.

Ella comenzó a ordenar las cartas por el tacto.

Entonces, un círculo mágico pálido surgió alrededor de Corona, y una enorme cantidad de maná comenzó a fluir.

Pero, Corona misma inconsciente de ello, optó por una tarjeta con los ojos todavía cerrados, y le dio la vuelta.

“… Todo bien.” Corona terminó volteando las cinco cartas.

Al mismo tiempo, que ella eligió, el círculo mágico desapareció.

Al abrir sus ojos. Corona leyó las cartas que fueron volteadas. “Err, el Sol en posición inversa a la posición normal del Tonto, y luego…”

Con entusiasmo dejó su cara pronto iluminada y miró a Dirk.

“¡Lo hice… Presidente! ¡Resultó que Urzaiz-san y su hermana van a ganar!”

“Sí, supongo.”

Mientras Dirk murmuró como si fuera natural, agitó levemente sus manos.

“Corona, ve a llamar a un vicepresidente, no importa quién sea. Después de eso, puedes volver.”

“S-Sí, lo entiendo.”

Corona puso rápidamente las cartas en orden, hizo una reverencia y salió de la habitación del presidente del consejo estudiantil.

Aunque el consejo estudiantil de Le Wolfe había tomado una buena forma, al borde de la dictadura por el presidente del consejo estudiantil Dirk, estaba compuesto por vicepresidentes de primer a tercer año, y muchos secretarios. Eran una existencia, que apoyaba el trabajo de Dirk y, en el sentido propio del término, más cercanos de ser secretarios de oficina que Corona en sí misma, que solo manejaba asuntos diversos.

“Aún así, al presidente le gusta mucho la adivinación del futuro.” Ella murmuró.

Mientras se dirigía hacia la sala del consejo estudiantil que contenía a los diversos secretarios VP y personal.

Por otra parte, Dirk, quien se quedó en la habitación del presidente del consejo estudiantil, se perdió en sus pensamientos mientras mantenía los brazos cruzados.

Dado que los resultados de adivinación de Corona resultaron así… Se convirtió en un acontecimiento inevitable. Él debía adoptar algunas medidas.

“… No se puede evitar, voy a hacer los preparativos.” Dirk murmuró para sí mismo.

Luego sacó un terminal portátil negro del mostrador roto de la oficina.

Era el terminal portátil de Dirk y al mismo tiempo no. Se trataba de un terminal portátil exclusivo que se permitía ser usado sólo por el presidente del consejo estudiantil del Instituto Le Wolfe Black.

Estaba limitado únicamente a la comunicación de voz, sin necesidad de abrir una ventana espacial, pero Dirk la operó con manos expertas.

“Conéctame al Séptimo ‘ojo dorado’.” Él habló brevemente.

Después de un rato respondió con una baja voz sombría.