Gakusen Toshi Asterisk (NL)

Volumen 3

Capítulo 6: Poder y Precio

Parte 2

“… Te invitó a cenar, ¿dices? ¿No me digas que aceptaste?” Julis preguntó con incredulidad.

“Sí, bueno.” Respondió Ayato.

Después de mirar a la cara de Ayato durante un tiempo con una mirada atónita, Julis débilmente se sentó en el pasillo de la sala de entrenamiento y hundió su cabeza entre sus brazos.

“E-Eres realmente…”

Ya que estaba pérdida en sus palabras, ella se mantuvo en silencio así.

Ya que Ayato esperaba su reacción, no se atrevió a poner excusas.

Entonces Julis permaneció en cuclillas por un tiempo, pero tan pronto como se puso de pie, lentamente sacudió la cabeza de lado a lado.

“…No, entiendo. Ya que me asocié contigo, tengo que acostumbrarme a estas cosas. Muy bien, exactamente lo que quiero.”

Y entonces ella se echó a reír con un rostro un poco acalambrado.

“Bueno, por ahora dime una vez más desde el principio lo que sucedió.”

“Oh, como he dicho err, ayer, encontré a Priscilla-san, que fue atacada…, a continuación, después de salvarla fui atacado por alguna razón por Irene-san… afortunadamente el malentendido se resolvió, pero, Priscilla-san dijo que quería darme las gracias, sin importar qué…”

Ayato contaba con los dedos mientras buscaba en su memoria.

“En ese momento, te enteraste de que las dos serían nuestros próximos rivales, ¿verdad?”

“Sí, ya que Irene me lo dijo.” Admitió Ayato.

“Y sabiendo eso, ¿aún aceptaste la invitación?”

“No, yo también pensé que no era una buena idea después de todo, pero, no podía rechazarla.”

Ayato dijo eso mientras se rascaba la mejilla.

“Además, podemos ser enemigos en la Festa, pero no hay nada aparte de eso…”

“¡Eres ingenuo!”

Julis levantó la mirada y le gritó a Ayato.

“Dejando a un lado el ejemplo del asunto con Cyrus, esta ciudad es la guarida de los hombres malvados, que pueden incluso coger a una comadreja dormidos. Aquellos, que atrapan a otros por ellos mismos, y aquellos, que utilizan trucos, son una moneda de diez centavos por docena. ¿Qué harías si fuera una trampa?”

“E-Está bien. Ambas no parecen ser tan mala gente… Bueno, Irene-san sin duda puede ser peligrosa aunque a veces.”

“Por eso he dicho que eres inocente. Si los seres humanos que tramaran una mala acción fueran villanos, uno no tendría ningún problema. No confíes en la gente tan fácilmente.”

Su opinión era del todo correcta.

Sin embargo.

“Entonces, ¿qué hay de ti, Julis?” Acusó Ayato.

“¿Qué?”

“Hemos formado un equipo en el Phoenix, pero si ambos fuéramos a participar en el Lindvolus, significa que seríamos enemigos, ¿cierto? En ese momento, ¿debo también dudar de Julis?”

Desde el principio, Ayato no tenía intención de participar en el Lindvolus. Ya que convertirse en la fuerza de Julis era el motivo de lucha del actual Ayato, sólo estaba hablando de una suposición.

“Ugh… e-eso es…”

Podría ser una manera un poco injusta de decirlo, pero el efecto parecía ser inmediato.

Julis murmuró con una expresión complicada…

“Haa… entiendo. Haz lo que quieras.”

Suspiró enormemente ya que pronto se rindió.

“¡Sin embargo! Sólo tengo una condición.”

“¿Una condición?”

Julis golpeó con su dedo a Ayato, quien hizo una pregunta a cambio.

“… Debes dejarme acompañarte allí, también.”