Youkoso Jitsuryoku Shijou Shugi no Kyoushitsu e 2-Nensei-hen (NL)

Volumen 2

Capítulo 4: Las Batallas Entre los Estudiantes de 1er y 3er Año

Parte 1

Ahora, a casi 3 meses de iniciado el año escolar, los de 1er año han llegado a entender un poco mejor la Preparatoria de Educación Avanzada y sus reglas.

También estaban en el proceso de formar grupos para el próximo examen especial.

Sin embargo, un caso desagradable ocurrió poco después de que la formación de grupos comenzara.

Los estudiantes de la clase 1-D, liderados por Kazuomi Housen, estaban haciendo su jugada, negándose obstinadamente a participar en las agrupaciones y a intercambiar sus tarjetas. Exigían puntos, sin los cuales no estaban dispuestos a formar grupos con el resto del año.

Debido a esto, los de primer año se vieron en una situación en la que no podían formar grupos libremente.

Aunque los representantes de cada uno de los cursos habían esperado que Housen cambiara de opinión durante el mes de junio, aún hoy, 1 de julio, su postura al respecto no había cambiado.

Hubo un coro de voces de los de 1er año para que simplemente se ignorara a la clase D en el proceso de formación de grupos, pero en respuesta, Takuya Yagami de la clase 1-B se levantó y calmó esas voces. Planteó que, si bien hubiera sido fácil simplemente ignorar a la clase de Housen, la parte importante de este examen especial era que debían competir con los “otros años escolares”. En el caso de que se diera la máxima prioridad a este punto, era necesario seleccionar a los estudiantes con talento de todo el año para formar un grupo más fuerte. Al mismo tiempo, algunos estudiantes que tenían la misma idea que él también expresaron su apoyo, por lo que las tres clases acordaron esperar hasta que llegara julio.

Sin embargo, Housen pasó todo el tiempo con una actitud negligente, lo que hizo que sus negociaciones no dieran ningún fruto.

Finalmente, llegó la fecha límite y se decidió que los representantes de las 4 clases se reunieran para discutir una salida a la situación actual.

Para mantener las negociaciones como un asunto abierto para el primer año, Yagami propuso una reunión sencilla. A pesar de que las tres clases se pusieron de acuerdo en que sus líderes de clase o alguien en una posición similar asistiera a la reunión, al final de la jornada escolar todavía no había respuesta de la clase D, que era el punto para esta discusión.

Yagami llegó al pasillo de una de las aulas vacías de 1er año. Como el que había propuesto esto, se sentía obligado a llegar antes que nadie.

No mucho después, apareció Utomiya Riku de la clase C.

—Parece que sólo tú estás aquí ahora, Yagami.

—Hola Utomiya-kun. Estaba pensando que tú serías la persona de la clase C que asistiría a esta reunión.

—Aunque no creo que sea del tipo líder, vine porque los otros estudiantes no quisieron venir. Mientras que los estudiantes de mi clase hablan libremente de sus opiniones en general, no tienen mucho gusto por estos asuntos problemáticos.

—¿No es porque creen que eres un estudiante confiable que te enviaron? He visto la OAA actualizada de este mes, y tu Contribución Social ha subido a B.

Después de decir eso, Yagami sonrió alegremente.

Utomiya frunció el ceño, a pesar de los elogios recibidos.

Aunque Yagami tenía una C en Habilidad Física, su Habilidad Académica estaba valorada en A. Además, debido a sus repetidas contribuciones a su clase, sus puntuaciones de Adaptabilidad y Contribución Social habían subido a A. La habilidad general de Utomiya ya era superada por Yagami.

Además, la clase C no estaba en situación de alegrarse.

—Recientemente perdimos a un camarada. Honestamente, es una pérdida bastante pesada.

—Tampoco pensé que Hatano-kun sería expulsado. Qué lamentable.

—… Ah.

Hatano había sido uno de los chicos de la clase 1-C, un estudiante valioso con un sobresaliente en Habilidad Académica.

Sin embargo, el golpe decisivo fue que asumió acciones que le acarrearían la pena de ser expulsado.

Esto había hecho que los laxos de 1º año de nuevo se dieran cuenta de la dureza de la escuela. Dicho esto, ya había pasado un mes desde que Hatano fue expulsado. Utomiya, que era su compañero de clase, ni siquiera tuvo tiempo de llorar su pérdida.

Ahora que la clase 1-C había perdido a un excelente estudiante, conseguir un resultado sólido en el siguiente examen se hacía necesario.

—Parece que te llevabas muy bien con Hatano.

—Una vez me dijo que quería que nos uniéramos al consejo estudiantil juntos y que creáramos un ambiente más animado para todos en esta escuela.

Utomiya asintió ligeramente, y luego miró hacia el aula de la clase 1-D.

—¿Crees que Housen vendrá?

Utomiya le preguntó a Yagami sobre la persona que llevó a esta discusión en primer lugar.

—¿Sobre el 50/50 de posibilidades de que venga?

—¿50/50? Parece que confías bastante en Housen. Apuesto a que no vendrá en absoluto.

—Si no se presenta esta vez, entonces sólo formaremos grupos dentro de las clases restantes. Con eso, la clase D, que estaba tratando de extorsionarnos con precios altos se quedará sola, y sus posibilidades de ganar desaparecerán como resultado.

—Si cree que simplemente puede obligarnos a entregar nuestros puntos privados de esa manera, es demasiado arrogante. Si podemos formar sin problemas los grupos con las cuatro clases esta vez, sería significativo. Ya que nos enfrentamos a los de segundo y tercer año, deberíamos cooperar. Sin embargo, Housen rechazó nuestra oferta.

Aunque todos eran de 1er año, Housen quería luchar en zonas donde no era necesario.

—Puede parecer eso en la superficie, pero no creo que ese sea el objetivo de Housen-kun.

—Entiendo que esa es su estrategia. Sin embargo, no tiene ninguna posibilidad de ganar.

—Si realmente tiene la intención de llevar a cabo esta estrategia, ¿no es una bendición? Eso significa que Housen-kun no es una gran amenaza para nuestras clases.

—…Sí.

Yagami explicó que organizó esta reunión también para calibrar lo que Housen está pensando realmente.

Los dos estaban en plena discusión, cuando apareció una tercera persona-

—¡Oh! Riku, Takuya. Como era de esperar, son ustedes.

Saludándolos con una voz fuerte, Takahashi Osamu de la clase 1-A se acercó ruidosamente a ellos mientras agitaba su mano.

Aunque era una figura discreta con un C+ en Habilidad Académica, se le daba de maravilla llevarse bien con la gente, y como resultado, a menudo pedía ir a las reuniones que se celebraban. Había acumulado muchos amigos en las otras clases y años.

—Osamu-kun, ¿has venido porque te volvieron a dar esta molesta tarea?

—El líder de mi clase es del tipo que no le gusta este tipo de cosas problemáticas. Por eso soy yo quien viene a esta discusión.

—Bueno, la discusión se desarrollará más fácilmente ahora que has venido, Osamu.

Como Utomiya, estaba bien si el estudiante que venía a este foro no era el líder de su clase. De hecho, si un estudiante con buenas habilidades de comunicación viniera, sería algo bueno para las otras clases también.

—¿Así que sólo Kazuomi no está aquí todavía?

Todavía faltaban unos tres minutos para la hora de la reunión. Si él no aparecía, comenzarían la discusión sin dudarlo.

—¿Qué tal si trabajamos juntos ahora? Lo que en realidad quiero es aislar a la Clase D y aplastarla cuanto antes.

—Nos dijeron que este examen de la isla deshabitada también pondría a prueba otras habilidades además de las académicas. Mientras que la Clase D es la última en términos de habilidad académica, sus habilidades físicas son las segundas en nuestro año y sólo por un estrecho margen para ser los primeros. Por lo tanto, podrían desempeñar un papel importante en la formación de grupos óptimos.

—Entiendo lo que dice Riku. Mi clase también está bastante frustrada con la situación actual. Sin embargo, ¿no es demasiado pronto para dejarlos de lado ahora? No hay garantía de que no haya exámenes en el futuro como éste que requieran cooperar entre sí dentro del año, ¿verdad?

Ante la propuesta de Riku de aislar a la clase D, Yagami se puso de su lado. Takahashi, por otro lado, mantuvo una posición neutral en este asunto.

—Si hay este tipo de exámenes en el futuro, podemos simplemente cooperar dentro de nuestras tres clases. De hecho, admito que la clase D también tiene estudiantes que podrían ser recursos valiosos, pero no vale la pena agacharse para satisfacer las demandas de Housen. Es casi la hora de la reunión. ¿Podemos empezar a discutir en la dirección de que sólo nuestras tres clases trabajen juntas?

—No parece que podamos, Riku.

Un hombre entró lentamente, aparentemente, como si hubiera visto cómo iba a resultar esta conversación.

—Parece que has venido después de todo, Housen-kun.

Housen, tras ser saludado por la sonrisa de Yagami, se acercó con su aterradora dentadura blanca de siempre. Tras echarle una rápida mirada, Utomiya desvió la vista hacia el exterior de la ventana.

—Has aparecido en un gran momento, Kazuomi.

Takahashi no rehuyó a Housen, sino que entabló una conversación amistosa.

Lo único que quería era que todos se llevaran bien.

—No digas mi nombre como si fuéramos cercanos, o te mataré.

Habiendo intimidado a Takahashi, Housen se volteó a mirar a Yagami y Utomiya una vez más.

—¿Así que decidieron pagar?

—Eso es una broma de mal gusto. No te voy a dar ni un centavo.

—De todos modos, vamos a calmarnos primero. No hay manera de tener una discusión si eres beligerante desde el principio.

—Entonces, ahora que todos están aquí, comencemos la conversación. Los grupos…

—No empieces así.

Housen empujó repentinamente el hombro de Takahashi, haciéndole caer de trasero. Utomiya, que estaba disgustado por semejante acto, lanzó una mirada férrea a Housen.

—Housen, no traigas aquí tus tendencias violentas.

—¿Oh? ¿Quieres meterte en mi camino?

—Si es necesario.

—Huh, interesante. Ven y prueba, si puedes.

En cuanto levantó la mano izquierda, Takahashi, que cayó al suelo, gritó asustado.

—Espera un momento, espera un momento, espera. Acabo de resbalar y caer, así que cálmate, Riku.

—Dice que es así, ¿no?

—Desafortunadamente, no soy tan amable como Takahashi.

—Entonces veamos qué tienes.

Utomiya agarró el brazo de Housen antes de que pudiera cerrar el puño.

—¿Oh…?

Housen sonrió felizmente al sentir la fuerza de su agarre. La mirada de Utomiya no era sólo una actuación, sino que también mostraba su determinación de pelear con él aquí si era necesario. Housen pensó que meterse en una pelea en ese momento habría sido divertido, pero lo reconsideró. Aunque su enfoque había sido diferente, Housen era el que más ganas tenía de pelear con los alumnos de los otros años.

—Parece que jugar con ustedes va a ser divertido. Lo dejaré para la próxima vez.

—¿Crees que la violencia es un juego?

—Ah sí, es un juego.

—Qué aburrido, pero, si eso es lo que quieres, no tienes que esperar hasta la próxima vez. Puedo enfrentarme a la pelea ahora. Sin embargo, eso es sólo si prometes no atacar a ningún otro de mis compañeros.

En ese ambiente espeluznante, ambos se miraron de manera inflexible.

—Oye, oye, ¿qué quieres decir con eso?

—Sospecho que fuiste tú quien hizo que expulsaran a Hatano. No es el tipo de estudiante que rompería fácilmente las reglas de la escuela.

—¿No son los insignificantes los que implosionan por miedo a la expulsión?

—Recuerdo claramente la expresión de su cara cuando lo expulsaron. Fue engañado por alguien.

—Y, ¿dices que fui yo?

—¿Quién más podría ser?

Aunque Housen iba a retroceder, la tensión volvió a saltar.

—Cálmense, los dos. Si empiezan una pelea aquí, estarán haciendo exactamente lo que Kazuomi quiere.

—Takahashi-kun tiene razón. Lo más importante ahora es centrarse en el examen de la isla deshabitada.

—Ah, claro, podríamos agruparnos con las otras clases en el próximo examen especial.

Housen dijo eso como si no lo hubiera pensado hasta ahora.

—¿Y qué? Como te has negado a trabajar con las otras clases, esto no tiene nada que ver contigo ¿verdad?

—Si me suplicas sinceramente, también podría trabajar contigo.

—No seas ridículo. No me agruparía contigo ni aunque fueras la última persona que quedara.

—Qué frío.

Utomiya soltó lentamente el brazo de Housen. Yagami, que estaba mirando, aprovechó este momento para hablar.

—Estamos perdiendo el tiempo, ¿empezamos?

—¿Empezar? ¿Quién dijo que me uniría a su pequeña conversación?

—¿Entonces por qué estás aquí? ¿Simplemente para pasar el tiempo?

—¿Y si digo que sí?

—No me lo creo. No eres tan estúpido.

Enfrentándose a Housen, Yagami respondió sin inmutarse con una sonrisa.

—Aunque el examen de supervivencia en la isla deshabitada es algo fuera de lo común, los de 2º y 3º año ya lo han experimentado una vez. Nosotros, los de 1er año, tenemos que desafiar esta prueba contra una probabilidad abrumadora.

—Pero nos han dado una ventaja, ¿verdad?

En comparación con el optimista Takahashi, Yagami continuó de manera apacible.

—Eso no cambia el hecho de que los de segundo y tercer año tienen la ventaja de edad sobre nosotros en términos de capacidad académica y física. Así que, si no podemos cooperar entre nosotros, podríamos convertirnos en comida para los de arriba, ¿verdad?

Yagami subrayó que, por eso, la cooperación entre las cuatro clases era esencial.

—Tu actitud dócil me está molestando, Yagami. No importa si son de segundo o tercer año, tengo la confianza de aplastarlos a todos.

—Por supuesto, hay algunos estudiantes individualmente sobresalientes. Sin embargo, no puedes negar el hecho de que somos más débiles en términos de habilidad general. No todo el mundo tiene tanta suerte como tú, Housen-kun.

La actitud amable de Yagami y sus elogios a Housen fue lo que mantuvo la conversación.

—Por eso… creo que es necesario que unamos fuerzas y al menos formemos un fuerte ‘grupo de 4’ en nuestro año. Tal como dijo Housen-kun, formar un grupo con estudiantes que no pierdan ante los de 2º y 3º año.

—En otras palabras, ¿no vamos a competir entre nosotros por los Puntos de Clase en este examen especial?

—Como las reglas de este examen dificultan la cooperación dentro del mismo año, es difícil que los de 2º y 3º año que no tienen mucho tiempo desaprovechen esta oportunidad para ganar Puntos de Clase. Por otro lado, a nosotros los de 1º año nos quedan más de dos años, por lo que simplemente deberíamos renunciar a los Puntos de Clase.

De la Clase A a la D, la diferencia entre los Puntos de Clase, incluso en su máxima expresión, era sólo de unos 300 puntos. En comparación con Yagami, que pensaba que no había razón para el pánico, Utomiya parecía pensar de forma diferente, y frunció el ceño.

—Los beneficios de cooperar con las otras clases son muy pequeños. No tiene sentido. Sólo estamos renunciando a los Puntos de Clase.

—Perder Puntos de Clase no será nuestra única preocupación si acabamos convirtiéndonos en comida para los de arriba.

—Si vamos con esa estrategia entonces no seremos capaces de marcar ninguna diferencia en nuestra actual clasificación de clase.

Utomiya enfatizó que, si iban a pelear, entonces no había forma de evitarlo.

—Ah, espera un momento. Tengo una pregunta sobre lo que dijo Takuya. ¿Por qué hacer sólo un equipo? Los tres mejores equipos obtendrán Puntos de Clase, ¿verdad? Si además tenemos en cuenta que podríamos fusionarnos en grupos grandes durante el examen oficial, ¿no es mejor formar muchos más equipos fuertes?

Yagami respondió inmediatamente a la pregunta de Takahashi.

—Por supuesto, tienes razón. Sin embargo, si queremos crear muchos grupos fuertes desde el principio, tendremos que tener en cuenta el equilibrio de cada equipo. Nuestros oponentes son estudiantes mayores, y no serán fáciles de vencer. Por eso debemos centrarnos en formar un equipo de 4 más fuerte que pueda conseguir el primer puesto. Además, parece que será difícil formar grupos grandes libremente durante el examen oficial, e incluso si los estudiantes mayores cooperan entre sí, sólo pueden elegir a 3 personas de 3 clases para trabajar juntos.

Takahashi, tras escuchar la respuesta de Yagami, se dio cuenta de lo que quería decir.

—Así que mientras consigamos el primer puesto, no importa lo que sacrifiquemos para conseguirlo.

—Todavía podemos formar un grupo realmente fuerte si ignoramos a Housen-kun y cooperamos con sólo tres clases, pero si hacemos eso, estaremos en el mismo campo de juego que los otros años. Por eso espero firmemente que las cuatro clases cooperen, no sólo para seleccionar la fuerza de las clases, sino también porque creo que es esencial que nuestra clase tenga un sentido de unidad para luchar juntos en este examen. Sólo a nosotros, los de primer año, se nos permite formar “un grupo pequeño de hasta 4 miembros”, así que deberíamos aprovechar esta regla. Sería un desperdicio tirar por la borda la ventaja que nos han dado.

Si la clase D fuese condenada al ostracismo, por supuesto tomará medidas para impedir que las otras clases ganen el primer lugar. En cuyo caso, es obvio que utilizarán cualquier medio para impedir que los demás de 1er año ganen. Yagami creía que, dado que las reglas permiten la cooperación entre las cuatro clases, debían aspirar a ese ideal. Y entonces, Yagami se dirigió a Housen una vez más.

—Entiendo perfectamente que tú tienes la capacidad de competir solo con los alumnos de las clases superiores, por eso espero que puedas echarnos una mano.

Yagami dijo que la cooperación de las cuatro clases era necesaria, sin importar qué, pero Utomiya aún sospechaba de Housen. No creía que Housen estuviera de acuerdo, ya que se había negado a toda negociación desde hacía más de dos semanas.

—De acuerdo, te ayudaré.

Sin embargo, después de todo este tiempo, Housen aceptó de buen grado la propuesta de Yagami.

—… ¿Qué intentas hacer? Housen.

—¿Qué estoy tratando de hacer? ¿No querían mi ayuda? ¿No estoy escuchando sus lindos deseos?

—Entonces, dinos tus condiciones.

Al ver lo rápido que Housen cambió de actitud, Yagami no quiso perder más tiempo así que instó a Housen a continuar.

—Las dos plazas restantes del equipo más fuerte deben estar reservadas para la clase D. Eso es imprescindible.

—¿Qué?

Utomiya, naturalmente, mostró su disgusto hacia la propuesta de Housen que sólo beneficiaría a su clase.

—¿Pero qué pasa si no podemos formar grupos grandes a voluntad?

—¿No lo acabo de decir? Mi condición es que dos estudiantes de la clase D deben estar en el grupo.

—Ya veo. Si no podemos agruparnos con los dos estudiantes de la clase D una vez que comience el examen, entonces lo haríamos con nosotros cuatro.

—Después de todo, si ya has preparado el grupo pequeño más fuerte de cuatro, el hecho de que se fusionen o no en el grupo grande no debería afectar al resultado del examen, ¿verdad?

—Tienes que estar bromeando, Housen.

—No estoy bromeando. Si no te gusta, vete a la mierda.

—Bastardo…

Utomiya estaba a punto de enfrentarse a Housen por sus desmesuradas exigencias. Pero, Yagami se interpuso entre ellos, como si estuviera saltando dentro de una fila.

—Cálmate, Utomiya-kun, me parece bien esta condición.

—¿Vas a dar todos los beneficios a la clase D así como así?

—Lo más importante para nosotros, los de 1er año, es trabajar juntos como un equipo y no perder con los otros años.

—Si dejamos que se aproveche de nosotros ahora, seguro que lo volverá a hacer.

—Entonces, ¿crees que el resultado será diferente si abandonamos a la clase D de Housen-kun aquí?

—Eso…

—Lo más importante en este examen es que ganemos los de 1er año. Si lo hacemos, nada más puede considerarse una pérdida.

—Estoy de acuerdo. Entiendo cómo te sientes, Riku, pero primero, debemos hacer que los de 1er año trabajen juntos.

Aunque Utomiya puso mala cara, finalmente cedió, ante la petición de Yagami y la persuasión de Takahashi.

—Housen, no más exigencias. ¿De acuerdo?

Housen no dio ninguna respuesta a Utomiya. Le dio la espalda como si señalara el fin de su conversación.

—Por último, hay una cosa más que quiero decir. Es necesario que los de primer año trabajemos juntos como un equipo. Para evitar cualquier disputa entre nosotros, quiero redistribuir las tarjetas con efectos gratificantes para aprovecharlas al máximo. También es importante dar a los estudiantes que carecen de habilidades las tarjetas reducción a la mitad y colocarlos en el mismo grupo. ¿Te parece bien, Housen-kun?

—Haz lo que quieras.

Housen se marchó inmediatamente sin rechistar. Mientras los tres lo veían salir, Takahashi le dijo a Yagami.

—Por cierto, Takuya, ¿a quién piensas elegir de la clase B?

—Al menos, creo que todos los que participamos aquí podemos estar en el equipo más fuerte, por supuesto eso incluye a Housen-kun. ¿Verdad?

Yagami miró a Takahashi y a Utomiya, así como a la figura de Housen que se retiraba con una mirada apacible pero aguda.

—Incluso si su fuerza es real, sería un error dejarle unirse al grupo. Ese tipo…

—Bueno, decidamos cuidadosamente eso más tarde. Por ahora, ¿no es suficiente que estemos en la misma página?

—… Entiendo.

—Si trabajamos juntos, definitivamente podemos obtener el primer lugar. Aspiremos primero a eso.

Aunque Utomiya era reacio, aceptó las palabras de Yagami, tras lo cual todos se separaron.