Youkoso Jitsuryoku Shijou Shugi no Kyoushitsu e 2-Nensei-hen (NL)

Volumen 2

Capítulo 1: La Vida Escolar Está Cambiando

Parte 4

A las 7 de la mañana, frente al centro comercial Keyaki.

Llegué aquí antes que ellos y los esperé en silencio.

Como el que causó el caos, pensé que sería mejor no hacer esperar a nadie, especialmente hoy.

—Llegué demasiado pronto…

El reloj ahora mismo marcaba las 6:30.

Sin embargo, no me pareció que la espera fuera dolorosa. Más bien, no sería muy exagerado llamarlo una de mis habilidades especiales.

Fue agradable tener algo de tiempo para vaciar mi mente.

Sin embargo, aunque no era un precio pequeño, las cosas se convirtieron en algo problemático.

En otras palabras, el hecho de que estuviera solo atraería la atención. Aparte de los de tercer año, mis notas podían ser vistas por todos, así que la atención de todo el año pronto estará sobre mí. Me temo que los ojos inquisitivos de mis senpais y kouhais estarán sobre mí por un tiempo.

No tenía nada que hacer por el momento, así que me quedé ahí parado. De repente, mi teléfono vibró, y lo saqué, notando un mensaje del grupo Ayanokouji. Airi dijo que estaba saliendo del dormitorio ahora. Los otros 4 habían leído el mensaje.

No les dije que ya estaba aquí, así que me limité a mirar sus respectivos estados.

—Ayanokouji-kun, ¿estás esperando a alguien?

Como estaba inmerso en mi teléfono, no presté atención. Fue Ichinose quien me llamó, así que levanté la cabeza.

Estaba acompañada por su compañero de clase Kanzaki. Aunque la escuela se enorgullecía de su gran área escolar, los lugares a los que iban los estudiantes eran limitados. Como resultado, si esperabas en la entrada del centro comercial Keyaki, un lugar que muchos estudiantes frecuentaban, toparse con gente que conocías era normal.

—Estoy esperando a mis amigos para ir a comer. ¿Qué tal ustedes?

No había nada que esconder, así que respondí honestamente.

Ichinose y Kanzaki respondieron juntos al mismo tiempo, sin siquiera intercambiar miradas.

—Estamos haciendo algo parecido, ¿no?

—Sí.

Kanzaki contestó bruscamente. Pero su mirada estaba más enfocada en Ichinose que en mí.

Algo parecido, ¿eh? Pero incluso si algo era similar, también es diferente.

—Oye, vi los resultados de tu examen. En realidad obtuviste una calificación perfecta en matemáticas, ¡es increíble!

—A juzgar por la OAA del año pasado, no deberías tener la fuerza para obtener una puntuación perfecta.

Ichinose no planteó ninguna pregunta sobre que yo oculte mi fuerza. Kanzaki, por otro lado, se opuso a ello, no escondiendo su disgusto en sus palabras en lo más mínimo.

—Hay muchas razones para esto. Sólo después de discutir con mis camaradas decidí ocultar el hecho de que soy bueno en matemáticas.

Lo expliqué así. Si se tratara de Ichinose y Kanzaki, entenderían la situación hasta cierto punto.

Deberían ser capaces de usar su imaginación para reforzar lo que dije para hacerlo más completo.

Normalmente, explicarlo así sería suficiente. Pero esta vez, la aguda mirada de Kanzaki no se desvaneció.

—Así que estás diciendo que lo has estado ocultando todo este tiempo. Parece que eres más problemático de lo que pensaba.

—Kanzaki-kun, no lo digas así. No importa de qué clase sea, tendrán sus propias ideas, y por supuesto, sus propias estrategias.

Kanzaki aceptó la crítica de Ichinose como algo natural.

—Eso es cierto. No usó trucos sucios como lo hizo Ryuuen. No obstante, hay algunas cosas que no me gustan de él. Ichinose, debes ser muy consciente del hecho de que no es nada fácil ser capaz de resolver esa cuestión extremadamente difícil para obtener la máxima puntuación. Dice que sigue las instrucciones de su camarada, pero…

Kanzaki estaba a punto de continuar, pero Ichinose lo detuvo con un raro tono contundente.

—Ayanokouji-kun no es nuestro enemigo.

Ichinose estaba muy insatisfecha con la actitud agresiva y espinosa de Kanzaki. Es cierto que ese tipo de actitud es rara para Kanzaki, pero si tuviera que elegir quién tenía la actitud correcta, definitivamente elegiría a Kanzaki, que estaba en guardia.

—Nuestra alianza se ha disuelto. No hay duda de que la clase 2-D es nuestra enemiga.

—Eso es… ¡pero no tiene sentido que nos involucremos en una disputa sin sentido!

—Esto no es una disputa. Sólo es necesario que conozcamos la verdadera fuerza de nuestro oponente.

—Ayanokouji-kun ocultó el hecho de que es bueno en matemáticas; este es un hecho que fue ocultado.

Kanzaki dio un paso adelante; ahora la distancia entre nosotros era menor que la distancia entre él e Ichinose.

—Entonces, ¿qué más? ¿Sólo son matemáticas? No, no puede ser sólo matemáticas. ¿Qué otras habilidades estás ocultando? ¿Escondiste esas piernas de las que estás tan orgulloso durante el festival deportivo del año pasado por órdenes de tus camaradas? A la clase B… No, a la clase C, lo peor es que aún tienes otras fortalezas escondidas.

—Sin embargo, hay un límite para los resultados de los exámenes. No importa lo bueno que seas estudiando, lo máximo que puedes conseguir en una asignatura es 100 puntos, y la nota más alta es A+. Aunque obtenga calificaciones máximas en todas ellas, no hay mucha diferencia entre él y Sakayanagi-san, la segunda del año.

En realidad, sólo había una diferencia de 9 puntos entre Sakayanagi y yo.

Aunque tuviéramos la misma diferencia en las cinco asignaturas, sólo sumaría 45 puntos. Ichinose no pensaba que eso fuera una gran amenaza.

—Nuestras calificaciones generales en la clase C son mucho más altas que eso. La diferencia de puntos de Ayanokouji-kun después de mostrar su verdadera fuerza, sólo tenemos que compensar eso con toda nuestra clase.

—Eso podría ser cierto si es sólo un examen escrito… pero…

—Deberíamos parar aquí, Kanzaki-kun. También sabes que esto no es algo sobre lo que debamos discutir acaloradamente aquí, ¿verdad?

Ichinose, que siempre había sido pacifista, estaba preocupada de que si seguíamos discutiendo intensamente frente al centro comercial Keyaki, que es un lugar muy concurrido, tarde o temprano caeríamos en el caos.

—Perdí la calma.

Kanzaki, quizás pensando que continuar la discusión aquí no resolvería el problema, cerró la boca y desvió su mirada impotente.

—Me iré primero.

Con eso, Kanzaki dejó a Ichinose aquí, y rápidamente desapareció en el centro comercial Keyaki.

Lo miramos tranquilamente cuando se iba.

—Lo siento, pero dada la situación actual, Kanzaki-kun definitivamente no tiene mucha paciencia.

La clase B, que siempre había mantenido su posición, ahora cayó a la clase C.

Dado el fracaso del estilo de lucha que había funcionado hasta ahora, toda la clase no tuvo más remedio que cambiar de dirección. En esta situación, es comprensible que sea así.

O más bien, la Ichinose que aún podía ser agradable conmigo en esta situación es la que es diferente.

Kanzaki empezaba a pensar que debían abandonar su ingenuidad en el futuro, y tenía razón.

—¿Soy yo la que está equivocada…?

Ichinose no era completamente ignorante de lo que Kanzaki estaba pensando.

Pero aunque lo supiera, decidió mantenerse fiel a sí misma.

Había un mundo de diferencia entre eso y no saber nada más que aferrarse obstinadamente a su propio rumbo.

—¿Recuerdas lo que te dije antes?

—Sí, me dijiste que me aferrara a mis compañeros y siguiera adelante, ¿verdad?

—Puede que aparezcan estudiantes que quieran cambiar a su clase a partir de ahora, como Kanzaki. O puede que haya algunos que estén descontentos contigo y quieran detenerte. Tal vez incluso algunos que traicionarán a la clase. No será sorprendente pensar que algunos harán lo que sea sólo para hacer un cambio. La clase 1-B, la clase que tú sola protegiste, esa clase ya no existe.

De todos los estudiantes de la clase 2-C, esas palabras eran las que más resonarían con Ichinose.

—No importa lo que pase desde aquí, quiero que confíes en tus compañeros, pongan su seguridad primero y continúen la lucha.

—Está bien. Definitivamente voy a protegerlos. Si llega el momento en que alguien de mi clase tenga que irse, creo que seré la primera.

No estaba siendo audaz, Ichinose seguramente lo hará.

Tomaría la responsabilidad de la recesión de la clase y elegiría dejar la escuela primero.

—Me siento aliviado de escuchar eso, pero hay una cosa con la que estoy insatisfecho.

—¿Insatisfecho…?

De alguna manera no entendió la indirecta al inclinar ligeramente la cabeza.

—Nunca dejaré que te expulsen.

Había una necesidad de hacerla recordar lo más importante.

Para este año, es de suma importancia que siga corriendo hacia adelante sin parar.

La miré a los ojos, encendiendo un fuego ardiente en el fondo de sus pupilas.

Lo que recibió no fue oscuridad.

Era una luz que nunca se desvanecería.

Si existía la posibilidad de que la luz se extendiera en la dirección equivocada, la tomaría yo mismo.

—E-eso… sí… definitivamente… me… quedaré —Me miró y murmuró, avergonzada—. T-tu…. Eres realmente increíble, Ayanokouji-kun… Pensar que has conseguido una puntuación perfecta en un examen tan difícil.

Dijo mientras miraba hacia otro lado como si tratara de cambiar de tema.

—Aunque puede ser mi única característica rescatable en la escuela.

—A pesar de eso, sigue siendo asombroso. Sólo significa que tienes un arma que no perderá ante nadie más.

—Tú también eres igual. Sin duda, tú también tienes un arma así.

—Eso estaría bien, pero…

Pero faltaba gente a su alrededor que pudiera usarla de manera competente.

No era que no estuviera bendecida con buenos compañeros de clase.

Era debido a las desventajas de esta arma.

La habilidad de Ichinose para incluir a la gente era lo suficientemente fuerte como para matar las individualidades de sus compañeros.

Dependían de los demás. Por lo tanto, el círculo vicioso les hizo perder todavía más su individualismo.

—…Necesito irme pronto. Ya estuvimos demasiado tiempo aquí, y me siento mal dejando que Kanzaki me espere.

Asentí con la cabeza y la despedí, observando su figura alejarse.

Pensando que era casi la hora de encontrarnos, saqué mi teléfono de nuevo para confirmarlo.

—¿De qué hablabas con Ichinose-san hace un momento?

De repente, la voz de Haruka vino desde un poco más lejos.

Miré, y Akito, Keisei y Airi habían llegado, mirándome de manera similar.

Lucía como si los otros miembros del grupo ya se hubieran reunido mientras hablaba con Ichinose.

—Mi calificación perfecta en matemáticas.

—No es de extrañar. Después de todo, cuanto mejor seas en lo académico, más conscientes serán de ello.

Tan pronto como lo expliqué con una razón sensata, Keisei inmediatamente pareció entenderlo.

Pero había algo raro en Haruka.

No preguntó más, y rápidamente volvió a su expresión habitual.

Mañana, a partir del 2 de mayo, daríamos la bienvenida a la llegada de la Semana Dorada.

Los estudiantes aprobaron sus exámenes especiales sin problemas, así que estoy seguro de que todos disfrutaremos de las vacaciones sin preocupaciones.