C³ – Cube x Cursed x Curious

Volumen 10

Capítulo 2: Dos minutos en el reloj de bolsillo / “El lugar donde está el corazón”

Parte 3

 

 

A medida que pasaban los días, poco a poco se iba acostumbrando a investigar. Aunque no sentía que estuviera ayudando, al menos no estaba creando trabajo para otros, probablemente… Pero quizás, esto podría ser simplemente su propia ilusión.

Todos los días, después de salir de la escuela secundaria, se dirigía a ese lugar. Dentro del vestuario, poniéndose la bata de laboratorio que no le quedaba, luego se dirigió al laboratorio asignado.


“Buenos días, Himura-senpai.”

Aunque era de noche, los saludos siempre eran “buenos días”. Los investigadores no tenían noción alguna del día o la noche. Como era de mañana cuando uno se despertaba, en otras palabras, el primer saludo al encontrarse con alguien sería un: buenos días. “Esto es solo un hábito sin un significado particular”. Su senpai le había susurrado esto mientras le explicaba.

“Estás aquí. Actualmente estoy a punto de medir la masa de este pedazo de tela. Kirika, ven a ayudar.”

“Sí.”

Un día como cualquier otro. A pesar de que había conocido a muchas personas, había una sola persona a la que veía todos los días y saludaba. Naturalmente, su hermano también estaba presente en las instalaciones, pero su agitada agenda le impedía verlo a menudo.


Después de comenzar su vida aquí y participar en la investigación, las cosas cambiaron cuando pasó aproximadamente un año.

Un perro callejero se había perdido dentro del recinto del centro de investigación. Sin pensarlo, ella había alimentado al perro. Esta fue su desgracia. Aunque ella quería ir a casa, el perro la seguía.

“Uh… Lo siento. Yo… no tengo más comida para darte…”

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Por supuesto, el perro no entendía el habla humana. Simplemente jadeó pausadamente con la lengua sacada, meneando la cola. Kirika endureció su corazón, se levantó y se fue, pero pudo escuchar el sonido de garras golpeando el suelo mientras el perro caminaba. Suspirando, se dio la vuelta y frunció el ceño mientras acariciaba la cabeza del perro.

“¿Qué debo hacer? Incluso si me sigues a casa… no puedo quedarme contigo…”

Varios investigadores pasaron junto a ella en su camino a casa. Algunos de ellos ignoraron la vista, mientras que otros le sonrieron antes de continuar su camino. Otros más entablaron conversación con ella. “Lógicamente, un perro callejero no tiene dueño. Un perro sin dueño no habrá recibido la vacunación como lo requieren las leyes japonesas. Un perro no vacunado puede estar infectado con rabia y otras enfermedades, por lo que infectarse es un riesgo. En palabras, al llegar a la conclusión lógica de acuerdo con el pensamiento lógico, el consejo lógico que le ofrezco es: llame al Ministerio de Salud”. Naturalmente, ella se negó.

¿Qué tengo que hacer? ¿Qué tengo que hacer? Ella continuó acariciando la cabeza del cachorro. Durante este tiempo, pequeñas gotas de lluvia comenzaron a caer. Decían que las desgracias nunca llegaban solas. Todo cubierto de tierra, el cachorro seguía sin moverse, jadeando mientras la miraba como si esperara las órdenes de su amo. Quizás la lluvia pudo limpiar su piel, pero Kirika no podía dejarlo atrás por esa razón. Incluso un cachorro se resfriaría si no se secara, probablemente.

Justo en este momento…

“… ¿Qué estás haciendo?”

“¡Himura-senpai! Umm… Este cachorro, bueno…”

Parecía que estaba a punto de irse a casa. Sin usar una bata de laboratorio, sosteniendo uno de esos paraguas de plástico provistos en el laboratorio, miro al cachorro sin collar.

“… Creo que entiendo la situación básica. Sin embargo, todo lo que puedo decir es que no se puede permitir la entrada de este perro a las instalaciones. El equipo preciso del laboratorio no puede permitir una sola mota de polvo. Si el pelaje de este perro causara un mal funcionamiento en la maquinaria, la compensación está más allá de tu capacidad.”

“Ah…”

C3 Cube x Cursed x Curious Volumen 10 Capítulo 2 Parte 3

 

Estas fueron palabras frías. Aunque siempre había sido brusco y descortés, Kirika nunca lo había presenciado de forma tan directa. Ya sea enseñándole o instruyéndole para que lleve a cabo una investigación difícil (aunque debido a que es demasiado brusco, a veces sus palabras no logran expresar su significado), él siempre le explicó con seriedad. Incluso hacia alguien como ella, que sería un niño a sus ojos. Por lo tanto, ella nunca lo consideró cruel y despiadado. A pesar de ser difícil de comprender de un vistazo, en realidad era una persona amable. Ella nunca pensó que…

En silencio, comenzó a caminar. Cuando pasó junto a ella, por un instante las gotas de lluvia desaparecieron sobre su cabeza.

“¿…?”

Entonces las gotas de lluvia dejaron de caer.

Solo entonces se dio cuenta de que la manija de la sombrilla de plástico estaba colgando de su hombro. Resultó que al pasar, dejó atrás el paraguas para resguardar su cuerpo  en cuclillas.


“U-Umm…”

Pero sus pasos no se detuvieron en absoluto, tampoco miró hacia atrás cuando abandonó el centro de investigación, caminando bajo la lluvia.

(Olvidé… decir gracias…)

Reajustó el paraguas, dándose cuenta de que esto era solo una solución temporal, pero al menos por ahora podía proteger a este perro callejero de la lluvia.

Tal vez no se pudo evitar, pensó. Tenía razón: no importaba lo mucho que pudiese insistir, el perro no podía entrar en el laboratorio. Sin embargo, él no la ignoró, ni tampoco le pidió que se pusiera en contacto con el Ministerio de Salud. Esta fue probablemente la máxima medida de su amabilidad. ¿Si se colocaba en sus zapatos y viese la misma escena, entonces qué? Como uno esperaría, a lo sumo ella habría hecho lo mismo que él, era lo más probable.

“Aun así… ¿Qué debo hacer…?”

La lluvia gradualmente se hizo más pesada. Ella no podía moverse. El solitario  perro callejero la miraba en silencio. Ella no tenía madre. Su padre había fallecido, dejando solo a

su hermano mayor. Seguramente, este cachorro no tenía familia alguna. Ella abrazaba al perro, acariciando su cabeza, ella se le había acercado por un capricho.

Inesperadamente, escuchó un chapoteo detrás de ella. Saltando de sorpresa, miró hacia atrás para ver…

Había un hombre de pie, completamente empapado. “¿Senpai…?”

Cerca de su pie había una gran bolsa de vinilo. A juzgar por el logotipo impreso en la bolsa, era de una tienda cercana.

Sin decir una palabra, se arrodilló y sacó varias cosas de la bolsa. Cinco estacas de madera de igual longitud, un paquete de cuerdas de vinilo, una pequeña lámina de lona azul, así como un martillo de bricolaje. Usando el martillo, clavó cuatro de las estacas de madera en la hierba mientras martillaba el último arbitrariamente cerca. Luego extendió la lona sobre las cuatro estacas y la aseguró usando la cuerda. Esas estacas de madera eran pilares, pilares para una tienda improvisada.

Luego sacó algo más de la bolsa, un collar con cadena. Dándole el collar, le dijo: “Podría tener problemas al ponérselo, así que hazlo tú.”

A pesar de sentirse intrigada, ella acepto el collar. Luego dirigió su mirada hacia la tienda improvisada y murmuró enfáticamente con voz tranquila: “Incluso esta solución de emergencia me parece bastante terrible. Mañana debería comprar algunos tablones de madera y diseñar una perrera. No, si voy al lugar correcto. Deberían estar las perreras listas para su venta…”

Kirika finalmente se dio cuenta.

Ella colocó el collar alrededor del cuello del cachorro. Él (o ella) aceptó el collar sin ninguna resistencia. Luego Kirika tomó el anillo en el otro extremo de la cadena y lo colocó alrededor de la otra estaca cerca de la tienda. A juzgar por la longitud de la cadena, el cachorro debería poder refugiarse dentro de la tienda.

“… Este es tu hogar temporal. Mañana vendré a verte otra vez.”

Se levantó y retrocedió lentamente. El cachorro siguió corriendo en círculos, mirándola, pero finalmente, poco a poco entró en la tienda. Sentándose con las patas delanteras estiradas hacia adelante, jadeó con la lengua como diciendo “nos vemos mañana” y curvó su cuerpo ligeramente. Kirika finalmente se sintió aliviada.

“…Vete a casa.”

Himura guardó la bolsa de vinilo, giró rápidamente y se fue. Kirika corrió frenéticamente tras él. Caminando a su lado, vaciló antes de extender su brazo, levantando el paraguas que originalmente era suyo, levantándolo sobre la cabeza de su amable senpai.

“Umm… Gracias. ¿Pero por qué? Luego de lo que dijiste.”

“No dije que no. Simplemente dije que no podía entrar al laboratorio.” “No respondiste mi pregunta.”

“Hmm… Sólo por un capricho.”

Su tono de voz se mantuvo brusco y descortés. Subconscientemente, el rostro de Kirika se relajó.

“¿Pero está bien?”

“Quién sabe. Superficialmente, esta es una instalación de investigación de una compañía farmacéutica. Incluso si un perro guardián se mantiene en su terreno, no hay nada extraño,

¿verdad?”

Hablando casualmente, volvió su mirada hacia ella. Tan pronto como su mirada tranquila la vio, él también sonrió.

“Además, incluso si realmente hay un problema… Tu posición será útil cuando llegue el momento. No importa cuántas personas se quejen, al final, solo necesitas persuadir a una persona y el problema se resolverá, ¿verdad?”

“Ajaja, déjame eso. Si es solo Onii-chan, ¡seguramente lo persuadiré!” “¿Es eso así?” Él respondió brevemente.

Luego, durante bastante tiempo, compartieron un paraguas de camino a casa.

Al día siguiente, una perrera ordinaria reemplazó la tienda, erigida en los terrenos de la instalación de investigación:

De repente Kirika sintió que su conciencia volvía a la realidad. Ahora mismo estaba en el techo, podía escuchar los gritos de los clubes deportivos. Aparentemente, mientras recordaba el pasado, de alguna manera había comenzado a distraerse… Se sentía como soñar despierta. Absolutamente ridículo.

Himura seguía de pie a su lado. Estaba mirando la escena de abajo como si estuviera mirando a la distancia. Sin embargo, sin incitarse a nada en particular, como si el pensamiento se le hubiera ocurrido de repente, le preguntó:

“Por cierto, Kirika… ¿Todavía te acuerdas de ese cachorro?”

Kirika sintió que su corazón daba un vuelco. No era necesario que mencionara el pasado que acababa de recordar, ¿verdad?

“No, lo he olvidado.” “¿Es eso así?”

Esto fue tanto una mentira como una verdad. Porque ella tenía motivos para desear olvidarlo. Cuando ella se obligó a sí misma a dejar de recordarlo una vez más, eso era equivalente a que ella realmente había olvidado el recuerdo. Mientras no estuviera distraída, o sufriera un mal funcionamiento mental, no recordaría el recuerdo por casualidad…

“Así es, pon toda tu fuerza en el polo… ¡y salta! ¿Oh, ella falló?” “Ella tocó la barra ligeramente.”

“Ese miembro del  club  de atletismo  falló debido a esa masa redundante en su pecho,

¿verdad? Sin ese exceso de peso, ella lo habría saltado con agilidad… ¡Sabía que era completamente inútil! No solo es una monstruosidad, sino ¡también pesado y feo hasta el extremo! ¡Hey Tetas de Vaca, como representante de la fealdad, apresúrate y ve a pedir disculpas a los miembros del club de atletismo por haberle impedido hacer nuevos logros!”


“¿Quién es la representante de la fealdad? ¡Tampoco tengo idea de por qué debo disculparme!”

“No, si asumimos que Kono-san es en realidad el espíritu de las tetas gigantes, entonces todas las chicas tetonas están elementalmente poseídas por el espíritu de las tetas gigantes…

¡Ahora todo tiene sentido! Pensar que causaste tanta desgracia a una chica bajo tu contrato,

¡realmente deberías disculparte! Pero por ahora, dejando eso de lado, gran espíritu, realmente quiero saber cómo formalizar un contrato, ¡dímelo!”

“Espera, Kuroe, no te impacientes. Seguramente ella exigirá un sacrificio viviente como ofrenda. ¡Como una cabeza de ganado Wagyu de primera categoría! ¡Frente a esa cantidad asombrosa de calorías, estoy temblando de miedo!”

“¿¡Qué diablos!? Hay tantas cosas ridículas diciéndose a la vez, ¡ni siquiera sé por dónde empezar!”

“Parece que se están divirtiendo… De todos modos, ¿no es hora de irse a casa? Se está haciendo un poco tarde.”

Kirika estaba escuchando sin prestar atención a la conversación de Haruaki con las chicas cuando la reja se sacudió de repente. Era Himura alejándose con una sonrisa irónica.

“Ustedes están animados como siempre. Ya es hora de que vuelva al trabajo.”

A medida que Fear y los demás avanzaban, empujando la silla de ruedas, los susurros de Himura parecían ser audibles.

“¿A qué tipo de trabajo te refieres?”

“Mi trabajo como profesor de matemáticas ya terminó por hoy. Ya que planeo mi trabajo con mucho cuidado, nunca necesito dedicar horas extras. De todos modos, me pondré en contacto contigo si recibo alguna noticia sobre el lado del enemigo. Mantén el estatus quo y sigue cuidando a esa chica. Por cierto, olvidé preguntar, ¿Amanda paso el día de ayer en tu casa?”

“Sí. En comparación con el apartamento de Kirika, nuestra casa es más grande y más conveniente de muchas maneras. Hoy también la llevaremos a casa. No se preocupe, le hemos estado alimentando con tres comidas al día y también le hemos dado su medicina.”

“Ya veo. Luego, si hay algo urgente, iré directamente. Nos vemos mañana.” Himura agitó su mano ligeramente, se giró y se dirigió a la salida del techo.

En el último instante, Kirika sintió que la mirada de Himura se había encontrado con la de ella. Por lo tanto, esa oración final podría haber sido dirigida a ella, pero, por supuesto, Kirika lo ignoró por completo.

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***

 

 

“Hey, es hora de comer… Oh, mierda, se está derramando. Nuu, resulta que no está muy dispuesta a comer cuando soy yo quien la alimenta. ¿Por qué?”

“Pusiste un bocado demasiado grande en esa cuchara. Redúcelo un poco, así… ¿Eh?” “¡Si Kono-san no es buena, es mi turno! Hmm, parece que hoy no está de buen humor.”

Al igual que ayer, la mesa de los Yachi estaba llena de platos que Amanda puede comer. Sin embargo, alimentar a Amanda no iba muy bien.

“No debería ser porque no tiene hambre. Estamos cenando incluso más tarde que la noche anterior.”

Kirika comentó mientras Haruaki se cruzó de brazos y reflexionó, mirando la comida en la mesa.

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“¿Elegí  el  menú  equivocado…?  Es  posible  que  haya  algo  mezclado  que  ella  odie  en particular. Uh, el único plato que aún no hemos probado es… ¿el pilaf de arroz?”

Haruaki tomó la cuchara de Amanda y con cuidado sacó un bocado de pilaf del plato, luego trató de llevárselo a los labios. Reflexivamente, ella abrió la boca pero se detuvo allí.

“Hmm…” Haruaki estaba a punto de fruncir el ceño cuando se apresuró a renovar su espíritu. No es bueno, en un momento como este, el estado de ánimo era muy importante.

“Este es un alimento en el que pongo mucho esfuerzo en cocinar. A lo largo de muchos años de investigación, finalmente innové esta receta secreta… Entonces, ven, dale un bocado y verás, ¿vale?”

Mirando fijamente el rostro inexpresivo de Amanda, él le sonrió radiantemente. Usando su expresión facial, hizo todo lo posible por decirle: No te preocupes, es muy sabroso.

“Oh, querido~. Incluso con la cálida sonrisa de Haru, quizás todavía sea un poco difícil~. Incluso las bellezas curativas como nosotras no tenemos idea~.”

“Q-Quizás. Haruaki, aunque no funcione, no te deprimas demasiado…” “Oh, ella está comiendo.”

Amanda abrió su boca un poco más ancha que antes. Después de que Haruaki insertara suavemente la cuchara en su boca, ella comenzó a masticar. Haruaki no pudo evitar sentirse encantado.

“Nuunuu… ¿¡Por qué el mocoso descarado!? ¡Claramente no quiso conmigo, pero se está dejando alimentarla tan fácilmente!”

“Hey, Fear, si hablas demasiado alto, ella podría volver a rehusarse a comer. Baja un poco la voz, Konoha, ¿podrías ayudar a darle algo de agua?”

Konoha inclinó una taza llena de agua y Amanda tragó, tal vez porque los líquidos eran más fáciles de ingerir. Adivinando que había terminado su agua, Haruaki le dio otro bocado de pilaf. Masticar, masticar, masticar. Konoha le dio agua según correspondía. Tragar.

“Excelente, sigamos así.”

“Ah… Es una pena que no me deje alimentarla, pero así… Parece que… No está nada mal. Si… y yo… tuviéramos… un niño, seguramente estaríamos cuidando al bebé como ahora… Ufu, ufufu, ¿ufufufufufufu?”

Por alguna razón, las gafas de Konoha brillaron mientras una sonrisa misteriosa parecía estar colgando en la esquina de sus labios. Sin saber de qué se trataba, Haruaki decidió no preocuparse por eso. Después de todo, alimentar a Amanda era la actual prioridad.

“Está bien, esto debería ser correcto. Siento que la he alimentado bastante.”

Por lo tanto, Haruaki bajo la cuchara. Entonces, de repente descubrió que Amanda no estaba actuando del todo bien. Aunque solo fue un cambio sutil, sus mejillas parecían un poco enrojecidas como si estuviera soportando algo.

“¿Podría ser que ella comió demasiado? No… Esto es…”

Eso. Por mucho que la llevaran allí regularmente, aún era imposible predecir con exactitud. Probablemente feliz de verla dispuesta a comer, Konoha aparentemente la había hecho beber más agua de lo habitual…

“¡Esto es una crisis! ¡Por favor discúlpenme!”

No había tiempo de sobra. Incluso desconectar los frenos de la silla de ruedas sería una pérdida de tiempo. Al llegar al asiento de la silla de ruedas, Haruaki recogió el pequeño cuerpo de Amanda. Esta fue su primera vez abrazándola. Era muy liviana.

“¡Me doy cuenta de que es una emergencia! ¡Pero, estás actuando de manera desvergonzada! Incluso si recogerla es un acto desesperado que no se puede evitar, tú… Pensar que… llevarías a esta chica al baño…”

“¡No… no voy a ir tan lejos, ¿de acuerdo?! ¡Solo la estoy moviendo, eso es todo! ¡Les dejo el resto a ustedes, chicas!”

Justo cuando Haruaki estaba a punto de salir corriendo de la sala de estar en pánico, sus sentidos lo alertaron de algo inusual.

-Abrazo. “¿Eh?”

No pudo evitar detenerse y mirar hacia abajo, a Amanda. Inexpresiva. Pero por alguna razón, los brazos de Amanda, envueltos alrededor de su espalda, parecían estar… aplicando un poco más de fuerza.

“Haruaki, ¿qué te pasa?”

“No… nada… De todos modos, ¡avancemos rápido!”

Saliendo de la sala de estar, hizo una loca carrera hacia el baño. Bajó a la chica en sus brazos sobre el asiento del inodoro, pero aún sentía una ligera fuerza de sus brazos alrededor de su espalda. Esto podría considerarse su primera reacción, aparte de tomar las manos. Una vez que la soltó, el sentimiento desapareció, para ser honesto, se sintió…

“Esto parece… un poco… una pena…”

Tan pronto como murmuró suavemente, Haruaki sintió un aura asesina detrás de él.

“¡No puedo creer que hayas dicho que es una pena! ¡Maldito seas, mocoso descarado, ¿de qué diablos estás hablando?! ¡Te maldeciré!”

“¿Haruaki-kun~? Con esto, realmente… no puedo defenderte más… No solo la abrazaste con fuerza y entraste al baño con ellas, al final, incluso dijiste que era una pena, lo sabía. ¡Cuidar de ella hasta el último paso son tus verdaderos sentimientos!”

“¡Absolutamente ridículo! ¡No lo permitiré en absoluto, hay límites a la perversión!” “No… ¡Eso no es lo que quise decir!”

Sus negaciones fueron en vano, Haruaki fue brutalmente expulsado del baño por las chicas como si estuviera atrapado en un tornado.

Habiendo llevado a Haruaki de regreso a su habitación, Kirika estaba suspirando en el pasillo. Dentro del baño, Fear y Konoha probablemente se empujaban la una a la otra, tratando de cuidar de Amanda. Este fue el primer desafío que Kirika enfrentó sola el primer día que tuvo que cuidar de Amanda. Pero una vez que sus bragas fueran removidas y urgida con una voz suave, ella definitivamente obedecería. En última instancia, Amanda escuchó sus voces en cierta medida y probablemente comprendió más o menos. En otras palabras, los circuitos mentales, capaces de manifestar estas acciones a cauda de una orden verbal definida, definitivamente funcionaban en el momento.

“¿Qué tengo que hacer…?”

Después de que Kirika murmuró distraídamente, Kuroe la miró, también esperando en el pasillo a que Amanda y los demás regresaran.

“Por cierto, Kiririn, ahora es una buena oportunidad. Me gustaría charlar un poco contigo.” “Claro, ¿de qué quieres hablar?”

“No, no es nada importante.”

Kuroe sonrió gentilmente. Nada importante. Detrás de estas palabras, Kirika podía sentir que quería hablar sobre algo serio.

“Así es, Kiririn, últimamente te has estado quedando en nuestra casa~.”

“Parece que sí. También estuve entrometiéndome aquí durante la Navidad… Perdón por causarte problemas.”

“No, definitivamente no estás causando problemas. Estoy encantada de que esta casa pueda volverse aún más animada. Entonces, lo que me gustaría decir es que es todo lo contrario.”

“¿Todo lo contrario?”

La mirada de Kuroe seguía siendo muy suave, del tipo que revelaría momentáneamente a pesar de bromear todo el tiempo, ojos profundos que eran maduros y que aceptaban con tanta calma todas las cosas como el océano.

“De hecho, será muy divertido si continúas viviendo aquí, Kiririn. Entonces, estaba pensando. En ese caso, ¿por qué simplemente no te mudas?”

Kirika contuvo el aliento. No podía decir que nunca había considerado tal cosa. Vivir juntos sería bastante maravilloso. Feliz, alegre, contenta, capaz de mirar el futuro con esperanza, todo al mismo tiempo:

Probablemente también iba a ser muy doloroso. Por lo tanto, Kirika forzó una sonrisa y dijo:

“Jaja… no tengo una razón para vivir aquí. Además, vivir con compañeros de clase bajo el mismo techo no es apropiado para un representante de clase.”

“Razón… ¿Eh? ¿Ni siquiera considerando tus maldiciones, Kiririn?”

Tal vez porque actualmente las dos estaban solas, Kuroe siguió con el asunto hasta el final. Por lo tanto, Kirika concluyó que no podía simplemente pasar por alto la respuesta y debía responderle a Kuroe correctamente.

“… De hecho, si pudiera quedarme en esta casa que posee poderes espirituales de purificación, tal vez se puedan eliminar las maldiciones de mi «Amor de Gimestorante» y

«Río Negro Trágico». Sin embargo, tampoco sé cuánto tiempo tomaría, y honestamente hablando, tampoco creo que haya ninguna necesidad de hacerlo en este momento.”

“¿Es porque no quieres perder el poder para proteger a Haru?”

“Creo que es inútil incluso si te miento. Así que, interprétalo como quieras.” Utilizando una voz y una expresión tranquilas, Kirika ocultó los latidos de su corazón. Kuroe suspiró.

“Qué obstinada… Desde mi punto de vista, creo que puedes vivir un poco más fiel a ti misma. No te molestes con conceptos complicados y difíciles como la necesidad. No te preocupes por Ficchi o Kono-san. Solo haz lo que más quieres hacer…”

“Actualmente estoy haciendo lo que quiero hacer.”

Que obstinada… murmuró Kuroe de nuevo. La sonrisa en su rostro parecía decir “no me dejas otra opción” mientras toleras de forma impotente a un niño especialmente testarudo.

“Entonces déjame hacerte una pregunta final, está bien si no respondes. Sin embargo, espero que puedas pensarlo con cuidado. En otras palabras, Kiririn, para el próximo paso, ¿planeas continuar con esto? ¿De forma indefinida?”

Esta simple pregunta terminó pesando excepcionalmente en el corazón de Kirika.

Para el siguiente paso. En otras palabras, el futuro. ¿Quién sabe? ¿Qué iba a pasar? ¿Qué quería hacer ella?

El sonido de descarga del agua provino del lavabo.

Al instante, Kuroe volvió a su tono de voz habitual, incluso más loco que de costumbre:

“Sí, esta discusión secreta ha llegado a una conclusión con una sincronización perfecta. Entonces, que así sea. Básicamente, déjame aclararme, si algo te preocupa, siéntete libre de discutirlo conmigo en cualquier momento.”

La atmósfera pesada fue liberada instantáneamente por su tono de voz excesivamente alegre. Esta era probablemente una de sus fortalezas, pensó Kirika. Cambiar a la perfección entre seriedad y no seriedad a voluntad.

Kirika sonrió irónicamente mientras decía: “Qué preocupante… ¿De qué lado estás?” “Estoy de pie del lado de todos.”

Habiendo visto probablemente a través de todo, ella continuó respondiendo con un tono de voz alegre.

***

 

 

Durante el período de ocio después de la cena, Fear estaba mirando de manera improductiva un programa de variedades en la televisión. Los contenidos del programa no parecían llegar a su mente, porque había demasiado que pensar.

Apartó un poco la mirada de la televisión y la miró a Amanda en la silla de ruedas. Amanda estaba esencialmente sentada frente a la televisión, pero Fear no podía estar segura de si realmente veía el programa.

Fear recordó la escena de su primer encuentro. En ese entonces, acababa de llegar a esta casa, todavía no estaba segura de lo que quería y no tenía idea de lo que debía hacer a continuación.

Por eso se rio como una maníaca en ese tejado, se tragó sus recuerdos, le hizo daño a Peavey e incluso intentó matar a Haruaki, y luego saltó al mar.

Realmente hice un montón de cosas estúpidas, Fear sonrió con ironía.

Mirar a Amanda hizo que Fear recordara su propia estupidez de aquella época. Sin embargo, precisamente por eso…

(Comparada con cómo era entonces… Ya soy bastante diferente.)

Ahora su deseo era muy claro. Ella no quería lastimar a nadie. Deseaba levantar su maldición y convertirse en un ser humano, sin lastimar a nadie, ser capaz de rescatar a otros.

Actualmente ante sus ojos, Amanda le estaba haciendo recordar su culpa pasada. Luego, mientras protegiera a Amanda y ayudara a su mente a recuperarse, esto sería capaz de demostrar que “ahora” y “en ese entonces” eran diferentes, lo que demostraba que ella había conquistado el pasado. Fear tenía este tipo de sentimiento.

(Entonces… la protegeré… Debido al “ahora” por el que estoy luchando.)

Después de derrotar al enemigo que quería a Amanda muerta, Fear solo necesitaba esperar hasta que su mente se recuperara. Después de eso, sería bueno intentar conversar con ella, como sugirió Fear ayer en el baño. Una vez que Himura encontrase un centro médico seguro, aunque podría llevarle mucho tiempo, debería recuperarse un día.

(Hablando de eso, hubo esa mención de que el enemigo posee “una herramienta para curar mentes”. Si esa cosa es útil, podría curarla de inmediato. Pero después de todo, al ser una herramienta maldita, es mejor que tener demasiadas esperanzas. En lugar de tratar de robar esa herramienta, proteger a Amanda debería ser lo primero.)

Fear notó repentinamente que la manta envuelta alrededor de los muslos de Amanda se había deslizado, así que se estiró y la cubrió con cuidado. Habiendo confirmado una vez más lo que tenía que hacer a partir de ahora, Fear sintió que su estado de ánimo mejoraba increíblemente. Sintiéndose muy aliviada, de alguna manera los sonidos de la televisión finalmente comenzaron a registrarse en su mente:

“¡Así que! El siguiente es el programa especial de San Valentín, increíblemente, esta vez…”

“… Oh.”

Fear había olvidado que ella todavía tenía que manejar ese problema. Mientras tanto, Kuroe estaba durmiendo la siesta en el suelo de tatami y Kirika estaba mirando la televisión. Fear acercó sus labios a la oreja de Kirika y murmuró:

“Por cierto, Kirika, ¿podemos encontrar tiempo para practicar?”

“¿Hmm? Oh, tampoco estoy segura. A juzgar por la situación actual, podría ser bastante difícil. Sin embargo… Ya sea que ese hombre encuentre un hospital o que el enemigo ataque, no debería llevar demasiado tiempo. Antes de que sea el Día de San Valentín, todo debería estar resuelto… Eso es lo que espero.”

“Sí, entonces trataré de ser paciente. Oh, sí, recientemente me di cuenta de algo muy importante, básicamente, qué tipo de chocolate le daré a Haruaki. De acuerdo con mis amplias observaciones a lo largo de la vida cotidiana, ese tipo normalmente come lo mismo: gelatina de frijoles rojos8 y papas fritas, o roba mis galletas de arroz. En otras palabras, no parece que le guste el chocolate, ¿verdad? ¡Esa es una situación muy grave!”

“Hmm… Eso es probablemente común para la mayoría de los chicos. Pero como él come gelatina de frijol rojo, eso significa que al menos no odia los dulces. Además, todavía hay otras opciones como darle chocolate negro, que no es particularmente dulce.”

8 También conocido como Yōkan en japonés, es un postre de gelatina espesa hecho de pasta de frijoles rojos, agar y azúcar.

“Eso es bastante profundo. ¿Qué tipo de chocolate debería hacer…? Perfecto, veamos este programa como una investigación.”

El tema de Amanda no se puede pasar por alto, pero Fear también debe considerar sus propios problemas. Estirándose, Fear enfocó su mirada en el programa de televisión.

El anfitrión en la pantalla dijo: “¡Vengan todos, prueben este chocolate hecho especialmente! ¡Nunca en sus sueños más salvajes esperarían probar el sabor especial de wasabi…!”

Oh~. Así que también esta ese sabor. A juzgar por el nombre, no debería ser demasiado dulce, probablemente. Ya que el anfitrión estaba sonriendo de oreja a oreja mientras hablaba y el comediante que comió el chocolate se veía bastante feliz, el sabor debe ser agradable,

¿verdad?

Muy bien, Fear lo agregó mentalmente a su lista de opciones.

Al mismo tiempo, Haruaki estaba lavando platos en la cocina con Konoha. Originalmente, Fear y Kirika se habían ofrecido a ayudar, pero demasiadas personas se entrometían entre sí, por lo que terminaron decidiendo con piedra, papel y tijeras. Dicho esto, ¿por qué el ganador lavaba los platos…? Haruaki no sintió que lavar los platos por ganar fuese una actividad tan divertida.

Pero, de hecho, Konoha estaba zumbando feliz mientras lavaba platos. Sí, comparado con alguien que ayuda de mala gana, esto fue mucho mejor, por supuesto… Pensando eso, Haruaki continuó con los platos. Desde la sala de estar, podía escuchar lo que sonaba como Fear y los otros susurrando, además del programa de San Valentín en la televisión al mismo tiempo…

(… Oh.)

Eso hizo que Haruaki finalmente entendiera. Hablando de eso, definitivamente otra vez era esa época del año. La reciente atmósfera inquieta en toda la escuela probablemente también se debió a esto. Una vez que llegó ese día, Taizou y los otros chicos seguramente iban a gritar ruidosamente: “¡Esa chica me dio chocolate!” “No, ni siquiera conseguí uno. ¡No te perdonaré!” Para empezar, a Haruaki no le importaba la cantidad de chocolate que recibía, pero el animado humor que venía de la televisión lo estaba haciendo distraerse y asombrarlo.

Si alguien me diera chocolate, ¿quién será? Por supuesto, todo será de chocolate de cortesía, así que probablemente esté limitado a las amigas con las que converso a diario. Fear muy probablemente ni siquiera entiende el significado inherente de la festividad; Kirika probablemente diría “absolutamente ridículo”, expresando total desinterés; Si Shiraho me diera chocolate, sería mejor que considerara seriamente la necesidad de probar veneno. Soberanía probablemente sería lo suficiente cabeza hueca para olvidar el chocolate en casa, mientras que Kana siempre ha sido una de esas personas que distribuyen chocolate Tirol a todos desde la escuela media:

(Entonces las únicos que probablemente me den chocolate como una persona normal serían Kuroe y… Konoha… ¿Verdad?)

Haruaki volvió su mirada hacia un lado. Junto a él estaba Konoha, felizmente lavando los platos, dándole siempre chocolate hecho a mano todos los años. En este momento, de repente dijo: “Oh, discúlpame”. Luego alcanzó el detergente frente a Haruaki. Debido a que se inclinó hacia delante, su pecho se tambaleó y se sacudió ligeramente, Haruaki frenéticamente desvió la mirada. Pero por alguna razón, esa escena se repetía en su mente sin parar. Sacudida ligera. Un bulto redondo, que parece suave pero cálido. Textura como si fuera capaz de aceptar todo. En este punto, era bastante tarde para decirlo, pero Haruaki admitió que no solo Konoha tenía una gran figura, sino que también era inteligente y muy amable. Uno esperaría que mucha gente quisiera recibir su chocolate. Y actualmente, alguien como ella estaba justo a su lado, sonriendo alegremente, estirándose para guardar un plato.

En este momento, Konoha miró a Haruaki y habló como si de repente hubiera recordado algo:

“Uh, Haruaki-kun, ¿está bien si te dejo el resto de los platos? Necesito ir a preparar el baño.”

Ella estaba sonriendo muy radiante. Haruaki no pudo evitar sentir su corazón latiendo con fuerza.

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“C-Claro, gracias por tu ayuda.”

Tartamudeó en respuesta. “Entonces cuento contigo para el resto”. Diciendo eso, Konoha caminó hacia el baño. No mucho después de eso, Haruaki también terminó de lavar los platos. Luego, justo cuando salía de la cocina, pareció escuchar su nombre en alguna parte. Rastreando el sonido hasta la fuente, en otras palabras, el área de cambio, verificó y…

“… Haruaki… kun, umm… ¿Podrías venir brevemente?”

Esta vez, definitivamente, escuchó que su nombre ser llamado. La voz de Konoha sonaba bastante nerviosa, como si estuviera reprimiendo algún tipo de emoción. Haruaki entró al área de cambio y preguntó:

“¿Qué pasa? ¿No hay agua caliente?”

“A-Algo así… En cualquier caso, por favor… entra…”

Haruaki escuchó su respuesta a través de la puerta de vidrio del baño. Por otro lado, seguía teniendo la sensación de que algo no estaba bien en el área de cambio. Hmm. Haruaki inclinó la cabeza, perplejo, y luego abrió la puerta de cristal sin pensar…

Entonces al instante, se congeló completamente.

Fue golpeado por una fragancia muy rica y dulce. Un segundo después, finalmente se dio cuenta de lo que era inusual acerca del área de cambio. Era ese olor flotando. Ah, no sólo eso. Se remitió a sus recuerdos. Había ropa en la cesta de la ropa femenina en el área de cambio. La ropa de Konoha. Eso también contribuyó a su sentimiento de disonancia. En otras palabras…

Actualmente Konoha estaba desnuda. “Umm… Haruaki… kun…”

“¿Q-Qué? No, lo siento, ¡lo siento mucho!” “¡Espera! No…”

Haruaki se detuvo justo cuando estaba girando y no pudo evitar ver.

Konoha estaba arrodillada con las rodillas juntas en el centro del piso del baño, luciendo como siempre trenzas gemelas y gafas. Desnuda, su cuerpo presentaba sus curvas femeninas y voluptuosas sin ninguna reserva. Por suerte, las áreas críticas quedaron fuera de la vista, apenas. Esto se debió parcialmente a que Konoha se sonrojó intensamente, cubriéndose con ambos brazos de manera ineficaz, pero más importante…

Era la razón por la cual el baño se llenó con el dulce aroma. Esto se debió al chocolate de aspecto muy delicioso que actualmente manchaba las ubicaciones críticas del cuerpo de Konoha.

“K-Konoha… ¿Q-Qué demonios es esto?” “¿Realmente debo explicarlo… para que entiendas…?”

Con ojos grandes y llorosos, miró a Haruaki, enderezó la espalda, levantó el torso y apartó un poco el brazo. Ahhh, eso estaba ahora aún más expuesto.

“Esto es… el chocolate de San Valentín… este año… es especial.” “¡E-Especial…!”

“Preparé esto especialmente… para hacerte… feliz, Haruaki-kun. Hecho con mucha… mucha… dedicación… Entonces… es muy delicioso… Sí, entonces…”

Konoha habló con una voz inexplicablemente aguda. Sin sentarse, lentamente extendió sus manos hacia Haruaki. Luego, envolviendo sus manos alrededor de la parte de atrás de su cuello, ella lo atrajo hacia ella.

“¡Wooooaaaaah!” Incomparablemente suave.

Tirado, Haruaki cayó hacia delante, su rostro se posó en algo… algo suave. El dulce aroma estaba en la punta de su nariz.

Konoha todavía tenía sus brazos alrededor de la parte posterior del cuello de Haruaki, sus ojos húmedos, su rostro rojo brillante, su aliento caliente.

“Por favor, ¿podrías…?” Luego susurrando suavemente:

“¿Podrías… lamer… el chocolate…?”

La mente de Haruaki se quedó en blanco por el dulce aroma, completamente incapaz de pensar. Konoha apretó sus brazos de forma débil pero irresistible, acercando aún más su cabeza. Aroma de cacao y leche, aroma, aroma, aroma. De hecho, se veía bastante delicioso. Haruaki salivó bastante. De hecho, sin lugar a dudas debe ser muy sabroso, se suponía que las cosas sabrosas se comían…

Intentando instintivamente imaginar un sabor que nunca antes había saboreado, Haruaki inconscientemente suspiró. Quizás al sentir el viento de su aliento, el chocolate ante sus ojos…

“Ah… Yah, mmm…”

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Lanzando un ardiente gemido, se estremeció una vez. Chocolate vivo, delicioso chocolate. Si no lo comiera, tal vez sería una afrenta para el chef de confitería que había creado este chocolate. Por lo tanto…

Por lo tanto, Haruaki abrió su boca ligeramente, su mente toda brumosa. Luego, lentamente, extendió su lengua, mojada con saliva, hacia allí…

De repente Haruaki se despertó. “¡Woooooaaaaaaah!”

“¿Kya? ¡C-Cuidado!”

En el instante en que Haruaki recobró sus sentidos, el plato que estaba lavando se le resbaló de la mano. Naturalmente, Konoha no había ido al baño mientras afirmaba que preparaba el baño, tampoco había preparado chocolate en el baño. Todavía lavando los platos, Konoha rápidamente extendió la mano y atrapó el plato.

Con el corazón latiendo como loco, Haruaki miró a su alrededor en la cocina y al instante se dio cuenta. Fue su imaginación: ¿en serio estaba teniendo delirios? ¿Cómo pasó esto? ¿Fue el resultado de mirar ese seno tambaleante? No, él no podía culpar a los demás. En cualquier caso, pensar que lo haría… Pensar que tendría ese tipo de delirio… Demasiado anormal. En serio… demasiado anormal.

“Haruaki-kun, ¿qué te pasa? Incluso hiciste un grito extraño.”

“No… Uh, e-eso… Eso. Debido a que se me escapó de la mano, me preocupaba que el plato se cayera y se rompiera, así que no pude evitarlo…”

“Recuerdo que el grito vino primero… No importa, en cualquier caso, gracias a Dios que no se rompió. Esto es bastante raro para ti tener este tipo de accidente, Haruaki-kun.”

Konoha sonrió con ternura. Su cara inocente y sonriente trajo un dolor punzante en el corazón de Haruaki, haciéndolo culpable de sus delirios.

“L-Lo siento.”


“¿…? No hay necesidad de disculparme conmigo con la cara roja. Todo el mundo tiene accidentes, además, el plato tampoco se rompió.”

“No, aun así, umm… Uh…”

Naturalmente, fue incapaz de explicar, sin atreverse a mirar directamente a los ojos de Konoha. Por lo tanto, Haruaki derramó toda su sinceridad y habló de nuevo:

“Lo siento.”

Por supuesto, Konoha simplemente inclinó su cabeza en desconcierto.

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