Isekai Wa Smartphone to Tomoni (NL)

Volumen 15

Interludio 1: Los Guardianes De Brunhild

Parte 2

Después de separarme de Kokuyou y Sango, regresé al castillo. Estaba un poco hambriento, después de todo. Asomé la cabeza a la cocina para ver si había algo para mordisquear.

“¡Pez amarillo cocido a fuego lento y preparado con éxito!”

“¡Buen trabajo! ¡Ponte a preparar el plato!”

La cocina estaba llena de cocineros, era tan temible como un campo de batalla. Vi a Crea, la cocinera en jefe, y a Lu, revoloteando por la cocina como verdaderas profesionales. Lu parecía que estaba luchando para mantenerse al día.

Estuvo más ocupada de lo habitual hoy, por alguna razón. Rápidamente me di cuenta de que era porque los otros líderes mundiales se habían reunido en el castillo.

No se me permitía entrar en la cocina, así que sólo podía mirar dentro. Nadie quería pelo en su comida, así que era comprensible.

“Oh, ¿Kohaku? ¿Estás aquí para almorzar? Por favor, espera un momento.”

“Por supuesto.”

Mientras estaba de pie junto a la entrada de la cocina, Renne, una joven criada en formación, me habló.

Después de un rato, Renne salió con mi comida en una bandeja. Lo llevaba con ambas manos. A un lado de la bandeja había tortilla de arroz y sashimi, preparada por Lu. En el otro lado había varias rebanadas de carne y queso.

“¿Estás comiendo en el balcón?”

“Sí. Aprecio tu ayuda.”

Renne caminó conmigo y llevó mi comida al balcón fuera del comedor. Cuando hacía buen tiempo, me gustaba comer en el patio o en el balcón. Hoy me apetecía comer en el balcón. Pensé que era el mejor lugar para empaparse de la luz del sol.

“…Hmph.”

“…Hmph.”

Había otra persona en la mesa del balcón. La vista de ella hizo que mi brillante día se volviera un poco más oscuro.

“¿Comiendo aquí, Kohaku?”

“Podría preguntarte lo mismo, Luli.” Entrecerré los ojos ante la dragona que estaba sentada frente a mí. Parecía una bebé, pero muy parecida a mí, era una Bestia Celestial convocada por mi maestro.

Para ser sincera, la odiaba a muerte. No me gustaba hablar con ella, y siempre me daba dolor de cabeza. Tenía hambre, pero verla me hizo querer dejar mi almuerzo atrás.

Silenciosamente miré mi comida, ignorando a la dragona lo mejor que pude. Le di un mordisco. Era maravilloso. Me alegró que la calidad de las comidas hubiera aumentado considerablemente en los últimos meses. La comida por sí sola era suficiente para que yo estuviera agradecida de que mi maestro me hubiera llamado a este mundo.

“Kougyoku me visitó no hace mucho…”

“¿Hm?” Levanté mi cabeza y me giré hacia la dragona mientras ella hablaba. Me preguntaba qué quería Kougyoku de Luli.

Esa irritante dragona estaba a cargo de cuidar el castillo, y sus dependientes ocasionalmente observaban los cielos que rodeaban el área inmediata.

“Dijo que hay gente sospechosa en la ciudad. ¿No se supone que ese es tu trabajo? ¿Has estado holgazaneando?”

“Oh, no es gran cosa. Actualmente tengo un individuo muy talentoso que busca información.”

“Oh, ¿es eso cierto? ¿Estás segura de que estás al tanto? Si estás eludiendo tus responsabilidades, a nuestro señor no le gustaría mucho, ¿verdad? ¿Estás segura de que no estás durmiendo y comiendo en vez de cuidar de este país?”

“¡Silencio! ¡Intento disfrutar de mi comida y tú la arruinas con tu charla!”

“¡ha! Eso es todo lo que te importa, ¿no? A veces me pregunto si siquiera… ¡Bwah!”

“¡Cierra la boca, pequeña… Gwah!”

Renne caminó hacia nosotros y nos agarró de la cabeza. ¡Hey, ya basta!

“Vamos, todos ustedes… Si sigues así, Touya se enojará mucho contigo, ¿verdad? Disfruta tu almuerzo en su lugar.”

“Gh… Pero…”

“Gah…. ¡Señorita Renne, por favor no se lo diga!”

Esto estuvo mal. Nuestro maestro había prohibido las peleas entre Luli y yo. Aunque sólo estuviéramos discutiendo verbalmente, no quería que me castigaran por sus burlas.

Después de todo… El castigo en el que incurriría era… tan terrible…

Por la mirada de Luli, ella también recordaba el castigo. Estaba visiblemente temblando. Decidí maldecirla en silencio. Eventualmente, fuimos liberadas de las garras de Renne, y Luli terminó su comida.

“De cualquier manera, llámame si necesitas que me encargue de ello. No estoy en contra de ayudar en asuntos nacionales.”

“Muy bien. No creo que te necesite, pero lo tendré en cuenta”.

Luli agitó sus alas y se marchó del balcón. Sólo la llamaría si la situación se volviera muy grave.

En su mayor parte, sólo necesitaba asegurarme de que nuestro maestro no tuviera inconvenientes.

Terminé mi comida, hice que Renne me limpiara la boca con una servilleta y luego regresé a la ciudad después de un breve descanso.

Esperaba que el Sr. Mittens obtuviera buenos resultados de su investigación.

***

Cuando regresé a la ciudad, un par de gatos llamaron mi atención. Aparentemente, el Sr. Mittens había descubierto algo.

Los gatos me guiaron por la parte de atrás del bar junto al gremio. Allí encontré al Sr. Mittens y a los tres mosqueteros felinos. Si no recuerdo mal, se llamaban Aramis, Athos y Porthos. Cuando me presenté ante ellos, todos se arrodillaron sobre una rodilla como si se inclinaran.

“No hay necesidad de inclinarse. ¿Qué descubriste?”

“Descubrimos que los mercaderes sospechosos no se alojaban en la posada Luna de Plata, que sería el punto de parada habitual de los hombres de su profesión. En vez de eso, se están quedando en las afueras de la ciudad, en la Posada del Bosque Harmonium”. Athos, uno de los tres caballeros, habló.

Hmm…. Esto es interesante, pero no exactamente concluyente. El Bosque de Harmonium no es exactamente un mal lugar, pero todos los comerciantes tienden a quedarse en la Luna de Plata porque está en el centro de la ciudad, y un centro ideal para las operaciones de comercio….

Además, había muchos caballeros en el área debido al lugar. Era la posada más segura que te puedas imaginar. No tenía sentido que se quedaran en el Bosque del Harmonium, ya que ese lugar era una posada de aventureros. Eso me hizo pensar que quizá tenían un problema con los caballeros de la ciudad.

“Hemos estado vigilando, pero ni los comerciantes ni sus acompañantes han salido de su habitación en un tiempo. Puede que todavía estén durmiendo.”

“¿Viajan con aventureros? Pensarías que se habrían detenido en el gremio…”

“Además, aquí está la maldita evidencia. Inspeccioné su carga, y son varios paquetes de madera de bestia bajo una sábana protectora. Es muy probable que la madera de bestia encontrada por los Monarcas Negros cayera de su carreta. La cantidad que encontramos sería suficiente para causar una estampida masiva si se colocara estratégicamente en toda la ciudad. Incluso con nuestra barrera protectora en su lugar, interrumpiría en gran medida nuestra economía y estoy seguro de que cualquier bestia mágica fuera de la ciudad se acercaría lo más posible. Las carreteras terminarían cerradas y los ciudadanos estarían encerrados”.

Hrmm…. Eso sería muy malo. Toda la actividad comercial terminaría cesando, y no podríamos conseguir suministros frescos…. Lo único positivo de esto sería que los aventureros podrían ganar una tonelada de dinero matando a los monstruos….

“¡Estoy seguro de que planean quemar toda la leña en la ciudad por la noche! “¡Pondrán la madera de bestia en el suelo y luego traerán la maldita meowtta aquí!”

Estoy de acuerdo con el Sr. Mittens. Si lo hicieran a plena luz del día, serían descubiertos en un instante. Además, la madera de bestia tenía un olor muy fuerte que podía ser olfateada fácilmente. No había tanta gente afuera por la noche…. Especialmente en el distrito de las compras.

“¿También lograste identificarlos?”

“Lo hicimos. Según la red de información que empleamos, estos hombres son de Sandora. Una vez fueron esclavistas. Tal vez buscan destruir este país como un acto de venganza…”

Sandora… Ah, ese es el país de los esclavos que mi maestro destruyó. Dada la cercanía de ese país al Mar de los Árboles. Tiene sentido que tengan acceso a la madera de bestia.

Probablemente habían perdido a sus esclavos, y su sustento con ello, así que vinieron aquí en un acto de venganza desafiante.

Probablemente pensaron que como este era un país tan pequeño, la destrucción de su ciudad castillo sería fácil. Qué ingenuo.

“Sigue vigilándolos por ahora. Si toman medidas, infórmenme de inmediato”.

“¡Muy bien!”

Con un poco de suerte, se irían sin hacer nada turbio, y podríamos confiscar la madera de bestia. Pero si decidieran actuar contra la nación, los eliminaríamos.

Esperaba que vieran el error de su camino y se fueran.

La noche finalmente cayó. Y poco después de medianoche, un gato vino a buscarme.

“…Así que lo han hecho, entonces.”

Eran idiotas, claramente. Parecía que tenía que darles una lección personal.

KJun: Revisado y corregido.