Arifureta Shokugyou de Sekai Saikyou (NL)

Short Stories

Extra 5: Proyecto De Remodelación De Myu

Hajime estaba transmutando algo fervientemente mientras estaba secuestrado en una de las habitaciones del palacio en las profundidades de las Cavernas de Hielo,

“¿Hm? ¿Qué estás haciendo, Nagumo-kun?” Shizuku, que pasaba por el lugar, asomó la cabeza a la habitación y preguntó eso.

Hajime miró por encima de su hombro y dijo, “Estoy intentando hacer un artefacto que pueda alterar las apariencias”.

“¿No deberías simplemente rendirte en su lugar? Iré a la comisaría contigo si quieres”, respondió Shizuku con cara seria y continuó: “No te preocupes, estoy dispuesta a esperarte hasta que salgas de la cárcel”.

“¿Por quién me tomas? Esto no es para mí, de todos modos. Es para Myu.”

Hajime abrió su puño, mostrando a Shizuku el pendiente que tenía en la mano. Ladeó la cabeza y preguntó, “¿Por qué para ella?”

“Piénsalo, sus orejas se destacarían en mi casa. Las de Shea también, ahora que lo pienso. Si las personas habituales de Akiba se enteraran de cómo es ella realmente, se pondrían como locos.”

“No creo que Akiba sea tan malo… pero bueno, entiendo lo que intentas decir.” Shizuku asintió con la cabeza en señal de comprensión. Los hombres-bestia no podrían vivir pacíficamente en Japón a menos que tuvieran alguna forma de ocultar su verdadera apariencia.

“Sí, básicamente. Además, quiero dejar que Myu vaya al jardín de niños y a la escuela primaria en Japón si eso es lo que quiere. Y si Remia se va a unir a nosotros en Japón, tengo que asegurarme de que pueda salir en público sin llamar la atención…”

“Hehehe. Oh Nagumo-kun…” Shizuku se rió. Pensó que era muy bonito que Hajime estuviera dispuesto a llegar tan lejos por la hija adoptiva que había encontrado accidentalmente. De hecho, fue este lado de Hajime el que la hizo enamorarse de él en primer lugar.

“¿Hay alguna manera de que pueda ayudar? Haré todo lo que esté a mi alcance,” preguntó Shizuku con una sonrisa. Ella estaba dispuesta a hacer cualquier cosa por el hombre que amaba.

“¿De verdad? En ese caso, ¿podrías ser mi sujeto de prueba?”

“Espera un segundo”.

“Primero, quiero que le eches un vistazo a esta pluma de plata. Se supone que borra tus recuerdos cuando destella.”

“Espera un segundo”.

“No te preocupes, sólo borrará unos pocos segundos de recuerdos. Y no los reemplazará con otros falsos como los dispositivos de memoria usados por los agentes de cierta agencia de lucha contra los extraterrestres. Pero tiene esta ingeniosa capacidad de lavado de cerebro… eh, quiero decir, de sugestión hipnótica que…”

“¡Alguien, ayúdeme! ¡Tenemos un científico loco suelto!” Shizuku gritó. Ya no estaba dispuesta a hacer nada por el hombre que amaba. De hecho, le tenía bastante miedo. Quería huir de él lo más rápido posible.

“Está bien, de verdad. Incluso si algo  sale  mal, ¡tenemos magia de restauración! ¡Prometo que no será tan malo! ¡Sólo quiero hacer algunas pruebas! ¡Por favor, sólo unas pocas pruebas!” dijo Hajime con los ojos inyectados en sangre mientras caminaba lentamente hacia Shizuku. Dio unos pasos hacia atrás, sosteniendo sus manos de forma protectora delante de sus ojos. Ella también había visto esas películas, así que sabía lo que le podía pasar. Unos segundos más tarde, Yue y las demás entraron corriendo en la habitación.

“¿Hajime-kun? ¿¡Qué estás tratando de hacerle a Shizuku-chan!?” Kaori gritó.

“Sólo unos pocos experimentos de memoria”.

“¡Se ha convertido en un científico loco! No, ¡un sinergista loco!”

“¡Regresa a tus sentidos, Hajime! ¡Cielos!”

“¿Debería utilizar la magia espiritual con él también? Sólo espero que eso sea suficiente…” Tío preguntó. Entonces, su magia espiritual iluminó el cuerpo de Hajime, que había sido aplastado en el suelo por la magia de la gravedad de Yue. Shizuku corrió hacia Kaori y se aferró a ella para que la consolara.

“Kaorin, ¿cómo se enamoraron tú y Shizushizu de Nagumo-kun en primer lugar?” Suzu preguntó con incredulidad.

“En serio, ¿¡cómo ha pasado eso!?” Kouki y Ryutarou gritaron, asintiendo de acuerdo con Suzu.

Algún tiempo después, Hajime estaba sentado en el suelo ante Yue y los demás.

“¿Has reflexionado sobre tus acciones, Hajime-kun?” Preguntó Kaori, con una voz muy dura.

Hajime asintió dócilmente, y luego dijo: “Me doy cuenta de que no debería haber intentado usar a Yaegashi como sujeto de prueba”.

“Eso suena demasiado como una respuesta ensayada para mi gusto, pero si realmente has reflexionado…”

“Prometo que en el futuro elegiré a mis sujetos de prueba con más cuidado”.

“¡Esa no es la parte en la que se supone que debes reflexionar!”  Kaori  gritó desesperadamente. Sin embargo, Hajime simplemente la ignoró y se giró para mirar a Kouki.

“Espera, ¿por qué me miras a mí?” Kouki preguntó mientras daba unos pasos hacia atrás.

“Estaba pensando que de todas las personas aquí, tú eres el que podría querer borrar sus recuerdos más recientes.”

“…B-Bueno, te equivocas.”

“Vacilaste por un segundo, Kouki”, señaló Ryutarou, lo que hizo que Kouki desviara torpemente su mirada.

“Entonces, ¿por qué quieres hacer algo así?” Yue preguntó, con curiosidad.

“Para ayudarme a tratar con los funcionarios del gobierno en Japón. Si quieren vivir en la sociedad japonesa, necesitarán tener certificados de nacimiento y demás documentos.”

Documentos como esos eran necesarios para obtener un seguro médico, obtener licencias de conducir e identificaciones, inscribirse en una escuela y casi cualquier otra cosa que alguien quisieran hacer.

“Vamos a tener que falsificar muchos datos y soy un aficionado a ese tipo de cosas, así que será mejor hacer que un profesional lo haga y borre sus recuerdos después”.

“¿Por eso hiciste un dispositivo de lavado de cerebro y alteración de la memoria?”

Shizuku no era la única persona que se veía horrorizada al darse cuenta de eso. Todos los demás también lo estaban. Hajime no parecía preocupado en absoluto y respondió felizmente, “Sí. Y por si acaso alguien intenta secuestrar a Myu, he hecho unas cuantas armas para ella”.

Hajime sacó un revólver en miniatura, un pequeño lanzacohetes, una espada, un martillo, un látigo, hilos de acero, algunos cross bits, una puerta transportadora personalizada, la lista continuó.

“¿Estás planeando enviar a Myu-chan a la guerra?”

¡Una joven no necesita todo eso para vivir en paz en nuestra sociedad! ¡De hecho, darle todo eso hará que la paz sea imposible! ¡Necesito alejar a Myu-chan de Nagumo-kun antes de que la convierta en un monstruo! Shizuku pensó para sí misma.

“¡No lo entiendes! ¡Una chica guapa como Myu va a ser el objetivo todo el tiempo! ¡No puedo dejar que salga herida!” Hajime discutió acaloradamente.

Todos, incluso Yue, miraron a Hajime con asco. Preguntándose por qué no podían entender algo tan simple, Hajime se encogió de hombros y añadió, “Mira. Ya sabemos que hay al menos una organización que irá a por Myu.”

No hay forma de que eso sea cierto… Yue pensó para sí misma.

“Las Hermanas del Alma”.

Shizuku, Kaori, Suzu, Kouki y Ryutarou se endurecieron al oír ese nombre. Lo triste es que sabían que Hajime tenía razón. Yue, Shea y la tripulación del Tortus sólo conocían a las Hermanas del Alma que existían en Heiligh, así que todos estaban confundidos por la proclamación de Hajime. No podían entender lo que las Hermanas del Alma tenían que ver con Myu.

“Esas bastardas no dejan que ningún hombre se acerque a Yaegashi, pero tampoco permiten que ninguna persona actúe como su hermana menor. Creen que Yaegashi pertenece a todas, lo que la convierte en la hermana mayor de todas.”

“Hajime… No tengo ni idea de lo que estás hablando.”

Hajime ignoró la pregunta de Yue, manteniendo su mirada enfocada en Shizuku.

“Yaegashi. ¿Realmente crees que serías capaz de tratar a Myu como cualquier otra niña cuando te llame Shizuku-oneechan?”

Shizuku se mordió el labio. No sólo le gustaban las cosas bonitas, sino que Myu también era la hija adoptiva de Hajime. Sabía que no podría evitar darle a Myu un trato especial.

“Quién sabe lo que esas fanáticas podrían hacer una vez que se pongan celosas… No estoy dispuesto a arriesgarme a que ocurra un incidente.”

La discusión de Hajime estaba empezando a ganar a las chicas. Pero por si acaso, mostró su bolígrafo de plata mientras la atención de ellas estaba sobre él.

Un segundo después, Yue y las otras intercambiaron miradas y murmuraron, “Tienes razón…”

“Además, ¿qué pasa si alguien descubre que es un Dagon? Quién sabe qué organizaciones gubernamentales irán tras ella si eso sucede. ¿No tienes miedo de lo que puedan hacer? ¿¡No te importa Myu en absoluto!?” Hajime gritó.

Esta vez, disparó un flash de luz roja con su bolígrafo. Yue y los demás tenían los ojos vidriosos esta vez.

“¡Nos preocupamos por ella!” gritaron al unísono.

Disparando un último destello de luz, Hajime terminó preguntando, “Entonces, ¿no deberían todos ayudar a enseñar a Myu a defenderse también?”

“Mmm… ¡Pensaré en una manera de hacer posible que Myu use la magia!”

“¡Le enseñaré el combate cuerpo a cuerpo!”

“¡Le enseñaré a manejar las espadas de doble filo!”

“¡Le enseñaré el estilo Yaegashi!”

“¡Y le enseñaré cómo convertir el dolor en poder!”

“¡Quizás pueda enseñarle magia de barrera!”

“¡Escribamos todo esto, chicos!”

“¡Déjamelo a mí, Ryutarou! ¡Lo grabaré todo!”

Yue y los ojos de los demás estaban inmersos en el tema ahora. Hajime, sin embargo, simplemente asintió con la cabeza en aprobación y murmuró, “Hmm, todavía hay espacio para mejorar, pero esto es definitivamente utilizable”.

Nadie puede detener al loco sinergista Hajime ahora. Cuando Kouki terminó de escribir las ideas de todos, tenía casi el equivalente a una guía telefónica. Cuando Myu-chan llegara a la tierra, ella sería una fuerza a tener en cuenta.

-FIN DE LAS HISTORIAS CORTAS-