Amagi Brilliant Park

Volumen 6

Capítulo 3: Fuera del Túnel

Parte 6

Cuando abrió los ojos, era de mañana al día siguiente. Estaba en el sofá de cuero en su oficina con aire acondicionado. Isuzu estaba durmiendo detrás del mostrador de recepción, pero se despertó en el momento en que Seiya se movió. Él le preguntó qué había pasado.

Explicó que lo había encontrado desmayado frente al carrusel y lo trajo de vuelta a la oficina. Al parecer, se había quedado despierta toda la noche para cuidar de él. Aparentemente fue solo agotamiento, pero…

“¿Cómo está Latifah ahora?”, Preguntó.

“Su condición no ha cambiado”, le dijo Isuzu. “Como se esperaba, su memoria no ha vuelto…”

“Ya veo…” Isuzu estaba abatida, pero Seiya no se sacudió por las noticias. Realmente no había esperado nada más. Estaba empezando a tener una idea vaga sobre lo que debía hacer; aún no estaba completamente claro, pero sintió que había una respuesta en alguna parte.

Tal vez debido a la naturaleza de labios cerrados de Seiya sobre el incidente, Isuzu no se entrometió con respecto a lo que había sucedido en el carrusel. Explicó que Obiza y Moffle estaban tomando turnos para observar a Latifah.

Seiya se lavó, tomó una taza de café y regresó a la oficina. Isuzu solo estaba revisando su correo electrónico; ella entrecerró los ojos hacia el monitor y luego jadeó.

“¿Qué pasa?”, Preguntó Seiya.

“No lo creo”, dijo. “Cosmic Studios está solicitando una asociación comercial…”

“Oh”. Él también esperaba eso. Ahora todo se reduciría a negociaciones, negociaciones deprimentes sobre la mejor manera de mantener el parque con soporte vital. Digimaland o Cosmic Studios: ninguna asociación podría conducir a nada bueno.

***

Esa noche, decidieron un lugar para reunirse y discutir extraoficialmente. La idea era que Digima y Cosmic harían sus propuestas, y AmaBri ofrecería su propia opinión. No hay negociaciones individuales; las partes involucradas lo pondrían todo sobre la mesa, como si estuvieran en una subasta. Los involucrados se mantendrían al mínimo, y para simplificar las cosas, los mortales que no sabían sobre la situación más amplia tendrían prohibido asistir.

La reunión fue idea de Seiya. Isuzu se había preocupado por si aceptarían, pero Seiya sabía que lo harían, y de hecho, tenía razón.

Justo antes de la reunión, Seiya fue al jardín de la azotea y encontró a Moffle esperando allí. Hoy se quedaba con Latifah, dejando la mayor parte de su trabajo en el parque a una persona disfrazada. “Latifah está descansando, fumo. Su memoria no ha cambiado”.

“Ya veo…” Seiya quería hablar con ella antes de la reunión, pero… Nada que hacer al respecto. Además, en su condición actual, explicar la situación probablemente la asustaría y confundiría.

“Moffu… Enfrentando a Digima y Cosmic uno contra el otro, ¿eh? No estoy seguro de que se me haya ocurrido, fumo”. Isuzu debe haberle explicado la situación a Moffle, quien parecía sorprendentemente aceptarlo.

“Me pregunto”, respondió Seiya. “Bueno… parecía una forma de conseguirnos condiciones ligeramente mejores, al menos”.

“Solo un poco mejor, ¿fumo?”

“Sí. Es un tipo de situación de menor de dos males”.

“Moffu…”

Ambos se sentían agotados. Era difícil estar alegre cuando estaban a punto de librar una guerra de ofertas por AmaBri.

“Ya hay rumores sobre el elenco, fumo”.

“¿Sobre la oferta?” Aclaró Seiya.

“Moffu. Los únicos que lo sabemos son usted, yo e Isuzu, así que no creo que se haya filtrado de nuestro lado. Si tuviera que adivinar…”

“¿Mackey?”

“Sí. Sospecho que estaba hablando con alguien del elenco en las redes sociales y lo dejé pasar. Es su forma de sacudirnos, fumo”.

“Hmm. Muy caballeroso, ese viejo amigo tuyo,” comentó Seiya.

“Basta, fumo”. Moffle agitó su pata con disgusto.

“¿Vienes a la reunión?”

“No, me quedaré aquí con Latifah”, decidió Moffle. “Pero no te preocupes. No importa lo que decidas, te apoyaré”.

“Ya veo. Me voy, entonces”.

“Seiya. No te esfuerces demasiado, fumo”.

“……… Correcto”. Seiya dejó el jardín de la azotea. No te esfuerces demasiado, ¿eh? pensó para sí mismo mientras bajaba por el ascensor del Castillo Maple. Eso fue más o menos lo que Latifah también le había dicho… Isuzu seguramente diría lo mismo; también lo harían los demás.

Una vaga imagen comenzaba a formarse en el fondo de su mente. Un camino completamente diferente a tomar… uno que él también podría disfrutar. Podría funcionar, pensó. Desafortunadamente, su razón fue rechazar rotundamente la idea.

***

Justo cuando Seiya regresó al edificio de asuntos generales, recibió la noticia de que Mackey había llegado.

“Él viene en automóvil hoy”, le dijo Isuzu.

“Que sorpresa”, respondió Seiya. “Pensé que querría asustar a nuestro elenco con otra llamativa entrada de helicóptero…”

Fue al estacionamiento de los empleados. Una limusina, de cuerpo largo como un perro salchicha, estacionó allí, y Mackey salió y habló: “¡Jaja! Quería traer mi helicóptero, ¡pero estaba fuera por mantenimiento! ¡Jaja!”

“Bueno, esa limusina ciertamente es lo suficientemente llamativa…” observó Seiya.

“Elegante, ¿eh? ¡También es a prueba de balas, jaja! ¡Podría sobrevivir a un golpe directo de un juego de rol!”

Seiya había notado el grosor de la puerta cuando Mackey salió; 30 centímetros como mínimo.

“De todos modos, Kanie-kun!” “¿Sí?”

“¡No puedo creer que me estés haciendo una oferta contra Cosmic! ¡Eso es lo que yo llamo hardball! ¡Jaja!” El comportamiento de Mackey era brillante y alegre, pero no parecía un cumplido.

“Estamos desesperados, después de todo”, señaló Seiya.

“¡Sí! ¡Pero solo estaba tratando de ayudarte, yanno! ¿Así es como me pagas? ¡Es casi suficiente para que un chico deje de jugar bien! ¡Jaja!”

Sí, está enojado. Pero Seiya había esperado eso. Mackey era bastante agradable, pero también era un hombre de negocios astuto, y ciertamente no estaba del lado de AmaBri. Seiya estaba lista para usar su magia sobre él en cualquier momento.

Mackey fue acompañado por dos hermosas rubias; su secretaria y su abogada, al parecer. Uno tenía orejas de gato y la otra orejas de perro, por lo que probablemente eran residentes de los reinos mágicos.

La delegación de Cosmic Studios llegó unos minutos después. Estaba compuesto por “Kurayama” y dos de sus subordinados. Los subordinados eran hombres de mediana edad, sus apariencias tan poco notables que casi no se notaron. A Seiya se le ocurrió que podrían no ser realmente humanos, sino títeres controlados con magia.

“Kurayama, Cosmic Studios”. “Kurayama” le tendió una tarjeta de presentación. Isuzu lo aceptó cortésmente y le entregó el suyo. Ella no parecía tener la menor idea de que él era Idina, o el ex Kurisu Takaya, a pesar de que su apariencia era exactamente la misma. Seiya fue el único que lo reconoció, entonces; Se preguntó qué tipo de hechizo había detrás.

Seiya tampoco le había contado a Isuzu sobre la verdadera identidad de “Kurayama”. Decir que desaprobaría las negociaciones con ese mago sería quedarse corto. Incluso podría tratar de matarlo en el acto, y por muy catártico que fuera, no podían permitirse el lujo de deshacerse de él; aún podría ofrecer una pista sobre cómo curar la maldición de Latifah.

E incluso si Seiya pudiera convencerla de esperar, saber que el mago malvado estaba allí probablemente la estresaría. Podía decirle más tarde.

“… ¿Qué pasa, Seiya-kun?” Preguntó Isuzu, sonando preocupada.

“Bueno…” se cubrió.

Mientras observaba la interacción, la ceja de “Kurayama” se arqueó hacia arriba. Debe haber razonado que Seiya no le había dicho a Isuzu su verdadera identidad. “… Gracias por considerar la solicitud de mi empresa. Espero que podamos construir una relación de beneficio mutuo “, dijo “Kurayama”. Podría haber parecido su burla habitual, pero Seiya sabía que no era realmente lo que era; él estaba trabajando duro para ocultar su disgusto al ser arrastrado aquí por Seiya.

“Es… un placer, de verdad”, dijo cortésmente Isuzu, aunque todavía parecía un poco insatisfecha. Tal vez ella podía sentir que algo estaba mal.

Se trasladaron a la sala de conferencias en el edificio de asuntos generales. Mackey y “Kurayama” se saludaron cortésmente; Mackey hizo una pequeña charla (de una manera que sugirió un poco de malicia), y “Kurayama” sonrió y lo soportó. Mackey tampoco parecía darse cuenta de con quién estaba tratando, al menos hasta donde Seiya podía ver.

“Bien, ¡sigamos adelante! ¡Jaja! ¡Tengo una sesión de fotos mañana en California!” Y con eso, comenzó la reunión. Las nuevas condiciones de Digimaland fueron un poco más relajadas que antes. La única mejora importante fue la garantía de que las atracciones más populares de AmaBri, las cinco principales, permanecerían intactas. Eso significaría la Casa de los Dulces de Moffle, el Teatro Musical de Macaron, la aventura de flores de Tiramii, Aquario y los campos de entrenamiento de Rubrum. Por el contrario, eso significaba que todas las otras atracciones terminarían cerradas, incluido el espectáculo en el escenario que actualmente estaba ganando popularidad y la piscina solo para el verano. Algunas otras condiciones también mejoraron, pero la mayoría del elenco todavía estaba destinado a perder sus trabajos. “¡Jaja! ¡He estado pensando muchísimo sobre esto! ¡Espero que tomes una sabia decisión! ¡Jaja!”

Seiya no podía negar el mérito de ello. Como Mackey había dicho durante su última reunión, Digimaland les estaba haciendo una oferta extremadamente poderosa. Eran capaces de abrir toneladas de atracciones, rápidamente, basadas en IP extremadamente famosa y mundialmente conocida. Cualquier otro administrador de un parque insignificante saltaría a la oferta.

“Ahora, nuestra propia oferta”. Cosmic Studios tomó su turno. Las condiciones que ofrecía “Kurayama” eran extremadamente atractivas. Lo más dulce fue en lo que respecta al problema de asistencia de tres millones: Cosmic Studios tenía una buena relación con Amagi Development, y afirmaron que si se aceptaba su oferta, podrían reducir el requisito de asistencia a dos millones. Entonces, incluso si Amagi Development no aceptara, Cosmic asumiría la carga de las ganancias perdidas.

En otras palabras, para todos los efectos, el requisito de asistencia de tres millones se relajaría a dos millones. Dos millones. Esos eran números que AmaBri, en su estado actual, podría alcanzar con sus propios esfuerzos.

Las condiciones de la oferta en sí eran mucho mejores para ellos que las de Digima, también. Podrían conservar casi el doble de las atracciones y podían garantizar trabajos para al menos el 50% de sus empleados, incluido el elenco detrás del escenario. La IP ofrecida no pudo alcanzar la popularidad de Digima, sin duda, pero tuvieron dos o tres visitas recientes. El problema principal era que el nombre del parque se cambiaría a Tokyo Cosmic Studios; ni siquiera “Kurayama” podría bloquear la opinión de la compañía al respecto. Aun así…

“Jaja… supongo que Cosmic es bastante serio, ¿eh?” Las condiciones fueron suficientes para arrojar algunas nubes de lluvia sobre la disposición soleada de Mackey.

“Está bien, ahora que ambas ofertas están sobre la mesa…” Seiya dijo, mirando a Isuzu. Ella parecía abatida; comprensiblemente.

Cualquiera de los dos acuerdos significaría el final de AmaBri tal como lo conocían. Incluso en el mejor de los casos, perderían la mitad de sus compañeros de trabajo, e incluso si todos lograran encontrar nuevos empleos de inmediato, la pérdida afectaría el estado de ánimo del parque.
¿Bebidas en la calle comercial Suzuran? Nunca volverían a suceder.

“… He preparado habitaciones separadas para cada grupo. Si desean revisar sus condiciones, siéntase libre de ir allí y discutir”, dijo Seiya, finalmente. En otras palabras, estaba diciendo, “si tienes otra carta para jugar, ahora es el momento”. Todavía no llegaría a un acuerdo final, pero las condiciones que traigan a continuación determinarán el ganador en esta batalla.

Mackey y “Kurayama” miraron a Seiya, sus modales algo tensos. Seiya los ignoró, fingiendo inocencia. Ambas partes externas salieron de la sala de conferencias, y después de guisar por unos minutos, Isuzu habló: “¿Estás… seguro de esto?”

Seiya no dijo nada.

“No hay forma… de salvar a todos en el parque”, admitió Isuzu. “Y no sé qué pasará con Su Alteza”.

“Sí, cierto”, estuvo de acuerdo.

“Si el parque cambia… Lord Moffle puede irse”, continuó. “Como lo haré yo”.

“Igual que aquí. Encontrarán una excusa para sacarme del juego”.

“¡Pero entonces…!” Comenzó Isuzu, luego se sofocó. “Ah… perdóname. No es que tenga una idea mejor… ”

“Correcto.”

“Estoy tan cansada de esta conferencia”, suspiró. “Solo quiero huir”.

“Igual que aquí. ……” En ese instante, en algún lugar en el fondo de la mente de Seiya, surgió una idea. “¿Que acabas de decir?”

“Estoy cansada de eso.”

“No es que… espera, espera…”

“¿Seiya-kun?”

“Espera un minuto. Déjame pensar… hmm… La vaga idea que había estado flotando en su mente comenzó a tomar forma genuina. Una mejor forma de hacer las cosas. Un enfoque más inteligente… ¿Era esto lo que la gente llamaba inspiración? “Hey, Sento”, dijo.

“¿Sí?”

“Tengo hambre. ¿Por qué no nos olvidamos de esos idiotas y tomamos un bocado en alguna parte? ”

Isuzu lo miró incrédula. “¿Qué estás diciendo?”

“Justo como suena”, explicó. “Esto no es divertido, así que vamos a dejarlo”.

“Pero… no podemos, ¿verdad?”

“Hmm… supongo que no. Esperaremos un poco más, entonces”. Jugó con el monitor de la sala de conferencias y prendió algo de televisión. Había un programa de variedades sin sentido; los artistas en un stand escalonado decían cosas graciosas. Seiya se aclaró la mente y lo disfrutó.

Unos treinta minutos después, Mackey y “Kurayama” regresaron a la sala de conferencias.

“Disculpas por la espera”.

“¡Jaja! Sí, ¡perdón por eso! ”

Realmente deben haberse torcido los sesos al llevar un bisturí a sus condiciones, ninguno quería que el otro tuviera el parque.

Pero la respuesta de Seiya fue: “Lo siento, pero he decidido rechazarlos a ambos”.

Toda la sala quedó en silencio por un momento. Incluso Isuzu no pudo hablar.

“¿Jaja…?”

“¿Y qué… quieres decir con eso exactamente?”, Dijo cada uno.

Seiya solo agitó una mano molesta, con los ojos fijos en el programa de variedades. “Rechazo sus propuestas. Me di cuenta de que era estúpido, así que hemos terminado. Nosotros nos encargaremos de las cosas de aquí en adelante. Váyanse a casa.”

Mackey y “Kurayama” se enfurecieron, demasiado enojados al principio como para hablar.

“¿Jaja…? ¿Qué estás diciendo? Estás muerto al ritmo que vas. ¿No te das cuenta de eso? Como puedes-”

“Cállate y vete, rata plaga”, Seiya le dijo rotundamente.

“¡¿Eh?!”

“Tienes un rodaje en California, ¿verdad? Así que olvídate de nuestro pésimo parque”.

“… ¡Jaja! Cómo te atreves…”

“Te dije que te perdieras”. Seiya finalmente apartó los ojos de la televisión y lo miró directamente. Él activó su magia (te ahorraremos los detalles). “No quieres que tu esposa sepa los juegos que estás jugando con tu pequeña secretaria, ¿verdad? Y no quiero decírselo. Así que vete a casa”.

“Jaja…” Riendo, Mackey se despidió.

Seiya luego se volvió hacia “Kurayama”. “¿Todavía estás aquí? Vete.”

“… ¿Cuál es exactamente tu juego aquí?” Su tono era comprensiblemente reservado; Su sospecha superó su ira.

“He cambiado de opinión”, dijo Seiya brevemente. “Y estoy harto de mirar tu estúpida cara”.

“Pero estás en una situación tan desesperada…”

“Cállate”, dijo Seiya, transmitiendo su total disgusto con el proceso. “Estoy harto de ti. No importa qué trucos sucios intentes hacer, mis aliados y yo te detendremos. Lo superaremos”.

“¿Qué estás diciendo?” “Kurayama” preguntó. “¿Cómo conseguirás a tres millones de personas?”

“-¿Sin ayuda? De hecho, tengo una gran idea; Simplemente no te estoy diciendo qué es. Eres completamente insignificante para mí. Vamos a atravesar cualquier juego retorcido que estés jugando. Mi equipo sabe que podemos hacerlo. Porque…” Seiya respiró hondo y luego declaró:” El nuestro es el mejor parque de Japón”.

“……” “Kurayama” fue tomado por sorpresa con esta respuesta.

“¿Escuchaste eso?” Exigió Seiya agresivamente. “Ahora, mete la cola y corre”.

Idina hizo exactamente eso.

Cuando Seiya reveló la verdad sobre el hombre que acababa de irse, Isuzu estaba furiosa. Era su enemigo odiado, después de todo. Sin embargo, las lágrimas llenaron sus ojos cuando dijo: “No sé por qué, pero me siento aliviada…”

“¿Vos si? Me arrepiento hasta las rodillas, “susurró con un suspiro. Había desperdiciado su única oportunidad segura de mantener vivo el parque. Ni siquiera podía imaginar lo difícil que sería ahora el camino por delante de ellos. “Pero… y no sé por qué…” dijo Seiya, sintiéndose de repente renovado. “Por alguna razón, realmente me estoy divirtiendo en este momento”.

Poco después, Seiya recibió una llamada de Moffle. Latifah se había despertado y había hablado con él, dijo. Ella había recuperado su memoria. Ella era la Latifah de su cita del otro día.

Seiya no estaba especialmente sorprendido de escucharlo. Sí, parece correcto, fue el alcance de sus pensamientos sobre el asunto.

***

El primer acto de Seiya al día siguiente fue ordenar una averiada atracción de Sorcerer’s Hill, no hace falta decir que fue el carrusel, arreglado. Todavía no conocía todos los detalles, pero aparentemente ese carrusel tenía una historia; había sido importado de Francia en los primeros días del período Showa, y era muy codiciado por los obsesivos. Por supuesto, las reparaciones sacarían una gran parte de su presupuesto, que solo hace unos días, nunca lo habría considerado.

La gerente de presupuesto Ashe se había quejado al respecto, preguntándole, “¿hablas en serio?”

Pero, por supuesto, que hablaba en serio. El dinero no fue obstáculo. Ese carrusel fue importante; en cierto modo era el alma del parque. Afortunadamente, el jefe de Mogute, Taramo, les aseguró que podrían restaurarlo a su belleza original en solo una semana.

La inspección del Dr. Obiza reveló que Latifah se había recuperado por completo. De hecho, había espacio para el debate con respecto a la palabra “completa”: al menos, ella era nuevamente ella misma, pero su salud seguía siendo pobre, lo que sugiere agotamiento.

Todavía estaba dormida en su habitación cuando Seiya fue a visitarla. La princesa, que dormía tranquilamente en su cama con dosel, era la verdadera imagen de la inocencia. Seiya se sentó a su lado y comenzó a hablar, en tono de broma. “Eres tan codiciosa”.

Latifah no respondió. Ella solo respiraba tranquilamente al ritmo del sueño, su pecho se movía ligeramente hacia arriba y hacia abajo.

“Hacerme hacer todo esto e insistir en que me divierta todo el tiempo… Aun así, creo que tal vez pueda hacerlo. Y… no lo sé realmente, pero… estoy empezando a ver, vagamente… no, ni siquiera es ese punto todavía… ”

Ella no respondió.

“… Es que, ayer, creo que logré evitar la peor elección que pude haber hecho. … La opción más aburrida, supongo. Si hubiera hecho un trato con esos tipos… probablemente lo sepas, pero nunca lo hubieras hecho”.

De nuevo, ella no respondió.

“Estoy como en todos los extremos, aquí”, admitió Seiya. “Las cosas no van a salir perfectamente. Pero… es por eso que realmente te necesito. No eres impotente. No te devalúes más. … Hey, Latifah. ¿Me escuchas?”

Por supuesto que no puede, fue la suposición que él había estado haciendo, así que cuando finalmente abrió los ojos, él estaba tan sorprendido que casi se cayó de su asiento.

“Sí, lo hago”, le dijo.

“……?!” Seiya se sorprendió.

“Perdóname”, se disculpó Latifah. “No era mi intención fingir dormir, por supuesto…”

“¿C-Cuánto escuchaste?”

“P-Perdóname, pero… todo… Comenzando con la parte de mi codicia…”

“Olvida que dije eso,” insistió Seiya.

“Me temo que no puedo. Sin embargo…” Ella se rió. “No sé exactamente lo que quisiste decir, pero… ¿he logrado ser útil para ti? Parecía que… eso era lo que estabas diciendo”.

“No se lo digas a nadie”.

“No soñaría con eso”. Latifah le sonrió. Era una sonrisa perfectamente hermosa. “Y, en cuanto a mi respuesta…”

“¿Sí?” Inmediatamente se arrepintió de haberlo mencionado. Latifah no sabía sobre la conversación que habían tenido en el mundo de las sombras. “Está bien…”

“¿Sí?”, Dijo vacilante.

Seiya se congeló. Estaba aterrorizado. Petrificado Al final, no tuvo una respuesta. A pesar de todo lo que había sucedido, cuando él estaba aquí delante de ella así… “Ah, no importa. Olvídalo.”

“… Muy bien”. Esta respuesta de ella tuvo un tono ligeramente diferente al de los demás, pero Seiya no pudo escucharlo.