Assassins Pride (NL)

Volumen 2

Epílogo: Después de la Tutoría

–¡Demonios, este fue un mes indignante!

La mujer con su cabello blanco atado en un moño dijo mientras su rostro hervía.

Ella quien agitaba violentamente su vestido con delantal y oscilaba alrededor la maleta en sus manos mientras caminaba, era la jefa de sirvientas de la mansión de Elise, Osello. Ante ella quien, mostrando un aspecto furioso pisaba sonoramente sus zapatos, los nobles que avanzaban por la calle se sorprendieron y le abrieron camino.

Esta era la calle de más alta clase en el distrito educacional cardinal. El sello de la Academia para Chicas Saint Frideswide fue deshecho después de un mes y sin esperar al cierre del intercambio cultural rápidamente se marchó desde las paredes del castillo.

La razón era simple. El resultado de la Batalla de Selección de la <Luna Lumiére>—no quería presenciar una escena difícil de aceptar como esa por más tiempo.

–¡A pesar de usar todas mis conexiones para poner mi nombre en la lista de residentes con mucho esfuerzo y preparar el vitral sin que ninguno de los involucrados lo notara…! ¡¡Por culpa de esa <chica sin talento> y su <instructor demoniaco>, mi brillante plan se arruinó!!

Por su aguda voz, las pequeñas aves escaparon desde las ramas de los arboles a lo largo de la calle.

Aunque su cabello estaba teñido de blanco, el poder visual de Osello no se había marchitado. Esa <chica sin talento> Melida Angel, incluso si solo fue en una batalla, superó a la <Paladín> Elise Angel… ¡Añadiéndose a ese resultado imposible, estaba la mirada orgullosa de su tutor privado!

Osello no pudo pensar en estar en esa academia por más tiempo. Teniendo que idear su siguiente plan rápidamente, atravesó las lujosas puertas de su propio castillo.

Cruzando por el patio frontal cuidadosamente mantenido, se acercó caminado hacia la mansión de Elise con paredes de un estiloso blanco puro.

En el momento en que puso su mano en la puerta al recibidor, repentinamente se escucharon voces risueñas desde el otro lado.

Eran las voces de las jóvenes sirvientas. La sangre se subió a la cabeza de Osello.

–¡¡Ustedes!! Creen que porque no estoy está bien relajarse—

Osello quien abrió de una patada la puerta del recibidor, quedó boquiabierta.

–¡Ah, Osello-san! ¿A dónde habías ido?

La chica que se acercó a hablarle tan alegremente era una de las sirvientas que trabajaban en la mansión, una de las subordinadas de Osello. En eso no había error.

Pero, su apariencia era diferente. Las faldas de sus uniformes de sirvienta solo llegaban hasta la rodilla y los volantes y lazos habían aumentado cinco veces. Pareciendo que se habían vuelto locas, sus diademas estaban adornadas con lo que parecían orejas de gato.

Notando su mirada, la chica apretó sus manos mientras parecía un poco tímida.

–Ah, me disculpo… ¡B-Bienvenida de vuelta, nya!

–¿¡Q-Q-Q-Q-Q-Q-Q-Q-Q-Que…!?

–Ahaha, aunque fué orden tuya, como era de esperar, esto es un poco vergonzoso.

Alrededor de Osello quien seguía boquiabierta, las otras jóvenes sirvientas se reunieron entre risas. Todas sin excepción, llevaban el mismo uniforme de sirvienta modificado.

–¿Es así? Para mi es más divertido de esta forma. ¡Nya!

–Ya que la apariencia es mala con solo las orejas, ¿Qué tal agregarle también una cola a juego? Nya.

–Dicho eso, Osello-san, ¿A dónde fuiste con esa gran maleta? ¡Nya!

–¿¡¡De qué demonios están hablando!!?

Osello explotó. Normalmente, en este punto las sirvientas comenzarían a temblar, pero las chicas se miraron entre sí, mostrando expresiones que decían no poder entender por qué se enojó.

Con la vena de su sien a punto de explotar, Osello gritó.

–¿¡¡Que hacia donde salí, dicen!!? Se había decidido que me quedaría en Saint Frideswide acompañando a Elise Ojou-sama, ¿¡No es así!?

–Si. Y después de eso regresaste un paso por delante, ¿No? Ayer…

–¿¡Haah!? ¿¡Q-Que estás diciendo!? ¡En primer lugar, que pasa con esa apariencia descarada! ¿¡Quien les permitió charlar en medio del trabajo!? Solo porque yo no estaba—

–Cuando regresaste ayer, tú lo ordenaste, ¿No es así? Renovaste los uniformes de la mansión y dijiste que durante el trabajo “se prohíbe el silencio”…

Osello comenzó a sentirse mareada.

¿Qué están diciendo mis subordinadas?

No podía comprenderlo.

¿No me digan que finalmente me volví senil?

En el momento en que esa desesperanza cruzó por su mente, una enérgica sirvienta jaló su brazo.

–¡Cierto, Osello-san! ¡Justo como dijiste, hicimos más linda la mansión!

–Maldición… ¿Qué demonios será lo siguiente…?

Osello, quien había sido arrastrada hacia su propia habitación, sintió que estaba en una pesadilla.

–¿¡Q-Que demonios es esto…!?

Para decirlo en pocas palabras, sus ojos dolían. La alfombra era de un llamativo rosado. Las sabanas de su cama tenían un diseño floral adorable y femenino. Adornos de listón danzaban por toda la habitación.

¿Podría alguien aparte de una niña soñadora de cinco años dormir en esa habitación? Desde sus brazos como ramas secas, las pesadas maletas cayeron. La enérgica sirvienta, pareciendo tímida, sacó su lengua.

–¡Ya que ordenaste “Denle un giro competo a la mente de una doncella”, me esforcé!

–Esto es un sueño… claramente debe haber algún error…

Mientras murmuraba como en un delirio, Osello escapó hacia el pasillo tambaleándose. En frente de sus subordinadas quienes la miraban con extrañeza, desesperadamente se recargó en la pared.

¿No hay alguien que aún mantenga su cordura en algún lugar?

Ella dejó vagar su mirada, y entonces lo vió.

Parada en el fondo del pasillo. Una anciana llevando un vestido con delantal. Esa mujer con su cabello blanco atado en un moño, se encontró con su mirada y torció su arrugado rostro en una sonrisa.

Y entonces, abriendo repentinamente la ventana, saltó hacia el patio.

–¿Qué te ocurre desde hace un rato, Dama Osello…?

Las sirvientas de los alrededores no parecieron notar nada. Osello miró a una de sus subordinadas y una vez más movió su mirada hacia la ventana. Lentamente corrigió su postura y entonces murmuró.

–La armonía de la mansión que he protegido arduamente… Aa, me siento mareada.

Osello se desmayó y *¡¡Pata———n!!* cayó de espaldas en el pasillo. Las jóvenes sirvientas con orejas de gato la rodearon en pánico.

–¡Dama Osello!

–¡Esto es terrible, Osello-san!

–¡Llevémosla inmediatamente a su habitación!

–¡¡Hacia la cama con diseño floral que tanto le gusta—!!

***

Mirando de reojo la mansión que comenzaba a volverse ruidosa, la anciana con un vestido con delantal que descendió desde la ventana, inmediatamente corrió hacia los arbustos del jardín.

Mientras corroboraba que nadie la veía, quitó las piernas y manos protésicas desde debajo de su vestido con delantal y arrancó la herramienta de corrección de su torso. Al sacarse la peluca y desprenderse la máscara color piel, el rostro de una chica en la primera mitad de su adolescencia quedó a la vista.

Mientras vestía su uniforme militar de siempre, miró inocentemente hacia la mansión donde el alboroto no se detenía.

–… Lo sabía, él, tiene una mala personalidad.

Sacó la carta desde su bolsillo y comprobó el sello. Recuperando toda su carga y evidencia, la chica bajó su capucha hasta sus ojos y comenzó a caminar sin hacer ningún sonido.

De esa forma, la sombra negra de Black Madia, se disolvió entre la sombra de los arboles sin dejar ningún rastro.

***

La mañana de ese día, en frente de las puertas de castillo de la academia para chicas Saint Frideswide, se realizaba la despedida de las representantes de D’Autriche. Las trescientas estudiantes de Frideswide rodearon la entrada y las encargadas intercambiaban saludos de despedida con las estudiantes de D’Autriche en turnos.

Hacia la presidenta del consejo estudiantil Christa Chanson que estaba al final de la línea de encargadas, chicas de D’Autriche queriendo un saludo venían sin interrupción, con una sonrisa radiante Christa intercambiaba apretones de mano con cada una de ellas.

–¡Christa-sama! ¡Gracias a ti tuve una muy divertida estadía!

–¡Podre alardear con mis compañeras sobre la fiesta de té a la que me invitaste!

–Si. Todas, vendrán a jugar nuevamente, ¿No?

— —Presidenta Christa.

La persona que salió al frente de Christa en el momento en que la línea se interrumpió, fue la líder de la asamblea general Neige Tormenta quien lideraba a las estudiantes de D’Autriche.

Neige extendió su mano suavemente hacia Christa quien retrocedió ligeramente.

–Gracias por cuidar de las chicas de D’Autriche mientras no estuve por la batalla de selección. Me ayudaste mucho.

Aflojando su expresión, sonrió débilmente. Christa abrió sus ojos por lo inesperado, pero inmediatamente le devolvió la sonrisa y sujetó su mano.

–… ¡Vamos a reunirnos otra vez!

–Si, en algún momento.

Finalmente, intercambiando sonrisas una vez más, Neige soltó su mano y se dió la vuelta.

Su espalda que se marchaba con aplomo, Christa la observó con una mirada dolida. Entonces, en frente de su línea de visión, encontró varias sombras humanas que estaban a la espera justo a la salida de las paredes del castillo.

Eran chicas un poco mayores que ella misma, vistiendo el uniforme militar del gremio. Dentro de ellas, al reconocer un rostro inesperado, Christa contuvo el aliento.

–Mi—¿¡Mirei Onee-sama!?

Christa comenzó a correr mientras el borde de su uniforme se balanceaba. Pareciendo notarla inmediatamente, la chica le dió la bienvenida con una sonrisa familiar mientras se acercaba corriendo sin aliento.

–Ha pasado un tiempo, ¿No es asi, Chris? Ahora eres la presidenta del consejo estudiantil, ¿No?

–E-Eso… Cuando me eligieron, aún estabas en la academia, ¿¡No es así, Onee-sama…!?

Esa chica caballero mayor, era Mirei Istonic quien fué la presidencia del consejo estudiantil de la academia para chicas Saint Frideswide hace unos años. Incluso fue una de las candidatas de la Batalla Selección de la <Luna Lumiére> el año anterior… y Christa había sido su pareja.

Habiéndose callado torpemente, Christa preguntó con dificultad.

–O-Onee-sama, ¿Por qué estás aquí?

–Por una misión, naturalmente. Es una solicitud directa de la directora Bramanger, ¿Sabes?

–¿De la directora?

Mirei se encogió de hombros y continuó con un tono aliviado.

–Ya que parece que enviaron a las estudiantes de D’Autriche hasta su escuela sin problemas… No se los detalles, pero la batalla de selección de este año al parecer fue bastante complicada, ¿No es así? Ya que al parecer varios caballeros relacionados con eso serán guardias para anticiparse a cualquier cosa, yo estoy aquí, ¿Sabes?

–Ah…

La palabra <Batalla de selección> que salió desde la boca de Mirei, perforó el pecho de Christa.

En la batalla de selección del año anterior ella misma falló y ese deplorable error corría alrededor de su mente. No podía decir que solo eso fue la causa, pero como resultado, Mirei perdió en la anterior selección.

Decidiendo que era el momento de resolverse, Christa intentó abrir sus labios temblorosos.

Sin embargo, justo antes de eso, Mirei quien vió a las estudiantes de Frideswide y D’Autriche apretujándose en frente de las puertas, inclinó su cabeza pareciendo apenada por alguna razón.

–… Veras, Chris. Lo siento, ¿Sabes?

Christa, como si viera algo difícil de creer, miró de vuelta el rostro de Mirei.

–¿P-Por qué, te disculpas, Onee-sama…?

–Por la batalla de selección anterior. En ese momento, solo pensaba en ser elegida como <Luna Lumiére> y no pude hacer cosas como preocuparme por las chicas de Frideswide o relacionarme con las chicas de D’Autriche, después de todo… honestamente, fué un mal ambiente, ¿No?

–Ah…

–Pensé que las representantes que fueron al instituto para chicas Saint D’Autriche con nosotras, estando un mes en otra escuela, seguramente se sintieron increíblemente incomodas… eso siempre ha pesado en mi conciencia.

Mirei quien estaba frunciendo el ceño, miró hacia abajo a Christa con una expresión alegre.

–Pero tú pudiste realizar magníficamente lo que yo no pude hacer, ¿Sabes? Excelente. Muchas gracias.

–…

En los ojos de Christa, lágrimas brotaron.

Christa limpió con sus manos las grandes lágrimas que corrían por sus mejillas.

–Onee-sama… yo, ¡Yo…!

–E-Espera, ¿Por qué estas llorando?—Cielos, eres una niña problemática, ¿Sabes?

La chica caballero un poco mayor consoló amablemente a la chica llorando acariciando su cabello por un buen rato.

***

Dentro del circulo que despedía a las estudiantes de D’Autriche, también estaban las primas Angel. Ellas también fueron candidatas de la batalla de selección de este año, pero, como conclusión, ambas se establecieron en la posición más baja con casi el mismo porcentaje en cuanto a logros. Concluyentemente, la brecha de votos con la posición más alta no se estrechó.

Como era de esperar, el efecto de la tercera prueba fue grande. La batalla de Melida y Elise sin duda había logrado arrebatar la mirada de los espectadores, pero, al mismo tiempo, las Unidades de Kira y Salacha al parecer también habían ejecutado una fiera batalla. Como si despejara los rencores de la primera y segunda prueba, la segura del <Príncipe> quien realizó una gran actuación, como se esperaba acaparó la mayor cantidad de votos.

En adición—finalmente fue la ganadora de la Batalla Campal de la tercera prueba. Después de todo, para las espectadoras lo ocurrido cuando el <Palacio Mundo de Cristal> fue oscurecido y el destino de la corona de la <Luna Lumiere> también era natural.

Sin estar demasiado deprimida, Melida se cruzó de brazos y miró hacia el cielo al azar.

–Al final, me pregunto qué pasó con esa Nerva excesivamente fuerte.

–… La directora, dijo que era una <Mascota de Cristal> especial.

Con una voz que parecía estar dudando de ella misma, Elise respondió. Los movimientos de negro que manejaba siete tipos de armas, su <Mana> abrumador, su presencia tanto dispersa como intensa—no era sin razón, pero, incluso si la declaraban como una muñeca de cristal sin alma, las primas no podrían aceptarlo.

Y más que nadie, Melida sintió vívidamente las <intenciones> inconfundibles de esa figura de negro.

“Incluso a esta edad, tú <Mana> no había despertado, <chica sin talento>”

“Ahora, repentinamente, germinó, el secreto de eso—“

Las palabras que deberían haber desaparecido junto con las llamas, incluso ahora continuaban ardiendo dentro de la mente de Melida.

Quizás, la intención intentando revelar algún secreto que incluso ella misma no conocia, era algo que estaba arremolinandose en los alrededores de Melida y Kufa.

En ese momento en que estaba sumergida en ese laberinto de ideas sin respuesta, desde un grupo de estudiantes de D’Autriche una notablemente cautivadora y hermosa chica andrógina se acercó caminando hacia Melida y las demás.

Era el <Príncipe> que este año obtuvo el trono de <Luna Lumiere>, Kira Espada. Sin embargo, incluso mientras llevaba la corona <Lagrima de Luna> que era evidencia de eso, sus labios estaban fruncidos pareciendo insatisfecha.

–… No puedo aceptar este resultado.

–¿Eh?

–¡No lo siento como una victoria en absoluto! ¡Especialmente porque no pude derrotarte al final!

Siendo señalada por su dedo índice, Melida abrió sus ojos aturdida.

Kira hinchó su pecho desafiantemente y mientras se ruborizaba ligeramente, declaró.

–¿Entiendes? En la próxima batalla de selección ustedes vendrán al instituto para chicas Saint D’Autriche. ¡Allí lucharemos una vez más! ¡Y esta vez te derrotaré completamente, así que prepárate!—¡Hmph!

Dándose la vuelta y sin esperar respuesta, Kira se marchó.

Melida y Elise se miraron entre si y a continuación, sonrieron asombradas.

–Parece que también tendré que volverme una candidata el próximo año.

–Si es así, esta vez yo seré la pareja, Lita.

–Cierto. Eso también es bueno, pero—

Allí Melida, tosió.

Cruzando sus brazos, arqueó su delgado pecho con orgullo.

–Hey, Elly. Yo, pienso crear una nueva Unidad. No la Unidad de Nerva, ni la tuya. Una donde yo sea la líder, mi propia Unidad. Naturalmente, podrías ingresar, ¿Sabes?

Melida miró a Elise de reojo llena de confianza.

Elise de manera inusual, mostró una gran sonrisa.

–Si. ¡Por favor déjame unirme a tu Unidad, Lita…!

–¡Por supuesto!

Las chicas se miraron entre si y, “¡Ehehe!”, sonrieron como un ángel frente a un espejo.

***

Mirando a esas estudiantes desde la distante torre escolar, había un par de caballeros en servicio, Kufa Vampir y Rosetti Pricket. Desde la parte más alta de las largas escaleras, ellos vigilaban el vistoso ajetreo en frente de la puerta del castillo.

— —En otras palabras, me pregunto si podría decirse que es un caso cerrado. Rosetti quien estaba sentada en la escalera, levantó nuevamente su dedo índice.

–El cambio del vitral fué obra de Osello-san, quien saboteó el traje de baño fué la misma Elise-sama y la filtración de la información en la segunda prueba fué el trabajo de Shenfa-sama… allí las maniobras secretas de esa tipa Madia se enredaron y se volvió una situación descomunalmente complicada, ¿No?

Encogiéndose de hombros con resignación, Rosetti suspiró ligeramente.

–En serio, este mes no fue para nada sencillo, ¿Cierto?

–Siento lo mismo. Cada uno llevando sus propias expectativas, absolutamente no es nada sencillo…

Kufa quien estaba parado en las escaleras, se dió la vuelta elegantemente.

–Sin embargo, ¿No es ese el mundo al que llamas <escuela>?”

–Tú lo has dicho.

Fufu, riendo divertidamente, Rosetti repentinamente bajó su voz.

–… ¿Está bien mantener en secreto, lo que hizo Osello-san?

–Se lo informé a la directora, pero… quizás quedará en nada. No tenemos evidencia concluyente y ella misma no hablará. Además, por la forma de hablar de Dama Osello m… probablemente tenga alguna clase de respaldo fuera de la casa del Duque.

–Entonces, en conclusión, para las estudiantes de esta academia, ¿El caso de esta vez continuará siendo un enigmaa~?

Rosetti sin poder tolerarlo dijo así hizo un gran estiramiento.

Kufa, después de vacilar un poco, le dijo sus pensamientos.

–… Si hablamos de enigma hay uno más, un problema que no está solucionado.

–¿Eh? ¿Qué cosa?

–Su método de invasión al <Palacio Mundo de Cristal>.

Kufa eligió sus palabras cuidadosamente.

–Para cambiar el vitral, debía entrar al <Palacio Mundo de Cristal>. Y para eso, tenía que obtener la aprobación de los guardias. Sin embargo, Dama Osello no es una Usuaria de Habilidad, asi que no tiene registrado su <Mana> con los guardianes…

–¿¡Eh!? ¡E-En otras palabras…!

Rosetti se levantó de un salto. Kufa le asintió de vuelta firmemente.

–Así es… en otras palabras quién invitó a Dama Osello hacia el <Palacio Mundo de Cristal>, está dentro de las trescientas personas que tienen su <Mana> registrado.

–¿Quién demonios podría ser?

–Ese alguien—

En ese momento, desde la dirección de la entrada del castillo estallaron aclamaciones como olas.

Cuando Kufa se dio la vuelta, pudo ver un poco de como las estudiantes de D’Autriche que formaban una ordenada fila desaparecían en el túnel mientras eran envueltas en los ovaciones de las estudiantes de Frideswide.

***

En la última fila de las estudiantes de D’Autriche que avanzaban por el túnel, estaba una sola estudiante. Una estudiante de primer año que había tomado parte como candidata de emergencia en la batalla de selección de este año, Salacha.

Mientras mostraba una mirada apática, desde detrás su espalda se extendieron dos brazos.

Amasando las protuberancias que enfatizaban su existencia debajo de su uniforme.

–Saa~laa~chan

–¿¡Hyaaahhh!?

Frente al sinvergüenza quien dió una vuelta completa pareciendo divertirse, Salacha le reclamó con un rostro rojo brillante.

–¡Mouu, mouu! ¡Muy-chan ya detente!

–Ufufu, lo siento~ Ya que hace mucho que no jugaba contigo, me emocioné demasiado.

Quien sacaba la lengua traviesamente, era su compañera de clase que poseía un cabello como cuarzo negro. Salacha hizo un puchero mientras hinchaba sus mejillas rojas, intentando cubrir su pecho tiernamente.

–… Dicho eso, Myu-chan, no participaste en absoluto en el intercambio, ¿Qué estuviste haciendo?

Salacha quizás era quien poseía el más profundo vínculo con esta elusiva estudiante de primer año de <Diabolos>, Mule La Mor. Había intentado perseguir su figura con sus ojos muchas veces, pero ella, sin participar en el evento de intercambio cultural, siempre parecía haberse estado moviendo libremente.

–Un asunto menor de mi madre, ¿Sabes? Además, incluso solo viendo desde fuera me divertí lo suficiente. ¿No crees que la batalla de selección de este año se volvió un evento excitante?

Mientras comenzaba a caminar a su lado, Mule colocó su dedo índice en sus encantadores labios.

–Si tuviera que decir algo lujoso, quería que Osello-san se pasara un poco más de la raya. A pesar de que la ayudé ya que hablaba de las buenas relaciones de la <facción reformista>, con solo cambiar el vitral quedó satisfecha… no hizo na~da más que eso.

–… Lo sabía, eso fué algo que hiciste tú, Muy-chan. Por culpa de eso terminé participando en la batalla de selección, y fué horrible.

Recibiendo la mirada fija de su amiga, Mule nerviosamente metió su mano en su bolso.

–G-Gracias a que tú y las demás hicieron una gran actuación, mi investigación avanzó muy fluidamente, ¿Sabes? Mira esto.

–… ¿Que, es esto?

Lo que Mule le entregó, eran unos pergaminos de piel de cabra. Eran garabatos en donde diagramas complejos, gráficos y marcas de ondas cubrian todo el pergamino. Para su familia quienes tambien eran investigadores, códigos como esos al parecer estimulaban su curiosidad intelectual, pero Salacha quien era de una familia puramente marcial, honestamente no entendía su significado.

–Esto analizó el <Mana> de las estudiantes que están registradas en el <Palacio Mundo de Cristal>. Sin embargo, ya que la máquina de análisis fué destruída por ese sensei demoniaco, solo escribí lo que recordaba.

–Hiciste algo así… No te descubrieron, ¿Cierto?

–Pensé que me habían descubierto, pero de alguna manera parece que ese sensei tenía varios problemas— Comparado con eso, ¿Lo notaste? Este es el diagrama de análisis de Melida-chan y este de aquí es el diagrama de Elise-chan.

Cuando Mule señaló los dos pergaminos intentando compararlos, los ojos de Salacha se abrieron de par en par.

–¡Esto es…!

–Incluso tú quien no conoce demasiados detalles lo entendiste a primera vista, ¿No es así? Así es, el patrón de
<Mana> de ambas, es demasiado diferente. Como primas que deberían albergar el mismo <Mana> de la Casa Angel, esto es absolutamente imposible.

Casi como si fuera la evidencia que arrinconaría a un criminal, Mule alzó los pergaminos.

–No hay error en que Elise Angel posee la Clase <Paladin>. Siendo así… ¡La Clase que despertó Melida Angel, quien posee un <Mana> de naturaleza demasiado diferente con su prima y fué llamada <chica sin talento> quizás no sea <Paladin>…!

–…

La garganta de Salacha, gimió. Por el contrario, Mule sonreía ligeramente.

–¿No creés que podría ser un muy buen regalo para Shicksal Nii-sama? Hey… <Dragoon> Salacha Shicksal- chan.

<Paladin>, <Diabolos>, y entonces completando la última de las tres casas de Duques caballeros, <Dragoon> (NT: Caballero Sagrado, Caballero Demoníaco, Caballero Dragón.)

Ella quien fue coronada con ese nombre, miró hacia el frente con una mirada resuelta.

–Melida-san… parece que vamos a reunirnos nuevamente de inmediato, ¿Eh?

La chica que dejaba sentir su triste determinación y la chica que mostraba una sonrisa fascinante. En frente de sus miradas, estaba la luz que entraba hacia el túnel. Una al lado de la otra, caminaron hacia la salida de las puertas del castillo.

Mule soltó ambos pergaminos desde sus manos. Esos donde el <Mana> de Melida y el de Elise estaban escritos, fueron envueltos en llamas negro azabache. Soplados por el viento danzaron por el aire y cuando fueron quemadas hasta el último pedazo, las partículas de fuego restantes, casi como una ventisca de flores, danzaron y desaparecieron.

– FIN DEL VOLUMEN 2 –