Dungeon ni Deai wo Motomeru no wa Machigatteiru Darou ka (NL)

Volumen 10

Capítulo 8: Pánico en la Ciudad

Parte 5

 

 

Su conversación termino.

La pareja se fue poco después. Ryuu desapareció de la cafetería, probablemente para preparar su equipo, ya que Aisha se había ido en otra dirección con planes de encontrarse con ella en un lugar diferente pronto.

Publicidad M-AR-2

Tan pronto como sus pasos se desvanecieron, las manos de Seal descubrieron su boca. Las había tenido allí todo el tiempo mientras escuchaba a escondidas detrás de la pared.

–Y ahí lo tienes.

Apartándose de la pared, Seal se enfrentó a la Enana dueña del establecimiento, Mia, quien tenía los brazos cruzados frente a ella.

Estaban dentro del almacén del bar. Una pequeña ventana cerca del techo de la estructura de madera estaba ligeramente abierta.

Les permitió a ambas escuchar la conversación de Ryuu en el callejón detrás del bar.


–En serio, ¿Cuántas veces han sido hasta ahora…?

Ambas Aventureras de Segunda Clase, por supuesto, habían notado la presencia de Seal, pero la ex-Aventurera Enana se habia ocultado tan bien que ninguna de las dos se dio cuenta—aunque también ayudaron las ruidosas Catman del comedor. Con su paciencia disminuyendo, la robusta Enana suspiró con todo su cuerpo.

–Lo sabía desde el principio, pero esa chica no está hecha para este tipo de trabajo. No puede cocinar, es lo contrario de amigable y, sobre todo, es demasiado suave. Puede ser por ese sentido de la justicia al que se aferra, pero no puede quedarse quieta en el mismo lugar demasiado tiempo.

Mia siguió murmurando para sí misma, pensando que Ryuu había mostrado mejoras recientemente, y luego fijó su mirada en Seal.

–Ahora dile esto: si hay algún otro lugar en el que quiera estar, debería irse de una maldita vez de mi bar y marcharse. La forma en que siempre está indecisa de esa forma solo es un dolor de cabeza.

–… Okay. Se lo diré.

Seal se detuvo brevemente y luego estuvo de acuerdo con un asentimiento.

–Entonces… ¿Estás dispuesta a pasarlo por alto también esta vez?

El rostro de Mia se oscureció de ira mientras Seal hacia su petición con ojos suaves y vueltos hacia arriba.

Luego dejó escapar otro largo suspiro.

–Dudo que tengamos más clientes hoy, y en el mejor de los casos serán unos cuantos. No es que haya algo que ella pueda hacer.

–Sí.

–Y ese chico ha sido un cliente habitual durante algún tiempo… Si dejara de venir, significaría otro cliente regular más al que no volveríamos a alimentar con buena comida.

Publicidad G-M3



–¿Entonces—?

–Mirare hacia otro lado.

La expresión de la dueña del bar se agrió mientras que Seal se iluminaba con una sonrisa de oreja a oreja.

–¡Muchas gracias!

Seal dijo con alegría y estaba a punto de hacer una reverencia cuando—

Publicidad M-M5

–No lo olvides, todavía hay trabajo por hacer, incluso sin clientes. Ryuu no está aquí, así que espero que trabajes tres veces más duro.

Mia gruñó mientras salía del almacén.

Una vez que Seal estuvo sola, la sonrisa en su rostro se puso un poco rígida.

***

 

 

*Traqueteo, traqueteo*

Como si resonara con la agitación produciéndose en un lugar lejano, los sonidos de las oscilantes jaulas y el traqueteo de las cadenas sonaban interminablemente.

–¡Dix!

–Sí, ¿Qué? Estás en el camino, Gran. Estoy a punto de enseñarles a estas cosas el significado del dolor.

Dix estaba parado en la cámara de piedra oscura, sosteniendo su Lanza perversamente curvada mientras se giraba para mirar a su subordinado. Pero el hombre grande divagaba, cortando parte de la irritada respuesta de su jefe.

–M-Monstruos armados se presentaron en Rivira y la aniquilaron… ¡Es un verdadero desastre!

–… ¿Tienes algún detalle?

Los ojos rojos de Dix se enfocaron en el tembloroso hombre parecido a una montaña detrás de sus gafas de protección.

Gran explicó según lo solicitado. Le contó todo sobre el grupo de monstruos que arraso el 18º Piso. También le dijo que Orario había declarado el estado de emergencia como resultado.

–Monstruos armados… Oi, oi, ¿Estás bromeando? Si eso es cierto, nuestra presa llego justo a nosotros.

Dix dijo.

Gran se giró para mirar hacia el pasillo.

Una larga serie de jaulas de hierro estaba alineada como una prisión sobre un piso de piedra fría. Su tamaño variaba de pequeño a extremadamente grande, pero continuaba hasta donde alcanzaba la vista.

Las figuras dentro de dichas jaulas, demasiadas para contar, se retorcieron.

–¿Perdieron la calma? ¿Se molestaron con nosotros por cazarlos?

–N-No estoy seguro, pero…

–Pero, ¿Por qué avanzarían a Rivira…? Aja, así que eso es.

Bien jugado, monstruos.

Una punzada de odio se hizo evidente en la mueca de Dix.

Tenía una muy buena idea de lo que estaba sucediendo fuera de su base.

–¿Cómo esta Rivira ahora?

–… En escombros. Tan malo que el Gremio tuvo que emitir una misión, según escuché.

Gran dijo en voz baja y tranquila.

Si escuchaba atentamente, podía escuchar entre los aullidos de los monstruos signos de que los otros cazadores estaban molestos por el repentino giro de los acontecimientos.

–¿Los pasamos por alto demasiado? Parece que los monstruos son más fuertes de lo que pensábamos.

Sus palabras podrían haber sido serias, pero la sonrisa nunca desapareció de su rostro.

Dix se rió entre dientes de emoción a pesar de la noticia de que estos monstruos eran lo suficientemente fuertes como para destruir Rivira. Gran se sintió aliviado por la visión familiar de la habitual calma de su líder, su actitud sin miedo y el brillo oscuro y malvado en sus ojos. Una sonrisa regresó a su rostro, aunque su piel estalló en un tipo diferente de sudor frío.

–Ese Dios nuestro todavía no ha regresado. Obviamente… Ahora, ¿Qué hacemos…?

Golpeando el eje de su Lanza contra su hombro, Dix se dio la vuelta.

Una chica dragón apareció en su línea de visión, encadenada como un sacrificio vivo, todavía inconsciente con nuevas lágrimas corriendo por sus mejillas.

***

 

 

— —¿¡Domarlos!? ¿¡Tenemos que domar los objetivos de nuestra misión!?

La voz de una mujer joven viajó lejos en el cielo azul.

La ciudad, todavía sumida en el nerviosismo y la agitación, había desviado su atención hacia el Parque Central.

Aventureros y ciudadanos, Dioses y Diosas. Un círculo de espectadores se había formado alrededor del borde del parque, todos enfocados en los fuertes Aventureros reunidos en el interior—la <Familia Ganesha>.

En el centro de todo, un anuncio hizo que el equipo de subyugación se levantara en armas.

–¿¡Que pasa con eso!? Estamos en un estado de emergencia, ¿¡Verdad!?

–E-Estaba escrito en un documento que el Gremio le envió a Ganesha-sama y él me lo pasó… p-pero me prohibió mostrárselo a alguien más.

Publicidad M-M1

–¿Y qué? ¡Eso no me dice nada! ¡Dame detalles! ¡¡Detalles!! Umm—¡Cualquiera que sea tu nombre!

–¡Sabes que no puedo hacer eso, Ilta! ¡¡Además, mi nombre es Modaka!!

Un joven grito con todas sus fuerzas, corrigiendo a la Amazona de piel color trigo con cabello rojo encendido frente a él.

Justo antes de que la <Familia Ganesha> partiera a su misión, las instrucciones de última hora del Gremio habían enviado al grupo al caos. Sin dar ninguna explicación, el Gremio le había ordenado al equipo de subyugación que domara a los monstruos, una tarea mucho más difícil que simplemente matarlos.
Especialmente considerando que estos monstruos eran lo suficientemente poderosos como para destruir Rivira.

La Aventurera de Primera Clase Ilta Farna ahora era el centro de una discusión desencadenada por la ultrajante y completamente incomprensible orden del Gremio.

–¡Tranquilízate, Ilta! ¡No es tan difícil de entender! Estos monstruos están usando armas, ¿Verdad? El Gremio tiene Varisus en sus ojos, pensando que estas subespecies raras atraerán grandes multitudes para el <Festival de Monstruos>, y quieren que los traigamos con vida—¡¡No hay otra explicación!! ¡Malditos idiotas codiciosos! ¡¡No es el momento para eso!! ¡Envíenme allá y los incineraré en uno de mis tornados de fuego! ¡¡Arde, baby, ARDEEEEEEEEEEEEEEEEE!!

–¡Cállate, Ibly! ¡Estás en el equipo de la superficie!

–¿¡QUEEEEEEEEEEEEEEEE!? ¡NADIE ME DIJO NADA! ¡¡VAYAN MIS AMIGOS, GANEEEEEEEEEEEEEEEEEEEN!!

–¡Por favor, todos, tranquilícense! ¡¡E Ibly, ya es suficiente!!

Publicidad G-M1



La autoproclamada “bola de fuego que habla por sí misma” de la <Familia Ganesha> realizo sus propios movimientos de lanzamiento en medio del parque, avivando la furia de Ilta. Otros líderes, incluyendo a Modaka, sabían que este no era el momento ni el lugar para dejar que las emociones escaparan de sus manos— aunque sería mucho peor si su Dios estuviera aquí—y pidieron un pensamiento racional mientras miraban a lo largo de las filas.

Una ola de ansiedad y susurros nerviosos comenzó a extenderse a través de la multitud de ciudadanos que miraban desde fuera del parque.

–Ilta, relájate. Eso tambien va para el resto de ustedes.

–¡Pero, Nee-san…!

–C-Capitana Shakti… Mis disculpas.

La líder de la <Familia Ganesha>, Shakti Varma, habló mientras entraba en el caos.

Con su cabello azulado cortado justamente a la altura de su nuca, poseía un porte inteligente. Era sorprendentemente alta con 170 centímetros, y su reputación como una belleza deslumbrante era bien merecida. Sus largas piernas estaban equipadas con botas de metal, y Guanteletes de bronce de gran tamaño protegían sus manos, asegurando que estaba más que preparada para el combate cuerpo a cuerpo. Llevando el título de <Ankusha>, se ubicaba justo al lado de la <Princesa de la Espada> como una Aventurera humana de Primera Clase.

La Amazona Ilta se refería a ella como “hermana”, habiendo reconocido su fuerza (por la fuerza), y se quedó en silencio ante la presencia de la imponente guerrera. Otros Aventureros de élite inclinaron sus cabezas mientras Shakti miraba a Modaka.

–¿Cuáles son los pensamientos de Ganesha-sama al respecto?

–S-Seguir las órdenes del Gremio…

–Ya veo.


Shakti respondió, la única calma en la tormenta arremolinándose a través de la <Familia>. Ella cerró los ojos.

Abriéndolos un segundo más tarde, Shakti se giró para mirar a sus subordinados y declaró:

–Domaremos a esos monstruos. Tráiganlos de vuelta aquí, con vida.

–Nee-san, ¿¡Estás segura!?

–Servimos al Dios de las Masas, Ganesha-sama. Nuestra fe está con él, y nosotros lo seguimos. ¿Estoy equivocada, Ilta?

Una sacudida corrió por la espalda de la Amazona bajo la afilada mirada de Shakti. Sus ojos se abrieron de par en par antes de asentir.

Admirados por la sólida fe de su líder y su devoción a su Dios, los otros miembros de la <Familia Ganesha> mostraron expresiones más tranquilas.

–Partiremos a mi señal. ¡Prepárense!

La fría voz de Shakti atravesó el aire como un látigo.

–W-Wow…

En medio de todas las voces nerviosas que se arremolinaban en el Parque Central, Bell rápidamente se tapó la boca con una mano para detener en seco un susurro.

Llevaba una larga túnica sobre su armadura y tenía una mochila sobre los hombros—similar al equipo habitual de Lili—para hacerlo parecer un Ayudante.

Estaba lejos de los ansiosos ciudadanos que esperaban ver la salida y más cerca de la disputa interna de la <Familia Ganesha>, ya se había mezclado con el equipo de subyugación.

–Ganesha-sama dijo que serás útil para determinar por qué sucedió esto, así que no tuvimos mucha opción, pero… intenta pasar desapercibido, <Pequeño Novato>. Le explicaré que solo eres un Ayudante a cualquiera que se dé cuenta, pero no destaques. Sería una verdadera molestia si Ilta se entera de que estás aquí.

–E-Entendido… lo siento.

Modaka se detuvo para susurrar al oído de Bell en su camino. Bell se disculpó temerosamente por reflejo. Habiendo dicho lo que tenía que decir, el trabajador miembro de la <Familia Ganesha> siguió su camino. Una voz tranquila se escucho desde el costado de Bell justo cuando el joven se fue.

–Domarlos, tal como lo pedimos. El Dios Ganesha realmente ha cumplido su palabra.

–Fels-san…

–El equipo de subyugación mantendrá tu presencia en secreto. Quédate con ellos en el 18º Piso.

La voz llegó a los oídos de Bell desde un espacio aparentemente vacío.

Pertenecía a Fels. El Mago llevaba un velo que le otorgaba invisibilidad, como el casco que Asfi había hecho y Bell ya había encontrado. Por lo tanto, nadie podía ver la figura vestida de negro.

Bell había recibido su equipo poco después de salir del pasadizo oculto de la Sede del Gremio para mezclarse con los Ayudantes. El Mago, quien parecía muy fuera de lugar y sospechoso mientras se acercaban al Parque Central, desapareció en el aire debajo del velo antes de unirse al equipo de subyugación.

–Es hora de ir. Entraré primero en la torre.

–Okay.

El Mago se dirigió hacia Babel para evitar tropezarse con otros durante su viaje. Bell podía distinguir vagamente la presencia de Fels, y estaba viendo desaparecer la leve ondulación cuando de repente—

–¡¡Bell-kun!!

–¡Bell!

–¡Bell-sama!

–¡…!

Alguien lo llamó por su nombre y sintió una mano en su hombro.

Dio media vuelta e inmediatamente vio a Hestia, Welf, Lili, Mikoto y Haruhime abriéndose paso entre la multitud.

Los miembros de la <Familia Ganesha> que se quedaron estaban en un anillo alrededor de la Torre de Babel para controlar a la multitud. Varios tuvieron que contener al grupo mientras llamaban desesperadamente al chico.

¿Por qué están—?

La sorpresa de Bell duró solo un momento.

Al darse cuenta de la preocupación en los ojos de sus amigos, vertió cada parte de su voluntad y determinación en su mirada.

Voy a entrar. Por favor, déjenme hacer esto.

Lili y Welf parecían molestos, claramente empeñados en dar su opinión. Mikoto y Haruhime estaban más o menos igual. No podían unirse a él en el Calabozo o detenerlo en absoluto.

Hestia hizo contacto visual con Bell en medio de los gritos de aliento provenientes de la multitud.





—Ten cuidado, ¿Entiendes?

—¡Lo tendré!

Su intercambio no requirió palabras.

La Diosa logró apartar todos sus miedos y ofrecerle su apoyo. El chico respondió con un fuerte asentimiento.


–¡¡Avancen!!

Los ciudadanos estallaron en aclamaciones en el momento en que Shakti emitió la orden.

Hestia y su <Familia> vieron a Bell pasar por la puerta de Babel con el resto del equipo de subyugación.

–¡Aisha! ¡No mencionaste nada sobre que Lyon se uniría a nosotras!

–¿Cuál es el problema con una persona más? Ya sabes lo fuerte que es, así que no seas tan tensa.

–Entonces dime, ¿Cuál era tu plan si no tuviera a mano un <Casco de Hades> de repuesto…?

–Andrómeda, la <Familia Ganesha> está en movimiento. Debemos darnos prisa.

–¡¡~~~~!!


Debajo de un árbol de hojas anchas en el Parque Central, lejos de las masas aclamando, una humana, una Amazona y una Elfa intercambiaban palabras.

Con un gemido impropio de una mujer joven como ella, Asfi empujó los Ítems Mágicos hacia Aisha, que llevaba una enorme espada de madera, y hacia Ryuu con su túnica con capucha. Las tres desaparecieron, disolviéndose en el aire en el momento en que sus Ítems estuvieron en su lugar, y luego se abrieron paso más allá del control de la multitud, sin que los miembros de la <Familia Ganesha> se dieran cuenta.

Todos los Xenos… Wiene.

El equipo de subyugación siguiendo órdenes, el Mago con túnica negra, los intrusos no invitados y el chico entraron por la puerta con diferentes pensamientos.

Avanzaron hacia el Calabozo, bajo un hermoso cielo azul y las miradas de los ciudadanos que los apoyaba.

Mantente Enterado
Notificarme
guest
This site uses User Verification plugin to reduce spam. See how your comment data is processed.

INSTRUCCIONES PARA LA ZONA DE COMENTARIOS

1- No Puedo Comentar: Toca los botones que estan debajo del recuadro de comentarios, aquellos que le cambian el estilo a Negrita, Cursiva, etc. (B, I, U, S)

2- No Aparece Mi Comentario: Es por nuestro sistema de moderación, luego de revisar y aprobar tu comentario, este aparecera. NOTA: Usa un correo real o no se aprobara tu comentario.

3- ¿Como Escribo un Spoiler?: Toca [ + ] (es el botón spoiler) y aparecera una ventana, ahí debes poner el TITULO de tu spoiler (recomendamos poner simplemente SPOILER), luego en el codigo que aparecera en el recuadro del comentario debes escribir dentro de los simbolos ] [

[spoiler title="Titulo de tu spoiler"]Aqui va tu spoiler[/spoiler]

Nota: Todo el texto que coloques antes o despues del codigo del spoiler sera visible para todos.

0 Comentarios
Respuestas en el Interior del Texto
Ver todos los comentarios