Amagi Brilliant Park

Volumen 4

Capítulo 1: La Circunstancia Especial de Bandou Biino

Parte 7

No se sabía cuánto tiempo duraba la vida del ogro, pero el señor Obitsar parecía ya bastante avanzado de edad.

Parece que entendió más o menos el propósito de su visita aquí, pero cuando se trataba de otras cosas además de eso, estaba espaciado para que olvidara las cosas que le contaban en menos de diez minutos.

Por cierto, Setuco-san del que estaba hablando parecía ser una criada que había trabajado en la residencia de Obitsar en el pasado. Nadie sabía lo que pasó entre ellos, pero probablemente no era nada decente.

—Entonces, Setuco-san. Todavía no has cenado, ¿verdad?

—Si se trata de comida, la comimos hace poco y ya has preguntado eso tres veces.

Isuzu estaba bastante harta mientras decía eso.

Ya en el edificio de oficinas del parque, ellos fueron a la oficina de recepción recientemente instalada. “Tengo hambre”, así que tomó un katsudon de la cantina del personal, sin embargo, consumió solo el rebozo, descartando la carne de cerdo, lo cual, por decirlo, había provocado una gran indignación. Y ahora, se dirigió a Isuzu como “Setuco-san”. Al principio, Isuzu aún lo corregiría pacientemente, sin embargo, finalmente se dio por vencida y se conformó con dar respuestas breves.

—Aun así, qué lugar tan miserable. Rubrum dijo que el mundo de la superficie es un paraíso rebosante de esperanzas y sueños, y aun así…

—Eso es solo sobre el lado del escenario del parque. El backstage, sin embargo, es solo un edificio de oficinas de una empresa ordinaria.

Seiya explicó.

—Hmm, joven muchacho. No es ese tipo de problema de lo que estaba hablando. ¿No hay algo más importante? Los sueños son… lo que quiero decir es, ya sabes…… eso.

—¿Por “eso”, qué quieres decir?

—Pechos.

—¿Hmm? Ahora bien, hablemos de negocios.

La discusión fue presionada con fuerza.

—Te hemos invitado hoy para nada más que una aflicción mágica en uno de los empleados de este parque. Escuchamos de alguien que tienes un medio para lidiar con eso. Err, en resumen, es una maldición… ¿Creo? Queremos escuchar su opinión sobre el asunto, pero……

El Sr. Obitsar tomó un sorbo de su hojicha7, hizo gárgaras, enjuagándose la boca, mientras Seiya picaba sus palabras. Seiya estaba preocupado de que de repente lo hubiera escupido en alguna parte, pero afortunadamente, finalmente se lo tragó. (NT: Hojicha, es una hoja usada para realizar él te verde.)

—Bueno, ¿sigues escuchando?

—Por supuesto. Los pechos están muy bien, ¿verdad? Una buena persona, tú eres.

—……De todos modos, se trata de la maldición y su tratamiento.

Reuniendo toda la fortaleza y paciencia que su cuerpo podía ofrecer, Seiya explicó algunos hechos validados.

La maldición de Latifa no fue tocada en su conversación con el doctor, ya que Seiya e Isuzu habían acordado inicialmente. Según Isuzu, Mapleland ya había hecho todos los esfuerzos para lidiar con la maldición de Latifa, y esos intentos pasados habían terminado en fracaso. No hará mucha diferencia, incluso si invitaron a doctores dudosos de países extranjeros tan tarde.

Además, no se puede descartar la posibilidad de que el señor Obitsar fuera realmente un espía de alguna nación enemiga (bueno, esa posibilidad era casi nula). Así que confiar temporalmente a Latifa a un personaje de origen sospechoso era absolutamente impensable para Isuzu.

Si tal fuera el caso, en lugar de recurrir a este ogro de edad fuera de lo común, ¿no deberían enviar a Bandou Biino a Mapleland para ser examinada por el personal de confianza que había examinado a Latifa? …… Seiya había señalado esta opción, pero una vez más, el caso de Biino fue complicado de varias maneras.

(En cualquier caso, Bandou Biino es una de la superficie, parece ser de otro tipo de maldición en comparación con la de la princesa).

Fue lo que Isuzu había dicho.

(Todavía hay muchas cosas que todavía desconocemos acerca de las maldiciones que afligen a las personas de la superficie. Incluso el personal que maneja la disipación de Su Alteza no podrá hacer nada con demasiada diferencia en los conocimientos técnicos, ¿no?)

Así que, para decirlo más simple, era similar a la idea de un cirujano que intenta lidiar con las enfermedades de los animales sin estar equipado con las habilidades de un veterinario.

Sería una historia completamente diferente si ella fuera similar a Moffle y Tiramie, siendo unas mascotas de hadas esponjosas, pero como eran ellos los que vinieron de Mapleland quienes eran como Isuzu y Latifa, las cuales, en lo que respecta a las apariencias, no se veían muy diferentes de la “gente de la superficie” ¿Diferentes? Esta pregunta flotó en la cabeza de Seiya. Sin embargo, es muy probable que así sea, ya que ella lo había dicho. Isuzu no tenía una razón real para estar mintiendo.

—…Err, dado que no podemos solicitar un seguro médico, debemos analizar el pago. En cuanto a los costos de tratamiento, sería útil si pudiera darnos una cotización……

—Ahh, suficiente, es una molestia.

Obitsar se cruzó de brazos y soltó un gemido.

—Tenemos un paciente aquí, ¿no? Simplemente llámala ahora.

—Err. ¿Para una examinación?

—¡Obviamente! Puede que no parezca, pero incluso he sido médico durante los últimos cien años. Lo hemos mantenido en secreto, pero el que descubrió la penicilina fui en realidad yo, ¿sabes? Por no mencionar las recientes células STAP, entre otras cosas, también es mi creación. Solo dejo que otras personas tomen el crédito a cambio de algunos servicios de pechos—

—¡Uf, lo tengo, lo tengo! ¡La llamaré ahora mismo, así que por favor solo espere!

Seiya alzó deliberadamente la voz para interrumpir el jolgorio de Obistar, que no dejaba de sonar, aparte de que era impropio, también era molesto.

Él estaba a punto de hacer un gesto a Isuzu a través de señales oculares, pero ya tenía su Smartphone a mano y le informó a Tiramie que “la traiga”.

—¿¡Qué pasa con tu actitud!? ¿Me crees tonto?

—Oh, no, en realidad no. Debes estar imaginando cosas.

—Entonces, Setuco-san. ¿Ya es hora de cenar?

—¿Acaso no acabas de tener katsudon?

Isuzu dio una fría respuesta.

—Nnn, ¿En serio? Entonces, ¿puedo ahora tener algunos pechos como post-comida?

—…Kanie-kun. ¿Te importa si le disparo un poco?

—Dispárale. ¡No! Espera, espera. Al menos, hasta que terminemos con los asuntos, no le dispares todavía.

—Que lastima…

—¿Por qué están murmurando mucho? ¡Vamos, date prisa, ven a darme algunos de esos pechotes ahora!

—¡Tú! ¿Podrías cerrar tu boca por ahora?

—¡Setuco-san, Setuco-san! ¿No está siendo ese joven un poco malo? ¿Escuchaste eso, oíste eso?

—¡Ahh, ya he tenido suficiente de esto!

Mientras Seiya estaba gritando con una expresión considerablemente lívida, la puerta hizo “knock, knock”.

—Hola. He traído al paciente conmigo, mii.

—Err, umm, disculpen…

Trayendo consigo a Biino que parecía no estar en silencio, Tiramie entró en la oficina de recepción.

***

—¡Wow! Esta chica es…

Una vez que Obitsar posó sus ojos sobre Biino, él frunció el ceño e hizo una mueca. No era el zoquete pervertido habitual de un viejo cascarrabias, sino la mirada de un médico que había ganado una gran cantidad de experiencias a lo largo de su práctica.

(¿Ohh …?)

(Las cosas se ven prometedoras)

Frente al susurro de Seiya e Isuzu, Obitsar se levantó lentamente y caminó hacia Biino.

—¿Qué pasa con ella? Esta chica…

—¿S-sí?

—Esta chica… errm. Esta chica…

Después de decir eso con un tono grave, él agarró con fuerza el pecho de Biino.

—Disculpe. Eres Setuco-san, ¿Cierto? ¡Por tanto tiempo, he querido conocerte, Setuco-san!

—¡¿Umm, err ?!

—¡Oorrrrrrnnnn! ¡Fugate conmigo, Setuco-san! ¿Sí? ¿Sí? ¡Siéntete a gusto! ¡Y mientras estamos en eso, ponte también estas lindas prendas! Entonces ven conmigo, ¿Si? ¿Si? ¡Juntos podemos ir a cualquier wefggh, ghhhhaaa!

Primero, Biino fue empujada a un lado, luego la bala de Isuzu se dirigió al mismo tiempo que la patada de Seiya aterrizó, enviando al viejo cascarrabias Obitsar a volar.

—Gghhaaa……

—¿Q-qué acaba de pasar, mii? ¿Mii, mii?

Debido al flujo drástico de estos eventos, Tiramie estaba en pánico. Tanto que en su inestable estado de ánimo, él primero emuló el acto de Obitsar, que consistía en agarrar el pecho de Biino. Y luego, mientras estaba fascinado por esa sensación deliciosa, él fue enviado a volar por una bofetada en la cara, una bala y una patada de forma similar a su predecesor.

—Gghhaaaa… y-yo no lo entiendo, mii. Yo soy la víctima aquí, mii…

—¡Cállate! ¿¡No puedes siquiera hablar de algo normal!?

A pesar del grito de Seiya, Tiramie seguía mirando fijamente al vacío.

—Hmm. Para empezar, ¿quién es esta Setuco-san, mii? Seguro suena como la esposa de alguien quien tiene una figura erótica, mii. Ciertamente me gustaría que me la presentaran, mii.

—… ¡Así es, jovencito! ¡Setuco-san está casada!

—¿En serio, mii? Por lo que se refiere a las suposiciones, entonces probablemente su busto no sea inferior a una copa F. ¡Esta Setuco-san, mii, es increíble!

—¡Ohh, Setuco-san! ¡Setuco-san!

—Hmm, he simulado las diversas posibilidades de como es el personaje de Setuco-san en mi cabeza, mii… dócil en varios aspectos, recibiendo buenos *puffs* de esta manera. ¡Oh, vaya! Qué mitch inesperada eres, Setuco-san. ¡Una infernal mujer casada, mii!

—¡Ambos, cállense! ¡No, será un problema si ese anciano de allí se calla, de todos modos, tengan un poco más de decencia al momento de hablar!

—Mii. Supongo que para Biino-chan, es un estímulo demasiado fuerte para un saludo, mii.

—¡Eh, umm! Estaba un poco sorprendida pero… ¡Estoy bien ahora! Si, bien. Estoy… estoy bien…

Para aplacar a la sollozante Biino, que de repente fue sometida a una corriente de acoso sexual, Isuzu se encargó de abrazarla.

—Está bien, Bandou-san. Estoy aquí para ti.

—E-está bien, muchas gracias.

—Si ese viejo cascarrabias alguna vez perpetra estos comportamientos indecentes en nombre de este supuesto” tratamiento “, no dudaré en matarlo de un tiro donde esté parado…

—¿¡Disparar!? ¿¡Disparar a muerte!?

—Correcto… a muerte.

—Qué preocupante. Como se esperaba de la pequeña señorita, hacer tal cosa me haría sufrir un castigo divino.

Las mejillas del anciano se enrojecieron en frivol. (NT: Significa que se sonrojo pero por pena pensó que lo estaban alagando o seduciendo je.

—……

—¿Realmente entiendes lo que ella quiso decir cuando dijo dispara a muerte? Ahh, ya basta de eso. Si realmente puede realizar un examen adecuado sobre ella como usted reclama, entonces hágalo. Si no, por favor, váyanse.

—Oh. Oh…es cierto. Jovencita, ven aquí.

Finalmente, estando en condiciones de hacer su trabajo, Obitsar sacó un estetoscopio de su maletín. Al presenciar los movimientos majestuosos y practicados de Obistar al hacerlo, Biino se recompuso mientras ella nerviosamente avanzaba hacia él.

—Umm. Bueno… ¡Por favor!

—UH Huh. Entonces en primer lugar, por favor quítate las bragas.

El mosquete de Isuzu brilló—Obitsar fue mandado a volar a varios metros.

—¡Guuhhhhhh …!

—Estoy disparando a matarte. Va la mitad. La próxima vez que hagas eso, dispararé la mitad de tu vida otra vez, hasta que te quede la cuarta parte de tu vida. Seguiré disparando hasta que estés a centímetros de la muerte. ¿Entendido?

—Hmm, eso es bastante duro…

—Además, Seiya-kun, Tiramie, por favor esperen amablemente afuera.