Goblin Slayer – Side Story: Year One

Volumen 1

Capítulo 9: Después de la Sesión – Entre Aventuras

Parte 1

“Heeeey, recepcionista… ¡Tomaré esta misión!”

“¡Por supuesto!”

El Gremio de Aventureros ha vuelto a estar muy activo hoy.

Las cosas no se detuvieron sólo porque un monstruo enorme había sido derrotado.

Siempre había más aventuras por delante, y más papeleo por hacer relacionado con esas aventuras. Bandidos haciendo peligrosos los caminos, magos malvados escondidos en diversas fortalezas, vampiros en busca de mujeres jóvenes influyentes.

Aunque sólo era un rumor, incluso se hablaba de que una tribu de centauros iba a atacar.

Y luego, por supuesto, estaba la caza de goblins.

La Chica del Gremio, que ya no podía ser considerada nueva en el trabajo, corría como un ratón saltarín, ayudando a quienes daban misiones, preparando y publicando el papeleo para esas misiones, y trabajando con aventureros que habían venido a tomarlas.

Finalmente llegó la hora del almuerzo, pero tan pronto como terminó de comer, volvió directamente al trabajo. Apenas había tiempo para relajarse; estaba tan ocupada que su cabeza amenazaba con dar vueltas.

Aun así, ella tenía una sonrisa en el rostro: tenía un cierto papeleo en el que había estado trabajando en cada momento libre que tenía.

“Oh-ho-ho. ¿Qué es esto?”, preguntó su colega, echando un vistazo al documento, con un sándwich aún en la boca. La Chica del Gremio, sonriendo, extendió el documento para que ella lo viera, y parpadeó. “¿Una solicitud de ascenso de rango?”

“¡Correcto!”

“Oh, lo entiendo… había un montón de porcelanas ayudando con ese Rock Eater, ¿no?”

Para determinar el rango de un aventurero se tenían en cuenta varias cosas: su currículum de aventurero, la cantidad total de recompensas que había recibido, la cantidad de bien que había hecho en el área en el que vivía, y su personalidad, entre otras cosas. Eliminar a un monstruo que se había establecido en una mina ciertamente contribuiría a la promoción de cualquiera. Asumiendo que no hubiera fallas evidentes en su personalidad, bien podrían esperar ganar un nivel inmediatamente.

Pero entonces su colega se detuvo con un desconcertado “¿Hmm? Espera un segundo… No creo que este tipo estuviera siquiera en esa aventura, ¿verdad?”

“Oh, es cierto. No lo estaba.” La Chica del Gremio agitó la cabeza, sus trenzas meneándose al unísono.

Pero luego, sin embargo, le mostró a su colega su hoja de aventuras con gran orgullo.

“Esta persona está trabajando muy duro”, dijo. “Extremadamente duro. Todo por sí mismo.”

“Oh, cielos”, dijo su colega, masticando su sándwich pensativamente y mirando la hoja con considerable interés.

Sus habilidades y destrezas eran promedio, o incluso por debajo del promedio.

Las aventuras que había completado consistían en: goblins, goblins, goblins, goblins, y más goblins.

Supongo que eso explica por qué he visto tan pocas misiones de goblins sobrantes recientemente.

“Sigue apilando piedras y tendrás una montaña, ¿huh?”, ella murmuró para sí misma. Miró a la Chica del Gremio con los ojos agudos de un clérigo del Dios Supremo. “No falsificaste nada de esto, ¿verdad?”

“¡Como si fuera a hacer algo así!”

“Bien, entonces.” Ella asintió aceptando.

La Chica del Gremio, con el pecho hinchado de orgullo, sólo podía sonreír con arrepentimiento.

Su colega, terminando la corteza de su sándwich, la guiñó un ojo.

“Todo está bien, de todos modos. Todo el mundo conoce a uno o dos aventureros a los que les gustaría animar”.

“¿No contradice eso lo que dijiste antes…?”

“A veces el tiempo y el lugar dictan lo que dices.”

“¡Lo que sea!”

Ambas comenzaron a reírse.

Su tiempo de descanso terminaría pronto, y el trabajo comenzaría de nuevo.

También había muchos otros aventureros en proceso de promoción, lo que significaba mucho papeleo que llenar.

“Ya que estamos ambas aquí, ¿qué tal si salimos a tomar algo esta noche?”

“Suena bien. Si no estoy muy cansada.”

“Muy bien, entonces. Si no estás muy cansada.” La Chica del Gremio asintió con una sonrisa y volvió a su mostrador.

Su colega desapareció por un momento, pero luego volvió a meter la cabeza en el área de la Chica del Gremio.

“Oye, ¿la gente ha estado llamando a ese sujeto por algún tipo de apodo últimamente?”

“Sí”, dijo la Chica del Gremio, pareciendo tan orgullosa como si estuvieran hablando de sus propios logros. “De hecho, él…”

***

“¿Has oído? Hay un tipo raro por aquí últimamente.”

“Oh, ¿el que viste ese extraño atuendo?”

“La armadura y el casco de aspecto barato”.

“¿El que siempre está hablando de goblins? Lo he visto cada vez que viene al Gremio”.

“Quiero decir, él es Porcelana, así que, ¿qué más va a hacer?”

“Sí, hasta que afile sus dientes…”

“Los goblins son tan molestos. Si nunca vuelvo a ver a otro goblin, eso sería maravilloso”.

“Vamos, no pueden ser tan malos. Son sólo goblins, ¿verdad?”

“En fin, ¿qué pasa con él?”

“Dicen que ya ha conseguido ser Obsidiana.”

“Wow, ¿en serio? Entonces, ¿fue parte de la cacería del Rock Eater?”

“No, he oído que para él nada importa más que los goblins.”

“Si haces lo suficiente, supongo que la experiencia se acumula.”

“Además, está solo.”

“Oí que un tipo lo invitó a una aventura diferente y lo rechazó de inmediato.”

“Sólo caza goblins, ¿verdad?”

“Sólo goblins, goblins, goblins, goblins, ¿huh?”

“Así que no es un dragon slayer, él es un…” (Nova: Lo dejamos en inglés para que se entienda el origen de su nombre, pero para quienes no lo saben, Dragon Slayer = Asesino de Dragones)

***

Él no se dio cuenta inmediatamente de que el nombre se refería a él.

Había terminado de hacer su informe en el Gremio y estaba a punto de salir.

La ciudad estaba llena de actividad, con voces entusiastas. La rica luz del sol de verano brillaba por todas partes.

Él descartó la forma en que todas estas cosas inundaban su casco y volteó lentamente.

“¿Te refieres a mí?”

“¿A quién más podría referirme?”

El joven guerrero estaba allí de pie. El joven con armadura tuvo que pensar por un momento para recordar quién era, pero cuando lo recordó, asintió con la cabeza, el casco se movió en silencio. “Ya veo.”

“¿Están mejor tus heridas? Escuché que te agobiaron unos goblins.”

“Sí.” Volvió a asentir con la cabeza. “No hay problema.”

Todo fue bastante sorprendente: él había estado completamente exhausto, gravemente herido, caminando con dificultad bajo la lluvia antes de que finalmente colapsara.

No sabía quién lo había llevado al templo, ni quién había curado sus heridas. Sus heridas, sin embargo, sanaron milagrosamente bien, su fuerza y resistencia eran tan buenas como siempre lo habían sido.

Normalmente, habría tomado muchos días recuperarse de algo así.

“Yo también. Ambos necesitamos nuestra salud para ganarnos la vida. Me alegro de que estés bien.”

El joven guerrero le dio una palmadita en el hombro. Pensó durante un momento, y luego el casco se inclinó lentamente.

“¿Una aventura?”

“Sí.” El joven se rascó la zona bajo su nariz y se rió. “Matando ratas gigantes en las alcantarillas.”

“¿Es eso cierto?”

“Ya no tengo ningún miembro en mi grupo, pero pensé que podría hacerlo solo por el momento.”

Todavía había dudas en torno al joven, pero su encogimiento de hombros parecía bastante natural.

Pensó en la imagen del joven guerrero, todos sus compañeros se habían ido, pasando todo su tiempo en la taberna.

“…Ya veo.” Asintió, algo que el otro hombre pareció encontrar, de algún modo, deslumbrante.

Entonces el joven guerrero le dio a la armadura de cuero en su pecho una amistosa palmada.

“Si alguna vez tienes problemas, llámame.”

“Um…”

“Nos registramos el mismo día. Eso es un vínculo”.

Él se quedó en silencio por un momento, y luego dijo: “Entiendo”. Su voz era torpe y silenciosa, y añadió: “Eso haré”.

“Claro que sí”, dijo el joven guerrero riendo, como si esa respuesta le agradase de alguna manera. “¿Y qué hay de ti, entonces? ¿Más cacerías de goblins?”

“No.” Agitó la cabeza lentamente. “Estaba por irme a casa”.

Estaba a punto de empezar a caminar de nuevo cuando se detuvo y dijo: “¿Qué fue lo que me dijiste? ¿Lo primero?”

“¿Eso?”, dijo el joven guerrero, como si estuviera sorprendido de que aún no lo supiera.

“Es un apodo.”

“¿Un apodo?”

“Claro”. El joven guerrero sonrió. “Tu apodo”.

“Te llaman Goblin Slayer.”