Kono Subarashii Sekai ni Shukufuku wo!

Volumen 10: La Mejor Apuesta del Mundo

Capítulo 2: ¡Educando a Estas Dos Chicas Mimadas!

Parte 3

Aproximadamente una mitad de nuestro trabajo consistía en viajar tranquilos y sin preocupaciones en carruaje.
O al menos eso es lo que yo pensaba.

―¡Guaaaaaah, Kazuma-san! ¡¡Kazuma-san!! ¡Quiero que me cambies de sitio! ¡Esto da mucho miedo!

―¡Oye, ¿no estamos yendo demasiado rápido?! ¡Si tenemos un accidente a esta velocidad moriremos instantáneamente!

Mientras que Aqua gritaba aterrada por la velocidad excesiva que habían alcanzado los lagartos corredores, yo hice lo mismo para avisar a la conductora. El carruaje flotaba a poca distancia del suelo sin verse afectado por la fuerza de rozamiento, de modo que los lagartos podían tirar de ella llegando a una velocidad de vértigo.

―¡No pasa nada, Kazuma! Todas las carrozas que utilizan los miembros de la familia real tienen una barrera muy potente que se les ha aplicado de antemano. En caso de que se produzca un accidente, las personas sentadas donde estamos nosotras serían las únicas que acabarían hechas papilla. ¡Jajajaja, maravilloso! ¡Estos lagartos corredores son realmente maravillosos! ¡Bien, vamos a dar un poco más de ritmo a esto!

―¡Para! ¡Eh, déjame meterme en la parte de los pasajeros!

En respuesta a la reacción curiosamente entusiasta de Darkness, Aqua empezó a gritar y a llorar. Mientras que estaba ocurriendo todo esto en el asiento del conductor, Iris y Megumin jugaban alegremente como niñas.

―¡Kazuma, Kazuma, acabo de ver a unas criaturas que parecían mandrágoras copulando!

―¡¿D-Dónde las has visto?! ¡Yo también quiero ver a las mandrágoras!

¿No están concentradas en el juego porque ven constantemente cosas extrañas a nuestro alrededor o porque es la primera vez que hacen un viaje como este?

Las dos niñas de ojos radiantes pegaron la cara contra la ventanilla mientras que al mismo tiempo competían para determinar quién tenía derecho a mirar.

―Lo que quieres ver no son las mandrágoras, sino cómo copulan, ¿verdad? No solo tenemos a una dama noble que intenta satisfacer sus perversiones con Kazuma, sino que además tenemos a una miembro de la realeza que es una pervertida en secreto. ¿De verdad le irá bien a este país?

―¡No hay ninguna pervertida en secreto dentro de la familia real! …¿y quién ese esa dama de la nobleza que intentó hacer cosas sucias con Onii-sama? …Es posible que sea…

Darkness se sonrojó hasta las orejas cuando las dos niñas con el ánimo por las nubes se quedaron mirándola.

―¡Oye, ¿qué vas a hacer si nos chocamos a esta velocidad contra un monstruo que esté cruzando el camino?! ¡Si un ser tan preciado como yo acaba convirtiéndose en papilla en un lugar así, el mundo llegará a su fin! ¡Oye Darkness, ¿me estás escuchando?!

―No pasa nada, Aqua. Este carruaje también cuenta con varios objetos mágicos que repelen a los monstruos, por lo que es muy improbable que de repente uno se ponga a cruzar el camino y nos estrellemos con él. Sí, siempre y cuando tengamos buena suerte, no nos sucederá nada…

―¡Oye Kazuma, Darkness ha perdido el juicio! ¡Te lo suplico, deja que me suba en la parte de atrás, por favor!

No sería un error decir que éramos demasiado ruidosos como para formar parte de un séquito real.

¿Es que esto va a ser así todos los días? Un momento, ahora que lo pienso… ¿acaso se nos puede considerar auténticos guardaespaldas?

Empecé a sentirme algo preocupado por la posibilidad de que al final ni siquiera fuésemos capaces de cumplir con nuestro trabajo, pero mis dudas desaparecieron enseguida cuando sucedió lo siguiente:

―¡Exterion!

Al mismo tiempo que Iris lanzó un grito, un haz de luz cegadora salió disparado de su espada en la dirección de avance del vehículo. Por supuesto el destino no podía ser amable con nosotros aunque solo fuera una vez, así que apareció un monstruo en medio del camino. Como si fuera el ataque especial del héroe de un manga o de un videojuego, el monstruo que tenía el aspecto de una vaca gigante se partió limpiamente en dos mitades.

Puede que por culpa de que Darkness nos había gafado, una gran cantidad de monstruos similares bloqueó el camino. No podíamos atropellarlos sin más porque tendríamos un accidente, así que no tuvimos otra opción que detenernos y bajar del carruaje para despejar el camino. La verdad es que no estuvo mal volver a poner los pies en tierra durante un rato, pero… En ese momento indiqué algo con el dedo a Darkness, que se encontraba a mi lado.

―Eh, ¿por qué Iris es tan fuerte? Mejor dicho, ¿acaso nos necesita siendo así de fuerte?

―Como sabes, Iris-sama es una miembro de la realeza. Desde hace muchos siglos, los reyes y los nobles más poderosos han estado emparejándose con los héroes de la nación para procrear descendientes igual de fuertes que ellos, y como resultado su potencial latente se dispara con cada generación. Además de eso, todos reciben una educación de la más alta calidad en una gran variedad de campos. También les dan sin restricciones los mejores alimentos que se pueden producir, y utilizan las armas heredadas de los propios héroes para luchar. ¿Sabías que Su Majestad y el príncipe heredero de este país ahora mismo se encuentran luchando en el frente de batalla?

¿Cómo voy a saber eso? Pues si eso es cierto, mandad a los reyes para que derroten al Rey Demonio de una vez. Ya me parecía un poco extraño que nosotros fuésemos los únicos guardaespaldas, después de todo ahora mismo no hay nadie competente en la capital.

Me había quedado sin palabras tras presenciar la fuerza de Iris en combate, y entonces, con una sonrisa en el rostro, vino corriendo hacia mí con su espada abrazada en posición horizontal.

―¡¿Cómo lo he hecho, Onii-sama?! ¡Me he esforzado mucho!

Vi que Iris quería recibir halagos por mi parte y decidí que no importaba lo terrorífica que pudiera ser manejando una espada.

―No podía esperar menos de mi hermanita. Aún no estás a mi nivel, ya que he eliminado a muchos comandantes del ejército del Rey Demonio, pero por lo fuerte que has dado esos espadazos te daré un aprobado. ¡Sigue así!

―¡No sé de dónde viene esa confianza que tienes en ti mismo, pero permíteme que me encargue de los enemigos! ¡Por favor, mírame atentamente mientras acabo con esos monstruos utilizando esta reliquia divina que ha ido pasando de generación en generación por mi familia!

¿Acaba de decir “reliquia divina”?

―Hey, déjame ver esa espada. Parece que tiene mucho valor, y además brilla con luz propia y todo.

―¿Te refieres a esto? Se trata de uno de los tesoros nacionales, y se llama Calibur. Al parecer es un arma divina que puede proteger a su portador de cualquier estado perjudicial o maldición, ¿sabes? La vaina es realmente preciosa, así que estuve insistiéndole a mi padre para que me la diera.

Yo, eh, bueno, sí que sé algo sobre esta “Calibur”. Si no recuerdo mal, Megumin escribió algo así en mi cuerpo durante el tiempo que fui un cadáver. Creo que sí, esta tiene que ser la famosa espada sagrada que todo el mundo de la Tierra conoce. Pero un momento, ¿la tiene una princesa y no uno de los héroes que están luchando ahora mismo en el frente de batalla?

Por alguna razón, Megumin se encontraba de un humor estupendo a pesar de que Iris le había quitado su momento de gloria. Entonces se dirigió a ella, que también sonreía entusiasmada.

―Aunque sigues siendo mi subordinada, no podía haber esperado menos de mi mano izquierda. La próxima vez que veas un monstruo, simplemente pártelo por la mitad como acabas de hacer ahora.

―¡Sí, yo me encargo de todo!

Aquí hay algo que no encaja, no debería decir “yo me encargo de todo”. Nosotros somos sus guardaespaldas, no tiene sentido que le digamos a la princesa que se lance a la batalla.

―Megumin, ¿qué quieres decir con “subordinada” y “mano izquierda”? ¿Hicieron algo raro las dos sin que yo lo sepa? No puedo evitar pensar que aquí está pasando algo raro, la única forma que deberías haber tenido para comunicarte con Iris es mediante correos, ¿no?

―Qué poco respeto tienes al decir “algo raro”. Nosotras hemos realizado únicamente actos de justicia, además, ahora mismo tan solo nos encontramos en el nivel donde mi mano izquierda y la derecha han podido encontrar una tapadera para ocultar su verdadera identidad, pero estamos empezando a expandirnos. Una vez que nos convirtamos en una organización enorme, te daré una invitación para que seas mi escudero.

En otras palabras, se ha hecho una base secreta con unos amigos para jugar en ella, ¿verdad? Da igual en qué circunstancia sea, esta chica siempre se está comportando como una niña. Aunque a veces cuando estamos solos hace cosas que llevan a mi corazón a latir más rápido…