Shin no nakama janai to Yuusha

Volumen 4

Capitulo 3: Caminos Divergentes

Parte 2

Fue entonces cuando Ares finalmente entendió lo que había sucedido. El hombre que había tomado por Danan antes era un demonio Asura que había comido la carne de Danan y asumió su forma. El mismo demonio Asura que se le había acercado en las ruinas.

“Así que te las arreglaste para sobrevivir. Tienes la tenacidad de una cucaracha. Te lo concedo”, comentó Shisandan.

“Ha-ha-ha. Probablemente lo diga como un insulto, pero respeto su capacidad de recuperación. La forma en que se aferran a la vida es solo otro tipo de fortaleza”. Danan extendió su brazo izquierdo y lentamente comenzó a acercarse. “Oy, Ares. Este es mío. No te atrevas a entrometerte”.

La expresión de Shisandan se tensó cuando Danan se acercó. El hombre prácticamente emanaba la emoción de la batalla por cada poro.

El entumecimiento de mi mano no desaparecerá… ¿Un Arte Marcial?

Esa espada arrojada había sido arrojada sabiendo que Shisandan la bloquearía. Los dedos del demonio estaban temblando, impidiéndole agarrar su espada correctamente. Eso lo dejó incapaz de realizar más que la torpe habilidad con la espada de un principiante que acababa de tomar un arma por primera vez.

Me ha pillado. Dejar que mis dos brazos quedaran inutilizados fue una tontería. Incluso si vuelvo a mi forma original, no podré controlarlos mejor.

La forma natural de un demonio Asura tenía seis brazos, pero el daño recibido mientras se transformaba no desaparecía simplemente si la criatura retrocedía. Si uno de los brazos de Shisandan fuera cortado mientras era Bui, sería lo mismo que tener tres de sus brazos reales cortados.

Pero tampoco tiene el brazo derecho. ¿Realmente puede pelear así?

En el momento en que Danan entró en el rango de Shisandan, el Artista Marcial con un solo brazo y el demonio Asura despegaron del suelo. Shisandan bajó su espada, pero Danan la desvió con la mano izquierda. Al momento siguiente, el brazo de Danan se agitó en el aire, alcanzando a Shisandan directamente en la cara.

“¡¿Argh?!”

El demonio se tambaleó hacia atrás varios pasos. Trató de preparar su arma de nuevo, pero resbaló sobre una rodilla como si la fuerza hubiera abandonado su cuerpo.

“Oh, sí, antes de que lo olvide”, dijo Danan mientras miraba a Shisandan. “No te voy a perdonar. De hecho, te voy a dar una paliza hasta que mueras. Pero tengo que agradecerte”.

“¿Qué?”

“Me hiciste darme cuenta de que había estado descuidando mi mano izquierda. Nunca supe que podría usarlo tan bien si me lo proponía. Me ha hecho aún más fuerte de lo que era antes”.

***

La batalla continuó, Danan mantuvo el liderazgo todo el tiempo. Shisandan lanzó un ataque tras otro, pero sus movimientos fueron descuidados. Sus dos brazos estaban medio paralizados debido al Arte Marcial: Rompe Cuernos Fang-Smasher que Danan le había lanzado.

“¡Orahhh! ¡Estás lleno de aberturas! ¡Patada de Pisoteo!” Una rotonda intensa, revestida de energía, se estrelló contra el estómago de Shisandan. Su cuerpo voló en el aire por el impacto del Arte Marcial antes de estrellarse contra la pared detrás de él y colapsar sobre manos y rodillas.

“¡Toma esto!”

Había una sonrisa feroz en el rostro de Danan mientras desataba una patada temible sin darle a Shisandan la oportunidad de levantarse. El demonio era todo lo que podía hacer para defenderse. Ni siquiera pudo manejar un contraataque.

“¡Ares!” Shisandan gritó el nombre del Sabio. Estaba claro lo que quería… Estaba pidiendo ayuda.

“…” Sin embargo, Ares no lo ayudó. En la actualidad, sus pensamientos estaban en completo desorden. Ataco a Danan, un hombre con el que he viajado durante tanto tiempo, ¿uno de los camaradas de la Heroína? No puedo hacerlo, no puedo, no puedo…

“¡Ares!” llamó Shisandan de nuevo.

Ares quería taparse los oídos y acurrucarse en una bola. Qué hermoso hubiera sido si pudiera olvidar todo lo que lo rodeaba.

¡Pensar! ¡Actuar! ¡Sigue adelante y no te detengas! Eres sabio. Las elecciones que haces son correctas porque eres el Sabio.

Los impulsos de la bendición de Ares ahogaron sus propios sentimientos. Ares no tenía derecho a dejar la decisión a otra persona. No importa la situación, debe pensar y actuar por sí mismo, incluso si su bendición no le indica la elección correcta. La bendición le gritó que se comportara como corresponde al Sabio.

“¡Ayúdame, Ares!” Shisandan lloró por tercera vez. Una ráfaga de golpes cayó sobre el demonio, extrayendo sangre con cada golpe.

El cambiaformas morirá en poco tiempo, pensó Ares. Con eso, se dio cuenta de que si Shisandan llegaba a su fin, Ares nunca más podría regresar al grupo de la Heroína. Bueno, entonces supongo que no queda nada que considerar.

“¡Jabalina de Tormenta Gigantesca!”

Danan era un hombre sencillo. Creía que Shisandan había engañado a Ares al igual que el demonio lo había engañado a él. Por lo tanto, parecía obvio que Ares se enfrentaría al demonio una vez que supiera la verdadera identidad de Shisandan. No había ninguna duda en la mente de Danan. Por mucho que le disgustara Ares, Danan todavía creía que el Sabio era una buena persona en el fondo. Después de todo, había sido uno de los camaradas del héroe.

“¡¿Que—?! ¡¿Ares?! ¡¿Qué demonios?!”

Era como si una tormenta lo suficientemente grande como para cubrir todo un país se hubiera comprimido en una sola lanza negra. El hechizo fue del más alto nivel. Solo las mayores bendiciones de los magos tenían acceso a él.

Danan tardó en reaccionar ante el ataque inesperado, pero logró torcer su cuerpo con sus reflejos sobrenaturales, evitando un golpe directo. Desafortunadamente, incluso la electricidad que crepita alrededor de la jabalina fue suficiente para bañar el cuerpo de Danan con una energía que habría sido suficiente para partir un árbol gigante de siglos de antigüedad.

“¡¡¡Gaaaaaaaah!!!”

El cuerpo del hombre fornido se encerró mientras lenguas de relámpagos lo lamían. Su visión se oscureció por un momento entre el tremendo destello de luz y el intenso dolor. Y en esa fracción de segundo, se derramó sangre.

“Gh…”

La espada de Shisandan estaba enterrada profundamente en el costado de Danan.

“Burst.”

Con esa palabra, estalló una explosión del arma de Shisandan. Abrió la herida de par en par, y el calor y la fuerza explosiva destrozaron el cuerpo de Danan desde el interior.

“Incluso tú no puedes sobrevivir a una explosión desde el interior de tu cuerpo”.

Sin embargo, Danan no se cayó.

Como si no hiciera caso de su propia sangre goteando al suelo, Danan apretó el puño y silenciosamente asumió una postura.

“Los humanos son realmente fascinantes. Nunca antes había visto a un Artista Marcial como tú. Tu fuerza supera con creces el papel de tu bendición”.

Shisandan se puso de pie lentamente, firmando un sello con su mano izquierda. Su cuerpo se expandió, creciendo a casi dos metros y medio de altura. Tenía seis brazos musculosos. Su rostro oscuro se transformó en el de un demonio Asura con colmillos. Shisandan sacó las otras cinco espadas de su cintura, una tras otra. Este estilo de seis espadas era el estilo de combate tradicional de los demonios Asura.

Danan dio un gran paso atrás, plantó la pierna derecha con firmeza y enfrentó el ataque de frente. Tenía los ojos hundidos, pero no había perdido las ganas de luchar. El sexteto de espadas se arremolinaba como un tornado, estrellándose en rápida sucesión. Cada swing contenía la fuerza para dividir el enorme cuerpo de Danan en dos. Sin embargo, incluso cubierto de heridas y medio inconsciente, Danan se enfrentó a la cascada de golpes con un solo brazo y destrozó cada arma.

Se decía que Danan podía romper el acero con los dedos, e incluso en la puerta de la muerte, estuvo a la altura.

“Realmente eres un monstruo de las artes marciales, pero…” Shisandan torció su pierna derecha como una serpiente. Danan estaba ocupado bloqueando la tormenta de acero con un solo brazo, dejándolo abierto cuando la pierna de Shisandan se estrelló contra su pecho.

“¡Gah! Hah…”

El dolor recorrió el pecho de Danan. Cuando la pierna de Shisandan se retiró, la punta rota de una espada sobresalía de donde había pateado.

“Soy bastante hábil en el combate cuerpo a cuerpo. Aunque para ti, puede parecer poco más que meras acrobacias,” comentó Shisandan con una sonrisa.

Mientras pateaba, Shisandan agarró la punta de la espada rota que volaba por el aire con los dedos de los pies y la golpeó contra el pecho de Danan con un solo golpe fluido.

“No… no… eso fue… real… es mi… derrota…” Los labios de Danan se agrietaron ligeramente mientras miraba a Shisandan hacia abajo, sin guardar rencor por la intervención de Ares.

Finalmente llegando a su límite, Danan se derrumbó.

***

Ares se sorprendió de lo tranquilo que se sintió después de ver a Danan desplomarse en el suelo. Había levantado la mano contra un camarada, lo había traicionado. A Ares le pareció extraño que no estuviera más conmovido. ¿Por qué no sufrió de culpa?

Sé por qué… estoy acostumbrado. Porque esta no es la primera vez que me vuelvo contra un camarada. El rostro de Gideon brilló en el fondo de la mente de Ares. Realmente estuvimos juntos durante mucho tiempo.

Ares se había unido al grupo después de la llegada de Ruti a la capital. Había estado en el grupo más tiempo después de Gideon y se había aventurado con Gideon más que nadie más que Ruti. Habían luchado y sobrevivido a innumerables batallas, habían coqueteado con la muerte más veces de las que podían contarse y se habían salvado el uno al otro en más de unas pocas ocasiones.

Ares odiaba a Gideon, pero también había confiado en su habilidad. Bien pudo haber sido el que mejor entendió lo asombroso que era Gideon.

Por eso me deshice de él.

Con Gideon allí, Ares no pudo estar a la altura de su bendición. Ruti nunca llegaría a confiar en él y los otros miembros del grupo no confiarían en él. Gideon, incluso sin habilidades, había sido un hombre mucho más sabio que él.

Ares finalmente entendió la razón por la que había alejado a Gideon. “Gracias por la ayuda, Ares”, comentó el demonio gigante Asura.

Ares había tomado su decisión. Caminaría con Shisandan, eligiendo el camino de la traición para reclamar al Héroe que le había sido robado. No hubo más vuelta atrás.

“Sigamos. Está más adelante, ¿verdad? ¿Una reliquia del Héroe?”

“En efecto.”

Ares dejó a Danan en el suelo allí y continuó más adentro de las ruinas con Shisandan.

***

Se había colocado una poderosa trampa justo antes de la entrada a la cámara más profunda. Sin embargo, Shisandan sacó la piedra del corazón de su capa y envió su poder mágico al antiguo tablero de control elfo al lado de la puerta. En solo unos minutos, el peligroso dispositivo se desactivó.

Ares no podía imaginarse una trampa tan poderosa controlando tan fácilmente. La gente comparó el control mágico preciso necesario para operar los controles de la tecnología de los elfos antiguos con golpear el ojo de una mosca con una flecha, y por una buena razón. Sin embargo, esos pensamientos abandonaron inmediatamente la mente de Ares cuando vio lo que había en la habitación. Una caja dorada que probablemente había sido hecha por elfos del bosque.

“¡¿E-Eso es…?!”

Cinco espadas largas descansaban en el radiante recipiente. Ares los reconoció de inmediato.

“¡¿E-El Sagrado Asesino de Demonios?! P-Pero hay… ”

La espada larga de nivel de artefacto que manejaba Ruti, la Sagrada Asesino de Demonios. Legado al Héroe por Dios y transmitido a cada portador posterior de la bendición más poderosa. Era una espada sagrada e invencible que había matado a innumerables señores demonios.

De alguna manera, había cinco de esta arma previamente única en la caja dorada.

“No,” lo corrigió Shisandan. “El Sagrado Asesino de Demonios es una réplica de estas espadas. Estas son las primeras espadas del Héroe, sacadas de su tumba. Son las armas originales legadas por Dios”.

“¿E-Entonces estos son los artículos genuinos?”

“Correcto. Para distinguir, tal vez debería llamar a estos True Avenger, no, Sacred Avenger”.

Shisandan deslizó cuatro de las cinco cuchillas de la caja a las vainas vacías que colgaban de su cintura. El último, se lo entregó a Ares.

“En un nivel fundamental, la bendición del Héroe es una con la réplica del Asesino de Demonios; son reproducciones de Dios del alma del primer Héroe”.

“¿Reproducciones? ¿Alma?”

“Para que el Héroe actual cumpla su bendición, hay dos cosas que deben hacerse”.

Ese era el objetivo de Ares. Agarró la empuñadura que Shisandan le tendió. “¿Y estas son?”

“La primera es que ella tome el Sacred Avenger en su mano. Al igual que con el Sagrado Asesino de Demonios, estas armas tienen un poder que magnifica la Bendición Divina del Héroe. Si se potencia la bendición, los impulsos también aumentarán. Debería ser suficiente para restaurar los impulsos reprimidos por la Bendición del Diablo”.

“E-Entonces Ruti volverá a mi lado, ¿verdad?”

“No. Eso solo no es suficiente. En un nivel fundamental, el Héroe es simplemente un recipiente que sirve como manifestación de justicia. El Héroe no experimenta miedo, sin duda, ni vacilación. Es por eso que aquellos que llevan esa bendición experimentan impulsos tan poderosos que subsumen el ego del recipiente”.

“Entonces, ¿cuál es el segundo requisito?” Presionó Ares.

“¿Por qué la encarnación actual ha intentado vivir la vida como ‘Ruti’ en lugar de como ‘el Héroe’? Es porque tiene un deseo que no se puede cumplir a menos que siga siendo Ruti. Se aferra a un deseo que anhela lograr, incluso frente al sufrimiento bajo los impulsos de su bendición. Hay que quitarle el pilar de apoyo al que se aferra”.

“… Gideon…”

Al escuchar el susurro de Ares, Shisandan asintió con satisfacción.

***

Mientras tanto, Gideon, o mejor dicho, Red, estaba con sus camaradas, persiguiendo a Ares.

“Siento a alguien peleando en la distancia”.

Prestando atención a la advertencia de Tisse, el grupo aceleró el paso. Ni siquiera Red podía adivinar el camino que había elegido Ares.

Su enfrentamiento ya no pudo evitarse.