Oda Nobuna No Yobou (NL)

Volumen 20

Capitulo 5: Celebración de Bodas en Odawara.

Parte 1

Ahora que Bontenmaru la Conquistadora de Oshu se ha unido oficialmente a Oda Nobuna, el ejército movilizado por el clan Oda en Odawara, incluyendo a los guerreros Bando que vinieron a “rescatar Kanto” tales como Ota Sanrakusai de Musashi, el clan Satake de Hitachi y el clan Satomi de Awa, reunieron una inesperada cifra de combatientes que ascendía a los 200,000 efectivos, algo sin precedentes en toda la historia de Japón. Los Cruzados por otra parte, se estimaba que sus fuerzas rondaban entre los 50,000 con 100,000 como máximo, no obstante, sus números son desconocidos debido al abandono de la operación de desembarco y se dispersaron entre la flota en el mar y Hakone. Las tropas Houjou acuarteladas en el Castillo Odawara suman 50,000. Si los ejércitos Houjou y los Cruzados se aliaran, sumarían al menos 100,000 efectivos, y con las capacidades defensivas del Castillo Odawara, la fortaleza más sólida del país, habrían sido capaces de presentar resistencia.

No obstante, ahora que la paz se ha establecido entre los Cruzados y Oda Nobuna a través de la decisión de Isabel I, la cual cambió su postura desde antes de su encuentro y reconoció a Oda Nobuna como la “Reina de Zipangu” y ambos bandos se “reconciliaron” al completar el borrador del tratado comercial, dejando sola a Houjou Ujiyasu aislada en el Castillo Odawara. Ujiyasu no pudo decidirse entre convertirse o no en vasalla del clan Oda debido al alargue en las deliberaciones del Consejo Odawara, el cual ahora es un aspecto distintivo del clan Houjou. Finalmente, una flota de piratas ingleses liderados por Drake se alineó frente a la bahía Sagami en dirección al sur del Castillo Odawara, preparándose para bombardear el castillo desde el mar al momento que se les diera la orden.

Por  supuesto,  Nobuna  no  ordenó  “ataquen  Odawara”.  ─¡Con  esto  estamos  por  completar  el Tenka  Fubu!    ─¡Vayan  Satsuma-Hayato!     Las  precipitadas  hermanas  Shimazu  junto  con Honda Tadakatsu, se reunieron en la sala de predicas de Ishigakiyama y recibieron el castigo de escribir planas. No obstante, para Yoshihiro, el estar sentada todo el día escribiendo planas pudo con su paciencia y, ─Aahh, ¡no me puedo concentrar!    ¡Tengo que mover mi cuerpo…!    ¡ Permitan  que  pueda  luchar…!    ¡Preferiría  estar  del  lado  de  los  asediados…!  Suplicándole  a Nobuna a lo que, ─Te pondré a adornar con dientes de león el sashimi, le respondió eso y, ─

….*Ahem* *ahem* Mejor me quedo con las planas, no le quedó más remedio que aceptar su castigo.

Castillo de Montaña Ishigakiyama. Bajo el cielo azul.

Yo y Yoshiharu nos reuniremos en persona con Ujiyasu. No debe lanzarse una ofensiva en Odawara. ¿Nos vamos Yoshiharu? Iremos al Castillo Odawara a “negociar” y después de eso celebraremos la boda, dijo Nobuna.

Sagara Yoshiharu, quién se encontraba a su lado, estaba envuelto en un aura que no solo se puede describir como alguien con altas expectativas.

─Supongo que el tiempo finalmente ha llegado…

¿En cuántos campos de batalla he andado desde que me convocaron abruptamente a la Era Sengoku?, sobreviviendo bajo la protección de Kinoshita Tokichirou-jiisan, para que después me decidiera en servir como Hideyoshi. ¿Cuánto valor tuve que amansar pese a todas mis victorias y derrotas para abolir el “destino” de Nobuna ?

El encuentro con Nobuna, el contrato, la lealtad y las peleas amorosas. Y Kobayakawa Takakage. Akechi Mitsuhide. Takenaka Hanbei. Uesugi Kenshin. Bontenmaru. Encuentros con varias princesas guerreras que viven galantemente por toda la Tierra del Sol Naciente. Y aquellas ocasiones donde los hombres ofrendaban sus vidas por “proteger” a esas princesas guerreras. Saitou Dousan. Yamamoto Kansuke. Zenki. Ukita Naoie. Murakami Takeyoshi. Hattori Hanzou. Kai Soun. Y aquellos que no pude conocer, Mori Takamoto y Usami Sadamitsu.

─Nobuna, no podemos permitir que el final del sueño del Tenka Fubu se vea manchado con la destrucción del clan Houjou. No renunciaré a nada hasta el final.

─Lo sé. Incluso Ujiyasu parece que ya se hizo a la idea. No puedo obligarla a aceptar el argumento de la “rendición” que vaya en contra de la decisión del consejo de vasallos. El Castillo Odawara tienen la “determinación” de tres generaciones del clan Houjou, los cuales han sufrido el embate de los Takeda y Uesugi, además que tienen la fuerte ambición de la independencia de Kanto desde los tiempos Soun. A ella se le complica mucho anunciar que el clan Houjou, el cual es uno de los primeros clanes Daimyo de Japón, se rendirá si presentar resistencia. Esa es la razón por la cual debemos ir juntos.

─Entiendo.

─Y para que quedemos claros, no me vayas a decir de incluir a Ujiyasu en lo del Oouku, ¿me oyes?

─¿D-De ninguna manera? Digo, ¿por qué vuelve a salir el tema del establecimiento del Oouku una y otra vez? Saitou Toshimitsu se está llamando otra vez Lady Kasuga y estableció un puesto para el Oouku aquí en Hakone…

─Ah eso, bueno se debe a que logramos alcanzar la paz con los Cruzados, quienes eran la amenaza más poderosa que el país ha enfrentado, y la crisis nacional ya ha terminado. ¡Las princesas guerreras caen enamoradas rápidamente una vez la paz llega!  ¡Cielos~!

─Bueno, la paz y la tranquilidad son algo bueno, si. Es como un “impuesto por la paz” por así decirlo.

Haa… ya que decidimos no destruir al clan Houjou, no podemos entregar nuevas tierras como recompensa por la Guerra contra los Cruzados, pero ya estoy pensando en alternativas. Pero, con el fin de apaciguar a las princesas guerreras tal vez podría hacer una excepción con Kobayakawa Takakage… ella era tu pareja cuando sufriste de amnesia… así que no cuenta como “infidelidad”… a diferencia de la espontánea y obtusa de Juubei, ella si es modesta… murmuró Nobuna, pero como Yoshiharu se sentía nervioso no alcanzó a escucharla. Esto es raro en Yoshiharu ya que suele gozar de una buena audición. Si la hubiera escuchado, ─¡L-Lamento ponerte en esta situación Nobuna! ¡No te sobre esfuerces! Después de la ira puede decir «¡ Fuego! ─¡Hay que darle fuego al Honnouji!» , ¡vas a levantar esa bandera! , sintiendo que su corazón se parte en mil pedazos por tener que escoger entre Nobuna y Kobayakawa Takakage.

─¡Mufu! ¡Dejen que Simón se encargue de este cometido! ¡Luego escribiré tantas planas como sean necesarias!  ¡Me voy a quedar con los mejores méritos!  ¡Hahahaha!

Con sonidos de *clash* *clash* provenientes de un gong, Kuroda Kanbei por alguna razón se había atribuido el rol de “mensajera de paz” mientras lideraba un pequeño contingente de tropas en su marcha hacia el Castillo Odawara, el sonido de esos platillos hizo que los murmullos de Nobuna no se pudieran escuchar.

─Esp- ¿Harima? Todavía le afecta el fracaso de la inundación, ¡que pretende hablar por su cuenta con Ujiyasu!  ¡Qué hacemos si la atrapan y la vuelven a arrojar a un calabozo!

— Aaahh. No puedo permitir que los Cruzados se queden con el nombre de “Kurokan Segundona”. Tengo que deshacerme de esa mala impresión.

Kanbei salió disparada hacia las inmensas compuertas del Castillo Odawara ondeando una bandera blanca.

─Salve.  ¡Houjou-dono!

Intentando proyectar una imagen galante frente a los oficiales en los muros. Pero en ese momento…

Cayó en una fosa que habían cavado justo enfrente del castillo,

─¡Gyaaaa! ¡Así que esta Simón no puede escapar del destino de “siempre fracasar”! ¡

Kurokan conoce su fin en Odawara! ¡C-Como me arrepiento~!

Gritando miserablemente, a pesar de ser un prodigio en el arte de la guerra es igual o peor de torpe en algunas ocasiones.

─*Sniff* *Sniff* No te preocupes, solo es un hoyo. No pusieron púas de bambú, ¡resiste Kanbei-san!

Takenaka Hanbei, quién hasta cierto punto había previsto que algo así podía llegar a ocurrir, se apresuró a rescatar a una Kanbei que se retorcía en el agujero haciendo sonidos de *ugahh*

*uaghh*

─Al parecer se trata de una broma de parte de Ujiyasu-sama para sorprender a Nobuna-sama y Yoshiharu-san.

─¡Al final esta Simón se ganó esto por culpa de ustedes dos! ¡Ya cásense de una buena vez por todas! ¡No les voy a dar ningún regalo! ¡Y tampoco les daré a mi Hanbei como concubina! ¡Uwaahhh!

Nobuna, ─No digo pues. Harima no se puede quedar quieta, dijo con una sonrisa complicada, levantándose del taburete en la tienda de campaña del cuartel.

─En marcha Yoshiharu.

─Aah. Vamos. Al recinto de nuestra celebración de bodas… al Castillo Odawara. La Era Sengoku se termina hoy.

Cuando Yoshiharu y Nobuna llegaron a la entrada del Castillo Odawara sin caer por agujero, gracias al noble (y gracioso) sacrificio de Kanbei.

Saika Magoichi, quién lideraba a las tropas Saika en el asedio dijo, ─¡Tiempo de no verlos a ustedes dos! ¡Bienvenidos! ¡Ujiyasu los espera a ambos en la sala del té! ¡Vamos a cobrarle el doble al clan Oda y Houjou por este trabajo mercenario!, mientras abría las puertas.

Sotelo, quién entró junto con Magoichi al Castillo Odawara. ─¿Eh? ¿Es correcto que los mercenarios abran las puertas sin consultar? ¿No hay que esperar la aprobación de los líderes del clan Houjou? Aunque es algo molesto pasar por toda la burocracia del clan, ¿no deberías comprobarlo? , dijo indeciso a lo una enmascarada Fuuma Kotarou emergió desde el suelo para guiar a Nobuna y Yoshiharu, posteriormente le lanzó una mirada penetrante a Sotelo y, ─Si sigues poniendo trabas podemos ajustar nuestras cuentas pendientes, a lo que Sotelo, ─¡Geh! ¿ Hassasins? Así que están bajo el mando de los Houjou… ¡entiendo! ¡Pasen por favor! ¡Y- Y no moje mis pantalones!, dijo con voz entrecortada mientras buscaba un lugar donde ocultarse.

─Gracias Kotarou.

─¡En marcha!

─Si. Solo ustedes dos pueden liberar a Ujiyasu-sama de la “jaula” que representa el Castillo Odawara. Ella sufre de malestares estomacales y su espíritu se encuentra muy desgastado por los años de asedio y defensa de la región de Kanto… el sentido de responsabilidad por proteger el sueño de tres generaciones de la familia Houjou la encadenan a este lugar. Pero ya no más… se los ruego por favor.

***

La persona más antigua desde la fundación del clan Houjou. Houjou Gen’an, conocida como la “ancestra”, saludó sospechosamente con un “bienvenidos” a Nobuna y Yoshiharu dentro de la sala para el té.

─Mi princesa es muy orgullosa. Ella podría haber aceptado la sumisión tras una sola batalla, pero gracias a la intervención de los Cruzados, la guerra terminó antes de que pudiéramos unirnos al clan Oda, por lo que ella se perdió la oportunidad de jurar su lealtad y se encuentra en un dilema. Hohoho.

La entiendo. Es una familia samurái. Es como cuando nosotros luchamos con todas nuestras fuerzas en Sekigahara. Y por esa razón quiero terminar la Era Sengoku con un “Castillo sin derramamiento de sangre”… una nueva opción en lugar de terminar con una “batalla”, dijo Nobuna sonriendo.

Yoshiharu no pudo evitar sentirse hechizado por la sonrisa de Nobuna.

La personalidad de Nobuna es mecha corta y de corazón de pollito al mismo tiempo, eso debido a que anhela el amor materno desde que era una niña. Si tan solo se pudieran sanar todas las heridas emocionales de Nobuna y satisfacer sus anhelos, ella podría llegar a convertirse en una existencia capaz de cambiar el “destino” de todo el mundo. No, ella está por convertirse en eso. En tal heroína. En esa persona tan hermosa. Cielos, ella será mi “esposa”. Mi “pareja”. ¿De verdad alguien de este calibre se convertirá en mi “compañera de vida”?

─Yoshiharu. Sé lo que estás pensando. Incluso el invulnerable y heroico hombre del futuro Yoshiharu tiene sus propias inseguridades. Pero así es como eres. Me gustas no porque parezcas el hombre perfecto, sino porque tienes tus propios defectos. Así estás bien. Siéntete orgulloso.

Finalmente llegó la hora de la reunión secreta con Houjou Ujiyasu en la sala de té.

—  Tiempo sin verte, Oda Nobuna. Desde mi punto de vista eres una mujer cuyo “momento

ha acabado” y estabas destinada a desaparecer de la tierra sin poder cumplir con tus ambiciones… de no ser por Sagara Yoshiharu, la persona que se hubiera presentado hoy y me diera la recomendación del vasallaje no serías tú, sino otro general militar.

─Tienes razón. Pero eso no pasará. El curso del gobierno de Japón ya se decidió en la batalla de Sekigahara. El Ejército Occidental… yo gané la guerra y me convertí en la gobernante legítima de la nación. Por eso mismo, ya no deseo librar más batallas en suelo japonés. Por eso dependo del “Castillo sin derramamiento de sangre”, Ujiyasu. Solo cuando el clan Houjou acepte en paz y sin derramamiento de sangre el vasallaje con el clan Oda, la guerra por el control del país acabará y el Tenka Fubu estará completo, dando por terminada la Era Sengoku y daremos comienzo a una nueva era, Ujiyasu.

─Huh. ¿Qué pasaría si digo que me voy a encerrar por décadas? Oda Nobuna. Podríamos tener que luchar. Es fácil. Es fútil que me ataques desde afuera, no obstante, si Magoichi quién lidera las tropas Saika dentro del castillo se rebela, el castillo caerá desde adentro en un día.

─No quiero poner a Magoichi en una situación como esa, además que ella jamás estaría de acuerdo en hacerlo. Tú lo entiendes, ¿verdad?  Además, eso mandaría a volar mis ambiciones, si mi último movimiento en la consecución del Tenka Fubu terminara de esa forma.

─Aunque de mi parte me gustaría hacerte algo de daño ya que no estoy dispuesta a convertirme en una vasalla obediente, ¿me captas?  Si me rindo y entrego el Castillo Odawara sin luchar, no podría disculparme con Soun-sama y Ujitsuna-sama.

─Si Ujiyasu. Tú lograste soportar la presión de los Cruzados hasta el final y lograste defender el Castillo Odawara. No podrías haberlo logrado sin haber sobrevivido a las campañas militares de Uesugi Kenshin y Takeda Shingen, haciendo uso de tácticas de asedio. Gracias a ti, la división de Japón se pudo evitar justo a tiempo. El clan Houjou…

—  Hizo lo que tenía que hacer, la ambición de Soun-sama se ha cumplido. ¿Es eso lo que

quieres decir Oda Nobuna?

─¡Precisamente! Así el clan Houjou no tendrá que dejar de existir. Se te reconocerá el derecho de poseer Izu, Sagami y Musashi. No te pediré que abandones el Castillo Odawara, Ujiyasu. Y ya que Kenshin le entregó la autoridad a su hermanastra y se retiró de ser una Sengoku Daimyo, el gobierno de Kanto irá con tu hermana biológica, Uesugi Kagetora. A Kagetora se le entregará Ueno. Todo lo que tú tienes que hacer es una actuación frente a los demás daymios donde juras convertirte en mi vasalla. Todas las personas de Japón que participen en la “ceremonia” se darán cuenta que la “nación ha sido unificada”.

Incluso si se trata de una actuación me vas a obligar a obedecerte, ¿verdad? Maldijo Ujiyasu mientras se servía té. No obstante, en su interior, ─Me someteré a Oda Nobuna, no quiero que Japón se divida en Oriente y Occidente. Incluso Soun-sama jamás hubiera deseado ver que Japón se dividiera en dos ante la llegada de los Cruzados─, llegó a esa conclusión. Si los Cruzados no hubiera aparecido, ella habría librado una batalla final contra el clan Oda, tomado el camino de la independencia de Kanto. Sin embargo, la llegada de los Cruzados aceleró el crecimiento de Bontenmaru y eso lo cambió todo. El “destino” del clan Houjou cambió drásticamente con la llegada de Sagara Yoshiharu.