Eiyuu Ou (NL)

Volumen 4

Capítulo 6: Inglis, 15 Años — Dobles Aspirantes A Estrellas (6)

Parte 1

“¡Bienvenidos todos! ¡Bienvenido, Bienvenido!” Weismar, de pie en el escenario, hizo una profunda reverencia a la audiencia mientras hacía la presentación. Las miradas de una casa casi llena se centraron en él. Inglis y los demás, ocultos por las cortinas mientras esperaban entre bastidores, se asomaron.

“Wow… Hay tanta gente… Me estoy poniendo muy nervioso…” Pullum tragó saliva. Estaba vestida con el mismo traje que Rafinha, Leone y Liselotte. Al final, terminó uniéndose a la obra como una de las bailarinas de respaldo de Inglis porque Ian había sugerido que eso haría feliz a Lahti. Lahti se había opuesto, pero el conde Weismar había accedido de inmediato.

A pesar de sus quejas, Lahti había aprendido la coreografía del baile para poder enseñarle a Pullum, quien no era muy atlética y tenía problemas con los pasos. No había dicho abiertamente que estaba tratando de ser solidario, pero si Pullum iba a subir al escenario, quería ayudarla con eso.

“Idiota. ¡Yo soy el que está nervioso! Estoy tan preocupada de que la cagues y avergüences a Inglis…” murmuró Lahti.

“¡Haré lo mejor que pueda!”

“¡No te preocupes! Es mucho menos estresante que detener un barco que cae o luchar contra una bestia magicita, ¿verdad? Rafinha palmeó a Pullum en la espalda.

“S-Claro, pero mi corazón sigue latiendo…”

“Entonces piénsalo de esta manera. Todo el mundo va a estar mirando a Chris. Ni siquiera nos notarán en la parte de atrás, ¡así que no te preocupes!

“Puede que tengas razón”, accedió Pullum con una pausa. “Ella realmente se ve hermosa”.

El vestuario de Inglis para el espectáculo era aún más vistoso y glamuroso de lo que había sido cuando se la probaron por primera vez. Se había mirado largamente en el espejo hace un momento y pensó que realmente era todo un espectáculo.

“No creo que nadie se queje de tu apariencia, Inglis”, dijo Leone.

“Estoy segura de que la audiencia estará encantada”, coincidió Liselotte.

“Pero ya sabes, Pullum, creo que eres el más lindo de todos”, dijo Inglis, haciendo todo lo posible para imitar a Lahti mientras estaba de pie detrás de él. Hay límites a lo que mi voz puede alcanzar, pero creo que clavé el fraseo. Soy bueno fingiendo ser un chico. Después de todo, pasé toda la vida como uno.

Pullum jadeó. “¡¿Eh?! ¡¿Quieres decir eso, Lahti?!”

“¿Qué? ¡De ningún modo! Oye, Inglis, ¿qué estás haciendo? ¡Déjalo ya! Lahti gritó.

“Pensé que eso tranquilizaría a Pullum”, respondió Inglis. Pullum estaba tan ansiosa que en realidad la había escuchado mal como Lahti.

Ian se rió entre dientes. “Ja, ja, Inglis, estás tan tranquila a pesar de ser la protagonista. Increíble.”

“No tan relajado como Yua”. Inglis miró a su co-protagonista, profundamente dormida contra un tocador de utilería.

“Zzzzzzz…”

“¡¿Qué?! ¡Espera, no, Yua! ¡Despierta! ¡Se está levantando el telón! Morris, el líder de los estudiantes de segundo año, se apresuró a despertarla. Siempre estuvo pendiente de Yua. Su único papel en la obra era pilotear uno de los Flygears en una concurrida escena de batalla, pero también estaba presente para cuidar bien a Yua.

Mientras el grupo conversaba entre bastidores, el Conde Weismar se volvió hacia una sección particular de la audiencia y se inclinó con reverencia. “Tenemos algunos invitados maravillosos en la audiencia hoy, Su Majestad, si pudiéramos tener algunas palabras”.

“Mmm”. El rey Carlias se puso de pie mientras la multitud aplaudía. “Los acontecimientos recientes en la capital han sido duros para todos. Como vuestro rey, me siento moralmente responsable. Me disculpo por lo que ha ocurrido”. El rey inclinó la cabeza profundamente. “Espero que esta actuación de la compañía Weismar sea un maravilloso alivio para tu tristeza. En exhibición esta noche está el futuro de nuestro país: ¡estudiantes de la Academia Chiral Knights! Están participando junto a la compañía. Disfrutemos todos juntos de este momento”.

Una ola de aplausos aún más fuerte surgió cuando terminó de hablar.

“¡Nuestras mamás y mi papá también están aquí!” Los ojos de Rafinha estaban pegados al público.

“Así son”, dijo Inglis.

¡Y Alina incluso está aquí! ¡Está bien, tenemos que hacer todo lo posible por ella! Rafinha apretó las manos, sus ojos se iluminaron con determinación.

“Acordado. Necesitamos dar un buen desempeño para ella y nuestras madres. ¡Me divertiré y tendré mi verdadera pelea con Yua! Inglis estaba igual de emocionada. Este fue finalmente el día de la pelea real de Inglis contra el Runeless de segundo año. Había muchas otras partes de la obra que tendría que hacer primero, pero estaba ansiosa por esa escena en particular.

“¡No, si te involucras demasiado, te excederás como de costumbre! Intenta ser una niña y lucir linda. Hará felices a tu mamá y a Alina”.

“Okey. ¡Haré ambas cosas!”

“Me gustaría recordarles que no se concentren demasiado en la pelea y atrapen a la audiencia en el fuego cruzado”, le dijo Liselotte a Inglis.

“Estará bien. El director tendrá un pupilo arriba.

La directora Miriela ya había tomado asiento en la audiencia. Mientras miraba, lanzaría una protección durante la pelea de Inglis y la escena Flygear para proteger a la audiencia de cualquier accidente. Originalmente, este iba a ser un trabajo para algunos estudiantes, pero la directora Miriela accedió a hacerlo después de una solicitud para manejarlo.

“Uf… ¡Ahh! ¡Está comenzando! ¡No estoy listo para esto!”. Los nervios de Pullum solo empeoraban.

“¡Demasiado tarde para echarse atrás ahora! ¡Cálmate y haz lo que puedas!” Lahti la animó.

“¡S-Sí! ¡Por favor toma mi mano para calmarme!”

“¡¿Qué?! ¡¿Por qué tengo que hacer eso?!”

“¡Apurarse! ¡¿O quieres que falle?!”

“¡¿Qué clase de amenaza es esa?! Sheesh, si tengo que…”

“¿Vaya? Estoy celoso de lo bien que se llevan ustedes dos”. Rafinha sonrió.

“Yo también.” Leona se rió.

“¡C-Cállate! ¡Me está obligando a hacerlo! Lahti protestó.

Pullum inhaló y luego exhaló lentamente. “¡Bien! ¡Me he calmado un poco!”

“Por cierto, ¿puedes pilotar el Flygear para la pelea aérea entre Chris y Yua?” preguntó Rafinha. “Lo siento, esto es tan repentino…”

Originalmente, el plan era que Rafinha y Lahti pilotearan el avión para Inglis y Yua, pero Inglis y Rafinha habían decidido que había algo más que Rafinha debía hacer en ese momento.

“¡Oh, cierto—eso! ¡Sí, puedo hacerlo!”

“¿En realidad? Me preocupa cómo va a ir esa parte…” Lahti se quejó.

Pullum se volvió hacia Lahti de nuevo. “Entonces, ¿tal vez podrías tomar mi mano para calmarme antes de esa escena?”

“Uf, ¿por qué tienes que ser tan egocéntrico…?”

“¡Espera, el telón está a punto de levantarse!” Llamó Leona.

El conde Weismar estaba terminando su presentación. “Ahora, damas y caballeros, ¡disfruten el espectáculo! ¡Nuestra historia comienza!”

Con eso, el telón se levantó lentamente. Sin embargo, había un problema.

“Zzzzzzz…”

Yua estaba dormido de nuevo.

“¡Ugggh! ¡Lo siento, chicos, ayúdenme!” Morris gimió consternado.

“¡¿Eh?! ¡Oh sí!”

“¿¡Está dormida otra vez!?”

“¡Vamos a sacarla del escenario!”

“¡Date prisa, antes de que alguien vea!”

El grupo llevó a Yua más atrás del escenario.

◆  ◇  ◆

La primera escena mostraba al personaje de Ian, el príncipe Malik, visitando un teatro que no solía frecuentar. Cuando el Príncipe Malik apareció en el escenario, las mujeres de la audiencia comenzaron a susurrar.

“Ese chico tiene una cara linda”.

“Sí. Su voz también suena como la de un príncipe”.

“El luce bien.”

Las críticas no fueron malas. Lo habían elegido de acuerdo con los gustos de Yua, pero afortunadamente sus gustos eran convencionales.

“Para conocer los corazones de mi gente, debo saber cómo se entretienen. Quizá aquí tenga lugar mi descubrimiento. Ian comandó el escenario como el Príncipe Malik con una voz fuerte y resonante, y el escenario se oscureció por un momento.

Esa fue la señal de Inglis: la escena en la que Maribelle bailaba en el teatro que visitaba el príncipe. Ella y los demás asintieron antes de dirigirse al centro del escenario oscuro. Rafinha y los otros tres se alinearon horizontalmente frente a la audiencia, mientras que Inglis se adelantó solo.

Y un respiro después…

¡Hacer clic!  Un estrecho círculo de luz iluminó a Inglis.

“Guau…!” La audiencia se quedó sin aliento mucho más ruidosamente de lo que lo habían hecho por el Príncipe Malik de Ian.

“¡I-increíble!”

“¡Esa chica es adorable!”

“¡Deslumbrantemente bella!”

“¡Es como si hubiera salido de un cuadro!”

Una sorda admiración provino de todos los rincones de la habitación. La forma de Inglis se destacaba aún más gracias a la puesta en escena que la iluminaba, separándola de la oscuridad. Eso fue todo gracias a la visión del Conde Weismar.

“¡Lady Inglis! ¡Eres hermosa!” una voz familiar gritó.

“¡Inglis!” gritó un grupo. Todos los vítores resonaron en el salón. Inglis se dio cuenta de que las voces procedían de la dirección del rey Carlias, lo que significaba que los culpables probablemente eran Reddas y el resto de la Guardia Real. Inglis no dijo nada, intentando que no reaccionaran.

Que embarazoso. Realmente preferiría que se contuvieran,  pensó Inglis. Gritar así en un teatro es un signo de mala educación.

Efectivamente, el Rey Carlias reaccionó rápidamente, reprendiendo a Reddas y los demás. Estaban demasiado lejos, por lo que Inglis no estaba seguro de lo que dijo.

“¡Maribelle!” gritaron las mismas voces.

Inglis jadeó. Ella no había esperado eso en absoluto. Simplemente cambiaron el nombre de mi personaje. ¿Qué les dijo el rey Carlias? ¿Para llamarme por el nombre de mi personaje? Realmente no creo que ese fuera el problema en cuestión…

Inglis se tomó un momento para centrarse, inhalando y exhalando. Lentamente levantó los brazos en un arco y comenzó a bailar. Los músicos de la compañía tocaron una melodía que parecía fluir a través de ella, siguiendo sus movimientos. Las luces se expandieron para iluminar todo el escenario, y Rafinha y los demás comenzaron a seguirlos a tiempo.

Mientras bailaban, Inglis miró a su lado y vio a Rafinha moverse con una amplia sonrisa, llena de energía. Era un placer verla. Tenía un aura que te atraía. Ojalá Inglis hubiera estado entre el público observándola.

Leone bailó con seriedad mientras sus mejillas se sonrojaban nerviosamente. Se apegó fielmente a la coreografía practicada. La compañía había diseñado el baile teniendo en cuenta la capacidad física sobresaliente de los estudiantes de la academia de caballeros, por lo que fue bastante intenso y complicado. Los movimientos hicieron que los pechos de Leone se balancearan. Inglis se preguntó si se estaría sonrojando por sentirse incómoda con tantos ojos sobre ella. Era una mujer joven y hermosa, por lo que no fue una sorpresa que la audiencia se sintiera atraída por ella. Inglis, sin embargo, estaba algo acostumbrado a la atención debido a que ya había estado en una producción de Weismar.

Liselotte era imponente, con una expresión fuerte y llena de confianza. Era provocativa a su manera. El público también la encontró encantadora. Como hija del ex canciller, era la noble de más alto rango entre los estudiantes. El aplomo de alguien que creció rodeado de tanta atención brilló en el escenario.

La expresión de Pullum era tan desesperada como su movimiento. Sus pasos iban un poco atrasados, pero lo estaba dando todo. Inglis miró a Lahti observando desde las alas. Frunció el ceño con preocupación, lo que a Inglis le resultó divertido. Cada movimiento de Pullum provocó una respuesta emocional en él.

Todos tenían su propio encanto, pero al final, fue Inglis quien atrajo más la atención. Unas pocas miradas juguetonas y sonrisas fueron todo lo que se necesitó para despertar los aplausos de la audiencia.

Alina observaba desde su asiento, con los ojos brillantes. Cuando Inglis la vio por un momento, se preguntó si la chica se estaba divirtiendo. Ella esperaba que sí.

Entonces sus ojos se encontraron con los de su madre. Inglis sonrió y Serena hizo lo mismo a cambio, entrecerrando ligeramente los ojos.

¿Está disfrutando esto?  No importa cuántos recuerdos tenga del Rey Inglis, ella es mi madre y definitivamente la amo.

Inglis no tenía intención de casarse, ni inclinación de tener hijos algún día, por lo que Serena nunca vería a su hija el día de su boda, ni vería a un nieto. Por eso Inglis quería ser la mejor hija que pudiera en el momento actual.

“¡Bien!” gritó Inglis. La intención era prepararse para el espectáculo que se avecinaba, pero no podía negar que el grito no la animó exactamente. De todos modos, dejó escapar un “¡Haaah!” mientras saltaba alto, giraba en el aire y aterrizaba en el pasillo central. Un movimiento tan dramático no había estado originalmente en el guión, pero el Conde Weismar lo había aprobado antes.

“¡¿Vaya?!”

“¡Q-Qué salto de ella!”

Para que todos me vean, para sentir su aliento, e incluso el flujo de su maná…

Cuando la música se acercaba a su conclusión, Inglis volvió a saltar por los aires, esta vez aterrizando en el escenario. Y cuando finalmente llegó a su fin, se reunieron y adoptaron una pose.

El público estalló en un estridente aplauso para las cinco chicas. Después de esperar un momento para disfrutar de las secuelas, el grupo abandonó el escenario.

“Mmm. Eso se sintió genial”. Rafinha sonrió.

“Creo que lo logramos de alguna manera”. Pullum se llevó la mano al pecho con alivio.

“Eso fue más vergonzoso de lo que esperaba… Me pregunto si hice los movimientos correctamente…” murmuró Leone.

“Estuviste bien, Leone. Siempre prestas más atención a los demás que te miran cuando te sientes ansiosa”, respondió Liselotte.

“¡Oye, Pullum! ¡Tengo que admitir que lo hiciste mejor de lo que esperaba!” dijo Lahti.

“¡Guau! Me sorprende que digas eso. Creo que merezco una palmada en la cabeza como recompensa.

“De ninguna manera, ¿Por qué tengo que…?”

Mientras observaba su cercanía por el rabillo del ojo, Rafinha le susurró a Inglis: “¿Entonces…? ¿Cómo te fue, Chris? Su voz y expresión eran muy serias, completamente cambiadas desde un momento antes.

“Es como esperábamos. Tomaré nota de ello. ¿Puedes entregarle un mensaje al director?”

“¡Entiendo!” Inglis y Rafinha se saludaron con la cabeza.

◆  ◇  ◆

Las escenas que siguieron a la emocionante escena de baile de Maribelle también transcurrieron sin problemas. Si bien su actuación no estuvo a la altura de los estándares establecidos por los actores profesionales, que la compañía ya esperaba, Inglis y Yua eran mucho más hábiles en términos físicos, lo que era evidente en los bailes y el combate escénico. Además, Inglis pudo cautivar a la audiencia solo con su apariencia. En general, dado que el guion requería mucha acción, probablemente lo estaba haciendo mejor que una actriz profesional para esta obra en particular.

La escena actual, en el clímax de la trama, era una feroz batalla aérea entre Inglis y Yua. Originalmente, el plan era que Rafinha pilotara su Flygear, pero Pullum se hizo cargo con poca antelación. El pilotaje de Pullum fue un poco inestable, pero Inglis pudo cubrir eso con su propia destreza física.

¡Bam, bam, bam! ¡Ruido sordo! ¡Tortazo! ¡Bam, bam, bam!

La batalla de alta velocidad entre dos hermosas jóvenes que saltaban entre Flygears asombró a la audiencia. Cuando Inglis y Yua retrocedieron ante una serie de ataques y regresaron a sus posiciones originales, pudieron escuchar voces desde abajo.

“¡Increíble! ¡Esa chica Maribelle es tan linda, pero tan fuerte!

“¡Euthylis también es linda, y está apilada!”

Yua, como es habitual en la obra, estaba usando inserciones acolchadas. “Mm-hm”. Ella sonrió y se rió para sí misma.

Ella debe haber escuchado ese comentario. Inglis se alegró de que la estuviera pasando bien, pero esperaba que Yua siguiera prestando atención a la obra en sí.

“¡Yua, Yua! ¡Tu línea es la siguiente! Lahti incitó desde el asiento del piloto del Flygear de Yua. Estaba tan preocupado por Pullum que había memorizado todo el guión. Inglis se alegró por la ayuda.

“Uh… No está mal. Está bien, te prestaré mi ayuda. Terminaremos esto más tarde”, dijo Yua, entregando la línea de Euthylis.

Reconociendo la fuerza de Maribelle, Euthylis se ofreció a cooperar con ella por un tiempo. Una vez que salvaron de forma encubierta al príncipe Malik, llegó el momento.

Fuera del Flygear y en el escenario, Maribelle se enfrentó a Euthylis. “Espera un momento. ¿A dónde crees que vas?”

“Nuestros objetivos son los mismos. Y por lo tanto, me despido de ti…

“Piensa otra vez.”

“¿Eh? ¿Qué quieres decir?

Las líneas estaban escritas, pero Inglis no pudo evitar sentir una oleada de emoción. La escena en la que luchaban de verdad, sin un vencedor en el guión, estaba a punto de comenzar. Inglis finalmente pudo ver lo que Yua podía hacer cuando luchaba de verdad. Habiendo llegado tan lejos sin incidentes, todo lo que le quedaba a Inglis era divertirse.

“Solo uno de nosotros necesita ir con el príncipe. Si ambos lo hacemos, dudará en su decisión”, dijo Inglis como Maribelle.

“¡Eso es ridículo! Un duelo para determinar quién va hacia él… ¿De verdad crees que eso lo hará feliz?

Hablando personalmente, Inglis no estaba seguro de que lo haría feliz, pero definitivamente la haría feliz a ella, a la actriz, no al personaje. Estaba encantada, de hecho. La oportunidad de tener una pelea seria con alguien tan fuerte como Yua sería un momento de dicha invaluable.

He usado todos los trucos sucios, cada gramo de sofisma, para manipular a los que me rodean para que esto suceda. ¡Lo disfrutaré al máximo y me aseguraré de crecer a partir de la experiencia!

El guión requería que Maribelle se mostrara reacia a aceptar, y ese nivel de actuación fue difícil para Inglis. Había estado esperando esto tanto tiempo que apenas podía controlar su expresión. “No es lo que lo hará feliz, es lo que no lo lastimará. Es amable, delicado…

“¡Equivocado! Porque eres así, él—” vino la línea de Yua.

¡No, no está mal! Ambos somos poderosos. Deberíamos tratar de mejorar luchando entre nosotros. No necesariamente me gusta la idea de resolver problemas con los puños, pero eso es porque reduce la idea de poder a un medio para un fin. Más que la justicia o los ideales, el poder mismo debería ser el fin. Esa es la forma más pura de acercarse a la fuerza.

Al final del día, Inglis participaba en una obra de teatro; era una obra de ficción. La filosofía realmente no importaba aquí. Ella solo quería llegar a la pelea.

Entre la paga de la compañía Weismar y la reapertura de la cafetería, el estómago de Inglis ahora estaba saciado. Por otro lado, estaba hambrienta de una pelea real.

“Entonces no se puede decir nada más. No había manera de evitar esto”. Yua sostuvo su espada de utilería con aplomo, posando de una manera poco natural y llamativa.

“¡En ese caso, no hay nada que hacer más que sacudir estas brasas!”

¡Honestamente, quiero todas las chispas que pueda obtener!  Inglis pensó, también preparándose con su espada de apoyo.

¡Pum, pum, pum!

Yua salió disparada hacia adelante, sus pies golpeando contra el escenario. “¡Toma esto!” Honestamente, su manejo de la espada era bastante descuidado, más como golpes con un garrote que cortes elegantes. Eso era natural, considerando que Yua normalmente no usaba una espada.

“¡No harás tal cosa!”