Regressor Instruction Manual

Volumen 1

Capítulo 25: Asesino Calculador (Parte 3)

¿Qué le pasa?

Actuaba un poco diferente al Kim Hyun-Sung que yo conocía, no era el tipo de persona que mostraba sus emociones. La única vez que le vi mostrar una reacción tan grande fue cuando descubrió a Jung Ha-Yan, y eso sólo duró un momento.

¿Qué demonios?

Pensé que quizás se había dado cuenta del destino de Park Hye-Young, pero no me miraba a mí ni a Ha-Yan. Miraba fijamente a Jung Jin-Ho.

Era la primera vez que lo veía así.

Jung Jin-Ho no estaba usando magia ni nada, pero los ojos de Kim Hyun-Sung estaban definitivamente llenos de hostilidad. Sus ojos y expresión estaban en guardia, sus manos y pies temblaban ligeramente y, sobre todo, parecía muy serio.

Lo conoce.

No había forma de que supiera exactamente cómo lo conocía, pero si pensaba de la forma más simple posible, había muchas probabilidades de que tuvieran un futuro desafortunado.

Kim Hyun-Sung no tenía la capacidad de ver la ventana de estado de otras personas como yo, así que estaba seguro de que no mantenía la guardia alta porque conociera lo que decía su carácter.

La sola presencia de Jin-Ho lo hacía sentirse incómodo hasta el punto de mostrar hostilidad hacia él.

Momentos después, Kim Hyun-Sung seguía mirando a Jung Jin-Ho con cautela, sin hacer nada.

Probablemente fue vergonzoso para Jin-Ho no recibir respuesta alguna para su apretón de manos, pero aún así, le sostuvo la mirada con una sonrisa brillante. Cualquier persona que lo mirara pensaría que era una buena persona. Claro, no podían saber su verdadera naturaleza por escrito, como yo.

“Señor Hyun-Sung” le hablé mientras le di un golpecito en el hombro para sacarlo de su estupor.

“Oh… lo siento” parpadeó varias veces, saliendo de su trance. “Me llamo Kim Hyun-Sung”. Seguido, por fin aceptó su mano. Sostuvieron el apretón por varios segundos. Jin-Ho lo escudriñaba con la mirada debido a su comportamiento tan extraño.

Asesino…asesino…

Basándome en su reacción, pude llegar a varias hipótesis bajo la condición de que era un asesino psicótico. Uno, o bien mató a Kim Hyun-Sung o a la gente que lo rodeaba. O dos, que nunca se conocieron y Kim Hyun-Sung simplemente escuchó rumores sobre él. La primera suposición era menos probable, pues se habría abalanzado contra él, espada en mano, apenas verlo. Durante todo este tiempo demostró ser un santo, pero no reaccionar ante tu asesino o al de tus seres queridos está a otro nivel. Más que un santo, sería un pusilánime.

O tal vez su inteligencia se sobrepuso a sus emociones, haciendo que estuviera siendo consciente de mí, de Park Deok-Gu, Jung Ha-Yan y de la gente que había dentro del refugio. Si ese fuera el caso, entonces probablemente ya había apuñalado a Jin-Ho docenas de veces en su cabeza. Yo habría hecho lo mismo.

“Me presentaré de nuevo. Me llamo Jung Jin-Ho. He oído hablar mucho de usted del señor Seok-Woo. Él me dijo que usted es el que maneja el refugio”.

“Encontré a estos supervivientes por casualidad” dijo Kim Hyun-Sung.

“He oído que has estado trabajando duro para rescatar a la gente” dijo Jung Jin-Ho.

“Hago todo lo que está a mi alcance”.

“Creo que eres realmente increíble. El señor Seok-Woo me dijo varias veces que eras fuerte, pero… realmente… eres más fuerte de lo que pensaba” dijo, haciendo hincapié en la última frase. “¿Estaría bien si te pregunto cuáles son tus números?” preguntó Jung Jin-Ho, dejando a la imaginación de si hablaba de los atributos u otra cosa inquietante.

Ese inútil de Yoo Seok-Woo debe habérselo contado todo.

“Me temo que no puedo decírtelo” Kim Hyun-Sung negó con su cabeza.

“¡Oh!, lo siento si te incomodé. Vinimos desde el punto de partida, no muy lejos de aquí” cambió de tema de forma abrupta. “Como no pudimos encontrar ningún superviviente allí, vagamos por los alrededores y casualmente encontramos al señor Seok-Woo” explicó.

“¿Es así?” preguntó.

“Sí. Se lo dije antes al señor Ki-Young, nunca imaginé que habría tantos supervivientes aquí” extendió sus brazos hacia el refugio, maravillado por lo que veía.

La expresión de Kim Hyun-Sung volvió a la normalidad, a la que tenía cuando no estaba con la guardia alta. Como ya había pasado por esto una vez, sabía que estaba acostumbrado a ocultar sus sentimientos, pero Kim Hyun-Sung estaba más tranquilo de lo que imaginaba. Posó su mano izquierda sobre su cadera y sonrió ligeramente, demostrando su relajación.

Incluso conociendo el futuro, era capaz de mantener la calma. Una vez más, hizo alarde de sus habilidades como líder.

Seguí reflexionando sobre mi primer hipótesis. Cada vez perdía más peso.

Kim Hyun-Sung estaba acostumbrado a controlar sus emociones más de lo que yo imaginaba. En consecuencia, creí que mi segunda suposición tenía más probabilidades de ser cierta que la primera.

Rumores o historias sobre Jung Jin-Ho.

El potencial de Jung Jin-Ho estaba por las nubes. Comparándolo con un juego, sería como si empezara con varios niveles encima en vez de empezar desde lo más bajo, como cualquier otro jugador nuevo. Teniendo en cuenta su carácter, había muchas probabilidades de que se convirtiera en un conocido asesino o criminal en el futuro. Si eso ocurriera, seguramente causaría un gran revuelo en el mundo. Mi primera impresión de que era un militar chocaba un poco con todo esto, pero le daría el beneficio de la duda, puesto que no conocía su pasado.

Mi segunda hipótesis, explicándola a detalle, sería que sus actos criminales llegaron a oídos de Hyun-Sung. Era muy probable que nunca se conocieron en persona, pues Hyun-Sung reaccionó al escuchar su nombre. Seguía existiendo la posibilidad de que Jin-Ho cambie su forma de ser, pues era imposible asegurar que todo ocurrirá exactamente igual a la primera ronda.

“Si no es mucha molestia, ¿estaría bien si nos unimos?” Jung Jin-Ho preguntó.

“¿Tienen algo para ofrecernos?” pregunté.

“Claro, tenemos provisiones, así que estoy seguro de que podemos comer todos juntos durante unos días” señaló con su pulgar a un morral que colgaba de su espalda. Los demás tenían bolsas similares. “También podemos apoyarlos en batalla. No somos los mejores, pero entre más manos, mejor, ¿no?”

“No importa si no traen nada, siempre recibimos a nuevos supervivientes. Enseguida los guiaremos” la respuesta de Hyun-Sung me sorprendió.

“Oh, muchas gracias, de verdad” dijo Jin-Ho, haciendo una pequeña reverencia.

“Deok-Gu, ayuda a la señorita Ji-Hye a guiar a esta gente” le pedí a Deok-Gu.

“Hermano, ¿estará bien? Justo ahora, nosotros…”

“No importa, Deok-Gu. Si pasa algo, llámame enseguida” le dije, interrumpiéndolo.

“Ugh, si tú lo dices Ki-Young… Todos, síganme. Este lugar no es tan cómodo para vivir, pero será mejor que vagar por ahí” dijo Park Deok-Gu, haciendo un ademán con su mano.

La decisión de Kim Hyun-Sung fue inesperada, pero razonable al mismo tiempo. Estaba seguro de que conocía el dicho: “Mantén cerca a tus amigos, y más cerca a tus enemigos”. Esa era una parte con la que también estaba de acuerdo.

Fuera un psicópata o no, lo mejor era tenerlo vigilado dentro del refugio. Si le negábamos la entrada, podría guardarnos odio y emboscarnos en el momento más inesperado, o atacar el refugio en nuestra ausencia. El tipo tampoco era un tonto, recordando cómo fingió que todo estaba bien cuando Hyun-Sung apareció.

Jung Jin-Ho probablemente dio un paso atrás porque creía que no tenía ninguna oportunidad cuando apareció Kim Hyun-Sung. Si no hubiera aparecido, habríamos muerto. Claro que opondríamos resistencia, pero el final era inevitable.

Gracias.

Estaba realmente agradecido hacia Kim Hyun-Sung. Pero pude evitar sonreír mientras la comisura de mis labios subía automáticamente, mientras otra idea surcó mi mente.

Podemos usarlo. Definitivamente podemos usarlo en esta situación.

Era una situación bastante aleatoria, pero no era una mala idea. Incluso puede que sea la persona más afortunada de la tierra.

Gracias, Jung Jin-Ho, hijo de perra.

Cuando giré ligeramente la cabeza, vi a Kim Hyun-Sung. Parecía un poco aturdido.

“Vamos adentro, Hyun-Sung” le dije.

“Puedes adelantarte, yo voy a quedarme aquí fuera un rato”.

Parecía que tenía muchas cosas en la cabeza, y a mí me pasaba lo mismo. Sin embargo, tenía que continuar mi conversación con él aquí. Hacerlo iba a ser mucho más efectivo.

“¿Lo conoces?” le pregunté, señalando con mis ojos a Jin-Ho, quien estaba por cruzar la barricada del refugio.

“¿Por qué preguntas?”

“Por alguna razón, parecía que conocías a esa persona” le expliqué.

“Supongo que… se puede decir que sé un poco de él, pero probablemente él no sepa nada de mí. Nos cruzamos brevemente hace mucho tiempo…” dijo, asintiendo después de contemplar su respuesta durante unos segundos.

“Oh, así que ese era el tipo de conexión que tenían” comenté.

“Realmente no se puede llamar una conexión porque, como dije, todo lo que hicimos fue pasar uno al lado del otro” tenía la mirada perdida mientras me lo explicó. Parecía estar recordando su pasado. “¿Podrías…?” empezó a preguntar, regresando de sus recuerdos.

“Por supuesto, no le diré nada” dije, terminando su frase.

Mantener un secreto era la parte más importante de la terapia.

“Sabía que estarías a salvo, pero realmente has vuelto. Como esperaba, eres increíble” lo elogié, cambiando de tema.

“No, sólo tuve suerte. Fue un poco difícil, pero pude regresar tomando un desvío que estaba lo más lejos posible de los monstruos. Ahora que lo pienso, me alivia que hayas vuelto sano y salvo. ¿Te encontraste con algún problema en el camino de vuelta?”

“En realidad, hay algo que tengo que contarte”.

“¿Sí?”

“Hye-Young falleció” le informé directamente.

Se iba a enterar tarde o temprano.

Sentía que la cabeza me iba a estallar por culpa de Jung Jin-Ho, pero sacar el tema en esta situación era razonable. Kim Hyun-Sung parecía un poco sorprendido. Seguro que no esperaba que muriera, pero asintió lentamente.

Afortunadamente, no parecía sospechar de mí.

Me di cuenta de ello cuando le pregunté antes si se había metido en algún lío. Cuando noté que su expresión no cambiaba, tuve la certeza de que no había encontrado el cadáver de Park Hye-Young ni ningún rastro de ella.

“Es… una pena. ¿Cómo sucedió?” se cruzó de brazos, con su semblante transmitiendo pesar y tristeza.

“Asesinos” dije.

“¿Perdón?”

“Asesinos, mano humana, no monstruos” repetí.

“¿Estás… seguro?” preguntó de nuevo, levantando una ceja. Estaba realmente sorprendido por mis palabras

“Sí, estoy seguro. No falta ser un experto para diferenciar el corte de una espada al de las garras de los monstruos” le expliqué.

“Hmmm…”

“Mientras corría con Deok-Gu, me di cuenta de que Ha-Yan y Hye-Young se separaron de nosotros. Yo estaba recitando un hechizo en ese momento, por lo que no sabía lo que estaba pasando a mi alrededor. Estaba al límite, tratando de mantener el hechizo que estaba recitando…” dije.

“Sí, debe ser difícil conjurar y tener cuidado de no tropezarte mientras corres, todo al mismo tiempo” asintió.

“Exactamente. Cuando las encontré más tarde, vi a Hye-Young agonizando con los miembros amputados, con rastros de magia en su pierna izquierda. Conseguí encontrar a Ha-Yan de algún modo, ya que estaba cerca… pero no sé exactamente qué pasó” froté mi frente, fingiendo confusión.

“¿Le cortaron las extremidades?” preguntó Kim Hyun-Sung. Su expresión me dejaba ver el dolor que sentía al imagina tal final.

“Sí, así fue. Primero, usaron magia para inmovilizarla. Pensé que tal vez había caído en una trampa instalada en el calabozo, pero encontré pisadas de sangre… humanas. También tenía una flecha rota en el torso…” esto último era mentira, pero no tuve que fingir mi mueca de disgusto al recordar la escena.

“No te fuerces, debió de ser aterrador”.

“Lo fue. Sinceramente, quería traer de vuelta el cuerpo de la señorita Hye-Young, pero no tenía tiempo. Pensé que sería mejor quemar su cuerpo en lugar de dejar que los monstruos se la comieran, así que, por respeto…”

Hyun-Sung asintió, comprendiendo lo que quería decir.

Ser lo más honesto posible era lo mejor. Aún así, agregué unas mentiras bien calculadas, ya que un sospechoso más apropiado había aparecido.

Volví a pensar para mis adentros.

Gracias, Jung Jin-Ho, el Brujo.

El culpable había sido decidido.

El asesino psicópata, Jung Jin-Ho, ¡ese bastardo era el culpable!