Trash of the Count’s Family (NW)

Capítulo 76: ¿No Puedes Arreglarlo? (5)

Sonriendo, Billos dejó escapar un pequeño suspiro.

“Ahh~”.

Fue un suspiro involuntario.

Al ver eso, Cale también suspiró.

“Debes de tener problemas”.

“…Mmm.”

Billos dudó un momento y luego asintió.

“Supongo que sí, pero está bien”.

“¿Por haber participado en la restauración de Puzzle City?”

“Sí”.

La Familia Flynn ahora estaba sin cabeza. Billos estaba en proceso de convertirse en el jefe de la misma, pero la agitación causada por las diversas muertes en la Familia Flynn no disminuía.

“Pero el Príncipe Heredero al menos nos dio una oportunidad en esto”.

La buena noticia es que a los altos cargos del Gremio de Comerciantes Flynn se les había dado cierta participación en una importante iniciativa del Reino para restaurar Puzzle City.

“Porque Su Alteza Real confía en ti”.

Habiendo trabajado con Billos unas cuantas veces, el Príncipe Heredero Alberu confiaba en él lo suficiente como para asignar algunos trabajos al Gremio de Comerciantes Flynn.

“Eso es bueno”.

Billos no pudo ocultar una sonrisa amarga.

‘Qué vacío’.

Se sintió vacío en ese momento.

‘…De alguna manera’.

De alguna manera quería ser el mandamás (máximo accionista) en el Gremio de Comerciantes Flynn.

Quería pasar de ser un marginado a ser reconocido por sus habilidades.

El proceso iba bien.

‘Hasta que conocí a Cale gongja-nim’. (Nota: Gongja-nim significa: Joven Maestro)

Tras conocerle, Billos creció, asumiendo trabajos como ocuparse de los artefactos mágicos del Reino Whipper.

Y luego terminó así.

El Gremio de Comerciantes Flynn, sin líder, sin hermanos.

Solo Billos, herido y prófugo, podía poner orden en el caos.

‘Estoy cansado’.

Aún le dolía el cuerpo.

Pero no era el trabajo duro o el agotamiento.

Se sentía como si algo, algo que conmovía (impulsaba) a Billos se hubiera ido.

Aunque sus sueños de convertirse en un gran comerciante en el Gremio de Comerciantes Flynn permanecieron sin cambios, Billos se había cansado.

Dijo con una voz ligeramente débil.

“Me alegro, de verdad, de que creas en mí, aunque sea del Gremio de Comerciantes Flynn”.

“No puedo decir que confío en tu Gremio, pero…”

Pap~

En ese momento, Cale sacó un papel de sus brazos y lo tiró sobre la mesa.

Preguntándose qué era, Billos lo miró fijamente, miró a Cale, escuchando las palabras indiferentes de este último cuando sus miradas se encontraron.

“Si confío en ti”.

“…¿Qué?”

“Echa un vistazo”.

Billos tragó saliva.

Al igual que la vez que se dio cuenta de que este bastardo de Joven Maestro no era solo un bastardo.

Una intuición inexplicable, una sensación que sólo podía describirse como certera, se apoderó de él.

Con manos temblorosas, Billos recogió los papeles que Cale había colocado sobre la mesa.

Sarak~

Mientras desdoblaba los papeles, Cale le habló al oído con calma.

“Su Alteza Real el Príncipe Heredero, y yo, ya hemos discutido sobre esto”.

Los ojos de Billos parpadearon al leer el texto.

Las palabras Mina aparecieron a la vista, seguidas de tamaño y producción.

“…J-Joven Maestro…”

Le tembló la voz al llamar a Cale. Su agarre de los papeles se tensó.

“¿Por qué?”

Cale dijo con indiferencia a Billos, que le miraba.

“Porque si no te tengo a ti, no tengo un comerciante que acepte el trabajo. Lo sabes, ¿verdad?”.

“…Hah”.

Billos soltó un pequeño suspiro.

“Ja, ja, ja-”

Y luego se echó a reír. Billos dibujó una sonrisa en su cara hinchada.

Le distorsionaba la cara y le hacía parecer bastante feo, pero no le importaba.

“… No hay solo una o dos minas”.

Eran varias hojas de papel.

“Así es.”

Cale miró por la ventana. Esta era una visita secreta, por lo que Puzzle City no sabía que Cale estaba aquí.

A pesar del clima frío de fin de año, abrió la boca mientras observaba el trabajo de restauración en pleno apogeo.

“Quizá acabe trabajando en varias regiones, o incluso reinos. Aunque sea el dueño de las minas, no puedo estar allí todo el tiempo”.

Estaría viajando entre Mundos.

“Así que no tengo más remedio que incluirte”.

En cuanto a Cale, tenía que poner un aliado seguro estas minas.

Y ese era Billos.

‘Digno de confianza’.

A Cale también le inspiraba confianza Billos, que había acudido a él cuando todo su cuerpo estaba herido.

“…Joven Maestro”.

Billos entrecerró los ojos con fuerza.

‘Y yo confío más en usted’.

Las palabras resonaron en su mente.

Su agarre de los papeles se tensó.

Abriendo de nuevo los ojos, habló.

“Haré todo lo que pueda”.

“Sí, está bien”.

Cale volvió a mirar por la ventana y habló.

“Primeramente…”

Y justo entonces…

¡Ding, ding, ding!

Una alarma sonó desde los brazos de Cale.

“¿Joven Maestro?”

Billos vio que su ceño se fruncía ligeramente.

No era ira, sino una sutil irritación y molestia.

‘¿Qué es?’

Mientras Bilos reflexionaba sobre la pregunta, Cale se frotó los ojos con una mano y abrió la boca.

“Me temo que vas a tener que conocer al Capitán/General Tunka”.

La expresión de Billos se endureció.

“…No querrás decirme que las minas…”

“De todos modos, no podemos manejarlas todas en Roan”.

Estas son las minas más grandes de su clase.

Era imposible que el Reino de Roan manejara esto solo, y si pudiera permitírselo, incluso si todas las minas fueran extraídas en el Reino de Roan.

‘Entonces las otras naciones se unirían e irían tras Roan’.

Resultó que los reinos de los Continentes Oriental y Occidental estaban bien situados para hacerlo.

“Hablemos primero con el Príncipe Heredero.”

“Si.”

¡Ding! ¡Ding!

Billos vaciló ante el ruido constante que escuchaba, pero al ver que Cale le ignoraba, desistió.

“Hasta pronto, entonces”.

“Sí. Me dirigiré a la Finca de Henituse”.

“De acuerdo”.

Cale dio por terminada su conversación con Billos, y buscó en su pecho el espejo.

<… Me preguntaba cómo estabas…

… ¿Estás durmiendo?>

¡Ding ding ding!

<T-Talvez estás enojado porque hablé informalmente… ¿Es eso?

-De las Llanuras Centrales que está estudiando cómo te sientes>

“Hah~”

Por alguna razón, Cale suspiró cuando siguió viendo mensajes suyos.

“…Ser agresivo es ser agresivo”.

Y…

“…Ser cooperativo es ser cooperativo….”

Ding~

Justo entonces, el espejo vibró, mostrando un nuevo mensaje.

<El Dios de la Muerte está ocupado por un tiempo. Actualmente está ocupado por resolver la pelea entre Equilib-algo y Protecc-algo. Por lo tanto, resuelva cualquier consulta por su cuenta.>

(Nota: Recuerden que el Dios de la Protección es la Super Rock)

Cale lo ignoró.

Es porque es un Dios que realmente no necesitaba de todos modos.

Click~

Salió de la habitación de la posada donde había estado hablando con Billos y entró en la habitación contigua.

“Humano, ¿has terminado de hablar?”

“Mm”.

Raon voló al lado de Cale y señaló por la ventana.

“¡Están trabajando muy duro!”

“Sí”.

Las cuadrillas de especialistas en construcción eran elegidas por el reino, pero los obreros en general procedían en su mayoría de Puzzle City y de las fincas de los alrededores.

Algunos incluso se ofrecieron como voluntarios para trabajar en la restauración, principalmente para recuperar sus hogares.

“Mmm”.

Un nuevo Puzzle City se estaba construyendo.

‘Será bueno si sale bien’.

Tal vez el Príncipe Heredero reconstruya Puzzle City en una gran ciudad si tiene suficiente dinero.

¡Ding, ding, ding!

Al oír de nuevo la alarma, Cale se sentó en la silla de un lado y cruzó las piernas.

Ding.

Colocó el espejo sobre la mesa.

¡Ding, ding, ding!

Comprobó el mensaje.

<¡Hola…! ¡Cale Henituse…!

¡Soy las Llanuras Centrales…!

No respondiste, así que pensé… (*pausa*)… ¿E-Elegí las palabras equivocadas?

Así que… mejor debería hablar más formal…

– Las Llanuras Centrales intenta enviar un mensaje cortés>

“…”

Cale estaba harto/incomodo de este Mundo que se hacía llamar “Llanuras Centrales”.

“Humano, ¿por qué te ves tan nervioso? ¡Esa expresión es como si estuvieras a punto de ayudar a alguien!”

Al escuchar las palabras de Raon, Cale abrió la boca.

“Vamos a las Llanuras Centrales”.

¡Ding, ding, ding!

<¿Esto…? ¿En serio…?

Que grandes son los Cielos… ¡Muchas gracias!>

“Si, pero…”

Dijo Cale con cara indiferente.

“Me iré en dos semanas”.

‘Primero planeo ir a descansar todo lo que pueda.’

‘Aunque no estoy demasiado cansado debido a Shaolen, pero…’

Ron todavía no se había quitado el yeso, e incluso si lo hiciera, no podía simplemente irse. Tenía que descansar un rato.

<D-Dos semanas está bien, de verdad, está bien…!>

El espejo tembló, pero Cale lo ignoró.

“Y con una condición”.

<…¡S-Sólo dilo…! Lo intentaré…!>

El espejo empezó a temblar más.

“Humano, ¿qué te pasa?”

Raon expresó sus dudas y tocó suavemente el espejo con su pata. Cale fingió no darse cuenta y abrió la boca.

“El límite de siete personas no es suficiente”.

<…¡Oh, no… menos eso…!>

El espejo tembló violentamente.

<… Yo… Yo… ¡Sigo siendo un Mundo Bebé! …¡Siete personas ya son demasiado para mí!>

Cale frunció el ceño, como si le estuvieran estafando.

‘No, incluso si es un Mundo Bebé, ¿no habría vivido más que yo?’

Sólo la Familia de Sangre Negra había estado desbocada en el Planeta Shaolen durante más de trescientos años. Ya que el Culto de Sangre había unido fuerzas con la Familia de Sangre Negra, su historia también tendría más de trescientos años.

‘Debe tener al menos 300 años. ¿Un bebé?’

¿No es demasiado?

La expresión de Cale se volvió temblorosa.

“Humano, ¿estás bien? ¡¿Pasa algo?!”

Entonces apareció Raon.

Un Dragón que podría vivir mil años más o menos.

‘Según los estándares de los Dragones, un Dragón de cien años sería un bebé, un niño pequeño’.

La expresión de Cale se volvió más inquieta.

Miró al espejo y suspiró.

“…Como es así…”.

Su voz había perdido algo de fuerza.

Originalmente, quería 10 personas.

“…Añade uno más, que sean ocho”.

Se necesitaban al menos ocho personas.

Además del propio Cale.

‘Choi Han, Raon, Ron, Beacrox, Nº 7, Sacerdote Dust’.

Y Sui Khan.

El líder del equipo, Lee Soo-hyeok, también debería estar allí. Con el líder del equipo, sería fácil ponerse en contacto con Choi Jeong-soo.

‘Por supuesto, no hay garantía de que conoceré a Choi Jeong-soo solo porque voy allí’.

Pero tuvo una premonición de que si lo haría.

Cale miró el espejo tembloroso y dijo.

“¿Las personas de la tribu de las bestias se cuentan como no humanos?”

<…¡No! La gente de la tribu de las bestias también son humanos…>

Ya veo.

Asintió ante la respuesta esperada y dijo bruscamente.

“Ya que solo vamos a tener un no humano, ¿puedes ajustarlo a 8 personas?” (Cale se refiere a Raon como el no humano aquí)

“Humano, ¿por qué hay tan poca potencia en tu voz?”

¡Ding, ding, ding!

En ese momento sonó una alarma.

Cale entrecerró los ojos ante el mensaje.

<… ¡Y-yo puedo hacerlo!>

¡D-Ting!

<…¡Esta L-Llanuras Centrales puede hacerlo!>

“Uf”.

<¡Sin duda estaré a la altura de tus expectativas!

¡Te traeré los resultados en dos semanas…!

-De las Llanuras Centrales que trabajará duro>

“Humano, ¿por qué mueves tanto la cabeza?”.

Cale simplemente ignoró las voces de los dos niños.

En su lugar, recordó la lista de las diez recompensas que Shaolen le había dado. Cada uno de sus compañeros había recibido algo bastante bonito.

“…tendré que pedir prestado algunos”.

Es probable que vaya a tener que tomar prestados algunos de ellos.

Las Llanuras Centrales.

Nunca se sabe lo que puede pasar allí.

“…Es tentador.”

Probablemente debería tomar todo lo que pueda ser útil de allí.

“…Y dinero.”

Sí, el dinero es inevitable.

“Humano, ¿por qué abres los ojos así?”

¡Ding, ding, ding!

<…¡Estas L-Llanuras Centrales puede hacerlo! …¡Seré un mundo muy fuerte!>

Cale decidió firmemente que tenía que tomar un montón de oro, joyas, o cualquier cosa que pudiera ser utilizada como dinero.

* * *

“…Mi amigo”.

Cale vio la mirada en los ojos de Tunka.

‘¿Qué le pasa?’

Justo cuando su expresión estaba a punto de desmoronarse.

Thud. Thump. Thud.

El corpulento Tunka se acercó a él y abrió los brazos.

“¡Estás vivo…!”

Intentó abrazar a Cale.

‘¡Venga!’

La cara de Cale se arrugó aún más.

Puf.

Una vaina apareció entre Tunka y Cale.

El cuerpo de Tunka quedó bloqueado por la vaina, y la comisura de su boca se crispó.

“Cuánto tiempo sin verte”.

Choi Han ignoró limpiamente la sonrisa de Tunka.

Cale se alejó dos o tres pasos de Tunka y abrió la boca.

“Esto sigue igual”.

Miró a la capital del Reino de Whipper, el palacio real en su centro.

“Jajaja, ¿no es agradable estar de vuelta?”.

Por supuesto, el sonriente Tunka aún no sabía el motivo de la visita de Cale.

Simplemente había llamado para avisar de su llegada. Sin embargo, tan pronto como el Reino de Whipper recibió la llamada, se apresuró a darle una calurosa bienvenida.