Eiyuu Ou (NL)

Volumen 1

Capítulo 1: Inglis, 0 Años

Parte 2

Parecía haber al menos diez de los lagartos en todo el ducado. Los guerreros que debían ser los caballeros que mencionó su madre, prepararon sus armas para hacer retroceder a las bestias. La familia de Inglis miró con ansiedad. Sus expresiones eran serias pero no sorprendidas. Por lo tanto, Inglis supuso que ataques como este deben ocurrir de vez en cuando en esta nueva era.

Mmm, parece que la vida en esta época es peligrosa. Pero estoy bien con eso.

Parecía haber muchas oportunidades para la batalla. Cazar a las horribles y gigantescas bestias mágicas probablemente no sería un mal camino en la vida. Tenía que crecer para poder intentarlo.

¡Mis manos! ¡Mis manos me llaman! ¡Pero no puedo moverme como quiero! —Inglis gritó dentro de su corazón, pero los únicos sonidos que podían salir de su boca eran “¡Daaa! ¡Ga-ga-ga! ”

¡Chris! ¡Cálmate!” exclamó su madre.

“Solo es natural. Esta debe ser la primera vez que ve una bestia mágica “. Irina abrazó a Rafinha, que también estaba llorando. “No es de extrañar que esté asustada”.

“Tienes razón. Si tan solo estos niños pudieran vivir en tiempos más simples, en un mundo sin bestias mágicas, pero… ”

¡No madre! ¡Necesito un enemigo para luchar! ¡Necesito enfrentarme a estas bestias mágicas! ¡Necesito descubrir qué puedo aprender al vencerlos! “ ¡Waaa! ” ella gritó.

Ahí está, Chris. No tengas miedo. Mami te mantendrá a salvo “. Serena acunó a Inglis en sus brazos, con los ojos llenos del amor de una madre.

¡No! ¡Odio esto! ¡Esta es mi oportunidad y ni siquiera puedo moverme!

Había otra persona que sentía lo mismo.

“Es una pena. Ya obtuve mi Runa, pero tengo que mirar desde aquí ”, refunfuñó Rafael después de una pausa.

Este fue otro nuevo desarrollo, pero Inglis pudo decir que probablemente era una marca en los cuerpos de los caballeros de esta época. Su padre, el capitán de los caballeros, y su madre, un ex caballero, ambos llevaban un símbolo en forma de cresta en su mano dominante. Parecía que era algo necesario para controlar las armas utilizadas para luchar contra las bestias mágicas.

“Rafael, la tuya es una Runa especial”, sermoneó Irina. “Es la marca de los elegidos para traer esperanza. No podemos arriesgarte ahora. No hasta que crezcas en tu poder. Lo entiendes, ¿verdad?

Entonces, la Runa de Rafael determinó que sería un héroe. Inglis entendió bien de una vida pasada como héroe-rey cuán estrechamente podía unir el deber de un héroe, o incluso el deber de un heredero noble. Pesadas eran las cargas.

“Sí, madre…” Rafael parecía desconcertado por la insistencia de Irina. Quería asumir esa responsabilidad ahora; no esperaba ser retenido.

“Esto debería servir como un recordatorio claro. No importa lo que pase aquí, necesitas sobrevivir. Incluso si eso significa abandonar al resto de nosotros. Recuerda lo importante que eres “.

“¡Pero! ¡Madre, yo…!

Claramente, su madre no esperaba que algo así sucediera hoy, pero incluso el pensamiento era difícil de digerir para un chico serio como Rafael.

Dicho esto, a veces las palabras adquieren un significado propio.

Habla del diablo y él aparecer.

Craaasssh!

La ventana de su habitación se rompió de su marco cuando una de las bestias mágicas saltó lejos de los caballeros y hacia el escondite de la familia.

“¡Eeeek!”

Irina fue enviada volando por el impacto del lagarto alado. Protegió a Rafinha en sus brazos, pero no pudo rodar con seguridad con el golpe. Ella se estrelló de cabeza y cayó inconsciente. El impacto del aterrizaje conmovió a Rafinha, que empezó a gemir.

“¡Madre!” Gritó Rafael.

“¡No! ¡Tienes que escapar! ”

Serena retuvo la mano de Rafael cuando comenzó a desenvainar su espada antes de que ella recogiera a Rafinha. Apretó a ambos bebés en los brazos de Rafael y tomó un estoque de un perchero en la pared.

“¡Lo aguantaré! ¡Cógelos y lárgate de aquí! ”

Pero… ¡tía Serena! ¡Esa espada ni siquiera puede rayarlos! ”

El lagarto volvió su mirada siniestra hacia Serena. Aunque ya no era un caballero, pudo evitar su feroz asalto. El problema era la hoja poco fiable que tenía a mano. Su delgada construcción no pudo soportar muchos golpes antes de doblarse hacia la inutilidad.

“¡Apurarse! ¡¿Que estas esperando?!” Serena le gritó órdenes a Rafael.

“¡Rani! Chris! ¡Lo siento, solo espera! ” Escondiendo a Inglis y Rafinha a la sombra de un pilar, Rafael desenvainó su espada y corrió junto a Serena. “¡Tengo su espalda! ¡Si podemos aguantar un poco más, un caballero con un artefacto estará aquí! ”

Un Artefacto: ese debe ser el tipo de arma que los caballeros modernos manejan contra las bestias mágicas.

“¡No! ¡Te dije que no! ¡Sal de aquí!”

“¡No voy a ninguna parte! Si no puedo salvar a la gente que está aquí frente a mí, ¡¿cómo podré salvar a alguien ?! ”

Su voz joven, todavía aguda, sonaba sin embargo con pasión. Inglis estaba empezando a apreciar a su primo cuanto más lo veía. Luchar contra el peligro y estar siempre en pie era lo que convertía a alguien en un héroe, no por ser llamado uno. Fue probado con determinación y esfuerzo.

“¡Ngh… ugh! ¡Whoa!

“¡Aaaaah!”

Sin embargo, a pesar de lo duro que lucharon los dos, finalmente fueron golpeados contra la pared.

¡Tía Serena! ¡¿Estás bien ?! ”

“Puaj…”

El mundo comenzaba a oscurecerse a su alrededor. Pronto, estarían a merced de la bestia, y luego, cuando se fueran, no habría nadie para proteger a la inconsciente Irina o las jóvenes Inglis y Rafinha.

Supongo que es mi turno, entonces. No puedo permitir que maten a mi propia madre. Y el chico definitivamente ha demostrado su valía también…

Inglis había decidido vivir su nueva vida por sí misma. No tenía ningún interés en convertirse en una heroína, pero ciertamente no tenía ninguna objeción en ayudar a alguien que lo hiciera. Sería una lástima que muriera aquí.

No había mucho que un bebé pudiera hacer, pero… No había nada malo en intentarlo. Incluso sin mover un dedo, podía aplastar a la bestia con éter físico puro. Era una técnica básica, una que había conocido incluso en su vida pasada. “Golpe de Aether”, si tuviera que darle un nombre. Nunca lo había intentado desde la cuna, temiendo derribar la casa a su alrededor, pero aquí, con todo en ruinas y todos los posibles testigos fuera de combate, no había razón para no hacerlo.

“¡Daaa! ¡Goo-goo, ga-ga-ga! ”

A pesar de lo jóvenes que eran, los ojos de Inglis tenían un brillo claro. Un destello de luz azul pálido brotó, transformándose en una gigantesca bala brillante que se estrelló contra la bestia.

¡Blammmmmm!

La bala luego envolvió a la criatura parecida a un lagarto, llevando su cuerpo directamente a través de la pared. Al caer, se arrugó y se quemó en el aire en una nube de ceniza blanca en el viento.

No está mal para un bebé, supongo —pensó. Su práctica obviamente había sido un tiempo bien empleado.

Rafael, con la espalda apoyada contra la pared, jadeó en estado de shock. “¡¿Chris ?! ¿Qu-qué fue…?

Inglis habría apretado los dientes si hubiera tenido un control total sobre su mandíbula.

“Estamos salvados…” Se desplomó en el suelo, inconsciente esta vez.

Si lo recordaba como un sueño o como una alucinación por estrés, tanto mejor. Mientras planeaba las secuelas, Inglis sintió que una ola de agotamiento la invadía. A pesar de tener un poder tan puro, todavía era una niña, después de todo.

Gritos de preocupación resonaron por la escalera desde abajo. ¡Lady Irina! ¡Rafael! ¡¿Estás a salvo?!”

Deben haber llegado los refuerzos. Quizás ella también podría dormirse. Quería presenciar todo, pero su cuerpo de recién nacido la traicionó.

Cuando volvió a despertar, estaba de vuelta en la seguridad de su propia cuna, bajo su propio techo. Podía escuchar las voces de su madre y su padre, por lo que, al menos, estaban a salvo.

Durante algún tiempo después, Rafael pareció tratarla con un poco de temor moderado, aunque todavía sospechaba. Sin embargo, sin ningún adulto dispuesto a creer que un bebé había logrado tales hazañas, y sin señales de su poder en los pacíficos meses siguientes, incluso él comenzó a creer que el estrés, la confusión y el dolor simplemente habían engañado sus ojos.

Sin embargo, lo más importante es que Inglis ahora sabía que las bestias mágicas eran algo nuevo en el mundo. Por lo que pudo escuchar entre sus padres, las criaturas atacantes estaban entre las más pequeñas de sus formas más débiles, y aún había enemigos mucho más feroces que enfrentar. Su padre incluso había mencionado que algunos eran lo suficientemente poderosos como para devastar todo un reino.

Una perspectiva fascinante. ¡Por ahora, entonces, para desarrollar sus propias habilidades hasta que pueda luchar contra una de esas !

Así prosiguió el infante Inglis.