Lord of Mysteries (NW)

Volumen 1

Capitulo 207: Guardián

Dunn suspiró.

“Quería alejarte en ese entonces ya que iba a hacer algo que involucra a los secretos de la Iglesia y los Halcones Nocturnos. Pero la muerte de Kenley dejó mi mente en caos. En ese momento, todo lo que pude pensar fue en una excusa torpe, por lo tanto, te di la oportunidad de presenciar lo que estaba haciendo”.

“¿Qué secreto es ese?” presionó Klein, ahora más tranquilo.

Casi se había olvidado de la amenaza del hijo del dios malvado, o de la existencia de una criatura legendaria en el exterior.

Dunn sopesó sus palabras y dijo: “Puede haber una ley en el misticismo. Je, aunque no he leído muchos libros, sigo siendo consciente de lo que significa una ley.

“Esta ley se llama ‘Ley de indestructibilidad de las características de Beyonder’.

“Las características de un Beyonder nunca se destruyen o reducen. Solo se pasan de un estado a otro”.

Los ojos de Klein se abrieron como platos. De repente se dio cuenta y preguntó pensativamente: “Por ejemplo, los artefactos sellados, los objetos misteriosos o los ingredientes principales de una poción que dejan los Beyonders que han perdido el control”.

“Correcto.” Dunn asintió solemnemente. “Ese no es solo el caso de los Beyonders que pierden el control; también es lo mismo para los Beyonders normales después de que mueren”.

“Lo mismo…” Klein reflexionó sobre la descripción de Dunn, ahora teniendo una vaga idea de lo que estaba haciendo el Capitán.

Recordó cuando murió el payaso de traje. Recordó la esfera de sangre azul del tamaño de un pulgar que estaba suspendida junto al cadáver del payaso. La explicación de Frye había sido que siempre habría transformaciones extrañas después de la muerte de un Beyonder.

Dunn continuó hablando, enfocando en Klein sus profundos ojos grises: “Pero lo que es diferente acerca de los Beyonders que pierden el control es que un Beyonder que muere normalmente no deja atrás ingredientes u objetos. Lo que dejan es el equivalente a una poción, una poción que corresponde a su Secuencia, excepto que carece de los ingredientes complementarios.

Equivalente a pociones… ¡Equivalente a pociones! Klein entrecerró los ojos y un destello de inspiración pasó por su mente. La oscuridad infinita en su mente se iluminó en ese instante.

Gracias a eso, comprendió muchas cosas y descubrió por qué los caminos de Beyonder no desaparecerían, incluso si las criaturas utilizadas como ingredientes principales se extinguieran.

¡Además de usar sustitutos, uno podría simplemente usar los restos de Beyonders!

¡Esa también debería ser la razón por la que solo entregaron pociones completas en las Secuencias superiores! Otra razón es evitar que la fórmula sea revelada a personas expertas en rituales de adivinación o de mediumnidad…  Muchas conjeturas pasaron por la mente de Klein.

Dunn miró alrededor de la sala de recreo y explicó con voz profunda: “Hace unos años… Bueno… no puedo recordar exactamente cuántos años fueron, pero yo no era el Capitán de los Halcones Nocturnos en ese entonces. Inesperadamente me di cuenta de este problema, y ​​después de interactuar con Daly, que acababa de convertirse en Beyonder, inmediatamente envié un informe a la Santa Catedral. La Santa Catedral me dijo que lo mantuviera en secreto y me dio dos opciones. Je, je, esa también es la razón por la que soy yo, y no Daly, quien te está explicando esto. Quien exponga esto es responsable de ello.”

“La primera opción era pretender no saber nada, al igual que una gran cantidad de capitanes y diáconos de los Halcones Nocturnos y permitir que la Santa Catedral continuara lidiando con los restos de los Beyonders que murieron por medios normales. La segunda era que me dieran un ritual único, sencillo y las técnicas correspondientes. Me permitiría consumir temporalmente los artículos producidos por las características únicas dentro de un período de tiempo limitado. Bueno, esto solo es adecuado para Secuencias del mismo camino y de un nivel inferior al mío.

“Esto aumentaría mis características de Beyonder y también me volvería más poderoso. En términos de habilidades con respecto a los sueños, mis poderes ahora no son muy diferentes de los de una Secuencia 6. Esa es también la razón por la que me atreví a tratar con Madam Sharon”.

“Entonces es por eso… Pensar que algo así existe…” Klein exhaló lentamente.

Finalmente entendió por qué no podía encontrar una explicación lógica a pesar de sus mejores esfuerzos. Eso fue porque no tenía toda la información relevante y no pudo llenar los espacios en blanco.

Sí, esto coincide con la Ley de indestructibilidad de las características de Beyonder… ¿Consumir esas características causaría un cambio cualitativo en el Capitán al acumularlas constantemente? Klein permitió que su mente divagara.

Después de mirarlo, Dunn dejó escapar una sonrisa amarga.

“Elegí la segunda opción, pero no porque quisiera volverme más poderoso. Si quisiera volverme más poderoso, digerir rápidamente una poción y recibir un avance es la mejor y más directa manera”.

“Sí”, asintió Klein con sinceridad. “Consolidar las características de las pociones de la misma Secuencia aumentará el riesgo de perder el control al mismo tiempo que mejora tus habilidades, ¿verdad?”

Dunn negó con la cabeza solemnemente. “No, estos son los restos de Beyonders normales y no de Beyonders que han perdido el control. Bueno, después de conocer el método de actuación, me di cuenta de que aumentaría la dificultad de digerir la poción.

“Entonces, ¿por qué continúas?” Klein preguntó en estado de shock.

Dunn metió la mano en el bolsillo con la intención de sacar su pipa, solo para descubrir que la había dejado en su oficina.

Sacudió la cabeza y dejó escapar una sonrisa autocrítica.

“Solo dije que volverme más poderoso no es la razón por la que consumo sus restos”.

Habiendo dicho eso, hizo una pausa, sus ojos vagaron hacia el parpadeo azul de la lámpara de gas frente a donde estaba parado.

“Todos eran mis compañeros… Hemos pasado por muchas cosas juntos. Hemos lidiado con monstruos en la oscuridad y herejes locos juntos. Algunos de ellos me han salvado, y yo he salvado a un buen número de ellos. Caminamos juntos en las noches de vigilia. Luchamos juntos en batallas que, para el público general, nunca pasaron. Enfrentamos el peligro juntos. Nos cuidamos las espaldas.”

“Realmente no puedo soportar separarme de ellos. Recuerdo a un muchacho, Hitte. Rompió a llorar la primera vez que fue a una misión. Me acuerdo de Adelaide, je, era el padre de Rozanne. Bloqueó una maldición que iba dirigida a mí con su brazo. Recuerdo a la dama, Dwayne, y su cálido temperamento que era como el sol de la mañana. Ella siempre registraba en silencio las cosas con las que nos encontrábamos.. Recuerdo que Kenley era alguien que sabía hacer muchas cosas, como tocar la guitarra, cantar, era muy bueno contando historias, aunque no era alto. Era definitivamente mejor con la poesía que Leonard… Los extraño mucho. Esperaba seguir luchando con ellos, seguir lidiando con los monstruos en la oscuridad, someter a los locos herejes, proteger la ciudad de Tingen con ellos. Por lo tanto, elegí consumir sus restos”.

Los ojos grises de Dunn parpadearon lentamente. Su personalidad estoica se derrumbó considerablemente en ese momento.

Sus labios se arquearon con una ligera sonrisa mientras continuaba, “Todavía están conmigo en mis sueños. A Adelaide le encanta leer, a menudo lee en la azotea. Me pide seguido que discipline a Rozanne y la ayude a madurar, Rozanne se queja de que me parezco cada vez más a su padre y me tiene miedo. Hitte no puede quedarse quieta y tiene que cazar en el bosque todos los días. Dwayne siempre está de pie junto a la ventana de su dormitorio y nos observa charlar. Kenley, quien se unió recientemente, toca la guitarra y canta… Realmente los extraño”.

“Capitán…” Klein murmuró inconscientemente. Su vista se empañó. No pudo evitar frotarse los ojos y maldecir en su corazón. Mierda. Capitán, me está haciendo llorar…

Pero finalmente entiendo la razón del lento progreso del Capitán a pesar de usar el ‘método de actuación’…  Klein dejó escapar un silencioso suspiro.

“Desafortunadamente, el viejo Neil murió después de perder el control. De lo contrario, nos habría traído mucha alegría”. Dunn retractó su mirada. Bajó la cabeza y se masajeó el puente de la nariz.

Unos segundos después, levantó la cabeza y dejó escapar una sonrisa amarga.

“Esta es una decisión egoísta. No sé cuáles eran los verdaderos deseos de Adelaide, Kenley y el resto y, por lo tanto, egoístamente tomé una decisión por ellos. Realmente soy una persona egoísta”.

“No…” Klein negó con la cabeza.

***

En el sofá del área de recepción, Leonard observó a Megose arrancarse mechones de cabello mientras su expresión se volvía cada vez más rígida.

Megose parecía cada vez más inquieta ya que constantemente levantaba el vaso para beber agua. Miró a Leonard con una expresión tensa.

“No sé por qué, pero de repente me siento un poco mal”.

Leonard Mitchell estaba a punto de responder cuando vio que Megose se tocaba la cara. Se arrancó un trozo de carne, un trozo largo y delgado de carne.

“Disculpas, me pica un poco la cara”. Megose sonrió, un poco avergonzada. El borde de sus labios se extendió hasta donde estaban sus pómulos, revelando una fila de dientes blancos y encías de color rojo brillante. ¡MIERDA! ¡MIERDA! ¡MIERDA! Leonard maldijo en silencio. Sintió que la situación estaba empeorando demasiado rápido.

Con los labios temblorosos, Leonard se giró para escuchar mientras su tez se volvía extrañamente verde.

Forzó una sonrisa y se disculpó con Megose, que continuaba arrancándose pedazos de carne con las uñas.

“Necesito usar el baño.”

“Muy… bien…” El tono de Megose se volvió distante.

Se frotó el vientre y dijo: “Mi… hijo… está pateando…jeje”

Leonard no respondió. Apresuró los pasos y se acercó al tabique.

Después de entrar al corredor, Leonard miró fijamente la caja de cenizas en las manos de Dunn Smith y exhaló con exasperación.

Después de eso, su expresión se volvió firme.

“Capitán, me temo que es demasiado tarde. Tenemos que ocuparnos de Megose y su bebé de inmediato. De lo contrario, todo Tingen sufrirá pérdidas terribles. Esto no es algo que pueda evitarse simplemente evacuando a los ciudadanos que nos rodean. Sé que ya has enviado ese telegrama.”

Dunn frunció el ceño y preguntó, inusualmente severo: “¿Estás seguro de que la situación ha empeorado hasta tal punto?”

“Sí. En no más de tres minutos, Megose dará a luz y su hijo descenderá sobre nosotros”, dijo Leonard con cierto tono de confianza.

Al mismo tiempo, miró el vaso sanguíneo grande y grueso que envolvía la mano de Klein y dijo: “¿Artefacto sellado 2-105? Déjame usarlo. Puedo utilizar mejor sus habilidades.”

“Está bien.” Klein no dudó en entregarle el Ladrón de Vasos Sanguíneos a Leonard.

Eso era algo que tenía la intención de hacer desde el principio.

En ese momento, Dunn tiró de su cuello y palmeó su cazadora. Habló con un tono determinado, “Iré primero con las cenizas de Santa Selena. Salgan después de diez segundos; recuerden, salgan solo después de que terminen de contar hasta diez. Luego, independientemente de mi condición, dirijan sus ataques más fuertes hacia Megose y su bebé sin perder tiempo.”

Dicho esto, se dio la vuelta y caminó hacia la partición con la urna de cenizas.

“Capitán…” Klein dejó escapar un susurro, sus labios estaban secos.

“¡Capitán!” Leonard gritó.

Dunn se detuvo y miró hacia atrás. Tenía una expresión amable mientras decía con voz suave: “No se preocupen por mí. No estoy solo. Adelaide, Dwayne, Hitte y Kenley luchan a mi lado, sin importar el tipo de peligro al que me enfrente”.

Hizo una pausa por un momento antes de hablar, sus ojos grises eran amables.

“No hay necesidad de estar demasiado nerviosos. Protegeremos a la ciudad de Tingen.”

Sus labios se arquearon hacia arriba, formando su habitual sonrisa sutil.

Después de decir esas palabras, no se quedó más. Pasó a través de la partición, su cazadora negra siguiéndolo detrás de él.

“¡Capitán!” Klein y Leonard gritaron al mismo tiempo, sus lágrimas cayendo, pero Dunn no dudó.

Somos guardianes, pero también un grupo de miserables que luchan constantemente contra las amenazas y la locura.