Kumo Desu Ga Nani Ka?

Volumen 16

Capítulo 4: Balto 1

Ah, ya veo. Mi vida pasa ante mis ojos.

Acepté los recuerdos que pasaban por mi mente con sorprendente serenidad.

Las imágenes que se reproducen en mi mente comienzan con mi infancia, continúan con mi edad adulta y llegan al punto de mi trabajo en el castillo del Señor Demonio.

De acuerdo con mi estatus como el hijo mayor del Duque de Phthalo, un estimado noble demonios, fui por el camino hacia el éxito en la vida desde una edad temprana.

Pero escalé de rango porque la raza demoníaca tenía una grave escasez de personal, no porque mi arduo trabajo y mis aptitudes hubieran sido reconocidas.

No estoy diciendo esto con humildad; de hecho, creo que he trabajado mucho más duro que la mayoría.

Sin embargo, estoy igualmente seguro de que no estuve a la altura del difunto Comandante Agner del Primer Ejército en todos los aspectos, de mi hermano menor Bloe en fuerza física, del Sexto Comandante Huey en destreza mágica y Sanatoria en astucia.

El hecho de que tuviera demasiado éxito a pesar de estar rodeado de gente con habilidades superiores es probablemente debido en parte a mi nacimiento como noble y la naturaleza de los tiempos.

Entre la desaparición del Señor Demonio y la pérdida de gran parte de la generación anterior en la guerra en curso con la humanidad, la raza demoníaca simplemente se quedó corta de personal.

Como tal, no estaba tan complacido con mis promociones, ya que estaba completamente exhausto y abrumado por el trabajo.

Dediqué cada momento de mi vigilia a restaurar los resquicios maltratados de la raza demoníaca.

Y eso no cambió ni siquiera cuando el actual Señor Demonio tomó su trono.

De hecho, solo hizo que estuviera aún más ocupado.

Todos mis esfuerzos hacia los asuntos internos y el reabastecimiento de las tropas fueron enviados de nuevo al punto de partida cuando nos vimos obligados a entrar en una batalla a gran escala con los humanos.

Esto lo encontré vergonzoso, por supuesto, pero no podía desafiar al Señor Demonios. Ya que nunca podríamos esperar ganar si nos rebelábamos ante ella, nuestra única opción fue luchar contra los humanos, contra los que al menos teníamos una oportunidad.

Al final, la guerra terminó en empate.

Tres comandantes, Sir Agner, Huey y mi hermano Bloe, nunca regresaron.

Ni siquiera deseo hacer una estimación de las vidas perdidas.

Pero muchos de los más fuertes de la humanidad fueron derrotados, incluyendo su héroe.

Una cosa está clara: hubo daños significativos en ambos bandos.

Todo de acuerdo con el plan del Señor Demonio.

El objetivo del Señor Demonio no era la victoria para los demonios.

Ella tan solo buscaba que hubiera tantas muertes como fuera posible, tanto de humanos como de demonios.

Finalmente entendí el por qué después de escuchar su discurso en la transmisión de la misión del mundo.

Aun así, tengo opiniones propias.

Los demonios han luchado durante mucho tiempo contra la humanidad.

De hecho, hemos estado en guerra desde los registros más antiguos de historia. Ha tomado tanto tiempo que nuestra raza ha estado al borde de no poder recuperarse.

Todo por el bien de este mundo.

Para servir como su combustible.

Para expiar por los pecados de aquellos que una vez usaron una enorme cantidad de energía MA para convertirse en demonios por codicia.

Creo que es desafortunado que todo esto siga sin ser suficiente.

Pero veo difícil perdonarla por descartar los años de esfuerzo de los de la raza demoníaca y vernos como “despreocupados” y declarar que espera tan poco de nosotros.

Si todo eso es cierto, ¿para qué he trabajado tan duro todo este tiempo?

¿Por qué Bloe tuvo que morir?

¿Qué hay de Sir Agner y Huey y los muchos soldados que murieron en esa batalla, y todos esos demonios que murieron en toda la historia antes que ellos?

¿Está diciendo que todo eso fue inútil?

¿Y que ella pretende tomar aún más de nosotros, como si no hubiera tomado suficiente?

Cuando revivo el momento en que me enteré de la muerte de Bloe, cuando lloré solo una habitación, me lleno de una terrible rabia.

Y la secuencia de recuerdos continúa a partir de ahí.

La siguiente es de justo después de que se anunciara la misión del mundo.

“¿Qué sucede en el mundo…?”

Agaché la cabeza en la sala de reuniones.

Todos estos eventos sin precedentes estaban ocurriendo mientras el Señor Demonio estaba de viaje de negocios.

Por supuesto, yo estaba desesperado.

“¿Por qué nos preguntas eso, hmm?”

Sanatoria negó con la cabeza y suspiró mientras respondía, parecía poco impresionada con mi actitud, pero igualmente perpleja.

También había algunos otros comandantes en la sala.

Pero algunos de ellos habían perecido en la anterior batalla, mientras que otros seguían viajando con el Señor Demonio.

Tan solo quedaban cuatro de nosotros aquí.

La Comandante del Segundo Ejército, Sanatoria.

El Comandante del Tercer Ejército, Kogou.

El Comandante del Quinto Ejército, Darad.

Y, por supuesto, yo.

Esta reunión, obviamente, era sobre el anuncio de la misión del mundo que escuchamos de repente.

¿Qué significado tenía decirnos que previniéramos o ayudáramos el complot de un dios maligno?

¿Y qué es exactamente una misión del mundo?

Nada como esto ha ocurrido nunca en la historia de los demonios, hasta donde yo sé.

“… Por favor, decidme cada una de vuestras opiniones.”

Me las arreglé para soltar la pregunta sin levantar la cabeza.

“¿Cómo? No tenemos suficiente información como para formarnos una opinión. Todo me parece una tontería, y no hay conversación ni discusión que nos vaya a acercar más a la verdad.”

La opinión de Sanatoria, por así decirlo, fue más que razonable.

Tenía toda la razón.

<Misión del mundo activada.>

<Un dios malvado planea sacrificar a la humanidad para evitar la destrucción del mundo. Debéis prevenir este complot o apoyarlo.>

Aunque todos escuchamos este anuncio repentino, francamente no tenía ni idea de lo que significaba.

Por lo que pude ver, parecía que todos los demonios también escucharon este aviso.

No recibí informes de toda la raza, por supuesto, por lo que tal vez, fue limitado a las inmediaciones del castillo del Señor Demonio.

O pudo ser que lo escucharan todos los demonios, pero no los humanos.

Pero no tenía forma de averiguarlo con certeza de inmediato.

Tampoco es que fuéramos a hacer muchos más progresos si lo descubriera.

¿Quién narices es este dios malvado, de todas formas?

¿Cómo se supone que debemos obstaculizarlo o ayudarlo?

No había suficientes detalles para comprender la situación en cuestión. Y sin más información no había forma de saber qué elección hacer.

Tal vez el Señor Demonio sabrá más…

Fue un momento terrible el que sucediera esto mientras ella estaba fuera. “Aun así, seguramente deberíamos hacer algo. La población está escandalizada.”

Yo mismo no sabía lo que estaba pasando.

La mayoría de los ciudadanos estaban confundidos y desubicados.

Muchos de ellos también debían estar aterrados.

Al fin y al cabo, los contenidos de la llamada misión del mundo sonaban profundamente inquietantes.

Acabamos de concluir una guerra masiva contra la humanidad.

En el peor de los casos, la frustración reprimida del público podría llegar al punto de ruptura y provocar disturbios masivos.

Ya había bastante oposición al gobierno, gracias al alistamiento obligatorio de las tropas y la guerra posterior.

Lo único que los mantenía a raya era el miedo profundamente arraigado de la población al Señor Demonio.

Ahora que ella estaba fuera por un tiempo, cualquier pequeña chispa podría prender todo en llamas.

Como tal, nosotros en el gobierno necesitábamos hacer algún tipo de declaración o anuncio al respecto de este asunto de la misión del mundo para evitar un levantamiento.

“Claro, pero no sabemos más que ellos, ¿verdad? Y no podemos ir hablando sin una información que nos respalde. Tampoco me parece prudente salir y admitir que estamos totalmente a ciegas, ¿no?”

“… Buen punto.”

“Eso en sí mismo podría ser la gota que colmara el vaso.

Los ciudadanos pensarían que somos completamente incompetentes.

Y teniendo en cuenta que realmente no sabíamos nada sobre la situación actual, incluso podrían tener razón.

“… ¿Tienes alguna idea, Kogou?”

“¡¿Eh?! Oh, eh… lo siento. No entiendo todas esto tan complicado…”

Efectivamente, Kogou no parecía tener ninguna idea brillante. No puedo decir que me sorprendiera.

“¿Darad?”

“Hmmm. Si estos fueran tiempos normales, buscaríamos las instrucciones del Señor Demonio, pero supongo que en este caso no podemos.”

Darad cruza los brazos y se hunde en sus pensamientos.

Aunque es un firme partidarios del Señor Demonio, por lo demás es un táctico de mente muy despierta.

Pero parece que ni siquiera él puede tomar una decisión sobre esto al momento. Yo tampoco, evidentemente…

“Pero como dices, Sir Balto, no podemos quedarnos de brazos cruzados. Nuestro mejor curso de acción por ahora es emitir un anuncio de que estamos investigando más e instruir a la población para que mantenga la calma.”

“… Sí, esa podría ser la elección más pragmática.”

Al menos podríamos dar la impresión de que estamos investigando el asunto, aunque sería poco más que ganar algo de tiempo.

Debería ser algo efectivo, si no lo suficiente para sofocar a todos los descontentos.

“Tal vez deberíamos estar en alerta máxima y aumentar las patrullas en la ciudad?” “Pero ¿no molestará a la gente que pongamos demasiados soldados patrullando?”

“Cierto… Enviemos soldados de puerta en puerta con el pretexto de inspeccionar a la población. Necesitamos descubrir si todo el mundo escuchó el anuncio, en cualquier caso.”

“No es una mala idea. Entonces podremos aumentar el número de soldados en las calles sin que moleste demasiado.”

“Y también podemos usar esa oportunidad para demostrar que estamos investigando.”

Gracias a la solución propuesta por Darad, comenzamos a idear un plan de acción inicial.

Por supuesto no resolvería la raíz del problema; pero, aun así, al menos deberíamos ser capaces de mantener el caos resultante en la ciudad bajo mínimos.

“¿Puedo confiarle esto al Segundo Ejército?” “Por supuesto.”

“Eso está muy bien aquí en la ciudad, pero ¿qué pasa con el resto?”

“Por mucho que me gustaría hacer lo mismo en todo el resto del territorio, simplemente no tenemos personal. En el mejor de los casos, podríamos a lo mejor enviar un solo mensajero a caballo a cada ciudad importante.”

“Hmm. El Quinto Ejército podría encargarse de eso, entonces.” “Gracias.”

Nuestra conversación se desarrollaba sin problemas.

No tenía ni idea de qué íbamos a hacer antes de que empezara la reunión, por lo que estaba aliviado de que al menos lográramos encontrar algunas medidas de emergencia.

Incluso aunque alguno de los nuestros estuviera haciendo poco más que estar sentado en silencio en su silla.

“El problema principal es que seguimos sin saber qué está pasando con esta supuesta misión del mundo.”

“Cierto.”

Ese mensaje probablemente fuera una comunicación divina desde lo alto.

Debe ser de suma importancia, entonces.

Lo que significa que sería imprudente mantenerse desinformado acerca de su significado. “Honestamente. Ahora, ¿qué debemos hacer…?”

No pude evitar dejar escapar un suspiro y una queja refunfuñada.

Y entonces…

<Misión del mundo secuencia 1. Instalando Tabú en todos los humanoides.>

“… ¡¿Qué?! ¡Ah! ¡¿Guh?!”

Otro anuncio resonó de la nada.

Antes de que pudiera procesar lo que significaban esas palabras, mi cabeza fue asaltada por un dolor terrible, y me desplomé sobre la mesa.

Incapaz de soportar la incomodidad de lo que se sentía como agua hirviendo vertiéndose directamente en mi cerebro, pronto perdí el conocimiento por completo.

Ah, sí, ahora lo recuerdo.

Cuando nos despertamos, todos supimos lo que realmente significaba Tabú, y entonces aprendimos las verdaderas motivaciones del Señor Demonio a través de la “secuencia 2 de la misión del mundo” y en adelante.

Fue entonces cuando decidí elegir.

Luchar.

A partir de ahí, las cosas se desarrollaron rápidamente.

Yo personalmente fui en nuestro caballo más rápido hasta el imperio humano para emitir un alto al fuego, mientras Sanatoria se quedaba atrás para reclutar voluntarios para formar un nuevo ejército.

Donde me temía que nuestra propuesta se tregua encontraría oposición, encontré un acuerdo rápido, e incluso se nos concedió permiso para usar las puertas de teletransporte del imperio.

Por la rapidez de su decisión, podría decir que ellos también habían pasado el punto de elegir y escoger a sus aliados.

“Si yo mismo quisiera llamarme un súbdito leal del Señor Demonio, debería tratar de detenerte.”

Antes de mi partida, el Quinto Comandante Darad me dijo esto en voz baja.

“… Supongo que esto significa que no era digno de convertirme realmente en su leal servidor.”

Soltó una risa que denotaba soledad.

Nosotros los comandantes nunca estuvimos en un perfecto acuerdo, por supuesto.

Había algunos, como Sanatoria, que intentaron rebelarse contra el Señor Demonio, mientras que otros, como Huey, se acobardaron ante su poder.

Pero prácticamente ninguno de los verdaderos demonios comandante de nacimiento mantuvo en el fondo una lealtad total al Señor Demonio.

Ni siquiera el Primer Comandante Agner, ni yo mismo, habíamos jurado servirla por lealtad y devoción.

Si no la servíamos, los demonios estarían condenados.

Por lo que no teníamos otra opción.

Entre todos los comandantes, Darad era el único demonio de nacimiento que en verdad albergaba una sincera lealtad hacia el Señor Demonio.

Parte de esto se debe a que su familia tenía un compromiso histórico muy profundo con quien fuera designado como Señor Demonio.

Si bien, Darad nació en esa familia durante una era en la que el trono de Señor Demonio estaba vacante.

Pero prácticamente ninguno de los comandantes demoníacos nacidos fielmente mantuvo en el fondo una lealtad total al Señor de los Demonios.

Así que solo puedo imaginar cómo se tuvo que sentir cuando, después de soñar durante tanto tiempo el servir al Señor Demonio, finalmente se le dio la oportunidad de servir al lado de uno como un comandante.

Todo lo que sé es que su lealtad era sincera.

Y, sin embargo, ni siquiera al fiel Darad se le permitió luchar junto a ella en el último momento.

Cuando el Señor Demonio se fue para atacar la aldea de los elfos, se llevó solo a aquellos comandantes que ella había designado personalmente.

La lealtad de Darad nunca le llegó.

Entonces se anunció la misión del mundo, las verdaderas intenciones del Señor Demonio fueron reveladas, y ella comenzó a preparar el escenario para la batalla final.

“Adelante, pues. Yo me haré cargo de mantener la paz en nuestro territorio.”

Dividido entre su lealtad al Señor Demonio y sus responsabilidades como noble demonio, Darad finalmente decidió abstenerse por completo a la lucha.

Tal y como dijo, si viera su lealtad infinita, no hay duda de que sería su deber detenerme ahora que he elegido oponerme a ella.

Pero al mismo tiempo, Darad es un noble con vasallos propios.

Estoy seguro de que no soportaría dejarlos morir deliberadamente.

Habiendo dicho esto, sin duda él era igualmente incapaz de volver su espada contra el Señor Demonio.

No puedo decir que su decisión fuera indiferente.

Antes de adelantarme al resto para ponerme en contacto con los humanos, instruí a Sanatoria para reclutar solo aquellos que fueran a luchar por nuestra causa.

Nos enfrentaremos al Señor Demonio.

Si luchamos contra ella, es probable que muramos.

Arrastrar a soldados reacios a una batalla en la que saben que van a morir solo son retrasaría.

Así que traeremos solo a aquellos soldados que aun sabiendo que morirán están decididos a luchar de todas formas.

Y el ejército demonio que se formó de este modo fue más grande de lo que esperaba.

“Son un montón.”

“Ya lo creo que sí.”

Sanatoria respondió a mi sincera observación con un acento perezoso. Esto también fue un suceso inesperado: Sanatoria vino con ellos. “Pensé que te quedarías atrás.”

“… Sí, bueno, ya estoy empezando a preguntarme por qué no lo hice.” Suspiró Sanatoria, pero no parecía que fuera a huir. “Yo fui una actriz de fama mundial, ¿sabes?” “¿Miraste tu historial de reencarnación?”

“Por supuesto. ¿Deduzco por tu respuesta que también lo hiciste?” “Un poco, sí.”

El menú de tabú incluye un historial de reencarnación.

Contiene un registro completo de todas las vidas anteriores que uno ha vivido.

Supongo que podrías decir que recuerda todos los recuerdos que están incrustados en tu alma.

Cuando elijes cada vida, en realidad puedes rememorar los recuerdos de esa época.

Seleccioné los recuerdos de mi primera vida, y solo eso me trajo una enorme cantidad de recuerdos.

Fue tan intenso que pensaba que mi mente podría implosionar por el impacto de recordar tantas cosas a la vez.

Afortunadamente, solo experimenté un poco de mareo, no lo suficiente como para desmayarme.

Pero sucedió eso solo con una ronda de recuerdos, imagino que rememorarlos todos sería peligroso.
Sin duda mi habilidad Registros es la razón por la que pude llevarlo con relativa facilidad. Y lo más importante, esta debe ser la razón por la cual una habilidad no relacionada con el combate como es esta existe en el sistema.

“Da la casualidad de que protagonicé bastantes películas.” “Eso es impresionante.”

“Pero ninguna de ellas sobrevivió, por supuesto.”

Cualquier tipo de medio de grabación se deteriora con bastante rapidez dentro del sistema.

Mientras que los libros y demás pueden sobrevivir a través de la transcripción, no hay tal método para preservar películas y similares.

Ni una sola de las películas que protagonizó la primera vida de Sanatoria como actriz se encuentra en este mundo.

“Mis últimos momentos también fueron terriblemente decepcionantes. Cuando vi esos recuerdos, acabé sintiéndome triste de repente, preguntándome cuál era el sentido de mi vida. Lo que me hizo sentir que sería mejor no huir de esta pelea ahora. Fatalmente diferente a mí, ¿no es así?”

“… Supongo.”

“¿Y tú?”

“¿Sobre mí?”

“Bueno, no es justo que te diga todo esto y no me des un solo detalle, ¿verdad?”

“Tú eres quien lo trajo a colación.”

“Oh, venga ya.”

Con un suspiro, ajusto la posición de mis gafas. “Era de la realeza en un reino bastante grande.” “¿En serio? ¿Eras un príncipe?”

“Más o menos. Aun así, el gobierno estaba dirigido por un parlamento. No tenía ningún poder real.”

A diferencia de mi vida actual, en la que manejo el gobierno demoníaco casi por mi cuenta, no tenía poder alguno en mi primera vida.

Todo lo que tenía eran mis deberes como miembro de la realeza.

Era una vida estricta y sofocante, nada más.

“Aun así, amaba a mi patria y a todos sus ciudadanos.” Esa tierra ya ni siquiera existía.

“Así que, esta vez, quiero hacer todo lo que pueda para protegerles.” Incluso si eso significa morder la mano de quien nos da de comer. Incluso si me cuesta la vida.

Observo la marabunta de sombras negras que envuelven la tierra.

Cada una de ellas es un monstruo araña.

Y en su centro está consagrada la más fuerte de todas: una enorme reina teratect.

A pesar de que estamos a cierta distancia, ya puedo sentir el miedo crecer ante esta visión terriblemente imponente.

Cerca, escucho a alguien tragar saliva.

O tal vez el sonido provino de mi propia garganta.

Nosotros, del ejército de los demonios, hemos salido al terreno donde se encuentra la entrada al Gran Laberinto de Elroe.

El ejército de arañas, liderado por la reina teratect, está posicionado directamente frente a esa entrada.

Lejos del ejército demonio, el ejército humano también está en posición.

Dado a que somos enemigos acérrimos que estábamos intentando matarnos los unos a los otros hasta hace poco, va a ser difícil salir a luchar codo con codo.

Sin embargo, logramos crear una formación en pinza alrededor del ejército de las arañas.

Aunque no podamos confiarnos las espaldas los unos a los otros, hemos encontrado una forma de cooperar en la lucha.

Un temible rayo cae hacia la reina teratect.

Esto marca el inicio de la batalla.

El ejército teratect avanza, como si el suelo se moviera en oleadas.

“¡Preparad la magia masiva! ¡Escudos, listos!” grito.

“¡Aun no! ¡Esperad! ¡Esperad hasta que se acerquen más!” La marea se lanza sobre nosotros.

Una marabunta enorme que hace sentir una repulsión visceral.

“¡Fuego!”

A mi señal, nuestras fuerzas aliadas desatan una magia masiva. Los hechizos paran la oleada de arañas que se aproxima. Pero la siguiente oleada de teratects ya está cerca. ¡Siguiente ronda! ¡Fuego!”

Esto también estaba dentro de mis cálculos.

Los hechizos de magia masiva se disparan en intervalos intencionados.

Aun así, las teratects siguen llegando.

Es solo cuestión de tiempo que una de las oleadas supere la magia pasiva y llegue a nuestra primera línea de escuderos.

“No tengáis miedo! ¡Cada una de ellas es débil por sí sola! ¡Mantened la calma y tratad con ella de una en una!”

Es seguro asumir que las arañas no temen a la muerte.

Pero lo mismo también ocurre de nuestra parte.

“¡Apostamos nuestras vidas por el futuro de los demonios!”

“¡Balto! ¡Balto! ¡Vamos, contrólate!”

Mis ojos se abren de golpe.

¿Qué fue eso?

…Oh, claro, mi vida estaba pasando ante mis ojos. ¿Significa eso que estoy muerto y que esto es el más allá? “¡Balto! ¡¿Por fin estás despierto?! “Nngh… ¿Sanatoria? ¿También has muerto?”

“¡¿Has perdido la cabeza?! ¡Sigo viva, y tú también!”

Mientras mi consciencia regresa gradualmente, mi mente se aclara, y finalmente capta la realidad.

Estoy… ¡¿vivo?!

“¡Urgh! ¡¿Qué está pasando?!”

“La línea del frente aún no ha caído. Kogou la mantiene firme.”

Me pongo de pie de un salto ante eso, solo para ser recompensado con una nueva punzada de dolor detrás de mi frente.

Algún ataque debe haber golpeado mi cabeza durante la batalla y me dejó fuera de combate por un momento.

No he estado haciendo nada más que trabajo de oficina durante tanto tiempo que ya no estoy en las mejores condiciones como para luchar en el frente.

Es más, últimamente ni siquiera he tenido tiempo de entrenar. Mi fuerza definitivamente se ha debilitado.

Sacudo la cabeza para recomponerme.

Cuando finalmente me vuelvo a centrar en el campo de batalla, la situación dista mucho de ser favorable.

Allá donde miro, los soldados están enfrascados en una batalla con los monstruos araña.

Nuestra formación de batalla ya no importa.

Además de eso, los individuos más grandes y evolucionados, tienen estadísticas mucho más fuertes que las más pequeñas.

Mientras que no hay tantas de ellas como de las pequeñas, la mera llegada de un monstruo tan grande inevitablemente rompe las líneas.

Luego un grupo de arañas más pequeñas entra por esa apertura.

El resultado es un cuerpo a cuerpo caótico donde amigos y enemigos se entremezclan.

Mientras asimilaba todo esto, mis piernas casi se desploman debajo de mí.

Eso no es buena señal. No debo haberme recuperado del todo de los daños todavía.

Instintivamente extiendo la mano para agarrar algo cercano en lo que apoyarme, lo que me evita caer de nuevo al suelo.

Pero mis ojos se abren cuando veo a lo que me estoy aferrando.

Es el cadáver gigantesco de un monstruo araña.

… Ah, es cierto.

Esta cosa cargó contra mí y me golpeó la cabeza…

Alguien debe haberla derrotado después de que me dejara inconsciente.

Lo que significa que Sanatoria probablemente fue la que tomó el mando de esa pelea.

“Gracias, Sanatoria.”

“Ni lo menciones.”

Sacudo mi cabeza otra vez, tratando de concentrarme.

Luego me llevo una mano a la frente todavía palpitante y uso Magia Sanadora.

“En realidad, Balto, los sanadores se están quedando sin maná. ¿Si puedes usar Magia Sanadora, podrías centrarte en eso?”

“¿Los magos?”

“Mm-hmm. Estas cosas no son una gran amenaza por sí solas, es el veneno el problema.”

“Ah…”

Eso sin duda es un problema.

Por lo que sé, las arañas pequeñas son bastante débiles.

Cualquiera de nuestros soldados puede derrotarlas fácilmente con un solo golpe. Sin embargo, hay tantas de ellas que es imposible eliminarlas a todas sin llevarse ningún golpe.

Sus estadísticas parecen ser lo suficientemente bajas como para que estar rodeado y mordido por ellas no cause mucho daño. Pero si esos colmillos son venenosos, esa es otra historia completamente diferente.

“Está bien. Iré lanzando hechizos de antídoto.” “Gracias.”

Corrí por el campo de batalla, usando magia de antídoto en los soldados con aspecto enfermizo.

Las arañas pequeñas no son una gran amenaza.

Son ligeras y pueden saltar grandes distancias, suficiente como para que al principio pudieran desordenar nuestras filas, pero una vez que aprendimos el patrón, lidiar con ellas es simple.

Siempre y cuando permanezcamos en calma y nos limitemos a la estrategia, no hay problema. Sus estadísticas son tan bajas que incluso un mordisco apenas equivaldría a un rasguño. Si alguien se envenena, yo u otro de los otros magos puede curarle. Y así vamos reconstruyendo gradualmente nuestras filas y con la ayuda de Kogou luchando frenéticamente en el frente, logramos hacer un progreso constante en la batalla.

La mayor dificultad son las arañas más grandes, y las todavía más grandes parecen ser una variedad aún más evolucionada.

Estas arañas gigantes y evolucionadas son lo suficientemente fuertes como para eliminar a varios soldados a la vez, pero nuestros hombres y mujeres ya están luchando ferozmente con la suposición de que es posible que no sobrevivan.

Sus ataques imprudentes, sin importarles las heridas, son capaces de derribar incluso a esas arañas gigantes.

La moral sigue siendo fuerte, incluso aunque varios soldados se han sacrificado en el proceso.

En todo caso, a nuestras tropas solo les crece la determinación a medida que pasa el tiempo.

Un extraño y poderoso fervor se extiende por las filas.

Es tan fuerte que ni siquiera parecen preocuparse por sus propias vidas. Normalmente, sería peligroso permitir que ese tipo de fervor tomara el control de la batalla.

Por mucho que esté produciendo resultados, también está aumentando el número de muertes debido a los ataques desesperados y kamikazes.

Si estuviéramos enfocados al futuro, sería mejor retirarse y dejar que se calmaran.

Pero estos soldados están aquí para proteger lo que realmente valoran, aunque eso signifique tirar sus futuros por la borda.

Así que debo dejar que ese fervor tome el control.

¡Debemos superar nuestros límites, y seguir presionando hacia delante! Incluso yo estoy empezando a perderme en esta neblina febril.

Pero entonces, algo extingue las llamas.

“¿Qué es eso?”

Puede que no lo hubiera notado si hubiera estado luchando directamente en lugar de concentrándome para dar órdenes y curando a los heridos y envenenados.

Tan solo llamó mi atención porque estaba vigilando mis alrededores para informar mejor de las instrucciones.

Algo extraño estaba pasando cerca de la entrada al Gran Laberinto de Elroe.

En esa zona, una intensa batalla se estaba desarrollando entre la reina teratect y algunos dragones ancianos que supuestamente servían al dios de ébano.

Los estruendos y destellos de truenos y relámpagos llegaban hasta nuestro lado del campo de batalla, y podía ver dragones de fuego volando por el cielo, haciendo caer bolas de fuego en el suelo.

Era una escena francamente infernal, que no solo tuvo lugar en la realidad sino justo ante mis ojos.

Y algo estaba cambiando allí ahora.

Cuando miré más de cerca, vi un maremoto de color blanco brotar del Gran Laberinto de Elroe.

No era agua, sino una marabunta de arañas blancas.

“¡Ve-vestigios de la Pesadilla!”

Era un monstruo del que el bando humano me advirtió que tuviera cuidado de antemano.

Dijeron que incluso el grupo del héroe se las vio difíciles para luchar con uno solo. ¿Cómo puede haber tantos de un monstruo tan poderoso…?

La ola blanca se ve arrastrada en la batalla entre la reina teratect y los dragones ancianos, solo para atravesar ese infierno y seguir extendiéndose por el campo de batalla.

¡¿Lograron atravesar esa zona infernal?! ¡Nuestros hombres ni siquiera pueden acercarse! E-estamos acabados.

Dijeron que incluso el grupo del héroe lo pasó mal para derrotar a una sola. ¿Cómo puede haber tanto de un monstruo tan poderoso…?

La marea blanca se ve arrastrada a la batalla entre la reina teratect y los dragones ancianos, solo para atravesar ese infierno y seguir extendiéndose por el campo de batalla.

¿Lograron atravesar esa zona infernal? ¡Nuestros hombres ni siquiera pueden acercarse! E-estamos acabados.

No hay manera de que podamos ganar.

El pensamiento de que todos moriremos en vano resuena en mi cabeza. “¡Yo me encargo de la retaguardia! ¡Todos! ¡Corred por vuestras vidas!”

Mientras miro en estado de shock la marabunta de Vestigios de la Pesadilla, una voz grita desde el frente.

Es Kogou.

“¡…! ¡Todas las unidades, retirada! ¡Deprisa!”

El grito de Kogou me devuelve a mis sentidos, y doy una orden.

¡Todavía podríamos escapar si nos movemos ahora!

“¡Deprisa!”

Grité a los soldados para que se retiraran más rápido.

Entonces veo un grupo avanzando hacia la dirección opuesta. “¡Kogou!”

Era el escuadrón de Kogou.

“¡Sr. Balto! ¡El resto depende de usted!”

“¡Kogou! ¡Rrgh…!”

Me trago las ganas de decirle que corra y permanezco concentrado en evacuar las tropas.

Kogou es un hombre de mente simple que se abrió paso entre los rangos gracias nada más a su fuerza física.

Y, sin embargo, siempre fue temeroso y se resistía a la idea de pelear. Pero ese hombre pusilánime, se unió a la batalla por voluntad propia, y ahora, se ofrece como voluntario para cubrir la retaguardia, sabiendo que probablemente no saldrá con vida.

No debo dejar que tal decisión se desperdicie.

Muy atrás de mí, puedo escuchar los sonidos de la batalla.

Y los gritos de muerte también.

Aun así, no doy marcha atrás.

“¡Retirada! ¡Corred por vuestra vida!”

Sigo alzando mi voz para animar a los soldados, tratando de conseguir que tanta gente saliera con vida como fuera posible.

Me gustaría preguntarte una cosa, Señor Demonio.

¿Todavía nos ves como seres desechables, aún cuando estamos luchando tan desesperadamente?

¿Debemos morir todos por tus objetivos?

¿De verdad dirías que los días de expiación de toda la raza demoníaca han sido en vano?

Dime.

“¡Maldita sea todo!”

No estoy seguro de quién soltó esa maldición.

Tal vez incluso fui yo.

[MEAN KOGOU

Nacido en una familia plebeya, fue ascendido y se convirtió en noble, tomando como apellido Mean. A pesar de que en un principio era un soldado ordinario, se hizo distinguir con su fuerza física bruta y se abrió camino hasta el rango de comandante. Dado que su fuerza bruta era su mayor mérito, no era muy bueno en estrategia o dando órdenes. La mayoría de las veces luchaba en primera línea y dejaba la dirección a subordinados más capaces. Como resultado, creó un ambiente de trabajo simple y efectivo, y esto combinado a su personalidad honesta y poco sofisticada lo hizo bastante popular entre sus hombres; sin embargo, también tenía unas cuantas carencias, como ser fácilmente manipulable por otros. Por lo tanto, sus fortalezas y sus debilidades estaban claramente definidas.]