The Tutorial Is Too Hard

Capítulo 270: Tutorial piso 59 (Parte 7)

Estaba fuera de mí. El aire que había estado excesivamente caliente con el calor provocado por el Zit Pop ya se había enfriado y el siempre cambiante cambio de tiempo provocaba vertiginosas ráfagas de viento.

[¡Guerrero! Tengo que acercarme ahora.]

“¡Cierra la boca! ¡No!” Grité a Ahbooboo, quien dijo que quería ayudarme. Las palabras de Ahbooboo en sí mismas me dijeron lo difícil que era la situación.

[¡Vas a morir!]

Ignoré las palabras de Ahbooboo, aunque era cierto que las cosas no iban bien. Era una batalla contra los dioses nativos, que habían existido durante cientos de miles de años, y yo. Por supuesto, estaba en desventaja.

La esfera de energía que había aparecido en el aire continuó avanzando. Para ganar esta pelea, tuve que disminuir la distancia entre los dioses y yo, ya que no había posibilidad de ganar una batalla a larga distancia.

Y tan pronto como esos malditos dioses nativos supieron que yo era una amenaza, se tomaron de la mano y atacaron juntos. Los dos habían estado en la garganta del otro momentos antes, y ahora estaban en perfecta armonía.

De repente, el aire frente a mí se distorsionó y una fuerza misteriosa se apoderó de mi cuerpo. Traté de escabullirme usando la fuerza, pero el poder similar a un brazo que me envolvía no se movió. Mi hombro izquierdo, que ya no tenía brazo, se sentía como si me estuviera quemando.

La fuerza invisible era irreconocible para mí. Aunque me arriesgué a romper las alas de Talaria, intenté volar con ellas, pero la atadura no se deshizo. Parecía que no es fuerza física, sino algún tipo de barrera.

[¡Sí! ¡Es una barrera!]

Una barrera definitivamente era algo fuera de mi alcance. Siempre quise aprender más sobre las barreras, pero me habían dicho que no sería suficiente. Sin embargo, gracias a esa actitud inquisitiva, había una regla sencilla que conocía sobre las barreras: la superposición de múltiples barreras creaba una barrera que funcionaba en varias direcciones.

Actualmente, solo había una barrera recientemente formada que sostenía mi cuerpo en este momento. Antes de que las barreras se superpusieran, tenía que ser destruida. El concepto de barrera probablemente era para restringir mis movimientos con mi brazo como medio.

Tan pronto como terminé de pensar, reuní mis fuerzas y una esfera roja se colocó en mi puño y hombros derechos.

Maldita sea, nunca había usado esta técnica con mis hombros. En este caso, nunca había practicado.

“¡Zit Pop!”

Una explosión estalló en ambos lados. Inicialmente, la luz y el calor deberían haberse generado para cubrir toda el área, pero el área circundante se vio igualmente afectada ya que la explosión quedó atrapada en un espacio.

Por supuesto, mi brazo derecho y mi hombro izquierdo reventaron. Si hubiera formado un Zit Pop en la punta de mis dedos y lo hubiera explotado, podría haber minimizado o no haber sufrido ningún daño. Sin embargo, en el caso de mi mano y hombro derechos, se me había formado un Zit Pop en la carne. Era imposible que no hubiera daños.

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 [Tiempo suspendido] 

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Cuando estaba a punto de colapsar y finalmente salir de él, apareció una nueva dificultad. El espacio donde había estado la barrera se perturbó extrañamente y surgió una fuerza poderosa. No sabía qué diablos era, ni siquiera me atrevía a pensar en mirar directamente al espacio. Podía sentir un pequeño agujero en el aire que absorbía todo.

¿Qué es eso?

La fuerza tirando de mí desde ambos lados me hizo sentir como si mi cuerpo estuviera siendo desgarrado.

¿Cuántos segundos puedo aguantar? No, probablemente no serán segundos.

De repente, sentí una capa de poder sobre mi cuerpo. Asumí que era de Ahbooboo, pero terminó siendo el poder del dios del Cielo. Gracias a esto, me relajé en una situación en la que estaba a punto de morir desgarrado.

[Contratista, debemos salir de esto rápidamente.] 

[¡Tuerce el espacio!]

 [Imposible. Ese grado de intervención-]

[No. Ése no. El espacio a mi lado. ¡No tuerzas ambos lados, solo uno! ¡Para invertir la rotación de las dos áreas!]

No había certeza, y ni siquiera sabíamos cuál era el poder misterioso. Divagué, pero el dios del Cielo logró entender lo que quería.

Al momento siguiente, mi cuerpo salió disparado hacia adelante a una velocidad que incluso para mí era difícil de comprender. Aunque estaba usando una técnica de reducción de tiempo, atravesé las corrientes de aire y pensé que podría estar volando al espacio. Afortunadamente, la velocidad se redujo drásticamente. Sin ningún impacto, mi cuerpo se detuvo por completo, flotando en el aire. Era el poder del dios del Cielo. Esta vez, no pude evitar decir gracias.

[¡No es necesario! ¡Pero aceptaré tus felicitaciones!]

¿Qué estás diciendo?

[Guerrero, yo hice eso…]

Podía escuchar vagamente la voz de Ahbooboo desde la distancia.

[¡Es mi poder de todos modos!]

También se escuchó la voz del dios del Cielo, y parecía más desvergonzado de lo que pensaba.

[Baja lentamente. El espacio distorsionado ha sido sellado, pero le lleva algún tiempo desaparecer por completo. Será mejor que no bajes aquí hasta entonces.] Habló.

Decidí tomar un respiro por un tiempo, como me aconsejó el dios del Cielo. Esa fue una experiencia peligrosa. Sentí que volví después de darle la mano a la muerte, y no a mi bisabuelo, que había fallecido sobre el río de la vida y la muerte.

[Guerrero, si ayudo un poco, las probabilidades aumentarán un poco.]

No, es mejor no hacerlo.

Sacrifiqué un brazo por esta oportunidad, así que tenía que aprender y pasar por más.

Entonces dos dioses nativos comenzaron a elevarse hacia donde yo estaba, y estaba seguro de que estaban pensando en acabar conmigo y establecer un vínculo.

[Guerrero…]

Necesitaba más tiempo, y aunque me estaba adaptando rápidamente, si me acostumbraba un poco más, podría averiguar más.

***

[Jengent.]

El cielo estaba ardiendo.

Granizo tan grande como rocas cayó y se derritió en el aire, y el agua inundó.

La batalla entre los dioses y el antiguo demonio era fenomenal. Mientras miraba, me pregunté si lo que estaba viendo era solo una ilusión. El plan original de atacar a esos dioses con fuego de cañón parecía ridículo. Cuando escuchó mi plan, el demonio hizo una mueca ridícula porque sabía lo ridículo que era. Era evidente que mis soldados y yo no éramos útiles en la próxima batalla contra los dioses.

Me invadió una sensación de vergüenza. Cuando cayó la capital, yo estaba destinado en el barrio. Cuando recibí por primera vez una solicitud de asistencia por un disturbio en la capital, estaba preocupado por la gente. Recientemente, muchos habían estado usando explosivos para asestar un golpe a la capital de la ciudad y al palacio real. Naturalmente, predije tal perturbación. Tanto más cuanto que la radio pronto se cortó.

El enemigo debe haber atacado la torre de comunicación primero, así que me alegré de haber recibido el mensaje antes de eso. Pensando así, dirigí un ejército a la capital.

Cuando llegué a la capital, lo primero que vi fue el cielo oscuro lleno de humo negro. La ciudad capital arrojó humo negro como una chimenea y el color original del cielo quedó enmascarado.

La gente salió corriendo por las puertas, empujándose unos a otros para llegar a casa. La vista de decenas de miles de personas corriendo fue devastadora. Cada vez que diez personas escapaban por la puerta, cien personas morían aplastadas en otro lugar. Ni siquiera pensé en hacer pasar una unidad por la puerta y solo traté de calmar a las tropas de alguna manera y reducir las bajas.

Pero pronto, también pude entender los sentimientos de las personas. Por qué estaban tan aterrorizados y por qué habían perdido por completo la razón. Todo tipo de cosas caían sobre nuestras cabezas: llamas, trozos de hielo, líquidos que derretían la carne, monstruos que nunca antes habíamos visto y fragmentos de metal afilado. La gente se apresuraba a avanzar para no morir.

Solo entonces me di cuenta de que no era solo un grito lo que salía de la boca de la gente. Fue una apelación. Oraron a dios mientras morían. Rezaron por misericordia y perdón.

Algunos padres renunciaron a escapar y rezaron por la seguridad de sus pequeños hijos. Había un hechicero que gritó: “¿Cuál es mi pecado en el mundo?” Ni un momento después, una piedra cayó sobre su cabeza, haciéndolo pedazos.

La creencia popular era que todo esto era un castigo celestial dado por los dioses porque la gente no era lo suficientemente fiel.

Había muchos tipos de clanes, y los dioses eran justos con todos ellos. Bastante indiferentes, eso es.

Era fácil ver que los dioses no estaban castigando a las personas. Estaban peleando entre ellos. Sus cuerpos ni siquiera se podían ver a simple vista, pero podía sentirlo. Los poderes que ejercían estaban dirigidos el uno al otro en el cielo. Lo que cayó sobre la capital no fue más que un remanente de sus fuerzas.

Así moría la gente. No pude llegar a donde los dioses estaban peleando por la capital, y no pude atravesar la puerta. En esa situación, no tuve más remedio que hacer todo lo posible para rescatar a las personas.

Salvé a la gente como un loco. Corría de un lado a otro, gritaba a los soldados, reunía a la gente y limpiaba los escombros de los muros derrumbados. Tal vez porque estaba tan estresado, mis recuerdos después de eso estaban todos mezclados.

Cuando recuperé el sentido, estaba en una ciudad a muchas millas de la capital con menos de 2000 sobrevivientes y más de la mitad de los soldados muertos.

Había muerto demasiada gente. Ninguno de los clanes de la ciudad capital había sobrevivido, y ninguna realeza o noble que estuviera cerca de la capital pudo escapar. La capital, que fue el comienzo del reino, quedó en ruinas.

Así como así, el reino se derrumbó. Los territorios a lo largo de la frontera habían sido tomados por otros países. Estaba claro que las otras tierras pronto también serían reclamadas.

Como comandante general de las Fuerzas de Defensa de la Capital, me convertí en una especie de pieza central. Las personas que estaban en una posición débil se reunieron a mi alrededor. Todas las tropas reales se reunieron excepto los soldados estacionados en la frontera. La familia real fuera de la capital dio un paso más mientras me apoyaban, y los territorios neutrales entraron uno por uno.

Estaba cada vez más ocupado, y mi tristeza y añoranza se desvanecieron. En cambio, la ira creció en su lugar.

Habían pasado muchos días mientras continuaba gritando a los documentos y a las caras de las personas cuando llegaba una noticia en particular. Hubo un informe sobre la confrontación entre el archimago y el demonio. El ganador del encuentro, el archimago, fue visto convirtiéndose en un monstruo. El hechicero observador dijo que la razón por la que los dioses devastaron la capital podría haber sido para apoderarse del hechicero convertido en monstruo.

Inmediatamente conduje a todo el ejército esa noche al lugar donde se había visto al monstruo, con todas las tropas y cañones disponibles. La gente me detuvo, diciendo que en lugar de buscar y capturar monstruos, debería matarlos a tiros.

Pensé que los dioses podrían perseguir al monstruo.

Mientras avanzábamos con mucha fuerza, también enviamos una gran cantidad de tropas de otros países. La competencia se puso feroz, pero pensé que no estaba mal. Cuantas más tropas reunidas, mejor. No sabía si podría prescindir de ellos.

Y luego conocí al antiguo demonio. Lo reconocí de un vistazo. Ese era el antiguo demonio del que solo había oído hablar.

El demonio solo secuestró comandantes y hechiceros de cada país sin ninguna dificultad. Mirándolo, pensé que podría ayudarme a luchar contra los dioses. Si pudiera obtener la ayuda del demonio, le ofrecería mi alma.

Eso fue lo que sucedió, pero aparecieron los dioses y mis pensamientos cambiaron nuevamente. Ningún ser humano podría enfrentarse directamente al poder de los dioses sin ser derribado. No importa cuán poderosos fueran los cañones, no importa cuántos soldados había, estaban indefensos ante el poder de los dioses.

Era obvio. Había conducido a los soldados aquí y los había matado por mi juicio infundado. Ni siquiera pensé en traer de vuelta la cantidad de personas heridas y solo quería matar a los dioses.

Entonces, un poder desconocido cubrió el área. Una gran esfera bloqueó todo tipo de desastres que caían del cielo y una explosión atravesó el espacio. La explosión no nos hizo casi nada, quizás por la esfera protectora.

Solo después de que el polvo y la luz se disiparon un poco, noté que un hombre volaba en el cielo. Era él, el antiguo demonio.

Pude ver que el demonio estaba protegiendo a la gente y luchando contra los dioses.

Sus alas resplandecientes y sus ataques contra los dioses parecían demasiado sagrados para que él fuera un demonio. En cambio, se veía como un héroe desde todos los ángulos, muy parecido al Rey Fundador, quien, cuando una gran inundación cubrió el continente, destruyó al gran monstruo que causó la inundación y estableció el reino.

El demonio era como el rey, cuyos logros míticos me hacen creer que no era humano.

“Si no necesitas mi alma, ¿qué quieres de mí?” De vuelta en la aguja, le había preguntado al demonio, pero su respuesta fue algo inesperada.

“Recolecta fe.” dijo.

“¿Fe?”

“Uhh… Que la gente me anime.”

¿Animar? ¿Quiere que anime al demonio? No lo entendía.

“Es mejor obtener el apoyo de la gente, ¿no?” Fue todo lo que dijo el demonio. Si él fuera el demonio, ¿podría hacer eso? Protegió a la gente y corrió hacia los dioses para protegernos, pero todo lo que quería a cambio era el apoyo de la gente.

Hubo una conmoción alrededor con los soldados sobrevivientes gritando al cielo, y algunos arrodillados y rezando. Estiré mi cuello y agarré a un soldado por el cuello sin saberlo.

“¿Quieres rezarle a dios en esta situación? ¡Idiota!” Le grité.

El soldado me miró con ojos llorosos e inyectados en sangre y gritó: “¡Estoy rezando por ese héroe!.”

¿A quién?

“¡Todo lo que puedo hacer es rezar por él!”

Solté el cuello del soldado con la mente confusa. El soldado inmediatamente se arrodilló de nuevo, cerró los ojos y comenzó a orar.

Cogí la radio con mis manos temblorosas. Se entregó un mensaje a todos los comandantes bajo mi mando.

“Animen y rezen por ese héroe. ¡Él es el Rey Fundador, el fundador de nuestro reino! ¡El Rey Fundador ha regresado para detener a los dioses que están fascinados con la locura y atacan a los humanos!”

Como dijo el soldado, lo único que podíamos hacer era rezar por ese demonio.

***

“Es lo mejor.” No tuve más remedio que murmurar cuando vi que los dioses se acercaban a mí.

El núcleo del Origen del hechicero estaba en mi estómago, junto con el núcleo del Origen dado por el dios del Remordimiento dormido en mi circuito de maná.

Fuerzas masivas se estaban reuniendo en estos dos núcleos. “Este es de hecho el poder del Origen.”