Chitose Kun Wa Ramune (NL)

Volumen 3

Capítulo 1: Días Lluviosos Y Sueños

Parte 4

Respiré hondo y el olor a acre del polvo inundó mi nariz.

El intenso sol en plena temporada de lluvias parecía anunciar la llegada del verano.

• Ah, realmente pisé el campo.

Hice un gesto a Haru para decirle que estaba listo, y la pelota voló limpiamente hacia mi guante.

En ese momento, la sensación de correr para atrapar la pelota en vuelo y enviarlo de regreso a la base, la euforia nerviosa de deslizarme a la siguiente base después de robar una base y la emocionante sensación de golpear el lanzamiento ganador del oponente con mi bate, esos todos los sentimientos se unieron y me dieron ganas de llorar.

Sostuve la pelota, que estaba un poco manchado, para que Haru no se diera cuenta.

Dije gracias en mi corazón y lo tiré.

El lanzamiento de Haru era muy bueno. Ella atrapó la pelota con su nuevo guante de béisbol, pero desafortunadamente la pelota se resbaló y rodó por el suelo, volviendo a mí.

—¡Ah…! ¡Pensé que lo atrapé!

—Haru, déjame tomar prestado tu guante.

—Tsk tsk, eres un jugador de segunda clase si culpas de tus errores a tu equipo, Chitose.

—Solo dame el guante, novata.

Tomé el gran guante de béisbol rojo de Haru.

Probablemente lo compró en una tienda de deportes a un precio especial. Por supuesto, no era el tipo de guante que usaría un equipo profesional, pero, sorprendentemente, era un guante de béisbol muy bien hecho.

El guante todavía estaba rígido, así que doblé el pulgar y el dedo meñique una y otra vez para hacer un pliegue en el guante. Después de que el guante se ablandó un poco, golpeé la pelota contra la parte del guante llamada núcleo, que estaba hecha para atrapar.

Después de ajustarlo hasta cierto punto, le devolví el guante a Haru .

—Toma, pruébatelo.

Haru tomó el guante, abrió y cerró la mano.

—¡Está más suave que antes!

—El guante no podía abrirse y cerrarse fácilmente en tan poco tiempo, pero si haces los pliegues, será más fácil de usar. Puedes mantener la pelota en la palma de tu mano, y si la puedes amarrar con una banda elástica, es aún mejor. Te lo traeré la próxima vez.

—¿Un regalo para mí?

—Es solo una correa de velcro; Dije mientras caminaba detrás de ella. —Deja que te abrace. —No~ ♡

—¡No tengo un motivo oculto, solo te estoy dando un ejemplo de cómo hacerlo!

—Es broma, puedes hacer lo que sea.

Puse mi mano en el guante de Haru con el lado para capturar hacia arriba.

—Está ligeramente abollado aquí, y hay una marca de haber atrapado algo, ¿verdad? Recuerda, aquí es básicamente donde atrapas la pelota. Pon un poco de presión en tu mano izquierda… ¡Oh!

¡POW!

Presioné la pelota con fuerza en el lugar que acababa de mencionar.

—¡¡Dueleeeeeee!!

—Bien, no olvides el dolor.

—¿¡Por qué estás en modo espartano de repente!?

—¡Está bien, aquí viene!

—¡DUELE COMO MIERDA!

Abracé a Haru por detrás y sostuve sus manos izquierda y derecha. Un chico presionando su cuerpo contra la espalda de una chica no debería ser un gran problema.

Haru se puso rígida por un momento, pero luego se relajó de inmediato. También traté de no prestar atención al calor corporal que se me transmitía directamente.

—A diferencia del lanzamiento de peso, no lanzas la pelota como si la estuvieras empujando.

Tienes que torcer tu cuerpo así.

Guié el cuerpo de Haru a la forma correcta.

—Cuando lanzas la pelota, tienes que mantener la otra mano hacia atrás.

Después de enseñarle una serie de posturas de lanzamiento, solté su cuerpo.

Haru me miró con una cara ligeramente avergonzada y luego, como si no pudiera contenerse, de repente se echó a reír.

Ella se agarró el estómago, —Oh, eso es gracioso. Estás siendo terriblemente agresivo hoy, ¿no?

—No recuerdo haber coqueteado contigo.

—Pero parecías estar coqueteándome apasionadamente. Así es como te gusta, ¿eh?

—Solo te estoy enseñando a como atrapar la pelota.

La pequeña Haru levantó la cabeza para mirarme. —Pero realmente me gusta este Chitose.

—… Tú eres la que está siendo realmente agresiva hoy.

—Estás diciendo que debería golpear la pelota en el núcleo, ¿verdad?

Dijo Haru, golpeando el lado izquierdo de mi pecho con la pelota en su mano. Tragué saliva y tomé la pelota, tratando de escapar del tema.

Con sentimientos encontrados, puse una sonrisa tan grande como pude. —Está bien, practiquemos.

—¡Por supuesto!

Haru puso algo de distancia entre nosotros y le lancé la pelota, un poco más rápido que antes.

*Clap* Hubo un sonido nítido y la pelota entró en el guante.

Luego, Haru tiró la pelota hacia atrás, esta vez con la postura correcta. La velocidad también fue un poco más rápida.

Aumenté la velocidad de mi lanzamiento un poco más, pero Haru lo atrapaba de una manera divertida y me lo devolvía una, otra, otra y otra vez.

esto es divertido. Ojalá esto pudiera continuar para siempre.

En el quinto pase, Haru parecía haber puesto demasiada fuerza y lanzó una gran bola desviada que no pude atrapar a pesar de que salté tan fuerte como pude.

Este golpeó el suelo con fuerza y me giré para recuperar la pelota que había caído detrás de mí…

—¡Saku!

Algunos de mis antiguos compañeros de equipo de béisbol estaban parados allí.

La persona del frente recogió la pelota que había rodado hasta sus pies y me la arrojó con las manos desnudas. La pelota estaba un poco desviada, pero la atrapé. Respiré hondo y sonreí.

—Yuusuke …. Perdón por el desorden, usaré un rastrillo para limpiar el suelo.

El prestigioso bateador número cuatro del equipo de béisbol de la Preparatoria Fuji, Ezaki Yuusuke, frunció el ceño con tristeza como si no me hubiera escuchado.

—¿Sigues jugando al béisbol?

Mantuve mi cara sonriente. —Solo estoy jugando por diversión, estoy tratando de acercarme a esa chica a la que le gustan los deportes.

Miré a Haru y continué tirándole la pelota, solo para que volara sobre la cabeza de mi oponente y aterrizara en el otro lado.

Como si sintiera algo extraño, ella no trató de recoger la pelota, sino que corrió hacia mí.

—Chitose, ¿quién es este tipo?

—Mi antiguo compañero de equipo.

Yuusuke ignoró mi comentario casual y dio un paso hacia mí.

Los rostros familiares detrás de él miraron preocupados la escena que tenían delante.

—Saku… ¿vas a volver alguna vez?

—¿Cómo puedo volver? He estado fuera del juego durante un año y mi toque se fue hace mucho tiempo.

—Pero, solo ha pasado un año, no pierdes tu toque tan fácilmente.

—¿No te lo dije? Los instintos de un bateador se olvidan tan pronto como no batean durante tres días.

—Pero por la expresión de tu rostro… todavía te gusta el béisbol, ¿no?

—… Realmente todavía tienes el descaro de decir eso.

Repliqué reflexivamente, pero después de darme cuenta de lo que había dicho, cerré la boca rápidamente.

—Nos toca a nosotros decirle al entrenador que no volverá a pasar. Después de que te fuiste, finalmente…

—¡¡Oye!!

Estaba apretando los dientes cuando la voz enojada de Haru interrumpió a Yuusuke.

—No tengo idea de lo que está pasando, pero cuando Chitose quiso renunciar, no solo no lo detuviste, sino que te negaste a detenerlo, ¿verdad?

La pequeña chica con cola de caballo se paró frente a mí, como si me estuviera protegiendo.

—Debe haber alguna razón por la que decidió dejar de jugar béisbol. No sé si ustedes son cómplices o simplemente pretenden no saber nada, pero…; Haru golpeó su guante frente a su pecho. —En este momento, soy yo quien está jugando a atrapar la pelota con él.

Estaba a punto de tocar sus delgados hombros cuando…

—Hey, Chitose.

Una voz fuerte me llamó desde atrás.

Giré la cabeza y, por reflejo, di dos o tres pasos hacia adelante cuando vi la postura de lanzamiento por encima del hombro.

• Hubo un zumbido en mis oídos cuando la pelota voló hacia mi pecho como una pelota súper rápida que había sido enderezada.

Pop.

Cuando atrapé la pelota con mi guante, la sensación de dolor y alegría se apoderó de mi cuerpo.

—Buen tiro… Atomu.

La persona que tiró la pelota se me acercó como si nada. —Si te estás divirtiendo tanto, déjame unirme a ti.

Yuusuke pareció sorprendido al principio cuando apareció el intruso, pero inmediatamente abrió la boca. —¿Tú eres… Uemura de la secundaria Yoko?

—Hmph, no estoy interesado en ti, así que no tiene sentido que te lo haga saber.

—No hay muchas personas que jueguen béisbol en la preparatoria que no sepan quién eres.

—Chitose no me recordaba en absoluto; Atomu dijo con autodesprecio, y continuó.

—¿Qué hacen un montón de tontos del béisbol para dejar escapar a un genio tan presumido?

Los ojos de Yusuke se entrecerraron como si estuviera molesto. —¿Qué tiene que ver contigo?

—En realidad no me importa. Acabo de ver a Chitose jugando a la pelota con una chica y me acerqué para burlarme de él.

Ellos se miraron el uno al otro durante un rato, sin decir una palabra. Y luego Yuusuke gruñó y se alejó.

—Hasta luego, Saku.

—Sí; Repetí, levantando mi mano hacia la espalda del tipo que se había alejado.

Después de que Yuusuke y los demás abandonaron el campo, hablé. —Juguemos a atrapar la pelota, Atomu.

Pasé la pelota, él la atrapó y se miró la mano, luego la golpeó de nuevo en mi palma.

—¿Me estás tomando el pelo? Al menos deberías enseñarle a Aomi la forma correcta de sostener la pelota.

—Ah…

Ahora que lo pienso, me he estado enfocando en la postura de lanzamiento y olvidándome de enseñarle el agarre básico. Podía ver claramente desde esa distancia, como se esperaba de un ex lanzador.

—Además, no es como si pudieras olvidarte del béisbol ya que sigues practicando tu swing.

—……

Parecía haber perdido interés, o tal vez estaba aquí por otra razón. Después de decir eso, él se fue sin siquiera mirarnos.

—Qué bicho raro.

Sostuve la pelota por la costura con mi dedo medio y mi dedo índice y se la pasé a Haru.

—Esta es la forma correcta de sostener la pelota. Y…; Snap. La pelota entró en el guante de mi oponente. —Gracias por ser mi compañero para atrapar la pelota.

Haru parecía un poco avergonzada pero luego sonrió. —¿Te golpeé en el centro?

—Justo en el corazón.

La campana sonó, señalando el final de la pausa para el almuerzo. Corrimos a nuestras aulas mientras rastrillamos el suelo para llenar la vergonzosa pausa que de alguna manera pasó.

***

Después de la escuela ese día, los estudiantes de la clase 2-5 se estaban preparando para las actividades del club o para ir a casa. Estaba charlando con los miembros del equipo Chitose mientras ponía los libros y la papelería en mi mochila GREGORY.

Yuuko, que había empacado su bolso antes que yo, dijo alegremente —Saku, ¿tienes algún plan hoy después de la escuela?

—No, no lo creo.

—¿Puedo volver a cocinar en tu casa?

—¿Es el servicio de limpieza de tu esposa después del curso nupcial?

—¡Esposa!

—No te estoy haciendo un cumplido, ve a buscarlo en el diccionario.

Con una bolsa de deporte, Nanase, que estaba a punto de ir a las actividades del club, se acercó.

—Chitose, si no estás ocupado, ¿quieres vernos practicar? Misaki dijo que te trajera de nuevo.

—No quiero, la profesora Misaki da miedo.

—Ella dice que tienes que asumir la responsabilidad.

—¿Qué responsabilidad?

—¿Por obligarme a hacer eso?

—¡No hables de una manera tan engañosa!

Después de que se resolvió el problema del acosador, volvimos a la relación que Nanase y yo teníamos. Los estudiantes eran vagamente conscientes de la distancia entre nosotros, tratando el tema como si fuera como un tabú.

Además, en el foro anónimo de la escuela, había una publicación que decía, “¡Chitose de la Clase 5 fue abandonada nuevamente!”

Mientras hablábamos, la puerta frente al salón de clases se abrió.

—¡Oye, tú el de allí! Ten una cita con tu hermana mayor, ¿de acuerdo?

Asu-nee gritó mientras entraba al salón de clases con una sonrisa.

No pude evitar mirar a las dos chicas que estaban a mi lado.

¡Wow, que hermosas sonrisas! ¡Por favor, sus ojos también deberían estar sonriendo!

¡Estoy volviendo a entrar en pánico!

Asu-nee caminó hacia nosotros a pasos ligeros. —¡Oye, tengamos una cita!

Ella se puso en cuclillas frente a mi escritorio, con la barbilla apoyada en sus brazos mientras me miraba con picardía.

—¿Por qué dices eso tan repentino?

—¿No te lo dije antes? No soy buena haciendo planes.

—Recuerdo que dijiste que no querías tener una cita.

—Ha sido hace tanto tiempo, lo he olvidado.

—¿Tiene que ser hoy?

—No sé acerca de mañana.

—Casablanca, ¿verdad?

Estábamos hablando como líneas de películas antiguas, y Asu-nee se puso de pie rápidamente.

—Entonces, Hiiragi, Nanase, ¿me lo pueden prestar?

—Uuuuuuuuhhh.

Una mirada complicada apareció en el rostro de Yuuko.

Su primer encuentro fue en la sesión de orientación profesional, la impresión de que la otra parte estaba un grado por encima de ella era muy fuerte por lo que no pudo responder con su actitud habitual. Además, también tenía próximamente una actividad en el club, así que no había razón para detenerla.

Por el contrario, la actitud de Nanase era muy relajada. Ella agitó su mano y habló.

—Claro, adelante si no te importa llevarte algo usado~

—Oye, ¿qué quieres decir con “usado”? No recuerdo que me dejaras hacerlo.

—… Cobarde.

—¿Qué pasa con esa larga pausa?

En ese momento, alguien tomó mi mano con fuerza. Como si dijera que las palabras de Nanase no la afectaron, Asu-nee dijo alegremente.

—Entonces lo llevaré conmigo~

Ella agarró mi mano y me levantó. Me levanté de mi asiento. Asu-nee dijo, “Vamos”, y salió corriendo.

—¡Espera, quién dijo que te lo vamos a dar!

Dejando atrás a Yuuko y Nanase, salimos corriendo del aula y bajamos por el pasillo. En el camino, todos los estudiantes giraron la cabeza con curiosidad. Corrimos, saltándonos las voces enojadas de algunos de los maestros.

Todo se puso un poco loco cuando ambos nos reímos a carcajadas.

***

Sin saber a dónde íbamos, me detuve en el salón del club de baloncesto masculino y le pedí prestada su bicicleta a Kaito antes de salir de la escuela. Por el momento, empujé la bicicleta y caminé por la familiar orilla del río.

—Entonces, ¿qué tipo de broma es esta?

Asu-nee, que estaba unos pasos por delante de mí, volteó la cabeza felizmente. —Se llama una cita en uniforme según los rumores en las calles.

—Eso no es lo que quise decir.

—Sabes…; Ella redujo el paso y caminó a mi lado. —Cuando estás en tercer año, ¿no tienes que empezar a pensar en el futuro? Cuando te estaba observando en tu salón de clases de camino a casa, pensé para mis adentros, “Esta es la única vez que estemos juntos como estudiantes”. En el futuro, no importa cuánto desee regresar, este tiempo presente nunca regresará.

—¿Es por eso que vamos a una cita en uniforme?

Asu-nee se rascó la mejilla avergonzada.

—Ves, siempre nos hemos encontrado en esta orilla del río, hablamos y nos despedimos, ¿verdad? Ni siquiera sabemos nuestros números de teléfono o ID de Line. Ese tipo de relación es muy poética y hermosa, pero ¿puede ser un buen recuerdo que quede en el fotolibro y no deje lamentos en mi acercamiento a la juventud? Tengo todas estas dudas.

Esa emoción podría describirse como sentimental. La mayoría de los estudiantes de preparatoria tendrían el mismo pensamiento.

Sin embargo, el tiempo definitivamente se movía a diferentes velocidades para Asu-nee, quien dejaría la escuela, y para mí, quien me quedaría aquí por un tiempo.

El día que parecía normal para mí fue el día que fue precioso para ella a medida que pasaba el tiempo.

—Es sorprendente, pensé que sería yo quien diría algo así algún día.

—Yo también lo pensé… Si lo hubiera sabido, no habría ido a la sesión de orientación profesional de tu clase solo por curiosidad. Si no supiera nada, podría haber desaparecido de tu vida como una ilusión.

Su voz era suave y sonaba un poco solitaria.

—… Siempre has sido la hermana mayor que admiro, Asu-nee; Lo dije tan firmemente como pude. Para ser honesto, era algo que tenía que decir.

Fui yo quien le impuso ese papel porque era débil en ese entonces, y todavía lo soy ahora. Al final, la dejé ser una adulta otra vez.

—Oye, ¿sabes algo? Cuando me viste a mí y a Okuno interactuar entre nosotros, la sensación que tenías en ese momento era la misma que tenía cada vez que te veía charlando con Hiiragi y Nanase.

Recordé el toque de la mano que acababa de sostener la mía.

—Para ser honesta, no pude dormir el día de la sesión de orientación profesional. Así que me acosté en la cama, tratando de averiguar por qué, como si estuviera abriendo la lata para ver cuántos dulces quedaban dentro. Finalmente se quitó la tapa y salió la respuesta.

Asu-nee me mostró una sonrisa que era tan transparente como podía ser.

—Solo quiero disfrutar de mi juventud contigo como una simple estudiante de preparatoria, como Nishino Asuka.

La primera vez que vi esta expresión, sentí como si mi corazón estuviera a punto de estallar y una respuesta sorda salió de mi boca.

—¿Incluso si es solo una relación normal entre senpai y kouhai?

—¿Es malo ser normal?

—No, solo me resulta un poco difícil de imaginar.

—Si ese es el caso, todavía hay tiempo y razón para que lo intentemos, ¿verdad?

Me relajé y me reí de esas palabras. —Entonces, resulta que estás más interesada en mí de lo que pensaba.

—¿No lo sabes?; Asu-nee dijo con picardía. —…… Me gustas desde hace mucho tiempo.

Un repentino silencio cayó entre nosotros.

Era como si el viento que soplaba hacia el mañana nos hubiera pasado de largo. Un gato callejero cruzó despreocupadamente frente a nosotros, los cuervos graznaron en la distancia y el sonido del río resonó cerca.

Nos miramos, miramos y miramos el uno al otro. Asu-nee no apartó la mirada, yo tampoco.

Durante todo este tiempo, habíamos trazado una línea entre nosotros dos. O tal vez sería más correcto decir que le había permitido trazar una línea.

Por lo tanto, esa declaración no fue una confesión de amor, sino una amable despedida de Asu-nee para poner fin a este extraño y artificial espectáculo.

No tenía derecho a negarme.

En menos de un año, ya no seríamos senpai y kouhai de una escuela preparatoria. Y tal vez la distancia entre nosotros sería tan grande que nunca volveríamos a cruzarnos.

Entonces, dije la cosa más cliché que podía decir. —De todos modos, ¡divirtámonos en la preparatoria!

—¡Sí!

Probablemente por primera vez desde que nos conocimos, ambos nos miramos y sonreímos como estudiantes de preparatoria que puedes encontrar en todas partes. Su expresión se volvió brillante mientras se aflojaba la corbata.

***

A lo largo de la Ruta 8, que era la misma calle que el centro comercial Elpa, había un centro de juegos y un manga café bastante cerca uno del otro. Eran lugares que a veces visitaba con Kazuki y Kaito. Decidí ir a un café manga con Asu-nee que estaba en la parte trasera de la bicicleta.

Aunque este lugar se llamaba manga cafe, en realidad tenía varias instalaciones como karaoke, dardos, billar, etc.

Sugerí que cada uno de nosotros tuviera una habitación privada y leyéramos mangas por separado, sin embargo…

—¡Las únicas cosas que deben separarse en una cita son el helado PAPICO y las paletas heladas en un día de verano!

Ella inmediatamente rechazó mi sugerencia.

Como último recurso, traté de elegir una habitación con un sofá para dos personas, pero sin dudarlo, Asu-nee le dijo al personal que quería una habitación japonesa, donde las sillas no tuvieran patas ni brazos.