Hazure Skill Kage Ga Usui (NL)

Iba de camino a casa después de hacer la compra de algunas cosas que Rila me había pedido.

Al principio, la gente de la ciudad tenía miedo de Rila, pero una vez que se dieron cuenta de que no pretendía hacer daño, cada vez eran menos los que se metían con ella. Cuando pasaba por mi lugar de trabajo, solía cambiar a su forma de gato para evitar complicaciones, pero cuando yo no estaba, salía a comprar libremente en su forma original. Parecía disfrutar paseando por la ciudad.

Cuando pasé por un callejón que era un atajo, percibí una presencia que me hizo detenerme.

— . ..

Me asomé a un escondite y encontré a una niña. Una pequeña niña de diez años, para ser exactos.

Estaba acurrucada y abrazada a sus rodillas.

—¿Qué haces en un lugar como éste?— pregunté.

Sus ropas apenas llegaban a ser unos trapos. No hacía falta mucho para adivinar qué era esta niña.

No contestó ni siquiera después de que esperara un rato.

Su visión me trajo a la mente un cierto recuerdo.

—¿Tienes hambre?

Le ofrecí a la chica un poco del pan que Rila me había encargado comprar. En ese momento, sus ojos vacíos me miraron como si se dieran cuenta por primera vez de mi presencia. Tenía una marca de servidumbre en el cuello, tal y como yo esperaba. Sin duda era una esclava que había escapado o había sido abandonada.

—Come— dije, como si fuera una orden. Lentamente, la chica empezó a mordisquear el pan. Su ritmo se aceleró constantemente.

Una vez que terminó, volvió a apartar su rostro de mí.

—¿Fu ist e abandonad a ?— Pregunté.

La chica permaneció en silencio y sin responder.

Tal vez se haya escapado.

—Ven conmigo. Te cuidaré por un tiempo.

—.. .

Aun así, se negó a moverse…

Pensando que, tal vez, era incapaz de moverse, puse mis manos bajo sus axilas, la puse de pie y la subí a mi espalda para poder cargarla. Me pregunté si tal vez se había debilitado demasiado porque no había comido lo suficiente. Tenía la esperanza de que volviera a hablar cuando recuperara las fuerzas.

— . ..Así es como terminé llevándola a casa conmigo.

Cuando le expliqué la situación a Rila después de volver a casa con la compra, resopló.

—Voy a cuidar de ella durante un tiempo.

—¿Y por qué ibas a hacer algo tan agotador como eso? No es que nadie te lo haya pedido.

—.. . Tenemos habitaciones extra, así que dudo que sea un inconveniente.

—Haz lo que quieras, supongo.

Mientras Rila preparaba la cena, bañé a la niña y la vestí con ropa que le quedaba grande.

Después de notar que se frotaba el sueño de los ojos, un posible resultado del baño, la metí en la cama en una de las habitaciones libres.

—Rila, ¿hay alguna forma de eliminar una marca de servidumbre?

—Esos métodos existen. Sin embargo, ya no poseo maná, ni puedo usar la magia.

—Lo sé.

Una marca de servidumbre es un escudo que se estampa en los esclavos. Un esclavizador lanza un contrato mágico que obliga a la persona marcada a una obediencia absoluta y le impide hacer daño a su controlador. El esclavo se vende entonces a un comprador.

—Dudo que un a niñ a mugrient a como es a alcance una suma elevada.

—Estoy de acuerdo. Sin embargo, se limpió muy bien después del baño.

La chica podría haber sido una sirvienta de un mercader en algún lugar cercano. Los aristócratas no eran los únicos compradores de esclavos. Los ricos a menudo sólo compraban esclavos para el trabajo. Eso significaba que compraban principalmente hombres jóvenes. Sin embargo, se trataba de una muchacha, lo que significaba que podría haber sido vendida a alguien que buscaba saciar una afición particular.

—De todos modos, es probable que haya sido abandonada o se haya escapado.

—Eres amable. Amable hasta el punto de que casi parece que nunca fuiste un asesino… Que así sea. No puedo garantizar que la marca se deshaga.

La marca de la servidumbre y el contrato sólo podía deshacerse mediante la magia de contrato del esclavizador que la había hecho. Si las marcas pudieran eliminarse mediante la magia de purificación, el comercio de esclavos no existiría. Por eso la magia de contrato no podía ser manipulada más que por su lanzador.

—Que yo sepa, no se puede hacer nada para quitar la marca, pero eso sólo se aplica a la magia humana que yo conozco— dije.

—Ja-ja, eres un hombre astuto.

Los humanos temían a los demonios, pero no simplemente por su gran cantidad de maná o sensibilidad mágica. Los demonios eran vilipendiados porque poseían una serie de artes mágicas más allá de la comprensión humana.

Rila fue a la habitación de la chica para comprobar la marca de la servidumbre.

—. . .Hmm. Hay varios tipos de magia que un humano podría usar para un contrato de esclavitud… La marca de esta chica, sin embargo, es una variedad de contrato de demonio común.

—¿Un contrato con un demonio?

—Hmm. Parece ser el tipo de acuerdo en el que uno recibe una cantidad exorbitante de poder a cambio de su alma. Aunque eso es lo que parece ser, también parece haber sido manipulado.

Rila había adivinado todo eso con sólo mirar la marca en la niñ a dormid a .

—Tiene una estructura irreversible… Los humanos realmente pueden ser mucho más aterradores que los demonios a veces. La cuestión más grande es si realmente puedes manejar la magia que conozco.

—Puede ser que lo intente. Enséñame.

—Entonces te daré una lección personal, directamente del propio Señor Demonio. Deberías estar agradecido por mi benevolencia.

—Pero ya no eres el Señor Demonio.

A petición mía, Rila me enseñó la teoría y la metodología del hechizo que necesitaría, así como la cantidad de maná que necesitaría y los detalles de cómo utilizar ese maná.

Su conferencia fue inesperadamente cuidadosa y suave.

—Dudo que un humano como tú pueda hacerlo…

Hacía varios años que no utilizaba la magia que me había enseñado otra persona.

Hice exactamente lo que Rila me había indicado.

—Disipar.

—¡Oh! ¡Casi lo olvido! Soy capaz de hacer esto sin un círculo mágico. Tú, sin embargo, debes inscribir uno o tu éxito será…

¡Crack!

Se oyó un fuerte sonido como el de la rotura de un cristal.

—Tuviste éxito…

—¿ Fue eso?

La marca de servidumbre en el cuello de la chica había desaparecido.

—Muy bien. Le preguntaremos qué pasó cuando se despierte mañana— decidí.

—Inconcebible. Disipar es magia de purificación de rango de orden de la corte… Pensar que un humano como tú tendría éxito en su primer intento. Y sin un círculo mágico, además.

—¿Grupo de orden de la corte , qué?

—Ah, sí. Los demonios tienen rangos igual que los humanos , según nuestros talentos. Cuanto más alto es el orden de la corte, más fuerte y variado es el tipo de magia que se puede utilizar. El rango de orden de la corte indica los tipos de magia que sólo yo, como Señor Demonio, puedo utilizar.

Aunque había excepciones, parecía que la orden de la corte era en general un buen barómetro del poder de la mayoría de la magia.

—Sólo hice lo que me dijiste, Rila.

—Es probable que haya menos de un centenar de demonios que puedan lanzar con éxito Disipar después de dibujar un círculo mágico… Sólo un puñado son capaces de hacerlo sin un círculo mágico, yo incluid a .

—¿De verdad?

—Parece que tus habilidades no se limitan al arte del asesinato. Puedes lanzar con éxito algo que acabas de aprender de otro en tu primer intento. Yo mism a lo he visto. Destacas entre el resto por tener un gran talento mágico. Quizás incluso al mismo nivel que un demonio.

Mi magia había recibido la aprobación del propio Señor Demonio.

◆

Al día siguiente, cuando fui a ver cómo estaba la niña, ya estaba fuera de la cama.

Su color también se veía mejor que ayer.

—¿Descansaste bien esta noche?

—..

Como un gatito cauteloso, me miró fijamente.

Le mostré las dos palmas de las manos y asentí varias veces.

—Soy Roland. Soy un as e -un empleado del Gremio de Aventureros. ¿Cuál es tu nombre?

—.. . ¿Nombre…? ¿Nombre…?

—¿No lo sabes?

La chica cerró los ojos como si estuviera ligeramente preocupada y negó con la cabeza.

—No lo sé.

Las circunstancias variaban, pero no era inaudito que alguien fuera vendido como esclavo sin haber recibido nunca un nombre. Era común entre los hijos de las prostitutas. Evidentemente, la pobre chica seguía muy confundida. No parecía que fuera a explicarlo todo de una sola vez.

Por el momento, llevé el desayuno que Rila había preparado a la habitación de nuestr a invitad a .

—No puedo garantizar que sepa bien, pero probablemente sea mejor que nada.

—¿Qué fue ese comentario inteligente que acabo de escuchar?

Rila me miraba por detrás.

Por suerte, la niña pareció aceptar la comida, sorbiendo ansiosamente el desayuno con su cuchara.

Debe estar traumatizada. ..

—¿Hmm? ¿Pasa algo, bribón…? Has estado mirándome fijamente. ¡¿Eh?! ¡No podemos! ¡No puedes tomarme en tus brazos delante de un a niño tan pequeñ a ! ¡No, inaceptable…!

A pesar de sus protestas, Rila parecía ligeramente expectante.

Mientras Rila se agarraba el pecho y se sonrojaba, toqué su collar y la convertí en un gato.

Después de transformarse, se tiró al suelo.

—¡¿Qué?! ¿Ahora soy un gato…? Bribón, ¿cuál es el significado de este repentino desarrollo?

—Kitty— murmuró la chica.

Había oído que cuidar de un animal ayudaba a la gente a recuperarse de un trauma.

Agarré el cuello de Rila.

—¡¿Qué estás haciendo?! ¡¿Por qué me has transforma do ?! Bribón, ¿me estás escuchando?

Rila se esforzó mientras daba patadas a sus pies de un lado a otro.

Los ojos de la chica brillaban.

—¡Un gatito que habla…!

—Así es. Es un gatito que habla. ¿Podrías cuidar de este gato por mí?

—Disculp a … ¡¿Qué fue eso?! ¡Deprisa, devuélveme mi forma! ¡Dije que me volviera a a cambiar! Ahora mismo.

Le entregué a la chica una Rila que se debatía, y ésta la envolvió en un fuerte abrazo.

—Kitty, estás calient ita .

—¡¿Gaaah?! ¡Mis huesos! ¡Los vas a romper! ¡Déja me ! ¡Por favor! ¡¿Acaso sabes quién soy?! ¡Esto es una blasfemia!

Ciertamente era un pequeño gato negro muy ruidoso.

—¿Cuidar de ella… es su orden… maestro?

—No soy tu maestro. Si no quieres hacerlo, no tienes que hacerlo… Me voy a trabajar. Si necesitas saber algo, pregúntale al gato.

—¡Bribón, me vengaré por esto!

No estaba seguro de si la chica había oído realmente lo que le había dicho, pero se puso a jugar con Rila con bastante rapidez.

Sin embargo, no se había interesado mucho por la forma original de Rila ni por mí.

No hay que subestimar a los gatos.

Me dirigí al gremio y comencé mi jornada de trabajo.

No tenía intención de criar a la niña. Cuidarla era algo temporal.

… ¿Qué tengo que hacer para ayudar a la niña a hacer su propio camino?

—Hmm, claro, el registro de nombres…

Saqué el registro de nombres de aventureros de la estantería. Miré la lista de aventureros que estaban registrados en el gremio.

—Parece que no pedimos información demográfica ni edad.

Para inscribirse como aventurero, había que pasar una prueba. La única condición para hacerla era que el solicitante no podía haber sido condenado por ningún delito grave.

—Muy bien, en ese caso…

Había tomado mi decisión.

¡HRMAAAOOOW! Algo parecido al grito de un animal resonó en las habitaciones.

—Kitty, shhh, shhh. ¿Es tá realmente aquí ?

—Mrwagh, mrwagh.

Todos en la oficina se volvieron hacia la puerta de donde había salido el sonido. No puede ser , pensé. Me acerqué a la puerta y la abrí.

—Oh.

Mrow.

Un gato negro, agarrado al pecho de una joven, me miró y sonrió. Rila había salido y traído a la chica aquí. Supongo que esta era su venganza.

—¿Por qué estás aquí?— Pregunté.

—Kitty dijo que viniera…

… Hmph.

Cuando Rila vio mi cara nublada, se rió en voz baja.

—¿Eh? ¿No es ese su gatito, Señor Roland? ¿Y un a niñ a ? ¿Por qué está aquí es a niñ a ?— Milia habló, vocalizando la pregunta que todos tenían en mente.

—Bueno, es que… estoy cuidando de ella por un tiempo… y le pedí que vigilara la casa, pero parece que me ha seguido. Lo siento, la llevaré de vuelta a casa inmediatamente.

En un sorprendente giro de los acontecimientos, todos mis compañeros de trabajo se apresuraron a venir.

—Roland, ¿quién es la niño? ¿Un miembro de la familia?

—Sí, algo así…— respondí.

—Debió sentirse sola en casa y vino hasta aquí con su gato.

—Tiene que ser eso.

Los empleados masculinos adulaban a la chica abrazando al gato.

Luego vinieron los susurros de mis compañeras de trabajo.

—Está cuidando a uno de los hijos de su pariente.

—Debe estar muy unida a él si ha venido hasta aquí por él.

—Tiene una alta puntuación por ser capaz de cuidar a un niño.

—El Señor Argán es fiable y amable, así que por supuesto que le gustaría a un niño.

— ¡¡¡ Seguro que es lindo … !!!

Entre todos los empleados del gremio que encontraban el asunto conmovedor, había un hombre que ni siquiera había abandonado su escritorio.

—Oye, esto no es una guardería. Date prisa y llévala a casa. ¿Verdad, todos?— MauRey excla mó.

— ¡¡¡ … !!!

Todos le lanzaron una mirada fría.

—¿Estoy equivocado aquí? Estoy seguro de que no, ¿verdad? Esto es un negocio. No es lugar para cuidar a los niños.

La cara de MauRey dejaba claro que se consideraba en lo cierto.

Hmm. Yo también pensé que era un argumento bastante sólido. Por eso intentaba que se fuera a casa, pero…

—En realidad, ¿puedes cuidar a un niño mientras trabajas? Es imposible que puedas, ¿verdad? Tienes mucho valor, teniendo en cuenta que eres el último peldaño del escalafón, novato. Será mejor que no te desentiendas de tus obligaciones. No puedes hacer varias cosas a la vez hasta que llegues a mi nivel, ¿verdad? Tienes que convertirte en un profesional completo y entrenado como yo antes de intentar eso. Además, odio a los niños y lo quisquillosos que son.

Nadie dijo nada, pero todos en la oficina miraron fijamente a MauRey.

—.. . ¿Qué? ¿Cuál es el problema? Más importante, vuelve al trabajo. Hay que mantener esas manos ocupadas.

No estaba en desacuerdo con su opinión por principio s , pero la actitud de MauRey no le hacía ganar ningún favor. Esa actitud de “mejor que tú” no le gustaba a los demás.

—¿Qué pasa, todos? ¿Eh? ¿Un niño?— Iris había venido a ver qué era toda esa conmoción. Cuando vio a la niñ a , sus ojos parpadearon varias veces en rápida sucesión.

—Oh, Directora de Sucursal…— Milia explicó las cosas a Iris en mi lugar.

—Hmph, así que eso es lo que está pasando.

MauRey aún no había dejado de quejarse. —Directora de Sucursal, esto es una oficina. No es lugar para niños…

—¿Por qué no? Mientras no se interponga— decidió Iris.

—Sin embargo, Roland apenas puede hacer su trabajo— protestó MauRey.

—Por lo que veo, ha demostrado ser bastante capaz.

—Se va a casa antes que los demás. ¿Cómo es posible que haga todo su trabajo?

—Lo hace porque es eficiente.

—Pero he estado trasnochando para terminar lo …

—Eso es sólo porque eres ineficiente.

Como una babosa a la que se le ha echado sal, MauRey se encog ía cada vez más.

—..Realmente no te has andado con rodeos…

Se ahogó en las lágrimas.

La decisión de l a Directora de Sucursal había resuelto las cosas , la chica podía quedarse en el Gremio de Aventureros por hoy. Eso no significaba que pudiera correr por la oficina, por supuesto. Iris me ordenó que la mantuviera en la sala de recepción.

—¿Puedo jugar con el gatito aquí?

—Sí. Vendré a ver cómo estás de vez en cuando. Asegúrate de comportarte.

Le di una palmadita a la chica en la cabeza.

Rila, la instigadora de toda esta debacle, se limitó a bostezar a nuestros pies. Este era el fin de mis días de ocio. Había asumido la responsabilidad de criar a una joven para que se convirtiera en una aventurera y se abriera camino en el mundo.

◆

Mientras me dirigía a casa desde el trabajo, Rila le puso un nuevo nombre a la niña, que aún desconocía su identidad original.

—Maylee. En el viejo demonio, significa “ cielo azul ” .

—Hmm. Entonces así te llamaremos. Maylee, ese es tu nombre ahora.

—¿Maylee? ¿Soy Maylee?

—Sí, eso es.

Mientras me miraba con ojos tan azules como el cielo, le di a Maylee una palmadita en la cabeza.

—¡Maylee!— chilló felizmente.

—Parece que le gusta— observé.

—Ha-ha. Por supuesto. Mi habilidad para los nombres es más profunda que los mares y más alta que los cielos.

No entendí muy bien a qué quería llegar Rila, pero parecía que se estaba alabando a sí misma.

—Voy a entrenarte para que puedas sobrevivir por tu cuenta, Maylee— dije.

—¿Qué significa eso?— preguntó ella.

—Voy a convertirte en un a aventurer a .

—Hmm, no es una idea terrible— comentó Rila.

Me había dado cuenta hace poco, pero Rila parecía casi incapaz de alabar directamente. No terrible era lo máximo que iba a conseguir.

—Como removedor de su marca de servidumbre, harías bien en responsabilizarte de ella, bribón.

— . ..Pero por otro lado, también le enseñaré lo que es normal .

—Así que… ¿es ahí donde ofrezco mi visión, entonces?— Rila puso la cara más altanera que su forma de gato negro pudo reunir.

—No, en realidad no.

—…..

—Creo que le pediré a Milia que se encargue de eso.

Al oír esas palabras, Rila saltó hacia mí y dio un zarpazo con sus garras. La atrapé, pasé maná por su cuello y la devolví a su forma original.

—Supongo que no sé lo que es normal de todos modos— admitió Rila. Malhumorada, giró su rostro hacia otro lado.

Al día siguiente, desperté a Maylee antes de que saliera el sol y comenzamos nuestro régimen de entrenamiento. Nuestra práctica continuó cuando volví a casa del trabajo. Día tras día.

—Eras un esclav a , ¿verdad?— Pregunté.

—¿ Escla – va h? No, ¡me llamo Maylee!

—Bueno, en realidad no es eso lo que quería decir.

Salimos a correr a primera hora de la mañana por las montañas. En lugar de tomar las carreteras planas y llanas, corrimos por los senderos escarpados y las pistas de caza. Sus piernas, que habían sido frágiles la primera semana que habíamos empezado, se habían fortalecido rápidamente. Los niños ciertamente crecen rápido. Maylee, decía que correr era divertido, estaba llena de ánimo desde el principio hasta el final.

—Deberías hacer bien en recordar que no soy una criada— espetó Rila.

—¿Quieres que te compre un uniforme de sirvienta?

—No— respondió mientras calentaba sopa y preparaba pan en la mesa después de que Maylee y yo volviéramos de nuestra sesión de entrenamiento al amanecer.

Supongo que Maylee debía estar acostumbrada a comer muy mal, ya que nunca se quejó de la cocina de Rila.

—No pienso en ti como un ama de casa.

—Entonces estoy satisfecha… Últimamente, todo lo que has estado haciendo es cuidar de Maylee… Um, y has descuidado el acariciarme tan a menudo como solías hacerlo…— La voz de Rila era un susurro. Una vez que dijo su parte, se escabulló, escapando a otra habitación.

—¿Quieres entrenar o algo así?— Pregunté.

—¡Qué absurdo! ¡Por supuesto que no! ¿Por qué tendría que hacer algo así?

Rila se había asomado por la puerta, me había gritado y había huido inmediatamente.

Al parecer, me había equivocado.

Maylee era una buena oyente y aprendía aún más rápido. Cuando yo tenía su edad, ya había empezado a trabajar como asesin o , así que decidí darle una formación práctica mañana.

Esa noche, mientras estaba en la cama considerando el régimen de mañana, sentí algo inusual.

—.. .

… ¿Una “rata”?

Toqué el collar de Rila mientras dormía y la convertí en un gato. Me escabullí de la cama, asegurándome de no despertar a Maylee, que estaba profundamente dormida entre nosotros.

Cuando salí a la calle, vi a un hombre solitario caminando a la luz de la luna. Sus rasgos eran andróginos, pero no tenía ningún otro rasgo distintivo. Por su aspecto, es probable que sea…

Fue entonces cuando el hombre me vio.

—Esperaba que estuviera sola, pero parece que el destino no ha sido amable con usted, señor.

—Podría decir lo mismo de ti— respondí.

—Me había creído indetectable.

—Tus habilidades son de tercera categoría… Ni siquiera puedes esconderte correctamente, ¿eh?

—¿Qué has dicho?

—Cuando borras tu presencia, también estás borrando las presencias de las cosas que te rodean. Se crea un vacío antinatural en el espacio que te rodea. Donde debería sentir plantas y árboles, de repente no hay nada. Eso no engaña a nadie. A menos que te asimiles con tu entorno, lo único que haces es llamar la atención.

—No hay una persona viva que detecte la ausencia .

—Supongo que ciertamente se lo parecerá a alguien de su nivel.

—Seguro que eres un engreído por haberte cruzado conmigo de camino a casa.

—¿Ni siquiera te das cuenta de que mi salida al exterior no fue una coincidencia?

—Escucha, asimilarte con tu entorno no es posible.

—.. . Eso es lo que tú crees.

Sin duda, ni siquiera necesitaba mi habilidad para enfrentarme a esta persona, pero decidí que le mostraría algo de fuerza real. Al observar todo, la vegetación, la tierra, el viento, el arroyo que fluye, me fundí con el paisaje.

El hombre empezó a seguirme con la mirada un momento demasiado tarde , ya había hecho mi movimiento. En ese momento se decidió toda la lucha. Le robé el cuchillo que llevaba escondido y, por detrás, le rodeé la cabeza con el brazo de forma que la punta de su propio cuchillo le apuntara al ojo.

—Así es el mundo. ¿Lo entiendes ahora?

— … ¿Qué…? No puedo… moverme… ¿Cómo…?

—Parece que la fortuna no estaba de tu lado.

—.. . Mátame.

A pesar de mis intentos de interrogar al hombre, se negó a revelar la identidad de su objetivo o de su empleador.

—No puedo creer que haya una criatura en este mundo capaz de ver a través de mi habilidad Emboscada Absoluta… Eres repugnante. Es tal y como dices. Tuve mala suerte…

—Dependiendo de la habilidad, es algo que fundamentalmente tienes que ser discreto al invocar. ¿Cuánto tiempo se tarda en invocar esa habilidad tuya que se llama así?

—No importa. Sería absolutamente imposible usar mi habilidad en un oponente como tú…— El hombre soltó una carcajada autodespectiva. —Quiero decir que esto terminó en dos parpadeos. En ese corto espacio de tiempo, me rodeaste, encontraste mi cuchillo oculto y lo tenías preparado para golpear… ¿Qué está pasando aquí…? ¿Eres un profesional?

—No, sólo soy un empleado del Gremio de Aventureros. La mayor parte de mis días los paso empujando papel es .