Mahou Shoujo Ikusei Keikaku (NL)

Volumen 9

Capitulo 8: ¿Nuestras Vidas Reales Son Satisfactorias?

Parte 2

Cinco minutos después, el autobús estaba en la parada frente a la escuela media. Si hubiera sido un día de la semana, todos los niños que volvían a casa del colegio habrían subido en tropel. Como era fin de semana, sólo se bajaron una o dos personas. Pero el autobús no se movió. Esto se debió a que Kokuri se había agarrado a la parte trasera del autobús, y estaba haciendo que las monedas de quinientos yenes fueran escupidas repetidamente por la máquina de cambio para llenar el suelo de monedas tintineantes. El conductor entró en pánico y llamó a la compañía de autobuses una y otra vez; los pasajeros estaban atónitos mientras la magia de Kokuri mantenía la máquina de cambio chorreando como un Merlion. Las monedas que escupía rodaban por el suelo, mientras los amables pasajeros las recogían para el conductor.

Al comprobar el autobús desde el aire, Kafuria se mostró satisfecha de que el sabotaje hubiera salido bien.

Volar en el cielo durante el día, aunque fuera rápido, aumentaba las posibilidades de que la vieran. Al Reino Mágico no le gustaba que las chicas mágicas aparecieran en los registros como fenómenos misteriosos o leyendas urbanas; sin embargo, se trataba de una situación de emergencia, así que no podía preocuparse por los pequeños detalles.

Ella dejaría el autobús a Kokuri. Kafuria le había dicho que corriera si creía que iba a pasar algo. Kokuri no cometería ese tipo de error. Ahora mismo, ella estaba allí para ganar un poco de tiempo y evitar que el autobús se fuera a cualquier parte.

Justo después de quejarse de un dolor de estómago y bajarse del autobús, Kafuria había llamado a las amigas con las que acababa de salir y les había pedido que fueran a buscarla. Si un vehículo grande y robusto como un autobús tenía un accidente, era anormal que todas las personas sentadas en la parte delantera murieran casi al mismo tiempo, y Kafuria podría no ser capaz de evitarlo por sí misma. Se necesitaban varias chicas mágicas. Siempre se podía confiar en los números.

Desde el aire, Kafuria buscó a lo largo de la ruta del autobús cualquier cosa que pudiera causar un accidente. Lo encontró inmediatamente, acercándose al autobús por la autopista principal por encima del límite de velocidad y zigzagueando entre el tráfico. Era un camión cisterna. Kafuria bajó y echó un vistazo a través del parabrisas.

El conductor estaba cabeceando. A este ritmo, aunque sacaran el autobús de su camino, iba a provocar un gran accidente en alguna parte. Kafuria volvió a ascender, siguiendo al camión cisterna mientras enviaba un mensaje a Auro y Negino con su teléfono mágico.

Encontré el vehículo que parece ser la causa. Un camión cisterna, con el conductor dormido al volante. ¿Pueden verlo desde allí?

Pudo ver a Negino en la acera empujando las manos hacia la cisterna. El aroma de las cebollas verdes era poderoso, y tenía un efecto como el de las sales aromáticas. El conductor levantó su cabeza caída.

¿Cómo podía permanecer dormido con el olor a cebollas verdes llenando el interior de su vehículo? Pero había un problema: parecía que Negino se había entusiasmado demasiado, y el conductor se atragantó. El camión cisterna se desvió por dos carriles. El vehículo ligero que circulaba a su lado también dio una sacudida al volante. De alguna manera se recuperó para aparcar en el arcén de la carretera, pero el camión cisterna estaba completamente fuera de control. Menos mal que se había despertado, pero ahora había nuevos problemas con los que lidiar.

Justo entonces, una esfera plateada saltó delante del camión cisterna. Era Auro. Vista desde arriba, su afro era tan grande que Kafuria sólo podía ver el cabello de la chica.

En una postura adelantada, como en el fútbol americano, Auro echó la cabeza al frente, y el afro tomó de frente la veloz cisterna. El cabello de Auro estuvo, en todo momento, perfectamente en su sitio. Decía que aunque estuviera envuelta en llamas y la propia Auro estuviera a punto de arder, sólo le quedaría el cabello. Al recibir el impacto del camión cisterna, el cabello no sufrió ningún daño, deteniéndolo suavemente. Pero Auro no pudo aguantar el impulso, y todavía con su cabello sobre el parachoques, salió volando por la carretera.

Negino saltó a la carretera y se agarró detrás de Auro, y luego Kafuria bajó del cielo para agarrarse detrás de ella. Las tres chicas mágicas lucharon contra el camión cisterna con todas sus fuerzas, y el conductor probablemente también había pisado los frenos. Se oyó el chirrido de los frenos, dibujando largas marcas de goma a lo largo del pavimento hasta que el camión se detuvo, tras lo cual Auro, Negino y Kafuria corrieron inmediatamente fuera de la carretera y subieron por el lado de un edificio cercano para evacuar a la azotea.

Los vehículos estaban parados por todas partes y la gente se reunía. Venían vehículos de policía y ambulancias. El conductor del camión cisterna salió de su camión, tosiendo como si le doliera la garganta.

Negino sonrió. “Quizás me pasé un poco con el olor, ¿eh?” “Esto no es cosa de risa.” Reprendió Kafuria.

“Vamos, al final todo salió bien. De todos modos, es muy peligroso que un conductor de camión cisterna esté tan cansado en el trabajo,

¿no? La empresa debe estar presionándolo mucho, ¿no crees?”

Auro se llevó la mano a la boca y sonrió. “Si trabajamos así de bien, esto podría convertirse en un trabajo rentable para nosotras.”

“Piensa en ese tipo de cosas más tarde. Voy a ir a ver cómo está el autobús.”

Kafuria salió volando. No pudo relajarse hasta que comprobó de nuevo las marcas de la calavera en el autobús. Mientras volaba por el cielo hacia el autobús, sonrió un poco. Hacía mucho tiempo que no utilizaba su magia para ayudar a la gente… No, quizás era la primera vez que lo conseguía legítimamente. Y con el olor de las cebollas, la manipulación de las monedas y el gran afro entrando en acción, este era el tipo de evento único en la vida que probablemente no volvería a ocurrir por muchas vidas que viviera. En su próxima reunión, las cuatro chicas deberían intentar discutir cómo podrían utilizar sus habilidades mágicas para ayudar a la gente.