Hazure Skill ‘Mapping’ Wo Te Ni Shita Ore Wa  (NL)

Volumen 8

Capitulo 9: Aifan y el Gremio de Ladrones

Tardamos diez días en llegar a Aifan tras el secuestro de Neme, pero incluso una vez que entramos en el país, todavía estábamos muy lejos de nuestro destino. Según los mercaderes de nuestro carruaje, el Cardenal Fuge era una figura muy conocida por estos lares. Lo más probable es que se encontrara en Visril, la capital del país y de Cecina, que estaba a otros cinco días de viaje desde la frontera. Cuando por fin nos acercamos a la ciudad, miré por la ventanilla del carruaje y vi una montaña con la cima ahuecada como un cráter.

“¿Eso es Visril?” Me pregunté en voz alta.

Nuestro conductor preguntó entonces: “¿Hmm? ¿Es la primera vez que vienen?”

“Así es. Si no le importa, ¿podría hablarnos un poco de la ciudad?” Preguntó Roslia con su natural sociabilidad.

“Bueno, ¿quién podría decir que no a una joven tan encantadora?” Respondió con calidez. “Hace varios cientos de años, en la era de la guerra, ni siquiera Aifan se salvó. La nación estaba bajo fuego constante. Todas sus principales ciudades fueron devastadas por la guerra, y aunque Visril estaba protegida gracias a su ubicación en la cima de la montaña, la amenaza se acercaba cada día que pasaba.”

El conductor se sumergió inmediatamente en la historia de la ciudad. Roslia preguntaba más sobre su situación actual, pero ninguno de los dos nos atrevimos a interrumpir su apasionada conferencia. Decidimos escucharle.

“Fue entonces cuando apareció un héroe: el enano Forge Maltaios. Los niños de nuestra tierra todavía conocen su nombre. Temía un ataque a Visril e hizo un gran plan para defenderla él solo. ¿Su idea? Convertir Visril en una fortaleza de montaña.”

“¿Una fortaleza de montaña?”

“Es cierto. Una cosa hubiera sido que los poderes fácticos lo propusieran, pero Forge era sólo un joven plebeyo en ese momento. Teniendo en cuenta el terreno, todos se rieron de él y dijeron que era imposible. Sin embargo, Forge puso en marcha su plan.”

“¿De verdad lo hizo?” Preguntó Roslia mientras miraba por la ventana.

El conductor respondió con orgullo: “Sí que lo hizo, desafiando las expectativas de todos. Por supuesto, al principio fue difícil. No es posible que un chico solo pueda transformar una ciudad entera en una fortaleza. Pero en el camino, cumplió quince años y consiguió su habilidad: el legendario Portador del Martillo Sagrado.”

“Portador del Martillo Sagrado…” Murmuré.

No esperaba oír hablar de otra de las habilidades sagradas que Diego había mencionado. Era la tercera que conocía después de Guía de la Espada Sagrada y Tirador del Arma Sagrada. Sólo había escuchado a medias la historia del conductor, pero era posible que la leyenda de Forge nos diera alguna pista sobre cómo desbloquear el verdadero poder de Roslia con su propia habilidad. Decidí prestar toda mi atención al resto de la conferencia.

“Forge utilizó su Martillo Sagrado para reconstruir la ciudad. El robusto lecho de roca se convirtió en murallas más sólidas. Dejó la vegetación intacta, pero añadió torretas, por supuesto. El complicado terreno de la ciudad se transformó en un complejo laberinto para los invasores. Como resultado, Visril se convirtió en una fortaleza inexpugnable, y todos los residentes cantaron alabanzas a Forge. Esa es la historia de la ciudad.”

“Puedes hacer tanto con una sola habilidad, ¿eh?”

“Así es. Así es como esto se convirtió en la tierra sagrada del Cecinaismo. Visril fue protegida de las llamas de la guerra gracias a un único milagro que Dios concedió a un niño. Aproximadamente cien años después, la capital se trasladó a Visril, donde permanece hasta hoy.”

“En otras palabras, este lugar parece una montaña normal desde lejos, pero puede disparar cañones cuando quiera.” Preguntó Roslia, golpeando pensativamente su mejilla con el dedo índice.

El hombre que conducía el carruaje se rió. “Tal vez te he engañado. Visril era una fortaleza hace siglos. La magia dejada por el Martillo Sagrado se ha secado hace tiempo, así que la ciudad es sólo una cáscara de lo que fue. Aun así, es un buen lugar. Estos son tiempos de paz, así que no es un problema.”

“Eso es tranquilizador.”

“Sin embargo, hay muchas reliquias de sus días como fortaleza. Hoy en día se puede disfrutar de ellos como lugares de interés turístico. Hay muchos turistas que se enamoran de este paisaje urbano tan poco convencional. Si no tuviera trabajo, me habría encantado darles una vuelta a ti y a tus amigos, señorita.”

“También nos encantaría echar un vistazo si no tuviéramos asuntos que atender. Quizá la próxima vez.” Dijo Roslia con una sonrisa amistosa.

Efectivamente, teníamos una misión importante: recuperar a Neme. Aunque la historia del hombre sobre Visril era muy interesante, ahora no teníamos tiempo que perder. Contemplé la montaña que se alzaba, pensando en que probablemente no tendríamos tiempo para hacer turismo después del caos que íbamos a provocar.

***

Al llegar a Visril, encontramos una posada y establecimos allí nuestra base de operaciones. Una vez que supiéramos el paradero general de Neme, el resto sería pan comido. Con Mapeado y Búsqueda de Enemigos, en el momento en que ella estuviera a mi alcance, podría identificar su presencia y localizarla.

Resultó que Neme estaba confinada en una habitación dentro de la iglesia principal del centro de la ciudad. Por lo que pude ver, su vida no corría peligro, un alivio por ahora. Sin embargo, estaba retenida en la catedral de Salengre, que hacía las veces de máximo órgano administrativo de Aifan. Mientras que nuestro país era gobernado por un rey, Aifan era gobernado por el Papa Cecinaista. En otras palabras, Neme estaba básicamente prisionera en el palacio real. No había forma de que los aventureros normales pudieran colarse, y mucho menos sacar a alguien.

Así que decidimos seguir el consejo de Riece y buscar la ayuda del ladrón más fuerte de la ciudad, Suiz Myran. Si el Cardenal Fuge había llevado a Neme en misión oficial, nuestro intento de rescatarla sería visto como un acto de hostilidad contra Aifan. En el peor de los casos, seríamos tildados de criminales en esta tierra. Eso dificultaría la ayuda de Suiz Myran si era residente, pero también haría extremadamente difícil recuperar a Neme en una ciudad de la que no sabíamos nada. Primero tendríamos que encontrar al famoso ladrón.

El problema era que no teníamos información sobre su paradero. Todas las ciudades importantes contaban con gremios para diferentes estilos de batalla en los que los lugareños podían registrar sus roles. Visril no era una excepción, así que me dirigí rápidamente al gremio de ladrones. No quería ir solo, pero viajar en un grupo demasiado grande llamaría la atención.

Había decidido llevar sólo a Erin. Sin embargo, mirar desde fuera ahora que estábamos aquí no iba a ayudarnos, así que procedimos a entrar.

“Hola…” Dije.

“Hola.” Respondió la recepcionista del mostrador. “¿Ha venido a registrarse? ¿O para enviar una solicitud?”

Mientras yo daba vueltas, preocupado por la mejor manera de plantear nuestro asunto, Erin respiró profundamente.

“¿Hay un ladrón llamado Suiz Myran por aquí?” Preguntó. “Hemos oído que es hábil, así que tenemos un trabajo para él.”

Ella era realmente confiable en momentos como este. Estaba celosa de su intrepidez. “¿Dijo Suiz Myran?” La recepcionista frunció el ceño, preocupada.

¿Pasa algo malo? Mientras Erin y yo intercambiábamos una mirada interrogativa, un hombre sentado en un sofá del vestíbulo se levantó y se acercó tambaleándose, con una cerveza en una mano.

“Si han venido al gremio de ladrones buscando a Suiz Myran, deben ser forasteros.” Dijo.

“¿Qué? ¿Quién te crees que eres para acercarte a nosotros y llamarnos forasteros? Aunque estés borracho, ¿no es un poco grosero?”

Pensar que había llegado el día en que Erin, de entre toda la gente, criticaría a otra persona por ser grosera… Mientras me tambaleaba por el shock, el hombre se apartó el cabello de la cara.

“Ups, sí. Tienes razón. Es culpa mía. Sólo pensé en decirlo ya que estaba claro que no sabes nada.”

“¿Conoces a Suiz Myran?” Presionó Erin.

“Hmm. No estoy seguro de cómo debería responder a eso…” Reflexionó el hombre, apoyándose en el mostrador. “En cualquier caso, es un ladrón rodeado de secretos. Sólo un puñado de personas en esta ciudad lo conocen. Se dice que vive aquí en la ciudad, pero todo lo demás es un completo misterio.”

Eso sí que me sonaba. Cuando me paré a pensarlo, el asesino más fuerte también fue tratado como una leyenda urbana. Conocía la identidad de Headhunter y me habían pedido que la mantuviera en secreto para mantenerlo a salvo de cualquiera que pudiera estar buscando venganza, así que tal vez Suiz Myran estuviera en una situación similar. Los trabajos de ladrón solían ser infiltraciones y trabajos de incógnito, así que era posible que intentara mantener su identidad en secreto. Supongo que la fábrica de rumores funcionaba igual incluso en el extranjero.

“En otras palabras, no sabes nada.” Dijo Erin a modo de resumen.

“Bueno, esa es una forma dura de decirlo.” El hombre dejó su botella de cerveza sobre el mostrador y se burló. “Pero cuando dos jóvenes desconocidos vienen a preguntar por él, es bastante obvio que son forasteros, así que no te lo tomes como algo personal. No hay por qué enfadarse.”

“No estoy enfadada. Siempre estoy así.” “Ooh, qué muchacha más fuerte.”

“Sin embargo, podría enfadarme en cualquier momento.”

Cuando Erin le lanzó una mirada desafiante, el hombre levantó ambas manos en señal de rendición. Menos mal. Si nos metíamos en una pelea con este tipo, sólo nos retrasaría el rescate de Neme. Erin realmente necesitaba mantenerse pacífica.

El hombre abrió la boca para disipar el aire tenso. “Como disculpa, te diré algo más que sé sobre Suiz Myran.”

“¿Y qué es eso?”

“Nunca elige un trabajo basándose en la recompensa. Hay una historia de cómo no aceptó ni siquiera cuando un noble le ofreció cientos de millones en oro.”

“¿Estás diciendo que tiene sus propias normas para aceptar trabajos?” Pregunté.

“Bueno, se podría decir que sí. Los  detalles son un poco confusos.” Respondió el borracho.

Eso sonó como un golpe de suerte para nosotros. Los Arrivers eran un grupo de exploración de mazmorras de primera línea, pero también estábamos perpetuamente arruinados. En ese momento estábamos luchando para pagar el reemplazo de Bestia Brillante, la espada de Force. Todos queríamos ayudarle, pero no podíamos darle el dinero que no teníamos. En vista de ello, teníamos una posibilidad de conseguir la ayuda de Suiz Myran si no estaba motivado económicamente.

“Entonces, ¿qué asuntos tienen ustedes dos con Suiz Myran?” Preguntó el hombre. “Eso es…”

Revelar nuestro objetivo a un ladrón cualquiera parecía arriesgado. Ni siquiera sabíamos el nombre de este tipo. Todo lo que sabíamos era que estaba bebiendo en el gremio de ladrones en pleno día, y aparentemente era un poco entrometido. Si le decíamos que estábamos aquí para recuperar a Neme, podría vender esa información a la iglesia. Incluso si no llegaba a tanto, estaba claro que le gustaba hablar. No había garantía de que la noticia de nuestro plan no llegara a oídos del Cardenal Fuge.

El hombre pareció percibir nuestra cautela y abrió los brazos con expresión bromista. “Vamos, no hay necesidad de ser tan cautelosos. Lo pregunto para poder ayudarles, ¿saben?”

“¿Ayudarnos?”

“Así es. A pesar de las apariencias, soy un ladrón de buena fe. Abierto a las peticiones en cualquier momento. Incluso te haré un descuento. Ustedes no tienen mucho dinero, ¿verdad? Tomaré su trabajo por un precio muy bajo.”

“Lo harás, ¿en serio? ¿No lo dices porque no puedes conseguir otro trabajo?” Erin suspiró, desinteresada. “No tiene sentido hablar con un borracho, Note. Podría estar simplemente jugando con nosotros. Vayamos a preguntar a otros ladrones por más información.”

“Vaya, muchacha.” Intervino el hombre. “¿No crees que eso es un poco duro para el tipo que acaba de ofrecerse a hacerte un favor?”

“Desgraciadamente, necesitamos un ladrón de primera categoría. Si quieres un trabajo barato, busca en otra parte. Vamos, Note.”

Me agarró de la manga y trató de dirigirnos hacia la puerta. Sin embargo, dudé en seguirla y arrastré los pies.

“¿Qué pasa?” Preguntó ella.

Ignorándola, me volví hacia el ladrón hablador. “¿Puedo preguntar algo?”

“¿Hmm? ¿Qué es, muchacho?”

“¿Cómo sabes que no tenemos dinero?”

“¿Eh?” Sus ojos se abrieron de par en par como si no entendiera mi pregunta.

Organicé mis pensamientos y me expliqué. “Bueno, si juzgaras sólo en base a nuestro equipo, tendrías que habernos catalogado como aventureros exitosos. Está claro que ella tiene un bastón caro, y aunque no supieras nada sobre el equipo de los magos, eres un compañero ladrón. Deberías haber sido capaz de distinguir la calidad de mi daga.”

“¿No está demasiado borracho para mirar de cerca?” Preguntó Erin. Y puede que tuviera razón. Tal vez sólo estaba pensando demasiado.

“Esa es una posibilidad.” Dije. “Pero tengo la sensación de que este hombre dedujo que estamos en números rojos basándose en nuestro comportamiento más que en nuestra apariencia. Aunque es sólo una corazonada.”

“Aun así, ¿qué importa?”

“No puedo explicarlo, pero no creo que este tipo esté tan borracho como parece.” “Oho…” El hombre me miró impresionado.

En ese momento, tomé una decisión importante. “¿Estarías dispuesto a aceptar nuestro trabajo?” Le pregunté.

“¿Hablas en serio?” Preguntó Erin a su vez, estupefacta.

Sabía que confiar el destino de un miembro del grupo a este sospechoso ladrón era una apuesta, pero no era una apuesta completamente ciega. Tenía mis razones.

“Este tipo es probablemente el ladrón más fuerte del lugar, eso es lo que me dice Búsqueda de Enemigos.”

“Ya veo…”

Después de escucharme, Erin lo entendió. Nos conocíamos desde hacía mucho tiempo.

Al menos confiaba en mí.

“Bueno, ¿no es usted un visitante interesante?” El hombre sonrió, tapando el corcho de su botella. Luego la guardó en una bolsa de objetos oculta en su persona y se dio la vuelta. “No podemos hablar aquí, así que trasladémonos.”

***

El ladrón que habíamos encontrado en el gremio parecía tener unos treinta años. Llevaba el cabello corto y vestía con ropas harapientas. Después de acceder a hablar más, nos llevó a un callejón desierto.

“Ahora que lo pienso, aún no me he presentado.” Dijo. “Soy Suiz Myran, el ladrón que buscan, creo.”

“¡¿Eh?!” A mi lado Erin jadeó, sorprendida.

Yo era quien había decidido contratar al tipo, e incluso yo estaba un poco sorprendido por esa declaración. “Dijiste que no conocías a Suiz Myran…”

“Nunca dije que no lo conociera. Sólo esquivé la pregunta y tú asumiste el resto.”

Pensando en ello, había dicho que no estaba seguro de cómo responder. Luego había empezado a hablar de lo misterioso que era Suiz Myran, lo que nos hizo suponer que no tenía ninguna relación personal.

Erin no estaba satisfecha con esto. “¿Por qué eres tan engañoso?” Le presionó.

“Engañoso, ¿eh? Supongo que es justo. Tiene que ver con las reglas que he establecido para aceptar trabajos.”

“¿Tienes reglas para aceptar trabajos?” Pregunté. Antes había mencionado que Suiz Myran era muy exigente con su trabajo, así que si este tipo era el genuino, entonces eso estaba comprobado.

“Es cierto. No acepto trabajos por dinero. No hace daño tener dinero, pero tener más no es necesariamente mejor.”

“En ese caso, ¿en qué se basa para aceptar trabajos?”

“Nada complicado. Mi regla para aceptar un trabajo es sencilla: tiene que parecerme interesante.” El autoproclamado Suiz Myran sonrió. “Sólo hago trabajos que me parecen interesantes. Sólo tenemos una vida, ¿sabes? Creo que hay que aprovecharla al máximo. Por eso soy un aventurero especializado en un estilo de batalla que atrae todo tipo de peticiones.

¿Y tú?” Me preguntó.

No había rastro del borracho de antes, sólo un aventurero solitario con la mirada fija. Este tenía que ser el verdadero Suiz Myran. No tenía ninguna prueba sólida, pero su aura desbordante me había convencido plenamente.

“Nunca he medido las cosas en términos de lo interesantes que son…” Admití.

“Ya veo. Bueno, eres libre de vivir a tu manera. Puedes establecer tus propias reglas, pero para mí, las cosas tienen que ser interesantes. Así es como he vivido los últimos treinta y tantos años, y a pesar de ello me he ganado la reputación de ser el mejor ladrón de este país. La vida sí que es imprevisible.” Dijo Suiz con un suspiro.

Erin parecía haberse quedado atrás en la conversación. “¿Qué tiene eso que ver con el motivo por el que nos engañaste?” Preguntó.

“Whoops, otra vez me fui por la tangente. Lo siento.” Suiz agitó la mano, moviendo ligeramente la cabeza un par de veces. “Es fácil decir que sólo acepto trabajos interesantes, pero encontrarlos es bastante difícil. Después de todo, me convertí en una especie de celebridad por ello. La gente acudía a mí con todo tipo de intenciones ocultas, pero las cosas de capa y espada son muy aburridas.”

“Por eso ocultas tu identidad como Suiz Myran.”

“Así es. Cuando la gente piensa que soy un aventurero de bajo rango, son reales conmigo.

Al igual que la muchacha.”

“Urk…” Erin hizo una mueca, habiendo demostrado involuntariamente su punto.

La gente naturalmente juzga los libros por sus portadas. Eso es un hecho. Si Búsqueda de Enemigos no me hubiese dado una pista, podría haber reaccionado como lo hizo Erin.

“En ese sentido, has pasado la prueba. Eres interesante, y la gente interesante suele tener solicitudes de trabajo interesantes. Así que cuenta conmigo.” Con eso, el hombre se volvió hacia mí y me preguntó: “¿Cómo te llamas, muchacho?”

“Soy Note Athlon.”

“¿Oh?” Asintió con la cabeza como si hubiera llegado a algún tipo de entendimiento superior.

“¿Pasa algo con mi nombre?” Pregunté.

“No es tu nombre. Tú eres el verdadero Note Athlon, ¿no?”

“Desde que nací he sido la única persona que sé que tiene ese nombre, así que espero que sí. ¿Es un nombre común en Aifan?”

“Te has vestido como un ladrón, y tu presencia es… No hay duda. Eres el tipo en el que estoy pensando.”

“Para que sepas, es mi primera vez en el país.” Aclaré.

Estábamos a punto de armar un gran revuelo en Aifan, pero aún no habíamos hecho nada. Y ciertamente nunca había conocido a Suiz Myran. Era imposible que supiera quién era yo.

“Eres el Note Athlon de los Arrivers, ¿no es así?” “Así es.”

Bien, entonces sí que me conocía. La sorpresa debe haber sido mostrada en mi cara. “Parece que te preguntas cómo lo sé.” Comentó Suiz.

“Tal cual. Entonces, ¿cómo lo sabes?”

“No soy un ladrón conocido por nada.” Dijo encogiéndose de hombros. “He memorizado información sobre famosos aventureros de todo el mundo. ¿No es así?”

Buscaba solidaridad, pero no podía terminar de relacionarme con él. No tenía ni idea de quién era hasta que Riece me habló de él, y aún más ignoraba a otros aventureros famosos. En general, no me interesaba nada fuera de las mazmorras. Eisha, la ladrona de primera categoría que trabajaba a las órdenes de Headhunter, también estaba al tanto de las figuras notables… Eso probablemente me convertía en un ladrón de tercera categoría. No sabía lo que hacían los ladrones normales.

“Sinceramente, no estoy bien informado en ese ámbito.” Dije con un vago movimiento de cabeza.

Aparte de eso, me intrigó saber que los Arrivers eran conocidos en el extranjero. Aunque hoy día hemos sido superados por otros grupos, en su momento fuimos los líderes de la exploración de la mazmorra de Puriff. Habíamos pasado tanto tiempo explorando la mazmorra que lo había olvidado. Los Arrivers eran uno de los grupos más fuertes de nuestro país.

“Entonces, si él es Note Athlon, ¿eso te convierte en Erin la maga, muchacha?” “¡¿También me conoces?!”

Ahora era el turno de Erin de sorprenderse. Ella era cien veces más fuerte que yo, así que di por sentado su renombre. Sin embargo, la dejó boquiabierta.

“Naturalmente.” Dijo Suiz. “La Selección del Séptimo Sabio de Izaar es uno de los mayores eventos mágicos del mundo. Todo el mundo conoce al mago que destruyó la competición y luego se alejó de todo.”

“¿Soy mundialmente famosa…?”

Su cara era a partes iguales confusión, vergüenza y felicidad. Era una expresión realmente única.

“Entonces, ¿qué tienen que pedirme dos peces gordos como ustedes?” Preguntó Suiz.

No me consideraba un pez gordo, pero sí que era hora de ir al grano. Le conté a Suiz cómo habían secuestrado a Neme en una repentina emboscada, y luego compartí la poca información que sabíamos sobre sus captores.

Cuando terminé, Suiz asintió con una mirada profunda. “Fuge, ¿eh? Otro gran golpe…” “¿Tú también lo conoces?” Pregunté.

“Me he reunido con él en persona varias veces, e incluso he aceptado uno de sus pedidos. Pero eso fue hace mucho tiempo. El propio Fuge es un pesado, pero el trabajo era interesante. Tiene buen ojo.”

El Cardenal Fuge era técnicamente nuestro enemigo. Me resultaba un poco dudoso que Suiz le felicitara delante de nosotros, pero ese era su estilo. Era constante en juzgar a la gente por lo interesante que era.

“Bueno, esa es otra historia. Claro, me quedo con tu trabajo. Si Fuge está involucrado, entonces no le hace falta nada como oponente. Te ayudaré a recuperar a tu amiga.”

“¿De verdad?”

Eso era una buena noticia. Sería tranquilizador tener al ladrón más fuerte de nuestro lado. Cada uno de los Arrivers ya tenía la fuerza de un ejército de un solo hombre. Con nuestras fuerzas combinadas, incluso si nos enfrentáramos a un país entero, recuperar a un camarada no debería ser tan difícil.

Empecé a idear un plan en mi cabeza cuando Suiz me interrumpió: “Dicho esto, seguro que han elegido a un tipo grande para pelear.”

“¿El Cardenal Fuge es alguien tan importante?” Pregunté.

“Eso es un eufemismo. Es el segundo poder más alto en esta nación después del Papa,

¿sabes? El actual santo en funciones está bajo su control, y también tiene la confianza del Papa. En otras palabras, es probable que él mismo esté en la cima en el futuro.”

“¿Cómo es él en una pelea?”

“¿Quién sabe? Dudo que sea débil, pero no debería ser rival para ustedes, los exploradores de mazmorras, en cuanto a fuerza física. En cambio, tiene a su lado a varios caballeros y aventureros fuertes a la altura de ustedes. En ese sentido, es formidable.”

En otras palabras, se parecía más a la Tyrant Princess Leyfa. Leyfa tenía sus propios puntos fuertes, pero su mayor amenaza eran los poderosos subordinados bajo su control, como el famoso sacerdote de guerra Gilbert y el Séptimo Sabio Mille. Pero mientras Leyfa era sólo la oveja negra de la familia real, el Cardenal Fuge era un poder activo aquí en Aifan. La gente bajo su mando sería lo mejor de lo mejor, como una versión mejorada de Princess’s Legion.

“Además, los asuntos relacionados con el santo se mantienen altamente confidenciales en Aifan. Estoy al tanto de casi todo, y ni siquiera yo sé mucho sobre la Autoridad del Santo.”

Huh. Había oído hablar de “el santo” por la ciudad, así que había supuesto que el bien informado Suiz sabría por qué habían secuestrado a Neme. Al parecer, era más secreto que eso.

“Por ahora, deberíamos investigar primero por qué se llevaron a la niña enana.” Sugirió. “Luego podemos trabajar en su recuperación. Por lo que parece, no está en peligro mortal inmediato.”

“Dejaré los detalles en tus manos.” Acepté.

Sinceramente, no sabíamos prácticamente nada de lo que pasaba con Neme. Podría ser posible recuperarla por la fuerza, pero eso no resolvería la verdadera raíz del problema. Además, creía que lo mejor era delegar en Suiz, que era un ladrón mucho más experimentado que yo.

“Bueno, entonces, su grupo estará en espera por el momento.” Instruyó. “Yo me encargaré de la investigación.”

“¿Seguro que no necesitas nuestra ayuda?”

“En todo caso, prefiero que no hagan nada. Está claro que no eres de por aquí a simple vista. Si andas por allí, Fuge no tardará en darse cuenta. Es más difícil investigar a la gente que tiene la guardia alta, incluso para mí. ¿Me sigues?”

Tuve que estar de acuerdo en que mantener la cabeza baja era una preocupación prioritaria. Un hombre en la posición de Fuge podría fácilmente hacer que nos arrestaran con cargos falsos. Nuestra apuesta más segura era seguir el ejemplo de Suiz y esperar nuestro momento.

“Estoy contigo.” Dije. “¿Y estás seguro de que puedes manejar esto?” “Por supuesto. ¿Quién te crees que soy?” Suiz sonrió con descaro.

Con esa garantía del ladrón más fuerte de la zona, supuse que era seguro dejarle la investigación a él.

“Entonces volveré al hotel y haré saber a los otros Arrivers lo que está pasando.” “No te pongas tan cómodo que olvides cómo luchar.”

“Entendido.”

Así ganamos un cómplice y un punto de apoyo en la Operación Recuperación de Neme.