Totsuzen Papa ni Natta (NL)

Volumen 3

Capítulo 14: La Tonta Reina Oscura Sale Adelante

“Nunca pensé que ella derrotaría a los tres.” Murmuró el Emperador Oscuro Thanatos en la sala del trono de la Ciudadela Oscura.

“¡Mis más sinceras disculpas, padre!”

“Hoo… Hah… Este es el mayor fracaso de mi vida…”

“Jee jee, ahora no puedo pensar en nada más que en gatos…”

En la sala del trono, (tres de) los Cuatro Grandes Reyes bajaron la cabeza avergonzados. Thanatos continuó: “Por cierto, ¿alguno de ustedes está herido?”

“No, señor. Ni nosotros, ni Maredia, sufrimos ninguna herida.” “Tampoco lo hizo ninguna de sus amigos.”

“Ya veo. Me alegro de oírlo.”

Thanatos parecía un poco aliviado. A pesar de su aura sombría y su voz áspera, realmente se preocupaba por sus hijos profundamente.

“Sin embargo, eso fue bastante impresionante.” Thanatos había escuchado los informes de los Cuatro Grandes Reyes. “Superó a Massura con ‘fuerza’, a Jinia con ‘tecnología’ y a Chel con ‘ingenio’. Aparte de que trajo amigos con ella, los desafió a todos de frente.”

Si hubieran sido derrotados por cualquier otro método, los Reyes habrían tenido excusas justas. Por ejemplo, si Maredia hubiera utilizado la tecnología para dominar a Massura, podría decir simplemente: “¡Habría ganado en un concurso de fuerza!” para salvar sus propios sentimientos.

Pero Maredia no hizo eso. Ella se había enfrentado a cada uno de ellos donde eran más fuertes.

“Je, je, mi orgullo está por los suelos.” Jinia se encogió de hombros, aunque no parecía tan infeliz.

“Maredia ha crecido mucho, ¿verdad?” Murmuró Thanatos. Nadie había superado la Prueba dentro de la Torre de la Llave desde hacía cientos de años. La combinación de Chel, Jinia y Massura había sido demasiado para ellos. “Pero la prueba final… La Cueva de las Pruebas será diferente.”

La Torre de la Llave era poco más que una red de seguridad para evitar que la gente desafiara la Prueba del Emperador Oscuro. La propia Prueba la encerraría en una cueva y la obligaría a enfrentarse a sí misma durante mucho tiempo. Maredia estaría bajo el asalto constante de sus propias debilidades. Nadie más en su familia había podido soportar esa experiencia. Incluso los propios Cuatro Grandes Reyes habían sido derrotados por ella, habiéndoseles roto uno de sus cuernos a cada uno, y habían desaparecido de la vista del público durante cientos de años.

“La última persona que regresó sana del Juicio del Emperador Oscuro fue Martell, ¿no es así?” Thanatos recordaba bien el nombre de su hija, que había quedado varada en el Reino Humano por orden suya. Cortar el paso a los darkin no había sido una tarea fácil para él. Para Thanatos, cerrar las puertas del Reino Humano había sido un último recurso desesperado.

“Supongo que mis hermanos también suspendieron la Prueba.” Dijo Thanatos con un fuerte suspiro.

El Emperador Oscuro había estado una vez lleno de idealismo. Le apasionaba unir los Reinos Humano y Oscuro y expandir el mundo. Esa fuerte convicción era lo que le había dado la fuerza para superar la Prueba. Ahora que era el líder del Reino Oscuro, la constante fatiga generada por el proceso burocrático había minado esa pasión.

¿Tenía Maredia un ideal similar que le permitiera superarlo?

¿Era lo suficientemente fuerte como para enfrentarse a sus propias debilidades?

Thanatos refunfuñó mientras esas preguntas lo atormentaban.

Aunque hacía mil años que no la veía, era imposible que no se preocupara por ella.

***

Nos encontramos frente a una gran cueva situada en un bosque solitario en las afueras del Reino Oscuro. La entrada de la cueva parecía tener un aura siniestra.

“Esta es la cueva del juicio final…” Tragó la Reina Oscura. La prueba final, a la que tendría que enfrentarse sola. Nadie más podía entrar con ella en la cueva.

Clowria la llamó desde atrás. “Mi Reina, tengo fe en ti. Seguramente tendrás éxito.”

“… Efectivamente.” La Reina Oscura asintió en silencio como si toda su energía anterior hubiera sido una mentira. Sin embargo, de alguna manera seguía teniendo un aspecto muy genial. Llamó una vez más. “Clowria.

“Sí, ¿Su Oscuridad?”

La Reina Oscura entregó algo a su criado. “Sostén esto por mí.”

“¿Eh? Pero esto es…” Le había entregado a Clowria un anillo. Era el recuerdo que le había dado Olivia, con una gema brillante del mismo color que el cabello de Clowria, y uno de un par. “¡¿Mi Reina?!”

“Haugh, no hagas tanto escándalo, Clowria.” “Pero tan mal presagio…”

“Volveré. Hasta entonces, quiero que guardes esto. No quiero ensuciarlo ni perderlo.”

Clowria asintió profundamente. “Muy bien. La mejor de las suertes, mi hermosa Reina Oscura.”

“Hasta luego, Srta. Reina Oscura.” “¡Tenga cuidado, Srta. Maredia!”

“¡Wajaja! No hay necesidad de que te preocupes, Olivia. Como tú maestra en las artes místicas, ¡actuaré sin problemas!” La Reina Oscura esbozó su habitual sonrisa en respuesta a la voz preocupada de Olivia.

Observamos en silencio cómo entraba en la cueva.

Habían pasado algunas horas y la Reina Oscura aún no había regresado. Empezaba a sentirse un poco inquieto. Clowria miraba fijamente a la boca de la cueva, sin haberse movido ni un centímetro. Para ayudar a Olivia a mantener el calor, había vuelto a mi forma de dragón más grande y me había acurrucado alrededor de ella.

“Hmm… Está tardando mucho, ¿no?”

“La Prueba del Emperador Oscuro puede durar varios meses, aunque en esos casos suele significar que han fracasado.”

“¡¿Varios meses?!”

“Tal es la naturaleza brutal de la Prueba. Desde que Lord Thanatos ha asumido el trono, ninguna persona ha podido superarla.”

A petición de Clowria, Olivia y yo nos le dimos un tiempo a solas. Debía de estar luchando de verdad con su ansiedad y probablemente no quería que la viéramos así.

No pude evitar preocuparme por la Reina Oscura. No me había dado cuenta antes, así que ahora empezaba a ponerme nervioso. No podía calmarme en absoluto.

“Hmm…”

El hecho de que varias presencias estuvieran acechando en el bosque cercano no les hacía ningún favor a mis nervios. ¿Quiénes son? No se acercaban a nosotros, pero tampoco se iban.

Aunque no sé si debería llamarlos… No quisiera asustarlos.

Mientras reflexionaba sobre qué hacer, Olivia se incorporó de donde había estado dormitando en mi melena.

“Papi, ¿quién es ese?” Preguntó.

Oh, ¿también te has fijado en ellos?

“Hmm… Ese es probablemente el Sr. Thanatos.”

La figura nos miraba directamente. Era difícil ver a través del espeso follaje del bosque, pero el par de cuernos que de vez en cuando vislumbraba se parecía a los suyos.

“Brilla.” Olivia apuntó con un dedo hacia él y entonó un sencillo hechizo. Una intensa luz estalló hacia delante.

“¡¿Whoa?! ¡¿Qué fue eso?! ¡¿No era eso magia de nivel elemental?! ¡Gah, mis ojos!”

Un hombre salió de detrás de un árbol. “Ah, era el Sr. Thanatos.”

“¡Guh, Dragón Anciano…!” “¡Hola, papá de Maredia!”

“… Estoy muy impresionado, niña humana… ¡pensar que podrías poner de rodillas al Emperador Oscuro Thanatos!”

Olivia tenía una mala tendencia a utilizar magia de nivel elemental con un rendimiento exceso de poder por accidente.

Lo siento, Sr. Thanatos.

“Umm, ¿por qué está aquí, Sr. Thanatos?” No parecía tener mucho interés en lo que la Reina Oscura estaba haciendo. De hecho, parecía muy reacio a dejarla tomar la Prueba en primer lugar.

“Hmm… Bueno, eso es…” Thanatos se rascó torpemente la mejilla. “Estaba preocupado por Maredia… así que… dejé todo mi trabajo.”

“… ¿Eh?” ¿Estaba preocupado? No lo había parecido por su forma de actuar antes, en absoluto. “¿De verdad?”

“¡De verdad! Para evitar que la acusen de darle un trato especial por ser de la familia, la he tratado con bastante dureza a lo largo de los años. Ser el Emperador Oscuro es un trabajo duro. No soy tan duro como parezco, ¡así que mantener la dignidad del cargo es un trabajo a tiempo completo!”

“Ya veo…”

Era todo lo contrario a mí. Normalmente me convertía en un humano para parecer menos imponente.

“Por cierto, Sr. Thanatos…”

“¿Hm? ¿Qué pasa, Dragón Anciano?”

“Me he preguntado esto durante mucho tiempo pero… ¿Por qué no le dices a la Reina Oscura lo que sientes por ella?”

“… ¿Qué?”

Sus acciones parecían similares de alguna manera a cómo Esmeralda observaba a Luca desde las sombras. Y como Rosa, que había esperado tanto de Daisy por las razones que tenían los adultos. Y también a Martell, que pensaba que como sólo era la tutora de Lena, no tenía derecho a leer los libros de la joven…

¿Por qué los adultos tenían tanta dificultad para decir a sus hijos lo que sentían? Estaban preocupados. Querían a sus hijos. Querían protegerlos de todo el mundo.

“¿Por qué no se lo dices directamente?”

“¿Hm? Bueno… Eso es algo que no debería ser necesario decir, ¿no? Después de todo, somos padre e hija.”

“¿Estás tan seguro?” “Uhh…”

Al parecer, los humanos tenían un proverbio que decía algo así como: “El corazón de los adultos es desconocido para los niños”. Pero eso es sólo porque los adultos no les dicen a sus hijos lo que sienten, ¿verdad? Hay muchas cosas que los niños no entenderán si no se les dice.

Soy un dragón y Olivia es una humana. Siempre he pensado que tenía que decirle lo mucho que la quería tan a menudo como pudiera.

“… Es vergonzoso.”

Las palabras de Thanatos me hicieron dudar de mis oídos. “¿Qué?”

“¡He dicho que es vergonzoso! Estoy haciendo todo lo posible para ser un buen Emperador Oscuro. ¡Tengo que fingir ser fuerte y decir cosas que nunca diría de otra manera!

¡Así que ser, uhh, honesto con mis palabras se siente realmente embarazoso!” “Ya veo…”

“¡¿Seguro que lo entiendes, Dragón Anciano?!” “No, en absoluto.”

“¡¿Qué?! Las chicas siempre empiezan a encontrar a sus padres molestos una vez que cumplen diez años o así, ¿no? ¿Cómo puedes decir directamente que te importan o lo importantes que son para ti una vez que eso sucede?”

“¡Pero quiero a mi Papi!” Intervino Olivia. “¡¿Q-Qué?!”

“Por cierto, este año cumplo 14 años.”

“¡¿Q-Q-Qué?!” Thanatos comenzó a gemir. No podía evitar sentir que se parecía mucho a la Reina Oscura en ese momento.

“Hmm, Sr. Thanatos.” Me acerqué a su lado. “La infancia se acaba antes de que te des cuenta.” Cuando me había detenido y mirado hacia atrás, parecía que mis días con Olivia habían pasado en un instante. “Si haces daño a tus hijos, no puedes volver atrás en el tiempo y arreglarlo. Todos los libros dicen eso.”

Por eso siempre había querido ser honesto y directo con Olivia. Comparada con el tiempo que había vivido como dragón, su infancia no fue más que un parpadeo para mí. Pero para ella fue una época absolutamente insustituible de su vida. Quería que el tiempo que pasamos juntos fuera un tesoro para ella: ¡recuerdos fantásticos e inigualables que ni siquiera perderían ante las Siete Reliquias Supremas! Eso es lo que deseaba.

Thanatos bajó la mirada. Quizá había ido demasiado lejos.

Oh, eso no es bueno.

Había leído sobre lo delicado que había que ser con cosas así en ¡No Somos Padres Amistosos, Somos Guardianes! El libro decía que comentar la forma en que otra persona criaba a sus hijos era una forma segura de empezar a tener problemas.

O-Oh no, ¡¿qué he hecho?! ¡No estaba pensando en absoluto!

Cuando empecé a ponerme nervioso, Thanatos volvió a mirarme. “… Dragón Anciano.” “¿Sí?”

“Puede que sea la primera vez que alguien me dice eso.” “¿Eh?”

“Soy el Emperador Oscuro, así que incluso cuando hago algo mal, hay pocos que se atrevan a decirme su opinión. Y cuando se trata de asuntos tan personales como éste…” Thanatos se removió inquieto. “Entonces… ¿Cómo lo digo? Gracias.” Inclinó ligeramente la cabeza.

Uf. Menos mal. Parecía que, a fin de cuentas no era un tipo tan malo, aunque seguía sin aprobar que se peleara con el Reino Humano.

Le tendí una mano del tamaño de un dragón. “¡Gah!”

“¡Oh, oh no! ¡Lo siento! ¡No estaba tratando de atacarte con mis garras ni nada por el estilo!”

“O-Oh, ¿en serio?”

“Sí, estaba pensando que podríamos darnos la mano…” Aparentemente los humanos hacían eso cuando se llevaban bien.

“Ya veo. Entonces eso nunca sucedió. Un Emperador Oscuro no puede actuar así de sorprendido.” Thanatos tomó mi garra en su mano.

Un apretón de manos. Ahora somos amigos.

“¿No tiene amigos, señor?” “¡¿Guh?!”

La simple pregunta de Olivia había asestado un golpe fatal al Emperador Oscuro. “¡¿Olivia?!”

“Ugh… niña humana… ¿Tanto me odias?” Respondió Thanatos, con la voz temblorosa.

“En absoluto.” Respondió ella, sacudiendo la cabeza. “Sólo pensé que era bueno que tú y Papi se hicieran amigos.”

Los ojos de Thanatos se abrieron de par en par. “¿Somos… amigos?” “¡¿Olivia?! No digas algo tan embarazoso…”

“Ya veo… amigos, ¿eh? Son amigos de Maredia, ¿correcto?” Olivia y yo compartimos una mirada.

Empecé: “Bueno, supongo que somos amigos… pero…” “¡Somos una familia!”

La respuesta de Olivia dejó a Thanatos sin palabras.

“… Ya… veo. Familia, ¿verdad?” “¡Sí!”

“Así que terminó con una familia propia, incluso fuera de Clowria.”

En ese momento, la tierra bajo nosotros se estremeció con un rugido. La entrada sellada de la cueva se abrió lentamente.

“¡La Prueba del Emperador Oscuro ha concluido!” Dijo Thanatos. “¿En serio?”

“¡Srta. Maredia!”

¿Estaba bien?

“Si pasó la Prueba, entonces probablemente esté bien. Si falló, entonces… pueden pasar algunos años antes de que vuelva a ser ella misma.”

“¡¿Qué?!”

“Así de difícil es la Prueba. Mientras vagas por esa cueva, te enfrentas a tu propia debilidad y fealdad. Ha habido algunos casos en los que la gente nunca regresó de ella.” Thanatos apretó los dientes. “¡Por eso no quería que Maredia lo hiciera!”

“¿Qué?”

“Viste cómo actuaba. Pensé que si lo hacía sonar tan horrible, ¡ella nunca lo haría!”

“Por eso digo que debes ser honesto con ella…” Me parecía que todos los adultos eran así.

Corrimos hacia la entrada de la cueva. Todavía no podíamos ver a la Reina Oscura.

“¡Mi Reina…!” Susurró Clowria como en una oración, aferrando en sus manos el anillo que Maredia había dejado a su cuidado.

Una sola figura vacilante salió de la cueva y cayó.

“¡Mi Reina!” Clowria corrió a su lado.

No, no sólo estaba corriendo. Saltó del suelo, cerrando la distancia entre ella y la Reina Oscura en un instante, cuando parecía que Maredia iba a caer. Me pregunté si se trataba de alguna técnica secreta de artes marciales de los darkin. Consiguió atrapar a la Reina Oscura momentos antes de que cayera al suelo.

“Ugh…” Aunque sólo habían pasado unas horas, a Maredia le parecía que llevaba meses vagando por el desierto.

“¿Eso significa…?” ¿Qué ha fallado? Observamos a la pareja en silencio, con los corazones palpitando.

Todavía en los brazos de Clowria, los ojos de la Reina Oscura se abrieron débilmente.

“¡Su Oscuridad!” Clowria estaba al borde de las lágrimas. Todos conteníamos la respiración. Era una prueba tan dura que, si uno fallaba, podía tardar años en volver a ser el de siempre. Si ella había fracasado, entonces… ¿tardaríamos años en volver a escuchar su enérgica voz?

Para mí, unos años no eran muy diferentes a unos segundos, pero ¿cómo haría sentir eso a Olivia? Ese pensamiento y otras preocupaciones similares rondaban por mi cabeza.

“… ¡Gah! ¡¡¡Pensé que iba a morir!!!”

Al instante siguiente, la familiar y alegre voz de la Reina Oscura llenó el aire.

“Haugh~. ¡¿Por qué fue tan malo?! ¡Sólo sacó a relucir mis fracasos pasados una y otra vez! ¡Nadie me dijo que iba a ser un ataque mental! En realidad, espera, tal vez sí escuché eso… ¡pero aun así! Fue lo peor.”

“M-Mi Reina…”

“¿Hm? ¿Qué pasa, Clowria?”

“¡Mi Reina! ¡¡¡Estoy tan contenta!!!” Las lágrimas rodaron por el rostro de la caballero mientras apretaba a la Reina Oscura con fuerza entre sus brazos.

“¡¿Haugh, haugh?! ¡Eso duele, Clowria!”

“Por favor… permíteme este momento… Yo creía en ti. Sabía que definitivamente estarías bien, pero todavía estaba tan preocupada…”

“Clowria…”

“Me alegro tanto de que estés bien…”

“Haugh, por supuesto que estoy bien. Prometí que volvería.”

“Sí, sé que eres una hermosa y poderosa Reina Oscura… Pero después de apoyarte durante tanto tiempo, también he visto tu lado débil y amable.” La voz de Clowria bajó de volumen, susurrando al oído de la Reina Oscura. “Estaba tan preocupada… preocupada por haberte mimado demasiado… que todas tus infinitas posibilidades se hubieran reducido por mi culpa…”

Oí la respiración de Thanatos a mi lado. Debía tener exactamente el mismo miedo. “Pero… eras mucho más fuerte de lo que había pensado.”

“¡Ja! Claro que sí, Clowria.” Se rió la Reina Oscura. “¡Esa Prueba fue pan comido! Me he pasado los últimos mil años enfrentándome a mis propias debilidades, ¿verdad? Algo así no fue ningún problema para mí.”

“¡Ja, ja, por supuesto, mi Reina!”

“… Aunque nunca volveré a hacer algo así.” La Reina Oscura se rió como siempre lo hacía. No, eso no era del todo correcto. Su sonrisa brillaba mucho más de lo que había visto antes.

“¡Srta. Maredia!”

“¡Oh, Olivia! ¡Ja, lo hice!” “Tee jee, ¡eres increíble!”

Olivia se acercó corriendo y la envolvió en un abrazo, pasando sus brazos por encima de los de Clowria.

¡Vaya, Olivia y las dos damas son tan lindas! Verlas a todas así me calentó el corazón, como comer un plato de sopa bien caliente. Después de todo, la Reina Oscura y Clowria también eran nuestra preciosa familia.

“… Ugh.”

“¿Lord Thanatos?”

Sin mediar palabra, Thanatos se puso al lado de la Reina Oscura. “Maredia.”

“Padre.”

“He oído que has encontrado una familia para ti en el Reino Humano.” “¿Haugh?”

“Bueno, eh… siempre he pensado en ti como mi preciosa hija. Pero estaba tan obsesionado con mi trabajo como Emperador Oscuro… que acabé haciéndote cosas terribles. Te obligué a liderar la invasión, y luego te abandoné en el Reino Humano…”

La Reina Oscura le devolvió la mirada en silencio.

“No voy a pedirte perdón.” Consiguió escurrir Thanatos. “Pero… me equivoqué. Lo siento.”

“¿Eh?”

Thanatos hizo una profunda reverencia. “En realidad… Siempre he querido disculparme contigo. Por elegir la profecía por encima de tus sentimientos, y todo tipo de cosas.”

“Padre…”

“No estoy pidiendo tu perdón.” Continuó. “Que decidas perdonarme depende de ti. Siempre te he amado a mi manera, pero no fui capaz de expresarlo correctamente, y acabé actuando exactamente al revés de lo que sentía. Así que lo siento. De verdad.” Su discurso fue directo y al grano, sin dar la más mínima impresión de que era la persona más importante del Reino Oscuro en absoluto. “Aunque supongo que incluso esta disculpa es sólo para hacerme sentir mejor.”

“Haugh, bueno, si quieres disculparte, siéntete libre.”

“Sinceramente, no creí que fueras capaz de pasar la Prueba del Emperador Oscuro.” Thanatos puso una mano en la cabeza de su hija.

“Padre…”

“El cargo de Emperador es tuyo ahora, Maredia.” Thanatos tomó el anillo de su dedo, que llevaba una de las Siete Reliquias Supremas, y se lo tendió. “Esto también es tuyo. Este anillo es la prueba de que eres apta para gobernar el Reino Oscuro, así que…”

“¿Haugh? No, gracias.” La Reina Oscura le interrumpió. “No voy a ser el Emperador Oscuro ahora ni nada parecido.”

“… ¿Qué?”

“¿Eh?” Todos nosotros soltamos.

“Todo lo que quería era la gema de ese anillo, el Escudo Tierra Vasta.” “¡¿Quééééééé?!”

La Reina Oscura tomo el anillo de su padre y se lo puso en el dedo. Al instante, una luz mágica envolvió su cuerpo. Podía decir que no había ninguna duda al respecto; era definitivamente una de las Siete Reliquias Supremas. Podía sentir una energía mágica increíblemente poderosa y pura que salía de él. La Reina Oscura mostró con orgullo el anillo en su dedo corazón.

“¡¿M-M-M-Maredia?!”

“Lo dije desde el principio, ¿no? Sólo quería tomar prestado el anillo, y una vez que el recado de Olivia estuviera completo, lo devolvería. Así que buena suerte con su trabajo como Emperador, padre~.”

“¡¿Q-Q-Qué?!”

“No tengo intenciones de dejar el Reino Humano por mucho tiempo.” “¿En serio?”

“En efecto.” La Reina Oscura esbozó una sonrisa. “¡Tengo dos lindas hermanitas que cuidar! Y… muchos amigos. Las niñas humanas, una niña darkin y esa audaz niña dragónkin… todos son mis amigos. ¡Me gusta mucho el reino de los humanos!”

“Ya veo. Así que has hecho amigos allí.” Thanatos sonrió, con el comienzo de las lágrimas en sus ojos.

“Por cierto, ¡no te perdono en absoluto!” “¡¿Guh?!”

“¡No te hagas el sorprendido! No quiero que pienses que te perdonaría por herirme así tan fácilmente.”

Tragué saliva. Supongo que tenía razón. No es que fuera a perdonar nada de lo que hizo sólo porque fuera su padre. Todavía había cosas que no podía perdonar. Y algunas cosas tardarían en curarse. Eso era obvio, pero lo había olvidado de alguna manera.

“Aunque si realmente quieres que lo haga, supongo que puedo venir a visitarte de vez en cuando.”

Thanatos asintió inmediatamente. “¡Por favor, vuelve cuando quieras! Yo… ¡tu padre siempre estará esperando!”

“Je, je, je…” Al escuchar la respuesta de su padre, la Reina Oscura esbozó otra sonrisa. “En ese caso, hay trabajo que debe hacerse.”

“¿Eh?”

“Después de todo, no soy la única que desea visitar su antiguo hogar.” Dijo con un guiño.

***

El Bosque Chirin fue una vez un lugar que conectaba el Reino Humano y el Reino Oscuro.

La pluma de Lena se cernía sobre la página mientras levantaba la vista. Un viento desconocido soplaba en el bosque.

“…”

“¿Twee?” Las sílfides, los pequeños espíritus que controlaban el viento allí, también parecían confundidas.

Martell dio un paso fuera de su cabaña. “Esta sensación… no puede ser.”

Un pequeño sonido llenó el aire mientras el viento soplaba en el bosque. Antes de que se diera cuenta, las campanas plateadas que colgaban de los árboles como frutas habían empezado a sonar. Era casi como si el tintineo de innumerables campanas diminutas estuviera gritando el nombre del propio bosque.

Era como una escena de un cuento de hadas.

“… ¡La puerta del Reino Oscuro se está abriendo!” El coro de campanas de plata fue una vez la señal de que la puerta al Reino Oscuro se estaba abriendo. Por primera vez en más de mil años, el Bosque Chirin —antes conocido como Bosque de Ramas Plateadas— alzó su voz en forma de canción.

“¡Ja, parece que Maredia lo hizo!” Martell esbozó una sonrisa de satisfacción.

***

“… Las puertas del Reino Humano se están abriendo.” “¡Hoo! ¡Ja! Así que Maredia tuvo éxito.”

“Jee jee, nunca habría pensado que ella, de todas las personas, se convertiría en el Emperador Oscuro.”

En Abika, la ciudad más grande del reino, estaban (tres de) los Cuatro Grandes Reyes del Reino Oscuro. Los informes de los resultados de la Prueba se extendieron por todo el Reino Oscuro. Habían acudido allí para ayudar a mantener bajo control a las multitudes, presas del pánico y la excitación, tras el anuncio de un nuevo Emperador.

Después de que Maredia superara sus desafíos, creyeron que había una posibilidad entre un millón de que pudiera pasar la Prueba. Si hubieran creído realmente que iba a fracasar, no habrían salido y seguirían encerrados en la Ciudadela Oscura.

“Ella es realmente la más fuerte de nosotros cuatro, ¿no es así?” Murmuró Chel. Nunca se había imaginado que ella traería compañeros así a la Prueba. No sólo su criada, sino también una niña humana y un Dragón Anciano.

“Jee jee, eso parece. Supongo que tenemos que disculparnos con ella.” “¡Hoo! ¡Hah! ¡Esa es una buena idea! ¡Sin embargo!”

Todos los hermanos compartieron una mirada. Todos pensaban exactamente lo mismo.

“¡Ir al Reino de los Humanos es demasiada molestia!”

Al final, todos los Darkin tienden a estar encerrados.

***

Utilizando el poder del Anillo Tierra Vasta, las puertas entre el Reino Humano y el Reino Oscuro se abrieron de nuevo. La Reina Oscura sonrió satisfecha.

“¡Pero! ¡Ahora nuestro maná se filtrará al Reino Humano!” Protestó su padre. “Haugh. Me parece que ahora el Reino Oscuro tiene mucha energía mágica de sobra.” “Pero no importa cuánto hayamos acumulado, nunca será suficiente…”

“Padre.” Dijo la Reina Oscura, volviéndose hacia él. “En lugar de cerrar las puertas y esconderse, creo que es mejor interactuar con el Reino Humano directamente.”

“… Pero…”

“Ahora tengo dos hermanas humanas propias. Un día, un dragón anciano salió de la nada y visitó mi castillo. Desde entonces, he hecho todo tipo de amigos… y he acabado haciendo muchas cosas sólo porque quería hacerlas. He gastado bromas a las otras chicas, he leído libros ilustrados, todo tipo de cosas. Creo que… probablemente sea divertido.”

Thanatos se quedó callado.

“El mundo exterior… No es tan malo como pensé al principio.”

“¡Mi Reina!” Clowria lloró ante las palabras de Maredia. Siempre había estado preocupada por la Reina Oscura. Al escuchar a la propia Reina Oscura decir que el mundo exterior ‘no era tan malo’, no era de extrañar que llorara.

“¡Haugh, Clowria!” “… ¿Si, mi Reina?”

Tras utilizar el poder del anillo, la Reina Oscura se acercó a su criada y le tendió la mano izquierda. El Escudo Tierra Vasta brillaba en su dedo.

“Umm… Me falta un anillo, ¿no?”

Clowria jadeó ante las palabras de la Reina Oscura. “Mi hermosa Reina Oscura.” Como un caballero de un cuento de hadas, Clowria se arrodilló ante ella.

Luego extendió la mano y le ofreció otro anillo —el recuerdo de Olivia, que brillaba con una piedra del mismo color que el cabello de Clowria—, deslizándolo en el dedo de la Reina Oscura.

“Te juro mi lealtad para siempre, como una poderosa, amable… y como la mejor Reina Oscura de todos los reinos.”

“Perfecto.” Dos anillos brillaban ahora en su mano izquierda. “¡Srta. Maredia!”

“¡Olivia!”

La Reina Oscura mostró los anillos en su mano con una sonrisa. Pensó con orgullo para sí misma, ¡lo hice! He conseguido la Reliquia para ti.

La aventura veraniega de Olivia fue un éxito rotundo.

Las tres bailaron de alegría. Las observé con una sonrisa propia, pero… “Así que trajo a una niña humana y a un dragón al Reino Oscuro…”

Me giré al oír el murmullo de Thanatos. Cuando nuestros ojos se encontraron, me devolvió la sonrisa.

“La chica de la profecía, de la que se dice que unirá los Reinos Oscuro y Humano… Tal vez, después de todo, ella tenga éxito en hacer eso.”

Dos mundos se unirían como uno solo. Hace mil años, los darkin intentaron conseguirlo luchando. Pero esa no era la única manera, ¿verdad? Volví a mirar a las tres chicas que seguían bailando alegremente. Una niña humana, una Reina Oscura y una caballero darkin. Aunque sus posiciones y edades eran totalmente diferentes, se llevaban como verdaderas hermanas.

Espero que puedan seguir llevándose así de bien entre ellas para siempre.