Potion Danomi De Ikinobimasu (NL)

Volumen 3

Capitulo 23: El Oficial

Parte 1

“¿Es este el lugar?”

“¡Sí, señor!”

Estaba disfrutando de mi tiempo con Layette ya que no había clientes cerca, cuando escuché una voz enérgica desde fuera de la tienda. La mayoría de los niños se asustaban y huían cuando veían mi cara, ¡así que habían pasado más de diez años desde que había podido jugar con uno! ¿Cuál era el daño en pasar un poco de tiempo…? Oh, supongo que había cosas más importantes a la mano, ¿eh?

Tenía un mal presentimiento sobre esto… Y mi “malos

presentimientos” tenían la desafortunada tendencia a tener razón.

¿Qué fue eso? ¿No es un simple “presentimiento” a este punto? Eh,

tal vez por eso solían tener razón.

“Layette, ve a esconderte arriba.”

“¡Ok!”

Sin dudarlo, Layette subió corriendo las escaleras tal como se le pidió. No es que estuviera siendo fría con ella. Le había enseñado una y otra vez que era importante seguir mis órdenes en estas situaciones, porque el menor retraso podía ponerme en desventaja. En otras palabras, obedecer mis órdenes lo antes posible era la forma en que Layette me mostraba su lealtad.

Cling…

“¿Es esta la tienda conocida como el ‘Atelier de Layette’?”

“Sí, lo es. ¿Puedo ayudarle?”

El hombre que tocó el timbre al entrar era obviamente personal militar; y no sólo un soldado de infantería común, sino alguien de rango superior. Había algunos militares más detrás de él… Más jóvenes en apariencia, y claramente de un rango más bajo que él.

“¿Está el dueño aquí?”

“Sí, esa sería yo.”

“¿Qué…? Oh, no, eso no es lo que quise decir. No estoy preguntando por la persona a cargo en este momento, sino por el propietario principal del negocio.”

“Como dije, esa sería yo. Firmar el contrato de arrendamiento, pagar el alquiler, comprar los bienes, venderlos y ser acosada por militares es mi responsabilidad.”

“¿Qu…?”

No estaba segura de sí su segunda reacción de sorpresa era por el hecho dequeyo erala dueñao porqueunaniñale estaba respondiendo.

“¿Entonces usted es Layette?”

“¿No…?”

“““¿Eh?””” Todos tenían expresiones en blanco en sus rostros.

¡No lo nombré el “Atelier de Layette” en lugar de “Atelier de

Kaoru” sólo por este tipo de reacción! Creo…

“No lo piense demasiado… ¡Es sólo un nombre!”

Tenía la sensación de que exigiría vera Layette si le decía que había

alguien más con ese nombre, así que rápidamente inventé una excusa.

“Oh, ya veo… Entonces déjeme preguntarle algo. ¿Puede contarme en detalle sobre la medicina que se vende aquí y que cura la enfermedad de los soldados?”

¿Eh? ¿Eso era sobre lo que quería preguntar? ¿Por qué un oficial

militar preguntaba acerca de una vieja medicina para el pie de atleta?

“Bueno, no hay mucho que decir, es sólo medicina… El proveedor y los métodos de fabricación son secretos comerciales. Si me va a decir que se los de, tendré que pedirle información militar clasificada a cambio.”

“¡¿Qué?! Bueno… supongo que tiene razón.”

Pensé que se enojaría conmigo, pero respondió a mi frialdad con una sonrisa amarga. ¿Quizás era una persona sorprendentemente razonable?

“Entonces déjeme cambiar la pregunta. ¿Es posible comprar este

medicamento al por mayor?”

Si estaba aquí por negocios, esa era otra historia.

Sonrisa de atención al cliente, sonrisa de atención al cliente…

¿Por qué todos se están alejando? ¡Eso me hace enojar!

… Bueno, ya estoy acostumbrada, habiendo vivido con este rostro

durante veintisiete años.

“En efecto, aunque mi proveedor tiene un límite. Ah, y el ejército no podrá replicarlo. Incluso si aprenden el método de fabricación, ciertamente no estamos obteniendo ganancias excesivas con estos precios. Si reúnen los ingredientes, los separan, los hierven, los refinan, los mezclan y luego los vuelven a hervir todos juntos en el ejército, probablemente será mucho más costoso que comprar las existencias aquí. Aunque dudo que supieran cómo encontrar las hierbas necesarias para hacerlo en primer lugar. Necesitarían saber no sólo la región, sino qué árboles verificar, o si están en la orilla del río, en el bosque, en la cima de una montaña o en el suelo arenoso…”

“Sospechaba todo eso. Era muy dudoso que obtuviera muchas ganancias vendiéndolas a tres monedas pequeñas de plata la botella. De hecho, está en números rojos con sólo el precio de las botellas… Aunque estoy seguro de que las baratas son para ganar publicidad y sirven como cebo para que compren las medicinas más caras…”

¡Wow impresionante! ¡Él leyó la excusa que había preparado en caso de que alguien preguntara sobre esto! Bueno, supuse que cualquiera podría darse cuenta de eso, a menos que fuera un idiota.

Había considerado subir los precios y ofrecer reembolsos parciales por comerciar con las botellas, pero decidí no hacerlo. ¡No quería recibir de vuelta las botellas que tocaron con las mismas manos frotando todo el pie de atleta! ¡¿Quién en su sano juicio lo haría?! Les estaba ayudando con la opción más barata al proporcionar una medida de alivio para aquellos que de todos modos no tenían mucho dinero.

¿Hm? ¿Cómo les estaba ayudando cuando les estaría quitando dinero por el resto de sus vidas? Porque les estaría motivando a trabajar para podercomprar más medicinas. ¡No seas más nunca un NEET! Les estaba ayudando mucho dándoles ese empujón extra. Era un acto de caridad certificado.

También ayudaría a mi situación financiera al mismo tiempo, por

lo que la medida de alivio iba en ambos sentidos.

“Aunque incluso tres monedas de plata no son caras de ninguna manera. La botella con un precio de tres monedas de plata recuperaría las pérdidas del nivel más bajo, luego el cliente se abriría camino hasta la botella con un precio de una pequeña moneda de oro, donde debe estar obteniendo sus ganancias…”

¡Qué análisis tan astuto! ¡Tenía mucho sentido que era fuera un

oficial!

… Lástima que estaba completamente equivocado. Aunque deduje que nadie podría crear botellas y medicinas ilimitadas de forma gratuita, no podía culparlo.

“Ahaha, bueno… Oh, eso me recuerda. Si se está produciendo demasiado medicamento, las plantas necesarias para producir el medicamento pueden desaparecer en esta región. Eso puede obligarme a mudarme en busca de un nuevo lugar para cosechar los ingredientes…”

El oficial frunció el ceño visiblemente. ¿Cuánto planeaba

comprar…?

En cualquier caso, eso debería impedirle realizar pedidos en cantidades irrazonables o preguntar sobre el método de fabricación. Menos mal que se me habían ocurrido excusas de antemano por si acaso…

“Entonces, ¿cuántas botellas puede proporcionar al día?”

“¿Qué? ¿Por día?”

Eso sería bastante inconveniente. Hacer la medicina no era un problema, pero ya les había dicho a los otros clientes que las compras estaban limitadas a dos por persona, y sería molesto lidiar con una multitud de soldados que vinieran a mi tienda todos los días.

¿Qué hacer…?

Oh, primero tenía algo que preguntar.

“Um, ¿son ustedes los oficiales militares del ejército real?”

Tenía que confirmarquiénes eran estos soldados.Ojalá fueran parte

del equipo médico del ejército real. Si no…

“Ah, me disculpo. Había estado haciendo tantas preguntas sin siquiera presentarme. Soy el comandante del segundo batallón del ejército real, el teniente coronel Vonsas.Estos dos son mis cabos, Tyde

y Mericus.”

“¿Qué…?”

Estaba horrorizada. No sólo no formaba parte de la unidad médica,

a juzgar por su título, sino que…

“U-Um, ¿cuántos batallones tiene el ejército real? ¿Y cuántos

oficiales hay…?”

Si le hubiera hecho estas preguntas al personal militar en la Tierra, es posible que me hubieran interrogado bajo sospecha de ser un espía. Pero en este mundo, la cantidad de soldados no era algo que realmente pudieras ocultar, y era algo para alardear con orgullo en lugar de mantenerlo en secreto. Los ciudadanos del reino y los países vecinos estaban seguros de que ya conocían esta información, así que dudaba que fuera un problema ahora.

“Ah, el ejército real consta de diez batallones, con un total de 10.000 hombres. Aunque un poco menos de la mitad de ellos no son personal de combate, sino tropas de apoyo, como soldados de transporte y oficiales administrativos.”

Como era de esperar, el teniente coronel parecía indiferente al describir el tamaño del ejército. Pareció darse cuenta de que yo no sabía casi nada sobre el ejército y también me dio muchos detalles. Tal vez pensó que esto sería un conocimiento necesario para hacer negocios en la capital real y me estaba informando de todo eso por amabilidad, o tal vez se dio cuenta de por qué estaba haciendo la

pregunta…

Probablemente era lo último.Debía habersospechado loque estaría

preguntando a continuación.

El teniente coronel explicó que, en el ejército real, los escuadrones estaban formados por nueve soldados, que era el tipo de unidad más pequeña. Cuarenta hombres compuestos por cuatro escuadrones, un líder de pelotón y tres cabos auxiliares formaban un pelotón. Cuatro pelotones componían una compañía, y 640 hombres consistentes en cuatro compañías más personal de la división de mando y personal de apoyo conformaban un batallón. Había diez batallones, del primero al décimo. También agregó que existían otras divisiones como transporte, capacitación, instrucción y otras ramas subsidiarias y de apoyo. Con todas esas personas combinadas, había alrededor de 10.000 en total. Había diez veces más de ciudadanos que tenían que cuidar.

Aunque esta no era una capital cualquiera, sino la capital real en sí. Llegaban bienes, dinero y personal de todo el reino.El rey tenía control directo sobre el área y el ejército aquí, y el ejército real tenía que proteger más que sólo la capital real. Las tropas encabezadas por los señores de cada región eran únicas en una variedad de formas. La explicación del teniente coronel había confirmado mis temores.

“¿Entonces esto significa que el ejército real tiene otros nueve batallones, con nueve comandantes de batallón, que tienen el mismo rango que usted? ¿Habría alguna posibilidad de que todos vinieran a

esta tienda a pedir el remedio para la enfermedad del soldado?”

“Absolutamente. Dudo que vengan en persona, pero puedo decir

con certeza que enviarían a sus subordinados.”

“¡¿Quéééé?!”

¡¿Qué tonterías está diciendo con una cara tan seria?!

“¿S-Significa esto que voy a tener esta conversación nueve veces más? ¿Con personas que insistirán en que yo dé prioridad a enviarles medicamentos?”

“Oh, estoy seguro de eso. Podemos ser parte del mismo ejército, pero cada batallón es un rival entre sí. Todos querríamos asegurarnos cualquier buen producto para nosotros. Y esto no se limitaría a las unidades de batallón; Supongo que las compañías y los pelotones también vendrán individualmente.”

“¡¿Quéééé?!”

Esto era malo…

Este teniente coronel parecía bastante respetable, pero sospechaba que había gente en el ejército que era agresiva y creía que todos los ciudadanos deberían obedecerlos automáticamente. Si personas así comenzaran a exigir que les suministre todos mis medicamentos, sería difícil lidiar con eso. Sin mencionar que mi tienda estaría saturada de soldados si incluso una pequeña unidad de ellos decidiera visitarla de inmediato. No quería involucrarme en todo esto, y definitivamente no

quería lidiar con discusiones entre diferentes unidades.

Una guerra civil dentro del ejército real. ¿La causa? Medicina para el pie de atleta. La chica que fue la raíz de todo esto es ejecutada como espía de otro reino.

¡Arrrgh!

Comencé a sentir pánico ante el horrible pensamiento mientras el

teniente coronel me hablaba.

“No se preocupe. Es por eso que yo, un comandante de batallón, me tomé mi tiempo para venir aquí en persona. Es probable que las otras unidades envíen a un cabo o alguien de rango similar, para que pueda decirle que está haciendo entregas bajo las órdenes del teniente coronel Vonsas, el comandante del segundo batallón, y dirigirlos hacia mí. Dudo que alguien esté dispuesto a desafiarle después de eso. Además, no planeo acumularlo todo para mí. Lo distribuiré a todos los demás por el precio base. Sólo pediría a los otros batallones pequeños favores en otros campos.”

… ¡Qué sucio! ¡Así que debe haber sido así como ascendió en el

ejército!

Pero algo pasó por mi mente…

“Um, ¿qué hay de si alguien de otra unidad entra como un cliente

normal en lugar de un representante del ejército?”

“¿Qué?”

“¿Qué?”

“¡¿Quéééé?!”

Parecía que el teniente coronel no era tan impresionante después de

todo…

Después de discutirlo más con él, terminé decidiendo negarle a cualquier cliente que intentara comprar al mayor como representante de su unidad, y cualquiera que viniera a comprar como individuo estaría limitado a dos botellas. Estuvo de acuerdo en publicar un aviso oficial indicando que los soldados sólo podían comprar la medicina para la enfermedad del soldado a través de canales militares. De lo contrario, no podría lidiar con la larga fila de soldados que seguramente se formaría frente a mi tienda todos los días. Puede que hubiese quienes compraran a escondidas algunos vestidos de civil, pero no me importaba que fueran sólo unos pocos. Siempre que no obstruyan mi negocio, no serán un problema demasiado grande.

Si hacían algo así, sus colegas, seniors y superiores se enterarían y los castigarían, así que dudaba que muchos lo intentaran. El teniente coronel dijo que podían obtener medicamentos y tratamientos de la unidad médica militar de forma gratuita, por lo que no debería haber demasiadas personas dispuestas a pasar por todo eso sólo para gastar dinero de su bolsillo. No sabía cuán confiables eran las predicciones de un “oficial de campo de élite nacido en la nobleza,” pero todo lo que podía hacer era rezar para que tuviera razón.

Además, haría entregas para los pedidos del segundo batallón una vez a la semana. Era un poco difícil vender al mayor en mi tienda después de decir explícitamente que éramos minoristas y no mayoristas, ya que tenía que considerar cómo me haría lucir. Además, a veces quería salir de casa en lugar de estar encerrada en mi tienda todo el tiempo.

Aunque en secreto, estaba pensando en cómo el cuartel general militar probablemente tendría muchos soldados jóvenes de élite, y conocer a un grupo de personas podría ser beneficioso para encontrar a alguien con quien casarse. También sería útil para mi seguridad si los soldados memorizaran mi rostro y decidieran que quieren protegerme.

Muy útil de hecho…

Si me pasara algo, se cortaría el suministro de sus medicamentos. Probablemente me habrían ignorado si algún malhechor me estuviera molestando en las calles, pero definitivamente me ayudarían si me conocieran.

Espera, ¿significa esto que los 10.000 hombres del ejército real serían mis guardaespaldas personales? ¡Esto es demasiado asombroso! ¡Roland y los demás ya no son necesarios! ¡Muahaha!

“¡Entonces contaré con usted!”

Con eso, el teniente coronel y sus hombres se marcharon.

Inmediatamente después, entraron Roland y Francette.

“¿Hubo problemas?”

Parecía que Roland me había estado vigilando desde fuera todo el

tiempo. Probablemente iba a cargar si me pasaba algo.

Lamento haber pensado que ya no eras necesario.

“Está bien, sólo una charla de negocios. Gracias.”

Al menos le daría algunas palabras de agradecimiento. Después de todo, no sabía cuánto tiempo había estado ahí fuera. Francette incluso podría haber estado ahí fuera toda la noche… Es broma, ahaha…

Espera un minuto… ¿Francette? ¿Qué pasa con esa cara de aspecto somnoliento y ese bostezo de hace un momento? ¡¿Y esas bolsas debajo de tus ojos?!

¡Espera, espera, espera, espera! V-Vamos a bebe un poco de esto,

Fran. No, no, ¡cállate y bébetelo!

Por la tarde…

Un carruaje pareció detenerse frente a la tienda. Luego entraron los

clientes.

“… Oye, ¿es allí donde se vende esa medicina para la enfermedad

del soldado?”

Un matrimonio que obviamente era noble y parecía tener unos

treinta años, y sus dos asistentes entraron.

“Sí, ¿puedo ayudarles…?”

Perdí la oportunidad de que Layette huyera escaleras arriba. Sin otra opción, le di unos golpecitos en la cabeza como señal para que se quedara callada y se perdiera en el fondo.

“Muy bien, deme todo lo que tenga disponible. También enviará todo lo que tenga en stock a partir de ahora. El precio será de un 30% de descuento.”

“Me rehúso.”

“Bien. Entonces primero, deme… ¿H-Huh?”

Los ojos del cliente se agrandaron como si no hubiera esperado que un simple plebeyo se atreviera a negar su pedido. Probablemente estaba planeando monopolizar mi medicina y venderla al ejército para obtener ganancias o usarla para algún tipo de ventaja política… Pero espera, ¿por qué una maldita medicina para el pie de atleta sería tan importante? ¿Estábamos hablando de materiales estratégicos para la guerra?

En cualquier caso, de ninguna manera iba a dejar que quitara el 30% así como así. Claro, no tenía ningún costo de producción, pero eso era sólo una coincidencia. Ahora que me consideraba una comerciante, no iba a dejar que me pisoteara así. El regateo era parte de las transacciones comerciales, por lo que estaba dispuesta a complacer, aunque si llegaríamos a un acuerdo era una historia diferente.

Intentar forzar un trato estaba fuera de discusión. Completamente

inaceptable.

Le pondría fin a eso muy rápido. Difícilmente podría llamarme comerciante si alguna vez aceptara tal cosa. Sólo pasé alrededor de medio año trabajando en mi vida anterior, pero tenía un alto sentido de orgullo por mi trabajo y camaradería con mis colegas.

“¡C-Cómo te atreves! Crees que puedes salirte con la tuya

oponiéndote…”

“El teniente coronel Vonsas, del segundo batallón del ejército real, se encarga de las compras al mayor de la medicina para la enfermedad del soldado. Por favor, dirija cualquier consulta de este tipo a él. También me gustaría agregar que tenemos un acuerdo para que cualquier acción que obstaculice la compra de medicamentos por parte del ejército se informará al teniente coronel, y él se ocupará de esos problemas…”

“¡¿Q-Qué?! ¿Te refieres al teniente coronel Nevas von Vonsas,

tercer hijo del conde Vonsas…?”

“No conozco su nombre completo, pero sí, es el teniente coronel

Vonsas, el líder del segundo batallón.”

Los nobles se quedaron en silencio durante algún tiempo, luego se

dieron la vuelta para irse. Pero rápidamente los llamé.

“Disculpe, señora, ¿le gustaría un producto para limpieza del

cabello o remedios faciales mientras está aquí?”

“¿Qué?”

No estaba interesada en hacer demasiados enemigos, así que realmente no quería que se fueran de mal humor. Además, quería aprovechar la oportunidad para comenzar a vender los cosméticos que estaban en el estante. Estaba bastante segura de que una vez que las personas comenzaran a comprar y usar dichos productos, servirían como anuncios del mundo real y generarían aún más ventas.

“Este medicamento elimina la suciedad de su cabello y lo deja suave como la seda, ¡y este hace que su piel sea suave e hidratada! ¡Con estos, puedes recuperar la juventud de tu piel!”

Le di a la esposa un argumento de venta que tal vez escuches de un vendedor de cosméticos en alguna tienda departamental. Tenía más o menos esa edad en la que las mujeres empezaban a preocuparse por el deterioro de su piel.

Ella hizo una pausa. “Me pregunto si estás diciendo la verdad… ¿Entiendes lo que sucedería si engañas a un noble? No te perdonarían sólo por ser una niña.”

Parecía demasiado bueno para ser verdad… Una pequeña tienda

atendida por una niña no podría tener una medicina tan milagrosa…

Incluso con estos pensamientos en mente, parecía que no podía resistir mis tentadoras palabras. El hecho de que su noble esposo se tomara su tiempo para visitar mi tienda probablemente ayudó a respaldar la idea de que también vendía medicinas valiosas.

Dejé a Layette detrás del mostrador y caminé hasta el piso de la

tienda. “Por favor, mire mi cabello.”

La esposa miró mi cabeza con expresión dudosa, pasó sus dedos

por mi cabello, luego se acercó para olerlo.

“H-Hey, ¿qué estás…?”

Haciendo caso omiso de las palabras de su marido, me acarició la cara, la frotó y luego la apretó entre sus dedos. Sin embargo, mi piel suave no se debía a los productos para el cuidado de la piel; era por mi juventud, estar en el cuerpo de una quinceañera. Ni siquiera usaba ningún productopara el cuidado de la piel en primer lugar. Ese material no era realmente necesario hasta los dieciocho años más o menos.

Pero no había necesidad de decirle esas cosas, así que me quedé callada. No fue mi culpa que ella hiciera una suposición incorrecta, y mis productos para el cuidado de la piel fueron efectivos, entonces, ¿cuál era el daño?

“Los compraré. Tráeme un juego completo.”

“O-Oye, ¿no deberíamos…?”

“Calamus, págale.”

“¡Sí, señora!”

“Oye…”

La transacción se hizo con el marido completamente ignorado…

Champú, acondicionador, loción para la piel, suero, loción humectante y algo de crema. Como eran para un noble, todos los productos venían en recipientes de cristal artístico. Incluso incluí una pequeña botella de perfume gratis como regalo.

“Serán seis pequeñas monedas de oro. Las instrucciones sobre cómo usarlas están escritas aquí. La cantidad y el orden de uso se enumeran allí, así que asegúrese de seguirlas.”

“Muy bien. Ciertamente espero que sean efectivos, por el bien de

tu vida…”

¡Vaya, qué anciana más aterradora!

Pero había logrado sembrar las semillas para vender más productos para el cuidado de la piel. ¡Todo lo que tenía que hacer ahora era esperar a que se difundiera de boca en boca!

Los nobles se fueron sin que yo ni siquiera supiera sus nombres, y pensé que era hora de cerrar la tienda por el día. Pero justo cuando estaba a punto de hacerlo, entraron dos soldados. Parecían ser un oficial comisionado y un cabo.

“Me gustaría comprar la medicina para la enfermedad del soldado

al mayor…”

Oh, aquí vamos de nuevo…

Supongo que tendría que lidiar con este tipo de personas hasta que

el teniente coronel pudiera llegar a todos ellos…

Actuó rápido y fue muy listo, a fin de cuentas, alguien de su rango vino aquí en persona, y también tan pronto… Pero terminó ahorrándome una gran cantidad de problemas, así que supongo que estaba agradecida. Aunque lo estaba haciendo por sus propios méritos y no por la bondad de su corazón. Supongo que es lo que llamarías una relación de beneficio mutuo.

Lástima que estos tipos se tomaron el tiempo de venir aquí, cuando todo lo que les daré será era el discurso de rechazo. Supongo que al menos podría venderle dos botellas a cada uno. El aviso del teniente coronel probablemente aún no les ha llegado.

Ahora puedo esperar que se vendan más champús y cosméticos y

continuar con el negocio…

En ese momento, no me había dado cuenta…

No había forma de que una mujer noble fuera a difundir el secreto de cómo preservar su belleza, y que este era claramente el tipo de secreto que intentaría guardar para sí misma. Los champús y los productos cosméticos no parecían venderse en absoluto, y me tomó bastante tiempo darme cuenta de esto.

¡Maldita sea!

***

“Oiga, miladi, ¿quiere que le guarde las compras?”

Un niño que parecía tener unos siete u ocho años se me acercó cuando volvía de comprar verduras en el mercado. Podía ser de una etnia occidental, pero, aun así, era más pequeño que yo, considerando su edad.

Era cierto que era un poco difícil llevar la enorme cantidad de comida como rábanos y coles, pero esta no era la primera vez que lo hacía y no era algo que no pudiera manejar. Usar la Caja de Artículos lo hubiera hecho muy fácil, pero no tenía la intención de abusar de ella. También me preocupaba que me vieran usándola.

La primera vez que fui de compras al mercado, Francette apareció de la nada y se ofreció a llevarme las compras, así que la ahuyenté en un estado de nerviosismo. Una niña pequeña que obligara a una caballero a cargar sus cosas habría destacado como un pulgar dolorido. Esa habría sido una forma segura de atraer atención no deseada.

De todos modos… este chico seguramente no estaba haciendo esto

por benevolencia.

“¡Lo haré por sólo dos monedas de bronce!”

Sí, eso pensaba…

Dos monedas de bronce serían unos veinte yenes. Con los precios aquí, hacerlo tres o cuatro veces ganaría lo suficiente para comprar un rábano. Eso sería suficiente comida para alimentar a una familia de cuatro, lo que significa que cuatro personas podrían vivir un día más.

“¡Muy bien, contratado!”

“¡Gracias!”

Hablé con el chico sobre varias cosas de camino a mi tienda.Hablar con personas de su estatus era bastante interesante y ofrecía información valiosa. Ellos tendían a decir las cosas como eran sin preocuparse innecesariamente por la propiedad y cosas por el estilo.

“… Es por eso que realmente no podemos comer hasta que estamos satisfechos la mayor parte del tiempo, ¡así que también estamos trabajando para ganar dinero!”

Nuestra conversación había pasado a la vida personal del chico. Según él, vivía en un orfanato. No se estaba menospreciando a sí mismo ni estaba tratando de ganarse alguna simpatía; sólo estaba contando los hechos simples. Incluso entonces, sus palabras parecían contener el sentimiento de: “Alguien tan rico como tú probablemente no tiene idea de cómo es esta vida.”

“Un orfanato, eh… tuve niños en mi casa que también solían ser huérfanos. Ninguno de los dos pudo ingresar a un orfanato, por lo que vivieron en un edificio abandonado y casi mueren un montón de veces porque no comieron nada durante días. ¡Ahaha!”

“¿Qu…?” El chico dejó de caminar.