Bofuri Itai No Wa Iya Nanode Bogyo-Ryoku Ni Kyokufuri Shitai To Omoimasu (NL)

Volumen 4

Capitulo 7: Build Defensiva Y La Obscuridad De La Noche

Parte 2

Sally siguió viendo desde la distancia. Se aseguró de que no la vieran, pero también de no perderlos de vista.

Robar orbes significaba que los dueños de dichos orbes sabrían tu posición exacta. Y la mayoría de esos dueños eran gremios grandes.

Sally estaba muy segura que uno de ellos aparecería eventualmente—y mientras veía, dos Bolas de Fuego aparecieron.

“¿Oh? ¿Coincidencia…? Bueno, es cierto que nosotros no nos llevamos sus orbes”.

Llamas quemaron la tierra y los cielos por igual, convirtiendo a los desafortunados jugadores en cenizas.

El enorme gremio regresó los hechizos, pero un jugador los esquivó todos, aprovechando su Agility mejorada por las llamas.

“Imperio de la Llama… me lo esperaba. No quedan muchos gremios, así que cualquiera que intente quedarse en el top 10 tendrá que luchar contra ellos. Me siento mal por Maple, pero…”.

Sally le envió un mensaje a Chrome, comunicando que trajeran su orbe y se reunieran en su posición.

Tras desmantelar con facilidad el gremio grande por sí misma, Mii tomó sus orbes y regresó a su base.

Imperio de la Llama estaba en quinto lugar.

El asalto de Maple los había lastimado, o de otra forma habrían estado más alto en el ranking. Ella había destruido muchas de las trampas de Marx y dejado sus defensas en pedazos.

Y como resultado, muchos jugadores habían muerto y habían sido eliminados por completo.

“Si podemos mantener estos orbes seguros…”.

Segura de que no había peligro inmediato, Mii tomó una poción de MP de su escuadrón de suministros.

Al poco tiempo, llegaron a la base y colocaron los orbes en su lugar. Ella respiró con alivio.

“Encontrar esto fue pura suerte…”.

“Pero no sabemos a quiénes pertenecen. Y los dueños definitivamente vendrán a recuperarlos”, dijo Misery.

Y sin importar quiénes resultaran ser esos enemigos, llegarían antes de que los orbes dieran puntos.

“Sí—llamen a Shin”.

“Buena idea”.

Llamaron a todos de regreso a la base y comenzaron a prepararse lo mejor que podían.

Cuando Shin regresó, las unidades de exploración de Imperio de la Llama estaban reportando movimiento enemigo.

Venían hacia acá y cada uno era un gremio grande. El pedestal de Imperio de la Llama estaba rodeado por planicies. No había dónde ocultarse.

Y sus enemigos sabían exactamente cuán poderoso era Imperio de la Llama. Ninguno podía ganar por su cuenta, así que se iban a agrupar, esperando acabar con la mayor amenazaba y reclamar el premio para ellos mismos después. Esto significaba que una alianza de varios gremios grandes tenía rodeado a Imperio de la Llama.

“¡Vienen! ¡Prepárense!”.

“Sí… ¡Ojalá no pase nada…!”.

“No te preocupes; Mii se hará cargo”.

“Mantendré a todos sanos”.

Pero justo cuando los líderes del gremio se preparaban, Mii recibió un mensaje.

Se acerca un monstruo. Probablemente Maple. Amenaza grande.

Mii leyó esto, y el color desapareció de su rostro.

“Debe ser una broma… ¿No ha hecho suficiente? ¡Esto es ridículo!”.

Un pequeño vistazo a su verdadera persona. Sus amigos se veían preocupados.

Ella les comunicó el mensaje.

“Me siento enferma”.

“Bueno… Kasumi puede haberme matado, pero… Ella ganó, pero…”.

“Ah. Sí… cierto…”, murmuró Marx… y entonces se desmayó.

Ya sabía que sus trampas no funcionarían en Maple.

“Me siento enferma”, dijo de nuevo Misery.

Pero las hordas ya se acercaban.

Un gremio tras otro apareció en su perímetro. Más de mil jugadores estaban reunidos.

“……Moriremos de todos modos. ¡Será mejor llevarnos a todos

los que podamos!”, gritó Mii.

Ella activó Emperatriz de la Llama, preparándose para la pronta batalla.

“Puedes hacerlo. Tienes que hacerlo”, murmuró Marx para sí mismo, obligándose a levantarse del suelo. Se golpeó las mejillas unas cuantas veces para aclarar su mente y elevó su espíritu.

“Bien… aquí vamos. ¡Impulso Llameante!”.

Con un fiero estallido, la batalla empezó. Hechizos volaban hacia Imperio de la Llama desde todas direcciones.

Pero se enfrentaban contra varios gremios grandes—así que no serían solo hechizos.

“¡Rezo del Santo!”.

El hechizo de Misery hizo aparecer luz desde el cielo.

Le costó todo su MP y la dejó incapaz de recuperar MP durante los próximos tres minutos—pero a cambio, proveyó curación automática de alta velocidad en un área masiva por un periodo fijo de tiempo.

Cualquier miembro de su gremio que recibiera daño lo recuperaría rápido; tomaría bastante daño continuo matar a alguien.

Movimientos así de grandes tenían cooldowns enormes, así que incluso aunque recuperara su MP, no podría usarlo de nuevo.

Pero esta definitivamente era la hora de usarlo.

“El resto está en sus manos”, dijo Misery.

Estaría fuera de combate durante un tiempo y tendría que confiar en su equipo.

“Nosotros nos encargamos”, dijo Shin. Mii había ido por su lado, así que él y Marx fueron hacia el otro. Dividir sus fuerzas los debilitaba, pero la situación no les dejaba elección.

“¡Detonar!”.

Los hechizos lanzados hacia ella eran desviados por la fuerza del estallido cuando Mii aceleraba hacia sus enemigos a velocidades que ningún otro mago podría igualar.

Bolas de Fuego golpeaban caras, y llamas salían disparadas del suelo, aniquilando a todos a su alrededor.

Pero esto conllevaba un enorme uso de MP. Acabar con todos estos enemigos usando sus métodos normales requeriría más pociones de las que tenía a la mano.

“¡Aun así…!”.

Mientras más pudiera matar, mejor sería su posición al final.

Escapar no había sido una opción. Todo lo que podía hacer era llevarse hasta el límite.

Pero entonces lo que más temía llegó.

Un monstruo gigante estaba corriendo por el campo detrás de las fuerzas enemigas.

Si no hubiera estado ocupada combatiendo, Mii habría colocado una mano en su frente y mirado a los cielos.

“Estamos… acabados…”.

O eso pensó Míi. Su supuesto enemigo tenía otros planes.

Cuando el monstruo alcanzó la retaguardia de la alianza, la atravesó, matando a los jugadores.

El monstruo atravesó como una tormenta despiadada, dejando caos y calamidad a su paso.

“¡¿Aun seguimos vivos…?!”.

Mii se concentró de nuevo, luchando con garras y dientes.

La meta de Árbol de Maple era la destrucción de los gremios atacando a Imperio de la Llama.

Y para lograr ese fin, estaban haciendo su mejor esfuerzo para ayudar a Imperio de la Llama a mantener a sus mejores jugadores vivos.

En otras palabras, habían venido a salvar a Mii, Marx, Misery, y a Shin.

Árbol de Maple necesitaba que ellos cuatro sembraran caos.

Y Mii tuvo suficiente razonamiento para no tratar de detener a Maple.

Maple en sí ni siquiera se acercó a Mii.

Funcionalmente, estaban luchando en el mismo bando.

“¡Sigan así!”.

“¡Bien!”.

Todos en su espalda lanzaban explosivos, expandiendo la masacre. Maple misma sólo aplastaba a los enemigos, haciéndolos pedazos.

“¡Maple! ¡Se acercan problemas!”.

“¡Los veo!”.

Su forma monstruo era suficientemente siniestra en la oscuridad, pero en plena luz del día, era horripilante.

Suficiente como para que Maple atrajera la atención de todos los gremios grandes.

Sin que se detuvieran a discutirlo, todos se giraron hacia ella, actuando por puro instinto.

Ella era una amenazaba que debían eliminar de inmediato, incluso si significaba ignorar a Imperio de la Llama.

“Oh… ¡esos son muchos enemigos!”.

“Sep. Uh, ¿Maple? ¡Protección!”, gritó Sally.

Maple activó Devoción del Mártir, y todos a su alrededor fueron bañados en su luz. Pero justo cuando lo activó—

“¡Se acabó Atrocidad! Hngg… ¡Denme un segundo!”.

Viéndola salir del monstruo, los jugadores cercanos vieron su oportunidad y se abalanzaron, sólo para toparse con el escudo de Maple—y su Devorador. Este era un buen recordatorio de que Maple era una amenaza enorme aun sin Atrocidad activa. Ella rápidamente tragó a varios enemigos y se aseguró que todos en su party estuvieran seguros.

“¡Todos están bien! Pero…”.

Unos segundos antes, Sally había visto a Pain detrás de un árbol, espada desenvainada. Tenía una túnica sobre su cabeza, pero era imposible confundir esa distintiva espada larga brillante.

Él, también, había escuchado que una guerra sin cuartel había empezado y estaba aquí para eliminar a la competencia. Puede no haber estado tras ellos específicamente, pero en definitiva los estaba observando.

Y con todos los ojos ya puestos sobre Maple y un montón de jugadores a su alrededor, ellos eran un objetivo principal.

“¡Maple! ¡Ya viene! Será mejor que…”.

“¡Sip! ¡Atrocidad!”.

La transformación del día pasado había terminado, pero no había usado la de hoy.

El horror renació. Y por si eso no fuera suficiente…

““¡Mundo Fantasmal!””.

Kanade y Sally gritaron al mismo tiempo.

Este hechizo creaba tres clones autónomos de cualquier objetivo que durarían tres minutos—con stats idénticos.

Y por supuesto, el objetivo fue Maple.

Ahora había siete Maples monstruo.

Pain no había sido el único aguardando en las sombras. Drag, Frederica, y Dread estaban todos presentes también.

Habían visto a Maple regresar a su forma original y habían tratado de avanzar.

“¡Se pone peor cada vez que la veo! ¡Maldición! ¡Parte-Suelos!”.

Con resignación en su voz, Drag partió la tierra.

Acercarse a una de estas Maples era demasiado peligroso, así que había optado por retrasarlas.

La luz de la espada santa brillo, el suelo se partió, llamas se elevaron, y monstruos atacaron.

Vides atravesaban la tierra, hechizos formaban arcos en el suelo, espadas danzaban por el aire, e ilusiones sembraban caos por doquier.

Y mientras la devastación continuaba, la luz de jugadores desapareciendo le daba al campo de batalla una belleza aterradora.

“¡Mierda! ¡Todos están muriendo!”.

“¡Esto es un desastre! ¡Por favor, que alguien lo detenga!”.

“¡No se queden ahí! ¡Se acercan dos!”.

Algunos se daban coraje, mientras otros se abandonaban a manos de su destino. Pero los clones de Maple los aplastaban por igual.

Meros mortales no podían sobrevivir la llegada del infierno a la tierra.

Jugador tras jugador cayó. Tres minutos después, cuando los clones de Maple finalmente desaparecieron—más de media alianza había desaparecido.

Pero para este punto, todos habían notado que podían usar skills con daño de penetración en su forma Atrocidad y le habían causado suficiente poco daño en repetidas ocasiones para obligarla a regresar a su cuerpo de siempre.

El monstruo retrocedió, y Maple empezó a caer desde el monstruo frente a la horda.

Todos alistaron sus mejores skills. Ninguno planeaba dejarla tocar el suelo.

“¡Despliegue Total!”.

Pero mientras caía, docenas de armas salieron de ella, apuntadas al suelo.

Con una serie de clangs, arma tras arma apareció.

“¡Caos Saturante! ¡Hidra!”.

Todos habían visto suficientes mandíbulas de monstruo para una eternidad, pero Maple apuntó aun otra más a los jugadores debajo de ella, aniquilándolos al instante.

E Hidra apareció detrás, cubriendo el suelo en veneno—el terreno de Maple.

Cualquiera sin Resistencia al Veneno se desvaneció

Maple había perdido su cuerpo monstruoso, pero siempre había sido un monstruo. Simplemente se veía humana a veces.

Y puede que eso se quedara corto.

Su apariencia podría haber mejorado, pero tenía acceso a ataques mucho más variados y era mucho más difícil de golpear.

Ella era un demonio con la cara de un ángel y una total pesadilla.

Esa era la conclusión a la que casi todos sus enemigos llegaban.

Cuando aterrizó, aun llena de armamento, comenzó a girar en su sitio, acabando con la multitud.

Al centro del lago de virulento veneno sólo los jugadores con Nulificación de Venenos podían acercarse. Algunos jugadores estaban lanzando hechizos con daño de penetración, pero su escudo los neutralizaba.

El ejército aliado rápidamente perdió toda esperanza. La horda rodeándola se derritió mientras trataba de escapar.

Maple no iba a dejarlos ir tan fácil. Hubo un estallido cuando comenzó a volar por el campo de batalla.

La Orden de la Espada Santa puede haber arruinado su propio ataque sorpresa, pero Parte-Suelos hizo caer a todos y les permitió evitar que los jugadores respondieran a sus ataques.

En este momento, iban tras los orbes de Imperio de la Llama, y ya que su competencia fue suficientemente buena para reunirlos todos en un mismo sitio, estaban abriéndose paso hacia ellos.

Pain y Dread podían causar caos por cuenta propia, así que estaban luchando independientemente. Drag y Frederica se movían juntos.

Mantenían su distancia de Árbol de Maple, principalmente porque dejarlos continuar con su caos era conveniente para cazar a sus enemigos, pero también porque los miembros de Árbol de Maple eran peligrosos.

“Sería ideal podernos retirar antes de que nos vean…”, murmuró Pain, mientras asesinaba a otro jugador.

Como Maple, luchar contra jugadores sin un cierto nivel no era más que trabajo rutinario.

Su mente estaba en otro sitio, simulando una batalla contra Maple e imaginando los potenciales resultados.

Él concluyó que sin importar lo que hiciera, si ambos estaban operando al máximo, entonces él jamás podría ganar.

“Tendré que retrabajar mi build”.

La intención de Pain era realmente luchar de nuevo contra ella—cuando estuviera seguro de poder ganar.

“Tendré que encontrar nuevas skills”.

Él miró todo el caos por el rabillo del ojo, asesinó a otro jugador, y decidió que las cosas estaban cambiando. Era hora de que la Orden se retirara.

Los tres gremios que todo equipo temía se habían reunido en un mismo sitio.

Las muertes eran increíbles.

Y los tres gremios habían evitado luchar entre ellos, lo cual lo hacía aun peor para los demás.

Cuando los restos del ejercito aliado se retiraron, todo lo que quedó fueron los cuatro líderes de Imperio de la Llama y los miembros de Árbol de Maple.

Chrome había estado manteniendo a las gemelas y a la retaguardia segura con Movimiento de Protección y Protección, dejándolo exhausto. Kasumi había estado curándose a sí misma, y Sally no tuvo ningún problema.

Y, obviamente, Maple estaba bien.

“Si no fuera por estas skills, habría muerto”, dijo Chrome, asombrado de encontrarse con vida.

Hubo muchas veces que vio su HP llegar a un precipicio, pero Devora Almas, Sifón de Almas, y Curación en Batalla lo habían regresado a la vida a un ritmo genuinamente alarmante.

Por otro lado, Imperio de la Llama estaba en pedazos. Todos

habían usado hasta sus últimos trucos. Y lo peor era que la

mayoría de sus miembros habían sido eliminados por completo.

Ahora no se podían comparar a Árbol de Maple.

Mii sabían esto muy bien. Su orbe estaba entre Maple y su equipo, pero ella ni siquiera trató de ir por él. Había llamas a su alrededor…

Y entonces ocurrió una masiva explosión.

Había acabado con lo último de su MP, copiando el vuelo autodestructivo de Maple para transportar a Misery, Shin y Marx a velocidades abrasadoras.

La mayor diferencia con Maple era que Misery la estaba curando. Funcionó como querían, aunque por poco.

Todos los miembros de Imperio de la Llama habían estado de acuerdo en este plan.

Para mantenerse en los primeros lugares, le habían confiado el futuro del gremio a sus cuatro llamas más brillantes.

Y así fue como Árbol de Maple recuperó todos sus orbes.