Bofuri Itai No Wa Iya Nanode Bogyo-Ryoku Ni Kyokufuri Shitai To Omoimasu (NL)

Volumen 4

Capitulo 3: Build Defensiva Y La Noche

Parte 2

“…Deben pensar que se toparon con una buena presa”, susurró Sally, tragando la última Semilla de Dopaje y emergiendo de su escondite.

Sus oponentes también habían dejado de ocultarse, y ya estaban comenzando a rodearla.

Estaban dejando algunas aberturas, dándose espacio para luchar, pero asegurándose de no dejarle el tipo de abertura usada para escapar.

“¡La tenemos acorralada! ¡Adelante!”.

Todos gritaron, listos para cargar—pero nadie se movió.

“¿Acorralada? ¿Yo?”.

El comportamiento de Sally había cambiado por completo.

Esto no era sólo concentración.

Estaba irradiando sed de sangre.

Un movimiento en falso y morirían. Eso es lo que el brillo en sus ojos y sonrisa les decía.

Sus enemigos comenzaban a creer que las probabilidades en realidad estaban en su propia contra.

Sally pudo sentir su cansancio desaparecer. Sobrepasar tus limites te da acceso a poder sin precedentes.

Sus sentidos estaban afilados, y su cuerpo se sentía ligero— “Muy bien… hora de esforzarme y sobrevivir”. Preparándose, Sally levantó sus dagas.

Nadie  estaba  yendo  tras  ellos,   y  Maple   estaba  aburrida.

Entonces, llegó un mensaje.

“¿De Sally? ¿Qué dice?”.

Sólo tres palabras.

Talvez muera. Disculpen.

Nada más.

Sally podía sentir sus sentidos trabajando al límite.

Y mientras más luchaba, más agudos los sentía.

Sus oídos escucharon cierta voz dando órdenes.

“Frederica…”.

Sally nunca podría confundir esa voz.

Y si Frederica estaba aquí, obviamente estaba luchando contra la Orden de la Espada Santa.

Eso significaba que Sally tenía buena probabilidad de sobrevivir.

“¡Señuelo!”.

Sally esquivó la primera ola de hechizos. La vanguardia aprovechó el momento y atacó.

Todos tenían la misma información.

Si Sally iba a sobrevivir, tenía que guiar poco a poco la batalla.

Si no lograba controlar a su enemigo, moriría.

“Gracias, Frederica”.

Con un agradecimiento dirigido a su enemiga, Sally esquivó los ataques de la vanguardia.

“¡Señuelo!”.

Los jugadores que la podían escuchar seguían atacando, pero sus ataques no eran para nada fuertes. Toparse con algo inesperado da pie a sorpresa y confusión, lo cual nubla los ataques.

No habían notado todavía que las skills de Sally no tenían límite de usos.

De hecho, esa “skill” ni siquiera existía. Los ataques seguían lloviendo, pero Sally los estaba esquivando manualmente.

“Asombroso… puedo verlo todo”.

El cambio en su percepción era desconcertante.

Su concentración era tan intensa que hacía ver lentas las espadas—como si el mundo normal estuviera al doble de la velocidad. Y su radar de miedo estaba funcionando—el mismo que había tratado de usar sin éxito durante el día.

No solo estaba funcionando, sino que era mucho más efectivo que el de Dread.

Su comprensión de amenazas era tan vivida que se sentía como si ya hubieran ocurrido.

Yendo más allá de sus limites, Sally había despertado y estaba llegando a nuevas alturas.

“¡No puedo darle! ¡Maldición!”.

“No perderé. ¡No aquí…!”.

Cada golpe que Sally daba acertaba. Cada golpe que le daban erraba.

Ella usó Señuelo una y otra vez, y para cuando Frederica comenzó a notar que algo iba mal, Sally ya había asesinado a veinte jugadores.

“… ¡¿No es una skill?!”, jadeó Frederica, finalmente comprendiendo la verdad.

Pero eso significaba… que no había nada que pudieran hacer.

Sus contramedidas eran inútiles. Esta terrorífica idea comenzó a esparcirse por la multitud.

Desafortunadamente, saber eso no los iba a ayudar.

“¡Rah!”.

Cuando un poderoso ataque se disparó hacia ella, Sally se quitó del camino—

Sin embargo, no solo esquivó.

Lo evadió por milímetros e inmediatamente contraatacó.

“¡Ahora!”.

Hechizos fueron lanzados hacia ella, pero por instinto predijo cuándo llegarían.

“¡Lanzamiento de Hombro!”.

Ella guardó sus armas, tomó aun jugador, y lo lanzó al aire.

El cuerpo del jugador bloqueó los hechizos, y ninguno pudo alcanzar a Sally.

Ya que el fuego enemigo no estaba activado, su aliado no recibió daño, pero mientras caía, Sally sin piedad acabó con él.

“¿En serio es humana…?”.

Todavía tenían setenta jugadores—pero puesto de otra forma, ya habían perdido treinta. El hecho de que el resultado de esta batalla no estaba decidido probaba que Sally ya había roto sus espíritus, por si sola.

“Oboro, Clones de Sombra”.

No era momento para guardar secretos.

La supervivencia de Sally dependía de constantes sorpresas y mantener a sus enemigos dudando.

“Voy a sobrevivir… ¡y los mataré a todos!”.

A diferencia de la Sally real, sus clones pronto desaparecieron.

Pero cada uno se llevó al menos un enemigo consigo.

Y Sally misma estaba tratando de romper el círculo.

Pero entonces—

“¡Te tengo!”.

Una espada la apuñaló en la espalda.

Un grito de alegría se elevó de la multitud.

“Nop, todavía no”.

El clon creado con Espejismo se disolvió.

No había fin para las sorpresas.

Frederica había comenzado dando órdenes con confianza desde la retaguardia, pero Sally era una amenazaba demasiado grande—así que ahora ella misma estaba en la freidora.

Si Sally no hubiera roto sus límites, habría muerto hacía mucho.

Haber rodeado a Sally la obligó a confrontar sus propios límites—así que derrotarla requería que previnieran que Sally los superara.

“¡Misiles de Fuego Múltiples!”.

Frederica veía a Sally con incredulidad.

Literalmente nada la había golpeado todavía.

Estaban fallando por una fracción de centímetro—pero esa pequeña distancia parecía inconmensurable.

“¡Estamos en problemas…!”.

Ya que Sally estaba priorizando sobrevivir, no estaba eliminando rápidamente a los jugadores, pero aun así mataba muchos.

Frederica había elegido un sitio con bastante cobertura debido a que era un lugar ideal para una emboscada. Pero ahora el terreno estaba ayudando a Sally a seguir viva.

“Tsk… ¿Se acercan más enemigos?”.

Miembros de otros gremios estaban persiguiendo los orbes que Sally tenía, uniéndose al círculo. A pesar de esto, ella siguió moviéndose, esquivando el bombardeo de Frederica.

“Estoy bien. Todavía… ¿puedo?”.

De la nada—

Sus pies se detuvieron. Ella cayó de rodillas.

“¡Pared de Agua!”.

Ella se las arregló para rodar fuera del camino de los misiles de fuego, pero un momento después, fue rodeada de nuevo.

Este era un grupo de jugadores muy cuidadosos. Esperando nuevos trucos, no atacaron de inmediato.

Ella ya había salido de situaciones así con trucos repetidas veces.

Pero también había estado sobrepasando sus límites durante un buen tiempo.

Eso no era algo que alguien pudiera hacer por mucho tiempo.

Frederica colocó barreras alrededor de todos. Viéndolos acercarse, Sally susurró: “No me detendrán otra vez”.

“Misiles de Fuego Múltiples”.

Tras las palabras de Frederica—todo explotó.

Pero no fue por su hechizo.

Llamas formaron un arco en el cielo, dejando una línea de humo—como un meteoro dirigido hacia ellos.

Este cayó entre Frederica y Sally.

Y entonces el resplandor de los misiles de fuego cegó a todos.

Cuando el brillo se apagó, una chica con alas blancas y armadura negra se encontraba frente a ellos.

“No se los permitiré”, dijo Maple. “No en mi guardia”.

Maple invocó a Syrup, dándole una orden.

“¡Terraplén!”.

Paredes se elevaron del suelo, obstruyendo a Sally y a Maple de la vista.

Las barreras eran tan altas que el equipo de Frederica no podría escalarlas.

“Maple… ¿cómo…?”.

Era una distancia demasiado lejana como para haber usado a Syrup.

Sally había sabido que ella nunca llegaría a tiempo—y es por eso que no le había pedido ayuda.

“¡Lo explicaré después! ¡Dejé a Mai y a Yui solas, así que tenemos que regresar pronto! ¡Agárrate!”.

“¡B-Bien…!”, Sally se obligó a levantarse y puso sus brazos alrededor de Maple.

Maple aseguró a Sally, agarrándola con fuerza, y se preparó para escapar.

“Desplegar Artillería”.

Armas salieron de cada centímetro de Maple, llenando el interior de las murallas.

Y cada barril apuntaba al suelo.

“¡Aquí vamos!”.

“¡¿Qué?! ¡T-Tienes que estar bromeando!”.

Sin prestarle atención al pánico de Sally, cada arma se disparó, soltando fuego y humo.

Era básicamente una autodestrucción.

Pero Maple podía aguantar todo el daño.

Destruyendo sus mejores armas con la explosión resultante, se propulsó a si misma hacia el cielo.

Sin los estabilizadores en sus piernas, el retroceso la mandaría a volar. Esa fuerza sería normalmente suficiente para matar a cualquier jugador. Pero ya que Maple era inmune, el movimiento la convirtió en un cohete.

Cuando llegó a la altura máxima de su trayectoria, comenzó a gritar nombres de skills.

“¡Despliegue Total! ¡Iniciando Asalto! ¡Hidra!”.

Laser tras laser se disparó hacia el suelo debajo. Como una infinita lluvia de meteoros, cientos de disparos atravesaron la tierra, quemando a los jugadores con tan mala suerte como para estar debajo.

Y a esto le siguió un dragón de tres cabezas que convirtió el área en un lago de veneno.

Pocas personas que acompañaban a Frederica tenían Anulación de Venenos. No planeaban luchar contra Maple, así que la mayoría no tenía equipado su equipo anti-Maple.

No fueron rival para Hidra.

Justo cuando tenían acorralada a Sally, fueron enviados de regreso a su gremio, sin siquiera entender bien lo que pasó.

Sally había matado a treinta.

Y Maple a muchos más que esos.

De no haber sido por ese bombardeo, seguramente no habrían perdido a tantos.

“¡Eso es por atacar a Sally!”.

Con otra explosión de fuego, ella voló de regreso a la base de Árbol de Maple.

“Ughh… ¡¿Qué fue esooo?!”.

Frederica había usado todas las defensas que tenía, y además tenía Anulación de Venenos, así que había logrado sobrevivir. Apenas. Sentada en un lago venenoso.

“¡No las dejaremos ir tan fácil…!”.

Ella era un desastre, su estrategia completamente fallida, pero todavía tenía una brillante idea restante.

Una que podría compensar este desastre.

Si no funcionaba, Pain podía quejarse todo lo que quisiera, y ella no podría objetar.

“¡Por favor, Dread! Haz algo…”.

Él ni siquiera estaba ahí para escucharla, pero aun así debía entregarle sus oraciones.

Mai y Yui estaban paradas frente a los orbes.

“¿Crees que Maple llegue a tiempo?”

“¡Ella y Sally estaban juntas en mi mapa, así que creo que lo logró!”.

“¿Cómo llegó tan rápido?”.

“No sé. ¡Pero dijo que regresaría pronto!”.

Pero no sabían qué tan pronto sería eso.

“Yui, me aseguré de que estemos listas”.

“Bien. Pero… ¿segura que no deberíamos despertar a Kanade y a Chrome? Sería más seguro así…”.

Ellas decidieron ir a lo seguro… Pero no les dieron tiempo.

“¡! ¡Yui! ¡El enemigo!”.

“¡¿Eh?!”.

Las gemelas levantaron sus martillos.

Un solo jugador estaba entrando.

Dread.

Habían localizado la base de Árbol de Maple.

La orden de la Espada Santa no había intentado nada, porque Maple era muy peligrosa. Pero con ella lejos y Dread esperando cerca— ¿por qué no atacar?

“(suspiro)… Frederica nunca nos deja descansar. ¿Seguros que Maple no está aquí? Si es verdad… tengo esto ganado”.

Había entrado justo tras recibir el mensaje de Frederica.

Sería cuestión de minutos antes de que Maple regresara, pero eso era bastante tiempo que Mai y Yui tendrían que aguantar.

“¡Yui, acabaremos con él!”.

“¡Lo sé!”.

Ambas tragaron una Semilla de Dopaje, aumentando todavía más su STR.

No podían permitirse perder.

“Ha… ya quisieran”. Dread comenzó a correr, acercándose con cada segundo que pasaba.

Yui atacó con su martillo desde arriba.

Él todavía estaba a una distancia decente, pero eso no importaba.

“¡Largo Alcance!”.

La skill hizo brillar su martillo, y una onda de choque se disparó—una que tenía garantizado ser fatal.

“¡Hmph!”.

Pero Dread la esquivó.

Y sin detenerse ni un momento.

“¡Pisotón Doble!”.

Al esquivar el ataque de Yui, Dread fue por Mai, con su daga.

“¡Mai!”.

“¡E-Estoy bien!”.

Fue pura suerte haber logrado esquivar su ataque.

Él usaba la misma arma que Sally, y ella podía reconocer el movimiento de ese ataque en cualquier lugar. Su cuerpo había comenzado a moverse por instinto antes de que su consciencia lo notara.

Pero eso no pasaría de nuevo.

Dread había recibido información sobre el DPS puro de las gemelas por las unidades de reconocimiento.

Como resultado, estaba siendo cuidadoso de no dejarse golpear y evitando acercarse demasiado. Eso fue lo que le permitió a Mai sobrevivir.

“¡Mai! ¡Retrocede un poco!”.

“¡Bien!”.

Mai corrió hace la pared.

Pero Dread fue más rápido. La alcanzó de inmediato.

“Muy lenta”.

“….. ¡! ¡¡Augh!!”.

La daga de Dread se dirigió hacia ella.

Pero entonces—Mai lanzó su arma hacia Dread.

“¡¿Eh?!”.

No había esperado esta estrategia desesperada.

Viendo su sorpresa, Mai sonrió. “¡Eso no me dará!”.

De nuevo, su cuerpo se movió fuera del camino del arma. Ahora Mai estaba desarmada. Su daga se dirigió hacia ella de nuevo—hasta que un repentino escalofrío lo hizo retroceder.

Un instante después, una onda de choque salió de donde había estado parado.

“¡La otra…! ¿Qué?”.

Se giró y vio el brillo de una skill a punto de activarse—en el segundo martillo de Yui.

El que Mai había lanzado.

“Mierd… ¡¿gah?!”.

La segunda onda de choque le dio de lleno, mandándolo contra la pared.

Mai no había estado armada con un martillo. Simplemente había estado sosteniendo el martillo que Yui se había equipado.

Cuando lo lanzó, simplemente estaba dándoselo de vuelta.

Una vez estuvo en sus manos, Yui pudo activar una segunda— e inesperada—skill.

Este era un truco que solo ellas dos podían usar.

“Apenas contamos como medio jugador solas—”.

“Pero si unimos fuerzas—”

““Podemos vencer a cualquiera””.

Podrían carecer de experiencia y técnica, pero este era un gran paso hacia la grandeza.

Un gran paso.

Pero no suficientemente amplio.

“Maldición, todos ustedes son brutales”.

““¡Imposible!””.

“¡Una menos!”.

La daga de Dread atravesó a Mai.

Ella no tenía forma de soportar esto.

El HP de Dread tenía un solo punto restante. Eso no era suerte.

Claramente era el trabajo de una skill.

Esta era ventaja ganada por tiempo.

Él llevaba jugando mucho más tiempo que ellas.

“¡Adiós…!”.

“Maple… lo siento…”.

Él le dio la vuelta a su plan secreto, y sus dagas acabaron con Yui en poco tiempo.

Dread guardó sus dagas y bebió una poción, recuperando su HP.

“(suspiro)… Qué desastre. Todo este gremio es un dolor de cabeza”.

Cuando su HP estuvo lleno de nuevo, se giró hacia el orbe, murmurando: “Parece que gané esta vez— ¡¿Eh?!”.

El tiempo se acabó antes de que pudiera tocar el orbe.

Hubo una explosión detrás de él. Maple había traído a Sally de regreso.

“……Tendré que compensárselo a las gemelas después”.

“¡Fredericaaaa! ¡Me debes una!”.

Dread había ganado la pelea, pero perdido la guerra.

Las gemelas habían comprado suficiente tiempo.

Y Maple no iba a desperdiciar esta oportunidad.