Taimadou Gakuen 35 Shiken Shoutai (NL)

Volumen 5

Capitulo 4: Kusanagi Takeru

Parte 3

Como yo. Al escuchar esas palabras, Takeru sintió una profunda emoción. Inesperadamente los dos sentían lo mismo………………………………………………………… eso significaba.

“Dijiste que yo te cambié, pero tú fuiste quien me cambió primero.” “…         ”

“No te culpo por no recordar. Todo lo que hiciste fue derrotarme.” “¿D-Derrotarme?”

Sintiéndose nostálgico, Takeru miró el techo con una sonrisa irónica. “Sí.    fui derrotado.”

Incluso en este momento, Takeru podía recordarlo claramente.

El combate a muerte sucedió inmediatamente después de que se hicieron de segundo año. Probablemente por el hecho de que no pudo soportar estar solamente leyendo en clases por un año, estaba ansioso por mostrar sus habilidades como espadachín.

No sentía que perdería contra nadie, no tenía permitido perder.

Para cambiar la Inquisición y salvar a Kiseki y no podía permitir contra alguien. Él la retó y perdió. Hizo todo lo que pudo con excepción del Soumatou y perdió.

『Es mi victoria.』

La figura de pie en la oscuridad que apuntaba el cañón hacia él era increíblemente hermosa.

No soy rival para ella, así era de fuerte la impresión. La luz en sus ojos era similar a la de él. Esa mujer solo vivía por su fuerza de voluntad.

Ella descartó todo, ella rechazó todo, eso eran los ojos de alguien quien vivía odiando todo.

Sus pupilas azul cobalto eran profundas y oscuras. Aunque eran similares entre ellos, había partes en las que ella era más oscura. Sus ojos decían ‘no puedes alcanzarme’ ‘no tienes permitido estar al lado de mi’.

Esa mujer siempre estará por arriba de mí. El Takeru de ese entonces pensaba en Ouka.

“… en ese momento… estaba súper frustrado. Después de perder por primera vez, con el fin de confirmar mi determinación fui a visitar a Kiseki. Después de ir a verla, estaba medio llorando y le dije 『No importa cuántas veces pierda, te salvaré. Esa es mi única razón para vivir.』…”

Takeru cerró los ojos al sentirse nostálgico.

“La Kiseki de ese entonces no me escuchó. Incluso durante las visitas me daba la espalda y no me mostraba su rostro.”

“… con que así es…”

“Pero solo esa vez se volteó hacia mí y con una expresión enojada dijo eso.” Takeru apretó los dedos sobre sus rodillas.

“『Onii-chan no entiende cómo se siente Kiseki. Onii-chan no entiende los sentimientos de otras personas. ¿Salvarás a Kiseki? ¿Sabes lo que significa salvar a alguien?』…”

“… eso es… duro…”

“Sí, incluso mi yo rebelde de antes no lo soportó.” Con una amarga sonrisa esta vez se golpeó su cabeza.

“Desde ese entonces… he comenzado a pensar un poco en los sentimientos de otros.”

Después de que Kiseki le dijo eso, Takeru por primera vez se detuvo y miró alrededor.

¿Qué son los sentimientos de otros? ¿Qué significa salvar a la gente? Le preguntó a Ikaruga pero fue rechazado.

Takeru se encontraba desesperado, y le dijo todo a Ikaruga.

Comenzó a cambiar poco a poco. Comenzó a entender a los otros. Al principio todo era por el bien de su hermana. Con el fin de entender lo que ella pensaba, lo que deseaba… querer saber esas cosas fue difícil. Intentó leyendo libros, trató de imitar a un admirable personaje. Takeru intentó muchas cosas para lograrlo.

Fue ahí cuando entró al 35to Pelotón de Prueba. En esos días, a pesar de ser torpe, fue capaz de pensar más como humano. Aunque hizo distintivos compañeros, todos ellos eran fuertes y se repelían entre sí, el primero se fue, luego el segundo y el tercero. Ahí fue cuando se le confió ser el capitán.

Honestamente, él pensó que no era adecuado para ello. No tenía habilidades y no entendía no que otros pensaban, tener a otros como subordinados no era la mejor idea.

“Fue en esa época cuando me encontré contigo.” Se encontró con Ouka, aprendió sobre su pasado.

Somos similares, él pensó. La tristeza que atormentaba a Ouka, la furia, Takeru entendía todo eso. Al sobreponer sus sentimientos con los de ella, Takeru finalmente fue capaz de entender a otras personas.

Mari también, Usagi también, Ikaruga también.

Se cargó a sí mismo con varios pasados y sostuvo muchos problemas. Cada vez, las circunstancias de Takeru se sobreponían con las de las chicas.

Por eso quería salvarlas. Parecía que eso era lo correcto por hacer.

Takeru comenzó a ser el capitán porque fue derrotado por Ouka y la conoció.

“… es por eso que quien debe estar agradecido soy yo. Si no me hubieras aplastado violentamente, el yo actual no estaría aquí. Hubiera permanecido como un peligroso y rebelde idiota.”

“… no te derroté con esa intención.”

“Aun así estoy agradecido. Eres quien me hizo detener… eres mi benefactor.”

Al ser llamada su benefactor, a pesar de estar al otro lado de la pared una sonrisa se formó en su rostro y comenzó a murmurar algo en voz baja.

Después de transmitirle sus sentimientos Takeru suspiró. “Yo… no tengo confianza.”

“¿Qué?”

“Me he involucrado con muchas personas y creo que mi personalidad se ha vuelto más decente que antes, pero… a veces comenzaba a pensar que eso sólo era superficial.”

” ……….”

“De vuelta al inicio, mi razón era hacerlo por mi hermana. Traté leyendo libros y pensar como los seres humanos decentes o pretendía ser normal imitando a otras personas… todo eso se juntó y me hizo como hoy soy… por eso.”

“……….”

“Al final pienso que es algo falso y artificial.” Takeru siempre estaba inquieto.

Aunque estaba llevando la carga de sus compañeras, sólo aprendió que era lo correcto por hacer, ¿eso no es diferente que querer ayudar? Cuando pensaba en ello, no tenía razones para ayudar a sus compañeras. Sólo es porque son sus compañeras. Eso es todo.

¿Realmente eso está acompañado por sus sentimientos?

Ouka escuchó lo que le preocupaba a Takeru y se rio al otro lado de la pared.

“… hey, la gente está molesta aquí. No es algo para reírse.”

“Pfff…l-lo siento… kufufufu… tienes partes inesperadamente lindas ¿no?” “Nada de lindo… deja de reírte.”

Insatisfecho, Takeru golpeó fuertemente la pared entre ellos.

“No, lo siento… eso es correr antes de caminar. Kusanagi, si realmente fueras una persona que no piensa en los demás, no estarías agonizando por tales cosas ¿verdad?”

“… eh.”

“Tomas acciones porque quieres ser una persona que salvaría a sus compañeros. Debido a que esperas eso, tomas las acciones correctas. Tus motivos son irrelevantes. Tomas acciones, eso es todo.”

Al oír eso, se dio cuenta de lo que ella dijo era obvio. Ouka se rio gentilmente.

“Te volviste un humano decente. Un torpe humano llamado Kusanagi Takeru. De buen corazón, fuerte en extraños lugares, que piensa es sus compañeras… el capitán del 35to Pelotón de Prueba. Si es así, debes tener confianza.”

Careces en muchos aspectos, Ouka se rio alegremente.

“Infla el pecho. Tú eres tú. Kusanagi Takeru, lo sé muy bien.” Esas palabras resonaron dentro de su corazón.

Estoy feliz, él pensó sinceramente. “… gracias Ootori.”

“No me agradezcas, sólo dije lo obvio.”

Los dos alinearon sus espaldas entre ellos a través de la pared. “No estás solo Kusanagi.”

” ……….”

“Yo, nosotras estamos contigo. Somos compañeros. Tu hermana… Kiseki, consideremos sobre ella juntos.”

“……….”

“Entonces seguramente… encontraremos una salida. No será imposible. Eso es lo que siempre nos dices ¿no?”

“… sí.”

“Por eso esta vez, te garantizo eso.” Ouka de rio en silencio.

Caminar lado a lado. Es lo que Ouka dijo que era. Cuando uno parece que está a punto de colapsar, el otro le ayuda. Aunque sea sólo un poco, ellos se ayudan. Takeru está sinceramente agradecido de tener a Ouka en esa posición.

Si todos actúan juntos, nada es imposible.

Hasta ahora, así es como el 35to Pelotón de Prueba ha superado todas las dificultades. Hay resultados en los que pueden creer.

Por eso esta vez también, el creía.

Que ellos definitivamente protegerían a Kiseki.

“……….”

El silencio entre ellos le reconfortaba.

A pesar de estar separados por la pared, él podía sentir la calidez de la espalda de Ouka.

Por un momento, los dos se quedaron el silencio. Luego, alguien golpeó la puerta de la celda.

“Ummm… ¿por aquí? Oh, ahí, Kusanagi-kun.”

Una voz extrañamente relajada sonó detrás se los barrotes. Takeru se levantó de la cama y se acercó a la entrada. “Yahuu♪vine a salvarte~~.”

Era la presidenta del consejo estudiantil, Hoshijiro Nagaru.

“Presidenta Hoshijiro… ¿por qué?”

Ouka quien estaba en la otra celda también vio a Nagaru a través de los barrotes.

Por alguna razón, había una llave en las manos de Nagaru. Abrió las celdas de Takeru y Ouka dejándolos salir en silencio. “¿Por qué la presidenta Hoshijiro nos salva…?”

Cuando Ouka preguntó, Nagaru puso una mano en la cadera y sonrió.

“Tengo ciertos conocidos entre los guardias de prisión. Les pedí un favor… que me dieran las llaves.”

“Quee… ¿los sobornaste?”

“Qué horrible Ouka-chan~. Dije que tenía unos camaradas ¿no?” Nufufu, se rio de manera extraña e infló su pecho orgullosa. “Pero… por qué…”

Cuando Takeru preguntó, la expresión de Takeru se volvió seria.

“Para tenerlos en mi trampa… es lo que me gustaría decir, pero como es de esperarse, no haría una cosa tan peligrosa por esa razón. Tengo un reporte de emergencia para ustedes.”

“¿Emergencia?”

“Sí, ¿escuchaste que la transportación de tu hermana menor comenzó?” “No… solo sabía que sería hoy.”

Takeru bajó su mirada y apretó el puño.

Nagaru miró su expresión y se lo dijo en voz baja.

“Tranquilízate y escucha. Kusanagi Kiseki… el vehículo de convoy en el que iba tu hermana, fue atacado por Valhalla.”

“……………. queee.”

Abrió completamente sus ojos y se puso rígido. Para no hacerlo enojar mucho, Nagaru continuó con una voz baja.”

“No se me ha reportado mucha información, pero la batalla comenzó. Tres vehículos de transporte aéreos y siete vehículos de convoy fueron atacados casi al mismo tiempo, debió ser un ataque planeado. De seguro, cuando el Héroe atacó y Mefisto también, tenían como objetivo a tu hermana.”

“¿¡Por qué Kiseki. !? ¡Ella no está relacionada con Valhalla! Incluso la

Inquisición no puede controlarla….. ¿¡Qué quieren de mi hermana!?”

“… no hay tiempo para hablar de esas circunstancias. Es un problema

secundario, pero los civiles han recibido una gran cantidad de daño. Además, si Imotou-chan[9] entra en combate, la ciudad entera corre peligro.”

“…ngh.. ”

“Envíe las coordenadas al GPS de Suginami-chan. Déjenme este lugar a mí, deben dirigirse a escena de una vez. Si algo llegara a pasar. ”

Incluso sin decir eso, Takeru se abalanzó y corrió por el pasillo. Ouka también lo siguió.

Cuando salieron del edificio disciplinario de la Inquisición. En la salida ya estaban Suginami, Usagi y Mari.

“… ustedes.”

En respuesta a la sorpresa de Takeru, las tres asintieron ligeramente.

^[9]Imotou- Hermana menor.

“Hemos escuchado la historia completa de la presidenta del consejo estudiantil. A pesar de nuestras posibilidades, nosotras tres te ayudaremos.”

“No solo podemos quedarnos de brazos cruzados ¿verdad? Después de todo la hermana de Takeru está en medio de una crisis. Déjanos ayudar.”

Usagi y Mari se pararon frente a Takeru e inflaron el pecho. Ikaruga también se paró al lado de ellas.

“No puedo participar en batalla, y como esto fue repentino no preparé nada. Lo que puedo hacer, es conducir el carro.”

Las pupilas de Takeru se sacudieron por el agradecimiento que sentía, mordió su labio inferior y levantó las cejas.

Cuando trató de abrir la boca, Usagi y Mari dieron un gran suspiro.

“Aunque nos digas que no, ¡iremos de cualquier modo! ¿Cuántas batallas piensas que hemos tenido hasta ahora? No digas que esto es un dolor en el trasero.”

“Santo cielo. Si dices algo como ‘es peligroso, no vengan’ o ‘es mi problema’.

¡Te golpearé! ¡Te golpearé donde más te duele! ¡Te haré mucho daño!” Las dos dijeron eso enojadas y Takeru sacudió su cabeza arrepentido.

“No, honestamente… que me ayuden es genial. No lo hubiera hecho si fuera por mí, pero por mi hermana… quiero que cooperen conmigo.”

Debido a su inesperada reacción, Usagi y Mari estaban impactadas.

Como es Takeru, estaban seguras de recibir un ‘no se involucren’. Ellas lo miraron, pero en vez de ver a Takeru, inmediatamente dirigieron su mirada a Ouka.

“¿Q-Qué es esto? ¿Por qué me están viendo?”

“Ootori… ¿algo pasó entre tú y Kusanagi en esa prisión?” “… ¿¡ha!?”

“Que Takeru acceda a nuestra ayuda es extraño. Algo pasó ¿verdad?”

“Chicas, no es tiempo para preocuparse por algo como eso, ¡apresúrense y suban al carro!”

Un poco enojada, Ouka empujó la espalda de Usagi y la de Mari. Enojada, Ouka miró a Takeru hacia atrás y aclaró su garganta.

“Kusanagi, todas las Relic Eater están liberadas. Lo que la presidenta dijo es verdad… usa a Mistilteinn y ve para allá. Deberías ser más rápido que nosotras.”

Cuando Ouka dijo eso, antes de darse cuenta, distanciada de los cinco estaba Lapis.

Estaba viendo a Takeru inexpresiva. “………”

Es como si ella supiera todo.

Era obvio ya que es propiedad de la Inquisición pero… que ella no le haya dicho nada, lo hace estar triste. A pesar de pelear juntos hasta ahora, Takeru no sabe nada sobre Lapis.

Lapis no mostraba nada de sus sentimientos. Su actitud de pensar en sí misma como una espada no cedería.

“Takeru-kun.”

Desde atrás escuchó la voz de Nagaru. Se dio la vuelta con una seria expresión. “… no puedes confiar en Mistilteinn.”

“… lo sé. Pero justo ahora necesito su poder.”

Nagaru también sabía que Lapis era esencial bajo esta situación. Ella cerró los ojos y asintió.

“Asegúrate de mantenerte vivo y volver ¿okay? Junto a Imotou-chan.” “Sí.”

“Además, déjame oír tu respuesta de antes. Hay mucho que quiero decirte. Sobre el tratamiento de Imotou-chan, te mostraré que puedo hacer algo con ello. Me aseguraré de hacer algo en la dirección que te convenza…”

“……….”

“Por eso, asegúrate de no hacer la decisión equivocada.”

Ella dijo eso y se despidió de Takeru. Asintió fuertemente y dejó salir un suspiro con sus ojos cerrados.

Bajo sus pies un círculo mágico azul apareció.

Levantó su mano frente a él y abrió por completo sus ojos al mismo tiempo. Deseando con suprema vehemencia… “Summis desiderantes affectibus” Como si cortara, la balanceó horizontalmente.

El martillo de las brujas… “¡Malleus Maleficarum!”

Y la batalla de Takeru para ayudar a su amada hermana menor comenzó.