Zaregoto  (NL)

Volumen 6: Magica Masacre

Capitulo 2: Caníbal (Caníbal)

Parte 2

“Si. ¿Qué pasa con eso? ¿No te preocupas por algo totalmente diferente de lo que te estoy advirtiendo? Esa profesora asistente podría ser algo muy peligroso, ¿sabes? Era lo mismo cuando antes te estaba hablando de Niounomiya, necesitas aprender a tener algo tensión hacia la vida, o más bien una sensación de peligro, ¿sabes? ¿Nunca has pensado que morirías?”

“Como dije, hace mucho tiempo que llegué a aceptar eso.”

“Ya aceptaste eso, eh… ¿estás seguro de que no estás mezclando eso para evitar que tus ojos vean el problema? Investigar no morir es algo bueno, pero los seres humanos no pueden escapar de la muerte, ¿sabes?”

“Quién sabe.”

“Bueno, supongo que así es como eres. Pero es como, ¿realmente tienes un sentido de compostura?”

“¿Compostura?”

“No tanto compostura y más fuerza de reserva. Estás ocultando tu verdadera fuerza en algún nivel, ¿verdad? No es que hayas renunciado o que hayas aceptado las cosas, nada así de simple. Pero que quieres vivir la vida con setenta por ciento de potencia. Setenta por ciento… no, más como sesenta por ciento, más o menos.”

“… Me pregunto. Desde mi perspectiva, de cómo lo estás diciendo, siento que apenas me aferro a la vida.”

“En todos los casos, tu propia perspectiva siempre está sesgada. Y eso parece un poco tímido, como si tuvieras miedo de hacer todo… como si tuvieras miedo de mirar claramente tus límites superiores, pero ya sabea, a pesar de que nosotros estamos en diferentes vectores, en ese sentido, en verdad no soy quien para hablar.”

“¿? ¿Qué quieres decir con eso?”

“Porque. No puedo ir en serio.” Dijo Aikawa-san, en un raro momento de auto-desprecio, aunque todavía tenía esa sonrisa cínica.

“En ese sentido, ser el más fuerte es bastante aburrido, en el papel. No puedes luchar cuando no hay oponente. No tener un enemigo es una mala forma de existencia. Por eso siempre tengo que subir al ring de alguien… Tengo que jugar con sus reglas. Pero al final del día, eso es burlarse de ellos poniéndote en desventaja, ¿sabes? Ser mucho más fuerte e invencible es hacer trampa. Tramposo y aburrido.”

“…………”

“Bueno, ya sabes… lo mencionamos hace un momento, pero el que era como tú, que apareció en mayo. Zerozaki Hitoshiki-kun. Era bastante bueno, relativamente hablando. Al menos, entro los últimos que aparecieron, él era el mejor.”

“Últimos… ¿quién era el mejor en el pasado? ¿Había alguien mejor que Zerozaki?”

“Hmmmm… lo hubo.” Aikawa-san dudó. “Sin embargo, eso fue antes de ser el más fuerte. Hubo dos, cuando era una niña, ante quienes me rendí, pensando, no hay forma de que pueda vencer a este tipo.”

“Dos.”

Eso es sorprendente

Al mismo tiempo, eso debería esperarse. Aikawa-san no era la contratista más fuerte de la humanidad desde el momento en que nació.

Todos tienen un pasado.

Todos.

Ya sea necesario o innecesario.

Ya sea favorablemente o desfavorablemente.

Llegan al presente, habiendo apilado un pasado.

Alcanzan el futuro, apilando experiencias.

“Eso suena, apagado…”

“Sí. Podría ser solo yo persuadiéndome al decirlo de ese modo… pero eso fue hace mucho tiempo… y Zerozaki-kun tampoco es un candidato. Esa excéntrica gran detective no lo es, y ese tipo ya no está por aquí.”

“Dices que… ya no está.”

“En ese sentido, Ii-tan.”

Plaf.

Ella puso una mano sobre mi hombro.

Y luego lo agarró con fuerza.

Poderosamente. Sin consideración ni piedad.

“Tengo muchas esperanzas para ti.”

“… Por favor.”

Respondí con voz temblorosa.

Bueno, mi voz no era tan temblorosa.

“Detente con los chistes, Jun-san.”

“Te lo dije una vez… en este momento, definitivamente es una broma. Así que no es nada de lo que tengas que preocuparte.” Aikawa-san me soltó del hombro sin mucha resistencia. “Pero, quiero verla una vez, por mi cuenta… tu seriedad. Eso es aterrador y, a decir verdad, podría ser mejor tratar contigo antes de sacar esa seriedad.”

Ella sí me lo dijo una vez.

Eso si alguna vez encontrara una meta.

Y si alguna vez trabajara seriamente hacia ese objetivo.

¿Qué pasaría?

¿Qué sucedería?

“… Eso es imposible.”

“¿Hmm?”

“Porque así es como soy. Vago, medio tonto e indefenso. No me refiero a esa conversación sobre Kasugai-san, pero realmente, no tengo una meta en la vida, solo una persona que se tambalea por la vida.”

“Una explicación clara.” Aikawa-san se rio, jeje. “Suena bien. Pero si me preguntas, no vivir en serio, independientemente de cómo se sientan los demás, tiene que ser realmente aburrido para la persona.”

“Incluso si tengo alguna fuerza de reserva, ese es el tipo de fuerza de reserva que es demasiado para mí manejar. Uno no debe tocar un poder abrumador, o algo así. Algo así como los seres humanos solo usan el treinta por ciento de su cerebro, y cuando realmente intentas usar el resto, resulta ser un montón de basura…”

“Incluso si es un montón de basura, tienes que usarlo cuando tienes que usarlo. Así es como funciona el poder de reserva. No podrás quedarte así de vago, medio tonto para siempre.”

Aikawa-san resucitó mis palabras.

Y luego, ella declaró.

“Porque estás viviendo.”

***

Recorrimos el Templo Kiyomizu y el Santuario Yasaka, y luego cenamos en el bar de sake preferido de Aikawa Jun, y luego hablamos un poco, dimos algunas vueltas, y luego repetimos descansos y caminatas, y una vez que pasó la medianoche, en otras palabras, una vez que se convirtió el 5 de agosto, Aikawa-san se subió a un taxi y nos fuimos por caminos separados. Parecía que en realidad solo había abierto la tarde, así que se dirigía al trabajo sin tomarse un descanso.

Está bastante abrumada por el trabajo, pensé.

Me pregunto cuándo duerme.

“………”

Y luego me pregunté.

¿Por qué estaba Aikawa-san trabajando como contratista? Con sus talentos… no, no puedes resumirlo simplemente en talentos, esa persona, Aikawa Jun como entidad, podría hacer lo que quisiera y podría lograr lo que quisiera.

Viviendo, pero no muriendo.

Quizás incluso podría lograr eso.

Por lo menos, así de absoluta era ella.

Esa era mi impresión

Sin embargo, ¿por qué estaba trabajando como contratista?

Un contratista es simplemente un representante del trabajo de otra persona.

Un agente.

Un reemplazo.

Un sustituto.

¿Por qué estaba satisfecha con eso?

La misma dama que insistía tanto en que otras personas fueran serias.

La misma mujer que dijo que quería verme hablando en serio. La misma mujer que dijo que tenía grandes esperanzas en mí. ¿No está siendo contradictoria? No puede volverse seria.

Verbalmente, significa lo mismo.

Pero se refieren a un espectro diferente, un espectro demasiado lejano.

No puedo hablar en serio.

Ella no puede ponerse seria.

… Esa diferencia es enorme.

Esa diferencia es absoluta.

Esa es la diferencia entre el más fuerte y el más débil.

Aunque uno no necesariamente puede llamarlos totalmente separados.

“………… Eso es correcto.”

Nunca lo había pensado.

Nunca quise pensar en eso.

En cuanto a Aikawa-san.

“En cuanto a Aikawa-san… ¿qué es lo que realmente busca?” O tal vez, ¿qué es lo que realmente no quiere? Tal vez debería preguntarle la próxima vez.

Si surgiera la oportunidad.

Si mal no recuerdo, hasta la próxima vez que nos veamos.

“… Bueno, es hora de irse a casa.”

Me di la vuelta. Como estudiante universitario en quiebra, no tenía los medios financieros para hacer algo tan burgués como tomar un taxi. Sin embargo, al mismo tiempo, a esta hora ya no había autobuses. En conclusión, debía caminar a casa. No había nada que pensar en particular, y era un poco patético que hiciera lo mismo que cuando todavía llevaba el yeso…

“Ah… esto apesta.”

Después de haber estado con Aikawa-san durante 12 horas seguidas, estaba exhausto. Podría llamar a Miiko-san y pedirle que me recoja… pero tampoco me sentía a gusto. Y, a esta hora, Miiko-san ya podría estar dormida. No quería despertarla.

Caminé tranquilamente por la calle Oike. Ahora que lo pienso, ¿cuándo fue que caminé por Kioto por la noche así con Zerozaki? ¿A dónde nos dirigíamos entonces?

Fue hace mucho tiempo.

En aquel entonces también murió mucha gente.

Lo suficiente como para hacerme sentir insensible.

Para hacerme sentir apático.

Sentirme resignado al respecto, borrarlo de mi memoria.

“Aunque todo es una tontería…”

Diciéndome que estoy viviendo.

Yo, el que vive como si ya estuviera muerto.

“Viviendo… muriendo…”

Kigamine Yaku.

Investigar no morir.

Por supuesto, eso es solo una metáfora, y solo la forma de la profesora asistente de ocultar sus pensamientos. Después de todo, cualquier cosa relacionada con los estudios médicos está investigando no morir. Las personas de artes liberales como yo tienen dificultades para distinguir entre biología y ciencias de la salud. Sin embargo, Miyoshi Kokoromi, una vez mi maestra, estudió la muerte. Desde esa perspectiva, investigar no morir no era exactamente un concepto alienígena para mí, y en realidad podría ser algo familiar.

Sin embargo… ¿esa es una razón suficiente?

¿Para estar metiendo mi cabeza en esto?

Según Aikawa-san, había algo que le daba una sensación incómoda, algo que era incierto, por lo que lo correcto sería retroceder.

“… Pero, de cualquier manera, es lo mismo.”

Siempre fue así. Todo debería y lo haría, al final del día, resultó igual sin importar cuánto me arrepintiera o me lamentara de las cosas.

De cualquier manera, el futuro era el mismo.

Ir al infierno o retirarse al infierno.

Esa era mi vida.

Siguiendo el destino.

Guiado por la causa y el efecto.

“Al final, todo sale como quiere…”

Y.

Me encontré con el semáforo en la calle Korikawa, y cuando dejé de caminar, al final del largo camino, noté una sombra humanoide. A pesar de que Kioto se convierte en una prefectura rural una vez que te alejas de la ciudad central, no es que me parezca extraño teniendo en cuenta que normalmente no ves a un perro y mucho menos a una persona por la noche. Incluso en una zona rural, a veces verás a una o dos personas caminando por la noche.

No, el problema era que la figura en el otro extremo de la pasarela no caminaba, sino que yacía boca abajo sobre el mosaico amarillo.

Visión 20/20.

¿Alguien se derrumbó?

“… Hmm.”

No era necesariamente porque acababa de pensar en Zerozaki, sino que lo que pasó por mi mente fue lo que sucedió en mayo. En aquel entonces me encontré en una situación similar, eché una mano y terminé peor por ello. No es que necesariamente tenga que volver a suceder.

………

En ese caso.

Podría volver a mi apartamento sin pasar por este semáforo… “¿O estás diciendo que podrías ignorar a alguien que se derrumbó en el suelo y seguir tu camino alegre?”

Sí, sí.

Dejando a un lado las palabras de Kasugai-san.

Si tuvieras que preguntar si la clase de persona que solo estaba hablando con Aikawa-san momentos antes podría ignorar a una persona que se derrumbó en el suelo, la respuesta sería no.

No esperé a que el semáforo se pusiera verde, y corrí. De todos modos, a esta hora apenas había autos en la calle.

“¿Estás bien…?”

Y a medida que me acercaba a esa figura.

Me quedé helado.

“……… Essssss, tásssssss, biiiiii, ennnnn…”

Un manteau oscuro.

Ambos brazos escondidos debajo del manteau.

Cabello largo, gafas.

Era Niounomiya Rizumu-chan.

“……………”

Otra vez se derrumbó en el suelo…

¡Esta chica, otra vez se desplomó en el suelo!

Me agaché cerca para inspeccionarla, y ella se veía igual que antes, solo dormía. No, no solo tenía el mismo aspecto, incluso estaba haciendo los sonidos para dormir “zzz, nom, nom”, y luego terminaba rodando y murmurando. Me recordó a un asalariado noqueado de la borrachera en el suelo.

Uwah…

Fue como, ya sabes.

Por lo menos, el destino quería que nos volviéramos a ver.

“Quiero correr…”

No quiero este tipo de conexión… es lo que quería decir.

Pero tú sabes.

Incluso si es Kioto, en medio de una noche de verano.

Siendo una chica y todo.

“………”

Niounomiya.

Un grupo de asesinos profesionales.

Me disculpé con Aikawa-san, pero incluso en una segunda mirada, ella no parecía nada de eso. Dejando a un lado sus pensamientos sobre la investigación de la profesora asistente Kigamine para no morir… No sentí que esto justificara ese tipo de precaución.

Por supuesto.

Estoy acostumbrado a tratar con bichos raros.

Ella no podría ser peor que Tamamo-chan.

“… Pero no es como si pudiera llevarla sobre mi espalda.”

Kasugai-san había recogido a Rizumu-chan el primero de agosto, y hoy es el tercero. Ella había dicho en ese momento que no había comido en tres días, así que tal vez ella colapsó bajo las mismas circunstancias. Por otra parte, ¿no dijo ella que tenía la costumbre de perder el conocimiento? Si eso es cierto, entonces el primer lugar al que debería llevarla es al hospital. Pero eso viene con el mismo problema que llevarla a la policía… la combinación de una gran detective y la camisa de fuerza. En cualquier caso, podría comenzar abofeteándole las mejillas.

Justo cuando llegué a su cara con ese pensamiento.

Fwip.

Como un resorte en espiral, el cuerpo de Rizumu-chan se movió, y como para evitar mi mano, saltó tres metros en menos de un instante. Eso era incomparable incluso con la agilidad que mostró el otro día al lanzarse sobre el sushi.

Y los ojos que me miraban estaban bien abiertos.

Lo suficientemente anchos como para pensar que tal vez incluso las pupilas estaban abiertas.

“…… ¿Eh?”

“…………………”

Rizumu-chan me miró con un silencio opresivo.

Y luego me di cuenta.

¿Tal vez fue porque traté de darle una bofetada?

“Ah, eso fue, solo… yo quería…”

En el momento en que traté de poner una excusa, no, cuando empecé, como si tuviera cohetes en las piernas, ya había cerrado el espacio de tres metros. Eso también hizo que su tacleada del otro día fuese un juego de niños. Su impulso era tan grande que su manteau se arrancó y cayó al suelo.

Y reveló su camisa de fuerza.

Y a ella, con ambos brazos sellados por los cinturones.

Tenía la boca abierta, apuntando a mi garganta.

“… Eek.”

Pensé que me iban a comer.

Las palabras de Aikawa-san pasaron por mi mente.

Carnaval. Devorador de Hombres.

Caníbal.

“¡Ts, u, uwaah!”

Incluso antes de que pudiera llamarlo esquivar, impulsado casi por puro miedo primario, caí para evitar el ataque. O más exactamente, no pude esquivar sus incisivos, y la punta rozó mi mejilla derecha.

Un dolor agudo.

Y una sensación de frío, como si me hubiera cortado una cuchilla.

No era tanto como doloroso, sino como ardió.

No era tanto caluroso, sino como era de frío.

“¡Gyajaja! ¡Gyajajajajajajaja!”

Ella.

Parecía que ella se estaba riendo.

“¡Gyajajajajajajajajajajajajajajajaja!”

“Hey, espera.”

Ya estaba arrodillado en el suelo. No podría esquivar otro ataque con esta postura. Aunque no hizo nada para separar nuestra distancia, estiré mis brazos frente a mí y le mostré las palmas.

Ella se giró para mirarme.

La sangre goteaba de su boca.

Mi sangre.

Que era de color rojo.

Rojo, rojo.

Y luego se echó a reír.

Fríamente.

“Ri, Ri……”

Finalmente logré soltar.

“Rizumu-chan…”

“… Oh.”

Y.

Por fin… ella habló en lengua humana.

“Tú eres el que ayudó a Rizumu.”

“… ¿Eh?”

Me sorprendió.

Me puse de pie… y me alejé de ella.

Ella me vio y, disgustada, se echó a reír.

“Uf, casi me hace comerte por accidente… por poco, por poco. Dame un respiro. Sólo se nos permite masacrar durante una hora al día.”

“… ¿Q-Qué… quieres decir?”

“¡Gyajaja!”

Ella rio a carcajadas.

Probablemente, sin ninguna razón.

Me sorprendió cada una de sus acciones.

La forma en que hablaba… era totalmente diferente. No solo su discurso, sino su ambiente, las emociones en sus ojos, su todo. ¿Quién es esta persona? Era como si, como si lo único que fuera igual fuera el recipiente… pero que el interior se hubiera volcado por completo.

Una alucinación.

¿Esto es real?

¿Quién es esta persona?

Su apariencia… no.

¿Es ella?

Era como una persona diferente.

A pesar de que parecía el mismo recipiente exacto.

Era como una persona diferente.

Esa sonrisa.

Esos ojos.

“… R-Rizumu-chan… ¿verdad?”

“Hmmm ¿Qué? ¿Rizumu? ¡Rizumu-chan! ¡Gyajaja! ¡Uf, qué lindo, qué divertido y agradable y poético y maravilloso error! ¡Nooooo vas a hacer que Rizumu-chan esté tan caliente y temblorosa y paralizada en lo profundo de su cuerpoooooo… ¡¡Si!!”

Y luego, una risa rugiente.

Como si fuera imparable, carcajadas.

“¡Gyajajajajajajaja!”

Ella estaba…

No.

Él estaba…

Él estaba acercándoseme, un paso a la vez.

Como si jugara con su presa, como si amenazara a su presa.

Como si se divirtiera, como si fuera feliz.

“Ahora no…” Y luego se presentó. “Soy Nishizono Shinji… ¡no! ¡Gyajajaja!”

“……”

“¡Soy un asesino profesional contratado por orden! ¡Con catorce cruces santas a mi lado, empiezo a ejecutar mi recado!” Dijo, como si él le rugiera al cielo. “En este momento, es hora de Niounomiya Izumu… Izumu el Devorador de Hombres.”

***

Cuando regresé al departamento, todas las luces habían sido apagadas, y mi habitación estaba vacía, Kasugai-san no se veía por ningún lado.

Esa persona era como un fantasma.

En su lugar había una carta.

Estaba eufórico porque finalmente me deshice de la persona que no pagó nada por la comida que estaba comiendo, pero luego leí: “Iré contigo al trabajo de medio tiempo de la profesora asistente Kigamine Yaku, así que saludos, aun no puedo robarte, pero eventualmente lo hare (es broma, ¿no soy linda?) Kasugai-chan@plata-y-oro-las-bolas-son-en-cualquier-caso-inigualables. Nota: En cuanto a El Viento del Norte y el Sol, ¿no crees que nunca usarías un abrigo para esconder tu piel del sol?” De modo que esta mujer había leído el contenido del sobre, aunque yo lo había escondido. Bueno, ella me había visto regresar con eso ese día, y dado su antiguo trabajo, pensé que eventualmente lo encontraría.

De todos modos, eso resolvió que la gente que llevaría conmigo.

Kasugai Kasuga, Yukariki Ichihime, y luego yo mismo.

Era un grupo multicolor.

Miré mi reloj y todavía podía contarse como medianoche. Pero sentí que estas cosas deberían comunicarse lo antes posible, así que saqué mi teléfono celular. De todos modos, la facultad universitaria casi nunca se adhiere a los ciclos diurnos y nocturnos. Y ella me había dicho que estaba bien si la llamara de noche. Supuse que estaría bien si le dijera a Hime-chan después del hecho, así que saqué la tarjeta de presentación de la profesora asistente Kigamine de mi billetera y marqué el número en la tarjeta.

“………”

Atendió el contestador automático.